De nuevo mis alumnos vuelven a buscarme VI y VII

Esperanza continúa siendo follada por Ibra, con el fin de quedarla preñada. Pasado una semana para tener mayor seguridad de que queda preñada de un negro, Ibra la prostituye durante las siguientes semanas hasta que llegue la fecha en que la debe bajar de nuevo la regla. Mientras tanto, Ignacio sigue saliendo de fiesta con el marido de Esperanza, para distraerle y no descubra nada de lo que esta pasando con su mujer. Aprovechan, Ignacio y los otros chicos, en hacer ciertos videos que le comprometan al marido de Esperanza, por si fuera necesario utilizarlos. En esta entrega como veis van juntos dos capítulos, en los que se va desarrollando el resto de la historia hasta el día de hoy.

De nuevo mis alumnos vuelven a buscarme VI y VII (final)

Recordareis que terminamos el relato anterior, cuando Esperanza regresa a casa tras haberse entregado por primera vez durante más de cinco horas a Ibra, el negro. Cuando llega a casa, a las 12,45 de la madrugada y su marido aún no ha regresado, tras cenar, se toma un analgésico para calmar las molestias, que tantas horas de follada con su amante negro, la han producido en su sexo y en sus pechos. Tras esto se acuesta sin esperar a su marido que se encuentra de juerga con Ignacio (su ex alumno) y sus amigos. A continuación, puestos ya en línea donde lo dejamos en el relato anterior, continuamos con la historia.

Al día siguiente me levanté y mi marido dormía, procuré no hacer ruido, desayuné me vestí y cogí cuatro juegos de ropa interior para llevármelas de repuesto. Cuando salí de casa mi marido seguía durmiendo, se conoce que la noche con Ignacio y los chicos había sido movidita.

A media mañana me llamó Ignacio que estaba en la puerta del colegio, que cuando acabara esa clase y aprovechando el tiempo que tengo entre clase y clase que saliera que tenía que darme algo.

Cuando terminé esa clase salí a la puerta del colegio y le reñí por haberse presentado allí, por lo que pudieran pensar de verme y hablar en la puerta del colegio con uno de mis ex alumnos. Y él entonces, sin siquiera molestarse ni hacer ninguna referencia a mí comentario, me dijo:

“¿Tienes clase a continuación o tienes tiempo para hablar un rato?, pues tengo que darte algo que puede interesarte y además tengo muchas ganas de ti”.

Yo le contesto:

“La próxima hora la tengo libre, pues no tengo clase hasta la siguiente hora. Pero aquí no podemos estar juntos, pues qué pensarían de mí y que dirían si me ven contigo. Además, deseando, como dices, de estar conmigo y me supongo que no será en plan de ex alumno y profesora, para recordar tiempos pasados ¿no?”.

Él me contesta:

“Pues entonces ven, vamos a otro sitio, donde estaremos más tranquilos que aquí y aprovechamos esta hora y después te doy lo que te traigo, que ya verás que merece la pena”

Yo le indiqué que fuera él delante que yo le seguiría para no levantar sospechas. Le seguí como a unos 10 metros de distancia y vi que se encaminaba hacia el parquin donde yo tengo aparcado el coche. Cuando llegue a la entrada del parquin Ignacio me estaba esperando. Antes de bajar las escaleras del mismo, me cogió y abrazándome me dio un beso en toda mi boca, cogiéndome desprevenida. A la vez que me besaba llevó una de sus manos bajo mi falda y comenzó a acariciar mi sexo por encima de mis braguitas, hasta que consiguió excitarme y que mi coñito comenzará a expulsar flujos y líquidos vaginales originados por el placer que sentía con sus caricias. Yo muy a pesar mío, pues me estaba gustando y excitando lo que me estaba haciendo, le separé de mí y le dije:

“Ignacio, no seas loco, no ves que estamos muy cerca del colegio y puede vernos cualquiera que me conozca. Vamos para abajo y buscamos algún rincón donde podamos ocultarnos y evitar que nos puedan ver. Por favor, si yo tengo tantas ganas como tú, pues me has excitado muchísimo con esa caricia que acabas de hacerme en mi coñito por encima de mis braguitas”.

Él me coge por la cintura y dándome de nuevo otro beso en la cara, nos dirigimos para la planta del parquin hacía donde yo tengo mi coche aparcado. Al pasar delante de la caseta del guarda, Ignacio, lleva una de sus manos a mi camisa y con toda su cara delante del guarda me mete esa mano bajo mi blusa y comienza a tocarme mis pechos. Yo le doy una palmada en ella y le digo:

“Saca esa mano de ahí, ¿no ves como nos mira el guarda? Y él me conoce, pues dejo aquí todos los días el coche”.

Y el no solo no saca esa mano, sino que con la otra la lleva de nuevo bajo mi falda y esta vez apartando un poco mis bragas comienza con sus dedos a tocarme directamente mi coñito, y le da los buenos días al guarda, y después me pregunta:

“¿Dónde tienes aparcado tú coche?, vamos hacía él, estamos perdiendo unos minutos preciosos.”

Yo trato de ocultar con mis manos la cara, para evitar lo inevitable, pues el guarda con una sonrisa en la cara me dice:

“Adiós señora Esperanza y compañía.”

Yo le digo a Ignacio:

“Que vergüenza, me ha reconocido y con lo cotilla que es seguro que dentro de poco se enterará de esto todos los clientes que entren y con ello todo el barrio. Si es que eres un inconsciente Ignacio y al serlo tú me haces que también lo sea yo, por permitir que me hagas esto en un lugar público, que vergüenza por Dios y ahora que voy hacer, joder”.

Entonces Ignacio me dice:

“No te preocupes, no dirá nada por lo que le interesa, pues si habla se va a arrepentir y posiblemente a parte de perder su trabajo pierda otras cosas, tranquila, vamos para el coche”.

Yo le pregunto:

“Pero por que estas tan seguro que no dirá nada”

Y él me contesta:

“Le hemos estado vigilando durante un tiempo los chicos y yo y hemos obtenido un material muy interesante del guarda y de cosas que hace en su trabajo y no debería hacerlas. Ayer antes de ir a recoger a tú marido, le hice una visita y le entregué un sobre en el que aparte de dinero, iban también unas fotos que le comprometían bastante. Tras ver las fotos y comprobar su contenido, le dije claramente:

“Si sabes lo que te conviene respecto a tú integridad física como a tú relación laboral, es decir arriesgarte a perder tú puesto de trabajo, harás lo que te diga”.

Y él sorprendido por lo que ha visto en las fotos y por lo que le he dicho, me pregunta:

“Que es lo que quieres de mí, o que haga”

Yo le con testo:

“Quiero que te estés calladito (pues me he enterado que te gusta ser todo un cotilla). Mañana a medía mañana vendré aquí con una señora (que tú conoces bien, pues aparca aquí todos los días su coche) lo que me veas hacerla o lo que hacemos, sea lo que sea, nadie podrá saberlo ni enterarse de lo que pase, no te preocupes que no será nada malo ni ilegal. Solo te lo pido por la reputación de la señora y tampoco té atrevas tras pasar esto sacar partido de ello cuando todo haya pasado. Y lo mismo si en otras ocasiones vengo con otras señoras. Si cumples, no te pasará nada y además quizás te ganes alguna que otra propina económica por mi parte, ¿de acuerdo?”.

Tras esto el guardo aceptó el trato con un:

“De acuerdo, lo que tú quieras”

Yo dejándome sobar por él y sonriéndole, le doy un beso en su cara y le digo:

“Estas en todo, ¿verdad?”

No me contesta, me lleva hasta donde tengo el coche, me dice que le abra y antes de meternos dentro de él, me desabrocha mi blusa, me la quita y la tira dentro del coche dejándome la parte superior de mi cuerpo solo cubierto por mi sujetador. A mi me da una vergüenza impresionante, pues el guarda, nos ha seguido a cierta distancia y esta contemplando toda la escena. Pero no es eso lo malo, sino que, a unos diez metros del guarda, veo como entran varios clientes a por sus coches y temo que ellos nos vean en esa situación. Gracias a Dios, antes de que pudieran vernos las personas que habían entrado en el parquin, Ignacio me empuja hacía el interior del coche, por el lado del acompañante. Baja el asiento hasta dejar el respaldo del asiento al mismo nivel que el asiento de atrás. Entró en el coche tirándose sobre mí y volvimos a besarnos nuevamente con pasión desenfrenada y aproveché para agarrar con fuerza su paquete a través de la tela del pantalón. Mi ex alumno gimió con fuerza debido al tratamiento que le di. Le agarré con fuerza de ambas nalgas atrayéndolo hacia mí. Él había llevado sus manos a mi cintura, mientras yo le acariciaba el culo. Entonces él me sacó, fuera de las cazoletas de mi sujetador, mis grandes tetas y después llevo sus manos a mis turgentes y ya duros pechos. Empezó a juguetear con mis pezones, masajeándolos lentamente primero y frotándolos con fuerza después, me dice:

“Cuantas ganas tenía de poder hacer lo que estoy haciendo con tus pechos de nuevo. Ayer noche pude sobar y mamar de otros pechos también grandes y apetitosos, de una madurita que tú conoces y cuando sepas quién es te sorprenderá, pero cuando los estaba disfrutando en vez de pensar que estaba con ella, pensaba que era a ti a la que se los tocaba y comía. Todo esto mientras a ti te estaba follando Ibra, que sé que te dejó bien llena sobre todo de leche tu vagina, ja, ja ,ja…..”

Yo le desabroché lentamente la hebilla del cinturón, solté con rapidez el botón del pantalón, bajé con desesperación la cremallera y busqué dentro de su slip aquello que tanto deseaba desde que me había tocado mi coñito por encima de mis bragas en la entrada del parquin. Cuando tomé entre mis manos aquella polla palpitante, grande y dura que tantas veces me había entrado en mi vagina (unas veces consentidas y las más forzada), me entraron unas ganas locas de ser de nuevo taladrada una vez más con ella, y más pensando en el poco tiempo que disponíamos para hacerlo. Él no pudo evitar emitir, al sentir mis manos sobre él, un gemido de placer. Yo no quería que se diera rápidamente cuenta de mis ganas porque me follara. Entonces con una gran fuerza de voluntad, debido a las ganas de tenerlo dentro de mi vagina, y para excitarlo a él un poco más me incorporé un poco mi cuerpo hasta llegar con mi boca a la puntita de su polla y me la introduje en ella. Alcé mi vista hacía él, mirándole a sus ojos y se la comencé a mamar con fuerza, el suspira y sonriéndome me dice:

“Tranquila profe, que es todo tuyo, disfrútalo, como espero que tú me hagas disfrutar a mí “.

Yo sacándome de mi boca, su instrumento un momento, le digo:

“Me encanta la polla que tienes. Es grande y dura como me gustan. Si mi marido me viera hacer esto contigo, creyendo que eres su amigo, se moría del susto”.

Él vio al guarda pegado al coche y haciéndole un gesto, le invitó a que entrara y me cogiera y sobara mis pechos. Luego cogiendo su móvil comenzó a sacar fotos en las que se podía ver sin ningún lugar a duda la cara del guarda y se podía reconocer perfectamente, en la escena de la grabación, lo que el guarda estaba haciendo en esos momentos dentro de ese parquin y encima en sus horas de trabajo. El hombre no se dio cuenta de ese detalle y comenzó a comerme mis pechos maravillosamente, excitándome con sus chupadas aún más de lo que estaba. Ignacio entonces sin sacar su polla de mi boca y abierto de piernas (para poder el guarda seguir comiéndome mis grandes pechos) se colocó en posición del 69 y comenzó a comerme mi coño y clítoris con todas sus ganas. Cuando yo estaba a punto de alcanzar mi orgasmo le vino a él corriéndose copiosamente en mi boca. Yo entonces no pudiendo más le pedía que me follara, pero él por su excitación y con su orgasmo no deja de suspira y hablar, hasta que termina de correrse dentro de mí boca, entonces yo impaciente y muy excitada le digo:

“Cállate y deja de tonterías y fóllame de una puñetera vez, me has puesto a cien y necesito sentirte dentro de mí, por favor fóllame, mira como estoy…de excitada, lo necesito, tú ya has disfrutado, sé que te recuperaras rápido de tu corrida, por favor fóllame, yaaaaaaaa…..cabróóónnnnnn”.

Él entonces deja de tocarme y sobar mi cuerpo, pero el guarda sigue con mis pechos comiéndoselos como un loco, ha logrado ponérmelos duros mis pezones y mis pechos como una piedra. Entonces Ignacio sin parar al guarda en su faena me dice:

“Bueno esto era lo que yo quería conseguir hoy de ti, excitarte y ponerte muy caliente, pero no voy a follarte, quiero que estés muy excitada y con muchas ganas y que estas se te vayan aumentando para que esta tarde cuando estés con Ibra te entregues de nuevo a él dándole todo, para que te folle tantas veces y te llene de nuevo ese coño de puta que tienes con tanta o más de su leche que la que te depositó ayer. Venga coge tu ropa y vuelve a vestirte, por hoy nuestro encuentro sexual ha terminado, y aún te quedan más de veinte minutos para que comience tu siguiente clase y ese tiempo puedes aprovecharle par comenzar a ver el regalo que te he traído”.

Y dirigiéndose al guarda le dice:

“Y tú deja ya de comerla las tetas y si salte de una vez del coche. Si sabes lo que te conviene y deseas tener alguna de estas aventuras con las maduritas que yo traiga de vez en cuando, ya sabes lo que tienes que hacer: estar cayado y no decir de esto nada a nadie, ni a tus más íntimos.”

Él hombre le hace caso y deja mis pechos y se sale del coche y se dirige hacía la cabina de entrada del parquin.

Yo le digo entonces a Ignacio:

“Por favor, no me dejes así, lo necesito, necesito que me folles, cabrón…siiiiiii eso eres lo que eres un cabrón por dejarme asíiiiii…….”

Él se sale del coche, dejándome sola dentro, yo comienzo a colocarme de nuevo el sujetador y a ponerme la blusa, me la abrocho y me la coloco adecuadamente y después salgo del coche. Él comienza andar hacía la salida y yo le sigo y al pasar delante del guarda le sonríe y le saluda con la mano. Ya en la calle se despide y entonces dándome un beso en la boca me entrega un DWD y me dice:

“No te preocupes, que nadie va a pensar nada porque uno de tus ex alumnos del año pasado haya venido a saludarte. Mira ese DWD que te he entregado, ahí ves lo que tu marido y nosotros estuvimos haciendo anoche. Puede interesarte, al menos para mí es un material para si las cosas se ponen mal con Pepe (tu marido) para tenerle agarrado por los huevos, yo que tú le guardaría por si alguna vez te hace falta. Y te adelanto que Emilio ya tiene su madurita desde anoche como podrás comprobar, aunque ella aún no lo sabe, lo sabrá esta noche. Espero que tú con Ibra ayer fuera todo bien y si no te preñó que estés en ello o a punto de estarlo ¿no?, ja, ja, ja,…”

Y dándome otro beso, esta vez en la mejilla, se despidió de mí. Yo me dirigí al colegio y me fui directamente al servicio de los profesores, donde encerrándome en una cabina de wáter no pude por menos que aliviar mi excitación, masturbándome.  Luego esperé que fuera la hora de comenzar mi clase y ya en el aula, y tras comenzarla, les puse a mis alumnos, una especie de examen, para tenerlos entretenido y que no me molestaran y de esa forma poder ver el video que me acababa de entregar Ignacio. Encendí el ordenador e introduje el DWD en el mismo y a los pocos minutos aparecieron en la pantalla, los chicos y mi marido estaban con una mujer de espalda a la que trataban todos de tocar, incluido mi marido. Cuando dio la vuelta me quedé muda pues reconocí rápidamente a esa mujer, era la madre de un ex alumno mío del curso pasado, se llamaba Lourdes era una señora bastante respetable y de una reputación de mujer decente, y de una profunda educación cristiana y buena esposa y madre. Está casada con un industrial muy conocido en la zona por lo que está muy bien relacionada y es muy conocida en la ciudad donde vive y es muy respetada y considerada en su círculo de amistades. Lourdes, dispone de un buen capital propio,( a parte de lo que pueda ganar su marido y de lo que este tenga propio suyo), como para poder vivir sin necesidad de depender económicamente de su marido (digo esto por si su marido algún día se enterará de lo que va a ocurrir con ella y los chicos, se separara de ella, aunque espero y me gustaría que eso no ocurra, pero conociendo a los chicos dudo que así sea). Tiene alrededor de unos 45 o 47 años y tiene un cuerpo a pesar de la edad bastante bonito, y bien conservado así vestido se la puede apreciar alguna que otra curva que destaca de su cuerpo. Quizás un poco pasada de peso, pero sin llegar a ser gorda ni obesa, poco más o menos un cuerpo parecido al mío. Como todas las demás mujeres maduritas que estábamos con los chicos (mis ex alumnos) tiene unos pechos más bien grandes, usará una talla 130. Me dio un gran disgusto ver que había sido víctima de mis ex alumnos y me sentí un poco culpable por no haber indagado más para averiguar quién era la mujer tras la que iban los chicos, para haber podido avisarla sobre lo que ellos planeaban hacer con ella. Pero ya es tarde para lamentaciones pues ya han conseguido su propósito y de paso también han conseguido meter a mi marido en el asunto y de esta forma también tenerle cogido por sus huevos para lo que deseen y poder usarlo para chantajearle, si es necesario. En este punto la cámara enfoca a Ignacio que está apartado un poco de los demás y dirigiéndose a mí, en voz baja, me dice:

“Esperanza, esta es la madurita que será a partir de ahora quiera o no la putita y pareja de Emilio. Como ves en la fiesta participa tú marido, el cual no sabe nada de la droga que la hemos hecho beber hace un rato en la bebida (cuando hemos estado tomado algo por los bares de la zona centro de Madrid y que a él también le hemos hecho beber un poquito sin que lo sepa. Estamos en la casa de la finca de los padres de Luis, recuerda que nos dejaron la casa vieja que tenían para que la arregláramos y la usáramos para lo que deseáramos. Si en la que tú también has estado ¿recuerdas? tú la estrenaste, ja, ja, ja.  La hemos traído aquí porque en el piso de Carabanchel estas tú con Ibra y todavía no ha llegado el día, ni la hora de llevar allí a tú marido. Vas a ver cómo nos la follamos todos, nosotros cuatro e incluso tu marido al que le vamos a conceder el honor de que sea él, el que estrene a Lourdes en esta nueva etapa de su vida, es decir amante de Emilio y una puta más del grupo, entre las que tú te encuentras. Espero que te hagas tan amiga de ella como ya eres de la madre de Luis y de Ana Belén y ahora mira cómo, con lo que la hemos echado en las copas, va haciendo todo lo que queremos e incluso (como pasó contigo) es ella misma la que nos lo pide”.

Continúe viendo el video y en efecto ella va accediendo a todo lo que la van pidiendo, se deja tocar, meter manos de uno y de otros, incluso se va quitando ropa y a petición de los chicos y de mi marido se queda completamente desnuda. Y cuando está así los chicos ofrecen a mi marido que sea él el primero en tener sus favores. No sé cómo mi marido accede a ello (quizás por la droga que también a él le han echado en la bebida) pero lo hace y se folla a Lourdes con ganas y placer, sin preservativo y corriéndose dentro de su vagina. A continuación, se la van turnando uno a uno para pasar posteriormente incluso a ser follada por dos chicos a la vez y otro la ofrece su polla para que se la coma. Durante toda la noche se van turnando cada chico y mi marido (mientras aguanta) a ocupar los diferentes agujeros del cuerpo de esta pobre mujer. Y en efecto antes de ser penetrada por primera vez por mi marido, desnudada del todo, y con una calentura y excitación que se aprecia perfectamente en el video y a petición de Emilio, es ella misma la que dice que lo desea hacer y entregarse a ellos. Los chicos hacen el juego de decirla unas cuantas de veces que no y al final es ella misma la que les pide por favor ser follada por todos ellos. Tras acabar el video, me le guarde (pues pensé que quizás Ignacio tuviera razón, por si en un futuro la relación con mi marido se rompe, tener una prueba o algún documento comprometido que al enseñársele tenga que acceder a mis condiciones. Me dio muchísima pena tanto Lourdes, (al verla entregada a ellos, no por su propia voluntad, sino por la droga que la habían suministrado), como yo misma. Me hizo recordar cuando a mí me lo hicieron y las consecuencias que ello ha tenido en mi vida y que seguramente las tenga y sufra también esta mujer.

Tras ver el video, continúe con mi trabajo, aunque estaba impaciente y con ganas de que acabara la jornada laboral para poder acudir a mi encuentro con Ibra. Tras comer me tome un tapón del brebaje que Ibra me había dado para facilitar el poder quedarme, casi con toda seguridad, preñada. A eso de las 4 de la tarde tuve que ir al servicio de profesores para masturbarme, pues no podía aguantar más de las ganas y excitación que tenía en mi cuerpo. Cuando acabe el trabajo ya notaba la excitación y las ganas de sexo que el brebaje de Ibra me provocaba. Antes de salir dirección del piso de Carabanchel donde me esperaba mi deseado negro, me tomé otro tapón de este brebaje, tal como me había indicado Ibra cuando me le entrego.

Cuando llegue al piso de Carabanchel, Ibra ya estaba dentro del mismo (recordad que le deje una llave para que sacara una copia). Al llegar me lancé a su cuello y sin mediar palabra uní mi boca a la suya fundiéndome con él en un beso (con lengua incluido), que duró al menos dos minutos. Fue Ibra el que me separó y tras decirme que su hermana había cambiado y lavado las sabanas y había limpiado en la casa, me entregó mi llave y me enseño la copia que había sacado de la misma. Yo entonces le dije:

“Compensaré a Awa por el trabajo que ha realizado y si desea seguir haciendo la limpieza del piso la pondré un sueldo”

Ibra me contestó:

“Gracias Esperanza, no esperaba menos de tú generosidad, pero quizás mi hermana quiera que la compenses de otra forma en vez de con dinero, al menos eso me ha dicho. Pero ya te diré que compensación quiere, cuando llegue el momento. Pero ahora vamos a lo nuestro que del tema de Awa ya habrá tiempo de hablar. Y ahora desnúdate, quítate esas ropas que traes, ponte los tatuajes y después te vistes con la ropa que te he puesto encima de la cama de la habitación de los espejos”.

Nos dirigimos al dormitorio de los espejos, donde pude ver encima de la cama la ropa que había elegido. Era uno de los vestidos que yo había llevado para salir acompañándole a él, era de tul semitransparente, de color marrón con lunares blancos (como de 1,5 cm cada lunar). No me había puesto de nuevo sujetador y las bragas eran de color blancas también semi transparente, con el fin de que se me vean bien claras bajo el vestido y terminaba el vestuario para esa tarde con un par de medias negras de cristal de esas que llegan hasta medio muslo y en la parte superior acaba en una liga negra de blonda, pero me faltaban los zapatos y entonces le dije:

“Faltan el sujetador y los zapatos y las bragas al ser blancas van a destacar mucho bajo el vestido y si salgo así a la calle me van a mirar todas las personas con las que nos crucemos y al no llevar sujetador, con ese vestido se me ven completamente mis pechos, me da Ibra mucha vergüenza salir así a la calle, ¿puedes al menos cambiarme las bragas por otras oscuras, aunque siga sin ponerme sujetador?”.

Ibra se me queda mirando y yo comienzo a quitarme las ropas que llevo y al quitarme las bragas que había usado durante todo lo que iba de día, me dijo:

“No las tire con las demás ropas, sabes que me gusta tenerlas y las quiero para mí, dámelas y no te olvides cada día de los que estés conmigo, quiero tener todas las bragas que lleves durante el día hasta que llegues aquí. Las que te pongas aquí puedes quedártelas, pero las que usas en tu vida diaria normal las quiero todas para mí, incluso las que uses los sábados y los domingos que no podemos estar juntos, las guardas y el lunes me das las del fin de semana y las de ese día. ¿Entendido?”

Yo se las entregué y él las cogió y se las llevó a su nariz y aspiró para olerlas, luego me miró sonriéndome y se las guardo en el bolsillo de su pantalón, luego yo le contesto:

“Toma y entendido, a partir de ahora todos los días, durante el tiempo en que te pertenezca, te daré mis bragas usadas y los lunes te entregaré también las del fin de semana, para tú colección. Sabes que soy tuya y haré todo lo que tú quieras”.

Entonces él me dijo:

“Por eso, quiero que salgas a la calle hoy con toda la ropa que te he puesto incluidas las bragas blancas, pues te las he elegido de ese color para que se te vean bien bajo el vestido. Y no te he puesto el sujetador por la misma razón para que todas las personas con las que nos crucemos puedan apreciar esas maravillas de tetas que tienes y sepan que eres una golfa y que eres mi puta (ya que irás agarrada por mí por el talle o por donde a mí me dé la gana). Quiero que todos sepan que eres una puta y los hombres que te vean con esa pinta se imaginen que te follan y de esa forma cuando se enteren que a partir del lunes te voy a prostituir y pueden tenerte por solo 5 euros, acudan el lunes hacer cola aquí a este piso, para estar contigo. Respecto a los zapatos me da igual los que te pongas, de modo que ponte los que tú quieras.”

Yo continué desnudándome y mientras lo hacía, Ibra estaba sentado en la cama viendo como lo hacía, y cuando me encontraba completamente desnuda me ayudó a ponerme los tatuajes y cuando lo hacía me dijo:

“El jueves antes de venir aquí, te tienes que pasar por donde compraste estos tatuajes y que te den, 50 unidades, del que yo les he encargado esta mañana. Ese a partir del lunes durante todo el tiempo que te tenga prostituyéndote, te le colocarás justo donde acaban los pelos de tu coño, es decir entre los pelos y el ombligo (más cerca de los pelos que del ombligo)”

Yo entonces le pregunto:

“¿Cómo será ese tatuaje?”

Me contesta:

“Es una frase que dice: soy la puta de Ibra y esto (sale una flecha dirigida hacía tu chocha) es propiedad de él”.

Yo le contesto:

“Ya sabes Ibra, que, si el tatuaje es como estos que me estoy poniendo, es decir de quita y pon, me pondré todo lo que tú quieras y que ponga la frase que tú quieras por muy degradante o sucia que sea. Durante este mes me entregaron a ti mis ex alumnos y yo acepte con todas las consecuencias ser de tu propiedad y que hicieras conmigo y mi cuerpo lo que desearas. Además, te deseo y quiero ser completamente tuya y complacerte en todo y sobre todo quiero quedar preñada de ti, no de ningún otro, sin importarme las consecuencias que estoy segura esto traerá a mi vida”.

Tras oír esto, me dio una fuerte palmada en mi culo y continúe “vistiéndome”, cuando estuve toda vestida (incluidas las medias negras hasta medio muslo), me miré en los espejos de las paredes de la habitación y pude ver reflejada mi figura en ellos. El vestido se me transparentaba por completo, por tanto, al no llevar sujetador mis pechos eran mostrado con todo lujo de detalle (y cuando andaba se me movían bastante arriba, abajo y a los lados) se me veían perfectamente mis aureolas y pezones y toda la geografía de mis grandes mamas. Por la parte de abajo, se podía ver a la perfección mis bragas de color blanca y al ser semitransparentes un poco más difuminado si se fijaba el que me mirará podía apreciar perfectamente la pelambrera de mi sexo y mi rajita y culo.

Cuando acabé de vestirme salimos a la calle y paseamos unos 10 minutos por el barrio. Todas las personas que se cruzaban con nosotros se quedaban mirándome y tras dejarlos atrás los oía murmurar sobre mí y como iba vestida tan descarada por la calle. Luego me dijo Ibra:

“Hoy vamos a ir a la nave donde viven varios compatriotas y gente de mi raza, que se dedican a la venta ambulante o como vosotros decís “top manta”, para hacer propaganda para el lunes cuando te prostituyas. Es decir, para que vean y comprueben el material del que van a poder disfrutar a partir del lunes por la ridícula cantidad de 5 euros y encima a pelo, sin condón. Debes dejarte tocar y sobar todo lo que quieran por ellos e incluso si te tienes que bajar las bragas bajártelas. Lo que no deberás permitir es que te besen ni que traten de follarte, eso si quieren lo podrán hacer a partir del lunes tras pagar por ello. No obstante, no te preocupes que como yo estaré presente no les permitiré que te hagan o toquen más de lo necesario.

Llegamos a una nave abandonada, donde había colchonetas echadas en el suelo y en el fondo dos puertas (que me dijo Ibra, que eran los servicios) y otra más grande que era la habitación donde guardaban el género que vendían. Había unos veinte hombres todos negros de varias edades, la mayoría de ellos estaban en calzoncillos o pantalones de deportes y camisetas (algunos de ellos sin ella). Al llegar Ibra me presentó a ellos como su puta y que podían utilizarme y follarme en el piso (dio la dirección del piso de Carabanchel) a partir del lunes por 5 euros solamente por servicio completo. Y que estaba allí para que pudieran apreciar la mercancía, que podían tocarme y que yo les enseñaría la parte de mi cuerpo que quisieran ver. Prácticamente me hicieron lo mismo que los otros negros habían hecho el día anterior en el parque, pero esta vez encima de varias de esas colchonetas sucias y guarras que tenían tiradas en el suelo. Una vez acabado, cuando nos marchábamos les dijo que corrieran la voz, que seguramente estaría en ese piso a partir del lunes de la semana que bien durante dos semanas, la mayor parte de los días estaría toda la tarde noche y entre medía algún día por la mañana también e incluso todo el día.

Cuando volvimos al piso, al entrar pudimos oír y ver allí a los chicos (mis ex alumnos) y a Ana Belén, estaban en el otro cuarto,( pues el de los espejos sabían que le teníamos cogido durante ese mes), en ese momento, se la estaba follando Luis y Emilio, cada uno por una de las entradas de su cuerpo (coño y culo), también desnudo al lado a punto de entrarla su polla en la boca estaba Ramón ( como recordareis el que era “ su pareja” igual que yo era de Ignacio y La de Luis era su madre), el cual al vernos, se bajó de la cama y vino hacía nosotros y nos dijo:

“Buenas tardes, hemos respetado el cuarto de los espejos para vosotros, hoy es el día del mes en que permito a mis amigos que se follen todos juntos a mi madurita, como tú sabes Esperanza una vez al mes la cedo para que sea follada por todos igual que hace Ignacio contigo todas las semanas, yo solo dejo que lo hagan una al mes, aunque también individualmente la pueden follarla uno cada semana. Como sabes Esperanza, y espero que tú también Ibra lo sepas, está conectado el circuito de cámaras y estamos grabando todo en las dos habitaciones y en el resto de la casa. No os importa si cuando acabemos de follar con Ana Belén ella y nosotros os vemos en la sala de control. A Ana Belén la excita ver mucho follar a negros y si es con una blanca y encima conocida seguro que se va a volver loca, a ver si tengo suerte y la entran ganas de hacerlo con uno de vosotros, es decir con uno de tu raza Ibra”.

Yo apenas puse interés en lo que Ramón nos decía, pues solo estaba deseando de meterme en el dormitorio con Ibra, para tener al menos una sesión de sexo como mínimo, mínimo como la que tuvimos ayer.

Fue entrar en el dormitorio, e Ibra me mandó que me desnudará por completo, pero como el día anterior que me quedará solo las medias negras hasta medio muslo. Él se desnudó también del todo y nos tumbamos en la cama y comenzamos a besarnos, eran las 7,15 de la tarde y estuvimos follando, con tantas ganas y pasión como el día anterior hasta las 9,30 de la noche en que lo dejamos, dado que yo ese día tenía que estar como mínimo a las 10,30 pues mi marido me había llamado al mediodía al trabajo y me dijo que hoy se retrasaría un poco, pues tenía una reunión y que no le esperara hasta al menos las 11 de la noche. Cuando fui a ducharme, vi a los chicos y Ana Belén (todos desnudos), en la sala de control, donde habían estado viendo la batalla de sexo entre Ibra y yo. Les di con la mano y me metí en la ducha. Al salir pude oír decir a Ramón a Ibra cuando se iban los chicos y Ana Belén:

“Ibra, creo que cuando termines el trato que tienes hecho con Ignacio para que folles y preñes a Esperanza, haré otro contigo para que hagas lo mismo con mi chica: Ana Belén, pues la ha gustado mucho lo que la has hecho esta noche a la profe y al final cuando la he preguntado si la gustaría estar en el lugar de ella, me ha contestado que sí, por eso te digo que seguramente lleguemos al mismo acuerdo que tienes con Ignacio, lo único que esta vez en vez de Esperanza será Ana Belén. Y como se corran las voces de como follas seguramente las demás de nuestras chicas maduritas también querrán hacérselo contigo e incluso que las preñes”.

Ibra le dio una palmadita en la espalda y le dijo:

“Ya veremos, cuando acabe todo con Esperanza, si estáis dispuesto hacer lo que me has dicho o se os ha pasado la calentura, entonces si os sigue interesando trataremos este tema y os daré mi respuesta, ¿de acuerdo?”

Yo mientras, desnuda, me fui al dormitorio y comencé a quitarme los tatuajes. Después me vestí con la ropa que había traído puestas de mi trabajo en el colegio, menos las bragas, que como ya sabéis se las había entregado a mi negro al cambiarme de ropa esa tarde al llegar al piso. Cuando me iba a marchar al ir a darle un beso a Ibra, este me mandó que me tumbará de nuevo en la cama (sin quitarme la ropa) y que abriera las piernas. Hice lo que me dijo, me subió la falda hasta mi cintura y sacándose del bolsillo unas bolas chinas me las fue metiendo en mi coñito y luego dándome la vuelta, saco no sé de dónde un consolador de unas medidas más bien grande y poco a poco me le fue metiendo en mi culo hasta que consiguió tenerlo todo dentro de él, luego me bajo la falda de nuevo y me dijo:

“Quiero que permanezcas con estos dos instrumentos metidos en tu chocha y tú culo, hasta mañana cuando vengas aquí. Si tienes que cagar te lo sacas, pero luego te lo vuelves a meter y las bolas ni las toque. No quiero que te masturbes por muy caliente que estés. El consolador en el culo es para que de ahora a mañana se te vaya dando un poco de sí ese agujerito de tu cuerpo, pues mañana a parte de seguir fallándote por tu chocho para preñarte, voy a partirte ese culito tan bonito que tienes pedazo de puta, ¿entendido?”

Le hice caso y permanecí con los dos aparatos toda la noche y día siguiente hasta que llegué al piso, cosa que hice a las 4 de la tarde, (pues mi marido esa tarde iría a casa sobre las 7,30  y quería estar en casa cuando él llegara, para que no sospechara nada de mis correrías con Ibra). Para poder dejar el trabajo dije en el colegio que esa tarde a las 3,30 tenía hora con el médico y que necesitaba libre esa tarde. Ese día, mi amante no me exhibió por el barrio, y por tanto al no haber nadie delante, no me hizo ponerme los tatuajes. Me estuvo follando todo el tiempo, desde las 4 de la tarde, que llegue hasta las 6,30.  Primero por mi coñito y más tarde sobre las 5,00, tras haberse corrido dos veces dentro de mi vagina, mi amante me dijo:

“Es hora que me des tu culo, como te habrás dado cuenta no te he quitado ni aun cuando te he estado follando el consolador, para que se te mantuviera adaptado al grosor del consolador, hasta que yo te encule a continuación. Además, es el momento de que pagues a mi hermana Awa por los servicios de limpieza que te ha realizado. Ahora serás tú la que la limpies a ella su chocha, mientras yo te rompo el culo. Awa ya puedes pasar”

Al decir esto me di cuenta que Awa nos había estado viendo durante toda la tarde, ya que cuando llegue ya estaba dentro del piso, pero escondida, para evitar que yo la viera.

Awa entró en la habitación de los espejos, donde estábamos Ibra y yo y mi amante me dijo:

“Apártate a un lado y deja el centro de la cama a mi hermana, para que se eche de espaldas y se abra de piernas, para que tú la puedas comer y limpiar su chocha. Y tú una vez que ella esté colocada, ponte a cuatro patas entre sus piernas y abre también, bien abiertas las tuyas, pues después entre ellas me tengo yo que colocar para poder romperte esa preciosidad de culo que tienes”.

Awa al entrar en la habitación se sacó por la cabeza el vestido tipo túnica que llevaba puesto, no llevaba nada debajo, por tanto, se quedó completamente desnuda. Tenía un cuerpo de diosa y bien proporcionado, era negro ébano y sus pechos no eran grandes ni chicos, calculé que usaría una talla 95 o 100 de sujetador. En su sexo tenía una buena mata de pelo ensortijado y cuando se tendió y puso sus manos bajo su nuca, pude ver que sus axilas también tenían pelos en ellas.

Una vez estuvo ella colocada, me coloqué entre sus piernas como su hermano me había ordenado y acercando mi boca a su sexo, pude percibir un fuerte olor a pescado que desprendía el mismo y me dio una arcada, entonces Ibra, dándome una fuerte palmada en mi trasero me dijo:

“No querías recompensar a Awa, por su trabajo, pues adelante ahora es el momento, ¿a qué esperas? ¿o es que te da asco chuparla su chocha porque es negra, o es que no te gusta el olor a hembra excitada que emite?”

Yo no le contesto y haciendo un esfuerzo aguanto el olor que desprende su rajita y acercando mi lengua comienzo a pasársela todo lo largo de ella de abajo a arriba y viceversa. Awa al sentir mi lengua no puede evitarlo y emite un suspiro de placer. Esto me anima y ya sin pensar en el color de su piel, ni que su coñito está sucio, continúo lamiéndoselo y chupando con todas mis ganas. Quiero agradecer a esa joven mujer su trabajo y lo que ha hecho por mí y sobre todo deseo hacerla gozar como nunca nadie la ha hecho gozar. En ese momento Ibra lleva su mano a mi culito y con cuidado va extrayendo el consolador que desde el día anterior he tenido introducido en él. Al hacerlo no puedo evitar que se me escape gran cantidad de gases del mismo, saliendo del interior de mi cuerpo un pedo que impregna de un fuerte y desagradable olor todo el dormitorio. Los dos hermanos al oírlo, se miran y emiten al unisonó una gran carcajada. Yo al oírlos, con un poco de vergüenza, dejo de chupar el coño de Awa y digo:

“Perdón, no lo he podido evitar, pues tenía todos los gases contenido en mi interior, al no haberme quitado en ningún momento desde ayer el consolador, como tú me indicaste Ibra”

Ibra me da otra palmada en mi culo y yo muy excitada e impaciente por que me penetre por mi culito le digo:

“Ibra te deseo, quiero sentirme tuya, ser tu esclava, quiero darte todas las partes de mi cuerpo incluso mi culito, como te prometí. Te dije cuando me entregaron a ti que podrías hacer conmigo y mi cuerpo lo que quisieras y que podrías meterme tu polla por donde quisieras. Aquí me tienes ofreciéndote una de las partes de mi cuerpo más íntima, mi culito, es para ti, tómalo, encúlame, dame por el culo, fóllamele, pártemele y destrózamele si es lo que deseas, pues es todo tuyo, soy tuya y te deseo y deseo que lo hagas ya.”

Entonces él colocándose detrás de mi entre mis piernas y cogiéndose con sus manos su miembro, me dijo:

“Ábrete tú con tus manos todo lo que puedas tus nalgas que quede bien abierto tú culo. Y no dejes de comerla el chocho a mi hermana, pues si lo haces tan bien como follas, no creo que ella tarde mucho en correrse en tu boca y cuando lo haga quiero que te comas y tragues todo lo que eche.”

Yo le hago caso y me pongo con todo mi interés, ganas y buen hacer a mamar como una desesperada el coñito de la negrita, a la vez que llevando a mi culo mis dos manos me separo bien separado mis dos cachetes de él quedando a la vista de mi amante y bien expuesto mi agujerito anal. Entonces Ibra continúa diciéndome:

“Si eso es lo que quieres y tantas ganas tienes es lo que voy hacer ahora mismo y prepárate pues tras esta tarde durante unos días vas a tener que andar toda abierta, pues después de tres días dándote la caña que te he dado en tu chochito y como te voy a quedar tu culo vas a tener que usar un cojín para sentarte pues ahora mismo, como me acabas de pedir, te voy a abrir este culazo que tienes” .

Y dicho esto y situándose y colocándose, mejor que estaba, detrás de mi colocó la punta de su polla en mi entrada anal, comenzando a presionar hacia adentro. Yo siento un dolor terrible y dejando de comerme el coño de Awa, le grito:

“Aahhhhhhhhhh, joderrrrrrrrr, cabrónnnnnnn, que me haces mucho daño, joderrrrr, vete despacio que me rompes el culo”

Mi amante al oír mis gritos cede un podo en su presión e intenta tranquilizarme:

“Tranquila, voy a ir despacio, pero tú sigue comiéndote el chochito de mi hermana, no la ves que la tienes a punto, espero un rato para que tus esfínteres se vayan acostumbrando al trocito de mi punta que te he entrado y tú procura hacer correrse en ese tiempo a Awa para que te puedas concentrar solo en mi enculada, golfilla. Sé que cuando logre entrártela entera vas a disfrutar igual o más que cuando te lo hago por tu chocha, pedazo de golfa”.

Yo le hago caso y Awa me agarra por mi nuca y me aprieta contra su coño, yo acelero mis lamidas y comidas y antes de lo que esperaba noto como se tensa y comienzan a fluir flujos y líquidos de su coñito que yo me trago todos los que puedo, y ella no para de gritar:

“ Siiiii, siiiiii, asiiiiiii puta blancaaaa como me gusta cómo me lo comeeeesss ahhhhhh…siiiiii que gustooooooo me estas dandooooo….te voy a limpiar todos los días que quieras el piso y lavar la ropa de la camaaaaa siiiiii el pago por ello es estooooooo…..me corrroooooo siiiiiiii aaahhhh me vas a matar de placeeeeerrr….aaaaaahhhh, tenía razón Ibra eres la mejooooorrrrr te quieroooo, Esperanzaaaaa….te quierooooo….aaaaahhhhhh……ooooohhhh….”

La corrida de su hermana fue como una señal para el negro, que me tenía metida la punta de su polla en mi ano, pues fue oírla, para que diera un fuerte empujón con su pelvi y consiguiera entrar su larga y gorda polla toda entera hasta el fondo de mis intestinos, sentía mi culito completamente lleno. El dolor fue terrible y el grito que solté fue tan fuerte como el dolor que sentí en ese momento. Ese pedazo polla me estaba rompiendo toda por dentro. Y no pude por menos que gritarle:

“Diossssssss, ahhhhhhhh, ahhhhhhhh, joderrrrrr, me rompes, me abressssssss, joderrrrrrrr, te dije que despacio cabronazooooooooo, me duele me duele muchooo”

Yo no paro de gritar mientras Ibra intenta tranquilizarme diciéndome:

“Tranquila Esperanza, ya ha pasado lo peor, pues menos mal que te hice que llevaras durante toda la noche de ayer y la mañana de hoy el consolador que te di metido en tu culo y con todo y con eso te duele. Pero tranquila que lo peor ya pasó, ya la tienes toda dentro y ahora solo hay que dar tiempo a que tu culo se dilate, tranquila”

Yo le contesto:

“De acuerdo, de acuerdo voy a relajarme, pero es que tienes una polla tan larga y gorda que me estas reventando mi culitooooo, diosss que dolor, diossssss, pero no me la saques y sigueeee , si lo que quieres es follarme por mi culo, sigueee yo aguanto , te pertenezco y quiero hacer todo lo que tú quieras Ibraaaaaaa….pero me duele muchoooooo cabróóónnnn”

Entonces mi amante me dice:

“Aunque no quisieras que te enculara y no me hubieras dicho que siguiera follándote el culo, aunque te esté doliendo, yo seguiría haciéndolo, pues eres mía como bien sabes y puedo hacer con tu cuerpo y contigo lo que quiera y desee (ya que tus ex alumnos te han entregado a mí y tú lo has aceptado) y sabes que mientras me pertenezcas eres mi puta para todo. Pero para que veas que soy bueno contigo blanquita estate quieta, no te muevas y dale un poco de tiempo a que tú hermoso culo se adapte a mi polla y luego ya verás como también vas a disfrutar tanto o más siendo enculada por mi, como cuando te follo por tu chocha, putilla blanquilla. Y para que el dolor sea menor mi hermana te va a comer tu coño mientras yo sigo enculándote golfilla. (Y dirigiéndose a Awa la dice) Awa cambia de posición y colócate bajo las piernas de esta putilla y haz eso que tú sabes hacer también a las mujeres amantes tuyas, cómela la chocha mientras yo la rompo su espléndido culo”.

Yo le hago caso y permanezco quieta, mientras tanto Awa se coloca entre mis piernas quedando su cabeza justo bajo mi sexo y agarrándose a mis piernas comienza a lamerme y comerme mi coñito, La verdad es que lo hace de muerte y poco a poco sus lamidas y comida de coño me va aliviando el dolor que siento en mi culo, hasta que en un momento dado realmente dejo de sentir ese agudo dolor, que hace unos minutos me ha hecho gritar como una loca. Ibra tiene razón y mis esfínteres se van adaptando al grosor de su inmensa polla. Mi amante al ver como mi culito se relaja y se adapta a su instrumento me dice:

“Ves como tenía razón, ¿a que ahora estas mejor?, ¿a que ya no te duele tanto? Esperanza aparte de darte por el culo porque lo deseo y me encanta tu culito, lo hago para que la semana que viene le tengas bien abierto y dilatado, cuando te prostituya. Ya que muchos de los de mi raza que paguen por follar contigo, van a querer darte y follarte por ese hermoso culo que tienes. No deseo que parezcas una primeriza cuando te la vayan a meter y vean que eres estrecha por ese sitio y que gritas de dolor. Por eso en estos dos o tres días que quedan hasta que hagas de prostituta, voy a follarte con mi polla por él (aparte de hacerlo también por tu chocha) para que la semana que viene te pueda entrar cualquier polla con facilidad y no te produzca dolor sino todo lo contrario, es decir placer”.

Yo le contesto agradecida:

“Gracias, cariño por tú consideración y sabes que puedes hacerme y follarme todo lo que quieras por donde lo desees, SOY TUYA Y ADEMAS LO DESEO, DESEO QUE ME FOLLES CON GANAS Y FUERZA TANTO POR MI COÑITO COMO POR MI CULITO, pue son los dos tuyos, solo tuyo son de tu entera propiedad, te deseo y deseo pertenecerte por completo. Y tienes razón mi amor, ya se me ha pasado un poco el dolor, ahora parece que no me duele tanto, pero por favor continua follándome, pero al menos al principio hasta que me acostumbre a tu  polla en mi culito házmelo despacio, pero aunque vuelva a chillar de dolor, tú no pares, no me hagas caso y sigue hasta que te corras y me llenes con tu leche este culo de puta (como tú me dices) que tengo, sigue, por favor…SIGUE HA QUE ESPERAS SIGUE YAAAAAAA CABRÓÓÓNNNN…..·

El negro me dice con una voz baja y agradable:

“Tranquila ahora voy a empezar a moverme, a follarte, pero lo haré despacio, muy despacio” Mientras su hermana no había dejado de comerme mi coñito, y me estaba proporcionando muchísimo placer, desde luego era una verdadera experta en comer coños, como había dicho su hermano. Ibra comenzó a moverse despacio entrando y sacando su polla, hasta casi que me la sacaba, dejando sin sacar solo la pelota de la punta de su polla, para después volver a empujar hacia dentro hasta llegar a que sus grandes huevos tocaran los cachetes de mi culito. Ese movimiento de dentro – fuera, más las lamidas y comida de coño de Awa, me volvieron como loca y no pude por menos que volver a gritar de nuevo, pero esta vez de placer y estos gritos también están acompañados por los de Ibra, pues disfrutaba como un loco al follar y romperme el culo:

Yo grito: “Diossss, ahoraaaaa siiiii siiiiiii, ahoraaaaa sí que siento todo mi culo lleno de polla, ahora sí que me gusta, fóllameee cabronnnnn fóllameeee”.

Ibra gritaba: “Esperanza, jodeeeer , que putaaaa que ereeees, como te gustaaaa follar incluso por el culooooooo, joderrrrr tiaaaaaa no te das satisfechaaaaaa, eres la mujer más zorra y viciosa  que haya conocido  jamás, diossssssss que culooooooo más estrechooo tienes y que ricoooooo que estaaaa….”

Mientras todo esto sucedía, Awa no dejaba de chuparme mi sexo y tragarse la gran cantidad de flujo que en esos momentos estaba echando, junto con la leche de las corridas que hacía un rato su hermano me había echado en mi vagina, ella había llevado una de sus manos a su coño y estaba también masturbándose. Su hermano ya follaba mi culo a un ritmo muy fuerte y deprisa, con más violencia que hacía unos instantes, a la vez que no paraba de darme palmadas en mis dos nalgas y culo. Yo cada vez lo disfrutaba más y pedía y pedía más como una autentica zorra y perra insaciable. No me tardaron mucho en volver a llegar los espasmo, señal inequívoca de que un nuevo orgasmo (de los muchos que ya había tenido esa tarde) estaba cerca y no pude evitar a la vez que me corría como una loca, gritar:

“Diosssssssss que gustoooooo, joderrrrrr como lo haceisssss?, vaya con los dos hermanosssss, ¿como sois capacessssssss de darme este placer?, joderrrrr me estoy empezandoooo a correrrrrrrr otra vezzzzzzz, siiiiiiiiii, siiiiiiii, nunca me había corrido tantas vecesssssss seguidas, siiiiiiii, siiiiiiii me corrooooooo Awa trágatelo todoooooo siiiiiiiii y túúú….. Ibraaaaa correteeeee dentro de mi culooooooo quiero que me le llenes también de tu lefaaaa tanto o más como me has llenado mi vaginaaaaaaa hace un ratoooooooo…….siiiiii correteeeee yaaaa…… de una puta veeeeezzzz Cabróóóónnnnnn…….”

Ibra también le llega el orgasmo y me grita:

“Siiiiiii…..siiiiiii me esta llegandoooooo…..me voy a correeeer de nuevooooooo, toma putaaaa, quieres leche  pues toma, tomaaaaaa, te voy bañar de lecheeeeeee ……este puto culo que tieneeeeessss….. igual que te preñaréeee sino lo he conseguido ya en estos pocos días que llevo corriéndome en tu chochaaaa………sienteeees…… mi leche caliente en tu culo zorraaaaa…..era esto lo que queríaaaasss……… aaahhhhhhh… me corrrooooooo….siiiiiiiiii…..aaahhhhhh…..ooooohhhhhhhhh romaaaaa todoooooo para tiiiiiiii pedazo de putaaaaa……que gusto me daaaa follarteeeeeee…. Por todos tus agujerooooossss pedazo de golfaaaaa…...”.

Cuando se corrió dentro de mi culo sentí todo mi trasero repleto de su caliente y rico líquido seminal. Trasdepositar todo su semen dentro de mi culo, se dejó caer sobre mi espalda (pero sin sacar su desmesurada polla de mi culo), lo que hizo que yo también cayera sobre el cuerpo de su hermana Awa y tapara con mi sexo la cara de esta. Estuvimos así al menos cerca de dos minutos, descansando de la batalla sexual que acabábamos de tener. Después Ibra se incorporó y me fue sacando con mucho cuidado su inmensa polla que aún se mantenía erecta y en todo su esplendor. Al hacerlo, salió gran cantidad de semen mezclado con mi propia sangre del interior de mi culo. Gran parte de lo que se salía de mi ano cayó sobre la cara de Awa que sin protestar se tragó todo lo que pudo. Tras sacarme su instrumento sentí un gran dolor y noté como el interior de mi culito estaba rajado por las dimensiones de la tremenda polla que había alojado en él.

Ibra hace un gesto a su hermana y esta sin decir nada, comprendiendo lo que quiere mi amante, se pone de rodilla en la cama junto a su hermano y cogiendo su polla tiesa y toda llena de restos de excrementos míos y de mi sangre y su esperma, se la mete en su boca y se la va limpiando, tragándose todos los restos que en ella hay, hasta quedársela completamente limpia.

Luego Ibra me dice:

“Y tú putita, ve a ducharte y cuando vengas quiero mirar como tienes ese culo, que ahora te está sangrando, pues habrá que darte con un preparado que tenemos para que las heridas internas de los lugares delicados cicatricen y curen con rapidez, pues mañana volveré a darte por esa maravilla de culo, tras haberte antes follado y corrido varias veces en tu chocha”

Yo hago lo que me dice y voy a la ducha, mientras me duchaba veía caer el agua que al mezclase con la sangre que me salía de mi culito, teñía todo de líquido rojo el plato de ducha. Cuando acabé, me sequé y fui de nuevo al dormitorio de los espejos donde me esperaban los dos hermanos. Entré andando de una forma extraña y con las piernas muy separadas el dolor no me permitía andar de otra manera. Me dolía muchísimo, era como si me hubieran desgarrado por dentro y el interior de mi ano me quemaba como si me hubieran metido un pedazo de carbón ardiendo dentro de mi culo. Los dos hermanos se dieron cuenta y comenzaron a reírse e Ibra me dijo:

“Ja,ja,ja,ja,ja a ver cómo le explicas a tu marido esta forma de andar, jajaja  y procura si esta noche quiere follarte inventarte algo para que no lo haga, pues como lo hagas con él hoy va a notar tu coño y culo más abierto de lo normal y quizás se pueda mosquear”.

Awa tenía en su mano una botella con un líquido turbio de color verdoso. Al llegar al lado de ellos me dijo Ibra:

“Túmbate en la cama boca abajo y ábrete con tus manos los cachetes de tu culo, quiero ver bien los desgarros y heridas que te he hecho, pues, aunque ahora te duela todo el interior y no puedas ni sentarte estoy seguro que las heridas y la carne rajada la tendrás a la entrada del mismo”.

Hice lo que me dijo y él se colocó entre mis piernas y estuvo inspeccionando todo mi agujero anal e incluso entró dentro de mi culo dos dedos para palpar donde estaban las heridas. Luego dijo a su hermana:

“Trae el ungüento, tiene el culo bastante dañado y tiene dos heridas en su interior, que son las que la están sangrando”

Cogió la botella y vertió sobre sus dedos un poco del líquido verdoso y me dio todo alrededor de mi agujero anal y después volvió a realizar la operación de verter más liquido sobre sus dedos e introduciendo estos dentro de mi culo me fue dando con ellos en las heridas internas que tenía sangrando. Al contacto de las heridas con este líquido, me escoció bastante y emití varios gemidos de dolor. Él no hizo caso a mis gemidos y sacando los dedos de mi ano, volvió a untárselos de nuevo del líquido y volvió a entrármelos y a recorrer con ellos mis heridas. Luego dijo a su hermana que me abriera bien mi agujerito anal y colocando la boca de la botella en el agujero echo dentro de mi culito directamente un poco de ese líquido, luego cogió un poco del papel higiénico (siempre tengo encima de la mesilla de ese dormitorio uno para irme limpiando cuando mi amante se corre dentro o fuera de mi cuerpo) y haciendo con él una especie de tapón me lo colocó tapándome mi agujero anal y al hacerlo me dijo:

“Procura aguantar el tapón todo lo que puedas, al menos de dos a tres horas, para que el líquido no se salga y pueda hacer su cometido. Si no aguantas más puedes quitártelo cuando te vayas a dormir, pero si lo aguantas mejor que no te lo quites. Verás como mañana cuando despiertes, ya no te dolerán tanto esas heridas y prácticamente las tendrás curadas, aunque después por la tarde yo al darte de nuevo por el culo te las vuelva abrir”.

Cuando me marchaba tras despedirme de los dos hermanos con un beso en la boca cada uno, Ibra me dijo:

“No olvides Esperanza que mañana es jueves y tienes que retirar los tatuajes que tengo encargados y pagarlos, en el mismo sitio donde te hicieron los del As de pica negro. Mañana procura venir más tiempo, si te tienes que inventar algo para tú marido, te lo inventas, pero quiero que estés conmigo como mínimo 5 horas”.

Asentí con la cabeza y marché. Cuando llegue a mi casa mi marido aún no había llegado, llegaría 15 minutos después. Cuando llego me preguntó si hacía mucho de que había llegado y le dije que hacía casi una hora. Esa noche quiso follar conmigo, pero le dije que me encontraba mal y cansada y evité que lo hiciera.

Al día siguiente, jueves por la mañana al ir al baño me quité el tapón de papel que me había puesto Ibra. Me sentía mejor de los dolores en él, aunque aún al andar no podía hacerlo como normalmente lo hacía y tenía que seguir al andar con las piernas bastante separadas para evitar que con el roce me doliera. El día en el colegio (mi trabajo) transcurrió normalmente y por la tarde salí del colegio una hora antes y fui a por los tatuajes, como me había indicado Ibra y desde allí marché al piso donde me estaba ya esperando mi negrito. Como todos los días le entregué las bragas que llevaba puestas y se las guardo. Me preguntó por el estado de mi culito y le dije que estaba mejor. Luego nos dirigimos al dormitorio de los espejos y me dijo que, aunque hoy no saldríamos a exhibirme, tendría que ponerme los tatuajes, inclusos los nuevos para ver cómo me quedaban, me desnude del todo incluidas hoy las medias negras y cuando le pregunté por la ropa que quería que me pusiera, me dijo:

“Hoy no te pondrás nada, tenemos que aprovechar el tiempo, pues quiero follarte bien follada tanto por delante como por detrás. Ponte en el lugar de costumbre los dos tatuajes del As de pica negro y después túmbate en la cama boca arriba, hoy te colocaré yo los nuevos que acabas de traer, para que sepas bien donde quiero que los lleves, pues mientras estés ejerciendo de prostituta deberás de llevar todos puestos”.

Hice lo que me dijo y él me colocó en mi vientre los nuevos tatuajes, justo donde acababan los pelos de mi pubis, este tatuaje constaba de dos renglones y bajo el segundo renglón una flecha dirigida e indicando hacía la rajita de mi coñito. En el primer renglón se podía leer: Soy la putade Ibra , debajo en el segundo renglón continuaba la leyenda: y esto es propiedad de él y debajo de esta leyenda salía la flecha dirigida hacía mí sexo. Si se leía todo seguido ambos renglones se podía leer toda la leyenda completa: “Soy la puta de Ibra y esto es propiedad de él (y salía una flecha señalando hacía la rajita de mí coñito). Todo el conjunto de letras y flecha ocupaba desde donde comenzaban mis pelos del pubis hasta dos dedos por debajo de mi ombligo. Me hizo poner de pie y que me mirará en los espejos. Me vi completamente desnuda y mi cuerpo tatuado con los dos As de pica (uno en cada muslo) y las frases puestas por encima de mi pubis anunciando a todo el que me pueda ver desnuda que soy la puta de Ibra y que mi coñito es de su propiedad.

Luego me cogió en volandas y me tiró sobre la cama y boca arriba, después quitó la almohada de la cabecera y junto con otra más me las puso bajo mi cintura, quedando claramente expuestos a sus deseos tanto mi coñito como mi culito. Me hizo abrir al máximo mis piernas y que pusiera las rodillas doblabas formando un arco (cada una) y que apoyara la planta de mis pies en las sabanas de la cama. Seguidamente se subió él también a la cama, ya completamente desnudo, y colocándose entre mis piernas acercó su cara a la zona de mi sexo y culo y sacando su lengua , con mucho cuidado y delicadeza comenzó a pasar su lengua por todo lo largo de la rajita de mi culo. Se paró y entretuvo un ratito a lamer e introducir su lengua dentro de mi agujero anal, (el cual llevaba todo el día sin lavarse desde las 7,30 de la mañana en que había defecado y me le había lavado después en el bidel), por tanto, desprendía un fuerte olor debido al sudor y al aroma que el interior de mi culito desprendía por los excrementos que desde entonces se habían ido produciendo en mi cuerpo.  Yo sentía un gran placer cada vez que pasaba su lengua y sobre todo cuando lo hacía por la entrada de mi culo. De aquí fue deslizando su lengua hacía abajo y fue lamiendo la pequeña zona de mi cuerpo que queda entre la raja de mi culo y mi coño: Luego continúa hacía mí sexo, y se entretiene hacer lo mismo en mi rajita y en mis labios vaginales, tanto mayores como menores, hasta llegar a mi clítoris donde se entretuvo un buen rato, llevándome con ello a mi primer orgasmo de esa tarde. Tras esto cogiéndose con su mano su polla (que ya estaba como todas las tardes que había estado con él esa semana), completamente erecta y me dijo:

“Esperanza, estas preparada, pues vamos a comenzar, que el tiempo es oro y nosotros, aunque hoy tenemos por delante 5 horas, veras como se nos hacen cortas. Te voy hacer gozar tanto o más como estos días, y te voy a follar tanto por delante para poder quedarte preñada y hacerte una buena barriga (si es que ya no te la he hecho en estos días), como por detrás por esa hermosura de culo que tienes, para acabar de abrírtele y con  ello acostumbrarle a recibir pollas similares al grosor de la mía. Pues estoy segura que la semana que viene cuando estés de prostituta tendrás que recibir más de una de los hombres de mi raza que quieran follarte por esa entrada de tú cuerpo.”

Diciendo eso arrimó la punta de su polla, que parecía de lo gorda que la tenía como un limón, a la entrada de mi almejita y dando un pequeño empujón me fue penetrando mi vagina poco a poco hasta que consiguió dar y tener pegado sus huevos a la entrada de mi coñito y ser acariciados sus testículos por la frondosa pelambrera que cubre todos los alrededores de mi sexo. De esa forma dio comienzo nuestra batalla sexual de esa tarde noche. Las cuatro primeras horas me estuvo follando en varias posiciones durante todo el tiempo por mi chocha, como él llama a mi coñito. Después estuvo la última hora todo el tiempo dándome por el culo, con lo que consiguió de nuevo abrir las heridas que ya me había producido en mi ano el día anterior. Al finalizar tras quitarme los tatuajes y tras ducharme, me curó las heridas y desgarros internos de mi culo, de la misma forma que lo había hecho el día anterior. Me indicó de nuevo los cuidados que debía de tener para que las curas dieran resultado. Los desgarros habían sido menores que el primer día, pero también había habido algunos, que como ese día también me molestaban al andar, haciendo con ello que anduviera con las piernas separadas y con más dificultades que de costumbre. Cuando llegue a casa a eso de las 1 de la noche, mi marido no estaba en casa y en la mesita de entrada (donde solemos dejar las llaves) tenía una nota de él que me decía:

“Esperanza, he salido a tomar algo con Ignacio y sus amigos, ya sabes que cada vez que me junto con ellos nos liamos y solemos llegar tarde, si ves que tardo no me esperes y acuéstate, un beso, te quiero”.

Yo cogí y tras cenar me fui a acostar, estaba molida y muy dolorida de la paliza sexual que Ibra me había dado esa tarde noche. Como el día anterior, dormí con el tapón de papel higiénico que Ibra me había puesto en mi culo para evitar que se saliera el ungüento que me había echado dentro de mi ano, para curarme las heridas y desgarros que su polla me había producido al volver a darme por el culo esa tarde.

Al día siguiente cuando me levanté mi marido ya se había marchado al trabajo. Yo lo primero que hice fue ir al servicio y quitarme el tapón de papel higiénico y defecar, para quedar lo más limpio posible mi ano para la sesión que tendría con Ibra por la tarde, pues era la última de la semana y quería que me diera otra vez por el culo, pues aparte del placer (aunque seguía sintiendo, también al principio, cuando me entraba su polla bastante dolor) que me producía quería tener preparado y más dilatado mi agujero anal por si alguno de los futuros clientes que tuviera a la semana siguiente cuando Ibra me prostituyera , quería follarme mi culito, al menos que no sintiera mucho dolor. Tras asearme mis partes íntimas me vestí y después fui a la cocina y desayuné, tras lo cual marché al trabajo.

Como todos los días de esa semana estaba deseando de acabar el trabajo para ir cuanto antes a encontrarme y reunirme con Ibra, las horas y clases se me hacían larguísimas. A media mañana recibí la llamada de Ignacio, que a la misma hora del otro día me esperaba en la puerta del colegio (es decir al terminar la segunda clase de la mañana y entre esta y la siguiente). Salí a encontrarme con él y tras saludarnos y darme un beso en la cara, me preguntó que tal marchaba todo con Ibra y que si creía que ya habría logrado preñarme. Yo le conteste que todo marchaba bien y que por la cantidad de veces que se había corrido en el interior de mi vagina, casi con toda seguridad ya me habría preñado. Pero que no lo sabría hasta que no me hiciera una prueba de embarazo, pero que no obstante si él no me había quedado preñada, seguramente en las siguientes semanas quedaría preñada de algún hombre de raza negra, dado que a partir del lunes o martes Ibra tenía la intención de prostituirme y me haría hacerlo a un precio muy bajo (5 euros) para que tuviera bastantes clientes y de esa forma aumentar las posibilidades de que alguno de ellos me hiciera la barriga que tanto él (Ignacio) deseaba que me hiciera un negro. Me dijo que fuéramos de nuevo al parquin, como el otro día y yo le dije que hoy no podía ser, pues tenía clase a continuación y que solo disponía de unos minutos entre clase y clase.  Tras ver que no podía disfrutar de mí cuerpo en el parquin ese día, me entrego otro DWD que llevaba en la mano y me dijo:

“Mírale con atención, es la juerga que nos corrimos ayer, bueno mejor dicho que se corrió tu marido. Con este, el del otro día y el que le tenemos preparado para esta semana que viene, le vamos a tener cogido por sus cojones y caso de que se ponga tonto cuando se entere que te ha preñado un negro tendrá que hacer lo que nosotros dos deseemos que haga. Guárdale junto con el otro, pues es un material de gran valor por si las cosas se te tuercen con tú marido”.

Lo cogí y mientras las clases siguientes, mientras mis alumnos realizaban ejercicios que les había puesto y en una de las clases un examen, yo me dediqué a ver (sin voz) el video que me había entregado Ignacio. Lo primero que salía era mi marido e Ignacio entrando en un piso en el que salía a recibirlos Ana Belén (la madre de ….. uno de mis ex alumnos y amante de Ramón). Ignacio habla con Ana Belén (luego cuando le he visto el video con voz, me enteré que era el día del mes que Ramón cede a su amante a Ignacio para follar con ella o hacer lo que deseé con ella. Igual que Ignacio a mí me ha cedido en vez de una vez al mes, una vez a la semana a cada uno de sus amigos, aparte de la vez que todos juntos me follan a la semana) y la dice que Pepe es mi marido y que ese día quiere que folle con él y se deje hacer todo lo que él quiera hacerla, sea lo que sea.  Ana Belén protesta y no parece muy de acuerdo con tener que entregarse a mi marido, pero entonces Ignacio la recuerda que tienen suficiente documentación como para si sale a la luz que pueda tener problemas con su marido y en el círculo de amistades donde se mueve el matrimonio. Ella muy a su pesar tiene que ceder a lo que la ha pedido Ignacio y se mete en una habitación con mi marido e Ignacio. Este se sienta en un sillón que hay en la habitación y mi marido y Ana belén comienzan a desnudarse y tras estar los dos completamente desnudo ella se tumba boca arriba en la cama y mi marido se sube a la cama y comienza a besarla y sobarla por todo su cuerpo, haciendo especial hincapié en sus grandes pechos. Después continúan escenas de los dos follando en varias posiciones, tanto por la vagina como por el culo e incluso haciéndola hacer a Ana Belén, cosas que nunca pensé que mi marido pudiera hacer (ya que a mí no me lo ha hecho nunca y si hubiera intentado hacérmelo no se lo hubiera permitido). Cuando han acabado de follar hay unas escenas  (que son a las que me refiero) en las que mi marido hace a Ana Belén ponerse en el suelo y comienza a orinar sobre ella , haciéndola que abra la boca y se vaya tragando todo el orín que en ella va depositando. No conforme con esto cuando acaba, la hace tenderse en el suelo y él se coloca de cuclillas sobre su cara y comienza a defecar sobre su boca. Entonces Ignacio se levanta y dándola bofetadas en la cara la dice que se trague la mierda que mi marido está echando dentro de su boca. Ella empieza a tener nauseas al tratar de tragárselo, al no hacerlo Ignacio continúa dándole bofetadas en su cara hasta que ella como puede se traga la mierda que mi marido está echando. Después Ignacio se saca su polla y comienza junto con mi marido a orinarse sobre todo su cuerpo y cara de la mujer. Cuando acaban mi marido la da 100 euros, y a la vez que lo hace la dice que se ha portado muy bien y que le ha gustado lo puta y guarra que es y como pone los cuernos a su marido, que si ella quiere puede tenerle por cliente cuando ella quiera, (pues sabe que es la madre de uno de mis alumnos, ya que Ignacio se lo ha dicho y le ha comentado que hace eso para sacar dinero, ya que con el sueldo de su marido no les llega a fin de mes). Son los dos unos sinvergüenzas y unos cabrones, degradando a esta pobre mujer con lo que la han obligado hacer, es decir, ser su wáter e incluso darla la cantidad de bofetadas que Ignacio la ha dado hasta que ha conseguido lo que quería. Llegando a degradar y humilla a esta mujer hasta ese extremo y para acabar pangándola como una vulgar puta por ello. La han tratado prácticamente como un objeto o una cosa sin ningún valor humano, incluso con maltrato tanto físico como psicológico. Me ha dado vergüenza ver hacer eso a mi marido y más con una mujer, tan buena como es mi amiga Ana Belén, cuando haya pasado todo esto y se me presente la oportunidad voy a procurar tratarle, (aunque solo sea en una ocasión) como él ha tratado a esta pobre y desdichada mujer. Lo malo es que Ignacio no lo ha parado e incluso le animaba a seguir y se reía del trato que mi marido le daba a esta mujer madurita e incluso ha participado. Vuelvo a decir que son los dos unos sinvergüenzas y unos cabrones, eso que han hecho con Ana Belén no tiene nombre.

Durante toda la mañana no se me fue de mi cabeza las imágenes que había visto en el video, y aunque me disgustaba el trato que mi marido e Ignacio habían dado a la pobre Ana Belén, me excitaba verlo e incluso me entraron ganas de ser usada de wáter por Ibra. Al pensar esto me decía para mí misma:

“Esperanza, estas locas, eso es una güarreria y es un estado de degradación muy grande para un ser humano, como vas a pedirle a Ibra que te haga eso, estas locas”

Pero la idea no se me marchaba de mi cabeza y al finalizar mi jornada de trabajo, ya me había autoconvencido de que lo haría, quería hacer ver a mi amante que estaba dispuesta a degradarme hasta ese punto, con tal de ser completamente suya. Al ser viernes, acabamos las clases a las dos y media de la tarde, y en vez de ir a comer, fui a un bar cerca del colegio y me comí un bocadillo y tras hacerlo cogí mi coche y me dirigí hacía el piso de Carabanchel para juntarme con mi amante negro.

Cuando llegue eran las 15,15 de la tarde, Ibra no estaba en el piso no me esperaba tan temprano. Fui a la puerta de su piso, llamé y me abrió su hermana Awa, la cual al ver que era yo, le llamó, diciendo en voz alta:

“Ibra, está aquí tu puta Esperanza, se nota que te echa de menos y por eso viene tan pronto, ja, ja, ja….”

Ibra, salió y un poco extrañado me dijo:

“Qué pronto has venido hoy, ¿no? ¿Te has tomado el brebaje para facilitar el embarazo? Date cuenta que si no hemos conseguido quedarte preñada en esta semana, tendrán que hacerlo otros de mi raza a partir de la semana que viene, de modo que hoy nos tenemos que forzar en que quedes preñada. Bueno ven vamos al piso, aprovechemos este tiempo extra que me has regalado. Espera un momento, voy a tomarme yo mi brebaje, pues no lo he hecho dado que te esperaba sobre las 6 de la tarde.”

Yo le contesto:

“Es que los viernes solo tenemos clases hasta las 14,30 y tenía tantas ganas de verte que me he venido derecha, incluso sin comer. Me he comido un bocadillo en un bar cerca del colegio y cuando he acabado, tras tomarme el tapón del brebaje, me he venido para acá. Y te digo que estoy sintiendo ya sus efectos, pues estoy comenzando a excitarme y bastante. Venga vamos al piso tenemos tres horas más que las que teníamos pensado. Hoy tengo que estar en casa antes pues los viernes le gusta a mi marido que salgamos a cenar fuera de casa y después a tomar algo”.

Entonces Ibra me dice:

“Si realmente lo que quieres y deseas es estar conmigo (y supongo que así será, pues te has venido incluso sin comer) quiero que llames ahora a tú marido y le pongas alguna escusa (dile lo que quieras), pero quiero que al menos estés conmigo hoy hasta las 11 de la noche. Aunque realmente lo que me gustaría es que la noche la pasaras entera conmigo, pero sé que eso no puede ser, al menos quiero tenerte y que seas mía hoy hasta las 11 de la noche, ¿lo harás por mí?”.

Yo me quedo parada y lo pienso un poco. Entonces se me viene a la cabeza la guarrada que mi marido e Ignacio han hecho a Ana Belén y creo que es una buena oportunidad para dar en la cara y fastidiar de alguna forma a mi marido, estropeándole la salida conmigo de esa noche. Entonces sin decir nada, saco mi móvil de mi bolso, marco el número de teléfono de mi marido y cuando descuelga le digo:

“Querido, hoy llegaré tarde, pues hoy he quedado con unas amigas y vamos a cenar por ahí, de modo que no espero estar en casa antes de las 11 de la noche como poco, aunque igual ya sabes cómo son estas cosas a lo mejor después de cenar dicen de ir a tomar alguna copa y nos liamos y llegó aún más tarde e incluso a lo mejor mañana. Te lo digo por si quieres llamar a Ignacio, que parece que ayer, por la hora que debiste de llegar os lo pasasteis bastante bien, para iros los dos con sus amigos a dar también una vuelta”.

Él iba a decirme algo, pero yo ya no le deje, cogí y colgué el teléfono. Y dirigiéndome a Ibra le dije:

“Contento, ¿es esto lo que deseabas que hiciera?, espero que te hayas dado cuenta que estoy loca por ti y que te deseo hasta tal punto que he sido capaz de dar plantón a mi propio marido por ti. Venga estoy deseando de estar en ese piso de enfrente contigo, mi amor.”

Ibra me sigue y nos marchamos al piso, pero antes de salir, dice a su hermana:

“Awa, sobre las 8 de la tarde , con la llave que tenemos del piso de Esperanza, ves y entra en él y te unes a nuestra fiesta, pues quiero veros a las dos haciendo un numerito lésbico para mí, y también de esa forma Esperanza te va pagando lo que te debe por la limpieza del piso y de las sabanas, que sé que lleva dos días que es lo que más deseas, hermanita, estar de nuevo con Esperanza, ja, ja, ja,….”

Cuando entramos en el piso, me dice Ibra:

“Aún es temprano para ir a ver a mis amigos, esperaremos hasta las 16,00 h. e iremos hacerles una visita, para que te vean y recordarles que a partir del lunes o el marte comenzarás a prostituirte (bien barata) para que no se olviden y durante todo el fin de semana solo piensen en que llegue el lunes o el martes para poder follarte. Putilla madurita blanquita, mientras yo voy al wáter, pues me han entrado unas ganas muy grandes de cagar y mear, tú en mientras s ir desnudándote. Si tardo, me esperas desnuda en el dormitorio, pero no te quites las medias, hoy quiero que sigas con ella …”.

Yo, que ya me está haciendo efecto el brebaje, que me tomé tras comer el bocadillo, y me encuentro muy excitada y con muchas ganas de estar con él y al ver que se dispone a hacer sus necesidades y tengo la oportunidad de llevar a cabo lo que durante toda la mañana (desde que vi el video de mi marido con Ana Belén) he estado pensando en servirle de wáter (como hizo forzada la pobre Ana Belén)  le digo:

“Ibra, no te gustaría mejor que hacerlo en el wáter, hacerlo mejor sobre mi cuerpo y que yo te sirva de wáter. No me importaría que te mearas e incluso te cagaras encima de mi cuerpo si lo deseas, sabes que soy toda tuya y si lo hicieras lo asumiría y aceptaría con mucho gusto, mi amor negrito……”

No sé qué me pasa, ni como han podido salir esas palabras de mi boca, yo misma me quedo sorprendida a oírme. Pero algo me ha empujado dentro de mí para que le proponga que haga esa guarrada sobre mi cuerpo y lo malo es que deseo que lo haga y ser degradada por él de esa forma. Quizás sea efectos del brebaje, que me estoy tomando para facilitar el quedar preñada, (esto lo pienso para justificarme ante mí misma y mi conciencia) pero lo que realmente me pasa es que deseo que el vea que estoy dispuesta a hacer cualquier cosa para que él sepa que deseo ser completamente suya. La verdad es que hay algo dentro de mí que me empuja a querer estar, el mayor tiempo posible, con Ibra y ser poseída y dominada por él.

Ibra, entonces cogiéndome de la muñeca de mi mano derecha y llevándome hacía el cuarto de baño me dice:

“Si es eso lo que quieres, yo lo estaba deseando, pero no me atrevía a hacértelo, por si te enojabas. Entonces quítate la blusa, falda y los zapatos y metete en la ducha, pues voy a mearte y cagarte encima pedazo de guarra. Desde luego Esperanza, bajo esa mascara de señora decente y refinada, se esconde una verdadera puta, golfa y guarra, eres la mujer más golfa que me he encontrado en mi vida, pero me encanta que seas realmente así”.

Yo rápidamente me quito las ropas que me ha dicho y los zapatos y me quedo solamente con mi sujetador, las bragas y las medias. Entonces Ibra me dice:

“Quítate, también las medias, pues no quiero que se manchen de orín y de mierda, pues quiero que te vean con ellas puestas mis amigos. Además, las bragas, también quítatelas, pues son las que has tenido puestas durante todo el día y quiero seguir teniendo la colección de todas ellas, desde el primer día que empezaste a estar conmigo hasta que acabe el acuerdo con tus ex alumnos. No quiero que se manchen de restos de semen, orín o mierda de nuestros encuentros en este piso. Quiero que solo tengan los restos de tus flujos y restos de olores del tiempo que las has tenido puestas sin estar conmigo. Es decir, quiero tener impregnadas en ella el olor tuyo de mujer decente, para compararlo luego con el olor que desprendes cuando eres como lo que realmente eres: UNA VERDADERA PUTA”

Hago lo que me dice, quedándome solamente con el sujetador y me meto en la placa de la ducha sentándome abierta de piernas en ella. Después Ibra entra en el plato de ducha, se baja los pantalones junto con los calzoncillos hasta los tobillos, se desata sus zapatos y se saca los dos, tirándolos fuera de la zona de ducha. A continuación, agarrándose su polla apunta con ella hacía mi cuerpo y aprieta, comenzando a salir un chorro grande de orín que me da de lleno en mi carta. Yo abro la boca y él procura acertar con el chorro en mi boca. Acierta y yo comienzo a tragarme todo su liquido dorado que entra en mi boca. Después va bajando la dirección del chorro hacía mi cuerpo, hasta que llega a dar con él en mi coñito, que en esos momentos con mis dos manos me le abro todo lo que puedo, para que el orín me le bañe lo más posible tanto mis labios vaginales internos como externos. De pronto para y me hace que me tumbe en el plato de ducha, de espalda, haciendo que la mitad de mi cuerpo (muslos y piernas) queden fuera de la mampara y él coloca su negro culo sobre mi cara y cuando está prácticamente tocando mi cara, hace fuerzas apretando consiguiendo que se le escape un pedo, el cual hace que me dé los gases del mismo en plena cara, percibiendo en mi nariz el fuerte y pestilente mal olor del mismo. Tras emitir el pedo se levanta y se va al wáter se sienta en la taza del mismo y comienza a defecar en él, a la vez que me dice:

“Esperanza, por hoy solo voy a mearte y con el olor del pedo que me acabo de tirar y como has encajado su desagradable olor, tengo bastante claro que estas dispuesta hacer cualquier cosa que yo te pida y quiera, por asquerosa, guarra y sucia que sea y por mucho que degrade tu persona. Mientras yo acabo de cagar, pásate la ducha por tu cara y cuerpo, para quitarte los meados que te he echado hace un momento”.

Yo me levanto, me quito el sujetador que le tengo totalmente empapado de sus orines, cojo la ducha y la abro y dirijo la alcachofa de la misma por mi cara y el resto de mi cuerpo. Me doy prisa, pues quiero que cuando él acabe de defecar, estar ya fuera de la ducha seca, desnuda y preparada para lo que él quiera hacer conmigo y mi cuerpo. Cuando él acaba yo estoy de pie junto a él y cuando coge el papel para limpiarse su culo, le digo:

“Ibra, déjame que sea yo la que te le limpie con mi boca y lengua, sé que para ti ha sido suficiente prueba de mi sumisión y amor hacía a ti el dejar que me orinaras y me tragara tu orín, hace un rato. Pero yo quiero hacerlo y quiero y deseo rebajarme al máximo ya que no has querido cagarte encima de mi al menos déjame que pueda limpiarte con mi lengua y boca tu culo”.

Entonces él levantándose de la taza del wáter y cogiéndome de la muñeca, como hizo antes me dice:

“Bueno, si realmente quieres rebajarte hasta ese punto y degradarte al máximo, ven conmigo al dormitorio de los espejos, estaremos más cómodo y allí podrás hacerlo, si ese es tu deseo, guarrilla”

Nos dirigimos los dos al dormitorio, y al hacerlo deprisa, mis grandes pechos se bambolean de un lado a otro y de arriba abajo. Cuando llegamos Ibra se sube a la cama y se pone en cuatro y con sus dos manos se separa las nalgas de su negro culo, dejando a mi vista su agujero anal y sus alrededores todo lleno de excrementos marrones, más bien blandos. Yo me colocó también en cuatro entre sus piernas, veo como le cuelga su hermosa polla y sus gordos testículos, y acerco mi boca a la raja de su negrísimo culo y comienzo a pasar mi lengua todo alrededor del agujero de su culo, y le voy quitando con mi lengua los restos de su excremento marrón, a medida que lo hago me lo voy tragando y él comienza a emitir sonidos de placer:

“ Uuuufffffff….oooooohhhhh que gustoooooo….me gusta lo que me estas haciendoooo…siiiiiiiii …..ahhhhhhh sigueeeee….blanquilla eres toda una guarrillaaa…..aaahhhhhhh siiiiiiii…..”.

Siento el sabor de sus excrementos, es un sabor mezcla de amargo y ácido y la textura es pastosa. Veo como con mi caricia el flácido pene de Ibra, se va endureciendo poco a poco y como va aumentando de tamaño, tanto de longitud como de grosor, prácticamente roza ya la ropa de la cama, desde mi posición parece de grande como la de un caballo. Yo entonces llevo una de mis manos a sus huevos y comienzo a acariciárselos para pasar luego a su ya endurecida polla y comienzo a masturbarlo a la vez que continúo pasando mi lengua por todos los laterales de su culo y me concentro al máximo en hacerlo lo mejor posible, hasta que consigo dejárselo completamente limpio de excrementos. Él no ha dejado de emitir gemidos de placer durante todo el tiempo que yo le he estado limpiando su culo y a la vez masturbándole. Entonces él se deja caer en la cama, se da la vuelta y atrayéndome hacía él, lleva su boca a la mía (que la tengo toda untada de su mierda) y me da un morreo de campeonato, metiendo incluso su lengua dentro de mi boca y limpiando con ella todos los restos de sus propios excrementos que pudieran quedar aún dentro de mi boca. Con este hecho me demuestra que no le importa que tenga mi boca aún llena de mierda y con el sabor de ella, que le importa más besarme y amarme que el asco que le pueda producir el estado de mi boca. Esto me hace pensar que siente algo por mí, que no solo me usa y luego me tira, aunque quizás este pensamiento sea solo yo la que lo piense y su gesto haya sido por lo excitado que le ha puesto lo que le he hecho.

Tras esto, cuando deja de besarme la boca pasa a mis pechos, me los coge con sus dos manos y comienza a sobármelos con fuerza y a chuparlos aún con más ganas, lo que hace que me ponga aún más excitada y caliente que ya estoy. Cuando acaba me dice:

“Esperanza, me ha gustado mucho lo que me has hecho, es decir dejarme que me orine en tu boca y tú cuerpo e incluso ofrecerte a que me cague encima de ti y estar dispuesta además a tragarte toda mi mierda. Al negarme yo hacerlo, me rogaste que al menos te dejara limpiarme el culo tras haber cagado en el wáter, para demostrarme que estabas dispuesta a ser toda mía y hacer lo que yo quisiera contigo incluso rebajarte y humillarte hasta el punto de ser tú cuerpo mi propio wáter”.

Yo le sonrió y él continúa acariciando mis pechos y de vez en cuando deja de tocármelos con una de sus manos (mientras que con la otra continúa apretándome uno de ellos) con la cual comienza a acariciar varias partes de la geografía de mi cuerpo. Eso a mí me gusta y me hace que mi excitación vaya aumentando y no puedo por menos que acercar mi boca de nuevo a la de Ibra y fundirme de nuevo en otro intenso beso.

Él entonces me hace que me suba sobre él y lleva una de sus manos a mi cadera y la que tenía agarrando mi pecho derecho la lleva hasta su enorme polla y agarrándola dirige su gorda punta hasta la rajita de mi coñito. Luego cuando siente los pliegues de los labios de mi sexo en su polla aprieta abriéndose paso con su hermosa espada en el interior de mi vagina, yo no puedo por menos que emitir un suspiro de placer y decirle:

“Unnnmmmm   oooooohhhhh mi amooooorrr siiiiii siiiiiiiiiiii aprietaaaa quiero sentirla completamente dentro de mí, por favor fóllame fuerte, como tú quieres, te deseo con todas mis fuerzas mi amor, hazme de nuevo completamente tuya, fóllame, quiero que te corras muchas veces dentro de mí, quiero que me preñeees mi amoooorrr. Quiero que me hagas un hijo tuyooooooooo….yaaaaaaaaa……...siiiiiiiiiiiii….aaahhhhhhhh……no me importa lo que pueda pasar despuééééssssss…….”

Y tras esto comienzo a cabalgar sobre él tratando que me entré lo más adentro posible su polla dentro de mi vagina, e Ibra me dice:

“Esperanza, tenía pensado que te cambiaras de ropa y saliéramos para que te exhibieras ante los hombres de mi raza, que viven en el barrio y tras ello, volver aquí y follar como lo hemos estado haciendo durante estos últimos días. Pero después de lo que has hecho hoy y demostrado con ello lo que realmente sientes por mí, quiero demostrarte, antes de que salgamos a la calle, lo que yo realmente también siento por ti y por eso no solo quiero follarte y echar dentro de tu vagina mi leche para preñarte , sino que quiero amarte de verdad y hacerte sentir lo que has encendido en mi corazón y que veas que te deseo en estos momentos con toda mis ganas y que yo realmente también deseo preñarte y hacerte un hijo, pues eres la mujer que en estos momentos más deseo en el mundo”

Diciendo esto me coge con fuerza por mis caderas y dándome un fuerte empujón, sin sacármela de mi coñito, hace que nos demos la vuelta quedándose él encima de mí. Comienza a follarme con fuerza con un potente dentro y afuera con su polla en mi coño, notando yo como me golpeaba una y otra vez con la punta de su espada en la entrada de mi útero. Esta forma de follarme de mi amante, no tiene que ver nada con la forma con que me había follado en otras ocasiones. Noto en cada una de sus embestidas la pasión que en esos momentos sentía por mí. Me agarra con sus dos manos por mi cuello y a medida que se va excitando me va apretando más fuerte con sus manos. Yo estaba disfrutando como hacía tiempo no lo hacía y estaba en un orgasmo continuo, cuando me comienza a faltar el aire por lo que me aprieta mi cuello, siento que mi amante se tensa y a los pocos segundos comencé a sentir el calor de su esperma como inundaba mi vagina y afloja sus manos y yo puedo coger aire y respirar profundamente de nuevo.

Ibra se deja caer sobre mi cuerpo, cansado y sudoroso y yo noto que con mi excitación he debido de echar gases por mi culo, en uno de esos pedos se me ha salido un poco de mierda, pues siento en mi culito algo pastoso, noto en mi nariz un fuerte olor a mierda y muy ruborizada y avergonzada le digo a Ibra:

“Mi amor, perdona, pero con las fuerzas que he hecho y la excitación, cuando me has estado follando se me ha salido un poco de mierda por mi culito, acércame un poco de ese rollo de papel higiénico que tengo en la mesilla para limpiarme, por favor”.

Entonces él, se levanta de encima de mi cuerpo y me abre mis piernas y se coloca entre ellas. Me coge cada una de mis piernas con sus manos y me las pone apoyadas en sus hombros. Luego baja su cara a mi culo y ayudándose con sus manos me le abre, acerca su lengua a mi raja anal y comienza a pasarla a lo largo de toda ella hasta que llega a mi agujerito. Con cada lamida me va limpiando los restos de la mierda que he echado por mi culo mientras él me follaba, tragándose los restos de mierda que va quitando hasta que consigue quedármelo completamente limpio y luego cuando acaba me dice:

“Esperanza, tú me has demostrado lo que sientes por mí y que estas dispuesta hacer todo lo que yo desee hacer contigo y con tú cuerpo. Y yo con este gesto que acabo de hacer, limpiarte tu culo con mi lengua y tragarme tus excrementos, quiero demostrarte yo también lo que realmente siento por ti. Pues, aunque seas mi puta y te entregues por completo a mí quiero hacerte ver, que ocupas, desde que te he conocido un lugar muy importante en mi vida. Aunque no por ello dejes de ser mi puta y pueda hacer contigo y tu cuerpo todo lo que desee (al menos durante el tiempo que tus ex alumnos te han cedido a mí), y referente a lo que has dicho sobre tú deseo que te preñe y tengas un hijo mío, puedo asegurarte que yo también lo deseo con todas mis fuerzas”.

Yo acerco mi boca a la suya y le doy un beso, con lengua, saboreando mi propia mierda y le digo:

“Gracias por lo que acabas de decirme Ibra, te quiero”

Él entonces me da una palmada en mi culo y me dice:

“Venga vamos a prepararte para exhibirte ante mis compatriotas. Primero, no quiero que te laves, quiero que lleves mi corrida dentro de tú vagina y tu pelambrera manchada de ella. Por tanto, comencemos colocándote los tatuajes, hoy llevaras todos los que cuando te prostituyas la semana que viene tendrás que llevar”.

Una vez colocados los tatuajes, va al armario y me saca la ropa que debo de ponerme para salir esa tarde: Unos pantis de cristal color carne y una camisola semi transparente de color blanco que me llega por su parte de abajo justo a la mitad de mi coñito, de tal forma que se me ve perfectamente mi sexo y toda la raja de mi culito y con toda claridad mis dos tatuajes del As de picas. Me miro a los espejos y se me ve prácticamente desnuda bajo un velo de ropajes transparentes, el de la parte superior de mi cuerpo blanco y el de la parte inferior color carne. No me ha dejado que me ponga bragas y siento los pantis por la zona de mi coñito completamente mojado y pastoso, debido a la cantidad que estoy echando por esa zona de mi cuerpo, del semen de Ibra mezclado con mis propios jugos. Al verme en el espejo me siento desnuda por completo, le miro con mirada suplicante y él entiende perfectamente todo lo que le estoy diciendo con esa mirada, entonces fijando su vista en mí, con firmeza me dice:

“No Esperanza, no me mires pidiéndome que no salgas así vestida, vas a salir así porque es como quiero que te vean los hombres a los que vamos a visitar. Quiero que les calientes, de tal forma, que la semana que viene guarden cola todo el día para poder follar contigo y que si es posible repitan y te follen en varias ocasiones”.

Yo bajo mi cabeza y miro hacía el suelo durante unos segundos y muy bajito le digo:

“Por favor Ibra, es que así estoy prácticamente desnuda, se me ve a la perfección todas mis partes íntimas y si salgo así a la calle, no sé qué podrá pasar. Seguramente me detengan por escándalo público y eso no me lo puedo permitir, sería mi ruina total, pues perdería mi trabajo, mi reputación ante todas las personas que me conocen caería por el suelo. Además, Ibra, estoy segura que con algo de ropa encima de como estoy, que deje ver sin ver, lo que va debajo, excitará más a tus amigos y será mejor para tus propósitos de hacer propaganda para que la semana que viene soliciten mis servicios. Por ejemplo, ponerme una faldita corta que si me agacho se me vea todo y que según ande también vaya enseñando parte de mi anatomía intima. Por favor piénsalo y no me obligues a salir así a la calle, por favor. Aunque si no quieres que me ponga la faldita, si es lo que tú quieres, saldré así, prácticamente desnuda a la calle y que luego pase lo que Dios quiera, pues he dicho que soy completamente tuya y que podías hacer conmigo y mi cuerpo lo que tú quisieras y no debo de oponerme si este es tu deseo: que salga prácticamente desnuda a la calle, así lo haré, aunque me cueste muy caro para toda mi vida”.

Ibra, se queda mirándome y dándole pena de mí, accede a que me ponga una faldita corta tipo escoces, del tipo que llevan las colegialas, que prácticamente no me tapa el culo, pues termina donde acaban mis glúteos.  Me la pongo y pruebo a inclinarme hacía delante, comprobando en los espejos que, al hacerlo, he dejado al aire prácticamente todo mi culo. Luego ando unos pasos y veo en el espejo que según doy los pasos, se me sube la faldita, dejando que se me vea gran parte de mi sexo y pelambrera, que se aprecia perfectamente bajo los pantis de cristal color carne. Cuando me estoy viendo reflejada en los espejos de la habitación Ibra me dice:

“Venga Esperanza ya has conseguido lo que querías, ponerte la faldita, de modo que ahora putita vamos a la calle a mostrar tus encantos a todos esos hombres que estoy seguro te van a devorar con sus ojos y les vas hacer desear estar contigo en cuanto puedan”.

Salimos a la calle y con todas las personas que nos cruzábamos me miraban y murmuraban insultos y palabras contra mi y la forma de ir vestida, la palabra que más oía y me decían era puta, golfa, cuanto quieres por follarte, guarra, etc.

Llegamos a la nave donde vivían los negros del top manta y ocurrió como las otras veces. Fue llegar me hicieron un circulo alrededor de mi cuerpo y comencé a sentir varias manos negras sobre mi cuerpo, por encima de mi blusa (que en pocos minutos la tenía completamente abierta mostrando al aire mis grandes pechos, los cuales eran el centro de las miradas de la mayoría de todos aquellos hombres, los cuales se empujaban unos a los otros por poder tener uno de mis pechos en sus manos y los más atrevidos osaron incluso a chupar mis pezones. Todo esto me excitaba muchísimo y sobre todo cuando Ibra se acercó a mí y desabrochando el botón de la faldita de mi cintura, la dejó caer al suelo, quedando yo prácticamente desnuda, al quedar desde mi ombligo hacía abajo hasta mis pies, solamente con el panti de cristal color carne, bajo él cual, se me podía apreciar perfectamente mi cuerpo desnudo ( la rajita de mi coñito, la pelambrera que me lo cubre y por detrás toda la rajita de mi culito). Al tocar mi sexo, podían notar la humedad pastosa del semen de Ibra mezclado con mis flujos y leer perfectamente el tatuaje en el que ponía que yo era la puta de Ibra y la flecha que indicaba con la otra leyenda en la que decía que mi coñito era de su propiedad. Uno de ellos dijo:

“Joder amigos, esta puta esta completamente mojada y yo creo que incluso tiene su coño lleno de leche o al menos eso me parece a mí, aparte de su propia corrida, será guarra la puta”

Ibra, dándose importancia les contesta:

“Si hermanos, es verdad eso que acabas de tocar es mi leche, pues antes de venir aquí me la he follado y he querido que venga así aquí, para que todos comprobéis lo puta que es y que todos sepáis que me pertenece y que la pongo a vuestra entera disposición (bajo el pago de 5 euros por el servicio completo) a partir del lunes de la semana que viene. Os espera en la calle………nº.. es decir, en el mismo bloque que yo vivo y en el piso de enfrente al mío. Putilla díselo tú, diles que les esperas a todos y que podrán follarte a pelo, sin condón y por solo 5 euros”

Ibra me da una palmada en uno de mis pechos y con la cabeza me indica que diga en voz alta lo que él acaba de decir aquellos hombres. Yo haciéndole caso les digo:

“Si amigos, si queréis pasar un buen rato conmigo, podéis hacerlo en la dirección que Ibra os ha dicho a partir del lunes. Por solo 5 euros, podéis follarme y hacerme un completo y lo más importante lo podréis hacer sin usar preservativo, o condón, (como vosotros lo llamáis) y correros dentro de mi vagina, me gustaría que alguno de vosotros me quedarais preñada. Os espero, no me falléis, podréis follarme por cualquiera de mis agujeros, por el que más os guste y usarme hasta que os corráis dentro de mí, por la ridícula cantidad de 5 euros”.

Me parecía mentira oír esas palabras de mi propia boca, yo una señora decente ante todas mis amistades y conocidos me comportaba como lo que realmente era una verdadera puta. Estaba haciendo caso y sin voluntad de contradecirle a lo que me decía mi querido Ibra, mi negro y dueño en esos momentos, porque en realidad tenía razón era su PUTA.

Tras decir esto Ibra, se acerca a mí, aparta a todos los hombres que me están tocando y sobando y dándome un beso en la boca y tocándome con su mano derecha mi coñito (por encima del panti) y con su izquierda mi pecho derecho desnudo, me dice en voz baja:

“Gracias, mi blanquilla, te quiero. Abróchate la blusa, ponte la faldita y volvamos al piso, al ver como te sobaban todos estos y las ganas que tienen de follarte, me ha calentado y estoy deseando de llegar al piso para volver a follarte tanto por delante como por es culito tan hermoso que tienes y sobre todo de poder comerme esos pedazos de tetas que tienes, y me encanta que seas mi PUTA”.

Hice lo que me dijo y cuando nos marchábamos, mientras yo muy sensualmente les decía adiós con mi mano, Ibra les dijo:

“Adiós amigos y recordar que a partir del lunes MI PUTA os espera en la dirección que os he dicho, y podréis disfrutar de su cuerpo y follarla tanto por su chocha como por su culo sin condón todos los que queráis por solo 5 euros. Nunca se os ha ofrecido una mujer tan imponente como esta por un precio tan bajo y encima es una mujer blanca entregándose a todos vosotros hombres negros como yo. Ya habéis podido comprobar, por los tatuajes de sus muslos (As de pica negro) que le encanta y apetece con follar con los hombres de nuestra raza. Aprovechad esta oportunidad, pues por este precio solo la podréis gozar las tres semanas que vienen, después si queréis disfrutarla tendréis que pagar su precio normal y será ya con condón o como ella dice con preservativo. Os lo vuelvo a repetir, las tres semanas que viene la podréis tener por 5€ y follarla sin condón, pasado este tiempo será como os he dicho (y os lo repito, aunque parezca pesado) su precio normal y con condón”.

Cuando llegamos al piso, nada más entrar y cerrar la puerta, no me dejó ni siquiera llegar a la habitación de los espejos, pues me recostó contra la pared del pasillo, me cogió por la solapa de mi blusa y dando un tirón de ella me la abrió quedando toda abierta y mis grandes pechos bailando al aire. Luego tiró de la blusa hacía abajo, consiguiendo sacármela de mi cuerpo. Después a la altura entre mi ombligo y mi sexo, haciendo fuerza con uno de sus dedos, consiguió hacer un agujero en el panti y después metiendo otros dos o tres dedos consiguió rajar la prenda consiguiendo hacer una raja desde donde había hecho el primer agujero hasta por debajo de la parte inferior de mi coñito, dejando de esta forma completamente vía libre para poder follarme por mi coño sin necesidad de quitarme los pantis. Luego acercó su boca a la mía dándonos un gran morreo. Cuando acabamos de besarnos, me dio un fuerte manotazo en mis glúteos y me dijo:

“Vete para el dormitorio y espérame como ya sabes que me gusta”

Yo hice lo que me dijo y cuando llegue al dormitorio, me eche boca arriba sobre las sabanas (que estaban todas manchadas del semen de Ibra y de mis flujos como consecuencia de la follada que me había echado antes de ir a visitar a sus amigos), con mis piernas semi dobladas y totalmente abiertas y con mis manos también abiertas para que pudiera apreciar perfectamente la pelambrera de mis axilas (pues sé que le gusta que tenga pelos en esa zona de mi cuerpo y que no me los quite al saber que a él le gusta que los tenga). No llevaría ni dos minutos echada y ofrecida para él, cuando entró mi amante de ébano, completamente desnudo y con su miembro totalmente erecto. Se subió a la cama y colocándose entre mis piernas apunto con su herramienta a la entrada de mi rajita vaginal y de un solo empujón consiguió introducirme completamente toda su hermosa polla, hasta llegar a la entrada de mi útero. Comenzó a follarme con ganas y pasión, en cada embestida me decía palabras de amor y me confesaba que me quería y me deseaba. A medida que la excitación fue creciendo con la follada, las palabras fueron cambiando pasando a llamarme perra calienta, puta, zorra etc. Me gustaba y me excitaba que me insultara y que al poco tiempo volviera a tratarme con la ternura y las palabras de amor de un enamorado. Estuvimos follando por mis dos oquedades hasta las 8 de la noche en que apareció completamente desnuda en la habitación Awa. Ibra al verla, se apartó de mí y bajándose de la cama, se sentó en la descalzadora que hay en la habitación, y mirándome me dijo:

“Esperanza, como ves mi hermana ha sido puntual y está aquí para que la pagues por sus servicios con tú cuerpo. Quiero que la hagas vibrar de placer y que ella haga lo mismo contigo, yo os estaré mirando y de esa forma me tomaré un respiro y repondré fuerza. Cuando ella y tú hayáis acabado, tú y yo continuaremos aprovechando que le has dicho a tú marido que no te espere despierto. Hoy disfrutaremos de nuestros cuerpos tú y yo hasta que ninguno de los dos tengamos fuerza para seguir. No pararemos hasta ese punto, sea la hora que sea, ya que hoy es el último día que solo vas a ser para mí (pues el lunes cuando vuelvas, antes de que te prostituyas te follaré yo y eso lo haré todos los días, pero luego el resto del día serás de tus clientes”.

Awa y yo estuvimos amándonos y gozando la una de la otra durante una hora, nos besamos por todo nuestros cuerpo, nos comimos la una a la otra nuestros sexos y con un consolador de cintura yo la follé a ella por su negro y delicioso coñito y ella me lo hizo a mí por mi culito, pues no quiso hacerlo por mi coño, diciéndome que en esa relación ella era la hembra y que dado que era el pago por su trabajo quería que yo hiciera el papel del macho. Gozamos muchísimo las dos y cuando acabamos las dos estábamos bastante sudadas y agotadas. Awa se marchó a duchar y no la volví a ver en toda la noche, pues siguiendo las indicaciones de su hermano se marchó a su casa dejándonos a los dos solos.

Tras esto Ibra me dejó descansar unos diez minutos y no me dejó lavarme, pues me dijo:

” Descansa un rato, pero no te laves, quiero seguir amándote percibiendo ese olor que desprende tú cuerpo a sexo y a puta viciosa, pues es así como realmente me gustas, siendo así de guarra, viciosa y puta, Si continúas siendo así conmigo vamos a ser amantes y amigos durante mucho tiempo”.

En este descanso estuvimos hablando, y entre otras cosas me dijo:

“Esperanza, yo sé que en esta semana que llevo follándote te he preñado, aunque no lo pueda asegurar, pues hasta que no llegue el día que te corresponde la regla, que según tus cálculos es el 21 o 22 de junio, no lo sabremos seguro, pero algo en mi interior me dice que así es. Quiero que, aunque no sea fiable, este fin de semana te compres un test de embarazo y que el domingo te hagas la prueba con él a ver que da. Sé que dichos test cuando realmente son fiable son cuando hayas tenido la primera falta, pero que también a partir de 10 o 12 días desde que te hayan preñado es casi fiable. Deseo que lo hagas, pues aunque ya no puedo parar lo de prostituirte, a partir del lunes, en estas tres semanas que faltan para la fecha en que te debe venir de nuevo la regla, quiero tener al menos casi con toda la seguridad que sea posible que estés preñada de mí. Ya que luego te van a follar tantos hombres que si no has quedado ya preñada, podrías quedar preñada de cualquiera de ellos y yo mi amor, quiero ser yo, el que te preñe y te haga esa barriga que tanto deseo y sobre todo tener un hijo contigo”.

Yo le di un beso suave en sus gordos labios y le dije:

“Ibra, yo tengo la misma sensación en mi interior y pienso que SÍ has conseguido quedarme preñada en estos días. No obstante, aunque, como tú has dicho, el resultado que dé el test de embarazo no será vinculante ni fiable, me haré la prueba el domingo cuando me levante,para que de esa forma haya pasado mayor cantidad de tiempo desde el primer día que me fóllastes. Pero te repito que yo siento dentro de mí que ya estoy preñada y como el único que ha entrado su polla en mí, desde que terminé la regla pasada, has sido tú, estoy segura de que has conseguido preñarme. Y yo también, como te he dicho antes quiero y deseo que me hagas un hijo tuyo por que has conseguido que sienta algo por ti que nunca pensé que lo sintiera y deseo tener ese hijo de los dos, mi amor”.

Tras mi descanso volvimos a nuestra batalla sexual en la que fui de nuevo penetrada por todas mis oquedades, gozando ambos intensamente de nuestros cuerpo y sentimientos mutuos del uno hacía el otro. Acabamos cerca de las dos de la mañana, completamente agotados, los dos abrazados y besándonos, esperamos a recuperarnos. Pasada medía hora le pregunté a Ibra:

“Ibra, deseas que me quede a dormir contigo esta noche?

Y él me contesta:

“Sí que lo deseo Esperanza, pero soy consciente que si no queremos que tú marido se mosquee aún más de lo que debe de estar. Dada la llamada que le hiciste esta tarde, lo mejor para que todo siga sin problema (hasta que llegue la ocasión de que tú marido sepa que la criatura que, dentro de nueve meses, vas a parir no es suyo, pues estoy seguro que nuestro hijo/a será de mi raza) será mejor que te marches y duermas en casa y que cuando se levante mañana te vea en la cama con él. Si te dice algo le dices que después de cenar fuisteis algúna discoteca o pub a divertiros un poco y que se te hizo más tarde de lo que esperabas. Y si puedes te levantas antes de que él lo haga y llamas alguna de tus amigas más íntimas para que corrobore tu versión de esa noche que le hayas dicho a tú marido. Me gustaría de verdad mi amor que te quedaras conmigo esta noche, pero debemos de ser prudentes y conseguir que esto llegue a buen puerto o al menos que tú marido no sospeche nada hasta que des a luz. Venga no lo pensemos vamos a quitarte esos tatuajes y después te duchas y te marchas. ¿Supongo que abras pedido el día en el trabajo para comenzar el lunes por lo menos a las 11 de la maña a prostituirte, teniendo en cuenta que antes tienes que follar conmigo?”.

Yo le contesto:

“Tienes razón, aunque los dos queramos seguir y pasar la noche juntos, será mejor que me marche. Y respecto al permiso en el trabajo, si lo he pedido, pero tengo que estar allí a las 8,30 para poner a los alumnos un examen que teníamos programado, pues ya sabes que estamos en época de exámenes y no puedo aplazárselo. El examen acabará a las 9,30 y después me vendré para acá, de modo que yo creo que a las 10 estaré aquí para estar contigo y después hacer lo que tú quieras. Seguir estando contigo o entregarme y prostituirme como tú deseas mi amor. Mi marido cree que estaré trabajando y le he dicho que como es época de exámenes llegaré esa semana y la siguiente bastante tarde a casa”.

Él me contesta:

“Gracias, Esperanza, estas en todo. Como premio este fin de semana voy a instalar en este dormitorio un bidel para que después de cada servicio con un cliente, te puedas lavar al menos tu chochita o tú culito. Pues he contratado a unos albañiles negros que son de mi país, para que lo hagan, sin falta, en esos dos días, eso sí la factura la tienes que pagar tú. Con el bidel en el dormitorio de los espejos, ganaremos tiempo y podrás tener por lo menos de dos a cuatro clientes más diarios, pues el tiempo que perderías con ir al cuarto de baño no lo perderás y lo podrás utilizar en atender a otros clientes”

Le di un beso, y cogiendo mi bolso cogí un talón y rellené por un importe de 1500 euros, y le dije:

“Toma mi amor, compra con esto los materiales y paga a los paisanos tuyos por su trabajo, supongo que tendrás bastante con este dinero, si es más le dices que el lunes, cuando yo vuelva les darás lo que falte”.

Luego me vestí, con mi ropa que había traído puesta del colegio y al despedirme e ir a cerrar la puerta me dijo:

“Esperanza, este fin de semana, aprovecha para compra por lo menos 15 o 20  pantis como los que has llevado hoy y negros (también de crista), medias de cristal también color carne y negras con la liga o blonda de esas que te llegan a medio muslo,  y algunos ligueros de varios colores, y varios conjuntos de sujetadores y braguitas de diversos colores. Los vas a necesitar, porque más de uno de tus clientes te van a romper lo que lleves opuesto y quizás algunos hasta se quieran quedar con tus braguitas u otra de las prendas que lleves en ese momento”.

Yo dándole otro beso y a la vez que me marchaba le dije:

“De acuerdo, me va a salir más caro el prostituirme que lo que voy a sacar con ello, pero, aunque solo sea por tenerte contento haré lo que me has dicho. Compraré 15 pantis de cada una de las clases que me dices, 10 pares de medias de cada una, 5 ligueros y conjuntos de ropa interior transparentes, blancos, beige, negros, granates, rojos y violetas, 6 conjuntos de cada uno de ellos. Todo ello me costará bastante dinero, pero por ti mi amor hago lo que me pidas”.

Cogí el coche y me dirigí hacía mi casa donde llegué cerca de las tres y media de la mañana. Cuando llegué mi marido ya estaba dormido y roncando en la cama. Me quité mis ropas y me puse unas bragas (pues iba sin ellas, dado que las mías se habían quedado como todos los días, Ibra con ellas), luego me puse un fino camisón que me llegaba hasta medios muslos y me acosté. Ya en la cama sentí como de mi coñito salía abundantes líquidos y me mojaban completamente mis braguitas (era el semen de Ibra mezclado con mis jugos, pues esa tarde noche Ibra me había llenado por completo mi útero y vagina con su semen).  Me levanté a las 8 de la mañana, me fui a la cocina y llamé a dos de mis amigas y les dije que me cubrieran con la mentira que le contaría una hora más tarde a mi marido. Luego no pude reprimirme y tuve que masturbarme, pensaba solo en Ibra y volver estar con él. Tras esto y sin lavarme (mi coño desprendía un fuerte olor, que, aunque reconocía que era una güarreria tenerle así, me excitaba), pues quería que mi marido oliera el olor que mi coño desprendía, me fui a la cama donde seguía dormido mi marido y me volví a acostar. A las 9,30 me despertó y me pregunto que a que hora había llegado, le dije que a las 3,30 y le conté la historia de la discoteca como me había dicho Ibra y parece que no sospechó nada. Le nombre que había estado con las dos amigas que había llamado hacía un rato, sin que él se enterará. Me levanté y dejé mi camisón abierto por la parte de abajo hasta mi ombligo, de tal forma que mi marido pudiera ver cuando me mirará mis bragas todas mojadas y manchadas del semen de Ibra y de mis propios jugos. En mi interior quería que lo viera y que me preguntara como estaba así y de quién era ese semen, pero no lo hizo, quizás fue lo mejor, porque sino, no sé como habría encajado decirle que había estado follando con Ibra.

Tras desayunar, le dije a mi marido que tenía que hacer unas compras, que si quería nos podíamos ver a la hora de comer en el restaurante donde solíamos ir por el centro de Madrid. Me dijo que, de acuerdo, que allí nos encontraríamos sobre las dos y cuarto de la tarde.

Me fui a mi cuarto me desnude y después me metí en la ducha donde me limpie todos los restos que me quedaban del semen de Ibra y de mis jugos. Luego me vestí con mi ropa normal, con la que habitualmente voy a trabajar y fui hacer las compras que Ibra me había indicado. Me gaste bastante dinero en comprar todo lo que me dijo. Para que mi marido no sospechara, al ver el movimiento tan excesivo en compras, pague de la cuenta privada que yo tengo. Metí todo en el maletero de mi coche y me acerqué a una farmacia cercana donde pedí un test de embarazo.

Cuando acabé de comprar todo eran ya las 13,45 h, de modo que me dirigí derecho al restaurante donde había quedado con mi marido. Cuando llegue, él ya llevaba allí un buen rato y estaba acompañado con Ignacio. Me sorprendió ver allí a mi ex alumno, pues no lo esperaba y tampoco me había dicho nada, pero con una sonrisa en la cara, le di un beso en la cara y le dije:

“Buenas tardes Ignacio, que sorpresa, no te esperaba”

Y él me contesta:

“Me invitó Pepe, tu marido, ayer por la noche cuando salimos a tomar unas copas con mis amigos y algunas amigas maduritas, pues como sabes sois las mujeres que nos gustan a mí y a mis amigos. Nos lo pasamos muy bien, ¿verdad Pepe?”

Mi marido contesta:

“Si nos lo pasamos bastante bien. Es que cuando tú me dijiste que no podías venir ayer para hacer nuestra salida semanal de los viernes, llame a Ignacio y pasó a recogerme”

Yo entonces dirigiéndome de nuevo a Ignacio le dije:

“Gracias Ignacio a ti y a tus amigos por aceptar a mi marido para salir con vosotros cuando yo no puedo. Estoy segura que es verdad que todos vosotros lo pasasteis bien, las que no creo que disfrutaran tanto fueron vuestras amigas maduritas, ¿las conozco yo?”

Ignacio riendo, me dice:

“Sí, si que las conoces, son algunas madres de tus ex alumnos y ex compañeros nuestros, que sin que sus maridos lo sepan se divierten con nosotros. A propósito, por la época del año que estamos la semana que viene o la otra estarás muy ocupada pues es la época de los exámenes ¿no?”

Yo le contesto:

“Si ahora tenemos mucho lio, pues como tú dices es época de exámenes y a parte de esto de reuniones y evaluaciones, aparte de tener que corregir todos los exámenes. Por eso la semana que viene llegaré a casa, seguramente todos los días bastante tarde querido, de modo que, si quieres quedar con Ignacio y sus amigos para la semana que viene no estar solo, tienes mi consentimiento para hacerlo”

Mi marido no esperaba mi respuesta y se queda callado, entonces Ignacio le dice:

“Joder Pepe, es cojonudo vente con nosotros, ya sabes lo bien que lo pasamos y la semana que viene hemos quedado con nuestras amigas maduritas y ya sabes que con ellas lo pasamos de maravilla y más la semana que viene que iremos un día o dos a un piso que tenemos alquilado en Carabanchel para pasarlo “bien”, tu ya me entiendes, con estas amigas. Además, podrás conocer a la madre de otro compañero mío, con la que estoy saliendo sin que el marido sepa que le pone los cuernos conmigo. Y además no tendrás problemas con Esperanza, pues acaba ella de darte permiso para ello, ja, ja, ja…..,veras que bien lo pasamos”.

Me cogió de sorpresa lo que acababa de decir Ignacio, de que la semana que viene le llevarían a mi marido al piso e Carabanchel y más que en él conocería a la madurita con la que él salía (que no era otra más que yo). No sé qué pretendía y que haría para que no me reconociera mi marido. Comimos y cuando esperábamos el café dije que tenía que ir al aseo y le hice una señal disimuladamente a Ignacio para que fuera él también, para hablar con él del tema de la visita al piso de Carabanchel. Yo esperé en el pasillo de los aseos a que llegara Ignacio, que lo hizo a los pocos segundos y al llegar le pregunté:

“¿Qué es lo que pretendes, que mi marido descubra todo? ¿Cómo se te ocurre decirle que le vas a presentar a la madurita con la que tú sales, cuando los dos sabemos que soy yo? ¿Qué vas hacer para que no me reconozca?”

Ignacio muy tranquilo, me dice:

“No te preocupes “Profe”, esta todo estudiado e Ibra sabe lo que tiene que hacer. No hablará contigo pues solo verá cómo te follan los negros e incluso te vas a llevar una sorpresa pues él mismo, tu marido, va a colaborar para que te follen sin saber que eres su esposa. No te preocupes porque es parte de la trama para tenerle aún más agarrado, por si se ponen feas las cosas cuando se entere de que estas preñada de un negro. Es por tú bien y para defender tus intereses, confía en mí y en Ibra”.

Yo entonces, al decir que Ibra sabía esto, me quedé más tranquila pues sabía que Ibra no consentiría en que mi marido me reconociera. Le di una bofetada a Ignacio en la cara y al recibirla, él se sonrió y agarrándome de la muñeca derecha, con la que le había dado la bofetada, me atrajo hacía él y me dio un beso en la boca. Cuando me soltó me dirigí hacía la mesa donde nos esperaba mi marido y me senté a esperar el café. Ignacio tardó aún dos o tres minutos más en llegar.

Tras el café, mi marido pagó la cuenta y nos despedimos de Ignacio y marchamos a la calle a dar un paseo, después fuimos a casa a descansar un rato. Mi marido se quedó viendo la televisión y yo fui al dormitorio a echarme un poquito, pues habíamos quedado con unos amigos para salir esa noche a ver una película y después a cenar. No pude dormir, pues mi mente no paraba de pensar en Ibra y tuve que volver a masturbarme pensando en él. Además, estaba intranquila por el encuentro que tendría la semana que viene con mi marido en el piso de Carabanchel, por si por cualquier fallo me reconocía”.

Tras cenar, tomamos unas copas en varios garitos de Madrid y cuando llegamos a casa mi marido tenía ganas de follar, pero yo le puse la excusa de que estaba muy cansada y que no tenía ganas y que quería descansar. No quería que me follara sin saber antes si Ibra habría conseguido preñarme, y eso no lo sabría hasta el oro día por la mañana.

A mañana siguiente nada más levantarme, me fui al aseo (donde el día anterior había escondido el test de embarazo), eché mi primera orina en un pequeño recipiente de cristal limpio, que había llevado al baño el día antes con esa idea. Luego saque el test de embarazo de la caja y le introduje rápidamente durante unos segundos en la orina (el tiempo que me indicaba en la caja de la prueba que lo tuviera) y a continuación lo retiré. Después lo coloqué encima de la repisa que tenemos en el baño, (la prueba) y esperé a que me diera el resultado, cosa que sucedió a los 4 minutos, y para mi alegría pude ver cómo me marcaba dos rayitas azules, señal que me indicaba que estaba preñada.

El ver las rayas dando el positivo de mi embarazo, me dio una gran alegría, que no podría manifestar delante de mi marido. Lo que si podía saber con certeza que la criatura que naciera era hijo de Ibra, aunque a partir del lunes me tuviera que prostituir durante tres semanas más con hombres de raza negra, para asegurar quedar preñada de algún hombre de esta raza. Todo esto por si el positivo que me había dado habiéndome follado solamente Ibra era falso (recordad que la prueba no era fiable por no haber pasado como mínimo 10 o 12 días desde que empecé a follar con él, tras acabar mi regla pasada). Deseaba dar la noticia a Ibra y sobre todo volver a estar con él y que me hiciera de nuevo suya por todas mis oquedades. Pero era domingo y era un día en que me sería difícil despistarme de mi marido. Pero parece que la suerte ese domingo se alió conmigo, pues según estábamos desayunando me dijo mi marido:

“Esperanza, espero que no te moleste, pero ayer mientras vosotras hablabais en la cena, quedamos los amigos en ir hoy, a las 10,00 a echar unos golpes, al club de golf. Se que no hemos estado prácticamente nada juntos esta semana, pero insistieron tanto, sobre todo Juan el de Marí Carme que tuve que aceptar. Tenemos pensado volver sobre las tres de la tarde. Te prometo que a partir de esa hora no me separaré el resto del día de tú lado mi amor”

Las palabras de mi marido, me hicieron que me entrara una alegría inmensa, pero que no podía demostrar delante de él. Yo entonces, hice con que me molestaba que me dejara sola, aunque pasado unos segundos, le di un beso en su mejilla y le dije:

“Bueno, no es que me guste mucho, pues quería estar hoy todo el día junta contigo, ya que el viernes te quedé plantado y a lo largo de la semana pasada he llegado a casa, por mi trabajo, varios días más tarde de lo habitual y de lo que realmente hubiera querido. Y lo malo es que la semana que viene y quizás las dos siguientes, como dijo ayer en la comida Ignacio, son fechas de exámenes y me va a pasar lo mismo. Pero bueno no quiero que dejes de ir, pues no me gustaría que tus amigos pensaran que soy una mandona y que te he prohibido que vayas. Me conformo con que estés desde que vuelvas este mediodía, todo el resto de lo que quede del día conmigo y que me atiendas un poquito sexualmente, pues desde que sales con Ignacio y sus amigos y con esas maduritas que salen con ello, parece que te dan suficiente como para no querer hacerme el amor. Mi amor estoy deseosa de estar de nuevo entre tus brazos y me hagas el amor como tú sabes hacérmelo (le mentía, pues en mi mente solo estaba el estar cuanto antes con Ibra)”

No sé que es lo que me estaba pasando, pero solo deseaba estar con Ibra, me era necesario, necesitaba sentir su hermosa y gorda polla taladrándome todos los agujeros de mi cuerpo. Los fines de semana que no podía estar con él, se me hacía larguísimos y solo pensaba en que llegara pronto el lunes para poder entregarme por completo a él y ser suya y que hiciera conmigo y mi cuerpo todo lo que deseara. Parece mentira que una señora de clase digamos alta y relacionada con personas muy importante en la sociedad, como era yo, estuviera de esta forma prendada y necesitada de estar y pertenecer a un negro ilegal en España. Pues Ibra y Awa (su hermana) no tenían papeles y sin apenas recursos económicos (se dedicaba al trapicheo y otros asuntos, como prostituir de vez en cuando a su hermana y otras mujeres y sospecho que a vender algo de droga, aunque esto no es seguro) mal vivían en un piso pequeño y sucio, en el que no pagan el alquiler y el propietario no se atreve ni siquiera a pedírselo. Pero era tal el poder y la atracción que este hombre, grande y negro de unos 15 años menor que yo, ejerce sobre mí, es algo especial que hace que no pueda prescindir el estar con él y deseando de estar y ser su amante e incluso si él quisiera su esclava, la mayor parte del tiempo que pudiera.

Tras convencer a mi marido que se marchara a jugar al golf con sus amigos, me puse a preparar una comida rápida para cuando llegara él a medio día (al ser fin de semana la chica de servicio y la cocinera tienen libre). Cuando se marchó mi marido a la 10 ya había terminado de hacer la comida, me preparé rápidamente. Luego cogí el test de embarazo con el positivo y me fui a Carabanchel, al piso de Ibra, para darle la buena nueva. Por el camino paré en una farmacia y volví a comprar otro test para repetirlo delante de mi querido Ibra.

Cuando llegué al bloque del piso de Carabanchel, bajé las bolsas y los paquetes de la compra que había realizado el sábado y después me fui directo a llamar a la puerta de Ibra. Eran las 11,00 de la mañana, llamé y me abrió su hermana Awa. Pregunté por él y me dijo que estaba en nuestro piso (es decir el de enfrente, el que tienen mis ex alumnos alquilado). Me despedí de ella y como tenía mi llave del piso entré sin llamar. Ibra al verme se sorprendió, no me esperaba, estaba ayudando a otros dos negros a colocar el bidel en el cuarto de los espejos. Al verme me dijo:

“Que sorpresa, no te esperaba hasta mañana a las 10 de la mañana como me dijiste. Te daba con tu marido hoy, ¿pasa algo para que hayas venido hoy domingo?”.

Yo acercándome a él y dándole un beso, dejé las bolsas y los paquetes encima de la cama de ese dormitorio y le digo:

“Puedes venir, vamos a la otra habitación, tengo que contarte algo”

Él habla con los otros dos hombres y me acompaña a la otra habitación, donde durante los días que hemos estado Ibra y yo en el dormitorio de los espejos, mis ex alumnos han estado con las otras madres de mis alumnos y ex alumnos. Entramos cierro la puerta, le doy un beso en los labios y le enseño el test de embarazo, que ha dado positivo, y le digo:

“Toma, compruébalo tú mismo, según ese test de embarazo, que me he hecho esta mañana cuando me he levantado ha dado positivo. Por tanto, según él, estoy preñada y si al final es fiable, eres tú el único que me has follado en estos días que van desde que acabe mi última regla y hoy”

Entonces él se acercó a mi y me abrazó por la cintura a la vez que con sus gordos labios me daba un fuerte morreo en mi boca, al acabar me dijo:

“Estaba seguro, que te había preñado y estoy por asegurar que lo estas desde el primer día que te follé y me corrí dentro de tú vagina, te quiero putilla, blanquilla y más sabiendo que eres mi puta, pues si no fuera así ahora y hoy, sin tener que estar aquí, no estarías junto a mi y hubieras esperado a decirme esto mañana”.

Yo le contesto:

“Yo también sentía en mi interior que sería así, y es verdad que debo de ser tu puta, pues no he podido resistir el venir a estar junto a ti en cuanto he tenido ocasión. Mi marido se ha ido a jugar al Golf con sus amigos y no volverá a casa hasta las tres de la tarde, por lo menos, de modo que tenemos al menos dos o dos horas y medía para nosotros, mi amor”.

Entonces Ibra, sin dejar de sujetarme por la cintura con una de sus manos, con la otra, bajó tocando mi cuerpo y la metió debajo de mi falda, empezando a levantarla hasta llegar a mis bragas blancas. Con la habilidad, que solo él es capaz, hábilmente logró colar esa mano por debajo de la prenda y comenzó a acariciar mi indefenso sexo. ¡Qué sensación de placer me acababa de regalar, con esa caricia! Nuevamente mi cuerpo empezó a reaccionar por su cuenta y yo perdí el control de este, y antes de darme cuenta, yo estaba aferrada a sus labios devolviéndole el beso que hace un instante acababa de darme.

Él aprovechándose de mi estado de excitación, se pega más a mi y comienza a moverse contra mi pubis, restregando contra mi sexo el gran paquete que forma su polla. Siento como a cada minuto que sigue restregándose contra mi coñito su hermosa espada va aumentando de tamaño y  palpitando con más fuerza. Él separa sus labios de los míos y comienza con ellos y su lengua a lamer mi cara y va bajando a mí cuello y yo entonces aprovecho para emitir unos suspiros de placer:

“Ibra… Ibraaaa… ha, ha, ha… mmmmm…Ibra…..negro cabrón me tienes loca , te quiero sigueee…sigueeee por favor quiero que me hagas otra vez tuya como estos días por favor, a partir del lunes no sé si podremos hacerlo así, pues si es verdad que todos esos hombres de tú raza vienen  para recibir mis servicios y follarme, no sé si al final tendré fuerza para poder recibir esta delicia que tú tienes entre tus pierna. Aaahhhhhh siiiiiiii……ooooooohhhhhhhh…. Te quierooooo y te neceitoooooo…..Ibraaaa……”

Miro hacía la puerta de la habitación y veo que no está cerrada del todo y le digo:

“Ibra, la puerta… la puerta…esta abierta y los operarios que están con el bidel pueden vernos, por favor ciérrala”

Y él ya muy excitado me contesta:

“Que nos vean…”

Volvió a besarme, encontrando mi boca ofrecida y deseando de unirla a la suya. Cuando acabamos de besarnos le dije:

"Bueno, está bien, si no te importa que nos vean y es lo que tú quieres a mi tampoco me importa, Ibra”.

Yo notaba como mi coñito, mi vulva me palpitaba con fuerza, por las ganas tan grande que tenía de que su polla estuviera dentro de ella. Ibra me agarró por mi nuca acercando más su rostro al mío. Yo le dejaba hacer, quería que sintiera que tenía toda la libertad del mundo para hacer conmigo y mi cuerpo lo que quisiera.

Ibra sabía y sentía mi total entrega a él, entonces nos separamos un instante y él cogiéndome de mi mano me condujo en silencio hacía la cama. Cuando estábamos al lado de la cama me apoyó contra la pared y con sus grandes manos manoseo y toco a placer mis grandes pechos. Luego bajo sus manos hacía abajo y metiéndolas bajo mi falda, me separó las piernas y llevó sus grandes manos, por encima de mis bragas, donde se juntan mis piernas sobando a placer todo mi sexo y pelambrera.

Acercó su lengua a mi cuello y me le chupo varias veces a la vez que dejando su exploración en mis bajos, llevó sus manos a la solapa de mi blusa y de un fuerte tirón me la abrió del todo, saltando por los aires más de uno de los botones de la misma. Luego llevó sus manos a mis pechos y los sacó de mi sujetador y comenzó a sobármelos durante unos segundos. A continuación, tomo, entre sus grandes labios negros, uno de mis pezones y luego el otro, sin prisa y con suavidad (cosa que me sorprendió en él). Yo con cada una de sus caricias y chupones de mis pezones temblaba de gusto, no sé que es lo que me pasaba con Ibra, pero cada vez que estaba en sus brazos y entregada a él descubrías cosas nuevas que surgían de mí que nunca antes me habían salido al exterior y a la vez me hacía descubrir nuevas, gratas y excitantes sensaciones. Acabó de quitarme mi blusa y después me arrancó mi sujetador que estaba bajo mis grandes pechos, sujetándolos (que como he dicho antes me los había sacado de la prenda que ahora me acababa de arrancar). Después sin decir nada, me quitó la falda y a continuación mis bragas blancas, dejando toda mi ropa en el suelo y quedándome como era su costumbre solo con las medias hasta medio muslo. Luego me agarró mis manos y las llevó hasta su ropa y me dijo:

“Yo acabo de desnudarte a ti, ahora te toca hacer a ti lo mismo conmigo, mi puta”

Yo comienzo a desnudarlo y cuando ya le tengo completamente desnudo, miró hacía su hermoso sexo y veo que ya está erecto y puedo apreciar sus venas gordas y a punto de reventar. No puedo evitarlo y en un loco arrebato de excitación, acerco mis labios a su duro y musculoso pecho y comienzo a besárselo y lamerlo como él hace un instante ha estado haciendo con los míos. Juego con sus tetillas negras y sus pezones, quiero comérmelos como él hace con los míos cuando los tiene entre sus labios. Ibra me separa de él y agarrándome de mi desnuda cintura me va acercando a la cama y me dice:

“Esperanza, sabes que eres mi puta, pero a parte de eso eres en estos momentos la mujer que amo y a la que quiero, por eso voy amarte en esta cama, como como nunca antes te he hecho, voy amarte como lo que me gustaría que fueras, es decir mi mujer, no como mi puta”.

Me tumbó boca arriba en la cama y después colocándose a mi lado me dio un largo beso, que inició en mis labios, bajó por mi barbilla y cuello, continuó por entre mis senos, entreteniéndose en ellos un rato, para luego seguir por mi barriguita un poco abultada por los años, pasando posteriormente a mi poblado pubis para terminar en mi sexo, que en esos momentos lo tenía al rojo vivo. Yo estoy muy excitada pero más me excité cuando Ibra comenzó a pasar su lengua y labios por todo lo largo de mis labios vaginales hasta llegar a mi clítoris, donde se entretiene en chupármelo, esto hizo que yo me derritiera de placer aún más de lo que estaba. Yo no deseaba que se saliera de entre mis piernas y por eso instintivamente trataba de cerrar las mías alrededor de esa cabeza negra, que con cariño me abría los músculos para hacerse espacio y saborear mejor los néctares que mi encharcado coñito estaba derramando en esos momentos. Yo le decía entrecortadamente:

“Aaahhhh siiiiiiii Ibraaaaa  asiiiiiii asiiiiiii , como me gustaaaa lo que me estas haciendooooo…..te quieroooooo……ahhhhhhhh….sigueeeee….sigue chupándome mi coñoooo por favoooorrrrr y muérdeme mi clítoris , me estas volviendo loca mi amor.”

Mi amante según se va excitando va dejando de ser tierno, de las lamidas largas e intensas pasa a hurgar con su lengua cada recoveco de los pliegues de mi cueva interna, y esto me hace subir al cielo. Sus labios llegan a mi clítoris y ahora lo atacan sin piedad, presionándolo, mordiéndolo, lamiéndolo, apretándolo con sus lengua y labios hasta mordisquearlo con delicadeza. Él sabía que eso me volvía loca y me condujo hasta donde él quería que no era otro sitio que tenerme totalmente entregada a él. Verme así de entregada le excitó a mi amante negro, entonces se incorporó de comerme mi coño y se colocó de rodillas entre mis piernas, tenía su polla totalmente tiesa, se tendió sobre mí, dispuesto a penetrarme. Acerco la punta de su lanza a la entrada de mi coñito y apretando un poco hacía el interior de mi vagina fue introduciéndome su gorda, larga y hermosa polla poco a poco, lo hizo lentamente. Yo sentía con gran placer como me iba rozando las paredes internas de mi vagina a medida que iba introduciéndose hasta que toco mi útero. Ibra al notar la punta de su polla tocando mi útero comenzó un lento movimiento de dentro a fuera y viceversa, meneando sus caderas en forma circular y rodeándome completa con sus fuertes brazos, haciéndome sentir atrapada

y sin posibilidad de escape, aunque no pasaba por mi cabeza escaparme de ese placer que mi amado Ibra me estaba proporcionando. Nos compenetramos de tal forma que desde ese momento hasta el final de nuestro coito fuimos uno solo. Poco a poco, las velocidad y fuerza de sus embestidas fueron aumentando hasta hacerme sentir como si sus golpes fueran los golpes de un ariete contra una puerta de lo fuerte que estaban siendo sus golpes de polla al follarme. Su larga y gorda espada se enterraba una y otra vez tan profundo dentro de mí que sentía como llegaba en cada una de las ocasiones a golpear mi útero. ¡Era delicioso!, todo su peso oprimiéndome, privándome suavemente de aire, pero sin llegar a asfixiarme y esa polla deliciosa haciéndome pedazos, literalmente haciéndome pedazos. Ni me di cuenta de cuando dejé de gemir y empecé a aullar, como una auténtica perra, de mi boca salían gemidos que poco a poco fueron subiendo de tono hasta que al final eran más gritos que gemidos por el orgasmo que me llegaba que casi me deja inconsciente y más muerta que viva por el inmenso placer que Ibra me había producido:

“Ibra sigueeee, sigueeeee quiero que me llenes toda con tu lecheeee, aprieta fóllame con todas tus fuerzas, golpea fuerte quiero sentirte muy dentro sigueeee mi amooooor aaaahhhhhh siiiiiiiiii, asiiiiiiiiiii me has quedado  preñadaaaaaa……soy la mujer más feliz del mundooooooo, te quierooooo siempreeee dentro de miiiiiiii y quieroooooo que cuando haya parido me vuelvas a preñaaaaaarrrr soy tuyaaaa siiiiiiii toda tuyyaaaaaaa y quiero que me hagas muchas barrigas y muchos hijosssssss a partir dee ahoraaaaaa……te quierooooooo……mi amooooooor….me corrrooooooo…..siiiii….me corrroooooooo…….yaaaaa….aaaaahhhhhhh….”

Me había entregado, a mi negro amante Ibra, como no lo había hecho a ningún hombre en mi vida, lo acababa de hacer con todas mis ganas en cuerpo, alma y mente. Ni aun con mi marido cuando estábamos recién casado y en los mejores momentos de sexo de nuestra vida matrimonial lo había hecho. Y es porque en estos momentos estaba loca por mi negro y estaba dispuesta en hacer en ese momento cualquier cosa que me pidiera, incluso abandonar toda mi vida fuera de ese viejo piso y quedarme a compartir mi vida con él.

Ibra también llego junto conmigo al orgasmo, y me acompaño en mis gemidos y gritos:

“Siiiii Esperanza, siiiii te quieroooooo y deseo seguir haciéndote barrigas e hijoooosss, quiero que seaaassss siempre mi putaaaaaa…..que seaaassss miaaaaaa para siempreeeee…..siiiiii mi putaaaaaa aaahhhhhhh……tomaaaaa….tomaaa…..quieres leche pues tomaaaaa me corrooooooooo siiiiiii me corrroooo siento tú úteroooooooo tocandoloooo con la puntaaaa de mi pollaaaa…..aaahhhhhh….siiiiii me corrrooooooo…..tomalaaaa todaaaaa……te quierooooooo……mi putaaaaa….Esperanzaaaaa….”

Diciendo esto él se salió de mí y se quedó acostado a mi lado, viéndome respirar trabajosamente, cubierta de sudor, desnuda y con las piernas abiertas, miré mi reloj y marcaban las 12,15, nos habíamos estado amando apasionadamente y con mucha intensidad durante una hora y unos minutos. Cuando miré para la puerta estaban los dos obreros en ella, con sus pollas fueras agarradas con sus manos y masturbándose, sus instrumentos eran de un tamaño considerable, no tan hermoso, largos ni gruesos como los de Ibra pero estaban bastante bien armados. Los muy cerdos habían estado viéndonos follar a mi amante y a mí. Ellos al darse cuenta que los había visto, rápidamente se taparon e introdujeron sus pollas en sus pantalones algo nerviosos, dirigiéndose a Ibra le dijeron:

“Ibra, por favor, puedes venir un momento al otro dormitorio, pues nosotros por nuestra parte creemos que ya hemos acabado el trabajo. Es para que veas como ha quedado y si era así como tú lo querías”.

Ibra se levanta como esta y se marcha con ellos al cuarto de los espejos. Mientras yo me voy al aseo a lavar mi coñito en el bidel, y de allí los oigo hablar en su lengua, sin poder saber realmente lo que están diciendo. Cuando termino de lavarme me vuelvo al cuarto donde había estado follando con Ibra, dispuesta a vestirme y esperarle. A los pocos segundos aparece Ibra en el dormitorio con los dos obreros, a mi solo me había dado tiempo de ponerme las bragas blancas, de tal forma que de nuevo me ven prácticamente desnuda. Yo trato de taparme mis pechos con mis manos con el fin de que no me los vieran (cosa absurda cuando hacía un momento me habían visto completamente desnuda y encima siendo follada por mi amante). Entonces Ibra dirigiéndose a mí les dice:

“Os voy a presentar, esta es Esperanza, mi puta y la que os tiene que pagar el trabajo que habéis hecho.”

Yo muevo mi cabeza con una sonrisa y les digo:

“Encantada de conocerlos y gracias por habernos hecho el trabajo en estos dos días. ¿Les ha pagado ya Ibra, pues le día a él el dinero para que lo hiciera? ¿o es que tienen algún problema?”.

Al oír esto Ibra, me dice:

“Esperanza, les he ido a pagar y ellos, tras verte conmigo hace un momento y admirar ese hermoso cuerpo que tienes, me han propuesto que les paguemos, de otra forma, en vez de con dinero”.

Y yo dirigiéndome a ellos y mirándolos a la cara les pregunto:

“¿Y cual es esa otra forma de cobro, si no es el dinero?

Y uno de ellos me dice:

“La proponemos que nos pague con su cuerpo, es decir que haga con nosotros lo mismo que ha estado haciendo hace un rato con Ibra. Los hemos visto, cuando hemos venido a decirles que habíamos acabado y al verla a usted desnuda follando de esa manera con Ibra, que nos ha calentado tanto, que si usted quiere preferimos que nos pague de la forma que le hemos dicho, es decir, con su cuerpo”

Yo entonces les digo:

“Perdonen, no me esperaba eso que me están proponiendo, pues es muy atrevido por su parte. Siempre pensé pagar ese trabajo con dinero, como he hecho siempre. Pero bueno antes de decidir nada quiero consultarlo con Ibra. Por favor esperen un momento”

Y dirigiéndome a Ibra le digo:

“Ibra ven un momento, vamos a otro lugar que discutamos la propuesta de estos señores”.

Antes de salir de la habitación, fui a mi bolso, cogí el otro test de embarazo que había comprado por el camino cuando iba de mi casa a Carabanchel, y cogiendo a Ibra de la mano nos dirigimos al cuarto de baño y nos cerramos por dentro y allí le dije:

“Ibra, ¿cómo se te ocurre que pueda ceder a eso que proponen esos hombres, es decir que me deje follar por ellos?, si hace un mo0mento me estabas diciendo que me querías y que era para ti, si seguía así, la mujer de tú vida”.

Él entonces me contesta:

“Esperanza, eres mi puta y sabes que me perteneces y que te has comprometido hacer todo lo que quiera durante este mes que tus ex alumnos te han cedido a mí. Y quiero que folles con esos dos sin condón ni protección alguna y que sea esa, la forma de pagar el trabajo que han realizado, que por cierto ha sido muy bueno. Por eso quiero que lo hagas y los hagas al menos tan buen trabajo como ellos han realizado”.

Yo entonces enfadada, le digo:

“Es verdad tú manda en mi cuerpo y mi persona durante este tiempo, pero si es verdad lo que has dicho de tus sentimientos hacía mí mientras follábamos, te pido o te pongo una condición para hacerlo”.

Él me dice:

“¿Cuál es esa condición?

Yo enseñándole el test de embarazo nuevo, le digo:

“Vamos a volver hacer un nuevo test de embarazo, este que te estoy enseñando. Si de nuevo da positivo y por tanto me has quedado preñada (que es lo que los dos deseamos), accederé a lo que tú y esos hombres quieren, es decir me entregaré a ellos para que hagan conmigo lo que deseen hasta la una y medía de la tarde, pues sabes que como muy tarde tengo que salir de aquí de Carabanchel a las dos de la tarde, para poder estar a las tres, cuando llegue mi marido en casa. Y si el test da negativo, es decir que no estoy preñada, entonces no me entregaré a ellos y les pagaremos su trabajo con dinero, ¿de acuerdo?”.

Ibra sopesando la propuesta durante unos segundos dice:

“De acuerdo, si el test da que estas preñada, te entregaras a ellos como pago de su trabajo desde ahora hasta las una y media. Y si da que no estas preñada, les pagaremos con dinero”.

Entonces le dije a Ibra, que fuera a la cocina y trajera un vaso de cristal limpio. Me hizo caso y me entregó el vaso. Le cogí y colocándome en cuclillas comencé a orinar en el hasta que le llené. Luego corté de orinar y sentándome en la taza del wáter acabé de echar el orín que aún quedaba en mi vejiga. Tras esto metimos el test en el vaso con el orín y esperamos a que saliera el resultado. Ya cerca de los 5 minutos, de nuevo aparecieron las dos rayitas azules, por tanto, dando de nuevo positivo, es decir que estaba preñada. Me alegró muchísimo que de nuevo diera positivo, pues, aunque seguía sin ser fiable, por el tiempo en que lo estábamos haciendo desde la primera vez que me folló Ibra, ya eran dos veces y con dos test diferentes que salía que estaba preñada y sería muy raro que de no estarlo se repitiera el resultado.

Ibra al ver el resultado, me dio un beso y me abrazó y me dijo:

“Esperanza, que alegría, que este test también haya dado como el que té has hecho esta mañana en tú casa, ahora sí que estoy seguro que te he preñado y te he hecho una buena barriga. Ya no me importa que ahora folles con estos dos y que el lunes te prostituyas con otros hombres de mi raza (porque yo te lo he ordenado, pues sé que si por ti fuera no lo harías), pues sé, con toda seguridad, que la criatura que llevas en tú barriga es mía y que soy yo el que te ha preñado, puta mía. De modo que sal ahí fuera y folla con esos dos y entrégate a ellos como la real puta que eres, es decir como MI PUTA”.

Salimos del aseo los dos, él desnudo (pues no se había vuelto a vestir desde que estuvimos follando) y yo solo en bragas, y nos dirigimos donde nos esperaban los dos obreros. Cuando llegamos, lo primero que hicieron fue preguntarnos:

“¿Que ha decidido señora?”

Yo les contesto:

“He decidido entregarme a ustedes. Pueden hacer con mi cuerpo lo que deseen desde ahora hasta la una y medía de esta tarde, pues a las dos tengo que marchar a mi casa, pues mi marido me estará esperando. Eso sí tendrán que hacerlo estando delante Ibra, ya que soy su puta y si en algún momento desea participar, le tendrán que dejar hacerlo, junto con ustedes”.

Me dirijo a la cama donde Ibra y yo nos hemos amado, me quito las bragas y me tumbo boca arriba en la cama abierta de piernas y mostrándole toda mi rajita completamente abierta y a su disposición. Y después les digo:

“Perdonad, pero dado que vamos a intimar de esta forma, permitidme que os tutee. Quitaros vuestras ropas y quedaros como Ibra, es decir desnudo. Pero por favor daros prisa, pues el tiempo pasa y no es tanto lo que tenemos con todo lo que espero que me hagáis, pues con vuestra proposición e interés por mí estoy muy excitada y deseando de estar entre vuestros brazos”.

No tardaron nada en encontrarse los dos negros completamente desnudos, los dos tenían buena herramienta (como ya dije cuando los vi espiándonos) de cuerpos uno era todo musculo y fibra y el otro no era tan musculoso, pero tampoco estaba mal de cuerpo. Rápidamente se subieron a la cama y comenzaron a tocarme y los dos se fueron derechos a mis pechos. Pasado los primeros minutos perdieron la poca vergüenza que les quedaba y se lanzaron a poseerme de lleno. Uno de ellos, comenzó a darme cachetes en mis muslos a la vez que me mordía mi pecho derecho y el otro me decía:

“Cuanto tiempo he deseado este momento de tener a una mujer blanca completamente a mis servicios y poder hacer con ella todo lo que deseara. Convertirla en mi esclava y hacerla sentirse como los blancos nos hacen sentir a nosotros los negros, es decir una mierda. Hoy puta te vamos hacer sentir mi amigo y yo lo que se siente al no ser nada ni nadie y no tener valor alguno para la persona que está contigo”.

Diciendo esto me dio dos bofetadas en mi cara y después otras dos en cada uno de mis pechos, me dolió, pero me tuve que aguantar. Mire a Ibra como pidiéndole ayuda, pero él solo se encogió de hombre y dijo:

“Tranquilos chicos, tampoco os paséis, ella se os ha ofrecido para que la folléis y en tema de sexo hagáis lo que queráis con ella, pero no para que la peguéis y maltratéis, de modo que, por favor, comportaros”.

Parece que las palabras de Ibra hicieron mella en ellos, pues a partir de ese momento dejaron de golpearme, pero lo que si hicieron es hacer con mi cuerpo todas las cosas que habían deseado hacer a una mujer en su vida y no habían podido.  Durante la hora y medía en que estuve entregada a ellos me penetraron los dos por todos los orificios de mi cuerpo. Me follaron varias veces como si fuera un bocadillo en el que el relleno entre los dos negros era mi cuerpo blanco, uno me penetraba por mi coñito y el otro por mi culito, turnándose de posición. La última medía hora dejaron e invitaron a participar a Ibra y en este tiempo, la mayoría del mismo, mis tres orificios (boca, coño y culo) de mi cuerpo estuvieron llenos por tres hermosas pollas que se corrieron todas ellas dentro de mi cuerpo llenándome de su semen por completo. Cuando acabo el tiempo estaba completamente rendida y llena de semen tanto por dentro como por fuera. Los dos obreros se vistieron, me dio un beso cada uno en mi boca y marcharon, diciéndole a Ibra que a la tarde tras comer volverían a por la herramienta.

Ibra y yo fuimos a la ducha y nos duchamos juntos. Me dijo que no me limpiara mi coñito ni su interior, que quería que cuando estuviera con mi marido pudiera llegarle el olor a la puta hembra que estaba hecha y el olor de los tres machos que me habían poseído esa mañana. Le dije que nos diéramos prisa pues nos quedaba escasamente medía hora para esta a solas él y yo y teníamos que hablar de varias cosas.

Cuando nos salimos de la ducha y mientras nos vestíamos le comenté a Ibra, lo que Ignacio había dicho a mi marido: “…… la semana que viene hemos quedado con nuestras amigas maduritas y ya sabes que con ellas lo pasamos de maravilla y más la semana que viene que iremos un día o dos a un piso que tenemos alquilado en Carabanchel para pasarlo “bien”, tú ya me entiendes, con estas amigas. Además, podrás conocer a la madre de otro compañero mío, con la que estoy saliendo sin que el marido sepa que le pone los cuernos conmigo”. Le repetí las palabras que mi ex alumno había dicho en la comida y le pregunté:

“¿Tú sabes algo de esto?”.

Y él me contestó:

“Si, me ha llamado Ignacio y me lo ha dicho. Pero no te preocupe, tu marido no te tocará ni estará contigo, solo te verá a través del monitor del circuito cerrado de televisión y como mucho desde la puerta del dormitorio. Ha quedado Ignacio en que vendrán el martes por la tarde, sobre las 7,00, pero que me avisará al menos una hora antes de que vengan, para que tengamos tiempo de que te pongas un antifaz para evitar que te reconozca. Ellos van hacer hincapié en los tatuajes, para que tú marido se fije en ellos, con el fin de que cuando vuelvas a tu casa, por si él sospechara algo, al verte desnuda y ver que no estas tatuada olvide sus sospechas. También me ha dicho Ignacio que cuando llegue le diga que me tengo que ausentar un momento y que ocupe mi lugar y que ofrezca tus servicios. Es una treta más para tenerle bien cogido por los cojones por si se divorcia de ti, que no pueda quedarte sin nada. Esto es lo que me ha comentado Ignacio al respecto y que vendrán también con las otras maduritas compañeras tuyas, lo que no sabe es si con dos o con las tres y que te verán trabajar de puta y follarán con ellas (incluido tú marido) en la habitación donde te hemos estado follando los dos obreros y yo hoy”.

Yo le contesto:

“Tengo miedo Ibra de que salga mal y mi marido se entere de todo y se precipiten antes de tiempo los acontecimientos. Esperemos que todo salga bien. Ahora acompáñame al dormitorio de los espejos para que me enseñes la obra y también coloque los conjuntos y ropa que he comprado. A parte de lo que me dijiste que comprara he comprado también seis saltos de cama, cortitos, transparentes y de distintos colores, espero que te gusten y más yo cuando me veas con ellos puestos”.

Tras esto nos dirigimos al dormitorio de los espejos y vi la Obra, habían colocado en el rincón más cercano al pasillo un bidel. No se veían ni las tuberías de la toma de agua ni el desagüe del mismo. Me dijo Ibra que lo habían colocado en ese lugar porque era el sitio más cercano al cuarto de baño de la casa, para aprovechar sacar de las tuberías que van a ese cuarto un pequeño ramal para suministrar el agua al bidel y lo mismo con el desagüe para que fuera al mismo que el cuarto de baño. De esa forma se hacía la menor obra posible. Tras decirle que me gustaba como había quedado, le fui enseñando todo lo que me había comprado y lo fui a la vez colocando en la cómoda que tengo para mí en ese dormitorio.  Mientras lo colocaba le pregunté:

“Ibra, como casi con toda seguridad (según los resultados de los dos test que me he hecho) ya estoy preñada de ti, ¿puedo a partir de hoy, follar con mi marido sin preservativo, para que de esta forma cuando no me llegue la regla este mes piense que me ha quedado preñada de él y no levantar sospechas en él?”.

Él me contesta:

“Creo que sí, que debes hacerlo, pues según me has contado en otras ocasiones, desde que estamos tú y yo follando, no le has dejado ni siquiera que te folle incluso con preservativo. De modo que si no le dejas que te folle ahora sin nada y no te llega la regla supongo, que por muy cornudo que sea, sospechara algo y podrías tener problemas. De modo que sí por mi parte no hay inconveniente en que si quieres hoy mismo le dejes que te folle, pero que puta que eres y que picara e inteligente, así me gustas tanto pedazo de zorra, por como eres”.

Cuando acabe de colocar todo eran las dos de la tarde. Me despedí de Ibra y le dije que procuraría esta al día siguiente lo antes posible, que yo calculaba que antes de las diez de la mañana estaría allí. Luego cogí mi coche y me dirigí a mi casa. Cuando llegue eran las dos cuarenta y mi marido aún no había llegado. Me cambié de ropa me quedé la ropa interior solo y encima me puse una de las batas cortas que uso para estar en casa. Luego preparé la mesa y me quedé esperando a que mi marido llegara, cosa que hizo sobre las tres y diez de la tarde.

Tras comer, nos quedamos en casa pues preferimos no salir con el pretexto de descansar. Mi marido cumplió lo que me había prometido, que no se separaría de mí en el resto del día. Permanecí todo el tiempo vestida con la misma ropa que tenía cuando volvió mi marido de jugar al golf, es decir con la batita de estar en casa (cerrada por delante con un cinturón atado a mi cintura y debajo de ella solamente con la ropa interior. Procuré enseñar más de lo normal de mi anatomía delante de mi marido, con el fin de irle calentando, cosa que conseguí fácilmente. A eso de las 10 de la noche fue mi marido el que me propuso que nos fuéramos a acostar, pues deseaba jugar un poco. Fue entrar en la cama y comenzar a meterme mano y desnudarme y a los pocos minutos estábamos follando (a él se le notaba las ganas por la sequía de sexo que había tenido conmigo durante este tiempo) y no digo hacer el amor, porque en ese momento al menos yo solo deseaba follar para cubrir el expediente y que el se corriera dentro de mi vagina para poder justificar mi embarazo.  Se corrió dos veces dentro de mi vagina y después nos quedamos dormidos.

A la mañana siguiente, cuando mi marido se marcho yo ya estaba despierta (la verdad es que no había podido dormir mucho esa noche pensando en lo que me esperaba al día siguiente), al despedirse y darme el beso en la cara para marcharse, le dije:

“Ya sabes que probablemente llegaré tarde todas las noches de esta semana por el trabajo, como te dije el sábado”

Él me contesto:

“Ya lo sé, no te preocupes querida, ya recuperaremos el tiempo que no estaremos juntos esta semana. Como sabes alguna que otra noche saldré a dar una vuelta con Ignacio y sus amigos y amigas por no estar solo aquí, dado que tú no vas a estar”.

Le di el OK a lo que me acababa de decir con una sonrisa en mis labios y se marchó. Yo al poco tiempo me metí en la ducha y después me preparé y marché al colegio, quería estar allí temprano para perder el menor tiempo posible. A las 8,30 les pude el examen a los chicos y cuando le acabaron, recogí los exámenes. Luego me pasé por la sala de profesores, donde estaba el director y le dije que como ya sabía hoy y los dos días siguientes de la semana tenía pruebas médicas y no podía estar el resto del día. Le dije también que los otros dos días haría lo mismo, les pondría a los chicos un examen a primera hora y después marcharía. Él me dijo que no me preocupara, que el resto de las horas de esos días me sustituiría por otro/a compañero/a. Le di las gracias y marché para el piso de Carabanchel, eran las 9,40 de la mañana. Llegue al piso a las 10,05 de la mañana, Ibra ya estaba dentro esperándome.

Cuando llegue tras besarme en la boca me dijo:

“Eres puntual, Esperanza. ¿Estas nerviosa?”

Yo le contesto:

“Sí un poco, pues me da un poco de miedo el venderme tan barato, pues estoy segura que al ser el precio tan bajo tendré bastantes clientes. Lo que hará que cuando acabe esta noche, tenga mis partes y oquedades sexuales de mi cuerpo bastantes doloridas. A parte de que me da un poco de miedo el poder encontrarme con alguno de ellos que me pueda hacer daño o cosas que no desee”.

Ibra entonces agarrándome con su mano derecha mi barbilla y mirándome a los ojos me dice:

“No te preocupes, ni tengas miedo, nadie te hará nada que te pueda hacer daño o que tú realmente no desees hacerlo, pues yo estaré aquí en la sala de control viendo todo y vigilando y si alguno se pasa un poco, entraré y lo pondré en su sitio”.

Entonces me dice, que vayamos al dormitorio de los espejos y que me quite la ropa que llevo y me quede desnuda esperándolo. Hago lo que me dice y cuando él llega le doy como todos los lunes las bragas que he usado los dos días del fin de semana. Tras cogerlas y llevárselas a su nariz, como siempre, se las guarda en el bolsillo de su pantalón y después comienza a desnudarse.  Cuando se ha desnudado completamente me hace tumbarme en la cama y me ponga con las piernas abiertas y el colocándose de rodillas entre mis piernas acerca la punta de su hermosa polla a mi rajita y apretando me la entra toda hasta lo más hondo de mi vagina y comienza a follarme con fuerza y ganas hasta que consigue correrse abundantemente dentro de mi vagina. Cuando acabamos, se sale de mí y tumbándose a mi lado, me besa de nuevo en mi boca y me dice:

“Más tranquila putita, ya te dije el otro día, que antes de comenzar a vender tú cuerpo y prostituirte, con el primero que follarías todos los días antes de estar con el primer cliente diario sería conmigo y yo siempre cumplo lo que digo. Y ahora estrena el bidel y lávate, que tenemos que ponerte los tatuajes, pues ya sabes que tienes que tenerlos puestos cuando trabajes y que de esa forma todos con los que estés y te los vean sepan dos cosas. Que te gusta follar con negros y que eres mi puta”.

Tras ponerme los tatuajes, ayudado por Ibra, me comienzo a vestir con las ropas que él me ha elegido para mi primer día de trabajo como prostituta de negros. Esta ropa es: un conjunto de ropa interior color granate, prácticamente transparente, un liguero negro con bordados granates y unas medias negras transparentes hasta medio muslo. Encima de esto me pongo un salto de cama transparente del mismo color, es decir granate, y acaba mi vestuario con unos zapatos bajos negros. Cuando termino de vestirme me doy una vuelta sobre mí y le digo a Ibra:

“¿Cómo estoy, que te parezco?

Él me dice:

“Estas perfecta y preciosa, estas muy apetitosa y estoy seguro que vas a tener muchos clientes en cuanto se corra la voz de que ya estas trabajando. No obstante, ten preparado también unos pantis, pues a media jornada cambiaremos de ropa y seguramente en vez de bragas y medias solo lleves los pantis. Además, es probable que si viene alguno de lo hombres que te vieron el viernes con ellos te pidan que te los pongas para follarte. Y ahora vamos abajo a la puerta para que te vean y se corra la voz de que ya estás trabajando”.

Yo le digo:

“Ibra, pero para estar en la calle, me debía de poner encima algo que me pueda tapar, cuando no pase ningún posible cliente ¿no?, pues si bajo y me pongo así, seguro que alguna vecina o vecino que me vea así llamará a la policía y tendremos problema. Otra cosa es que fuera aquí dentro del piso, donde me puedo poner como tú desees, incluso desnuda si quieres”.

Él se queda un momento pensando y después me dice:

“Aunque a mí me gustaría que bajaras así, veo que tienes razón y que, si sales así a la calle mostrándote toda casi desnuda, alguien se puede escandalizar y llamar a la policía y tener problemas. Lo que vamos hacer es que encima de esa ropa te vas a poner solamente una camisa larga (y seguro que te cubrirá por lo menos hasta medio muslo, pues será una mía), cuando no pase ningún hombre o posible cliente la tienes cerrada y cuando se acerque un hombre y sobre todo si es negro te la abres (pues la tendrás sin abrochar, solo puesta por encima) para que pueda apreciar tu cuerpo. En la calle como puta callejera, solo estarás hasta que consigas tres clientes, luego estoy seguro que la voz de que ya estas trabajando se correrá como la pólvora y no hará falta que sigas abajo en la calle, pues ya veras como ellos mismos suben aquí al piso para follar contigo”.

Fue a su piso a por la camisa y cuando regresó, trajo una botella con un líquido, me dio la botella y la camisa y me dijo:

“Toma, vas a beber ahora un buen trago de este brebaje y a medida que pase el día ya te diré yo cuando tienes que volver a beber. Este líquido te hará tener unas ganas locas de follar y con ello podrás salvar las dudas que tengas y soportar mejor la forma y trato de algunos de tus clientes, que estoy seguro que con algunos no te será (si estas normal sin tomar esto) nada agradable hacer lo que te pidan que les hagas. Es un afrodisiaco que hace mi hermana con unas hierbas naturales, por lo tanto, no tengas miedo que no te hará daño. Y esta es la camisa que te tienes que ponerte encima de la ropa que llevas”.

Yo entonces abrí la botella y di un trago del contenido, esperaba que tuviera un sabor desagradable, pero fue todo lo contrario y después me puse la camisa y bajamos los dos a la puerta del portal. Me hizo ponerme recostada al quicio de la puerta y mostrando una de mis piernas hasta más arriba de medio muslo, casi enseñando la parte de mi cuerpo donde se me juntan las dos piernas. Ibra se entró dentro del portal sentándose en el primer escalón de la escalera a esperar la llegada del primer cliente.

No habría pasado ni veinte minutos cuando apareció el primer hombre negro, se acercó a mi y al verle le recordé, era uno de los que me había estado sobando y probando “la mercancía” como me presentó Ibra a ellos en la nave. Era un hombre de unos 35 a 40 años, alto delgado pero fuerte. Se me acercó y me dijo:

“Ya veo puta que cumples con tú palabra, dijiste que el lunes estarías aquí para ofrecer tu servicio al que quisiera de nosotros y lo has cumplido. Dijiste que tú precio era 5 euros y que te podría follar sin condón ¿no? ¿es así?”.

Yo abriéndome la camisa, le muestro mi cuerpo en bragas y sujetador transparente y le digo:

“Si eso es, puedes tener todo esto por 5 euros si quieres follarme a pelo, sin preservativo, o si quieres con preservativo serían 10 euros”

Él agarrándome del brazo me dice:

“Pues entonces vamos para arriba, y lo haremos sin condón, voy a llenar ese pedazo de coño que debes de tener de mi lefa hasta que no te quepa y se te salga por los lados. Ni tu chulo Ibra, te habrá follado como lo voy hacer yo”

Subimos al piso, me pagó los cinco euros y tras cogerlos le hice que se desnudara, le lave su polla en el bidel y después me baje las bragas para hacer lo mismo con mi coñito, pero él me paró y me dijo:

“No, no te laves, me gusta el olor a coño sucio y más si es de una puta tan buena y hermosa como tú”

Yo entonces, me acabé de quitar las bragas y me tendí en la cama. Luego él se desvistió del todo y cuando se subió encima de la cama y se puso entre mis piernas para follarme, tenía su polla completamente tiesa y dura. Era una polla de unos 22 o 23 centímetros, por tanto, bastante más corta que la de Ibra, pero sin embargo de grosor era tremenda su diámetro no era menor de 8 o 9 centímetro. Me arrimó su punta a mi rajita y sin decir nada ni siquiera tocarme para calentarme empujó y de un golpe entró toda su punta en mi coñito, dejándose caer después sobre mi cuerpo, consiguiendo entrarla por completo dentro de mí, hasta que pude sentir sus gordos testículos golpeando la parte baja de mi rajita, yo me sentí completamente llena, sintiendo como su polla rozaba las paredes de mi vagina. Comenzó a moverse a dentro y fuera rápidamente y no sé si es que estaba muy excitado o que le pasó que en menos de 5 minutos se vino dentro de mí, dando gritos e insultándome, para quedar una vez que acabó de correrse tendido encima de mi cuerpo por al menos un minuto.  Después se levantó, se vistió y sin ni siquiera despedirse se fue.

Cuando él se fue me lave y volví a vestirme como estaba antes y baje al portal donde nada más llegar ya estaba otro de los negros esperándome. Tras follar con él ya no hizo falta que bajara a la calle a buscar a mis clientes, pues la voz ya se había corrido y ya estaban esperando en el piso a que acabara con uno para entrar otro. Unas veces me dio tiempo de lavarme tras el servicio prestado, pero otras no. Estuve con clientes esa mañana desde las once menos cuarto hasta las tres de la tarde en que Ibra, les dijo a lo que esperaban que volvieran a las cuatro menos cuarto, pues tenía que parar para comer. Al para para comer le di a Ibra el dinero que había juntado hasta entonces, eran 90 euros y habían estado conmigo hasta esa hora 16 hombres. No todos quisieron hacerlo sin preservativos, dos de ellos prefirieron pagar 10 euros y follarme con el preservativo, me dijeron que era por miedo a que pudieran coger alguna enfermedad. Eché cálculo y cada servicio me había salido una media de quince minutos, aunque hubo alguno que duraron menos, varios de 10 minutos y dos de 5 minutos, pero el resto duraron entre quince y veinte minutos y alguno casi la media hora. Por la tarde cuando acabé de comer ya estaban algunos de ellos esperando, estuve desde las cuatro menos cuarto hasta las 9,30 de la noche y conté unos veinte servicios. Al final del día, con lo que había ganado por la mañana y lo que había ganado por la tarde había entregado a Ibra 190 euros. Me parecía mentira que mi cuerpo pudiera haber aguantado que me follaran por todos mis agujeros 36 hombres y mi cuerpo (debido al brebaje que me había dado Ibra a lo largo del todo el día, me habría bebido más de medio litro del mismo) me pedía más sexo y tenía muchas ganas más de seguir follando. Pero fue Ibra el que paró y el que me dijo que por hoy se había acabado, pues eran las 9,30 e la noche y no era conveniente que llegara a casa mas tarde de las 10,30. Me lave bien y me duche y después me quité ayudada por Ibra los tatuajes. Cuando llegué a casa aún sentía ganas de sexo y me ofrecí como una loca a mi marido, que aprovecho mis ganas para follarme, también sin preservativo, consiguiendo correrse dos veces dentro de mí. Cuando acabo y ya en la cama, me insinuó que había notado mi sexo más dilatado de lo normal. Yo para salí del paso le dije que había tenido un momento tan fuerte de calentura en el colegio, que me había incluso salido de una de las reuniones un momento, con el pretexto de ir al servicio, y me había masturbado con un vibrador que tenía en el bolso. Fui al armario que tenemos a la entrada de casa y cogí uno que tenía allí escondido (bastante grueso y largo) y volví a la habitación y se le enseñé. No sé si desconfiaba de mi historia o porque sería que sin decirme nada cogió el consolador de mi mano y me le entró en mi coñito. Me estuvo masturbando un rato con él y al cabo de unos minutos me dijo:

“Es verdad, no me extraña que, metiéndote estas cosas tan grandes y gruesas, se te dilate tu coño de la forma que lo tienes”.

Yo le sonreí y le dije:

“Tú sabrás que lo acabas de comprobar”.

Me dio un beso y a los pocos minutos se había dormido.

Yo en la cama ya más tranquila, me entró un poco de desazón y vergüenza por haber podido entregarme ese día a tantos hombres, sin conocerlos, hacerlo con la mayoría de ellos sin preservativo con el riesgo que eso suponía para mi salud. Encima todos ellos habían sido de raza negra, con el asco y manía que tenía hacía tan solo un mes a las personas de raza negra y ahora estaba como loca por uno de ellos, hasta el punto de permitirle que me prostituyera como una puta barata con tantos hombres de su raza. No pude por menos que pensar que ese día poco a poco, a medida que habían ido pasando las horas, fui siendo degradada, no como un simple animal, sino que me habían convertido en un objeto con el que se ha podido hacer cualquier cosa que mis clientes me han solicitado. Me había convertido en un estuche maduro, y para todos ellos bonito y deseable, en donde poder guardar y meter en sus tres oquedades (coño o chocho como la mayoría de ellos lo han llamado, culo y boca) sus variopintas pollas con las que sintieron (y porque no decirlo yo también) placer al frotarlas duras y tiesas en las paredes de mi vagina, culo y boca.

Al día siguiente volví al colegio e hice como el día anterior, les puse a mis alumnos el examen, al acabar lo recogí y tras esto me fui al piso de Carabanchel, donde como el día anterior me estaba esperando Ibra. Como ocurriera el día anterior, fue él el primero que me folló ese día y tras esto me dijo:

“Me ha llamado Ignacio, hace un rato y me ha dicho que hoy será cuando venga con tu marido, y que será esta tarde sobre las 7,00 o 7,30. De modo que mientras tú trabajas iré a comprar dos o tres antifaz o mascaras que te tapen la cara y con ello evitar que seas reconocida por tu marido. Quizás también compre una peluca, pero eso ya veré, no estoy seguro de que vaya hacer falta”.

Después me puso la ropa que me tenía que poner, en esta ocasión iría sin bragas y solo con los pantis y el sujetador y encima un salto de cama transparente de color negro.

Durante la mañana acudieron 12 clientes, había bajado un poco el número comparado con el día anterior. Pero después de comer a partir de las 4,30 de la tarde volvió a ver la misma afluencia de clientes que el día anterior, algunos repetían, era el segundo día que al menos 5 de ellos volvieron a follar de nuevo conmigo. Esta tarde propusieron a Ibra, cuatro de mis clientes entrar juntos para estar conmigo. Ibra les dijo que eso era un especial y que les costaría 30 euros y podrían pasar conmigo una hora. Ya se pueden imaginar lo que pasó, fui follada por todos mis agujeros por esos cuatro negros, me follaron por el culo y coño dos a la vez e incluso llegaron a ocupar mis tres oquedades tres de ellos a la vez, mientras que el cuarto se conformaba con sobarme y comerse mis grandes pechos. A las 7,00 de la tarde Ibra recibió una llamada de Ignacio, yo estaba con un cliente, diciéndole que dentro de tres cuarto de horas más o menos, estarían en el piso con mi marido y dos de las chicas. Cuando terminé con ese cliente Ibra, entró y me dijo que me pusiera un antifaz adornado con plumas que prácticamente me tapaba toda mi cara. Probó ponerme una peluca que había comprado, pero al ver como me quedaba optó por no ponérmela. Luego me dijo que dentro de una media hora estaría Ignacio con mi marido en el piso, que yo actuara como que no lo sabía. A las 7,40 de la tarde llegaron mi marido, Ignacio, Luis y Emilio, venían con la madre de Luis y con Lourdes. Hasta ese momento habían estado conmigo ese día 23 hombres y aún me quedaban casi dos horas más de estar trabajando.

Cuando entraron en el piso yo tenía un servicio con dos hombres a la vez. Ibra los llevó a la sala de control donde pudieron ver como en esos momentos era penetrada por los dos hombres negros a la vez, uno por mi coñito y el otro por mi culo (habían preferido entrar los dos juntos para estar conmigo y pagar en total 20 euros por follarme los dos a la vez durante un cuarto de hora. Ignacio le presentó a todos, menos a Luis y a Emilio a Ibra y tras la presentación le pregunto a Ibra:

¿Ibra, que tal mi madurita, se esta portando bien, ya sabes que lo que quiero es que cuando pase el tiempo que te la he cedido me la devuelvas preñada de un negro y que el cornudo de su marido se crea que la barriga es suya, para que cuando llegue la hora de parir se lleve la sorpresa al ver que la criatura que ha tenido su mujercita sea de raza negra, ja, ja, ja?.

Ibra le contestó:

“Yo siempre cumplo lo que digo. Creo que en esta semana pasada la he dejado preñada yo, pero para asegurarme de que cuando te la devuelva irá seguro preñada de uno de mi raza, desde ayer la estoy prostituyendo, como lo que es una puta barata pues solo cobra por cada servicio 5 euros y además lo tiene que hacer sin usar condón, pues el que quiera usar preservativo tendrá que pagar 10 euros. Tú madurita se está portando muy bien, mira se ha dejado hacer los tatuajes que ves: el As de pica negro, uno en cada muslo y la leyenda de Soy la puta de Ibra y esto le pertenece, sobre la zona abdominal de su cuerpo, como podéis ver si os fijáis en ella. Para que os deis cuenta el éxito que esta teniendo entre los hombres de mi raza, ayer se entregó a 36 hombres y hoy a esta hora ya lleva 23 y aún la quedan cerca de dos horas para que acabe su jornada de puta. Ignacio si el marido de esta puta supiera la cantidad de cuernos que le esta poniendo en estos días, no se lo podría creer, y menos si es verdad lo que tú me dijiste, Ignacio, de que tu “novia madurita” es una mujer decente, casada, madre, religiosa y de muy buena reputación en su ciudad y círculo de amistades”.

Ignacio entonces se dirige a mi marido y le dice:

“¿Qué te parece mi novia, te gusta? Él marido se creé que en estos momentos esta con una amigas, si supiera que realmente lo que está haciendo, ja,ja,ja……Es amiga de estas dos maduritas que vienen con nosotros, cuando no la tengo cedida a Ibra para que la preñe, y salimos juntos todos, ya sabes lo que hacemos con nuestras chicas, las compartimos y nos las follamos todos, tanto juntos como por separado, como tú mismo has comprobado y probado. Fíjate bien en los tatuajes, le he autorizado a Ibra para que se los haga, con la idea de que si los ve el marido se enteré que esta con negros, la deje o se divorcie de ella y de esa forma se venga a vivir conmigo, pues, aunque no te lo creas y se la ceda a mis amigos y ahora a estos negros, la verdad es que estoy loco por ella”.

Mi marido entonces, le contesta:

“Ignacio, has tenido muy buen gusto, lastima que lleve puesto ese antifaz y no la pueda ver bien la cara, pero si la cara es tan hermosa como su cuerpo y sobre todo esa hermosura de pechos que tiene, son exactamente como a mi me gustan, parece que tuvieras el mismo gusto que yo para las mujeres amigo, pues si te das cuenta tiene un cuerpo muy parecido al de mi mujer, es decir al de Esperanza, tu ex profesora. Espero que me dejes probarla algún día de estos ¿no?”.

Ignacio se ríe y le dice:

“Tienes razón, parece que tenemos el mismo gusto por las mujeres, ya veré si te dejo que la pruebes, pues no me fio mucho de ti no te la vayas a quedar. Por lo pronto hoy podrás follar a la que quieras de estas dos, aunque ya has estado antes con ellas, pero sé que te gustaron y que te va a gustar repetir la experiencia”.

Siguieron mirando los monitores y viendo como me follaban los dos hombres que estaban conmigo. Entonces Emilio dirigiéndose a Ibra, le dijo:

“Ibra, me gustaría que follaras a Lourdes , “mi novia madurita”, pues aunque ella no esta segura, sabe que debe hacer todo lo que yo desee para tenerme contento y me ha entrado envidia de Ignacio y me gustaría que también la quedaras preñada, como dices que crees que ya has hecho con la de Ignacio. Y te propongo lo mismo que te propuso Ignacio, si cuando la llegue la regla que la toca dentro de dos semanas no esta preñada, te la dejaré todo un mes para que me la devuelvas preñada y en las mismas condiciones que tienes ahora a la de Ignacio. ¿Quieres complacerme en este deseo?, porque si es así puedes cogértela ahora mismo e irte a la otra habitación y comenzar”

Ibra le mira un momento y le dice:

“Yo por mí si me gustaría y si no lo consigo quedarla preñada esta noche me comprometo a cerrar contigo un trato como el que he hecho con Ignacio y su madurita. Pero parece que ella no quiere y si ella no quiere hacerlo será difícil que pueda estar con ella”

Emilio, entonces coge a Lourdes por su brazo y habla con ella. Ella parece no estar por la labor y entonces Emilio la aprieta el brazo haciéndola daño y la dice lo que sea a su oído. Tras esto se dirige de nuevo a Ibra y le dice.

“Ya esta todo listo, pregúntala si quiere pasar un rato contigo en ese dormitorio de aquí al lado?

Entonces Ibra, mirando y dirigiéndose a Lourdes la pregunta:

“¿Es cierto, lo que dice Emilio? ¿Quieres pasar un rato conmigo ahora, aunque sepas que probablemente quedes preñada de mí, de un negro?”.

Lourdes, mirando hacía el suelo, muy sonrojada y con lagrimas en sus ojos le contesta moviendo afirmativamente con la cabeza a la vez que con una voz muy bajita le dice:

“Si quiero pasar ahora un rato contigo y si es posible que me quedes preñada”

Entonces Ibra, dirigiéndose a los chicos les dice:

“Necesito que vuestro amigo (dirigiéndose a mi marido) ocupe mi lugar con tu madurita Ignacio, si es que realmente queréis, Emilio, que este ese ratito con esta, tu hermosa novia madurita ¿Cómo se llama…. Lourdes?

Ignacio se acerca a mi marido y le dice:

¿Puedes hacernos ese favor?

Y mi marido le contesta:

“No hay problema, pero antes me tienes que decir Ibra, que es lo que tengo que hacer y decir. Pero después me tenéis que prometer que yo follaré a la novia de Luis, pongo eso como condición”.

Se miran entre los chicos y dan su aprobación. Entonces Ibra le dice a mi marido:

“Mira, tendrás que hacer un poco de propaganda, para que los hombres que vengan quieran follar con esa puta. Les tienes que decir que solo cobra 5 euros, porque es una golfa que solo quiere follar con negros y además quiere hacerlo sin condón y que los que no quieran sin condón también lo hará con ellos, pero entonces al ponerse condón tendrá que pagar 10 euros. Y como eres blanco y tienes una edad muy similar a la de la puta, pasarás perfectamente como si fueras su marido, yo creo que una cosa que los animaría mucho a ir a follar con ella sería el morbo que sentirán si les dices que eres su marido”.

Dicho esto, Ibra coge a Lourdes de la cintura y se la lleva al otro cuarto cerrándose con ella. En ese momento se encienden los monitores de la otra pared, donde se ve a Ibra y a Lourdes. Los chicos y la madre de Luis pueden ahora seguir por los monitores a mi acabando mi servicio con los dos negros y a Lourdes (muy a su pesar suyo y muy seria) y a Ibra, comenzando su batalla sexual.

Entonces Ignacio le dice a mi marido que deje entrar a los que están esperando en el pasillo al salón y les venda mis servicios. Mi marido le hace caso (sin saber que esta siendo grabado) y les dice:

“Amigos, queréis follar con esa esplendida mujer que esta ahí dentro ¿verdad?, pues podréis hacerlo si lo deseáis, solo por 5 euros, si lo hacéis sin preservativos y si preferís hacerlo con preservativo os costará 10 euros. Esa golfa que esta ahí dentro y os ofrezco, es la golfa y la puta de mi mujer, le encanta follar con negros y además esta deseando de quedar preñada de alguno de vosotros, por eso se vende tan barato solo por 5 euros si se lo hacéis a pelo. Yo quiero que os la folléis todos e incluso si queréis varios a la vez, os ofrezco a la puta de mi mujer, deseo y quiero que la folléis y me la preñéis si queréis es toda vuestra. ¿Quién o quienes quieren ser los primeros en hacerlo?, venga animaros, Tú, pues como quiero que se sienta como lo que es una verdadera puta, entra y págala a ella los 5 euros como se hace con las putas”.

Tras esto, espera a que salgan los dos hombres que están adentro conmigo y después hace que pasé al que ha levantado la mano para ser el siguiente. Esta operación la hizo durante una hora, que es el tiempo que Ibra estuvo follándose a Lourdes. Cuando Ibra acabó, le dio las gracias a mi marido y le dijo que seguiría él contratando a mis clientes. Que fuera al otro cuarto donde le esperaba la madre de Luis y Lourdes, que ya estaban allí los otros chicos.

Mi marido y los chicos estuvieron tres cuartos de horas más follando con la madre de Luis y con Lourdes. Cuando acabaron yo aún estaba con mi último cliente, ellos se despidieron de Ibra y vieron como yo era taladrada por una gran polla negra (larga y gorda) en esos momentos me estaba rompiendo mi culo.

Cuando acabé mi servicio, Ibra, les dijo a los hombres que quedaban que mi jornada había terminado, que si querían podían volver mañana y que serían los primeros en follarme. Luego

Tras despedir a estos hombres y cerrar la puerta, fue al dormitorio de los espejos donde yo estaba lavándome en el bidel y me dijo:

“Me ha dicho Ignacio que tienes hora y medía para llegar a casa, desde ahora, hasta que llegue tu marido, pues le van a llevar a tu casa sobre las doce de la noche. Me han dicho que sería conveniente que te viera ya acostada en la cama y medio desnuda, mostrándole los muslos para que pueda darse cuenta que no llevas tatuajes y no piense que eres tú la que has estado aquí prostituyéndote. De modo que date prisa, tenemos que quitarte esos tatuajes, te tienes que duchar, vestirte e irte a tu casa para llegar antes que tú marido llegue y encima que te dé tiempo de acostarte y aunque sea fingir que esta dormida”.

Hicimos lo que Ibra me dijo y cuando llego mi marido, me encontró en la cama tumbada, como si estuviera dormida y mostrando mis muslos, sin tatuajes. Por la mañana cuando se levantó, yo hice como que iba al servicio y cuando me fui a sentar en el wáter, le llame, me levanté mi salto de cama hasta mi ombligo para que él pudiera ver también que tampoco llevaba el tatuaje del abdomen y me di varias vueltas mostrándole mi cuerpo semi desnudo.

Durante el resto del tiempo que faltaba para el día 21 de junio (fecha en que me debía de bajar la regla) estuve siendo follada y prostituida todos los días, menos los fines de semana en que no “trabaja” de puta. Procuré en estos días poder estar el mayor número de horas en el piso de Carabanchel y ser vendida a los clientes negros que pagaran por mi servicio (era lo que me pidió y quería Ibra que hiciera), de modo que a parte de los tres primeros días en que dije en el colegio que tenía que ir al médico y hacerme pruebas, me tuve que inventar otros dos días más una escusa para poder estar más horas trabajando de puta. Los días que pedí permiso en el colegio estuve trabajando de ramera un promedio de 11 horas (de 10 de la mañana a 10 de la noche teniendo una hora para comer) y el resto de los días no bajo de 5 horas. Tuve la suerte de que mi marido se tuvo que marchar de viaje una de estas semanas, pudiendo quedarme más tarde “trabajando” de ramera en el piso, esa semana no llegue a las 11 horas (como los días que no iba al colegio), pero no bajaron de 8 horas de trabajo.

En este tiempo en que Ibra me estuvo prostituyendo, pasaron, estuvieron dentro de mi cuerpo y me poseyeron muchos hombres. Echando la vista a tras y contando los que recordaba, hubo días (los que más) que llegaron a poseerme hasta 40 hombres y los que menos no bajaron de 20 hombres, yo calculo que me follaban una media de 30 hombres diarios. Esto hacía que cuando acabara tuviera mi sexo y culo (pues, más de la mitad, me follaron también por ese sitio de mi cuerpo) totalmente dado de sí e irritado. Y muchos de estos días al llegar a casa tenía que simular llegar con ganas de sexo y dejar que mi marido me follará, con el fin de que cuando quedara preñada creyera que era él, quién me había preñado.  En estas semanas no solo entraron en mi cuerpo las pollas de los hombres que pagaban por estar conmigo, sino que también tuve dentro de mi cuerpo, dedos y objetos de diversos tipos, formas y tamaños. Fui un objeto que era comprado y usado por unos minutos por el hombre que pagaba, la ridícula cantidad de 5 euros, por usarme y además sin preservativo. Gracias a Dios, no me pegaron ninguna enfermedad, sería verdad lo que me dijo Ibra, de que en ese sentido tenía a todos los que solicitaban mis servicios controlados, para que ninguno me pudiera pegar ninguna enfermedad.

Llegó el día 21 de junio y no me bajó la regla, lo mismo el 22 y el 23. Entonces les di la noticia a los chicos de que no me había bajado la regla y por tanto seguramente estaba preñada. Me hicieron comprar un test de embarazo y delante de ellos hacer la prueba, la cual dio como ya esperaba que estaba preñada. No obstante, para asegurarse ellos hicieron a Gonzalo que me hiciera una prueba a través de un análisis, dicha prueba también volvió a dar que estaba preñada.

A partir de ese día le dijeron a Ibra que su compromiso o trato con ellos (referente a tenerme cedida a él) había acabado y que estaban muy contento con él, pues el resultado era él que le habían pedido: que me quedara PREÑADA DE UN HOMBRE NEGRO. Dos días después de esto Lourdes les informó de que a ella tampoco le había bajado la regla y que creía que la habían dejado preñada. La hicieron las mismas pruebas que a mí y también dio que estaba preñada, lo que no se sabe es si la criatura se la habrán hecho alguno de los chicos o mi marido o habrá sido Ibra la hora que estuvo con ella. Parece que ahora los otros dos ex alumnos míos desean que sus novias maduritas (la madre de Luis y Ana Belén) queden preñadas también de un negro, por lo que han vuelto hacer un trato con Ibra para que así sea. Ibra las ha follado a las dos, pero no ha puesto tanto interés como conmigo, lo que si ha hecho es darlas a beber el brebaje para facilitar el embarazo. Como le dieron libertad para ser él el que las preñara o si necesitaba tirar de otros hombres negros que lo hiciera,  aparte de follarlas una vez al día él a cada una de ellas, las ha prostituido a las dos como hizo conmigo, pero en las horas que puedan hacerlo, sin levantar sospecha en sus respectivos maridos (han estado trabajando también todos los días , menos los fines de semana, un promedio de 4 a 6 horas diarias y como a mí se las han follado solo hombres de raza negra y sin preservativo y pagando por ellas y por servicio la misma cantidad que pagaron por mí: 5 euros).

Desde que les comunique que estaba preñada y se comprobó, mis ex alumnos volvieron a exigirme mis servicios con ellos, como lo hacían antes de hacer el trato con Ibra y prohibiéndome verme y volver a follar con Ibra al no ser que Ignacio (mi “novio”) me diera permiso para hacerlo (cosa que no he cumplido, pues desde ese día ha sido raro el día que no he follado con Ibra a escondillas de ellos, incluso algún sábado y domingo).

Tras dar muchas vueltas a mi cabeza y tras consultarlo con Ibra, el pasado día 20 de diciembre pasado, decidí decirle la verdad sobre mi embarazo a mi marido, ya que él creía que era el padre de la criatura que espero para febrero. Dado que quedaba poco tiempo para que todo se supiera, pues estoy segura que la criatura que espero será negro/a, quise tener todo aclarado y atado antes de que llegue el día que tenga que parir, que como ya todos sabéis es a mediado de febrero. Sin trapos calientes le dije a mi marido que la criatura que esperaba era de Ibra (el negro) con toda seguridad y que por tanto tenía muchas posibilidades de que saliera o naciera de raza negra (por la fuerza que tienen los genes de la raza negra sobre la blanca). Como era de esperar se enfadó y me preguntó que como era, que yo conocía o conocí a ese hombre negro. Le conté toda la historia y le enseñe también los videos y pruebas contra él que tenía si optaba por separarse de mi (cosa que es lo que desea Ignacio que haga). Le dije que con esas pruebas poco podría alegar para la separación en el ámbito sexual y de cuernos, dado que él había hecho lo mismo con otras mujeres e incluso en uno de los videos es él mismo el que me ofrece a varios clientes de raza negra (en el piso de Carabanchel) para que me follen y paguen por mis servicios (aunque en ese momento él no sabía que era yo a la que estaba ofreciendo). Por tanto, le acusaría, si se ponía por las malas, de que era él el que me había obligado a follar, con los negros y por eso estoy embaraza de uno de ellos. Tras varios días de pensárselo, el pasado 23 de diciembre decidió no separarse de mí y asumir sus cuernos, pero el problema era que todo nuestro entorno de conocidos, y en la ciudad donde vivimos, se enterarán que el niño/a es negro y por tanto que él no es el padre y nuestra reputación se iría a pique. Entonces le propuse, algo que ya habíamos pensado, mi amante negro Ibra y yo y no era otra cosa, que contratar a Ibra y a su "hermana" para trabajar como internos en nuestra casa.  Una vez contratados, hacer ver a todos que Awa (la hermana de Ibra) está embarazada (mentira, la barriga se la simularíamos) del mismo tiempo que lo estoy yo. Cuando me llegue la hora de dar a luz, ella también se pondrá de parto y volveremos a casa diciendo que yo he perdido lo que esperaba (cosa que no sorprenderá, pues ya he tenido varios embarazos en los que he perdido a mis hijos) y Awa e Ibra volverán un día o dos después a casa con mi hijo/a como si fuera la criatura que haya parido ella. En la realidad daremos de alta ante los juzgados a la criatura como hija mía y de Ibra (sin que nadie en nuestro entorno lo sepa) y como vivirán en nuestra casa, yo amamantare a mi hijo/a y podré estar junto a él como lo que es: mi hijo/a. Ante los conocidos y fuera de nuestra casa haremos creer a todos que es el hijo de los dos negros que trabajan en nuestra casa. Aceptó mi marido la estrategia y desde el pasado día 27, Ibra y su hermana viven en nuestra casa y yo dentro de la casa hago en todos los sentidos como si fuera la mujer de Ibra, pues desde ese día duermo y follo con él en nuestra cama de matrimonio. Mi marido puede (con el permiso de Ibra y de Awa), hacer lo mismo si lo desea con Awa.  Hemos presentado los papeles de los dos, adjuntando el contrato de trabajos, para que les den los papeles y puedan vivir sin problemas en España. Mi marido se ha comprometido en hablar con amigos y gentes importante que si quieren en pocas semanas lo tendrán todo arreglado y solucionado. Ahora me queda poder liberarme del chantaje de Ignacio y de mis ex alumnos, de lo cual me ha dicho Ibra que no me preocupe que él se encarga de ello.

Yo no deseaba separarme de mi marido, pues sé que Ibra tarde o temprano se cansará de mí y me dejará de lado y mi marido siempre ha demostrado quererme y estar ahí, incluso sabiéndose cornudo.  Ahora pensamos todos, incluso mi marido (ahora que ha tenido tiempo de recapacitar sobre el tema) pensamos que hemos optado por la mejor opción para los dos, pues hemos evitado la separación y por lo pronto mantener nuestra buena reputación. Por ahora no follo con mi marido, por el enfado de él y por la simulación del mío, (aunque con la hermosa polla de Ibra no le echo nada de menos en la cama), aunque sé que cuando pase un tiempo volveré a estar con él en la cama, aunque siga o no con Ibra. En este tiempo en que Ibra y su hermana llevan en casa, mi marido y Awa ya han pasado más de siete noches juntos en la cama, lo que quiere decir que todo marcha por buen camino.

Bueno con esto finalizo el relato, sé que esta vez me he alargado bastante y quizás haya pecado de pesada, pero es que deseaba terminar de contaros esta historia que en estos momentos estoy viviendo y espero que dentro de aproximadamente un mes pueda daros la buena noticia de haber parido sin problema alguno.

Cornoturga.

Si queréis comentarme algo de este relato u otra cosa podéis contacta como siempre conmigo en el correo: j.trujicornudo@hotmail.com