De visita en Irlanda II
El deseo sexual de Alejandro aumentó hasta el punto de desear ahora a su madre y a su tía ¿Que sucederá esta noche?
Esa mañana se levantó sumamente cansada, ¿Ese muchacho tenía tanta energía así? Acarició sus senos viéndolos algo marcados por los dientes, -Dios mío este niño sí que es tremendo- Se acomodó su dormilona para bajar y conseguirlo sentado en el sofá ¿Qué hora eran acaso? Miró su celular 9:35 am, durmió bastante se acercó a él para alborotarle el cabello.
-¿Tu madre llegó Alejandro?- Caminó hacia la cocina para montar hacer café.
-Sí, está en el cuarto, durmió con el hombre. Te dije que se lo iba a coger tía- La miró con lascivia viéndola en esa pequeña dormilona.
-Ay Dios, bueno no la culpo somos mujeres grandes ya, sin marido y con nuestros hijos grandes. También merecemos sentirnos bien de vez en cuando- Le guiñó el ojo y se dispuso a montar el desayuno.
-¿Si verdad?- Caminó hasta ella para acorralarla en un rincón y acariciar sus muslos desnudos y besar su cuello –Tía te deseo como nadie-
-No amor, deje la necedad que su madre puede venir- Lo detuvo pero este insistió en besar su cuello y desviar su mano hasta su coño, sonrió con lujuria al sentir que no tenía bragas –Tía ¿Vino servida de una vez?- La acarició profundamente allí sintiéndola como se iba humedeciendo.
-¡Basta Alejandro!- Lo empujó y este se fue lamiendo los dedos y riéndose.
-Yo quería mi desayuno, si eres egoísta- Se sentó en el mueble para tomar el celular.
-Niño necio, nada más tiene que pasar- Hizo los huevos, sirvió las judías con chorizo, buscó las rebanadas de pan para tostarla y luego servir los platos –Cariño ve a buscar a tu madre que desayune al menos-
Alejandro asintió y subió a buscar a su mamá, bajaron los dos y la morena se acercó para abrazar a su casi hermana. Esta última besó su frente y le dio varias nalgadas, Alejandro sonrió imaginándoselas las dos besándose mientras embiste a una, que pensamientos tan lascivos le había despertado esa mujer de cabellera roja. Ansiaba estar entre las piernas de su tía, la veía hablando con su mamá, lo iba a lograr sin duda alguna. Porque se llamaba Alejandro, se las iba a coger ambas esta noche. Después de desayunar las mujeres subieron porque Carola ansiaba contarle todo a su mejor amiga. Se ducharon y tomando unos bocadillos se encerraron a conversar, Ale por su parte quedó abajo viendo el celular.
-¡Mujer cuéntamelo todo!- Evet se sentó cruzándose de piernas.
-Ay mujer ese hombre coge como nadie, me lo hizo hasta por detrás- Carola estalló en carcajadas –Me invitó a su casa y allí la tumbamos-
-Ay amor que rico, ¿Hace cuánto no te daban tan rico?-
-Mi roja perdí la cuenta, ya me hacía falta estar con un hombre ¿Tú no has tenido nada de acción?-
-Sí, anoche amor. Sabes que soy muy sincera contigo, Alejandro y yo lo hicimos anoche- Carola abrió los ojos como platos
-¿Qué? ¿Enserio?- Se sentó muy cerca, Evet estaba esperando que se molestara pero pasó todo lo contrario -¿Cómo coge mi hijo?-
-¿No estás molesta?- Carola negó con la cabeza riendo.
-Para nada, me alegra que por fin tuviste acción y mi hijo fuera el artífice- Le apretó las tetas con fuerza –cuéntame mejor cómo pasó todo-
-Bueno fui a decirle que había cereal en la mesa de la cocina y se estaba masturbando, me fui pero siguió y allí pasó todo-
-Uy Alejandro tiene mucho vigor y fuerza, ¿Te dejó adolorida?- Evet asintió.
-Mucho ¿Cómo sabes eso mujer? ¿Has estado con tu hijo?-
-Es un secreto, pero lo he visto coger con las novias- Le guiñó el ojo y ambas se rieron con fuerza.
-Es un niño bien dotado cuando tenga más edad será un marido bien complaciente-
-Sí, retomando el tema mujer. El hombre que te cuento me invitó a salir de nuevo el lunes y acepté. Estas vacaciones serán de mucho coger-
-Ay no, yo no mujer. Con la que tuve tengo suficiente- Acarició sus mejillas –Ya no estoy para esos trotes-
-No, aguantas aún más. ¿Qué te parece un trío con el hombre?-
-Para nada amor, ese es tu cita y no quiero inmiscuirse en esos asuntos-
-Por favor mujer-
-Dije que no Carola, esa es tu vida no la mía- Se levantó de la cama para salir pero esta la detuvo –Quítate del medio, estoy molesta-
-Ya amor, lo que menos quiero es que estés molesta ¿Y si te dijera que lo hiciéramos con Alejandro?- Evet abrió la boca viendo a su amiga ¿Esa era Carola?
-Es tu hijo amor ¿Cómo vas a decir semejante cosa?-
-Porque siempre he fantaseado con ese momento y sé que tu puedes ayudarme-
-Pero amor, eso sería incesto- La tomó de los hombros –Cariño, eso está mal. Es como que yo deseara a mis gemelos-
-Yo como la madre de ellos me los hubiese cogido ya-
-Madre mía Carola siempre dije que eras caliente pero no tanto-
-¿Qué dices amor?-
-Vale, hagámoslo esta noche-
Ambas sonrieron y se dispusieron a bajar para no encontrar a Alejandro, lo buscaron por todos lados hasta que el mismo marcó y dijo que salió a correr un rato por vecindario, que no estaba lejos. Almorzaron y se dispusieron a salir un rato a caminar, en el camino recogieron al joven y pasaron la tarde en un parque natural, pasearon por las calles y Evet los invitó a tomar un helado. En casa se ducharon cada quien para sentarse a cenar, hablaron bastante hasta que se hicieron las 10:30 pm. Evet subió con su amiga hasta la alcoba, Alejandro las vio extrañas ¿Planeaban algo acaso? Debía estar soñando despierto, eran amigas y se contaban todo, siempre pasaba eso.
-Estoy nerviosa Carola ¿Cómo le vamos a decir?- Se acomodó la dormilona –Además me mandaste a poner un lingerie abusadora-
-Claro, tenemos que seducirlo para que pueda aceptar- Le quitó la dormilona para apreciar ese cuerpazo adornado de encajes y ligueros.
-¡Ay! Me siento como una adolescente a punto de hacer una locura-
-Relájate, esto será muy placentero para ti y para los tres- La nalgueó con fuerza para comenzar a besar su cuello, Evet quitó su bata igualmente y comenzaron acariciarse suavemente, esas 4 tetas chocaban deliciosamente mientras las lenguas se encontraban, Carola era dominante y por consiguiente la tiró contra la cama para montarse sobre ella y abrir sus piernas –Alejandro tenía razón cuando dijo que la tía estaba bien buena- Le cacheteó el coño varias veces mientras que Evet besaba su cuello y acariciaba sus tetas. Carola metió dos dedos en ese coño ya húmedo por los golpes –Mira no más que rico te mojas amiga- La pajeó con fuerza y Evet gimió gustosa y fuerte. La roja bajó sus manos hasta el coño de Carola para estimularla igualmente, se besaban con lascivia y se pajeaban fuertemente, las tetas se rozaban en un delicioso espectáculo.
Alejandro comenzó a oír ruidos extraños, no le prestó atención y siguió hablando por mensaje, algo no se dejaba quieto ¿Acaso estaban cogiéndose su mamá y su tía? Imposible, eso era lo que pensaba su sucia mente, alomejor estaban riendo y jugando. Preso de la curiosidad subió por las escaleras, la puerta estaba abierta.
-¿Qué están haciendo…?- Quedó pasmado ante la escena las mujeres giraron al verlo. Carola estaba encima de su mejor amiga con los dedos metido en el coño de esta, sonrieron y siguieron besándose y metiéndose los dedos. Alejandro tragó grueso sintiendo como la polla se le levantaba de golpe -¿Me van a ignorar así?- Las mujeres siguieron sin responderle, su madre hizo girar a Evet para dejarla en cuatro y nalguearla repetidas veces, le abrió las piernas y Alejandro disfrutó del espectáculo del coño de su tía chorreando fluidos. Esta gemía con fuerza y lo miraba ansiosa.
-Hijo ¿Por qué no te callas y te unes a la fiesta?- Su madre lo fulminó sin dejar de pajear a una Evet excitada –Rojiza ¿Por qué no lo llamas también?-
-Amor vente, únete a la fiesta- La pelirroja se separó de la morena para caminar hasta su sobrino, lo jaló a ella para comenzarlo a besar. Alejandro correspondió con lujuria, mando a volar su sudadera junto al pantalón deportivo. Bajó y besó las dulces tetas de su tía para quedar pasmado cuando Evet lo hizo sentar en la cama y su madre junto a esta se colocaron de cada lado sobre el para besarlo, alternándose su boca. Carajo, estaba en el paraíso con esos dos pares de tetas sobre su pecho desnudo, la boca de su madre lo besaba con ansias y su polla era manoseada por su tía que ya le había quitado el bóxer.
-Las voy a reventar a las dos a punta de pollazos- Ambas sonrieron, y suspiró cuando Evet comenzó a pajearlo rápidamente. Ante esto su madre le hundió la cara en sus tetas y en respuesta Alejandro chupaba esos pezones con fuerza, los escupía y los lameteaba como un bebé hambriento. Los senos que un día lo amamantaron ahora eran objeto de su deseo, sentía palpitar su polla en las manos de su tía pero luego ambas mujeres se levantaron para arrodillarse.
-Ven Ale, te vamos a comer esa polla tan rica que tienes- Su tía beso con lascivia a su madre para luego unir sus tetas y nalguear a la morena.
-Par de putas que deliciosas se ven- Se pasó en frente de las dos con la polla bien erecta, como iba a disfrutar de esto, su madre bajó hasta sus bolas para meterlas a su boca, ante esto Evet engulló su verga para comenzarla a mamar suavemente, arqueó su cabeza ante la sensación de dos bocas en su polla, Evet la sacó de su boca y entre las dos la lamían rápidamente, se besaban con lujuria y volvían a lamer esa polla. Carola la escupía reiteradas veces hasta dejarla escurriendo saliva, Evet la regó con su lengua y la metió hasta solo dejar las bolas afuera, comenzó a darle una mamada fuerte y profunda, Carola succionaba sus huevos y metía los dedos en el coño de Evet que mamaba esa polla muy animada. La sacó y tomó a Carola sonriendo con Malicia, le hizo una coleta y empujo esa boca contra la polla de su sobrino. Alejandro gruñía ante semejante mamada que recibía, su tía empujaba sin parar la cabeza de su madre contra su polla haciéndole una garganta profunda, la saliva escurría a borbotones de la boca de Carola que tenía constantes arcadas por semejante trato, la soltó y esta respiraba acelerada, besó con lujuria a Evet. Ambas apoyaron las manos en el suelo y abrieron su boca, ante esto Alejandro comenzó a cogerle la boca con fuerza a su tía mientras que su madre acariciaba sus tetas gustosa de la escena, dejó la boca de su tía para ahora atacar a su madre, la tomó del cabello metiendo toda su verga hasta el fondo, una y otra vez con fuertes estocadas sintiendo como la lengua de la mujer le envolvía la punta de la verga haciendo que sintiera diversos corrientazos.
-Laman su paleta par de perras- Meneó su polla de un lado a otro para tomar a su tía y pasarle la verga por toda la cara –Toma tú también mami- Hizo lo mismo con su progenitora para luego sonreírles –Dios, ustedes son unas diosas- Evet volvió a meter esa verga a su boca, la deseaba con sumo deseo, era una verga dura, venosa y joven. La mamaba como una verdadera profesional, la sacaba y la engullía toda, apenas huevos quedaban afuera.
-Que rico lo mama la tía ¿verdad amor?- Alejandro asintió mientras empujaba la boca de la pelirroja contra su polla.
-Ven tu también mami, no te vas a escapar. Quien te viera mamando polla puta- Tomó a su madre de la cabeza y metió su polla ahogándola unos segundos –Venga mámala- Su madre abrió su boca gustosa y comenzó a succionarla animada. Evet se posó detrás de ella para nalguearla, se levantó luego y se acercó a su sobrino. Ale la jaló hacia el para besarla con deseo, Evet correspondía y con fuerza empujaba la cabeza de su amiga contra la polla del joven. Bajó sus labios hasta llegar a ese par de tetas jugosas, las chupó ansioso y las mordisqueaba. Gruñía de placer porque su madre se devoraba su verga con tanta pasión, escupió una teta y la mordió para hacer lo mismo en la otra. Su madre se levantó y tomó a su tía para tirarla a la cama, se lamió los dedos y se posó sobre ella. Se besaron con lujuria y se manoseaban, Alejandro contemplaba semejante espectáculo mientras se pajeaba con fuerza.
-Venga y cómase estos coños hijo, sea buen niño- Su madre meneaba su culo encima de Evet, ambos coños estaba húmedos y escurriendo babas, se lamió los dedos ansioso y de golpe enterró dos dedos en el de su madre y se arrodilló para alcanzar el coño de su tía lamiéndolo y escupiéndolo, dedeaba duro a Carola mientras engullía y lamia el coño de su tía con ansias, pasaba de arriba abajo esa lengua por la raja y se detenía ante el clítoris para chupetearlo, cambió y ahora pajeaba a su tía y comenzó a comerse el culo de su madre. Lamía su ano para descender hasta esa raja jugosa y escupirla, ambas mujeres gemían ansiosas, Carola estaba sobre Evet, chupaba sus tetas con ansias y se besaban con lujuria chupándose las lenguas. Alejandro alternaba los coños y los engullía con deseo, chupaba por segundos el coño de su madre y bajaba hasta el de su tía, se sentía en el paraíso, que ansias de cogerse esos dos culos y esos coños que destilaban agua por él y para él.
-Par de putas, que ricura de mujeres ¿Quién es su amo sucias?- Las dedeaba al mismo tiempo haciéndolas delirar.
-Mi hijo es mi amo, soy su puta y su zorra- Alejandro la nalgueó con furia dejándole el culo marcado y continuó dedeandola.
-Mi sobrino es mi amo, somos tus putas deseosas amor- Evet movía su cintura con ansias en la mano de su sobrino.
Alejandro engullía esos coños lujurioso, los lamía y saboreaba con rapidez haciendo que las mujeres deliraran. Subió luego para azotar el culo de su madre con su polla, bajó hasta el coño y la metió de golpe embistiéndola con furia. Carola gemía como una puta en celo, Evet se dedicó a chupar las tetas de su amiga con ansias, besaba su cuello y lo lamía para que sintiera aún más placer, la abrazaba y le sonreía. Carola por su parte gemía a todo pulmón por las salvajes embestidas de su hijo, ay que ricura de joven tenía en casa ¿Cómo es que ahora viene a probarlo? Ese coño destilaba fluidos y esa polla entraba una y otra vez llenándola y abriéndola de una manera salvaje, llegaba a lo más hondo de su interior. La giró para que su espalda quedara sobre las tetas de su tía, lamió sus labios al ver un coño debajo de otro, dos manjares que su polla degustaría, uno moreno y otro pelirrojo. La volvió a meter en su madre y bajando su dedo masturbaba a su tía, ambasas gritaban de placer y Evet masajeaba las duras tetas de su amiga, Alejandro por su parte embestía a Carola con mucha furia, la tomo del cuello para impulsarse mejor y dejarle la polla dentro por unos segundos.
-Te toca tía- La sacó de su madre para embestir a su tía ahora, esta se arqueó y su amiga se bajó de su regazo para posarse a su lado y chupar esas tetas, las masajeaba y bajaba una mano para estimularla en el clítoris-
-Vamos amor, dale bien duro a la tía Evet- Escupió ambas tetas de la pelirroja para lamerlas con lascivia, se las cacheteaba y esta gemía presa de semejante placer que le producía la cogida que su sobrino le estaba dando ¿Cómo llegaron a esto? No tenía la respuesta pero carajo, lo estaba disfrutando como nadie. Manoseaba a su amiga y se besaban con lujuria. Alejandro salió de su tía para acostarse en la cama.
-Vengase tía póngame ese coño en la cara, mami móntame rico- Las mujeres sonrieron y Evet le dio la espalda para dejarse caer sobre su boca, Carola por su parte se empaló de golpe con esa polla dura y comenzó a saltar, la pelirroja la acariciaba y le daba reiteradas nalgadas impulsándola a que se moviera mientras meneaba sus caderas en la boca de Alejandro, este movía su lengua de una manera muy experta sobre ese coño jugos, de arriba abajo hasta llegar a ese culo que palpitaba de excitación y ganas, le metió un dedo moviéndolo fuerte y devoraba ese precioso ano estrecho –Tía que culo tan apretado tienes- Bajo hasta su coño nuevamente para meterlo en su boca y chuparlo con fuerza, gruñía fuerte y meneaba su cabeza de un lado a otro. Evet gritaba apoyada en su pecho mientras que Carola saltaba sobre esa verga, meneaba sus caderas en círculos suaves y aumentaba de golpe la intensidad, se movía hacia delante y atrás haciendo que Alejandro gimiera y soltara el coño de su tía, Evet la besaba con pasión y le masajeaba las tetas.
La escena parecía una película porno famosa, ambas mujeres gozaban con el joven que no temía demostrar su valía en la cama, nalgueó reiteradas veces a su tía para luego empujarla, Carola cambió con ella y esta vez Evet se sentó sobre esa polla gimiendo fuerte, era osada cuando estaba ganosa y sin pensarlo apoyó sus pies bien en la cama comenzando a saltar muy, entraba y salía a una velocidad alta y le daba fuerte sentones. Alejandro mordió su labio con fuerza al sentir semejante coño estrecho y húmedo, su visión se vio cubierta por el coño de su madre que ahora se frotaba con su boca, la tomó de culo impulsándola hacia él para comenzar a degustar ese manjar, Evet lo montaba como una potra salvaje, se apoyaba en su pecho y meneaba ese culo como una puta experta, se meneaba con fuerza en círculos haciendo que vibrara y girara en su interior, ambas mujeres se besaban y se apretujaban las tetas para luego Carola bajara hasta chupar los pezones de su mejor amiga para otorgarle más placer.
-Uff como disfruto esto mi amor, síguete comiendo ese coño sucio de mami- Meneaba su culo en la boca de su pequeño haciendo que su concha girara por toda la cara de Alejandro que lo lamía gustoso. Evet seguía meneándose sintiendo como esa verga palpitaba, que polla más sabrosa tenía su sobrino,
-Menuda verga se gasta el sobrino- subía y bajaba de manera lenta para que se calmara y aún no se corriera, Alejandro gemía y movía sus caderas queriendo enterrarse más hondo en el interior de Evet.
-Ven pelirroja- Carola se acostó al lado de Alejandro y Evet se subió sobre ella abriendo bien sus piernas en 4, la morena abrió igualmente sus piernas y Alejandro rápidamente se posicionó detrás, sonrío y de golpe se enterró en el culo de su mamá.
-Por Dios, el culo no amor- Carola gimió y gritó al sentir como su bebe se movía sin esperar nada, le penetraba ese culo sin piedad alguna, entraba y salía dejándoselo muy abierto, Evet le estimulaba la concha de arriba abajo y le metía dos dedos rápidamente. Al ver esto Alejandro le metió dos dedos a su tía por el coño para estimularla, los tres gemían al unísono, disfrutándose y sintiéndose.
-Como disfrutan par de putas, quien las viera tan decentes y como comen polla con esos hoyos- Escupió el culo de su tía para meterle los dedos y taladrarla sin dejar de empujar sus caderas contra el culo de su madre.
-Somos tus putas bebe, cógenos como te plazca con esa polla tan rica- Su madre abrazó a su tía besándola de una manera sucia, escupió sus tetas y las lamío gimoteando sobre estas por las salvajes embestidas de Alejandro.
-Somos putas, somos putas. Que placer bebe, métemelo a mí también- Evet rogó y el joven ante esto sacó la verga de su madre para hundirla sin piedad en la cavidad anal de la pelirroja, gritó al sentir como la abría y se comenzaba a mover sin control.
-Eso, gózala tía. Como te gustan las pollas jóvenes, sucia- La taladraba una y otra vez, solo quedaba fuera sus bolas que chocaban contra su coño que ante semejante trato destilaba fluidos sin control. Su madre masturbaba a Evet con fuerza y Alejandro bajó su mano hasta la concha de esta para meterle 3 dedos y fulminarla –Tu no te quedas atrás mami, quien te viera gozando la polla de tu hijo menor, sucia- movió la mano para rozar todas las paredes de su coño y pajearla con desmedido gusto sin dejar de enterrarse en el gustoso culo de su tía.
-Eso mi amor… Cógenos sin piedad, que rica tienes esa verga bebe- Le lanzó un beso a su hijo gimiendo muy ganosa, Evet la miraba gimiendo y esta sonreía. Al fín saco ese lado erótico de su mejor amiga, que hermosa se veía con los cabellos rojizos regados y disfrutando como una puta.
-Si si, relléname el culo de verga amor- Evet ponía sus ojos en blanco sintiendo como su culo se expandía en cada embestida de la polla de Alejandro, se empujaba ya presa del placer contra su cuerpo y el sonido llenaba todo el lugar.
Carola sin aguantarlo más se corrió sobre la mano de Alejandro y este siguió taladrándola, gritaba eufórica ante semejante trato, Alejandro la saco del culo de su tía y se la enterró a su madre para embestirla con furia produciéndole un segundo orgasmo que la hizo poner los ojos en blanco. La retiró y esta vez fue a parar al coño de su tía para impulsarse agarrado del culo de esta y metérsela a fondo, Evet gritó con fuerza al sentir como Carola le metía los dedos en el culo y Ale la cogía muy rápido, gimió muy acelerada y en un grito se corrió sintiendo como sus paredes se estremecían porque la seguía cogiendo.
-Vamos, tómala tía- Gruñó y en un grito gutural se corrió en el coño de su tía, densos chorros de leche llenaron el interior de su concha. Ale la sacó suavemente para dejar caer varios hijos sobre el coño de su madre, que rica escena. La leche salía del interior de Evet y escurría por toda la concha de su progenitora, dio la vuelta y puso su verga en cara de las dos, estas comenzaron a lamerlo, saboreando esa rica leche para luego besarse y pasarse lo que quedaba entre las lenguas y al final tragarlo. Se acostaron los 3 con Alejandro al medio, besaba las tetas de las mujeres, estas le daban mimos y se miraban algo cansadas.
-Vaya, esto tiene que volverse a repetir mami, tía-
-¿No te cansas niño? Me duele hasta el alma- Evet le jaloneó las mejillas.
-Aún queda polla para rato ¿Verdad bebé?- Alejandro asintió a su madre sonriendo.
-Por ahora sí quiero dormir, cogérmelas sí que me cansó-
-Somos maduras amor, no somos jovencitas, tienes que trabajar el doble- Evet estalló en risas mirando a su amiga.
-Tu tía tiene razón tienes que mejorar para que en el próximo encuentro quedemos hasta con la cara llena de leche-
-Así será cucha, así será- Besó los pares de tetas para luego acostarse, estaba cansado –Por cierto tía, ¿recuerdas que te dije que me había cogido alguien cercano a ti- Evet asintió –Esta doña de aquí la he follado como no tienes una idea ¿Verdad mom?-
-Si mi amor, ahora agregamos a la tía al repertorio, amor en familia- Evet los miraba impactada.
-Wow, esto si que es nuevo para mí, haré el intento de procesarlo-
-Tranquila tía, es cuestión de acostumbrarse, además, ustedes dos son mejores que cualquier jovencita sin duda alguna-
Se recostaron sobre el colchón y Alejandro fue el primero en caer, Evet y Carola conversaron un rato hasta que el sueño las venció, estar con un joven no era fácil pero sin duda alguna esta eran las mejores vacaciones que estaban teniendo como familia…