De tí

Del sublime viaje que comienza a un reencuentro

Es como sentirme en casa nuevamente, acaricio su cabello y no se más de mí. Es el percibir su aliento sobre mi cuerpo. Darle todo lo que soy y recibirlo de ella.

Es como dejar de existir por un instante para renacer entre sus labios.

Es como despertar en otra dimensión. En otro mundo donde sólo existimos tú y yo. Es sentir como desde hace años no sentía, regresar al hogar, al inicio. A mi inicio.

Sentir tu boca jugando con la mía, ese par de labios que juegan contra los míos a ver quien le produce más placer al otro. Esa lengua que sabe como seducirme con un simple movimiento. Es llenar tu aliento con el mío y respirar del mismo aire. Cuando tus manos reconocieron mi cara, tus ojos se cerraron para recordar mis formas; sí siempre fui así, reactiva ante tu tacto, sensible a tus deseos, receptiva de tu tiempo, esperanzada de tu amor.

Y ahora vuelves a tocar mi piel, a hacerme tuya de pies a cabeza, como siempre lo he sido. Vuelves a susurrar palabras en mi oído que entre toda esta pasión no alcanzo a distinguir. Vuelvo a sentir tus manos en mi espalda mientras yo te arranco suspiros de placer. Tus uñas recorren desde la base de mi cráneo hasta el final de mi espalda, justo de la forma en que recuerdas que me gusta; justo en la manera en como alguna vez te conté derretía ante ese gesto.

Así, me imagino que no lo has olvidado, aún recuerdas como amarme; será que una vez que dos cuerpos que hallan su complemento aún separados al reencuentro se acoplan aún más; será que mis manos que están hechas a la medida de tu cintura no han podido olvidar esa forma, o será simplemente esta pasión que desborda de nosotros la que nos junta tan bien en esta cama.

Así dejo que hagas de mí lo que quieras, dejo que me beses, que dejes de besarme, que tomes mis pechos, que lamas, muerdas y succiones a placer. Dejo que sea tu boca quien haga a mi cuerpo estremecer, dejo que tus manos acaricien mis piernas y así me hagas vibrar hasta lo más profundo de mi ser.

Quiero sentirte mía otra vez, no es natural, no es de este mundo. Es de nuestro mundo; sólo entre nosotras existe este tipo de amor, el amor que borró todas las barreras del mundo. Es este el tipo de amor que consigue hacer una de dos. Es el tipo de amor que confunde los corazones y limita las libertades. Este es el amor que sobrevive al tiempo que no se para. Es el amor que nunca dejó de calentar mi corazón. Es este amor que se mantuvo vio sólo por ti.

Y así, con este nuevo encuentro. Me encuentro, en tus brazos, en tu piel y tu sonrisa. Vuelvo a existir porque ahora regreso a tu ser. Regreso a ser yo y estar en ti. Es ahora cuando vuelvo a poseer tu ser. En mi ser. Y así juntas podemos ser las dos.

Es esta razón de existir en un plano más de la vida. De ese goce que sólo existe entre dos seres que se conocen. Que se aman.

Amarte de tanto tiempo. De conocer tus defectos y vitudes. De compartir y departir. Y así, con todo ese amor; dormir entre tus brazos. Embriagarme de tu aroma, desnudarme a tu interior. Recrearme una y mil veces en tu boca, renacer entre tus senos para simplemente abandonarme en tu ser.

Y así siendo tuya otra vez, sintiéndote mía de nuevo. Me dejo vencer por el sueño. Deseando que al despertar aún estés aquí.

Max