De regreso volver a creer 13

Me encontraba en mi oficina pensando en lo que acababa de pasar sentía tristeza al saber que los sentimientos de Brenda seguían siendo los mismos a pesar del tiempo que había pasado.

Daniela era muy importante para mí y si alguien la dañaba no iba a tocarme el corazón por nadie ni por Brenda. Daniela era la única persona que jamás me había juzgado por mi pasado y siempre estuvo para mí y jamás permitiría que la hicieran llorar.

–Puedo pasar? –Pregunto Dany tocando la puerta e interrumpiendo mis pensamientos.

–Claro pasa Dany..

–Faby perdón por lo que viste hace unos momentos se que te debía contar antes pero no podía me daba miedo tu reacción – agachó la mirada

–No tienes porque disculparte Dany.. de verdad –Dije levantándome de mi lugar y caminado hacia ella –Todo está bien..

–Tu cara no dice lo mismo y sabes que te conozco perfectamente Fabiola

–No quiero que te lastime.. – Guardé silencio

–No lo hará Faby ella no es esa clase personas –Dijo tranquila

–Solo cuidado no quiero que salgas lastimada.

–No pasará, tranquila – sonrió feliz –y dime hay algo que quieras contarme?

Regresé a mi asiento y me dejé caer poniendo mis manos en mi rostro tratando de contener la sonrisa que me había causado recordar a Melissa.

–Le gusto –Dije por fin –Me lo dijo!

–Vaya!! Se había tardado mucho – habló entusiasmada y corrió a abrazarme –Me alegro Faby espero que por fin puedas conseguir esa paz que tanto necesitas y que ella te da

–Gracias Dany, te amo no sé qué hubiera Sido de mi vida sin ustedes –Le dije sinceramente.

Después de aquella plática cada quien regresó a su trabajo.

Pasó el resto de la tarde sin ninguna novedad, los chicos y yo nos fuimos a tomar unas cervezas al pequeño bar que quedaba cerca de nuestro lugar de trabajo, era viernes y queríamos relajarnos un poco.

–Estos días trabajando con ustedes han sido increíbles me encanta que estén aquí –le dije a los dos chicos frente a mi

–Vaya eso es lo mismo que nos decías a nosotros –Dijeron a mis espaldas y rápidamente rodearon la mesa.

Gonzalo, Elisa, Luis y Estela me miraban fijamente y después a los chicos que parecían no entender nada.

–Chicos.. –Dije sin saber que más decir.

–Es bueno volver a verte Fabiola –Dijo Luis con una sonrisa

–No nos presentas a tus amigos?? –dijo Elisa mirando a Pedro de una manera rara y rápidamente la miré mal.

–Ellos son Pedro y Daniela mis mejores amigos –Dije mirando a Estela quien se encontraba sin decir palabra –chicos ellos son Gonzalo, Luis y Elisa unos viejos amigos...

–Bueno al menos nos sigues considerando como amigos –Dijo Elisa molesta

–Elisa–Dijo Estela

–Me sorprende verte con ellos Estela – hablé sin importarme las palabras de Elisa..

–Somos amigos de toda la vida y prometí que no me alejaría pasara lo que pasara –Dijo seria

–Algo que tú nunca has hecho siempre sales corriendo –Dijo Elisa reflejando todo su coraje en sus palabras.

–Basta Elisa si quieres hablar y reclamar algo solo dímelo que quieres. –Dije enojada

–Fabiola, creo que no es el momento mejor nos vamos – Contestó Estela al verme ya muy enojada.

Elisa se dió la vuelta no sin antes ver de mala manera a los chicos y antes de irse dijo algunas palabras más.

–No se emocionen chicos los va a terminar abandonando –Les dijo a Pedro y Daniela quienes solo se miraban entre sí. –Siempre lo hace.

Quise caminar hacia Elisa pero Estela me lo impidió y se fueron detrás de ella.

Cubrí mi cara con frustración y lo que parecía buen día ya no lo era y me sentía triste al saber que los chicos también sufrieron con mi partida.

–Tranquila –Dijo Daniela tomando mi mano –Tu te fuiste por tu bien Faby, y por más duro que suene... Los demás no te deben importar cuando tú vida y tu salud mental estaban en juego.

–Siempre he Sido una cobarde chicos –Dije limpiando una lágrima. –siempre he Sido egoísta

–Quien no lo ha Sido? –Pregunto Pedro – ellos son los egoístas al obligarte a que te quedes cuando sabian que estar aquí te hacía daño, cuando sabían que no estabas bien y es lo que necesitas.

–Ellos solo ven su dolor Fabiola y el tuyo les importa una mierda solo porque los "abandonaste" –hablo Dany.

Para ese entonces mis lágrimas caían sin control.

–Todos sentimos miedo Faby –Dijo Pedro –Y todos tenemos derecho de escapar alguna vez.

Después de esa plática decidimos irnos al departamento con algunas cervezas, pasamos mucho tiempo platicado en el balcón del nuestro hogar, ellos sabían que el encuentro con los chicos me habían traído recuerdos del pasado que yo tanto quería borrar.

–Deja de pensar en eso guapa –Dijo Dany sentándose a mi lado y abrazándome

–Esque no se porque siento que todo se puede salir de control en cualquier momento, a veces siento que mi pasado me va a alcanzar un día y no me va a volver dejar salir...

–Te alcanzará si tú lo quieres y lo dejas Faby – Guardó silencio. – Quieres regresar a lo de antes? –Pregunto seriamente.

–Dios! No!! –Dije rápidamente – No quiero.. yo me siento muy bien al lado de ustedes dos y no quiero alejarme o perderlos, mi vida va por un buen camino –dije sonriendo al recordar a Melissa.

–Entonces olvídate de ese pasado! Déjalo atrás y deja que la vida te sorprenda mi Faby.

–Te amo Daniela no sabes lo agradecida que estoy con Dios por tenerte a mi lado.

–Yo te amo también Faby.

Platicamos un largo rato y pasando las 3 AM cada quien se fue a su recamara. Cuando entré a mi cuarto me dejé caer en la cama y caí en un profundo sueño.

A la mañana siguiente me despertó mi teléfono que sonaba insistentemente y  lo contesté sin ver de quién se trataba.

Llamada:

–Diga?..

–Estabas dormida floja!!! –Dijo riendo Melissa

–Si.. lo siento Mely, me quedé dormida –conteste riendo

–Larga noche? –Pregunto con doble sentido

–Si.. pero no como tú crees –Rei triste

–Ok.. que te parece si nos vemos y me platicas que fue lo que te hizo pasar una mala noche –Dijo con una voz tierna

–Me encanta la idea – Contesté felíz –paso por ti en dos horas.

–Claro! Te paso mi ubicación en un mensaje.

–Vale..

Colgamos la llamada y a los segundos me llegó la ubicación a mi celular y corrí a ducharme muy rápido, cuando estuve lista salí a la sala y estaban mis dos chicos sentados en el sofá y al verme arreglada tan temprano se sorprendieron

–A donde tan peinada –Dijo Pedro en forma de burla.

–Hasta la pregunta ofende! –Dijo Dany –es obvio que va con su noviesita Melissa o no es así mi querida Fabiola??

–Estas en lo correcto Danielita –Dije riendo al ver la cara de malestar de Dany, aún no confiaba mucho en Melissa y le seguía teniendo algo de coraje.

Después de unas cuantas bromas de mal gusto por parte de los chicos me fui directamente a casa de Melissa y al llegar salió en cuestión de minutos.

Al subir al coche me dió un beso que me dejó completamente en otro mundo, se sonrojó al ver mi cara de idiota que la veía fijamente.

–Me encantas –Dije acercándola nuevamente a mi y besando sus labios otra vez.

Nos separamos cuando el aire nos hizo falta, la miré a los ojos y seguían con ese brillo que tanto me encantaba. Ese brillo que solo yo causaba.

–A donde quieres ir preciosa? –Pregunte

–Vamos a comer algo muero de hambre! –Dijo alegre

–Claro!

Manejé disfrutando el silencio que se había formado mientras acariciaba su mano que estaba unida con la mía.

Llegamos al restaurante y bajé rápidamente para abrir su puerta y al verla estaba totalmente sonrojada al notar que la gente que pasaba por ahí miraba descaradamente el gesto que había a tenido con Melissa de abrir la puerta.

Ignorando a toda esa gente le sonreí a Melissa quien se veía algo nerviosa, aún no estaba lista para las demostraciones de afecto en público y la entendía perfectamente y me mantuve a una distancia prudente.

–Perdón –Dijo agachando la cabeza cuando nos sentamos en la mesa.

–No tengo nada de que perdonarte Mely, entiendo que esto es un proceso por el que estás pasando guapa –Sonrei –todo está perfecto.. cuando tu te sientas lista ese será el momento.

–Gracias Fabiola –Sonrio ampliamente –Me encantas, eres increíblemente sexy y me muero por comerte a besos ahora mismo.

Solté una leve carcajada y la miré fijamente, yo estaba en la misma situación moría por besarla y hacerla gemir mi nombre en ese momento.

–Creo que eso lo podemos dejar para el postre no crees? –Pregunte

–Me parece perfecto

Ordenamos la comida y platicamos de diferentes temas mientras comíamos, era una de las cosas que mas me encantaba, con ella siempre había tema de conversación y no me aburría ni una sola palabra de lo que decía.

Cuando terminamos de comer, Melissa se levantó al baño y yo me levanté dos minutos después siguiendola.

Cuando entré al baño dos chicas salían platicando animadamente y suspiré de alivio al ver el baño completamente solo, busqué el cubículo en el que Melissa se encontraba y lo abrí de golpe cuando Melissa estaba apunto de salir de ahí, entré con ella y cerré la puerta de aquél pequeño lugar y miré con deseo a Melissa quien me miraba de igual manera, de un momento a otro se lanzó a mis labios y me besó con desesperación lo cual obviamente respondí de la misma manera.

Los besos subieron de tono y todo se estaba saliendo de control, me exitaba la manera que Melissa me besaba, y no pude evitar meter mis manos por debajo de su blusa y masajear sus pechos mientras seguía besándola con la misma intensidad, gemía levemente en mi boca lo que cada vez me hacía querer mas.

Aproveché un descuido y desabroché su pantalón y metí rápidamente mi mano pasando mis dedos por su intimidad que me demostraba lo exitada que estaba.

–Me encanta hacer esto –Dije en su oído mientras mis dedos jugaban con su clítoris y ella evitaba no gemir mordiendo sus labios.

–Te aprovechas –Dijo con mucha dificultad

–No mi amor claro que no –Mordi su labio y metí dos de mis dedos en ella haciendo que soltará un gritó que ahogué con mis labios. –Te encanta a ti también no lo niegues.

Los gemidos de Melissa inundaban el baño y poco me importó porque aceleré mis movimientos a un nivel en que los gemidos de mi chica eran completamente incontenibles.

–Nos van a escuchar –Dijo en mi oído

–No me importa.. solo dejate llevar

mis movimientos eran demasiado rápidos y sentía que el orgasmo de Melissa estaba cerca de llegar y no me detuve hasta que un grito me indicó que había a logrado mi objetivo, se abrazó a mi tratando de regular nuestra respiración porque las dos estábamos completamente agitadas.

–Me encantas Melissa –Dije pegando mi frente a la de ella

Me besó y yo le correspondí pero fue un beso más tranquilo más sincero y que expresaba lo que estábamos sintiendo poco a poco.

Salimos de ahí un poco aliviadas al ver el baño completamente solo, pero ese alivio duró muy poco al salir  del baño y ver que mucha gente nos miraba descaradamente, entre risas llegamos al coche sabía que alguien había entrado al baño y escuchó todo lo que había pasado en ese baño.

Una vez adentro del coche nos reímos a carcajadas por la locutora que acabábamos de cometer.

–Les dimos buen espectáculo eh! –Dije encendiendo el coche.

–Me agarraste de sorpresa Fabiola –Se rió –De ahora en adelante tendré más cuidado!

–No lo creo –dije viéndola de reojo –Te encanta que te haga mía – hablé con una sonrisa de autosuficiencia.

–Idiota.– habló fingiendo molestia

–Idiota y todo pero así me quieres!! –Dije.

–Sin duda alguna –dijo suspirando –te quiero más de lo que pensaba.