De princesa a esclava de la BBC - III
Bueno .., iría a la hora acordada a Le QueQum, se lo dejaría encima de la mesa, le saludaría (sin sentarme) porque Martin podía ser muy persuasivo, y me iría con un simple Gracias, pero no! A sido un placer conocerte.... ., adios
El viernes salí del trabajo y pase por mi apartamento para cambiarme. La noche anterior, había dormido fatal, soñé cosas extrañas y no descansé, además, volver a ver a Martin, me incomodaba por una parte, y lo deseaba para aclarar la situación.
Estuve recordando mentalmente todas las cosas que me había dicho sobre lo que opinaba de mi vida actual y sus anhelos para que tuviésemos una relación de infidelidad, al margen de mi matrimonio, de Amo – esclava.
Me puse otro vestido largo de noche, para darle más desasosiego, que rechazase sus propuestas.
Nuevamente con una chaqueta corta encima del vestido, sin sujetador para que viese pero como perdía esas tetas, y unos elegantes zapatos de tacon.
El taxi me dejó en la puerta del “Le QueQum Bar”, dentro sonaba como era habitual, jazz en vivo.
Abrí la puerta y entré. En una mesa Martin, escuchaba la banda que estaba tocando, mientras se tomaba una copa.
Al notar que alguien entraba, miró y vio que era yo ……., una sonrisa de aprobación y satisfacción iluminó su cara al verme.
Crucé la parte de la Sala que me separaba de su mesa. El inmediatamente se levantó para recibirme, como si nada hubiese pasado. Yo con cara sería me dirigí directamente hacia el, que se movió para colocarme una silla.
Yo, dispuesta a mostrarme fría y segura, le dije que no era necesario, que no me iba a quedar. Me miró con ojos de sorpresa y me dijo “Becka, por favor, todavía estás molesta conmigo?” – añadiendo - “Vamos mujer siéntate y hablemos, y me cuentas porqué estás tan molesta conmigo, porque yo he sido sincero contigo y te respeto como mujer y admiro lo atractiva y segura que eres”
Ofreciéndome de nuevo la silla, me rogo “Por favor Becka siéntate y deshagamos cualquier mal entendido que haya habido entre tu y yo” …., dejé la cajita que me había mandado sobre la mesa y le dije - “Esto no es un malentendido” señalando su obsequio.
Entonces el respondió – “Preciosa amiga Becka …., hubieses venido, si no hubiese sido por devolverme el regalo? “No verdad? …., era la forma que tenía de verte de nuevo.” “Te he echado mucho de menos, durante esta semana”
“No seas adulador, que ya conozco tus trucos” – le dije expeditiva.
¿Te ha gustado, lo que has encontrado en la caja, cariño, di la verdad?” – no podía decirle que si, así que mi respuesta fue “!No me ha gustado que me mandases esas cosas!”
Respondiendo el – “Becka cariño, te he pedido que fueses sincera” “Dime la verdad” no pasa nada somos dos personas adultas”
Respiré hondo, por lo pesado e insistente que era, y porque el me gustaba, si no me hubiese hecho esa propuesta….., después de un breve silencio por mi parte, le dije
“Un regalo muy excitante, de acuerdo, pero te dije que no …., o al menos creí habértelo dejado claro cuando nos despedimos”
El respondió – “No esperaba otra respuesta por tu parte, era lógica tu sorpresa y hasta quizás mi descarado atrevimiento al proponerte ese juego” – añadiendo – “Me hubiese sorprendido mucho más que me hubieses dicho que si” “tu reacción de enfado …., la esperaba …… pero a mi edad, tengo que ser directo y armándome de valor, te dije con el corazón, lo que realmente deseaba que fueses para mi”
“Discúlpame si te ofendí en ese momento, pero era un buen momento, tras la maravillosa velada y noche que pasamos juntos”…….,
Yo le escuchaba tratando de aparentar que no ponía atención a sus palabras y me interesaba más el cuarteto que tocaba.
“Que mentiras dije, de todo cuanto te dije, tratando de que me entendieses, y sabiendo que mereces sentirte valorada como persona con un gran atractivo y también como mujer”
“Bueno” – reconocí – “No estuviste muy desencaminado en tu análisis de mi situación de pareja” “pero….., tu propuesta es una locura!”
“Antes de conocer a Bernhard, hubieses considerado que era una ¡locura! Pero la decadencia y la monotonía que ahora tienes junto a el, aunque le ames, pensé que habrías querido al menos saber más, sobre lo que te estaba proponiendo ….. porque era la forma de tener esas dos vidas al mismo tiempo, la de esposa fiel, y tu anterior de traviesa y divertida mujer guapa!”
Ya, entiendo . contesté yo, “¿ Pero es por mi interés y felicidad, o por el tuyo que te has encaprichado de mi Martin ¡”
“Sinceramente” – respondió el – “Tu sensualidad, tu irrefrenable deseo de gozar del sexo” ….., “ y buena prueba de ellos, es lo excitante y maravilloso que fue follar en el piso contra el cristal, con absoluto deseo por parte de los dos” …., y si me invitaste a subir …., no me negarás que yo te atraigo”
La verdad era que - “ Es verdad, eres un seductor que hace que a una se le aflojen las bragas, y si, sabes que deseaba follar con vicio y pasión contigo” …., que me dite mucho placer y fui muy feliz ……, hasta que me propusiste ser tu esclava ¡”
“Eso me descolocó totalmente, no esperaba una propuesta así!” - a lo que el preguntó - “Al margen de tu enfado al oír mi propuesta” ….., “ podrías jurarme que la posibilidad de compartir ese juego no te hizo excitar y que te humedeciesen, después de que te pasó, la rabieta!”
Tuve que reconocerle a Martin, que si me había excitado pensar en probar ese juego, pero, no me sentía segura, solo sorprendida …., y desorientada”
Martin me cogió de la mano, y por primera vez, no se la retiré. “Hablemos de en que consistiría nuestro juego y después, te das tu tiempo, yo no me molesto si me dices de nuevo que No, pero escucha mi propuesta hasta el final …, para saber si deseas probar este tipo de relación tan excitante entre tu y yo”
De acuerdo, te escucho, dime, le concedí.
Empecemos por lo más fácil, me dijo – “Disponibilidad de tiempo para ser mi esclava” “Cuando tu puedas y desees, si que eso interfiera en tu vida social” …., pero si debemos establecer unos mínimos, unas pautas regulares, que de verdad te hagan sentir un “poco” esclava de mi, con ciertas obligaciones consensuadas”
“Cuando puedes pertenecerme como esclava? …., los fines de semana en que no te marches a Amsterdam, tenemos desde el viernes, hasta que el lunes regreses al trabajo, para poder serlo” y durante la semana “si aceptas, las noches en que te llame, estar dispuesta cuando llegue a tu apartamento, o venir a mi casa, en cuanto te lo ordene”
“No es tan difícil”
Yo le respondí – “Imagina por un momento, que deseo ser tu esclava durante ese tiempo en que me es posible cumplir y acudir a tu llamada”
“He leído las antiguas normas y son ¡Muy exigentes! Algunas parecen estar escritas hace siglos!
A eso el me respondió – “Ese documento, es muy antiguo, pero válido y vigente en la actualidad, para la hembra blanca que desee ser un esclava total de su dueño BBC” …, “pero son normas, que podemos pactar, y tu aceptar las que creas que eres capaz de cumplir, porque las que aceptes, para ser una esclava, debes aceptarlas sin escusas, al contrario, con gusto por cumplirlas y ser cada día que pase, una esclava mejor”
“Si te deseo como esclava, es porque me gustas como compañera, no casados, tu ya lo estás y eso del matrimonio, no funciona …! Pero si como una esclava de mi propiedad, sobre la que yo decidiré siempre, que deseo de ti y que espero por tu parte”
“En todo caso, en el instante en que la situación, te oprima o deje de gustarte, quedas liberada de cualquier obligación hacia mi, y regresas a tu vida cotidiana”
Bueno – dije yo – “discutamos sobre las 12 normas” …, solo por ver si coincidimos en alguna” le dije tratando de aparentar que no me interesaba el seductor juego.
Empezamos con los puntos y me los volvió a leer. El primero como algunos recordaréis, hacía referencia a esto 1— Los hombres Black tienen el derecho absoluto e inalienable a tener relaciones sexuales con usted. Usted tiene el culo de un ser humano a la baja, pero es su deber natural satisfacer sexualmente al hombre Black en cualquier forma posible. Es su deber el perfeccionar el arte de la felación, y practicar el control muscular anal para complacer el pene del hombre Black. Debe ser su PRINCIPAL propósito en la vida para servir sexualmente al hombre Black Superior.
El me los fue aclarando y puntualizando los aspectos importantes. “Como mi esclava, solo puedes ser usada por hombres negros y tu deber es satisfacerles en lo que te demanden, aunque siempre será si yo te ordeno que te ofrezcas a otro u otros machos negros.
El segundo es de solo relativa importancia, puedes tener relaciones sexuales con otras hembras blancas, ¡siempre que tu Amo negro, no te necesite!
La tercera si es importante. “ Los hombres negros, tienen el derecho de follarte a pelo, nunca usarán condón y eyacularán dentro de ti sin restricciones. Para eso, todos, tanto tu como tu Amo, o a los que yo te ofrezca, habrán pasado revisiones médicas para estar seguros de están sanos.
El preciado semen de un Macho Superior como el negro, en ningún casi debe desperdiciarse ni su semilla y si no se corre dentro de ti, lo hará en tu boca, para que te tragues su preciada miel.
El punto 4, te advierte, de que proporcionar sexo oral, a cualquier BBC que te lo demande, es una obligación para ti, aunque yo no le haya dado mi permiso, al ver que eres una esclava de la BBC, ese derecho como superior, le queda concedido.
El punto 5, lo podemos obviar, porque en tu caso, no tienes ni hijos ni hijas
Vamos con el punto 6, es solo una aclaración del punto 1, advirtiendo que aceptar el sexo ANAL es Indispensable para cualquier esclava blanca, y que debes estar dispuesta a ofrecérselo a cualquier BBC, que yo decida, y del que gozarás como el mejor regalo que puede hacerte un macho Negro, llenar tu culo de puta blanca con su abundante semen lleno con sus superiores semillas, para cualquier esclava, será siempre un honor, que el macho Negro, llene a ella su culo de cum caliente.
Pero como has podido leer, en Punto-8, se refiere a ti, que aunque tu misión al nacer como hembra blanca, es para dar placer al Macho Negro Superior, no se permitirá que este te maltrate, abuse o te cause daño alguno.
El 9, solo te indica que tu estatus está por debajo de las mujeres Negras, solo aclara ese punto.
El 10º - Ese apartado, bellísima y sensual Becka, no es problema para ti, ya viste que hace referencia a que debes vestir lo más sexy posible, para mostrarte ante los hombres negros, como una hembra receptiva, no llevar nunca sujetador para que tus tetas se balanceen sensualmente, ni llevar bragas o tanga para que puedas exhibir tu coño y tu culo si es necesario, y para facilitar que los BBC, puedas acariciar tu coño y culo por debajo de la mini falda o ordenarte que se los muestres.
En cuanto a las piernas, o desnudas si hace calor, o con medias autoajustables hasta los muslos, y por supuesto, son imprescindible los zapatos de tacón de entre 6” y 7,8” pulgadas como mínimo.
El 11º - Hace referencia a que no puedes ver películas porno, donde el macho sea blanco, solo debes serlas si el macho o los machos son negros.
Y finalmente el 12º, hace referencia a algo que tu ya sabes, el Pene del HOMBRE NEGRO es un atributo para ser adorado por todas las esclavas blancas, porque es el mejor y único que desean.
Cuando Martin terminó el resumen de lo que era “Obligatorio Cumplir” le miré con cara descarada y le dije “! Solo eso ¡”
A lo que Martin respondió – “Puede que te parezca fácil, pero debes CUMPLIR estrictamente lo estipulado como normas de SUMA IMPORTANCIA las que te acabo de explicar, y es INADMISIBLE, si deseas ser un esclava de la BBC, que no las cumplas, porque dejarías de serlo”
Deja que te diga una cosa Becka, mi preciosa amiga; sabes que tengo mucha experiencia en todo este tipo de cosas, y te recomiendo (solo te recomiendo) que al menos, hagas la prueba y veas si te gusta ese rol de esclava de la BBC……,
Te aseguro que una gran hembra como tu, no deseará otra cosa, que seguir siendo mi esclava o de otro BBC más joven.
Yo le respondí, “Pareces muy seguro de eso Martin!”
“Mira Becka, la otra noche en tu apartamento, pude comprobar, lo ardiente, lo gran hembra que eres, y cuanto te gusta follar, cosas que haces todas de maravilla, por eso, al día siguiente, decidí que debía proponerte ser “Mi esclava”
Le miré y no dije nada, pero la follada que me había dado en mi apartamento, todavía la recordaba como una de las mejores de mi vida.
Bueno, ahora para relajarnos de tanta charla, “Que te parece si bailamos un poco”
Me había relajado y sin el enfado inicial de mi llegada, acepté.
Junto a varias parejas que bailaban, Martin y yo, empezamos a bailar y de nuevo aquellas manos tan hábiles, se deslizaban por encima de mi vestido, desde mi nuca, hasta mi culo, sin rubor, me dejaba hacer, apoyando mis tetas con los pezones ya duros contra su fuerte pecho, y mis brazos enlazados a su espalda.
Martin deslizó una de sus manos hasta la altura de mi coño, mientras con la otra seguía apretándome por el culo contra el y su cada vez más abultada polla. Le miré con ojos de vicio, dándole luz verde a seguir adelante.
Con sus dedos, bailando apretados, fue subiendo el borde delantero de mi vestido que me llegaba a medio muslo, hasta que sentí como sus dedos entraban en contacto con mi húmedo y excitado coño. Me miró y se sonrió, y yo me abandone en sus brazos.
Mientras seguíamos bailando, nos habíamos ido desplazando hasta una de las esquinas del “Le QueQum” y allí empezó a explorar ya decididamente, con su mano derecha, los húmedos, calientes y carnosos labios de mi coño, de hembra encelada por aquel terrible seductor.
El lugar era perfecto y la penumbra y el resto de parejas que bailaban, nos proporcionaba la necesaria intimidad, dentro de cierto riesgo de que alguna otra pareja, estaba segura de que se daba cuenta de que algo ocurría debajo de mi falda.
Acercó su cabeza a mi oído, y me dijo. “Quiero que te corras en mis brazos Becka, siente mis dedos follándote el coño, mi perra” …..
Primero con dos dedos, y los labios de mi coño abiertos ya por su hábil mano, me los estuvo deslizando desde la base de mi ano, hasta mi clítoris con un masaje que iba profundizando y que me estaba matando de placer, hasta que con sus dos dedos centrales, me penetró el coño, mientras yo para no gemir de placer, mordía su chaqueta, y su dedo índice y meñique, seguían acariciando mis labios interiores, sus otros dos dedos, empezaron a follarme con deseo.
Martín sentía en la palma de su mano, como mi coño se estremecía de placer, mientras me seguía follando mi empapado coño bajo la falda.
Casi no podía seguir bailando, del placer que aquel atrevido seductor, me estaba follando entre la gente, sin que casi nadie se percatara de lo que me estaba haciendo.
Sus dedos penetrándome, me estaban haciendo llegar al orgasmo, y no pude evitar unos apagados gemidos, cuando empezó a llegarme el orgasmo ¡Uuuummm… ,!Uuuuumm……! no pude evitar acallar, mientras la pareja que estaba más cerca nuestro, se miraron entre ellos, al darse cuenta de que mi acompañante, me estaba haciendo correr……, ¡dios …!
Cuando Martin sintió mis primeros espasmos, aprovechando que yo estada de espaldas a la pared, termino por meter su mano en mi desnudo culo, alcanzando mi ano que se estremecía y en ese momento, me hundió su dedo índice dentro de mi culo, mientras con los otros dos en mi coño, saboreaba mi fuerte orgasmo.
Yo hundí definitivamente mi cara contra su pecho, para esconder mi cara desencajada por el placer, que durante unos largos segundos, estremeció todo mi cuerpo.
Cuando sintió que mi orgasmo había terminado, retiró sus dedos de mi culo y coño, y como si nada estuviese ocurriendo entre nosotros, se metió los dos dedos empapados con mis jugos en la boca, chupándolos y saboreando el jugos de mi corrida.
Bailamos unos segundos más, hasta que terminó la pieza, y nos fuimos a sentar de nuevo, momento en que aproveche al ir detrás de el de la mano, para darle un fuerte pellizco en el culo.
Nos sentamos y yo apuré el whisky que quedaba en mi vaso, para reponerme de la flojera que me había producido ese improvisado y atrevido orgasmo.
El me miro a los ojos y con una amplia sonrisa, me dijo – “Aun dudas!” …., “mi ardiente hembra, de que tienes que ser mi hembra, mi esclava sexual”?
Me quedé mirándole como si le regañase y le dije “No Martin….!, y tras un corto silencio, le dije “ Deseo ser tu esclava sexual” ……”deseo ser tuya!”…….
Aquel gran seductor de más de seis pies de alto, me había seducido tan sutilmente, que estaba dispuesta a todo, para no dejar de recibir el inmenso placer que era capaz de ofrecerme y que nunca antes, ningún otro hombre, había logrado con su intensidad y lujuria…..