De cómo me converti en una mujer de verdad (4)

Me someto a una operación...

De cómo me converti en una mujer de verdad. Con la ayuda de mi madre(IV)

Cuando me levante al día siguiente, ya tarde, estaba hecha polvo. Sobre todo me dolían los pies de andar tanto tiempo con los tacones, y también me dolía la cara de los golpes y un poco el culo, de las veces que me penetraron. Sali, y en la cocina me encontre a mi madre, que llegaba de la calle:

-No has ido a trabajar?

-No, vistete porque tenemos que salir. Luego te explico a que.

Me puse mi ropa interior, mi relleno, y me vesti con unos vaqueros mios, y un sweater de los mios, todo de cuando era hombre. Me puse unas deportivas(no era cosa de andar con tacones, como tenia los pies), y me maquille solo para disimularme las heridas. Sali, y mi madre me pregunto como estaba:

-Bien, es solo que me duele un poco la cara, pero se curara.

-Bueno, pues vamonos, cariño.

Me puse unas gafas de sol(no quería que me viesen así), me encendi un cigarro, y me subí en el carro con mi madre. Mientras circulabamos, le pregunte que donde ibamos, ella me contesto con otra pregunta:

-Estas totalmente segura de que quieres ser una mujer del todo?

-Si, totalmente. Pero no quiero ver a ningun hombre nunca mas.

-Bueno, luego hablaremos de eso. Entonces, si estas totalmente segura, sigamos adelante.

Por el centro de la ciudad aparcamos el carro y subimos por un edificio de oficinas. Mientras subiamos, me dijo que, si todo salia bien, me someteria ya mismo a un cambio de sexo. Yo me puse muy contenta al oir eso. Finalmente, entramos en la consulta de un medico. Parece que mi madre ya lo habia hablado todo con el, porque el medico, despues de que mi madre me presentara, le dijo que queria hablar a solas. Cuando nos quedamos solos, empezo a hacerme cantidad de preguntas, sobre mis motivaciones, sobre que era lo que mas me atraia de ser mujer, y un monton de preguntas cuya motivacion yo no entendia, supongo que eran tests para adivinar mi verdadera personalidad. Cuando todo acabo, se me quedo mirando, y le dijo a mi madre que entrase.

-Si, yo creo que es apropiado que se someta a la operación.

-Perfecto, cuando empezamos – le dije yo muy excitada.

-Antes tengo que hacerte unos análisis de sangre y de hormonas, y tendras que tomar unas pastillas.

Me saco sangre, y nos dijo que nos pasasemos por la tarde, que ya tendria los resultados.

Cuando bajabamos en el ascensor abrace a mi madre y le di las gracias mil veces por aquello. Ya cuando ibamos en el carro, se me ocurrio una pregunta:

-Y como vamos a pagar la operación?

-Ya lo tengo arreglado. Esta mañana he estado apalabrando la venta del carro y con lo que nos den la pagaremos.

Me apene mucho, porque sabia que a mi madre le importaba mucho su carro, era deportivo, muy elegante y lo cuidaba mucho. Se lo habia comprado hacia un año, y le costo mucho dinero, asi que supuse que tenia que haber sido dificil para ella. Ella debio notarlo porque me dijo que no me preocupase, porque lo mio era mucho mas importante, ademas, siempre habia querido tener una hija. Yo me alegre mucho, y le dije lo primero que se me ocurrio, que se lo pagaria aunque tuviese que prostituirme. Ella se rio, y dijo que no hacia falta llegar a tanto, que ya nos apañariamos.

Comimos, vimos la telenovela y volvimos a la clinica. El doctor me dijo que los resultados eran normales. Me dio unas pastillas, unas eran inhibidores de las hormonas masculinas, y las otras eran hormonas femeninas. Me dijo que las estuviese tomando diez dias y que despues procederiamos a la operación. Volvimos a casa, yo muy contenta y excitada, y llegue a casa y relate todo esto en mi diario. Los dias siguientes los pase casi todos en casa muy nerviosa. Me tomaba las pastillas, segui haciendo aerobic, aunque tambien es verdad que fumaba mucho para quitarme los nervios. Entretanto, me seguia ocupando de la casa, y aprendiendo a cocinar, planchar, y todas esas cosas que, aunque parezca un poco machista, pienso que debemos hacer las mujeres. Finalmente, llego el gran dia. Cogimos un taxi(mi madre ya habia entregado el carro), y fuimos a la clinica. Alli estaba el doctor, con varias enfermeras, el anestesista... Primero, el doctor me explico lo que hariamos. En la primera operación, me quitarian mis genitales, y me construirian un nuevo orificio para orinar. Tambien me explico que aprovecharian el tejido de mi glande para construirme una vagina y poder sentir placer al tener relaciones sexuales. Eso me gusto mucho. Estaria internada unos dias, y luego procederia a operarme los pechos, ya que, aunque me saldria algo de pecho con las hormonas, no seria demasiado, asi que me pondria unas pequeñas protesis. Me parecio perfecto y les dije que se pusieran manos a la obra.

Sobre la operación en si no puedo decir nada, ya que estaba anestesiada totalmente, solo que me senti liberada cuando por fin pude mirarme y no vi mi pene alli. Ahora tenia mi nueva vagina vendada, asi que no podia vermela todavia, aunque tenia libre un orificio para poder orinar, y me encanto poder hacerlo por fin como una mujer. Estuve unos dias internada, mi madre se pasaba todo el tiempo que podia alli, y pasada una semana me dijeron mi madre y el doctor que iban ya a operarme los pechos(ya notaba yo de todas formas que me habian crecido algo, con el tratamiento hormonal), y que ademas habian decidido tambien operarme la cara, me iban a intervenir los pomulos y la barbilla, para darle a mi cara unos rasgos mas femeninos(aunque nunca tuve unos rasgos demasiado andróginos, sino mas bien delicados). Me parecio de perlas, asi que entre de nuevo al quirofano, esperaba que por ultima vez.

A los cinco dias me dieron el alta, vino mi madre a recogerme. Tenia todavia vendada la entrepierna, los pechos y tenía puntos en la cara y en el pecho, que tendria que volver a los cinco dias para que me quitasen, pero yo estaba muy contenta. Tambien tenia que llevar un sujetador especial un par de semanas, y no podia tener relaciones sexuales en un mes, pero no pasaba nada. Volvimos a casa en el colectivo, y cuando llegamos le volvi a dar las gracias, y le dije que la queria mucho.

Los dias siguientes los recuerdo como de los mas bonitos de mi vida, por fin me sentia una mujer del todo. Fui a que me quitasen los puntos y las vendas a los pocos dias, por fin pude ver bien como habia quedado mi cara, y me encanto el resultado, me habian dejado la cara mas redondeada y me veia muy guapa. Las tetas tenian un tamaño aceptable, y todavia debian crecerme algo. En cuanto a la vagina, era lo mejor, los primeros dias me encantaba la sensacion de orinar por fin como una mujer. Lo único que me faltaba era tener la regla, incluso le pedi a mi madre una caja de tampones que me puse de vez en cuando al principio, pero realmente aquello era una tonteria y deje de hacerlo. El tiempo que estuve en el hospital, perdi tambien bastante peso, me habia quedado en 52, menos de lo que yo esperaba, tenia que ganar algun kilo, sobre todo en cintura, y esperaba hacerlo con las hormonas que tomaba. Por ahora, me entraba perfectamente la ropa de mi madre, aunque tendria que comprarme mi propia ropa pronto, ya que tenia mi propia talla definitiva.

Lo mas bonito que recuerdo fue que a partir de ahí fue cuando empece a intimar de verdad con mi madre, ya nos tratabamos como madre e hija y nos contabamos todo. Por las mañanas, yo me ocupaba de la casa mientras ella estaba en el trabajo, limpiaba, fregaba, hacia la compra y preparaba de comer. Despues de comer las dos juntas, nos acicalabamos, me ponia yo alguna ropa que me dejaba ella, los zapatos que me compre hacia ya un tiempo, y nos ibamos a tomar un café juntas y a contarnos nuestras cosas, muy elegantes. Con un café y un paquete de tabaco, pasabamos la tarde platicando de nuestras cosas y conociendonos mejor. Además, yo no tenía amigas, mi madre era además mi mejor amiga. Me entere asi de muchas cosas de las que no sabia nada antes, me conto que le gustaba a ella de los hombres, me hablo tambien de mi padre, del que apenas sabia yo nada... me conto los novios que habia tenido(un monton, y yo no me habia enterado de nada.

Muchas noches que me decia que tenia cenas de negocios y yo me quedaba solo, se iba con algun hombre, y muchas veces acabaron en mi casa follando, y ni me entere), me di cuenta de que antes no conocia apenas a mi madre, y que para ella era mucho mas facil sincerarse con su hija que con su hijo. Tambien yo le conte exactamente todas las experiencias que habia tenido recientemente con hombres, lo que dio origen a una conversacion que fue muy importante para mi sobre los hombres, ella me pregunto si seguia sin querer saber nada de los hombres, yo le dije que ya no estaba segura, pero que aquellos me habian tratado muy mal.

-Eso es porque pareciste demasiado obsesionada con acostarte con ellos y hacer de todo recien conocidos – me contesto ella.

-Pero es normal, a mi me gustaba hacerles de todo, y a todas las mujeres les gusta, no?

-Si, pero tu lo mostraste demasiado abiertamente. Las mujeres podemos ser putas, pero no podemos mostrarlo abiertamente. A todas nos gusta el sexo tanto o mas que a los hombres, pero si lo vas pregonando por ahí a todos, vas a parecer una mujer facil, y todos los hombres te van a perder el respeto y te van a tratar mal.

-Ah es verdad.

-Yo te recomiendo que te hagas la dura con todos los hombres, por mucho que te gusten, haz notar que no te atraen demasiado, y si le gustas, ya hara lo posible por conquistarte, y te tratara como una reina. Yo me he acostado con muchos hombres, pero nunca la primera noche, los he hecho esperar siempre, tenlo en cuenta para el futuro.

-Estoy deseando salir a ver hombres contigo.

-A ver si te recuperas ya y salimos las dos juntas, ya veras la que vamos a liar.

Estaba deseandolo. Me conto que ahora estaba de novia con un hombre, que llevaba como un mes, pero que tampoco estaba muy comprometida, se veian de vez en cuando, habian follado un par de veces, pero nada mas. Yo estaba deseando recuperarme totalmente de la operación para poder salir y conocer hombres con ella y disfrutar de verdad mi vida como mujer. Continuara.