De viaje en la playa y sin marido
..retomé mis sentadillas, él estaba acostado debajo de mi; al subir y bajar, el tipo claramente podía ver mis tetas de arriba abajo, mi cara haciendo esfuerzo y gimiendo como si estuviera cogiendo, cerré mis ojos y me imaginaba una verga debajo de mi; estaba excitada, caliente y muy mojada..
En la empresa donde trabajo anualmente se hace un evento de premiación de los empleados más destacados del país, se nos invita a algún hotel de lujo en una playa con todos los gastos pagados, durante unos días nos dejamos consentir por nuestra empresa, para luego regresar motivados y seguir siendo productivos.
Para se merecedor de la invitación hay que tener buenos resultados y uno nunca sabe cuando puede tocarte asistir, luego si te toca, tratas de disfrutar lo más posible porque no sabes si un día vas a regresar.
En alguna ocasión tuve un año muy destacado y me gané mi derecho a asistir, realmente estaba muy emocionada, playa, sol, mar, fiesta, mucha gente, pero sobre todo la posibilidad de usar ropa diminuta sin tener que preocuparme.
Cuando viajo a la playa con mi marido, no tengo problema en exhibirme en trajes pequeños, pero en esta ocasión al ser un evento del trabajo debía de limitarme y usar un traje de baño convencional, aunque lo convencional no iba a ocultar mis pronunciadas curvas, mis enormes nalgas y mis redondos senos, así que para efectos prácticos, lo convencional sería suficiente.
Tengo por política no tener relaciones sexuales con compañeros de trabajo y trato de mantener esta política, aunque a veces hay tentaciones; en esa época en particular había un muchacho que me pretendía insistentemente, era bien parecido, pero lo que me atraía era que tenía una personalidad fuerte, sabía lo que quería y lo hacía saber, no dudaba en mostrar su interés y deseo de tener un acostón conmigo, no disimulaba sus ganas de cogerme, me sostenía la mirada y descaradamente me miraba mis tetas y mi culo
En su contra tenía el trabajar en mi oficina y un fuerte machismo, el cual no me terminaba de gustar, a veces sentía que sus pequeños avances le daban ciertos derechos sobre mi y eso no me gustaba para nada, así que de repente me reclamaba cosas y hasta me celaba, esto en una sana medida puede ser halagador, pero a veces cruzaba esa línea y eso me daba mucha pereza.
Pues resulta que dentro de las personas que fuimos invitadas al evento en la playa estaba incluido mi admirador, su gusto por compartir ese viaje conmigo fue evidente, por fin tendría la oportunidad de avanzar conmigo, la playa, la fiesta, el estar muy lejos de casa, la bebida, y todo esto, durante varios días, le daban la oportunidad perfecta de que por fin avanzara conmigo.
Yo por mi parte tenía sentimientos encontrados, me daba un poco de miedo y frustración saber que iba a tener a este muchacho sobre mí, pero por la otra hay que reconocer que me gustaba, me gusta mucho el sexo y el ir a la playa sin coger es un desperdicio, así que tal vez y solo tal vez, podía darme el lujo y correr el riesgo, dejé entonces que las cosas se dieran solas y ver que me deparaba el viaje, me adaptaría a lo que sucediera y tendría la apertura de evaluar mis opciones, el punto es que me moría de ganas de ir y divertirme a lo lindo ya sea con mi pretendiente o con otro, ya sea cogiendo o no.
Por fin llegó la fecha del viaje, yo llevé conmigo un guardarropa extenso y adaptable a cualquier ocasión, a pesar de ello toda mi ropa tenía un común denominador: cada una de mis prendas eran muy sexys¡, unas más cortas otras más largas, unas mas entalladas otras más flojas, unas con escotes al frente otras con escotes en la espalda, algunas elegantes y otras un poco vulgares, todas y digo todas resaltaban mis sensualidad y dejaban pocas cosas a la imaginación.
Llegamos por la mañana y para la noche ya teníamos programado evento en la playa era una recepción, con cena y baile.
Para esa primera noche escogí un short muy pequeño, apenas tapaba el inicio de mis nalgas, era de color rosa, la tanga era también de ese color; para la parte de arriba escogí una blusa de tirantes blanca muy escotada y corta, mi ombligo se alcanzaba a ver por debajo de la prenda
En mi punto de vista, la gran diferencia en la percepción masculina con este atuendo son los zapatos, estas mismas prendas con zapatos de piso no tienen ni lejanamente el mismo efecto que con zapatos altos, es una realidad que si a este atuendo se le adicionan unos zapatos de tacón alto, la imagen y la sensualidad cambian radicalmente.
Me sentía muy bien conmigo misma y me dispuse a salir, mover mi culo y captar miradas, al entrar, los efectos fueron instantáneos, si de por si tradicionalmente capto la atención de los hombres, en ese entorno era muy fácil, la proporción de hombres vs mujeres era por demás elevada, como buena empresa, el porcentaje de varones es superior, luego hay que eliminar a varias mujeres ya entradas en años y poco atractivas, sumen a esta ecuación, el alto número de hombres calenturientos, fuera de casa y acceso libre a toda la bebida que deseasen; en ese entorno el resultado de la relación hombres calientes vs mujeres buenas era abismal.
Inmediatamente varios hombres me abordaron, evidentemente hay que cuidar las formas, no pretendía socializar abiertamente con gente que no conociera, eso se ve mal de cara a mi imagen, se empiezan a hacer especulaciones si uno se ve muy disponible y abierta a conocer a nuevas personas
Como dije anteriormente dejaría que las cosas se dieran, pero si tenía muy claro que no iba a hacer una tontería en este evento, solamente mi admirador podía tener una cierta posibilidad siempre y cuando me inspirara una total confianza su discreción y además debían de darse varios elementos para que yo cayera y saliera la puta que llevo dentro
Con todos estos elementos veía difícil que algo se diera, el cabrón no necesariamente me encantaba y los riesgos eran muy altos.
La recepción era en el bar del hotel, era un bar muy grande, a pesar de que nosotros éramos mayoría en el hotel, no éramos exclusivos y compartíamos las instalaciones del bar con otros huéspedes, nosotros debíamos de llevar gafete, esto nos daba acceso a la barra libre de bebidas, el dato era útil ya que podías identificar a tus diversos compañeros de trabajo y saber su nombre.
Rápidamente hicimos grupo con los compañeros de mi ciudad, mi admirador no perdía oportunidad de estar cerca de mí y jugar el rol de acompañante, estaba pendiente de mi bebida, me sacaba plática, me adulaba, me miraba siempre y no dejaba que nadie le quitara su espacio junto a mí, si alguien se acercaba, rápidamente buscaba la manera de reclamar su espacio, ya sea conversando o abiertamente acercándose a mí, tratando de mandar un mensaje a los otros hombres de que esta es mi vieja.
Yo agradecía el gesto y en general me gustaba, si fuera otro el entrono y no fuera un evento de la empresa o no trabajáramos juntos estaría encantada, pero aquí las cosas eran distintas, creo que debía guardar mas la distancia, darme un poco a desear y no ser tan evidente.
Durante estas primeras horas de la noche platiqué con mi amigo razonablemente bien, me sacó a bailar un par de veces, y fue agradable, me bailó como me gusta, bien tomada de la cintura y con fuerza, platicamos de diversas cosas de lo interesante del evento, de lo bien armado de la organización y de nuestros planes, le dije que tenía la intención de divertirme a lo grande, entonces me dijo:
- Deberíamos de alocarnos hoy y amanecer la fiesta
Para mis adentros pensé: “como no, y tú crees que yo nací ayer”, a lo que contesté
- No creo, es la primera noche y hay que guardar energías, mañana tenemos evento temprano y yo quiero levantarme a hacer ejercicio.
Conforme pasó el tiempo la situación pasó de ser motivante a ser asfixiante, poco a poco empecé a sentirme a disgusto hasta el punto de comenzar a molestarme, luego conforme mi amigo tomaba mas, tenía actitudes más caprichosas llegando incluso a celarme
No quise entrar en discusión, ni pelear, ni hacer escándalo, poco a poco me empecé a alejar, para no entrar en problemas, empecé a conversar con una amiga y no con algún hombre, insistía en que difícilmente alguien del trabajo iba a tener mis nalgas y el único que tenía alguna posibilidad, poco a poco desvanecía dicha oportunidad.
En el trascurso de la noche me percaté que había una mesa de huéspedes muy animada, eran varias personas todos ellos jóvenes, había hombres y mujeres y se veían que se llevaban muy bien, creo que eran de mi edad o tal vez un poco más jóvenes, su ambiente contrastaba con el nuestro, en nuestro evento los jóvenes éramos menos y dispersos, además estábamos mezclados con compañeros más grandes que eran mayoría, no puede evitar cierta envidia por el ambiente que tenían
Rápidamente me di cuenta que varios muchachos de esa mesa me miraban fijamente, esto ponía mi ego en el cielo, una cosa era calentar a viejos rabo verde y panzones, ávidos de carne joven y otra distinta era captar la atención de jóvenes bien parecidos y acompañados de chicas jóvenes también y guapas.
En especial un chico llamó mi atención, era delgado y bien parecido, se veía muy alegre y energético, siempre reía y bailaba, se veía que era el típico líder del grupo, el que siempre está dispuesto a pasarla bien y a vivir y enfiestarse intensamente; él era quien más me miraba, al voltear yo a verlo, no bajaba la mirada y se cercioraba que yo me diera cuenta de que me estaba viendo
La situación me gustaba y al poco rato le sonreía esporádicamente, por un rato no pasó de ahí, también eso abonaba en mi gusto por él, no se abalanzó sobre mi, se daba su tiempo y dejaba que las cosas se dieran solas si es que debían de darse
En este proceso tuve que pasar al baño, la mesa de ellos se encontraba justo en el camino hacia el sanitario, pasé por ahí y aproveché para ensayar mi mejor contoneo de caderas, lentamente caminé y moví descaradamente el culo, quería dejar claro el mensaje que era la vieja mas buena del lugar incluso más buena que cualquiera de esa mesa, tal vez no era cierto, pero yo quería creerlo.
Al salir del baño ya estaba esperándome, justo al salir se acerca a mi y me dice:
- Hola, cómo te llamas?
- Dani y tu?
- Me llamo K (es el nombre que usaré en este relato para identificarlo)
- Mucho gusto
La plática no pasó de las típicas preguntas iniciales, me dijo que estaba tomando unas pequeñas vacaciones con sus amigos que habían pedido un par de días en el trabajo y se habían escapado a la playa
También me dijo que vivía en el DF pero era de Veracruz y que todavía estaría en el hotel hasta el sábado, porque había aprovechado la temporada baja y el hecho de ir entresemana para obtener un precio interesante en su viaje. Yo por mi parte la platiqué que era casada y venía a una convención de mi trabajo.
El tipo me pareció atractivo e interesante, platicamos un rato, no sé si 30 o 45 minutos, al final me despedí de él, porque debía volver con mi Grupo, insisto que debía comportarme, él lo entendió y nos despedimos si quedar en nada, sin ningún compromiso decidimos que tal vez nos veríamos en los próximos días al estar hospedados en el mismo hotel,
La noche trascurrió y durante todo el tiempo no dejamos de intercambiar miradas y sonrisas, realmente me gustaba este cabrón y su actitud desinhibida, seguí observándolo y realmente la pasaba muy bien en compañía de sus amigos
Entrada la noche decidí retirarme, estaba cansada y no soy buena desvelándome, además realmente me quería levantar temprano, al salir voltee a ver la mesa de K y los vi todavía alegremente divirtiéndose, traté de despedirme de él con la mirada pero no pude hacer contacto visual con él.
El día siguiente me levanté temprano para ir al gimnasio, me puse un conjunto azul celeste y claro, tenía un pants súper entallado, un top y una chamarra.
Como seguía en el plan de cuidar mi imagen decidí hacer ejercicio con la chamarra puesta y abrochada, el top era pequeño y cubría apenas mis tetas, además que mis pezones se adivinaban fácilmente con el sudor.
Con las nalgas la historia podía ser distinta, ahí si se mostraban generosamente, la prenda se amoldaba a mi trasero sin que nada lo cubriese ya que la chamarra era corta.
La verdad es que no llevaba ropa interior, me gusta mucho la sensación del pant metiéndose en mi culo y en mi vagina sin interferencia, evidentemente abajo del top no llevaba nada
Empecé mis ejercicios y el lugar estaba medianamente lleno, sin estar vacio, tampoco estaba atestado, la mayoría de las personas eran hombres, era mi condición ideal, sin tanta gente, pero la suficiente para exhibirte y además con mayoría masculina
Como a los 45 minutos de estar trabajando, mi cuerpo ya se había llenado de sudor, mas porque no me había quitado la chamarra, para ese momento las pocas damas se habían retirado, estaba yo sola entre hombres, el tema es que no podía identificar cual de ellos era de mi empresa, ya que evidentemente ahora no llevábamos gafetes, con ello a pesar de morirme de las ganas de quitarme en top decidí no hacerlo
Cual fue mi sorpresa cuando aparece en escena mi nuevo amigo K, al verme de inmediato me saluda y se acerca a mi, da un beso en la mejilla y después de una pequeña charla, comienza él con su rutina, yo por mi parte sigo con mis gemidos, estos me salen naturales, pero creo que con la inesperada llegada mi amigo ahora pueden ser mas evidentes
En un momento nuestras rutinas nos pusieron muy cerca, yo estaba haciendo abdominales recostada en un aparato con un delgado colchón, como saben estos aparatos son lo suficientemente delgados como para que una persona apenas pueda acostarse y pueden ser rodeados fácilmente con las piernas abiertas por cualquier otra persona de pie.
Empecé con mis abdominales, y K se acerca a mi y me ofrece ayuda, me propone sujetar mis piernas para mejorar la efectividad del ejercicio, yo coquetamente sonrío, le agradezco la atención y acepto
Hago mi primer serie y le pido un momento para levantarme y tomar un poco de agua, me incorporo y me dirijo hacia los bebederos, al caminar me doy perfectamente cuenta que devora mi culo con la mirada, yo disimuladamente hago lento mi andar y muevo mis caderas levemente.
Al regresar me dice:
- Creo que estás haciendo mal tus ejercicios
- Por qué?
- Porque estas muy cubierta, con la chamarra estas sudando mucho, como estamos en playa y aquí hay mucho calor, puedes deshidratarte no crees?
Al terminar de decir esto sólo sonrió, yo hice lo mismo, evidentemente no creí una palabra de lo que me dijo
- Y que propones para remediar esto?
- Pues fácil quítate la prenda, que no ves que puede ser peligroso, es por tu salud¡
Y ambos lanzamos una pequeña carcajada
- Ok, la salud es primero, no crees?
- Definitivamente
Y así sin más me despoje de la prenda. La realidad es que K, no sabía que había debajo, realmente podía haber una blusita y no ser tanto el espectáculo, su sorpresa fue evidente al ver aparecer un top, escotado, corto y ya mojado por el sudor.
- Wow Dani, que buenas tetas¡¡¡
Me sorprendió el comentario tan espontaneo y tan pícaro, definitivamente este tipo prometía, tenía justo la actitud que justo puede hacer entregar mis nalgas, no respondí solo sonreí y me dispuse a continuar con mis abdominales, me recosté y él se sentó sobre mis pies, de frente a mi; con cada movimiento, cada vez que me levantaba mis tetas le quedaban muy cerca, tenía el panorama ideal de mis senos, sus ojos se posaban descaradamente en ellos, yo lo sabía y él quería que yo supiera.
El sudor, la trasparecía del top y mi incipiente excitación hicieron que mis pezones se asomaran generosamente, luego si a esto le adicionamos mis gemidos y mis constantes acercamientos hacia su cuerpo, generaban a mi gusto, una escena cargada de erotismo, poco a poco K se movía hacia delante y cada vez que me incorporaba nuestros rostros y nuestra boca quedaban más cerca.
Terminé mi rutina y el di las gracias por su ayuda, me dispuse entonces a ir por la barra, nuevamente le di la espalda y ahora en contoneo fue más evidente.
Tomé la barra y comencé a hacer sentadillas; al bajar el panorama de mi culo debería de ser formidable, me aseguré de que K tuviera una buena perspectiva y comencé nuevamente a gemir.
No tardó en acercarse nuevamente:
- Dani lo estás haciendo mal
- Por qué?
- Mira te voy a explicar
- A ver…
Se recuesta boca arriba en el aparato donde yo había estado haciendo abdominales
- Imagínate que en este colchón esta recostado tu amante y te lo quieres coger….
Coger¡¡ Amante¡¡, este cabrón apenas me acababa de conocer y ya me decía esas palabras, por qué no decir?: Hacer el amor y Esposo; por qué Coger y Amante, evidentemente porque era un perverso, y que creen? Me encantaba
- Luego tú te pones justo encima de él, abres tu piernas y de pie, subes y bajas para cogerlo, como lo harías?
- No sé, pues estaría difícil, pues ya estando abajo para que subo, se saldría…
- Bueno eso sí pero para efectos del ejercicio debes de imaginártelo y cooperar más, al bajar te la meterías y al bajar la sacarías, entonces qué harías?
- Bueno pues bajaría rápido y subiría lento, así duraría más tiempo con ella adentro, no?
- Exacto, ahora imagínate esa situación y haz las sentadillas, si necesitas motivación pues puedes usarme a mí como modelo, te ofrezco mis servicios sin costo alguno
- Gracias eres muy amable pero mejor imagino a mi marido, pero es muy buen tip el que me diste
- Uy las cosas que yo te pudiera dar¡¡ de nada, ya sabes, para servirte, quieres intentarlo??
- Si
Así retomé mis sentadillas, él seguía acostado, evidentemente no me puse encima de él pero lo tenía de frente y claramente podía ver mis tetas de arriba abajo, mi cara haciendo esfuerzo y gimiendo como si estuviera cogiendo, cerré mis ojos y me imaginaba una verga debajo de mi justo como me lo había recomendado K, entonces bajaba los más rápido que podía y subía lentamente, tratado con ello de maximizar el tiempo que tendría una imaginaria verga ensartada.
Realmente me excité, pero en mi mente estaba la verga de mi marido, la cual me encanta, en mi fantasía no existía un hombre, solo una verga grande y gruesa y la que más me gusta es la mi esposo
Mi amigo se incorporó y descaradamente se puso detrás de mí para tener un mejor panorama de mi culo, yo me hice la desentendida y seguí con lo mío, gimiendo e inclinándome lo mas que podía
Lo interesante del caso es que en realidad yo ya había hecho mi rutuna de sentadillas hace varios minutos, la había repetido solo por el morbo de exhibir mis nalgas.
Para esos momentos yo ya estaba excitada, caliente y muy mojada, la combinación del sudor, con mi falta de ropa interior, lo delicada de la tela de mi pants, y por qué no mis propios jugos, hicieron que mi entrepierna luciera empapada, al terminar de rutina de sentadillas, rápidamente mi nuevo amigo se dirige a mi:
- Vaya Dani si que te excitaste¡ si necesitas algo aquí estoy para servirte¡
- No seas tonto, claro que es sudor¡, no tuvieras tanta suerte eh
Y ambos sonreímos de manera picara y demostrando complicidad, luego me toma de la mano y me dice:
- Ven déjame enseñarte un ejercicio
Y me llevó a un aparato al final del gimnasio, en él había que introducir el pie y un cable largo estaba ligado a unas pesas, la intención era mover la pierna en forma de péndulo y levantar las pesas, me colocó el pie en el estribo y me pidió que comenzara a realizar el ejercicio.
Así lo hice y comencé a mover mi pierna izquierda, nuevamente los gemidos, mientras trabajaba se acerca a mi y me dice:
- Este ejerció es muy bueno para fortalecer los muslos
Sin más me tomó mi muslo izquierdo lo tomó fuertemente y así dejo su mano durante todo el tiempo que duraron mis repeticiones, yo me sentía cachonda y sometida, mientras él hablaba yo gemía, no podía hablar y sólo me dejaba hacer.
Ahora el turno de mi otra pierna, el cabrón me suelta el muslo y pone un mayor peso en el aparato:
- La pierna derecha tradicionalmente es ms fuerte, no voy a ponértelo fácil
Lo que yo entendí es que tenía el pretexto ideal para incrementar mis gemidos y así lo hice, estaba caliente y cada vez era más sonora mi rutina, lo mejor es que para ese entonces el gimnasio estaba prácticamente vacío y entre la música y el hecho de que estaba al final de las instalaciones, creo que mis gemidos podían pasar desapercibidos, de inmediato se coloca a mi derecha y me dice:
- El ejercicio también es bueno para refirmar los glúteos
Y sin más coloca su mano en mi nalga y la aprieta fuertemente, yo solo volteo y sonrío un poco, no puedo hablar por el esfuerzo y la excitación, lo veo sumisamente, víctima del esfuerzo que supone el ejercicio
- Ahhh, ahhhh, mmm, mmm
- Te gusta?
- Si, mmmmhh, es muy bueno
- Sientes como trabaja en tus nalgas
- Sii
Sus palabras estaban llenas de morbo y doble sentido yo me dejaba hacer victima de la excitación y el deseo
Cerré los ojos, con su mano apretando mi nalga y gimiendo abiertamente con el pretexto del ejercicio, creo que la escena era de lo mas intensa, en eso una voz distante y en tono molesto me despierta de mi trance:
- Hola Dani¡
Era mi compañero de trabajo, se había levantado temprano para buscarme en el gimnasio, el impacto hacía él debería de haber sido fuerte, iba al gimnasio con la esperanza de verme y convivir conmigo y en lugar de ello me ve vestida entallada, con medias tetas de fuera, mojada, gimiendo y sobre todo con la mano de un extraño descaradamente posada sobre mis nalgas. Abrí los ojos y lo vi
- Hola, mmmhh
Seguí con mi movimiento y el cabrón de K, también sigue con su mano en mi nalga, no se inmuta ni se intimida, realmente me gusta su actitud¡
Tomo conciencia de lo que pasa y termino la rutina, me doy cuenta que no está bien que siga así delante de un conocido, me detengo no porque tenga sentimientos por mi compañero sino por el hecho de que es precisamente mi compañero de trabajo y quiero cuidar mi imagen.
- Gracias por tu ayuda K, ya tengo que irme, tengo que alistarme para mi evento de mas tarde
- Bye Dani, espero verte más tarde
- Ok
Así me despedí y fui a recoger mis cosas para retirarme, mi compañero me alcanza y me dice:
- Qué fue eso?
- Qué fue qué?
- Por qué te agarraba las nalgas ese cabrón?
Ahora resulta que este pendejo quería celarme¡¡ no lo hace mi marido que coge como un rey, mucho menos un pendejo como este
- Eso es algo que a ti no te importa, y sólo me ayudaba con mi rutina, de cuando a acá tú tienes atribuciones conmigo
- Perdón Dani pero me pareció…..
- Te pereció madre, en tu vida me vuelvas a hablar así
Y ahí lo dejé y me retiré a mi habitación
Con el morbo de la sesión la rutina duró más de lo esperado, así que se me hizo un poco tarde, me bañe y me alisté rápidamente porque el día estaba ajetreado, no sé si con un poco más de tiempo me hubiera masturbado pero la realidad es que no lo hice, eso tuvo como consecuencia que todo el día estuviera caliente, mi mente divagaba y me imaginaba teniendo sexo salvajemente en el gimnasio, me imaginaba de todo, diversas posiciones, y lugares, me imaginé en las duchas y en alguno que otro aparato, me imaginaba cogiendo con K y a veces me imaginaba siendo poseída por los 2 o 3 hombres que estaban al final en el gimnasio.
La cosa no pintaba bien para mi marido, no tenía ni 24 horas en la playa y yo ya tenía fantasías eróticas, había sido manoseada descaradamente y mostrado generosamente mi cuerpo.
El resto del día estuvo destinado a diversos eventos de la convención, todo estaba programado y no había ratos libres, al caer la tarde sólo teníamos tiempo para arreglarnos para el evento de la noche, era una cena baile exclusivo para los integrantes de la convención, de esta forma no volví a ver a K en todo el día
El día siguiente era viernes y me levanté para ir al gimnasio, tenía la esperanza de ver a mi amigo pero nunca se presentó, después de la comida teníamos libre de 4 a 6 pm, después debíamos de alistarnos para la cena de clausura.
Ese tiempo lo aprovechamos para ir a la alberca, ya cerca de las 6 pm, veo que K y sus amigos aparecen, el corazón me dio un vuelco y sentí un cosquilleo muy intenso en mi vagina, lo busqué con la vista y nos encontramos nos saludamos a lo lejos, así fue durante un rato, yo por mi parte me levantaba contantemente caminaba al baño y movía mis nalgas, también aproveché que la parte de arriba de mi traje de baño podía hacerse más delgada, la acorté lo mas que pude para dar un mejor panorama de mis tetas, desafortunadamente la condición de estar acompañados por varias personas, hicieron que nuestros caminos no pudieran cruzarse.
Para la noche me puse mis mejor atuendo una tanga minúscula blanca, un vestido blanco, delgado y muy corto, con un escote generoso por la parte de en frente, la tanga se alcanzaba a notar con cierta facilidad para cualquier persona que se posara su vista fijamente en mi trasero.
Esa noche tomé, bailé y me divertí de lo lindo, hubo muchas risas, bromas y bebida, gracias al hecho de que había mandado a volar mi pretendiente, me sentí con mucha libertad de socializar con más gente, bailé y platiqué con muchos, a veces bailamos en grupo y un que otra vez acepté bailar con uno que otro tipo.
Con el pasar de las copas me sentía más caliente, y los hombres cada vez se acercaban mas a mi con claras intenciones de bajarme los calzones, yo me divertía coqueteando pero no les permitía avanzar, a veces me divertía visitando constantemente el baño, con toda intención recorrí largas distancias entre las mesas, moviendo descaradamente mis nalgas, a mi paso veía las miradas de los hombres posarse sobre mi trasero y me encantaba.
El evento terminó muy tarde casi amaneciendo, nosotros estábamos muy ambientados y quedamos de ir a la playa a ver el amanecer, llegamos a la playa y ahí estaba K con sus amigos, se veía que también estaban bastante tomados y se divertían bastante, otra vez mi emoción al verlo, sólo que ahora no sentí cosquillas en mi vagina, ahora sentía que se mojaba seriamente.
Nos saludamos a lejos y sonreímos, seguimos cada quien en los suyo con su respectivo grupo y las miradas no cesaban, al poco rato me mandaba besos clandestinos yo sonreía y cerraba mis ojos, realmente estaba muy caliente.
No pasó mucho tiempo para cuando me empezó a señalar con su dedo hacia la zona de la alberca, yo entendí perfectamente que me señalaba hacia donde quería que fuera, quería que me escapara de mis compañeros y fuera furtivamente a su encuentro
Vi que se levantó y caminó hacia la zona de la alberca, lo seguí con la vista hasta que como consecuencia de la oscuridad desapareció por la zona de los baños.
Mi calentura era mucha y solo dudé por un momento en ir a su encuentro, apenas segundos después de que lo vi partir, les avisé a mis amigos que iba un momento a mi habitación, me levanté y caminé hacia donde lo había visto desaparecer.
La zona de albercas estaba oscura, volteaba hacia todas direcciones y no lo veía de pronto siento un mano en mis nalgas mientras la otra me toma de las tetas, es él¡¡, se pone detrás de mi y me besa el cuello y el oído, a mismo tiempo recarga su verga en mi culo, es una verga grande, se siente claramente en mi trasero
Mientras me besa y recarga su verga mueve su pelvis como si me estuviera cogiendo, yo hago lo propio y saco mi culo lo mas que puedo, luego me voltea y me besa con pasión yo tomo su cara con mis dos manos, él por su parte toma mis nalgas con sus dos manos y las aprieta fuertemente; luego colca uno de sus muslos en mi entrepierna yo pego mi vagina a su muslo y descaradamente comienzo a mover mis caderas.
Los dos estamos ardiendo, se ve que el deseo contenido y el alcohol que traemos ambos en el cuerpo, se combinan peligrosamente para incrementar nuestra excitación, me toma de la mano y me mente al baño de los hombres, ahí como una vulgar puta pretende cogerme, yo no pretendo objetar en lo mas mínimo su deseo.
Llegamos al baño y de inmediato me saca el vestido, me quedo en tanga ya que no llevaba bra, casi desnuda me voltea para ver mis nalgas, yo saco mi culo y le facilitó el panorama, me soba las nalgas y me pega una par de nalgadas, no me golpea fuerte, parce mas bien que revisa que tan firmes las tengo
Luego se saca la verga y me hace arrodillarme, es enorme¡¡ la tomo con mis manos y comienzo a jalársela, mientras se la jalo chupo sus huevos, tiene sus huevos y su pelvis depilados, con ello su verga se ve aun mas grande, luego de tener sus huevos en mi boca, mi lengua me reclama explorar ese bella verga que en ese momento acaparan mis manos.
Pronto me la meto a la boca y comienzo mi trabajo, su verga es tan grande que puedo jalarla con una mano y mamarle su cabeza con mi boca, se ve que le encanta porque comienza a jadear y gemir como desesperado.
- Que bien lo haces, ahhhh, que rico¡¡¡
Me gusta lo que provoco y acelero el ritmo, sus gemidos se incrementan
- Sigue, no pares, sigue pinche puta como vergas¡¡¡
Que rico¡¡ nunca me habían dicho así y sentí riquísimo
- Como me dijiste?
- Pinche puta come vergas¡¡¡ te gusto??
- Me encantó papi¡¡
Y aceleré el ritmo quería hacerlo terminar, quería hacerlo terminar como la pinche puta como vergas que era, no tardé en lograrlo y sentí su semen, era delicioso me lo tragué todo mientras lo oía gemir y decir vulgaridades
- Ahhh¡¡¡ ahhh¡¡ comete todos mis mecos pinche puta como vergas¡¡
Mecos¡¡ no había escuchado esa palabra, pero me gustó, creo que cada cosa vulgar que me dijera me encanaría en ese momento.
- Y ahora que hago?, como me vas a quitar la calentura?
- No te preocupes, sólo espérame un rato
Me levantó en vilo y me sentó en los lavabos, me bajó la tanga y comenzó a devolverme el favor, su lengua entraba y salía en mi cuca, para luego pasar tiempo en mi clítoris, luego lo mordía un poco y comenzaba nuevamente, yo estaba en el celo, movía desesperadamente mi cadera y contraía mis músculos, me levantaba y bajaba constantemente
- Que rico papi, mas, mas por favor
A los pocos minutos tuve mi orgasmo, fue una total erupción después de tantas horas contenidas de deseo.
Me bajó del lavabo, y veo que su verga ya se ha recuperado, sin dudar me voltea. así de pie me hacer recargar mis manos en el lavabo, saco mis nalgas y por fin siento su verga bien adentro
Me lo hace sin contemplaciones, salvajemente empieza el mete y saca, los dos gemimos y gritamos entre las salvajes envestidas. se oye fuertemente el contacto de nuestros cuerpos cuando se topan su pelvis y mis nalgas
Mientras cogemos nos vemos con cara de deseo y hablamos vulgaridades
- Que rico culo tienes puta¡¡
- Te gusta?
- Me encanta ¡¡
- Pues tómalo cabrón has conmigo lo que quieras¡¡
- Ahh ahhh, así te quería tener cabrona, me has tenido la verga parada desde hace días¡¡
- Y tu a mi me has tenido bien mojada cabrón¡¡
La cogida sigue más intensa aún, desde que me la metió el rimo no ha disminuido
- Siii, asii papi, dame como me gusta, métemela bien adentro¡¡
- Que mas puta?
- Huy sii papi que rico, ay la tienes enorme cabrón, tal y como me gusta la verga,
- Así te gusta?
- Huy si así, mas mas que rico papi voy a terminar haaaaaaa que rico, quiero mas, no pares papi no pares
Y tuve un orgasmo riquísimo, a mi amante todavía le quedan algunas fuerzas y siguió cogiéndome un rato, cerca de mi segundo orgasmo, me saca la verga y me hace hincar, así lo hago y busco su verga para mamarla, no me deja y sigue jalándosela se ve que quiere terminar en mi cara, así lo hace y de inmediato siento un fuerte chorro de semen tibio primero los avienta a mis boca y luego a mis tetas.
- Toma puta, trágate todos mis mecos¡¡
Lo obedezco y de inmediato busco con una mano todos los mecos que cayeron fuera de mi boca y en mis tetas, con la otra acaricio mi clítoris, mientras lo hago un segundo orgasmo, el morbo de la escena es mucha, en un baño público y buscando todo el semen que mi amante vertió en mi cuerpo para llevármelo a la boca, al terminar de tragármelo quiero mas de ese sabor y me abalanzo a su verga para dejársela limpiecita.
Rápidamente me aseo un poco, busco mi vestido y me lo pongo, le pido mi tanga y me dice que se quedará con ella, me encanta el detalle y le plantó un beso, al darme la vuelta para dirigirme a la salida me da una nalgada como señal de quien manda, yo volteo y sonrío
- Gracias¡¡ a la orden¡
- Ya sé que si
Intercambiamos números de teléfono y regresamos de inmediato con nuestros respectivos grupos yo sigo con mi fiesta, al regresar preguntan por mi retraso, yo sólo sonrío y digo
- Que indiscretos, cosas de mujeres¡¡ tenía que ir al baño¡¡
Y realmente tenía que ir al baño, y creo que no había tenido una mejor visita al baño en toda mi vida
Pronto nos alcanzó el amanecer y debimos retirarnos, yo compartía habitación con otra chica así que no podía invitar a mi amante a pasar a mi habitación, desconozco las condiciones que él tenía, pero el hecho es que él tampoco sugirió pasar a alguna habitación.
El día siguiente o mejor dicho ese día era sábado y todos debíamos regresar, la verdad es que a pesar del fuerte gusto que tenía por la cogida que acababa de tener, sentía un poco de frustración por tener que prescindir tan rápido de esa vergota, la verdad quería mas…..