De dama a puta 8ª parte

DE DAMA A PUTA

8ª PARTE

Sabía que estaba perdida, esclavizada a su antojo. Era un juguete en sus manos, que me podía dar, alquilar o vender a quien quisiera y yo acepte. Nunca comprendí porque se caso conmigo si igual podía tenerme, llegue a pensar que era la mayor venganza a mis padres, en especial a mi madre.

Que me estaba pasando, ya no tenia la sangre fría de los días de novios y los primeros de casada. Me estaba enamorando de ese simio peludo? Me obsesionaba creer que no, que era parte de la comedia montada por los dos.

Pero luego en especial estos dos últimos días, note un cambio en mí. Ya no le rehuía y en sexo me habia dejado tremendamente satisfecha.

Me desperté temprano y el dormía a mi lado. Increíblemente me vi, buscándolo para el hermoso polvo matinal. Manipulé su pija con mi mano, me incline y la besaba. Abrió sus ojos, me miro y se sonrío atrayéndome hacia  él. Me beso fuertemente en los labios y abrí mi boca ofreciéndole mi lengua que mordía con sus labios. Sus manos buscaron mi sexo y ya estaba mojada. Volvió a sonreírse al notarlo y yo enrojecí.

Mi respiración comenzó a agitarse y me tire de lleno en su búsqueda. Sentí un orgasmo mientras lo buscaba. Luego subió sobre mí e introdujo lentamente, para mi desesperación, su pija en ni concha. Todo lo hacia parsimoniosamente, ante mi desesperación que quería tenerla toda y moviéndonos. Mi segundo orgasmo llego en ese momento. El estaba complacido de lo que me sucedía y no se apuro para nada. Puse mis piernas en su espalda y me empecé a mover yo alocadamente, clavando mis uñas en sus hombros. Se activo y empezó a moverse dentro de mi a tal punto que parecía que estábamos abotonados. Llego  mi tercer y mas fuerte orgasmo a los gritos y sentí que el eyaculaba dentro mío.

Respirando agitadamente me separo y se puso a mirarme.

ALCIDES: esa es la perra que quiero

URSULA: si amor, tu perra deseosa.

Nos bañamos y bajamos a desayunar en el hotel. Bajaba pegada a él. En el desayuno nos miraban porque nos tomábamos de la mano y nos dábamos de comer uno al otro.

Alquilamos un coche y salimos a conocer, por lo menos yo, Beijing. Una de las ciudades más populosas del mundo, con un tráfico caótico. Con enormes rascacielos y templos antiguos, mezclados.

Conocíla MurallaChinayla Ciudadprohibida. Esta rodeada de un foso de agua. La plaza más grande del mundo de800 metrosde largo y 500 de ancho

Sacamos fotos en todos lados y nos hacíamos sacar y filmar juntos. Pasamos todo el día recorriendo y a la noche fuimos a uno de los restaurante que habia cerca de la plaza. Luego en el hotel devolvió el auto y subimos a nuestra habitación. Él dijo que se iba a dar un baño de inmersión y lleno la bañera de agua. Se metió al agua y se quedo quieto un rato. En la habitación yo me desnude por completo y me mande al baño. Cuando quiso darse cuenta estaba en la bañera con él. Sumergí mi cabeza buscando besar y chupar su pija, él miraba complaciente. Yo sacaba la cabeza afuera, respiraba y volvía a meterla. Lo hice varias veces hasta que logre su erección. Me saco de la bañera, yo desesperada creyendo no me iba a coger. Mojados como estábamos me hizo poner en 4 patas en la cama. Se puso detrás de mí y ensarto su pija en mi concha. Con sus manos por delante agarraba mis tetas, las apretaba, estrujaba y pellizcaba mis pezones. Yo deliraba como una perra en celo hasta que sentí tiraba toda su leche en mí, ante mis múltiples orgasmos.

Ese día fuimos a la isla de Taiwán. Una isla de40 kilómetroscuadrados sobre el Pacifico. Me decía Alcides que tiene además más de 50 archipiélagos. En una época paso a manos de Japón y volvió a las Chicas. Zona volcánica, atraviesa el trópico de Cáncer que la hace tropical, calurosa y húmeda.

En Taiwán vi el primer partido de béisbol de mi vida y no entendí nada.

De ahí nos fuimos a Shangai. Es la ciudad mas populosa de China, sobre el Pacifico. En la segunda guerra mundial cayo en manos de Japón, para volver a Chica. Tiene los 3 rascacielos más grandes de China. Húmeda y calurosa. Y una movida y misteriosa.

Después de cenar en un restaurante, tomamos un taxi para recorrerla. Por fin Alcides dio una dirección y hacia ahí fuimos.

Era un tugurio. Entramos y habia tipos sentados alrededor de un escenario redondo. Dos mujeres hacían el baile del caño desnudándose. Fuimos al piso de arriba, una sección semi VIP. Desde ahí veíamos toda la plata baja. Alcides tomo un whisky   y yo un jugo.  Luego tomando un pasillo largo con puertas a ambos lados. Alguna puertas estaban cerradas y otras abiertas. Ante las puertas abiertas no parábamos a mirar, el como buscando algo y yo por curiosidad. Desde la puerta se veía una cama grande y sobre estas a medio vestir, en algunos una pareja, en otras dos mujeres. Mirábamos y ellos a nosotros y seguíamos viaje. De pronto paramos donde habia una mujer. Creo menor que yo, incluso me pareció menor de edad. Alcides tiro de mí y entramos. Luego de conversar unos minutos con esa mujer, esta empezó a desnudarse.

ALCIDES: (mirándome a mi) que esperas para desnudarte, vas a coger con Lynn

URSULA: pero Alcides yo…..

La tremenda bofetada que recibí además de darme vuelta la cara, me hizo temblar toda la cabeza.

Tiro de mi cabello y grito frente a mi cara, mientras Lynn miraba gozosa.

ALCIDES: vos que? Vos te desnudas ya que vas a coger con Lynn

URSULA: esta bien

ALCIDES: aprenderás a obedecer de una vez por todas.

Antes de empezar a denudarme, vi que Lynn gozaba al ver mi castigo, porque una mano suya se desplazo a su concha acariciándola.

Me desnude y acosté en la cama. Lynn se tiro a mi lado. Dijo algo en Mandarin, que yo no entendía, pero si Alcides que se reía. Alcides se habia desnudado e iba de un lado a otro con la cámara filmadora tomándonos desde todos lo ángulos.

Lynn al saber que no era solo esposa de Alcides, sino que en realidad era su esclava, incentivada por su morbo, todo me hacia con mas violencia. Me hacia gritar de dolor al morder con sus boca mis pezones dejando la marca de sus dientes en ellos. Cada tanto paraba y me daba golpes en mis tetas y en mi cara, que me hacían saltar lágrimas de dolor. Cuando fue a mi concha, me prepare para lo peor. Temía me arrancara el clítoris de un mordisco. Bajo metió sus dedos en mi concha, jugando con ellas.

Alcance a ver a Alcides fijar la filmadora en un lugar y tomar la cámara de fotos, para sacarme foto bien cerca de mi cara y registrar mis caras de dolor y de placer. En tanto Lynn se puso en 4 patas y siguió chapándome.

Vi que Alcides subía a la cama y se ubicaba detrás de ella y le metía su pija en su culo, mientra ella no cejaba en seguí chapándome. Me agarro un ataque de bronca, mezclada con celos por lo que hacia Alcides. Tirada en la cama con Lynn dando cuenta de mí y atendida por Alcides, de rabia agarre a Lynn de los pelos tironeándonos. Ella con una mano libre retorció con ganas mis pezones haciéndome gritar de dolor. Alcides por detrás de Lynn, gozaba con lo sucedido e le servia para energizar su ida y vuelta. Lynn se debatía entre no moverse mucho para satisfacer a Alcides y castigarme a mí.

Yo lloraba de impotencia. Sentí me venia un orgasmo y acabe en la boca de Lynn quien a su ves recibía en su culo la descarga de Alcides y se movía como una culebra. Una vez acabo Alcides volvió a la cámara a filmar. Se acerco a mí y puso en mi boca su pija para limpiar. No me quedo otra que hacerlo con asco. Estaba sucia de su semen, los flujos y pequeños excrementos de Lynn. Sentí tal asco que casi vomite.

Lynn y Alcides conversaban en Mandarin. Solo que cuando hablaban me miraban a mi, en especial Lynn, cuyos ojos denunciaban el deseo que sentía por mi.

Lo único que entendí fue OK. Pero OK  a que. Nos vestimos y salimos no sin antes soportar un pellizcan con saña de Lynn en mi nalga.

Salimos a la calle y ni siquiera dije una palabra. Estaba rabiosa de lo sucedido en esa habitación. Una china haciéndome el amor, mientra mi marido se la cogia a ella.

Fui al baño a darme una ducha sin dirigirle la mirada a Alcides. Él se hacia el desinteresado. Cuando salí del baño creí enloquecer. Parada en el centro de la habitación esta Lynn. Me acerque casi cara a cara y me empujo y yo a ella. Al minuto estábamos trenzadas en una pelea infernal. Mi mano izquierda sujetaba su cabello y mi derecha golpeaba en su cara y cuerpo. Ella me tenía a mi igual. Era golpe por golpe. De pronto la mano que me golpeaba dejo de hacerlo para agarrarme el pelo, así me tironeaba con las dos manos. Hice lo mismo que ella. Era en ir y venir hasta que ella, más fuerte que yo, me hizo una zancadilla que tiro al suelo. Ella se tiro encima y rodamos por el piso dándonos con todo. Alcides gozoso no perdía detalle con su cámara. Ella movió su cabeza y pego un mordiscan en mi antebrazo que creí me sacaba un pedazo. Ese momento lo aprovecho muy bien para montarse sobre mí y golpear en todas partes del cuerpo. Yo me defendía, mientras Alcides no perdía detalle con su cámara.

En un momento grito basta. Termino la pelea

Como ninguna de las dos daba signos de parar me saco a mi con sus brazos tomándome del mi brazo, mientras ella no dejaba de pegarme.

URSULA: déjame que la mato, no ve que no para de pegarme.

Él se puso en medio de las dos y el combate termino. Yo tenía cerrado mi ojo derecho y sangraba un poco de mis labios. Ella le salía abundante sangre de la nariz y un corte en la ceja.

Ella gritaba en mi idioma.

LYNN: puta, esto no queda así, me voy a vengar

URSULA: calla maldita roba hombres

LYNN: te voy a deshacer esa cara bonita que tienes, que ni los perros te van a querer.

ALCIDES: basta ya! Vos (dirigiéndose a mi) ve al rincón aquel y vos Lynn ve a baño, dúchate y vete. Otro día seguimos.

Yo tirada en el suelo solo lloraba y contenía la sangre de mi labio, notando que veía dificultosamente.

Pensé en a lo que llegue, trenzarme en una pelea con otra por un hombre. Nunca en mi vida me habia agarrado  golpes con ninguna mujer y ahora acá acababa de pelear por un macho. Encima filmada. Ella se marcho y entre yo al baño, ni me reconocía en el espejo. En tanto él pidió abundante hielo y una bolsa de agua. Mirándome al espejo lloraba. Pensar que pelee por un macho, hasta donde y que llegaría a hacer.