Decía que no, pero su deseo la traicionó...(III)

Continuación de la historia, donde ella por fin se percató de que en mi perfil ponía que tenía pareja y como tras muchas objeciones, el deseo acabó pudiendo más y llevándola a admitir la zorrita que llevaba dentro...

Esa noche, ambos dormimos relajados después de los respectivos orgasmos que tuvimos en soledad mientras charlábamos. Bueno, yo dormí bastante relajado y contento, ella, quizás estuvo alterada y tuvo que volver a estimular su cuerpo... quien sabe...

De cualquier manera, yo debía madrugar para trabajar y ella también, así que nos fuimos a dormir y no volvimos a charlar hasta la siguiente noche.

2º día de chat

Cuando por fín estuve solo en casa por la noche, encendí el ordenador y me dispuse a ver las novedades que había en mis redes sociales ocultas... de las que nadie que me conociera sabía de mi presencia en ellas. Generalmente prefería abrir la aplicación en el ordenador si existía esa posibilidad, ya que me era más sencillo tener abiertas varias en varias pestañas diferentes y charlas con varias personas. Además, así podía estar viendo otros perfiles o haciendo otras cosas ya que, por lo general, la gente tardaba bastante en contestar y el ritmo de las conversaciones era desesperadamente lento...

En esas estaba yo, cuando ella apareció conectada por la app. Evité la tentación de saludarla. Quería ver si se había quedado deseando más y más como yo sospechaba...Entonces ella, pese a que seguramente no solía dar el primer paso, me saludó presa de su deseo:

P: Buenas noches!

S: Buenas noches diablilla!

P: Qué tal?

S: Bien, aquí esperando a que vinieras a por más...

P: Jajaja, y tú que sabías?

S: Mi intuición no me suele fallar cuando a deseo se refiere...

P: Jajaja, muy seguro estás tú...

S: Sí... es otra de mis virtudes, la seguridad en mis perversas artes... ;-)

P: Jajaja, a lo mejor yo soy inmune!

S: Seguramente... Por eso ayer te corriste dos veces (que yo sepa) gracias a mis traviesas palabras y hoy estás aquí de nuevo... :-P

P: Jajaja, cómo que que tú sepas?

S: Porque mi intuición me dice que aún así no podías dormir o te despertaste a media noche acalorada y tuviste que volver a dar vueltas a nuestra conversación... y a tu clítoris y tus pezones duros...jiji  -hoy no quería perder otra hora yendo poco a poco, quería que reconociera quien era y lo que deseaba más rápido

P: Jajaja, a ti te lo voy a decir...

S: Pues claro que a mi me lo vas a decir! A quién si no... si fui yo el que lo provocó...

S: O acaso no te gustó nuestra charla de ayer y no te hizo desear muchas cosas...?

P: Bueno, sí...

S: Sí qué? Que te hizo desear o que te volviste a masturbar...?

P: Ambas dos, jajaja

S: Jaja, lo sabía viciosilla...

P: No me llames eso!

S: Por qué no?

P: Porque yo no soy ninguna viciosa!

S: Lo dices como si fuera algo malo... Yo no lo digo como un insulto o una ofensa. Al revés, para mi es algo bueno y deseable. Querer gozar y disfrutar es humano y no veo que tenga nada de malo. Es más, lo malo para mí sería que alguien no pudiera desear y excitarse...

P: Ya, bueno, visto así...

S: Pues así es como yo lo veo

P: Y qué te gusta aparte del sexo?

S: jaja, crees que sólo me interesa el sexo en la vida?

P: No digo eso, pero con tu nick, sólo buscas eso, no?

S: Supongo que, como todo el mundo, yo busco aquello que me gusta y deseo. Eso puede ir desde unas risas con los amigos a viajar y conocer mundo o leer un buen libro. No necesariamente todo lo que me gusta y disfruto en la vida está relacionado con el sexo. Mi otro gran vicio es aprender de cualquier cosa.

P: Pero no buscas nada de eso por aquí, no?

S: Bueno, cada cosa tiene su sitio, evidentemente. No necesito a nadie para leer un libro y tengo buenos y suficientes amigos como para andar buscando más en una app de contactos... jaja

P: Jaja, ya bueno, pero que se yo, alguien con quien hacer esos viajes, cariño, comprensión, alguien que te quiera... No se, el sexo sólo no es muy frío?

S: Supongo que todos buscamos aquello que no tenemos en tanta cantidad o calidad como nos gustaría

P: No te entiendo

S: Pues que uno no busca lo que ya tiene sino lo que no tiene, ¿no?

P: Me he perdido

S: Leiste bien mi perfil?

P: Sí, por qué? A qué te refieres? Espera que voy a ver

S: Ve, y mira a ver si ves alguna cosa que pueda justificar que no busque amor por aquí... jeje

--- Pasan dos minutos en los que la app me notifica que tengo una visita de ella a mi perfil. Empiezo a maldecirme por ser tan sincero, pero no me gusta llevar a nadie a engaños. Si no leyó que tengo pareja, cosa que cada vez me parece más claro, es su problema, pero lo pone claramente, joder. ¿Por qué nadie lo lee y luego muchas tías ponen en su perfil por favor lee el perfil? Por más que me encante aprender sobre ella, creo que nunca comprenderé la mente humana...

P: Pero tienes pareja???

S: Eso pone, no? Por qué iba a mentir en algo que seguramente no favorezca? jeje

P: Y qué haces aquí?

S: Pues ahora mismo, hablar contigo, no?

P: Ja ja ja, me parto. Ya sabes a qué me refiero -buff, ha cambiado totalmente su forma de expresarse.. Houston Houston, tenemos un problema... Lo perdemos, lo perdemos...

S: Bueno, que yo sepa no está prohibido entrar en esta aplicación si tienes pareja no? Q tengo pareja, no la peste...

P: Jolín, pero si ya tienes a quien te quiera por qué buscas sexo por aquí? Es que no te satisface?

S: Pufff, creo que es mucho más complicado que todo eso como para explicarlo

P: Pues explícamelo, para otras cosas se te da muy bien hablar

S: Se me da muy bien hablar siempre, otra cosa es que me esfuerce más por ello en lo que me interesa. Yo no llevo a nadie a engaños aquí, lo pone claramente que tengo pareja.

P: Pero la engañas a ella, que es peor!

S: Ya bueno, pero ese es mi problema. No le pido a nadie que lo acepte ni lo tolere ni que le parezca bien o mal. Si lo que pongo acerca de mis gustos y mis deseos le atrae y que tenga pareja no le supone un problema, genial. Si no, pues entiendo que no le apetezca volver a hablarme nunca más... -aquí me tiré un farol interesante, era una frase arriesgada que podía hacer que no volviera a hablarme, pero tenía que marcarle claramente quién ponía las condiciones...

P: Jo, ya... Pero es que ella no se merece que la engañes! Si no quieres estar con ella, por qué no la dejas? -por suerte, no salió mal. Podía oler desde la distancia la rabia que la daba que, ahora que estaba descubriendo algo que la encantaba, encontraba un problema que chocaba con su ética... Se podía salvar el set y ganar el partido...

S: Jaja, y tú qué sabes si se lo merece o no? A lo mejor es la mayor hija de puta del mundo y me ha hecho las mayores putadas que te puedas imaginar ella a mi...

P: Sí? Y por eso ahora te quieres vengar? No es mejor olvidarlo y seguir adelante?

S: Jeje, era coña. Es una persona maravillosa. Buena, bondadosa, cariñosa, amable, preocupada por los demás... Nunca me haría daño conscientemente

P: Y por qué tu a ella sí? Si es tan maravillosa como dices?

S: Ahí te equivocas. Yo no quiero hacerla daño a ella. Ni a nadie. Por eso saco mi lado oscuro por aquí pero intentando que ella jamás se llegue a enterar en la vida, para que no se le rompa el corazón y sufra por el hecho de que yo no pueda reprimir mi deseo...

P: Pero tú la quieres?

S: Aunque no lo creas, la quiero más que a nadie en este mundo, sólo por detrás de mí mismo. Por eso estoy aquí, lamentablemente, aunque no me sienta orgulloso de desear lo que deseo aún estando con ella, la realidad es que lo deseo... Y el deseo es más fuerte que la razón...

P: Eso no es verdad! No somos animales! Podemos decidir con la cabeza, no con los deseos.

S: Y donde están los deseos más que en la cabeza? No somos tan distintos de los animales en muchos aspectos, porque nosotros hemos evolucionado a partir de ellos. Y el tiempo que la humanidad lleva intentando poner cordura sobre sus deseos no es nada comparado con la cantidad de tiempo a lo largo de la evolución en la que, aquellos especímenes que se veían motivados por sus deseos, se reproducían mucho más que los que no. Y, por tanto, ese deseo, como muchas otros instintos, quedaron favorecidos, llegando el ADN que los promueve hasta nosotros.

P: No me creo lo que estás diciendo! No puedes ser tan frío!

S: Jaja, frío yo? Si siempre estoy tratando de aumentar la temperatura de las personas...

P: Ya sabes a qué me refiero. Las personas tenemos nuestra inteligencia para saber lo que está bien y lo que está mal y vencer nuestros deseos.

S: Eso es lo que nos gusta creer...

P: No! Es así! No hay que hacer lo que no te gustaría que te hicieran!

S: Eso no es necesariamente inteligencia sino moral. Una moral muy concreta. Y lo que yo quiero hacer es conocer tus gustos, tus deseos, tus fantasias... para poder comprender mejor como excitarte y hacerte gozar... Eso es lo que no debería gustarme que me hicieran? :-P

P: Pues yo tengo una moral que me impide hacer daño a nadie.

S: Y qué daño estás haciendo por charlar conmigo?

P: Yo ninguno, pero tú sí! Porque quieres ser infiel a tu chica...

S: Pero entonces tendrá que ser mi moral la que se preocupe de eso, no la tuya, no?

P: No me lies! Yo no me sentiría bien enrollándome con un chico con novia

S: Que yo sepa, no nos estamos enrollando...

--- Reconozco que, llegados a este punto, pensaba que me podía dejar de hablar de un momento a otro, por lo que estaba intentando que de algún modo, pese a lo que no le gustaba de lo que estábamos hablando y lo que implicaba, se riera de algún modo por lo que yo estaba vacilándola... El no, ya lo tenía. Poco que perder y mucho que ganar, así que había que jugar fuerte e intentar volver a sacar su deseo para que no pudiera pensar en los inconvenientes y se volviera a excitar, después de haberla dado un poco de tregua para asimilar la noticia, desahogarse y poner los peros que, en cierto modo, parecía estar poniendo más por convencionalismo social que por convicción...

P: Tú me quieres volver loca eh! Ambos sabemos hacia donde querías llegar con esto!

S: Por supuesto que te quiero volver loca. Ese ha sido mi objetivo desde que comenzamos a hablar la primera vez. Pero loca de deseo... de excitación.. de placer... -volviendo a tirar la caña un poco...

P: Pero no puede ser...

S: Somos dos adultos que disfrutan excitándose y haciendo disfrutar el uno al otro... No veo cuál es el impedimento...

P: Sí, que tienes novia!

S: Y tu un deseo interior deseando salir que no entiende de relaciones humanas más allá de las que quiere disfrutar...

P: No!!! La razón anula el deseo!

S: Jaja, ahí te equivocas... El deseo es un hijo de puta traicionero sin prisa... Un enemigo perfecto que está siempre ahí... Esperando su oportunidad... Horadando sin prisa pero sin pausa todas los muros de la razón hasta conseguir ser libre y aflorar a la superficie, para acabar recordándote que siempre había estado ahí y demostrándote quien gana a quien...

P: Jo, no, se puede luchas contra el deseo!

S: Claro que se puede luchar, pero es una batalla perdida... El deseo se puede intentar reprimir, pero nunca anular... Porque el deseo no se anula con la mente, el deseo está en la mente... Es una parte más básica de nuestro cerebro y, como el animal que ha probado la sangre, una vez que se desata, ya no hay quien lo pare...

P: Eso tú que no quieres reprimirlo! Yo decido lo que quiero independientemente de mi deseo!

S: Y por eso estás aquí charlando conmigo aún...

P: Pero porque quiero que reflexiones y veas que está mal lo que quieres hacer!

S: Yo no he negado que esté mal según la moral que pueda tener la mayoría de las personas en nuestra sociedad actual occidental, yo solo he dicho que conozco de cerca al deseo.. Que yo también he tratado de luchar contra el largo y tendido porque no quería sentirme mal o hacer algo que se supone que no debiera, pero que he acabado conociéndolo y sabiendo que es una batalla perdida...

P: Y según tu moral no está mal?

S: Yo he sido educado en esta sociedad y he aprendido esa misma moral. Evidentemente que se que a mi pareja le dolería infinitamente si se enterara y, como te he dicho, no quiero hacerla daño. Pero, a pesar de mi moral, el deseo acabará siendo más fuerte una vez que se ha despertado... Por eso, lo único que puedo intentar es que no se entere para no hacerla daño.

P: Yo creo que no es así, pero bueno. Tú sabrás con quién lo haces, conmigo no, desde luego. -uf, en que momento esto se ha puesto tan complicado? tenemos que ver si podemos salvar una bola de set aquí...

S: Créeme que he reflexionado mucho hacerca del tema

P: No se yo, no veo que hayas llegado a ninguna conclusión correcta

S: Lo correcto o incorrecto es, nuevamente, algo moral o social. Todas las personas tenemos deseos y sí, normalmente los reprimimos, porque no son excesivamente fuertes y creemos que nos compensa hacerlo así. O nos autoengañamos de ello. Lo que sea, pero ahí el deseo es mínimo y fácil de controlar. Sin embargo, cuando lleguemos a viejos y sintamos que estamos a punto de morir, de qué crees que nos arrepentiremos, de lo que realmente deseábamos y conseguimos disfrutar o de haber tenido esos deseos y la oportunidad de haberlos llevado a cabo y no habernos atrevido a ellos...

P: No sé... Yo creo que me sentiría muy mal de hacer lo que no debo

S: Permíteme que lo dude... Si nadie ha salido herido con nada de lo que hiciste y disfrutaste, yo creo que te reconcomerá más por dentro haber tenido la oportunidad de haberte dejado llevar por una vez en la vida... De no pensar y simplemente hacer... Actuar... Desear... Disfrutar de lo bueno que la vida te pone delante y que, en el fondo, sabes que deseas pese a que intentes hacer algo simplemente porque te lo enseñaron, aunque tu cuerpecito cada vez te diga más que le hagas caso al deseo... -Había esperanzas de remontar el punto al final, así que había que echar el resto...

P: Ya, pero yo me conozco y no podría, lo siento

S: Seguro que ayer tampoco creías que un extraño al que habías conocido por chat podría conocer tus gustos, tus deseos, tus fantasías y tus límites mejor que tu misma y conseguir excitarte, desde la distancia, hasta unos límites que jamás habías llegado a alcanzar y tener dos orgamos increibles con él... Y los que tuvieras después...

P: Ya, jo, pero ayer no sabía que tenías pareja...

S: Tu deseo está ahí y siguie siendo el mismo... Más si cabe, porque ayer empezó a ver la luz y salir por cada uno de los poros de tu piel... Y ambos sabemos que hoy lo deseas aún con más fuerza, porque has empezado a creer de lo que eres capaz y quieres saber hasta donde podrías llegar a gozar así en mis traviesas manos...

P: Pero tu novia...

S: Olvídate de mi novia. Ese es mi problema. Yo tendré que llevar esa carga. Tu no haces nada malo porque no le debes nada a nadie, solo a tí misma, a la que nunca le has dado lo que se merece, dejando salir tu verdadero yo... disfrutando al máximo sin pensar en el mañana ni en el que dirán... Entregándote al placer en mis traviesas manos... Es mi lado oscuro el que te atrae... Y ese estaba ayer igual que hoy, o acaso me equivoco diablilla...?

P: Si, me atrae, pero...

S: Pero nada! Simplemente déjate llevar... Deja que yo sea quien alimente todos esos deseos y quien decida cuál es la mejor manera de estimular tu mente... tu deseo.. tu placer... tu cuerpo...

P: jeje, ok...

--- Y premio al esfuerzo! Parece que salvamos el punto. Vendrán seguro más remordimientos en algún instante, por lo que no está ganado todo ni va a ser un camino de rosas, pero, por lo menos, conseguimos que la balanza vuelva a caer de nuestro lado y la excitación y la adrenalina vuelvan a controlar su mente pensando en gozar con su cuerpo... Ha costado pero ha merecido la pena: es una zorrita preciosa y mi intución me dice que un diamante en bruto que puede llegar a brillar excepcionalmente si se talla bien...

S: Ves como no era tan difícil... Ayer ya te demostré de lo que era capaz tu cuerpo y hasta donde podías llegar si te ponías a las órdenes de mis traviesas manos...

P: Ya... pero me cuesta... ten paciencia...

S: Y la estoy teniendo diablilla... Si no créeme que estaría siendo mucho menos comprensivo y mi lenguaje sería mucho más duro...

P: No me asustes...

S: No pretendo asustarte, ni mucho menos. Simplemente te doy fe de que, según vayamos conociéndonos y aceptando tus deseos, irás siendo capaz de disfrutar de cosas que, a lo mejor, ahora te parecerían excesivas...

P: No quiero nada excesivo. Ya te dije que yo soy muy normalita y mis experiencias, del montón...

S: Jamás he hecho nada a nadie que le resulte excesivo. Por eso necesito conocer antes bien tu mente, para no hacer nada que no puedas disfrutar y exceda tus límites.

P: Seguro?

S: Desde luego, puedes estar tranquila en ese aspecto. No necesitaré atarte para poder hacer todas las cosas traviesas que tu cuerpo de perrita viciosa realmente desea en el fondo... Aunque puede que, de todas maneras, lo haga para que disfrutes la experiencia de estar totalmente a mi merced también... jiji

P: Uff, atar...

S: ¿Qué, te da miedo?

P: No, que va... Bueno sí, no sé. Me resulta sugerente pero a la vez creo que me daría miedo no poder moverme o que me pondría nerviosa

S: Es posible. De todas formas, es algo que no necesariamente tiene que ser duro ni doloroso, sino todo lo contrario. Se puede atar con cosas suaves como una cinta de raso, una bufanda, un foulard... Y hacerlo de manera que tus manos estén suficientemente libres como para moverte y con una lazada para que, si realmente lo deseas, puedas soltarte tu misma... Aunque lo más interesante de todo es que, en ese caso, estarás atada y no te soltarás por tu propia voluntad... porque realmente te excita y lo deseas... porque te encanta estar a mi merced y que pueda deleitarme con cada cm de tu delicioso cuerpo sin que puedas resistirte...

P: mmm, suena bien...

S: Mejor sabrá... como ya viste ayer...

P: jeje, es que yo me lo imaginaba más en plan esposas o con unas bridas así que te hacen daño y te impiden moverte nada

S: Ya te dije que el señor Grey había hecho mucho daño... Por supuesto que se puede disfrutar muchísimo a esos niveles, pero para ello, tu tienes que estar en ese nivel y tener la confianza necesaria con la otra persona. Si no, se corre el riesgo de que te hagas daño en las muñecas al intentar moverte aunque te esté excitando la situación o te de angustia y entres en pánico. Acabaremos llegando a eso y cosas más fuertes si lo deseas, pero primero quiero que veas como puedes ir gozando de todo ello empezando por niveles más bajos... Así, cada vez desearás más y más, como buena perrita en celo que eres para mi...

P: Pufff, me encanta como hablas...

S: Estas dispuesta a hacerme caso y dejar que te guíe en el descubrimiento de tu deseo y tu placer....?

P: Creo que sí.

S: Bueno, con eso me vale de momento... Lo importante para conseguir algo es desearlo. Y tu lo deseas, cada vez más... Acabarás llegando a dessearlo hasta más no poder...

P: Ojalá, suena muy bien...

S: Pues claro que sí. Tu déjate llevar y acepta ser mi perrita sumisa y verás como tu amo se ocupará de hacerte gozar como nunca has gozado en tu vida...

P: Ya lo hice ayer...

S: Ah si? Deseas ser mi perrita sumisa entonces...?

P: No se si estaré a la altura, pero si quiero probar...

S: Seguro que sí, sólo acepta que lo deseas, dítelo a tí misma para que puedas decírmelo a mí....

P: Lo deseo

S: El qué?

P: Pues eso que dices

S: El qué digo? -ahora que hemos remontado y minado la moral del oponente, no debemos darle ni un minuto de respiro.. Tiene que verse perdido y claudicar...

P: Que me deje llevar...

S: Si, deseo que lo hagas... Por eso quiero que digas lo que deseas ser...

P: Tu sumisa...

S: Mi perrita sumisa...? -tensemos la cuerda un poquito más, sigamos atacando... no hacemos prisioneros

P: Tu perrita sumisa, sí...

S: Y como crees que una perrita sumisa lo pediría...?

P: Por favor

S: Efectivamente, por favor, perrita. Dilo todo bien ahora -corro el riesgo de que le resulte excesivo para ser la primera vez que lo asuma, pero estoy seguro de que está tan deseosa y excitada, que no va a huir aunque la pida rendirse a su amo

P: Por favor, déjame ser tu perrita sumisa

S: En que me convertiría eso a mí entones? -otro poquito más y ya lo tenemos...

P: ...

S: Vamos, déjate llevar... Se que estás empapadita ahora mismo... Nerviosa por lo que estás haciendo pero excitada a más no poder a la vez... Confía en mí para que pueda hacerte gozar al extremo... -una de cal y una de arena... Hay que reconocer que está venciendo sus límites mentales hoy, luchando contra su moral... hay que confiar en que mi intución tiene razón y será una buena puta sumisa deseosa de complacer a su amo, así que hay que darla un punto donde anclarse...

P: En mi amo?

S: Muy bien perrita mia! Efectivamente, en tu amo... Así que pídele las cosas por fin a tu amo como él lo desea para que pueda comenzar tu adiestramiento para gozar de tu placer sin límites ni tabúes...

P: Por favor amo, deseo ser su perrita sumisa

S: Mmmm, excelente perrita mía, porque yo estaba deseando convertirme en tu amo y poder llevarte a donde nunca habías imaginado que se podría llegar gozando de cuerpo...

Y aquí termina este capítulo, donde os he explicado como la deliciosa Pandora, una putita sumisa increible, pasó de querer dejarlo ahí y salir huyendo al descubrir que tenía pareja, a aceptar ser mi sumisa y comenzar su adiestramiento...

En el próximo capítulo, os contaré como fuimos avanzando en su dominación y transgredimos sus límites y aumentamos su nivel. Prometo que ya tendrá mucho más sexo y dominación más interesante, pero me apetecía escribir la historia completa para que se pudiera ver y entender su proceso de transformación.

Como siempre, espero que os guste y todas las sugerencias serán bienvenidas tanto por aquí como por mi correo.