De macho a mariquita
Nuestra perrita Perla cumpliendo ordenes nos vuelve a deleitar con un nuevo relato. Espero que lo disfruteis
Me encuentro encerrado casi desnudo, solo llevo mi slip, parece ser un cajón de madera
y todo está oscuro, apenas por una rendijas entra aire, puedo respirar pero mi sudor se
concentra en el poco oxígeno de este habitáculo. Como llegué aquí no lo sé, no lo recuerdo,
pero ahora lo que más me preocupa es hacia donde voy, quien estará afuera de esta caja
esperando por mi. Escucho voces, la caja se mueve, la levantan para luego bajarla de lo que
creo es un camión, no hablo, solo respiro esperando el desenlace de esto, de repente la caja es
apoyada en el piso o eso parece. Las voces son masculinas pero rápidamente se van y otra vez
el silencio y la total oscuridad se hacen presentes.
De repente vuelven a mi algunos recuerdos, ahora empiezo a entender parte de lo ocurrido.
Estaba en un bar, en una de las mesas una mujer hermosa a la que decidí ir a buscar, tenía
que ser mía, ninguna se puede resistir a mis encantos, soy atractivo y sensual, que mujer no
desearía tenerme a su lado, esta no sería la excepción. Me presento, la encaro, le hago notar
mis encantos, ella parece rechazarme, insisto y vuelvo a hacerlo. Ella parece rendirse a mis
insinuaciones. Me siento a la mesa, hablamos, la invito una copa, acepta, nos miramos, en sus
ojos algo es diferente, parece que está pensando en mi o en lo que desea hacer conmigo. Se
llama Romina y de sus labios surge la invitación a su casa, a tener el sexo que estoy buscando.
Fue muy directa, eso me gustó pues no lo esperaba, pero seguramente mi atractivo la sedujo.
Suelo generar eso en las mujeres.
En mi auto fuimos a su casa, una bella morada, moderna, minimalista en parte, decorada con
buen gusto. Me invita a pasar, música y unas copas. Las copas se repiten, nos miramos, un
beso en mis labios me hace notar lo caliente que es, es muy hermosa, sus ojos brillan, sus
labios muestran casi una suave risa, una sutil mueca de alegría. Y otra copa. Y nada más… no
recuerdo más, hasta allí mis recuerdos. Seguramente me dormí, seguramente me durmió!!
La muy zorra me debió haber drogado para meterme aquí… pero porque?? Cuál sería su
objetivo?? !! Cuál sería su meta, si ya me tenía a su lado. Algo me hace sentir que pronto lo
sabré, sólo me queda esperar. El tiempo pasa, estoy cansado y me duermo. Ya no tengo noción
del tiempo.
De repente el sonido de un taladro me despierta, están abriendo la caja!! Al fin!! Al fin sabré
la respuesta a todo esto, seguramente habrán creído que soy rico y pedirán rescate. Pero no
tengo familia cercana y no estoy comprometido con nadie, se quedarán con las ganas!!! Jajaja,
se arrepentirán de esto, o tal vez me maten. Y al pensar eso me asusté. La caja se abre, la tapa
es corrida a un lado, mis ojos sufren por la luz y tardo unos cuantos segundos en abrirlos… y
sorprendido veo una mujer, no era aquella chica del bar, quien será no lo sé, nunca la había
visto.
Después de unos minutos mis ojos ya la ven perfectamente, es hermosa, es impactante.
De aproximadamente 1.70 metros de altura, de contextura media, es imponente, es rubia y
viste un conjunto de látex negro muy brillante, es un vestido enterizo de falda corta y mangas
largas, acompañado de unos altísimos tacos negros y delicadas medias negras con fantasía.
Me saluda, me extiende la mano y me ayuda a salir del cajón de madera. Saca un sobre del
interior y luego de abrirlo lee la carta contenida en el. Trato de preguntarle quien es y que
desea de mi, pero con una seca respuesta me ordena callarme mencionando que eso es lo que
me conviene. Lee pausadamente, guarda la carta en el sobre, lo deposita en una mesa que se
haya a su izquierda y se dirige a mi.
-Hola. Soy Dómina Máxima. Seguramente te estás preguntando los motivos de tu presencia
aquí. Rápidamente te explicaré, no hables, no repreguntes nada, sólo escucha. Ayer conociste
a Romina, una amiga, ella me dice en esta carta que eres muy creído, muy altanero, que
piensas que todas las mujeres te debemos placer, que todas morimos a tus pies, que todas
somos unas zorras dispuestas a darte placer y que enloquecemos a tus encantos. Ahora eso
cambiará, ahora tú verás que eso no es así. Yo me encargaré de eso por pedido de Romina.
Quise hablar pero su dedo índice se posó en mis labios evitándolo. Escucha, me dijo. Soy una
Dómina, una mistress profesional y mi objetivo es hacerte ver el lado femenino de las cosas,
detrás de esa supuesta masculinidad se esconde una faceta femenina, una fuerte envidia a ser
eso que tú crees ver en todas las mujeres, estarás a mis órdenes, haré de ti lo que se me plazca
y te dejarás hacer lo que yo desee. Al final de la “prueba”, llamémoslo así y termine tu estadía
aquí podrás retirarte siendo lo que eres ahora. Tú elegirás que deseas hacer, pero mientras
tanto y a partir de este momento eres de mi propiedad, me perteneces.
Rehusarte no puedes,o puedes pero piensa si lo deseas. Romina te fotografió en su casa, mira, aquí me manda unas
copias para que las veas y te convenzas, si te decides marchar mañana en tu oficina todos tus
compañeros, amigos, jefes y vecinos de tu casa tendrán estas imágenes en sus manos. Si te
quedas y accedes a la “prueba” al terminar te marchas con las copias y los originales y tal como
llegaste.
No podía creer lo que veía, en las fotos estaba yo haciéndole sexo oral a un tipo en el sofá
de su casa, serán trucadas o eso pasó mientras la muy zorra me durmió?? No lo sabía,
no lo recordaba, pero lo que era seguro es que parecían reales y llegado el caso nadie se
preocuparía en averiguarlo. Mi destino estaba marcado. Debía pasar la prueba, o como se
llamase esto, y luego marcharme lejos de este par de locas. Es sólo una prueba, muy difícil no
ha de ser, pensaba para mis adentros.
Que dices? Aceptas o te marchas?, pregunta ella. Yo asentí, no tenía otra alternativa, era
demasiado arriesgado y no me pareció ver una mentirosa en ella. Además era una mujer
hermosa, excitante y hasta quizás se enamore de mi y terminemos teniendo sexo, llegué a
pensar. Nuevamente asentí y con ello sellé mi pacto.
Así me gusta!! Eres creído pero tienes sentido común y sabes lo que te conviene, eso me
agrada. Quizás pases la “prueba” con éxito. Esto es muy simple, tú no hablas si yo no te lo
digo, para ti soy tu Ama, te dirigirás a mi como Ama, cada respuesta tuya debe terminar con
Ama, no pides nada, no importa lo que tu deseas, solo lo que yo quiero. Sacaré de ti tus deseos
reprimidos, esos que crees ver en nosotras, si no es así te marcharás, si lo es tu vida cambiará.
Entiendes? Comes cuando yo quiero, bebes cuando yo quiero, haces lo que quiero y obedeces
en todo sin refunfuñar. Te quejas y sufres el castigo, obedeces y estarás más cerca del final. Lo
entiendes? Lo entiendes?? Repreguntó con énfasis.
-Si, respondí yo.
-Si que? Si que? Acaso eres estúpido?.
-Si Ama. Si Ama, entendí. Respondí algo sorprendido por la fuerza de sus palabras.
-Así está mucho mejor.
Comenzaremos, me dice. De arriba de la mesa toma unos brazaletes de cuero con hebillas y
una argolla, me pone uno en cada muñeca y en cada tobillo. Saca mi slip dejándome desnudo
por completo y une mis muñecas entre sí. De al lado de la mesa trae una silla, no es una silla
cualquiera, en su asiento descansa de forma erecta un consolador, color piel de un tamaño
medio, algo más pequeño que mi propio pene.
-Pobecito!! Has de estar cansado!!, ahora te sentarás a descansar. Jajajaja!!! Ven, siéntate.
-Pero… pero…
-Pero qué? Acaso has olvidado tu pacto? Lo primero es dilatar tu culo para lo que viene, vamos
siéntate ahora!! No me hagas repetirlo!!
Me acerque a la silla, noté que tenía algo de lubricante, y de apoco comencé a sentarme allí
moviendo mi culo virgen para que entrara ese pene con el menor dolor posible. Ella me mira,
ella se ríe, ella me empuja sobre el asiento. El consolador entra por completo, mi culo ya no
es virgen, nunca pensé que me ocurriese algo así. Me ata cada tobillo a las patas de la silla,
me toma del cabello y me zarandea de un lado a otro, me levanta y me hace bajar sobre aquel
miembro de goma. Me levanta… y me baja, me levanta y me baja. Debemos dilatar tu colita,
puta! Acaso no lo entiendes?? Ya verás como te gustará, ya verás, jajajaja. Nuevamente la risa
como eco de sus palabras. Ya verás cuando acabemos la linda putita que serás, me pedirás
esta silla para llevarla a tu casa y hasta tal vez no la quieras por pequeña!!! Quizás luego te
gusten más grandes!!! Jajajaja. Sigue moviendo mi cabello y mi cabeza fuertemente de un lado
a otro, me habla al oído, me humilla me trata como a una puta, toma una fusta y golpea mis
nalgas, mis muslos, lo hace varias veces y con fuerza… mis quejidos no la detienen ni un poco.
-mmm, ya verás en la puta que te convertirás, ya verás como saco la puta que llevas dentro!!!
Marica!! Eso eres en el fondo, una verdadera marica!!, una putita deseosa de serlo todo el
tiempo, mi olfato nunca falla, jajajaja. Y pensar que te crees machito, te crees un adonis, un
sex symbol!!! Jajajaja. No eres nada de eso, eres solo una putita.
Repite estas palabras una yotra vez en mis oídos, mientras continúa con su maltrato físico.
Pellizca mis pezones y me hacelevantar y bajar sobre el pene de goma.
Mi ano ya se está acostumbrando pero mis piernas mecomienzan a doler.
No se cuanto tiempo ha pasado, ya el tiempo es algo que no controlo, me acerca una copa con
agua, la bebo con ansias, muero de sed. De repente siento sueño, siento mucho sueño. Otra
vez me han drogado.
Despierto y aunque parezca mentira me siento un poco más descansado, en ese instante
ingresa Ama Máxima a la habitación.
-Has descansado putita?? Seguro que si, te drogué para que te relajes y puedas hacerlo, aparte
para que tu culo se acostumbre a ese hermoso artículo que llevas. A estas alturas ya ha de
estar bastante dilatado y no sientes nada de dolor. Todo lo que viene ahora será placer!!!
Al final me lo agradecerás!!! Ya lo verás.
Ahora continuaremos con el próximo paso, miralo que traje, me dice con voz socarrona y actitud dominante mostrándome un neceser con
artículos de maquillaje. A todo esto mis manos están atadas al respaldo de la silla y mis tobillos
continúan fijados a sus patas. Estoy a su merced, siempre lo he estado desde que entre aquí.
Ama Máxima abre el neceser y saca los diferentes elementos, comienza a maquillarme.
Primero base, luego rubor, pinta mis labios, sombra en mis párpados, pestañas postizas y
rímel. Desata mis manos y pinta mis uñas de rojo carmín, a juego con mis labios. Finaliza con
una peluca morena de largas coletas. Saca el espejo y lo pone frente a mi para que observe su
obra de una media hora aproximadamente.
Me miro, no lo puedo creer, el maquillaje es el de una puta, bien hecho pero bastante
recargado, la verdad es que en el fondo me gusta lo que veo, creo que de no saber que soy yo
intentaría seducirme.
-Mírate, una verdadera putita!! Hermosa, estás hermosa!! Muy sexy, estás divina!!! No lo
crees así??.
-Si Ama, respondí.
-No te escucho, como dices?? Repreguntó.
-Si Ama Máxima, estoy hermosa, divina muy sexy y muy putita con este maquillaje.
-Así está mejor, parece que aprendes rápido, eso me gusta.
Sale de la habitación para inmediatamente regresar con una percha con ropa en una mano y
un par de zapatos en la otra.
-mmm bien. Con ese maquillaje no te creerás que andarás desnudita, ni vestida con esas
inmundas ropas que sueles usar, una putita como tú necesita la ropa adecuada y aquí la tienes.
Mira, todo rosa, como las putitas!!! Para que disfrutes el roce en tu cuerpo y al mirarte notes
lo mariquita que eres!!! Lo perra y cerda marica que eres!!! Jajajaja.
Se acerca, me libera de esa silla, mi culo respira, me saca los brazaletes y tobilleras y me
ordena pararme. Me pone un brassier negro y unas bragas haciendo conjunto, encima un top
rosa de raso con bolados y lazos cual el de una Barbie, abajo una falda rosa haciendo juego con
el top. Me hace sentar en la silla, ahora sin el pene en ella, y me enseña a ponerme las medias,
medias rosas que llegan hasta los muslos con lazos a sus lados. Con cada prenda que me pone
me humilla cada vez más, se burla de mi suerte, me dice lo putita que estoy quedando, lo
cerda marica que soy y que debo ser, que debo aprender algunas cosas de las mujeres y se ríe
y me toca la cara, y la cola, y los pezones.
-Ahora para seguir… faltan tus zapatitos!!! Los zapatitos que te harán caminar como una
verdadera maricona y puta callejera.
Me entrega un par de zapatos negros de tacón alto, altísimo, muy empinados, casi que no
me entran, casi que no puedo pararme con ellos. Lo logro con dificultad para luego volver a
sentarme. Nuevamente coloca en mi los brazaletes y tobilleras. Me hace ver al espejo. Guau!
Me veo como una puta! Una callejera aunque dulce nena, me veo como una puta!! Vestida y
maquillada como tal!! Me está convirtiendo en una verdadera puta. Pero conservo aún mis
rasgos masculinos en brazos, piernas y rostro, me veo como un travesti!!! Pero creo que en el
fondo me está gustando lo que veo y lo que estoy sintiendo, no lo se, no estoy seguro, no se
que pienso, es demasiado para mi.
Me hace poner de pie, me hace caminar para un lado y otro de la habitación, me cuesta
hacerlo, es la primera vez en estos tacos, aunque algo me hace pensar que no será la última.
Me dice que debo ser elegante y caminar sonriendo, mirando hacia adelante, moviendo la
cadera y sacando mis manitos hacia afuera como una nena delicada, eso me humilla más!!!
Por dios… estoy hecha una puta!! No lo puedo creer. Me detengo en el centro del cuarto, toma
mis manos y sujeta los brazaletes a sendas cadenas que cuelgan del techo, mis manos quedan
extendidas hacia arriba, abre mis piernas y coloca una barra entre ellas fijadas a cada tobillera,
ahora no podré cerrarlas. Me encuentro colgando del techo y parado sobre estos malditos
tacos que están matando mis pies. Pero al ver los tacos me excitan. Siempre me excitaron.
Me sujeta de la barbilla fuertemente y mirándome con firmeza pero con un tono socarrón y
burlesco me dice:
-te gusta lo que ves?? Te gusta cerdita? Mírate, ahora eres toda una dulce putita!! Una
encantadora y dulce putita pero que aún necesita esforzarse más. No lo crees así mariquita?
-si Ama Máxima, seguro que si.
-Porqué te colgué aquí te preguntas? Pues antes de la última fase de la “prueba” debemos
prepararte un poco más. Aún no eres lo suficientemente putita. Y de la mesa trae una caja, la
abre y de allí saca un artefacto que nunca había visto, pero que por su forma imagino lo que
hace. Es un arnés de castidad, una cárcel para mi pene, una prisión. Lo abre, pone el aro por
detrás de los testículos, lo cierra, coloca el cabezal y zas! El candado que los une.
-Ves putita?? Ahora estas mejor, una putita no necesita de esto para excitarse, usa su conchita
y a partir de ahora tu conchita será tu colita!! Ese lindo agujerito que ya estamos preparando,
verás como disfrutas, pero por si acaso… mejor tomar precauciones, y la llave la guardamos
aquí, dice colocándola en uno de los ojales de su vestido cercano a su pecho.
Toca mis testículos, mi pene intenta pararse, la cárcel lo detiene, ella continúa pasando sus dedos sobre
ellos burlándose de mi suerte. Siempre su tono es humillante, irónico, burlesco, y cada vez más
socarrón. Me toma de la cara, me da algunas palmadas en las nalgas, luego en las mejillas, eso
se repite todo el tiempo, me hace sentir puta, sucia, barata, humillada, a su total merced.
-no desesperes puta, me dice. Aún queda más, mírate esa pancita!! Muchos chocolates y hot
dogs en tu dieta, ya lo revisaremos, pero por ahora pondremos esto. Me muestra un corset
negro, levanta mi falda, me lo coloca en la cintura, lo ciñe y por detrás lo ajusta, lo ajusta
mucho, lo hace con fuerza, luego fija las medias a los tirantes y me acomoda la falda.
–disfrutas cerda?? Disfrutas de esta ropita?? Te gusta verdad?? Pero mira que figura
tienes??!! Ahora eres una delicia, un verdadero bombón, morirían los hombres si te vieran!!!
No es verdad mariquita?? No es verdad??!!
-Si Ama Máxima, morirían si me vieran.
-Pero, mírate, estas vestida como una putita dulce, caminas como tal y me hablas con esa voz
de hombre?? A partir de ahora empieza a afinar tu voz, a los hombres no les gustan las putitas
maricas con voz gruesa, vamos!! No te lo repetiré!!
-Si Ama, Si Ama Máxima, respondí tratando de afinarla lo más posible.
-Bien!! Así está mejor!! Esa es la actitud!! . Y ahora hay que ponerte un nombre, un nombre
para lo que eres, que te represente y nos demuestre como te sientes… no te parece?
Mmmmm, ya está, brigitte, eres brigitte!! Te gusta tu nombre cielito??
-Si Ama Máxima, si ama, me llamo brigitte.
-que eres brigitte?? Vamos dilo! Que eres?
-Soy brigitte, una puta marica! Soy brigitte una cerda putita.
-Otra vez, repítelo hasta que lo aprendas, anda!, repite.
-Soy brigitte, una puta marica! Soy brigitte una cerda putita. -Soy brigitte, una puta marica! Soy
brigitte una cerda putita. -Soy brigitte, una puta marica! Soy brigitte una cerda putita.
-Y seguramente sabes que las cerdas putitas y mariquitas nunca tienen su colita libre, no es
verdad??
-Si Ama Máxima.
-Por lo cual falta esto.
Y pone frente a mi un dildo anal que se infla con una bomba de mano.
Se dirige a mi culo, lo abre, mete el pene en mi ano y comienza a inflar la bomba. El pene crece
en mi interior, cada vez más, lo siento se ensancha, es una sensación única, diferente, siento
mi culo completamente ocupado y a punto de estallar!!, está dilatando mi ano hasta el límite.
Pero me agrada la sensación de mi culo ocupado, ella se da cuenta y me lo dice.
-Te gusta verdad??, sabía que si!! Lo sabía!! Y si aún no es así ya lo disfrutarás en una cuantas
horas. Mmm que bella estas!! Que bella estas!! Una real mariquita deseosa de tener su culo
lleno, y de lucir ropas sensuales y sexys para sus futuros machos!!!. Jajajaja. Ahora brigitte me
retiraré para dejarte disfrutar de estas sensaciones, tu culo lleno hará que pienses lo que estás
viviendo y saques de ti la perra, la puta, la marica que siempre ocultaste. Te dejo el espejo para
que te mires, para que te disfrutes.
Me dormí, con mi cabeza y pensamientos a mil revoluciones, dormité colgado de aquellas
cadenas, tal vez media hora, tal vez menos. Mi cuerpo está cansado, mi culo dilatado, mi
mente confundida y mi orgullo completamente destruído. Soy un hombre, pero no creo
poder soportar esta situación por más tiempo. Me considero un macho, pero ahora soy una
nena putita vestida de rosa con bolados, lazos, tacos altos y un pene en el culo y no puedo
rehusarme a nada de lo que me pasa.
El sonido de sus tacos me despierta, en sus manos una bandeja trayendo un plato con comida
y un vaso con agua. Sale y vuelve a entrar, con ella trae un colchón que arroja en el suelo. Me
da un par de cachetadas para asegurarse de que despierte, toca mi culo, toca mis pezones, sus
largas uñas me acarician provocándome espasmos, me pellizca, toca mi pene prisionero de
aquel artilugio, se burla de mi, se ríe, me humilla con cada palabra, su cara esboza una mueca
risueña constante y mi autoestima está cada vez más abajo.
De pronto me desata de aquellascadenas y saca la barra que separa mis pies, para después aflojar el dildo anal y sacarlo por
completo. Mi culo se alivia, pero se siente vacío, extraña aquel elemento. Camino hacia la silla,
me siento a la mesa y ante su orden procedo a comer y beber. Lo hago con ansias, ya casi no
recuerdo cuando fue la última vez que lo hice, como mientras ella me mira y se marcha pero
no sin antes decirme lo hermosa putita que soy, lo cerda marica en la que me convertí , en el
montón de vivencias que me esperan y en el severo castigo que me ganaría si me saco sólo
alguna de las prendas que llevo. Se fue, terminé de comer y rendido me acosté en el colchón.
Finalmente caí dormido.
Las horas han pasado, ahora si han sido varias. Ama Máxima entra con un café, lo pone sobre
la mesa, me mira y me dice:
-Hola brigitte, perrita, como has descansado?? Parece que bastante bien, se te nota más
relajada. Seguro has soñado con vestidos, tacos y alguna que otra verga!! Asi son las putitas,
tienen sueños calientes!! Toma tu café y tus tostadas y si deseas orinar hazlo en ese recipiente
de la esquina, anda, que te espera un hermoso día.
Me acerco a la mesa y desayuno. Luego me dirijo a la esquina a orinar, aun mi pene está
prisionero. Me estoy terminando de despertar cuando regresa, me toma de la cara y me
levanta de la silla, me da un par de cachetadas y de nalgadas. Me hace agachar, levanta mi
falda rosa y con poco lubricante vuelve a meter el dildo anal en mi culo, rápidamente presiona
la bomba manual y el dildo se hincha en mi interior, ya conozco esa sensación no es extraña.
Me paro, con el dildo adentro mío y la bomba de mano que cuelga entre mis piernas. Me
hace caminar como me enseñó, como una putita, pasos cortos, manos pegadas al cuerpo
y apuntando hacia afuera, quiere que lo sienta aún más adentro y mi culo se acostumbre
nuevamente luego de pasar una noche vacío. Me para en el centro del cuarto.
- Ya sabes que eres para mi, verdad brigitte??. A ver dímelo. Vamos, dilo!!
-Soy brigitte, una putita, una cerdita maricona, Ama Máxima.
-Bien, muy bien. Y como lo has dicho eres una putita, y las putitas deben trabajar, no esperarás
que tu Ama te mantenga todo el tiempo? No es así cerdita??, no es así?
-Si Ama, así es.
-Bien entonces comencemos. Hoy brigitte te espera un arduo día de trabajo. Pero estás hecha
una piltrafa, no puedes ir a trabajar en esas fachas, tenemos que corregir tu imagen!!!.
Sale y regresa con una nueva percha que contiene un cambio de ropa y un nuevo par de
zapatos en su mano. Se me acerca, me saca la falda de un tirón, me quita el top rosado,
los zapatos, los brazaletes y tobilleras, sólo me deja el brassier, las bragas, las medias y el
corset. Me muestra la ropa, la pasa frente a mi diciéndome que ese era el atuendo adecuado
para trabajar y que con el me veré muy sexy y putita, como siempre su tono es socarrón,
despectivo, humillante y risueño. Me pone un top blanco, sin mangas y algo escotado sobre el
brassier, en el luce una inscripción que en lentejuelas rosadas dice: PUTA MARICONA AMA LAS
VERGAS. Ella me la muestra y me la lee, se ríe y lo disfruta.
Además me dice que no me pone rellenos en los pechos porque quiere que por más hermosa que esté, todos se den cuenta que
soy un machito convertido en una puta maricona, su deseo no es hacerme mujer, es hacerme
una puta mariquita, esa puta que yo con mi altivo carácter creo ver en las mujeres. Ahora me
coloca una diminuta faldita tableada escocesa que prende por detrás, una torerita blanca casi
transparente de mangas largas con cuello y puños de plumas y luego los zapatos, rosados de
plataforma taco alto y con hebilla al tobillo.
Me paro, me levanta la falda y me mira la cola, de un tirón me saca el dildo, me hace dar
vuelta, me hace desfilarle en la habitación, me mira, se burla, me dice lo hermosa que estoy, lo
putita que me veo, que está orgullosa del resultado de su trabajo, me revisa las uñas y otra vez
pellizca mis testículo y luego mis nalgas.
-Mírate al espejo brigitte! Estás hermosa! Preciosa y lista para trabajar. No es así, No estás de
acuerdo?
-Si Ama Máxima.
-Pero mira la putita que tengo aquí, quien lo iba a decir hace apenas unas cuantas horas, un
machito muy creído es ahora mi putita personal, mi mariquita servicial y es tooooda mia!!! No
es así, brigitte?? Me dice tomando mi mentón, agitándolo y mirándome a los ojos. Siempre has
sido una putita, brigitte?
-No Ama.
-Y ahora, y ahora lo eres?
-Si Ama Máxima.
-Siempre lo has sido puta!! Yo solo la saqué de dentro de ti!! Y acaso no te gusta ser así de
putita, asi de mariquita?? Dime.
-No lo se Ama, no lo se.
-Ahhh, pues bien, pronto lo sabrás, al final del día te encantará… te encantará, jajajajajaja. Ya
lo verás.
Es increíble lo humillado que me siento, lo degradado, las cosas que pasan en mi interior, y en
mi exterior!. Me arrepiento de cada mujer a la que maltraté, de cada una de las que seduje
solo para cogerla, de cada una a la que desprecié por no considerarla digna de mi belleza
masculina. Me arrepiento, pero es tarde, ya estoy vestido de putita, como una mariquita de
cabaret, con su pene anulado, su culo dilatado, completamente maquillada y lista para ir a
trabajar vaya a saber donde, bajo las órdenes de un Ama severa e incorruptible. Finalmente
me da el toque final, remarca un poco mi maquillaje, los labios y coloca en mis orejas unos
hermosos y grandes aros plateados de argolla.
-Listo, terminada, toda una zorrita!! Una diosa lista para ir a trabajar, que dices, brigitte,
quieres ir a ganar unos pesos para tu Ama?
-Si Ama
-Asi me gusta, me he esforzado por ti y ahora es tu turno de devolverme ese esfuerzo con
trabajo y unos pesos que no me vienen nada mal. Lista mi mariquita??
-Si Ama.
-Bien entonces andando, que se nos hace tarde.
Me toma de la mano, salimos del cuarto, por un pasillo nos dirigimos a una salida principal,
por ella a la calle. Sigo de su mano, ella camina elegante y con porte de dama, yo como puedo
con aquellos enormes tacos, hay gente, poca, pero la que hay mira asombrada, algunos gritan,
nos dicen cosas, seguimos caminando dos cuadras y nos detenemos a la entrada de un bar.
Es lindo, poca gente en su interior, en la barra una mujer saluda a Ama Máxima y nos deja
pasar sin preguntar nada, está claro que se conocen.
Un pasillo pequeño y una puerta que dice hombres indica que es el baño masculino, la abre y me hace pasar allí, ella entra conmigo. El
baño es algo pequeño, no muy limpio, con un excusado, un mijitorio, un vanitory, un toallero y
todas las paredes pintadas y maltratadas con grafittis e inscripciones groseras de los clientes.
-Llegamos puta! Aquí será tu oficina, te gusta?
-Aquí Ama, está segura?
-Que, acaso creías que ibas a estar en una oficina de verdad? Acaso crees que te mereces algo
mejor? Hey!! No olvides que eres brigitte, una marica puta que ama las vergas!!! Lo dice aquí
en tu pecho!, no lo olvides!!.
-No Ama, solo me sorprendió.
-Pues ya verás como te sorprenderá el resto. Siéntate en el excusado, ahora!
Saca de su cartera un par de esposas y con ellas me encadena la mano izquierda al toallero que
se encuentra al lado del excusado. Luego saca un cartel que pega en la pared frente a mi, en
el dice: ATENCIÓN!! MAMADA POR SOLO 5 PESOS!! APROVECHE Y ACABE EN SU CARA. SOLO
POR HOY.
No puedo creerlo!! Me está ofreciendo como puta a los que entren aquí, no puede ser!! No
puede ser!!
-Que pasa chiquita, estas nerviosa? Te encantará, y ya verás la cantidad de pesos que ganarás!
Jajajajaja. Jajajajajaja. Estás hermosa, ninguno te desaprovechará!!! Quien dejará pasar
esta oferta? Tu lo hubieras hecho??, claro que no, verdad??. Bien, te dejo solita y no me
defraudes… ok? Confío mucho en tus encantos… jajajaja. Mete en esa boquita dulce toda la
lechita que puedas, te hará falta.
Toca mi cara, toca mi pene, me da un beso con su dedo índice en mis labios de manera burlona
y se retira de allí, deseándome una buena jornada laboral.
Pasan sólo 5 minutos, la puerta se abre, un hombre alto, de tez morena, cabello castaño un
poco largo y desarreglado vistiendo remera y jean ingresa, mira sorprendido controlando no
haberse equivocado de puerta, entra definitivamente y cierra con cerrojo. Me mira, parece
que no entiende, luego mira el cartel de la pared y entonces comprende porqué estoy allí.
Revisa el techo y las paredes con su mirada, busca una posible cámara que no hay, eso le dá
confianza, me mira, me toma de la cara, revisa mis pechos, abre mis piernas y ve mi pene
enjaulado. Parece que le gusta lo que ve.
-Hoy es mi día de suerte!! Así que estás de oferta? Y yo que hace días que no encontraba a
nada tan bonito como tú!!! Y la verdad es que estás hermosa, eres una dulce putita, y seguro
que has de mamarla como los dioses… probaremos el servicio.
Deja su cerveza en el vanitory, se me acerca y se baja los pantalones, toma mi cabeza con
rudeza y la empuja contra su miembro exigiéndome que comience mi trabajo. Con la mano
libre le bajo su bóxer y dejo al descubierto su miembro, es bastante grande, más que el mío,
parece haber sudado mucho o no bañarse hace un par de días, su perfume es intenso, abro mi
boca y lo meto en ella. El presiona con violencia y me empuja una y otra vez contra su pene, yo
lo chupo, libero su glande que cada vez se hace más grande, parece gustarle lo que hago, sigo
chupando, no puedo dejar de hacerlo. El gime, el habla y se dirige a mi como su puta, como
su puta callejera, sin el menor respeto, solo desea que se la chupe y que lo haga por mucho
tiempo, su polla crece, crece cada vez más, se torna grande y ocupa toda mi boca, me ahoga
por momentos.
-Vamos puta!, así puta, marica reventada!! Vamos, sigue chupando que te daré toda mi leche,
esa leche que seguro has de estar deseando!! Vamos… mmmm que delicia, nunca me la han
chupado así… mmmm que placer!!!.
Yo chupo, el cada vez goza más, su verga invade toda mi boca, su olor se mete por mi nariz
a todo mi cuerpo, me toca la cara, me toca los pechos, me insulta, me humilla, soy su puta,
solo le interesa acabar y por el tamaño de su verga pronto lo hará. No me deja descansar ni un
segundo, sus cachetadas corrigen mis errores, aprendo rápido, le paso la lengua por su glande,
por sus testículos, sigo chupando, no puedo parar!!!, no me suelta, me toma fuerte del pelo y
su glande parece explotar… siento que está por acabar, froto de manera desenfrenada su pene
golpeando el glande en mi lengua, el me soba los brazos y la cara una y otra vez, parece ser esa
es su manera de hacerme sentir una sucia puta, me exige que lo mire a los ojos, quiere que lo
mire todo el tiempo, me grita y de repente saca su miembro de mi boca y con una ráfaga me
llena de leche el rostro.
Una vez, otra vez, y otra más, la leche le sale de a montones, parece
que hace meses no lo hubiese hecho, toda su leche cubre mi cara, vierte un poco en mi lengua,
en mis labios, me exige que la trague, con su pene la desparrama y empuja de mi rostro hacia
mis labios para que siga degustando su manjar. Goza, está cansado pero se ve el placer en su
rostro, gime, está extasiado, yo sigo tragando su leche, es tibia y de un sabor agrio, diferente a
todo. Quiero detenerme pero golpea su polla sobre mi cara, mis labios y mi lengua mientras su
mano fuertemente sujeta mi cara por el mentón.
-mmm Que placer!!!, por dios marica eres un sol, eres muy buena, la mamas muy bien!!! Y te
tomas toda la lechita… te gusta mi lechita?
-si señor, me gusta su lechita.
-mmm seguro que te gusta!!! Si eres una verdadera puta marica!!! Jajajajaja. Me encantas.
Vamos limpia bien esta polla, déjala reluciente, vamos.
Sigo chupando su polla, por unos minutos la deja en mi boca para que se la limpie por
completo. No lo puedo creer, en dos días no sólo me abrieron el culo varias veces con un dildo
sino que además probé por primera vez una verga y me llenaron la cara de leche… me miro y
no lo puedo creer, me siento sumamente humillado, avergonzado.
Se acomoda su bóxer y pantalones, acaricia mi rostro con desprecio, me hace sentir que es
mi macho y yo solo una puta barata, cosa que en realidad soy, lava sus manos en el vanitory,
saca de su bolsillo unos billetes y me arroja a la falda 5 pesos. Me mira, me dice que soy una
dulce marica y prometiendo volver se va. No hay manera de describir lo que estoy sintiendo,
cualquier rastro de hombría y masculinidad, cualquier atisbo de rebeldía, cualquier resabio de
orgullo de macho, se ha perdido atrás de una mamada y un par de tacos altos.
Tengo ganas de llorar, siento impotencia, me miro y no me reconozco, convertida en una sucia marica en
el baño de un bar dando mamadas por 5 pesos, siento cosas que no puedo describir, siento
que ya no soy quien soy o quien fui hasta ahora, a pesar de la bronca siento que brigitte ha
venido para quedarse y que lo anterior es casi otra vida, siento como si de repente me hubiese
reencarnado en brigitte.
Mientras estos pensamientos llegan a mi mente y me hayo lidiando
con ellos tratando de saber como continuar, la puerta del baño se abre nuevamente, ahora es
un hombre de raza negra, rapado, alto con aspecto de deportista el que ingresa. A diferencia
del otro rápidamente lee el cartel y se percata de la situación, orina en el mijitorio, me mira y
se ríe, me observa por delante y por detrás, me hace saber que soy de su agrado con un tono
insultante y algo grosero y bajándose los pantalones se acerca para que comience a chupar su
miembro.
Luego de el pasaron dos más, un rubio petizo de musculosa contextura y un hombre maduro
que rondaba los 60 años. Los tres al igual que el primero me humillaron, me maltrataron, se
burlaron de mi apariencia travesti y desdichada, me trataron con rudeza, me hicieron sentir
que eran mis machos y yo su puta, marica y sierva, me llenaron la boca con sus vergas y me
acabaron en la cara haciéndome probar su leche, me arrojaron su dinero y prometieron volver
otra vez. De tanta leche que cayó en mi rostro ya tengo semen en mi cuello y pecho, mi cabello
es un completo alboroto y mi maquillaje seguramente se ha corrido.
Cinco minutos después que el sesentón se retiró del baño la puerta vuelve a abrirse dejando paso a Ama Máxima.
-Jajajajaja. Mírate puta, pero mírate que bella estás!!, mira cuanta lechita, que lindo baño que
te has dado!! –y vuelve a reir- jajajaja.
Su tono es irónico y socarrón, burlesco y degradante para cualquier rastro de hombría que
me pudiese haber quedado después de todo aquello. Me toma de la cabeza y mira mi cara
como revisando si es realmente semen lo que la cubre, me hace mostrarle la lengua como
controlando si tomé lo suficiente, me hace mirarla a los ojos para notar mi vergüenza y
pesadumbre, mi humillación y sometimiento.
-Quien lo iba a decir… aquel machito y varón creído, ahora goza de que le llenen la cara de
leche!!! Jajajajaja. Y seguro que lo disfrutas, no es verdad perrita? Acaso miento mariquita?
Acaso no te gusta esto putita??
-Si Ama, Si Ama máxima.
-Ves que te lo dije? Siempre lo supe. Ahora lo disfrutas y lo mejor de todo es que has
encontrado un nuevo empleo!!! Vamos alégrate, eres la sensación del bar!!! Ahora todos
saben que eres una flor de reventada y hasta van a cobrar más por tenerte a ti aquí como la
atracción del lugar. Jajajajaja.
La risa ya es hiriente, me doy cuenta con sus carcajadas que ella realmente lo disfruta y siente
que cumplió su misión. Mientras habla y ríe, con sus dedos me refriega el semen por mi cara y
los mete en mi boca para que se los limpie, disfrutando de verme probar el fruto de mi trabajo.
-Y mira esa cosita entre tus piernas, como está? Ooohhhhh, está chiquita, arrugada y un poco
dolorida, verdad? Pero no importa ya no la usarás más que para mear, que dicho sea de paso,
ya estás aprendiendo a orinar sentada como una buena zorrita. Mira, ni se mueve… pero no te
preocupes porque ya no la necesitarás, a tus clientes no les gusta y para ti ahora todo tu placer
va a venir por tus otros orificios!!!! Jajajaja, Jajajajaja, que marica y puta hermosa que me has
salido!!. Pronto me agradecerás lo que hago por ti. Ya lo verás. Vamos, veamos cuanto has
ganado, dame la recaudación.
De mis medias saco el dinero y se lo doy, mira y cuenta los 20 pesos.
-20 pesos? Sólo 20 pesos? Mmm, es muy poco, no me alcanza ni para pagarte el almuerzo,
deberás seguir trabajando… pensaba darte vacaciones pero con esto me es imposible!, no lo
crees cerdita?
-Si Ama, Si Ama.
-Muy bien. Muy bien. Estoy segura que eres capaz de ganar más, estoy segura de eso. No lo
dudo. Hasta luego putita, compórtate como una verdadera mariquita, chupa mucho y gana
platita para tu ama, que esta noche te vengo a buscar.
Y con un par de cachetadas en mi rostro deja asentada su seguridad y confianza en mi y se
retira tras cerrar la puerta con cierta vehemencia. Ha de ser cerca del mediodía, falta mucho
aún para la noche, el día es largo y seguramente me espera mucho trabajo.
FIN