De cómo me hice voyeur (5)

Mi padre maquina un plan con su hermano para follarse entre los dos a mi novia, y lo consiguen.

Después de ver a mi padre follándose a mi novia el morbo de nuestra relación iba en aumento día a día, María se hizo un poco más exhibicionista y la mirada de su suegro se clavaba en su redondo culo casi a diario, estaba claro que quería volver a penetrarla por ese agujero. Pero a ella no le apetecía repetir ya que lo que nos motivaba era ese morbillo de la primera vez con otro, para mi novia hubiera sido muy fácil montárselo con mi padre casi a diario pero aunque le había gustado la forma en la que se la folló, ya no le ponía tanto.

En la última semana de agosto vino a pasar unos días al chalet mi tío, el hermano menor de mi padre y María se mostró muy receptiva con él desde el primer momento. No lo hablábamos pero ambos estábamos de acuerdo con el hecho de que ella aprovechara la mínima oportunidad para intentar tirárselo. La segunda noche de estar en casa escuché una conversación entre mi padre y mi tío que precipitó un poco las cosas:

Joder, vaya culito que tiene tu nuera, dijo mi tío

Sí, y le gusta que se la follen por ahí, le contestó mi padre

¿De verdad?, ¿Te lo ha contado tu hijo o los has visto?

Hermanito, ese culo respingón ha sido mío la semana pasada

No jodas, eres un cabrón, mira que tirarte a la novia de tu hijo.......

Es una calientapollas, al principio se hizo la estrecha pero como le va la marcha me la cepillé aquí, en este sofá

Sí, un poco calientapollas sí que es, pero yo no sé cómo acercarme a ella

Déjalo de mi cuenta, yo voy a intentar quedarme a solas con ella esta noche ya que mi mujer y mi hijo hoy han madrugado para ir pronto al mercadillo, tú haces como que te vas y nos miras por la ventana.....

Yo no quiero mirar, quiero tocar

Déjame terminar, cuando esté a punto entras tú y la follamos entre los dos

¿Y si no quiere?

Al principio seguro que se opondrá, pero ya verás como al final le gusta

En cuanto entré en nuestro cuarto le conté a María la conversación que había escuchado y trazamos un plan, yo convencería a mi madre para irnos pronto a dormir y ella se quedaría a solas con mi padre, y así lo hicimos. Cuando le comenté a mi madre el plan ella alucinó, su marido, su fiel marido no era tan santo como creía, yo le dije que ella no se le quedaba atrás ya que yo mismo había sido testigo de dos "infidelidades" y protagonista de la tercera a lo que me respondió que una cosa era la calentura del momento y otra planificar algo, había una diferencia. Yo le pregunté si ella nunca había maquinado algo para tirarse a alguien y me contestó que no, pero no le creí, había algo en su mirada que la delataba así que le pregunté:

¿Seguro?

Sí, seguro, me respondió

No te creo, algo en tu cara te delata

Vale, pero fue con un buen fin

¿Un buen fin?, ¿para alguna ONG?, le pregunté entre risas

Casi, lo hice por nuestra familia

Me gustaría que me lo contaras

Vale, me dijo y empezó su relato que transcribiré tal y como me lo contó

Cuando tú eras pequeño tu padre era un gran profesional pero demasiado buena persona, sus compañeros de trabajo eran unos trepas que no dudaban en pisar la cabeza de quien fuera con tal de ascender, yo se lo decía continuamente pero él me contestaba que no era su estilo. Un día llegó a casa bastante enfadado y me contó que un compañero le había robado una de sus ideas para tomar posiciones frente al nombramiento del nuevo director de proyecto, yo me enfadé y le dije que era un tonto por dejar que le robaran sus ideas y sus sueños, y que además él estaba mejor capacitado que el trepa ése, pero me contestó resignado que esto era una selva y valía la ley del más fuerte, yo me quedé pensando en lo de la selva y decidí entrar en acción.

Su jefe era un cincuentón para nada apetecible, pero me miraba con mucho morbo, especialmente el culo, así que un día me presenté en su oficina sin que tu padre lo supiera y le conté lo del trepa que le había robado la idea y todo eso, él me preguntó porqué no se lo había contado tu padre directamente a lo que respondí que no serviría de nada. Aquel hombre se quedó pensando uno momentos y rompió el silencio para decirme que se notaba que yo quería mucho a mi marido al interceder por él, pero que también suponía que además del reconocimiento profesional de mi esposo me interesaba el considerable aumento de sueldo que traía aparejado el nuevo puesto, a lo que contesté que sí, que era normal, a todo el mundo le gusta contar con más dinero a fin de mes. Se volvió a quedar pensativo, me miraba de arriba abajo con una leve sonrisa dibujada en su boca y rompió el silencio para decirme:

O sea que es por dinero

Sí, también, pero eso no............., no me dejó terminar

Vale, vale, ¿Y tú sabes lo que hacen las mujeres por dinero?

Sí, trabajar

No, hija, no, vender su cuerpo, me dijo

¿Me está tratando como una puta?

¿Quieres que el puesto sea de tu marido?

A ese precio no

Lo lamento, él es un buen profesional, pero mientras esté bajo mis órdenes no ascenderá nunca

Eso es chantaje, es usted un hijo de puta

Sí, y tú una puta que me va a dar su culo

Yo no sabía qué hacer, si se lo contaba a tu padre se enfadaría mucho conmigo y le rompería la cara al gordo seboso de su jefe, lo que supondría salir de esa empresa y comenzar a buscar trabajo otra vez, en fin, perder todo el esfuerzo de los últimos años, así es que me armé de valor y le dije:

Vale, sólo una vez, pero después del nombramiento

¿Y me darás tu culo?

No, esa parte de mi anatomía no se la doy ni a mi marido

Entonces no hay trato, dijo levantándose de su silla

Vale, vale, le daré mi culo, y mi boca y todo lo que me pida, pero después del ascenso

No me fío de ti, así es que ahora mismo te vas a desnudar y te voy a hacer unas fotos como dios te trajo al mundo, si no cumples tu trato no sólo las verá tu marido, me encargaré de repartirlas por toda la empresa

Hijo de puta, le dije

Y me desnudé frente a él, me tomó todo un carrete de fotos y para demostrarme que era un hombre de palabra guardó el rollo en su caja fuerte y me dijo que cuando cumpliera mi parte del trato me lo daba, ni siquiera las iba a revelar, así es que quedé con él para el día siguiente del ascenso en nuestra casa, a los dos meses y después de festejar el nuevo puesto durante toda la noche, mientras tu padre estaba en la oficina mi culo era desvirgado por aquel hombre maduro, me hizo de todo, se corrió en mi boca, me obligó a tragarme su semen, me la metió por todos mis agujeros repetidamente y debo confesar que disfruté como una zorra entregando mi cuerpo por dinero, me sentía muy puta y actué como tal. Él cumplió su parte del trato y me entregó el carrete ese mismo día y yo lo destruí inmediatamente, esa fue la única vez que lo hice con premeditación y no me arrepiento, gracias a ese puesto tu padre pudo seguir ascendiendo y hoy tenemos la economía arreglada.

Yo me había puesto muy cachondo con la historia y le di la razón, era una buena causa y gracias a aquel hombre que le desvirgó el culo mi madre le había tomado el gustillo a eso de ser sodomizada. Con la calentura me fui a mi dormitorio, mi novia dormía plácidamente y cuando despertó mi polla estaba intentando entrar en su culo, esa tarde estuve sodomizándola todo el tiempo pensando en mi madre con aquel hombre, hasta que me corrí inundando su recto con mi leche.

Cuando llegó la noche, después de cenar mi tío se arregló y dijo que se marchaba por ahí de cacería, todos le deseamos buena suerte y nos quedamos mirando la tele. Al rato yo le dije a María que me iba a acostar ya que acompañar a mi madre al mercadillo me había dejado agotado y ella me contestó que se quedaría un rato más hasta que terminara la peli. Mi madre se quedó un rato más y yo creí que iba a fastidiar nuestros planes pero al poco tiempo empezó a bostezar y también dijo que se iba a acostar, le dio un beso a mi padre y subió para colocarse a mi lado a ver el espectáculo.

Esa noche María llevaba puesta la minifalda tableada que tanto me gusta y una blusa azul claro que le quedaba bastante bien, mi padre estaba con un pantalón corto y una camisa sin abotonar, estaban sentados en el sofá pero uno en cada extremo. Estuvieron unos quince minutos mirando la peli hasta que llegó la publicidad y en ese momento mi padre rompió el silencio para decirle:

¿Qué tal estás?

Bien, es un poco rollo esta peli, me parece que me voy a ir a dormir

Pues yo estoy cachondo

No empieces por favor, lo del otro día fue un error y no se debe repetir

Es que me dejaste a medias, dijo mi padre

¿A medias?, me inundaste el culo con tu leche ¿o no te acuerdas?

Sí, pero mi polla no probó tu boca, ni mi boca saboreó tu coño

Y bueno, no se puede tener todo en esta vida

Venga mujer, será la última vez, te lo prometo, hacemos un 69 y nos damos el gusto los dos, a mi hijo no le gustaría enterarse lo putita que puede ser su novia

Ni a tu mujer lo cabrón que puede ser su marido

Vale, a ver quién pierde más, mi esposa y yo somos muy liberales y no va a afectar mi matrimonio

Y yo lo puedo negar todo

¿Segura?, entonces ¿cómo conozco ese lunar que tienes en la parte interior de tu nalga, justo al lado del agujero de tu culo?

Eres un cabrón, me niego a chupártela porque tu chantaje va a seguir y prefiero que se lo cuentes ahora

Te doy mi palabra de honor, sólo ésta vez, mañana nos olvidamos de todo

Ella no contestó, se puso de pié y se quitó las bragas, mi padre se sacó los pantalones y los calzoncillos y le ordenó que se desnudara de cintura para arriba, María se quitó la blusa y el sujetador y se arrodilló delante de mi padre para empezar a chupársela. Mientras se la mamaba con maestría él le acariciaba las tetas para ponerla cachonda, luego la hizo recostarse en el suelo y se puso sobre ella para hacer un 69, mi novia abrió las piernas y él le introdujo la lengua en su raja para probar sus jugos, luego se la sacaba para masajearle el clítoris un poco u volver a metérsela. Mientras ella acompañaba los movimientos de cadera de mi padre abriendo la boca para tragarse lo más posible su polla, estuvieron así un largo rato hasta que mi padre le dijo que estaba a punto de correrse, se puso de pié y María se arrodilló delante suyo, se metió la polla en la boca y le hizo una mamada muy profesional mientras él la animaba

Así putita, te gusta comer polla

Hoy te lo vas a tragar todo, quiero que no se te escape ni una gota de mi semen

Sigue, puta, sigue, que tienes una boca de oro

Al fin comenzó a correrse y María tragaba todo lo que podía recogiendo con el dedo pulgar lo que se le escapaba por la comisura de los labios, así siguió un rato hasta dejarle la polla bien limpia chupándosela mientras lo miraba directamente a los ojos. Luego él la sentó con las piernas abiertas y hundió su cabeza en el coñito de mi novia para comenzar a hacerle una comida increíble, ella cerraba los ojos y se pellizcaba los pezones, estaba disfrutando de la lengua de su suegro hasta que por fin empezó a correrse arqueando su cuerpo hasta el límite y mordiéndose la mano para ahogar sus gritos con los ojos cerrados para disfrutar al máximo de aquel orgasmo. Mi padre no paraba de lamerle el coño y con una mano le hacía señas a mi tío para que entrara en escena y lo vimos aparecer desnudo con la polla en la mano, mi madre clavó su mirada en el cipote de su cuñado y me dijo:

Mi culo tiene que probar esa polla

Estás muy caliente, le contesté

Sí, métemela por el coño, quiero tu leche dentro de mí

Y así lo hice empecé a follarme a mi madre mientras mi tío se acercaba al sofá donde estaba María con las piernas abiertas invitando a ser penetrada. En un rápido movimiento mi padre se apartó y su hermano le clavó la polla en el coño a María, ésta abrió los ojos y mientras intentaba zafarse les decía que no, pero ellos la tenían bien sujeta y mientras mi tío se la follaba mi padre le sobaba las tetas. Estuvieron así un buen rato hasta que ella dejó de resistirse, entonces mi tío se sentó en el sofá y entre los dos la obligaron a cabalgarlo, en realidad no tuvieron que hacer mucho esfuerzo porque María estaba dispuesta a todo ya en ese momento.

Mientras ella cabalgaba a mi tío, mi padre empezó a trabajarle el culo con la boca y los dedos, cuando lo tuvo dilatado pararon un momento para que la polla de mi padre entrara en el culo de mi novia, cuando la metió toda empezaron a moverse lentamente gozando los dos hombres del cuerpo jóven y bello de mi amada. Ella estaba como loca, nunca pensé que la doble penetración le gustara tanto y la escena me ponía muy cachondo, tanto que me corrí abundantemente en el coño de mi madre.

Luego le dieron la vuelta y mi tío la sentó sobre su polla clavándosela lentamente ya que la tenía más gorda que su hermano y el culo de María se tenía que acostumbrar a su nuevo huésped. Cuando la tuvo toda dentro mi padre se la metió por el coño y continuaron con la doble penetración durante un buen rato mientras le decían de todo, la insultaban, la llamaban zorra, puta, ramera, todo lo que se les ocurría, a todo esto yo ya me había empalmado otra vez y me estaba follando a mi madre por el culo mientras ella se masturbaba.

Luego se pusieron los dos hombres de pié y la "obligaron" a chuparle la polla alternativamente a uno y a el otro mientras se masturbaban y le tocaban las tetas. El primero en correrse fue mi tío que inundó la boca de María obligándola a tragarse todo lo que su polla expulsaba, cuando le había limpiado bien el cipote le tocó el turno a mi padre que repitió la operación. Mientras, mi madre se había corrido y me la estaba chupando para tragarse ella también todo el contenido de mis huevos hasta dejarme limpio.

La primera en marcharse fue mi madre que se fue a asear antes que subiera mi padre, yo me quedé a ver como trataban a María después de correrse, le decían de todo, le sobaban el cuerpo y le metían los dedos por todos sus agujeros, ella estaba como ida, se sentía muy puta y disfrutaba de las vejaciones de aquellos hombres maduros que le daban cachetes en el culo hasta que por fin la dejaron en paz y pudo subir a nuestro dormitorio sin asearse ya que la obligaron a meterse en la cama conmigo así sucia como estaba, yo por mi parte estaba encantado y comencé a lamerle todo el cuerpo mientras ella me la chupaba para hacer que me empalmara otra vez. Cuando mi polla estuvo a punto me pidió que se la metiera por el culo mientras ella se masturbaba para correrse a gusto por segunda vez.

Estuve follándomela un buen rato ya que mi madre había vaciado mis cojones dos veces y si bien estaba muy caliente podía aguantar mucho, cuando por fin me corrí ella se puso de pié y me dijo:

Si quieres mirar puedes

¿Qué vas a hacer?

Voy a la habitación de tu tío, quiero otra vez esa polla en mi culo

Eres una puta viciosa, le dije

Y la seguí, ella entró en el dormitorio del hermano de mi padre que dormía desnudo y muy plácidamente después de la follada que le había pegado a mi novia, como estaba boca arriba María no tuvo ninguna dificultad en empezar a chupársela para hacer que se empalmara, cuando mi tío se despertó se encontró a mi novia mamándole la verga que ya estaba totalmente dura, ella sin mediar palabra se sentó sobre su polla haciendo que le entrara toda mientras le decía que venía de follar conmigo porque esa noche quería ser la más puta del mundo. Mi tío se la volvió a tirar por todos los agujero posibles hasta dejarla bien satisfecha, luego se quedaron a dormir juntos y yo me marché a mi dormitorio a cascármela.

Al día siguiente todo volvió a la normalidad y María no volvió a tener otros encuentros ni con mi padre ni con mi tío, aunque éste sí se folló a mi madre, pero eso es material para otro relato.