De visita

Vamos de visita familiar a la casa de mi padre en la playa.

De visita

Hacía tiempo que no veía a mi padre, como buen viudo jubilado vive en una población de costa con un entorno más acorde a su edad.

El nos había invitado muchas veces a su piso pero por aquello de la libertad hacíamos lo imposible para no hacer noche nunca en su casa.

En esta ocasión yo tenía que ir por trabajo a su misma población, tendría que estar 3 días trabajando un rato por la mañana pero el resto del día era libre, así que convencí a E para que juntara unos días libres y pudiera acompañarme, al fin y al cabo ya hacía calorcito y podríamos pasar unos días en la playa.

E es una treintañera preciosa, sus grandes tetas son lo que más destaca pero tiene un cuerpo que realmente no tiene desperdicio.

Llevamos ya muchos años juntos con lo que nos conocemos perfectamente en la cama, días antes, durante un polvo empezamos a jugar con que tenía que practicar en no gemir como de costumbre porque mi padre se enteraría.

Ella es gritona y yo me esmeraba en embestirla como un burro para intentar sacarla el orgasmo, ella por el contrario hacía lo necesario para no soltar prenda.

El juego es genial, inicialmente ella aguantaba y contenía el torrente pero cuando se corría realmente soltaba un berrido súper morboso.

Llegó el día y fuimos a ver a mi padre, el hombre se esmeraba en ser un buen anfitrión pero se le notaba que estaba algo oxidado.

Nos dejó el cuarto de invitados, este se notaba que no se usaba nunca pero tenía una cosa genial, una ventana que daba a la terraza y desde la que se veía el mar.

Dejamos nuestros trastos y nos dispusimos a cenar con el, tras cenar las copitas de rigor para celebrar que al fin le visitábamos y con las copitas llegó la charla para ponernos al día.

Hicimos el plan de los días que íbamos  a estar, por la mañana yo iría a trabajar y E. iría con el a la playa o a hacer el día a día normal. Comeríamos juntos, siesta y luego a hacer lo que nos apeteciera.

Decidí ir al cama ya que al día siguiente tenía que trabajar y E se quedó con el charlando.

Al rato la noté llegar a la cama y volví a quedarme dormido.

A la mañana siguiente, me levanté pronto, me duché y a currar.

Llegúe como a las 2 de la tarde y al llegar vi a E cocinando, estaba preciosa con un bikini rosa que resaltaba sus pechos una barbaridad.

Al entrar estaba contentísima, tanto que en vez de un pico me dio un morreo.

-Guau!! Que contenta te veo, que tal el día?

-Genial, hemos estado en la playa, luego hemos ido al mercado y ahora cocinandote.

Te ha dado mucha guerra?  le dije a mi padre

-que de toda la que quiera, yo estoy encantado, al decirlo se miraron y sonrieron.

Comimos charlando de todo un poco, la comida con vino y luego la copita de rigor hizo que se nos fuera calentando la boca y salió el tema de siempre cuando estas calentito con el alcohol.

-Bueno y como llevas lo de las mujeres por aquí? Tiene alguna a la vista?

-Bah!!, no te creas, las mujeres que hay aquí no me gustan, son tan viejas como yo…. Jajjajajaj (nos reíamos los tres).

-Y como lo haces? Preguntó E.

-Criticarme si queréis pero lo que hago es que como una vez al mes llamo a un sitio y me viene a casa una chica

-Putas!!?? Exclamé yo

-Si, putas, que pasa….

Volvimos a reír todos parte por la situación y parte por el alcohol.

-Tenéis que entenderme, es lo mejor a mi edad, no te arrimas a las viejas pero sigues dándote tus gustazos, además terminas y listo. Además, las de mi edad no me aguantan el ritmo. … todos reíamos.

-Vale picha brava, anda nos vamos a la siesta y luego vemos que hacemos.

Nos fuimos al cuarto y cerré la puerta, sin poder esperar me acerqué a E por detrás y la empecé a dejar las tetas al aire mientras la besaba el cuello.

-Has visto mi padre?

-jajjaj, si, así que lo de follar como un bestia lo has heredado de el, no?

-y bien que te gusta, verdad?

-vas a follarme ahora?

-tu que crees?

-creo que no sabes lo que estás haciendo, dijo mirándome desafiante

-aguantarás sin gritar? La pregunté

-calla y follame.

E. me empujó sobre la cama y se tiró sobre mi a mamarme la polla que ya estaba bastante a tono. Una vez húmeda trepó hasta mi cuello y mientras se montaba sobre mi polla me susurraba al oído.

-sabes una cosa?

-Dime

-Tu padre me mira las tetas, le he pillado varias veces tanto en la playa como en casa

-y te molesta?

-ummmm… no

-y te gusta?

-ummmmmmmm…. Creo que si

Sus movimientos de cadera que inicialmente eran lentos cada vez eran más rápidos y profundos

-eres una zorra, lo sabes, verdad?

-y bien que te gusta que lo sea.

En ese momento de aceptación E estaba totalmente desatada, a diferencia de otros días en los que me la follaba yo ese día era ella la que se estaba dando el gustazo de follarme como ella quería, yo simplemente quieto ponía mi polla a su disposición.

El ritmo ya era realmente alto, a pesar de que intentábamos no hacer ruidos la propia cama y los jadeos ahogados se dejaban escuchar en el silencio de la casa.

A ese ritmo yo no aguantaría mucho más así que la anuncié que si no paraba me correría.

E con el calentón no me hizo caso y cuando vio que me agitaba se sentó por completo sobre la polla y con ella totalmente ensartada comenzó a moverse en círculos forzando aun más mi corrida.

Me corrí como un animal dentro mi E, su cara estaba distinta a lo habitual, tenía una expresión de satisfacción perversa a pesar de no haberse corrido aún.

Mirándome a los ojos con esa cara de pervertida desatada se incorporó sobre mi y comenzó a masturbarse sobre mi mientras la caía toda mi corrida por las piernas y cayéndome a sobre mi de nuevo.

-Sabes lo que necesito ahora, verdad? Me dijo E.

-Una ducha?... dije picandola

-necesito correrme….

Continuará…..