De cómo me converti en una mujer de verdad (6)

Conozco a una amiga como yo. La enseño a ser mujer y salimos a buscar sexo.

De cómo me converti en una mujer de verdad. Con la ayuda de mi madre(VI)

Desde los hechos que relaté en mi último relato(ya operada) no sucedió nada de interes durante un cierto tiempo. Estuve un cierto tiempo afectada de gripe, al final del invierno, y no pude salir a practicar sexo ni a ver hombres durante un tiempo. Estuve encerrada en casa y reflexione sobre lo que me habia pasado en los ultimos meses y creo que me vino muy bien para aclarar mi mente. Además aprendi a cuidar el hogar como una autentica ama de casa, y aunque tendria que buscar un empleo mas adelante, ayudaria mucho a mi madre.

Al mismo tiempo mi madre y yo seguimos fortaleciendo nuestra relacion; estaba segura de que me queria mucho mas que si hubiese seguido siendo su hijo, y me seguia contando todos sus secretos, ella era mi modelo a seguir. Ya recuperada estuve un tiempo sin ganas de salir de marcha, supongo que, a pesar de tener a mi madre para cualquier cosa, lo que yo necesitaba en el fondo era una verdadera amiga, alguien de mi edad en mi situacion con quien compartir mis experiencias, y gracias a dios la encontre.

Fue en una galeria comercial, yo estaba de compras, comprando ropa para la estacion veraniega; entre en una tienda y elegi, despues de mucho mirar y pensar, un par de faldas y varios tops, me dirigi a un probador a ver que tal me quedaban. Iba con las prisas y no habia ninguno abierto. No me fije y me dirigi al que me quedaba mas cerca, y, sin llamar, abri la puerta. Dentro encontre a una mujer, muy avergonzada, a la que, debido a lo nerviosa que se puso, se le cayo la falda que se estaba probando, dejando al descubierto un pequeño pene embutido en una tanguita. Cerre y sali rapidamente.

Me senti muy mal, porque sabia que ella debia estar muy avergonzada, y pense en irme rapidamente para que no me viese mas, pero luego pense que deberia quedarme y hablar con ella aunque solo fuese para pedirle perdon, y en cualquier caso para ofrecerle mi ayuda. Asi que espere a que saliera, lo que no tardo en hacer, totalmente roja y evitando mi mirada. Llevaba una falda vaquera y una blusa blanca, zapatos de tacon bajo. Yo, rapidamente me acerque a ella y la agarre del brazo, para preguntarle:

-¿Que tal te queda?

-...Bien... pero no se....- me dijo tartamudeando.

-Bueno, te importa pasar conmigo y me aconsejas sobre esta ropa que llevo?

Y sin esperar respuesta la cogi del brazo y la meti en el probador, por suerte era amplio. Alli dentro le dirigi la palabra:

-Mira, quiero pedirte perdon, pero al mismo tiempo quiero que sepas que no tienes que avergonzarte de nada. Yo he pasado por lo mismo que tu y te ofrezco mi ayuda para lo que necesites.

Al principio ella no podia decir nada, y seguia evitando mi mirada, luego acerto a contestarme: -Eres travesti tambien?.

-Si, mas o menos, pero este no es el mejor sitio para hablar. Que te parece si vamos a tomar un café o algo y platicamos de nuestras cosas?

-Si, me gustaria. Muchas gracias.

-Pues entonces vamos, que somos las mas guapas.

Salimos, dejamos la ropa que llevabamos y fuimos a una cafeteria cercana. Yo la cogi del brazo para darle confianza y nos fuimos deteniendo para mirar escaparates e ir rompiendo el hielo. Al tiempo yo la fui observando. Era una "muchacha" algo mas jovencita que yo, quizas, con el pelo castaño claro, no muy cuidado. Quiza con un cuerpo menos femenino, aunque se le veian bultos en el pecho(no sabia si relleno o no). Vestia con no mucha clase, ropa normal y zapatos baratos, no llevaba bolso e iba poco maquillada. A pesar de todo tenia un rostro atractivo. Llegamos a la cafeteria, saque un cigarro y le ofreci otro. Ordene un par de cafes y nos pusimos a platicar de nuestras cosas mientras fumabamos:

-Por lo que veo has salido ya del closet, no?- le dije.

Ella se rio un poco cortada y me dijo que ocasionalmente salia transformada a ver ropa y todo eso, pero que en su vida normal seguia siendo hombre.

-Y estas operada?- Le pregunte.

-Algo, me he injertado un poco de pecho y me retoque la nariz, pero no he dado el gran paso.

-Sabes? Yo antes estaba como tu, pero gracias a mi madre he salido totalmente al mundo y ademas me opere.

-A mi mis padres me expulsaron de casa cuando se enteraron. Ahora al menos tengo un empleo y puedo subsistir bien

-Yo he tenido suerte con mi mami, la verdad.

Entonces le conte toda mi historia, desde el principio hasta el final. Despues le comente:

-Sabes? A mi me apetece tener una amiga, he cortado totalmente con los amigos que tenia antes, y me siento algo sola. Y creo que podria ayudarte bastante a dar el gran paso, cuando lleves unas semanas viviendo de mujer no podras dejarlo, pero empezar es dificil. Te apetece que seamos amigas?.

A ella creo que empezaron a saltarsele las lagrimas. Le cogi la mano y se la aprete. Me gustaba cada vez más esta nueva amiga que habia conocido. Pague los cafes y nos fuimos juntitas, bien agarradas del brazo.

Me dijo que se llamaba Pahola. Como era temprano, un sábado por la tarde, seguimos de compras las dos juntas. Vimos un monton de tiendas, hablamos de ropa, de nuestras cosas, hombres... Finalmente se llevo un par de tops y, aconsejada por mi, bastante lenceria, que decia que siempre le daba vergüenza comprarla. Unos brassiers con relleno, braguitas de encaje... Yo me compre una faldita blanca y unas sandalias blancas preciosas de tiritas, con tacon de unos 10 cm. Pahola me dijo que no podria andar con algo asi nunca. Ya se acostumbraria, le conteste yo, recordando mis inicios. Ya repetiriamos sin duda la experiencia de ir de compras, pero se hizo tarde, y le dije que tenia que volver a cenar ya.

-Nos volveremos a ver, no?- me contesto ella.

-Claro que si, considerate desde ya mi mejor amiga.

-De acuerdo, pues dame tu telefono.

Se lo iba a dar, pero se me ocurrio que podriamos salir esta noche las dos juntas:

-Oye, te apeteceria salir de marcha por ahí las dos solas esta noche?

-Claro que si!!! Pero... no va a dar tiempo, no? Tengo que pasar por mi casa... arreglarme...

-No hay problema- le conteste- Vente a mi casa y nos arreglamos las dos alli. Seguro que mi madre estara encantada de conocerte y tengo ropa de sobra.

Agarradas de la mano fuimos hasta la parada del metro. Ella me comento que algunos hombres nos iban mirando.

-Pues ya veras esta noche...- le conteste yo. Y nos reimos a carcajadas las dos.

Llegamos a mi casa un rato despues. Nada mas abrir llame a mi madre para presentarle a mi nueva amiga.

-Mama esta es Pahola, una amiga. Vamos a salir de fiesta esta noche.

A ella le parecio bien, no se si desconfio un poco, aunque seguro que cuando la conociese se le pasaria. Nos comento que ella no pensaba ir a ninguna parte y que pensaba ver una pelicula. Se ofrecio a prepararnos una cena rapida, lo que nos parecio muy bien, teniamos hambre. Despues de cenar teniamos que arreglarnos para salir. Mi madre se ofrecio a ayudarnos, pero le dije que tomariamos un baño y la llamariamos para que nos diese los ultimos retoques. Yo me fui a preparar el baño y la cera para depilarnos, y mientras Pahola se ofrecio a quedarse ayudando a mi madre a retirar la mesa. Fui, prepare el baño, los utiles de maquillaje, la cera... Entre al comedor a decirselo, mi madre y Pahola platicaban como dos buenas amigas y se carcajeaban. Mi madre decia:

-Ay estas niñas! que cosas se les ocurren, Pahola tiene cada ocurrencia. Anda, vayan a cambiarse que se les va a hacer tarde.

Fuimos al cuarto de baño y le dije que se desnudase, que tenia que verla bien para ver lo que hacia falta. Se desnudo, y la verdad es que me quede mirando un poco embobada. Realmente me atraia, tenia un buen cuerpo, con algo de caderas, con cara tambien femenina, le faltaban sin duda unos retoques para terminar la transformacion pero no estaba mal. Ademas tenia algo de pecho, poquito pero algo, y un pene pequeñito. Era una mezcla exotica entre hombre y mujer y me atraia mucho, la verdad, aunque a mi hasta ahora siempre me habian gustado los hombres muy machos, pero era la primera vez que me encontraba con algo como lo que era yo y me sentia atraida. Le dije que lo primero era depilar bien las piernas, parecia que hubiesen sido depiladas con cuchilla o algo asi. Aunque pense que mejor primero nos dabamos una ducha, asi que le dije que pasase adentro. Ella paso y se quedo mirandome dentro.

Le dije que si pasaba algo, y ella me contesto que es que pensaba que ibamos a tomar la ducha juntas. En ese momento ya no pude contenerme, me desnude en un momento y pase con ella adentro. Abri el agua e inmediatamente empece a besarla ardientemente. Ella se mostro un poco timida al principio, pero luego correspondio. Nos acariciabamos todo el cuerpo, era maravilloso, a ella le gustaron particularmente mis pechos. No tarde en examinar su pequeño pene, se le notaba que, a pesar de las hormonas que debia tomar, estaba algo erecto, y me propuse hacerle una mamada. Me agache y me lo meti en la boca. Por supuesto que me habia metido cosas mucho mas grandes en la boca, pero este era chiquitin y jugueton, y tenia su encanto. Me costo, pero al final consegui que eyaculase un poquito, mientras Pahola gemia de placer. Al cabo nos quedamos las dos abrazaditas bajo el agua. Luego le pregunte:

-Eres virgen?

-Ummm. Bueno...

-Me refiero a anal.

-Si, eso si.

-Bueno, pues ya es hora de que vayas preparando tu "coñito".

Cogi una crema del armario, se la unte por detrás y posteriormente empece a introducirle mis dedos poco a poco. Ella iba gimiendo de placer hasta que ya considere que estaba suficiente abierta y le introduje una vela que teniamos para los apagones. En ese momento dio un enorme grito, seguido de varios mas mientras me mantuve metiendo y sacando la vela. Finalmente la saque y me puse de frente a ella; estaba colorada y su rostro henchido de placer. Me dijo que le habia encantado.

-Pues esto no es nada. Ya veras cuando te metan una buena pija. Mejor sigamos poniendonos guapas para esta noche.

Supongo que mi madre ya se imagino lo que pasaba, ya que no se acerco, a pesar de los enormes gritos que se habian oido. Nosotras seguimos con la ducha, nos enjabonamos la una a la otra y despues yo le lave el pelo con un champu especial para dar volumen. Despues me lo lave yo y salimos de la ducha. Sin vestirnos, las dos desnuditas, pasamos a la depilacion, yo me arregle un poco las piernas y ya esta, a ella le tuve que depilar bien las piernas, con cera, le iba dando besitos al quitarle las bandas.

Cuando llegue a su pene no me contuve y le quite un poquito de pelo con cuidado con la cuchilla, y le di muchos besitos. Una vez acabado esto pasamos a ocuparnos del peinado, me arregle mi melena negra un poco debajo de los hombros, con mucho volumen, mucho carácter, y le pregunte que tipo de peinado le gustaria que le hiciese(yo iba siendo una experta en manejar el pelo, me encantaba probar distintos peinados y me habia comprado un manual de peluquera). Bueno, ella parecia dudosa, asi que le propuse dejarlo en mis manos. Le rice un poquito su melena castaña, nada excesivo, pero le hacia mas femenino el rostro, realmente estaba mas guapa. De todas formas la invite a venir conmigo a la peluqueria que yo iba, le vendria bien que una profesional le cortara y peinara su pelo. Una vez hecho esto, la lleve cogida de la mano a mi dormitorio, las dos aun desnuditas, para escoger la ropa que nos pondriamos. Le pregunte que ropa le apetecia llevar para perder la virginidad. Ella se puso un poco nerviosa y me contesto:

-Estas segura de que encontraremos algun hombre que nos coja?

-Completamente, yendo conmigo puedes estar segura de que esta noche tendras tu culito lleno de leche. Dalo por hecho. Sera muy bonito.

Le di un beso en la mejilla y la invite a que mirase en mi guardarropa a ver que se ponia para salir. En el tiempo que llevaba de mujer me habia hecho con un buen guardarropa, ella miro largamente pero no parecia decidirse. Me quede mirandola y pense que para perder su virgo le vendria muy bien un look colegiala inocente que da mas morbito. De entre la ropa que tenia en mi guardarropa, le propuse una minifalda escocesa entablada y un top que dejaba al descubierto su ombligo. Se lo probo y quedo encantada. Le dije que se lo quitase, porque antes teniamos que poner la ropa interior. Seleccionamos una braguita negra con encaje que habiamos comprado esa, muy sexy y un brassier con mucho relleno que tenia de mis inicios. Ajustando un poco el brassier le quedaba perfecto y daba la imagen de un pecho precioso.

Como calzado, unos zapatos tipo botin negros, sin demasiado tacon, ya que no estaba acostumbrada. Del maquillaje nos ocupariamos despues. Yo seleccione un vestido color rosa palo de largo un poco por encima de la rodilla, bastante ceñido, con un amplio escote en pico(se veia un poquito de mis pechos) y unos tirantes muy finos. Tambien con media espalda al aire. Decidi ponerme las sandalias que me habia comprado esa misma tarde, eran blancas, de tiritas, anudadas al tobillo y con un tacon muy alto, muy sexis. Ropa interior rosa tambien, a juego, muy seductora.

Finalmente nos tocaba maquillarnos, llame a mi mami para que nos ayudase a quedar perfectas. Primero le aplicamos a Pahola una base de maquillaje para eliminar ciertas impurezas e imperfecciones(posteriormente le enseñaria a cuidar su piel), a la vez intentamos oscurecerle un poco la piel, ya que decidimos que le quedaria mejor un tono mas moreno.

Despues decidimos pintarle los labios de un tono fucsia oscuro muy agresivo. Colorete también muy intenso. En los ojos rimmel negro, máscara de pestañas y ya con eso estaba rompedora mi amiga Pahola. Le comente en broma que yo tendria que maquillarme a fondo para que no me quitase a todos los hombres, esto provoco risas por parte de las tres. Finalmente decidi pintarme los labios de rosa intenso muy brillante, a juego con mi vestido. Sombra de ojos clara, colorete rosa tambien. Antes de irnos fui a coger un bolso apropiado, me decidi por uno blanco pequeñito de asa corta, a juego con mis sandalias. Meti dinero, perfume, algo de maquillaje para mi y Pahola, un par de condones(me gustaba llevarlos por si acaso), y ya estaba en condiciones de enfrentarme a la noche.

Mi madre nos despidio a ambas con un beso en la mejilla. Nos rogo que tuviesemos cuidado y que mañana le contasemos detalladamente nuestras experiencias. Finalmente me dio un paquete de tabaco y nos fuimos Pahola y yo.

Salimos a la calle, la verdad es que se nos habia hecho un poco tarde, asi que decidimos ir en taxi. Andamos un rato, con el frio colandose entre las piernas, con Pahola agarrada a mi brazo, en busca de un taxi. Finalmente avistamos uno, casualmente me sonaba porque me habia llevado ya a varios lugares. Le paramos y le dijimos que nos llevase al centro de la ciudad. Nos subimos las dos detras, el taxista, a pesar de su edad, no dejaba de mirar hacia atras, incluso invito a Pahola a subir a su lado, pero preferimos ir las dos juntas detrás. Le pedimos que nos deje un par de cuadras antes, y caminamos sintiendo el fresco de la noche en nuestros cuerpos. Finalmente llegamos al bar, un sitio tranquilo para tomar unas copas para ir poniendonos a tono. Pedimos un par de cocteles. Nos sentamos tranquilamente a tomarnoslos mientras ibamos viendo al personal masculino que rondaba por ahi. Yo veia a Pahola un poco cortada, asi que, para que fuese tomando confianza le propuse:

-Fumemonos un cigarrillo no te parece? Por que no vas a pedir fuego?

Saque del bolso un paquete de tabaco y de el dos cigarros. Entonces Pahola se levanto y se acerco a dos hombres que no nos apartaban la vista desde hace rato, ellos sonreian y se decian algo al oido... Le dieron fuego enseguida e insistieron en acercarse tambien a encender el cigarro que yo tenia en la mano. Pahola no paraba de sorprenderme, ya que, despues de hacer las presentaciones, les dijo:

-Por que no os sentais y platicamos los cuatro juntos?

Ellos se sentaron encantados, Platicamos de cosas sin importancia y Pahola y yo no dejabamos de reir y coquetear... aunque se notaba que Pahola se sentia atraida por el que estaba sentado a su lado. Los minutos iban pasando, cada vez los acercamientos eran mas... El otro hombre se me acerco y empezo a contarme algo, no recuerdo que... Estuve escuchandolo y de pronto vi a Pahola abrazada del cuello de aquel tipo, besandolo apasionadamente. Me quede atonita, e inmediatamente me di la vuelta, cogi a mi macho y le meti la lengua hasta la garganta, mientras le masajeaba el paquete con una mano. De todas formas eso no duro mucho, cuando Pahola y aquel tipo acabaron, ellos dijeron que tenian que irse, se despidieron con dos besos en las mejillas y nos quedamos las dos terminando nuestros cocteles. Le comente:

-Bueno, a que ahora te sientes un poco mas mujer?

-Oh si!- me contesto ella ruborizandose.

-Bueno, pues ahora vamos a ir las dos juntitas al cuarto de baño a retocarnos el maquillaje, como hacen las mujeres despues de besar- le conteste yo.

La cogi de la mano y nos dirigimos al servicio de señoras. Entramos, sacamos cada una nuestra barra de labios y nos retocamos minuciosamente delante del espejo. Cuando acabamos, nos quedamos mirando, riendo maliciosamente: eramos las mas guapas. Le di una palmada cariñosa en el culo, cogimos nuestros bolsos y salimos las dos agarradas de la mano. Decidimos dirigirnos a otro local. Le pregunte que a donde queria ir:

-A mi me gustaria ya pillar a un hombre entero, vamos a ir a algun sitio asi.

Le sugeri ir a una disco cercana, donde yo sabia que habia muchos hombres, y muy putones. Ya habia estado un par de veces con mi madre, pero asi no podia hacer gran cosa, no era tan partidaria de coger con facilidad. Pahola y yo ibamos dispuestas a todo, asi que decidimos dirigirnos alli. Le dije:

-Entonces estas preparada para que te cojan ya? Mira que alli no se puede entrar con medias tintas?

-Si, lo estoy.

-Ok, entonces vamos alla.

La disco que menciono no estaba muy lejos de alli, decidimos ir andando las dos solitas. Yo iba agarrada a Pahola, ya que la noche estaba fria, e iba muy poco abrigada. Ademas mis tacones me empezaban a molestar. Por fin llegamos, entramos y decidimos recorrerla primero para ver donde estaba lo interesante.

En el piso de arriba habia un grupo de chicos bebiendo y bailando. Eran cuatro, jovencitos pero no se les veia mal. Delgados, altos, pantalones marcando paquete... Pasamos por su lado y nos dijeron un piropo un poco obsceno, la verdad. No sabiamos a cual iba dirigida, decidimos acercarnos las dos. Nos acercamos a ellos e inmediatamente nos invitaron a una copa. Mientras, dos de ellos nos sacaron a bailar, uno a cada una. Llegaron los dos que faltaban con varias copas, nos pasaron la nuestra, y se quedaron uno con cada pareja, ya teniamos cada una a dos de ellos. No me fije en lo que paso con Pahola, a mi me metieron mano por debajo del vestido varias veces, me tocaron mis nalgas y mi braguita a placer.

Se les ocurrio que yo les diese de beber a ellos, es decir, yo tomaba un trago y juntando los labios se lo tenia que pasar a ellos, fue muy divertido y excitante, mientras oia las risas de Pahola al lado mia. Mire de reojo y la vi bailando sensualmente con ellos, estaban haciendo como nosotros pero pasandose hielos de boca a boca. Estuvimos un rato asi, bebimos bastante y también nos divertimos bastante. Entonces Pahola se separo de ellos y vino a mi, necesitaba ir al baño. Me disculpe con los chicos y nos dirigimos cogidas de la mano al baño de señoras. Hicimos un poco de cola y entramos las dos juntas. Ella iba a orinar de pie, como los hombres, pero yo le dije que asi no, que a partir de ahora orinaria sentada como las mujeres. Mientras ella orinaba, yo me subi el vestido y me baje la braguita, empece a introducirme el dedo por mi vagina.

Cuando ella acabo le dije que no se subiese la braguita, y que siguiese masturbandome ella. Entonces ella se puso de pie y me di cuenta de que su pene estaba un poco excitado, decidi calmarlo un poco con una buena masturbacion; lo cogi con mi mano y empece a masturbarla mientras ella hacia lo propio conmigo. Al mismo tiempo empezamos a besarnos apasionadamente, mezclando furiosamente el carmin de ambas bocas. Seguimos asi hasta que finalmente nos vinimos ambas, intentamos no gritar pero estoy segura de que algun gemido se oyo.

Despues nos quedamos ambas exhaustas encima del WC, por suerte su corrida habia caido al suelo y no nos habia manchado. Le termine de limpiar su pene con la boca y pasamos a arreglarnos la ropa, para que no se notase nuestra aventura. Recolocamos su pene, ahora mas pequeñito, en su braguita, nos alisamos la ropa, y salimos afuera al espejo para retocarnos el maquillaje, que habia sufrido bastante. Nos quitamos la pintura de labios, que estaba bastante mezclada y nos pintamos ambas con nuestra pintura original, menos mal que eche ambas barras en el bolso, ella fucsia y yo rosa. Despues, salimos de los lavabos.

Nos dirigimos hacia donde estaban nuestros muchachos, pero los vimos con otras que se habian acercado, asi que desistimos de ellos. Pahola estaba ya realmente impaciente, me dijo:

-Cristi, yo quiero coger ya.

-Yo tambien, cariño, a los proximos que encontremos no los vamos a dejar escapar.

Bajamos al primer nivel de la disco, ibamos mirando hombres que estuviesen solos. Pare un momento para sacar un cigarro, me lo puse en la boca, pero no encontraba el mechero, creo que me lo deje arriba, la ultima vez que lo use con esos 4. El caso es que desde la barra aparecio alguien que me dijo:

-Te importa si te lo enciendo yo?

Mi madre. Que hombre. Me quede prendada de el desde que lo mire por primera vez. Era no muy alto, unos cm mas que yo, fuerte, muy moreno, encantadores ojos negros, pelo moreno rizado: decidi que tenia que tirarmelo cuanto antes. Me presente:

-Gra...cias. Yo...yo me llamo Cristina, y tu?

-Yo Ramon.

Me habia olvidado completamente de mi amiga. Rapidamente le dije: Y esta es Pahola.

-Encantado. Os importa que os presente a mi amigo que esta alli tomando algo?

Nos dirigimos hacia la barra... Alli habia otro mas alto y fornido que Ramon, mas velludo, mas masculino quizas, moreno tambien. Al verlo, Pahola me cogio del brazo y me dijo que ella queria acostarse con el como fuese. Ya teniamos a nuestros machos, solo habia que trabajarselo un poco.

Nos lo presentaron, se llamaba Roberto. Nos sentamos los cuatro, yo desde el principio me sente pegada a Ramon, muy pegadita a el, y Pahola hizo lo propio con Roberto. Estuvimos platicando, nosotras coqueteabamos y reiamos con sus bromas. Mas adelante pasamos mas bien cada uno a hablar con nuestras parejas. Yo le dije a Ramon:

-Parece que a Pahola le ha gustado mucho Roberto.

-Y a Roberto ella, seguro, yo le conozco.

-Tu crees que el querria cogerla a ella?

-Si, claro que si, es realmente muy guapa.

Yo me hice la enfurruñada, a ver como reaccionaba el: Vaya, te gusta ella entonces y yo no? Puedes irte con ella si quieres. Podeis iros los dos.- Y me puse de morros.

-No te enfades mi reina, a mi me gustas tu, quiero cogerte a ti, no lo dudes.

-De veras???-Le pregunte modosamente.

Por respuesta el me cogio la cara y empezo a darme un largo beso, nos abrazamos y nos tocamos por todas partes. Cuando llevabamos unos minutos me separe y le dije:

-Y si vamos a algun sitio para hacerlo ahora. Los cuatro.

-De acuerdo, podemos ir a mi departamento, no esta lejos.

Salimos los 4 en el auto de Roberto, yo iba sentada detrás con Pahola, ella me tenia agarrada la mano, se la veia nerviosa a la vez que ansiosa. Yo tambien estaba expectante por que me penetraran mi nueva panochita. Finalmente llegamos; bajamos cogidas cada una de la mano de nuestro macho y en cuanto traspasamos la puerta cada pareja empezo a besarse con furia. Fuimos los 4 aun besandonos a un dormitorio donde habia una cama de matrimonio. Ramon y yo empezamos a besarnos y a desnudarnos, mientras me di cuenta de que Roberto se bajaba los pantalones y le pedia a Pahola que se la chupase. Como no la veia muy convencida, decidi enseñarle, le cogi la verga a Ramon y empece a mamarsela. Ella empezo a hacer lo mismo con Roberto, poco convencida pero le fue gustando.

A mitad, solte la verga de Ramon y le dije a Pahola que soltase la otra; nos dimos un beso, intercambiando fluidos y pasamos a ocuparnos cada una de la verga que no habiamos tocado, yo con Roberto y ella con Ramon. Creo que les gusto ese cambio, siguieron jadeando de placer, y cuando sus espasmos me indicaban que iban a correrse pronto, decidi que cambiasemos de nuevo para que cada una se quedase con la leche de su amante. Se corrieron casi al mismo tiempo, Pahola intento no tragarse el semen al principio pero Roberto le sujeto la cabeza para que se lo tragase, creo que hizo bien. A mi siempre me ha gustado tragarmelo, en esta ocasión pude capturarlo casi todo y limpie su pene hasta que quedo bien limpio.

Nos tumbamos los cuatro jadeantes y contentos; yo en particular estaba muy satisfecha, hacia mucho que no me comia una buena polla, mi verdadera pasion, por otra parte, y lo echaba de menos. Despues seguimos besandonos entre parejas mientras terminabamos de desnudarnos todos, aunque Pahola tuvo buen cuidado de que no le quitasen su braguita o su brassier, seguia teniendo apariencia totalmente femenina. Finalmente empezamos a besarnos Pahola y yo apasionadamente, dejando a nuestros hombres.

Ellos se quedaron mirandose, empezaron a cuchichear y de pronto nos cogieron a ella a mi y nos pusieron a cuatro patas, pero en el centro de la cama dejandonos con las bocas enfrente, para que nos siguiesemos besando. Nosotras seguimos a lo nuestro cuando de pronto nos metieron a cada una una verga por el culo, fue como una descarga de placer. A Pahola a lo mejor le dolio un poco porque se le saltaron algo las lagrimas, pero yo creo que le gusto porque al momento empezo a temblar y a suspirar. Ellos siguieron bombeando, llegado un momento se cambiaron y yo pase a recibir de Roberto. Siguieron a lo suyo, yo continuaba besandome con Pahola, estaba inundada de placer por delante y por detrás.

Se cambiaban frecuentemente lo que solo aumentaba mi placer y cuando Ramon se corrio volcando su leche en mi culo di dos gritos enormes, soltando los labios de Pahola, ella tenia los ojos cerrados, como en extasis, Roberto también se habia venido. Nos quedamos los cuatro exhaustos, Pahola y yo abrazadas. Despues de estar tumbados los 4 un rato, nos llevaron a las dos a mi casa, nos despedimos con un beso en la boca tornillero de ellos. Subimos a mi casa, muy cansadas, nos desmaquillamos rápidamente y nos dormimos las dos juntitas en mi cama. Por la mañana mi mami nos preparo el desayuno y le contamos como nos habia ido, se alegro mucho de que disfrutasemos del sexo y de que yo tuviese una nueva amiga como yo.

Continuará. Muchas gracias a todos los que valoran mis relatos sobre mi historia positivamente y a todos los que me escriben a mi correo dando animos para continuar relatandola, prometo contestarles a todos. Un saludo.