Dear god
Lloro.
Dear God:
Este sentimiento me esta carcomiendo el alma en vida, no hago mas que pensarle todo el día, todo el tiempo y a cada momento, siento como se quiebra al saber imposible sus labios sobre los míos, siento como mi deshonesto corazón se hace pedazos al saber que solo recibiré si a caso una sonrisa de su boca, tal vez una o dos palabras agradables, pero no en la forma que yo anhelo, no en la forma en que este destrozado corazón quisiera. Es un sentimiento impuro, tu y yo lo sabemos, pero no pude, no puedo y no podré evitar que siga creciendo, por que no quiero, por que me es imposible, que como lo se?, por que siempre que decido sacarlo de mi pecho, solo basta con ver su rostro, esa hermosa cara, o al menos para mi, para recordarme por que siento lo que siento, y este sentir regresa con mas fuerza, con mas dolor, por lo que he decido no combatirlo o me hará mas daño. Dios solo te pido fuerzas para soportar el dolor que sentiré cuando este con la persona que elija y no sea yo, se que será doloroso por que incluso hora cuando le veo reír con alguien que no sea yo me duele y me enferma el solo saber que no soy la causa de su alegría y que puede estar sin mi perfectamente aunque yo ya no pueda vivir si no es al ver su persona, oír su voz o sentir su presencia, Dios, ni siquiera se por que siento esto, si nuca me dio entrada, como decimos nosotros los jóvenes, es mas grande que yo me lleva once años, pero siempre he pensado que la edad no importa en lo mas mínimo.
Has de pensar que mi vida es patética, ja, yo pienso que mi vida es patética, sufrir por un amor que no tiene sentido, por que? Simple, es imposible y eso es lo único que necesito saber para quebrarme, que nunca le tendré como yo quisiera. Alguien una vez dijo que los sentimientos que le profesaban alguien siempre alcanzaban a esa persona, ja, se que los míos nunca le alcanzaran de ninguna forma. Lloro, lloro al saber de mi impotencia al poder hacer nada por este dolor y también por saber que yo lo busque, y aunque duele no me arrepiento de haberle conocido. Gracias Dios por ponerle en mi camino, a quien mientras escribo estas palabras lo único que me queda es el amor que siento, el amor que le rezo y que nunca me será devuelto, por ese cuerpo que nunca acariciare, por esa boca que nunca probare, con ese cuerpo que nunca se convertirá en uno con el mió, duele, Dios como duele. Lloro, me calmo, sonrió, nadie muere de amor tal vez yo si, tal vez hoy no .
ALA