De vuelta a la facultad IV
Sorpresa tras sorpresa. Lésbico
Vuelvo a estar en clase, intentando concentrarme en conseguir este puesto de trabajo. No quiero ni plantearme ni por un momento que lo voy a conseguir follando en los lavabos. Mis conocimientos sobre la materia no tienen la culpa de que mi libido ande loca. El profesor no me es indiferente pero digamos que hoy vengo algo mas saciada.... ¿por qué será? Después de tantos años, la posibilidad de trabajar en una empresa tan cotizada es el mejor afrodisiaco natural.
Hoy me he vuelto a vestir demasiado corta, con un vestido blanco y ajustado pero sin ninguna pretensión, ya sería demasiada suerte. Nos hemos puesto por parejas y me ha tocado con Elena. Recuerdo que no eramos muy buenas amigas pero nos llevabamos cordialmente. Como ya he comentado anteriormente, en mi época de universidad intimé con pocas personas. Ella tampoco era muy extrovertida, ya se comentaba entonces que era lesbiana... Es realmente guapa, la verdad. Rubia, ojos azules, labios carnosos y pechos orgullosos ¿he dicho pechos? Diós, estoy fatal....Me centraré en la clase. Ella está bastante nerviosa, por cierto.... En el descanso de la clase intento entablar conversación con ella en la cafeteria. Rapidamente, nos ponemos al dia. Ambas casadas, ella con otra mujer y un niño pequeño, un puesto de trabajo modesto, poco a poco se va abriendo ¿Qué opinas del profesor? “Es un puto cerdo, ayer me hizo una proposición indecente para conseguir mas puntos en el trabajo” Realmente, desde mi calienturienta necesidad no lo había visto así pero es evidente que la actitud del profesor es claramente denunciable, un abuso de poder... . y si va pidiendo guerra a cada una de sus alumnas es asqueroso y admirable su aguante sexual …. ¡Céntrate! La pobre está conmocionada con la proposición indecente, escúchala... Sigue hablando del trauma y que no ha sido capaz de contarselo a su mujer, parece que su relación también ha caído en el desánimo, no es algo exclusivo de las parejas heterosexuales.... De repente, se echa a llorar y se abraza a mi. Al estar yo algo mas baja que ella, sus pechos quedan por debajo de mi barbilla. Le acaricio el pelo, largo y suave. Nunca he estado tan cerca de otros pechos femeninos y no puedo evitar mirar. Son suaves y redondeados ¿como será tocarlos? Me está invitando a llevarme a casa en su coche, le pilla de camino. De hecho, tenía pensado ir en bus ya que mi marido vuelve a estar succionado por el trabajo.....Así que perfecto, no sé por qué pero me excita la sola idea de ir en su coche cuando caigo en el problema de mi silla de ruedas, es un gran peso para poner en un maletero cualquiera.
Me aclara que no hay problema, hoy ha traido el coche adaptado de su padre para ir a recogerlo después, así que mi silla es bienvenida. A veces el universo tiene estas cosas.... Durante el trayecto hablamos de muchas cosas y reimos, se va relajando.... Al llegar a casa, la invito a subir y a una cerveza fria. Al pasarme al sofá me da un fuerte tirón en la espalda, demasiadas horas en la silla...Elena se ofrece a darme un masaje, parece que entiende del tema, me relaja poco a poco la espalda, sube a mis hombros y yo empiezo a gemir de placer, me empieza a deshacer nudos uno tras otro y no puedo evitar gemir. Ella me susurra al oido “como no dejes de gemir, me vas a poner cachonda”. Giro mi cara asombrada y nuestras bocas se encuentran, demasiado cerca para no buscar un beso, un beso nuevo, diferente para mí, un beso suave y largo. Un beso que me abre mil posiblidades nuevas que no quiero perder. Deseo tocar sus pechos pero temo apresurarme. Mis pezones ya están durísimos esperando sus caricias. Sin dejar de besarme, se pone delante mío y me mira fijamente valorando si quiero seguir adelante. Yo le acaricio el cuello como señal de aprobación. No me atrevo a ir mas allá pero ella coloca mi mano sobre su pecho, despertando una fantasia enterrada hace años. Su pecho es tan suave y tan duro... su top desaparece y por fin puedoo verlos con claridad delante de mí, redondos y suaves, adornados con dos pezones oscuros y potentes. Tengo que tocarlos, acarriciarlos, besarlos.... Debo tener cara de idiota por que ella misma me pone la mano en su pecho mientras me baja el vestido hasta la cintura y me quita el sujetador. Sus caricias en mis pechos despiertan las mías. Intento imitarla, voy perdida en este terreno. Sus pechos son suaves, muy suaves y los pezones están muy duros. Quiero acercar mi boca a ellos aunque dudo como darle placer.
Elena espera divertida ante mi estupor....Acerco mi boca a sus pezones y los chupo, mi lengua los rodea y cubre todo su seno con mi lengua hambrienta. Sus gemidos me indican que voy bien, solo he de recordar lo que a mi me gusta. Muerdo levemente sus pezones. Estoy super excitada y sus dedos lo comprueban rápidamente invadiendo mi monte de Venus, buscando mi clitoris y se centra en el. Exploto de placer casi al instante. Sabe muy bien el terreno que toca. Yo sigo dedicada a sus pechos, es agradable apretarlos y besarlos..... Pero he de parar, su cabeza va bajando lentamente hacia mi coño húmedo. Su lengua me proporciona un placer inmediato, tan certera al envolver mi clitoris que me hace explotar en un nuevo orgasmo. Ella acoge mis fluidos con su lengua. Esto me hace pensar en su coño, si mi lengua se habituará a ese terreno desconocido para ella. Su móvil suena, es su padre que se impacienta. Se viste rápidamente, me besa fugazmente y me da las gracias por levantarle el ánimo dejándome sola. Ahí me quedo yo, satisfecha, humeda y feliz, sin creerme todo lo que acaba de pasar.