David y Diego (Segunda Temporada)

Conozcan al nuevo David Mantilla, intercambiando posiciones sexuales en su cargo inusual de activo

(2 años después…)

-♫…En algún lugar de un gran país…

Olvidaron construir…

Un hogar donde no queme el sol…

Y al nacer no haya que morir…

Expresaba mis impulsos de emoción con una canción que por fin me dejaron cantar… mis amigos estaban dispuestos a desertar ante cantar la canción de la banda española Duncan Dhu. Amaba esa cantinela…manifestarme en el escenario, vibrar mis sentidos, erizándome desde la coronilla hasta la punta del dedo gordo del pie. Lo más importante de todo ante la presentación que realizaba en el bar ‘Zeppelin’ junto con los chicos…era que ahí estaba… mirándome con cara tierna viendo como manejaba con emoción mi guitarra eléctrica Gretsch Electromatic Pro Jet de color negra con blanco.

-y la tierra aquí es de otro color…

El polvo no te deja ver

Los hombres ya no, saben si lo son

Pero lo quieren creer…

Extasiaba con la música en panorama melodioso junto con mis rockeros, que me ayudaban con lo que adornaba el tema. Se paró de su asiento…feliz tarareaba sin yo poderle escuchar su voz pero notaba que lo apreciaba, lo cual hizo que se me saliera una sonrisa disfrutando de los estribillos del tema y los afines virtuosos de la canción.

¡Perdón! No me acordaba que por estar tan eufórico, no me presenté…quizás no se acuerden de mí, ha pasado bastante tiempo…

Me llamo David, David Mantilla, 18 años pero aparento tener los 15. Últimamente me está surgiendo vello en la cara. Creo que tendré barba porque esta como débil al crecer en mi rostro jeje ya que. El cabello negro y me lo paro para atrás, así, cabello corto pero rebelde. Mis ojos son verdes como la biósfera, tengo la nariz perfilada y neutra. Y mis labios son pequeños pero cuando sonrio saco a relucir mi dentadura.

De lo físico pues…me gusta hacer ejercicio en mi departamento, tres veces por semana después de llegar de la universidad. No tengo el mejor cuerpo, pero mi pecho es bien logrado, porque siento que tengo pechos medianos. Mi abdomen es duro pero no logro sacar abdominales…creo que no lo herede de nadie de mi familia, el tener buen cuerpo se me complica, aunque mis brazos aunque sean delgados, son fibrados y fuertes.

Soy rebelde…me gusta engalanarme como yo quiero y eso lo reflejo con mi personalidad. Más que todo, amo las camisas que son de cuadros y rayas. Con el tiempo me empeñé en hacerme dos tatuajes en mi cuerpo. Mi nombre en letras chinas en mi espalda. Y una estrella náutica de color rojo con negro en el costado derecho de mi cuerpo. Aparte de que los tatuajes me fascinan, los diseñe por mi cuenta….estudio diseño publicitario en la universidad donde radico, la ciudad de Bogotá.

Salí de mi ciudad natal buscando un lugar para salir del mundo en el que habitaba…de puro dolor y miseria por ser lo que soy, gay. Pero no lo hice solo, mi única amiga que no me dio la espalda por lo que era. Margarita, para abreviarlo le digo Margie. Amaba su apodo, una chica dulce y descomplicada. De cabello rubio y largo, pero hizo un cambio. Se lo cortó hasta sus hombros quedando con sus rizos dorados mejores de lo normal. Pocas veces usaba sus gafas rosadas de marco porque no había tanta necesidad, pero la extrañaba como es siempre.

Cuando nos radicamos oficialmente en nuestra nueva casa. Lo que hicimos primero fue buscar un trabajo…se nos complicó la vida a los dos por no adaptarnos a sobrellevar una vida normal, siendo los dos tan jóvenes. Más que todo porque no sé porque carajos no podía tener yo un trabajo, solo por ser gay…la sociedad de hoy en día se vuele cada vez más pendeja. Tuvimos suerte con algo maravilloso. En el bar donde cantaba en este mismo instante, necesitaban una cantante y un guitarrista. No perdimos oportunidad en ello e intentamos sorprender al baterista, a la bajista y al dueño del local.

Entramos…Margie con su imponente voz arrasó fácilmente, pero me dio dificultad hacerlo…solo me sabia una canción en guitarra. Una que canté en los 15 casi 16 de Margie. Para sorprender a…em. El punto es que entramos…y desde entonces no nos hemos separado, es nuestro medio de trabajo cantar en ‘Zeppelin’. Nos pagaban por cada noche de los miércoles hasta los sábados y en alguna ocasión los domingos. Junto a Margie, están Nadia la estrambótica y León el baterista frenético, y por supuesto, nuestro Manager

-¡GRACIAS! Es un honor tocarles esta canción. Me siento feliz de que hayan tenido tiempo de escucharme. Gracias y nos alegra a nosotros…los Coveramas, estar cantándoles excelente música a todos ustedes. Los dejó y disfruten de los servicios del bar.

Dejé el micrófono en su pedestal de palo. Chocaba manos con todos y a mi linda princesa le daba un beso en la mejilla. Bajábamos por detrás del stage tras bastidores mientras tomábamos una cerveza para relajarnos.

-Naa, el maniático este estaba chirriado (loco) no pensé que iba a tocar bien el tema que se puso a cantar Diosa – León se despeinaba más el cabello dirigiendo la mirada a mi amiga.

-déjalo…yo sabía que podía, él es bueno con la guitarra. Ha trabajado mucho, le he instruido – miraba de reojo mis ojos riendo pícaramente.

-no lo dudo chica, Davidson es bueno. Lo que requiere es practica – insurrecta se pronunciaba Nadia apretando con fuerza su lata de cerveza. Tirándola a un basurero. A veces me dedicaba ese apodo

-ya, lo importante fue que lo hice ¡no me jodan! – me sonrojaba

-mira cómo se puso jejeje – León se burlaba de mí, aparte de que me intimidaba un poco, era buen amigo.

León es revolucionario, tiene el pelo largo y se lo remonta a los lados haciéndose una cresta al estilo de rockero y su pelo teñido de azul oscuro que se le notaba cuando hay sol. Con la cara de viejo, es 2 años mayor que yo. Salvaje e indeciso, con su barba afeitada, rasgos masculinos y sus ojos miel debatidos con unas ojeras…su nombre, Leonardo, pero de cariño le decimos León.

Nadia es más extrovertida que Margie en su forma de vestir, si ella combina colores vivos en su ropa, Nadia es multiplicada al 100. Es una rockera empedernida. Su pelo es rojo azabache con el pelo corto y algo esponjado. Es blanca parecida al color de Margie. Con su corte parecido al de Juana de arco, se considera vivaz y mortífera.

Saben lo que me gusta y no tienen problema con eso, aunque al dueño del bar, no le tramo mucho la idea de que tuviera gustos por los machos, pero ganancias son ganancias. Le ayudaba a conseguir dinero.

-genial David…ahí iras aprendiendo también con el teclado porque queremos sonar temitas electrónicos, así que esas clases que estas recibiendo, sirvan de algo – León tomaba de su cerveza destrabado de sus inhibiciones chocaba su botella junto con la mía.

-gracias Leo, eres un master, sabes que lo haré, tranquilo…

-David…em – Margie me miraba señalándome con su cara dirigiéndola hacia la salida trasera del bar. Como si se me desconociera algo – se te está olvidando algo

-¿de qué o qué? – la miraba intrigado

-tu sabes…- con fuerza estrujaba sus labios y caí en cuenta que me faltaba algo impredecible para hacer…

-¡¡ay carajo!! ¡¡Ahora vuelvo!!

Renuncie la cerveza en uno de los amplificadores malos con tiquetes viejos puestos en un sombrero de paja. Salí rápido por la puerta trasera que decía con letras de neón arriba la palabra ‘Exit’ me dirigí rápido por ese pasillo de ladrillos hasta llegar a abrir la única puerta que me deparaba de lo que tenía que hacer… abrí ese portón con ganas sin dejar que mi saco negro de rayas rojas con blanco y negro se fuera a ensuciar y que mis tenis verdes con suela amarilla, no se fueran a rayar.

Ahí lo vi. Fastuoso como siempre…perfecto a la vista, su chaqueta café se notaba con su camiseta en V a rayas negras con gris y sus pantalones cafés. Tenis de botín negros, se asemejaban con las luces de los carros mientras se limpiaba la cara con un pañuelo blanco divisándome la mirada…su sonrisa se plasmó cuando cruzamos los ojos. Me rascaba constantemente un codo dando pasos normales a lo cual el sin sacar las manos de su chaqueta no paraba de mirarme cariñosamente…

-¿Cómo estas rebelde? – su voz es profunda, pero cuando está a mi lado se comporta como una gelatina

-em…bien, algo adolorido con los dedos de tanto acorde que realice. Valió la pena.

-me dejaste sorprendido…la verdad estas en buen camino, hace rato que te conozco y no te había visto tocar… la prince tenía razón.

-si algo, cuando quieras te canto otra.

-no hay necesidad…-puso sus brazos en mis hombros y con toda las luces citadinas al frente del bar. Me preocupé, no estaba acostumbrado a estos afectos en público. Destinaba era a apartarlo pero su poder magnético de amor, generaba paz y tranquilidad, ingenuamente le pude decir…

-em, aquí no…hay mucha gente – lo apartaba porque trataba de juntar conmigo, nariz con nariz.

-no me importa…

Se abalanzó ante mí, veía como su rostro se derretía cuando a la fuerza me daba ese beso contemporáneo a mis estrujones, pero…diablos, me encantaba lo que me hacía, su lengua era más hiperactiva, sacudía toda mi boca y me gustaba demasiado todo su erotismo. Deserté al dejarme llevar…abrí bastante mi boca para que dejara explorar más de lo normal estando yo saboreando también sus labios con un poco de sabor a tequila con limón. Era jugoso ese beso.

-no me importa…como te dije antes…te quiero David – sus ojos se tornaban brillantes por las direccionales de los carros cuando giraban hacia las esquinas

-yo te quiero mas Richie, tu eres todo para mí.

Sí, me conseguí un novio por aquí…Ricardo, para abreviarlo, Richie, es un año mayor que yo. Su carita es perfecta. Tiene fisonomía de hombre, con el pelo negro y corto porque odia esos peinados. Me recuerda a un actor porno gay que antes era calvo y se dejó crecer el cabello, así igualito lo tiene. Sus ojos oscuros como la noche. La nariz gruesa por los orificios nasales. Y su boca protuberante sin llegar a ser grande, normalita.

Es gimnasta, ha estado es las regionales. Y le ha ido muy bien ganando medallas y trofeos. Y como los atletas tienen el cuerpo perfecto, si, él lo tiene así, pequeñito, pero lindo. Con sus abdominales marcados por los costados sin dejar relucir esa barra de chocolate. Pectorales duros y firmes como una roca pero pequeños al tacto y los brazos marcados. Puro galán de página de relatos. Pero que podía hacer…si era cierto. No quería caer en el estereotipo de machito pero si, así es Richie.

Lo conocí porque…pues, es medio primo de Margie, su papá es de otra familia y se casó con la tía de Margie y en fin…saben cómo es el proceso. Nos ayudó con las cosas del apartamento y por obra del destino, cuadramos así de una. Fue genial el asombro de cómo fue que nos gustamos y mucho más cuando Margie, me dijo que Richie era gay, desde hace un año que salió del closet.

No nos hemos separado desde ese día hasta la fecha de hoy y los dos años que he vivido en este frio lugar que es Bogotá. Aun así me acostumbre, me parece genial vivir aquí.

-eres apapapapachable loquillo rebelde. – contento me levantaba el mentón

-no me hagas sonrojar… - se me colorearon las mejillas al sentir semejante placer en mi interior sonriendo un poco

Richie al dejar de conectar miradas conmigo puso cara de que no quiere la cosa, giré al ver que un tipo nos estaba mirando feo cargando unas bolsas negras en sus hombros. Era inquietante como nos notaba con desprecio.

-¿Tonces? ¿Se le perdió algo o qué? – alebresto más de lo usual produciendo que el tipo ese se fuera rápido al terminar de percibirnos. Cuando no le gusta algo, sale a defenderse a capa y espada, más que todo por mí. A esas horas de la noche todo ya estaba despejado, separadamente de la multitud de automóviles que procedían en las carreteras.

-mira...otra vez lo hiciste de nuevo…

-jejeje…qué te parece Rebelde si… ¿vamos a un lugar tranquilo? – inquiría al soltarme de su abrazo consentido.

-dale…no tengo problema pero…que lugar…

- el motel… - susurraba ante mi oído izquierdo, lo que me causó un escalofrió

-sabes… que no me opongo a vos…pero en el bar-

-manda un mensaje a la Prince diciéndole que te fuiste conmigo ¿o es que van a tocar más? – preguntaba cruzando los brazos reluciendo los pulgares

-no, el repertorio de hoy lo tocamos ya…

-entonces… –volteó frente a la acera pidiendo un taxi – vámonos pues…

-ok

Se subió primero al servicio amarillo destinatario, terminando yo de cerrar la puerta. Dijo a dónde íbamos a ir…el conductor nos miró extraño pero obedeció al tema. Se puso en marcha y nos propusimos el irnos…

-bien…ya me dejaste con la boca cerrada, no pensé que pudieras manejar bien la guitarra David

-lo normal viejo, trabajo es trabajo

-¿cuándo te piensas ir? –preguntaba con desánimos

-em…faltan como dos días, Salí de la universidad este viernes, así que lo normal, ya llevo bastante tiempo de que no visito a mis padres, ni a mi hermano…

Puso su mano en la boca tratando de razonar por lo que le explique, no me quedé con la duda de preguntarle también. Sí, me iré a casa de mis padres porque se poco de ellos, he hablado pocas veces con mi padre. Lo único que me ayudan es en el pago universitario de matrícula para seguir estudiando.

-¿Por qué?

-nada…que te extrañaré…

Le di un puño al estilo compinche,  lo cual se viró enojado pero jocoso

-pendejo jejeje

-sabes que puedes coger un transporte e ir a visitarme…son 3 meses, relájate, además haremos toques por allá junto con la banda.

-¿te vas con la prince? – miraba la hora primero y después conmigo

-sí, Margie también va de visita…pero no sé qué fecha toda la banda vaya a tocar también, necesito ver que tanto ha cambiado desde que me fui.

-entiendo…

Llegamos al motel a altas horas de la noche…eran como las 11:30 PM. Pagó al conductor y este le dio su menuda, nos cubrimos por el frío hasta llegar a la recepción…el lugar lo conocía, fue como la segunda vez que tuve sexo con Richie, para estar más sosegados sin que nadie nos molestara. Tenía poco dinero como para pagar yo, así que él era el que costeaba todo hoy, nos pusimos de acuerdo porque me dijo que quería pasarla conmigo después de que terminara de trabajar.

-mira –tiraba las llaves de la habitación, a lo cual las atrapé como cátcher de beisbol – es la 115, ve entrando que voy y compro algo

-dale – asentí con la cabeza, corrompiéndome con una sonrisa toqueteándome el hombro, fui derecho a la habitación destinada y cuando entré, lo básico de un motel como siempre.

La cama, la lámpara, un baño, la ventana, el televisor y una cómoda con cosas necesarias para…ya saben. No llevaba preservativo esta vez…espero que se consiga uno. No me molesta ser el pasivo, me satisface que me consientan por ahí, pero fue una vez que me pidió que se lo hiciera a él, para colmo de males, sin protección. No me siento cómodo a veces el no hacerlo sin condón… me trae malas experiencias…

Pero en fin…esta noche mojo y a lo grande, así que no me iba mortificar por nada…soy mayor ya, aparte del trabajo de Richie que es Bartender en una discoteca de lesbianas, se ganaba los millares por ser buen catador. Bueno, no tan exagerado, pero si, aunque yo también ganaba por tocar cada fecha prevista. Entró con unas botellas de malta en las manos abriendo la puerta con fuerza generada en su espalda, sacudiéndose un poco sentándose a mi lado. Me pasó una de las que tenía en las manos.

-¿qué es eso? – preguntaba fingidamente

-bébela...te hará estar más relajado – tomé un poco, no era alcohólica pero si tiene un sabor suave y laxante como la champaña

-creía…que el masturbarse antes de tener sexo era lo que te hacia estar más relajado

-mmm, también, pero me lo recomendó alguien para poder disfrutar más…

-eso no es verdad. no te creo jejeje…em, trajiste el-

-¿esto? – saco un condón de envoltura roja enfrente de mis dos ojos mirándolo exorbitado – compré el mejor de todos…

Al verlo, me tomé toda la malta de una. Suspire y bote un corto eructo limpiando lo que me saciaba en los labios. Trataba de componerme…se quitó la chaqueta dejándola a un lado. Abalanzó todo su cuerpo ante mí, levantándome los brazos para dejarlos encima de la cama. Pícaramente, bajo el cierre de mi saco de rayas dejando ver la camiseta blanca que llevaba adentro palpando todo mi torso

-nunca dejarás de gustarme David…nunca

-cállate…ven, bésame de una vez…

Acerqué mi cabeza a darle un beso delicioso y apetitoso dejando que se monte encima de mí siendo yo el que no se dejaba escapar. Encrucijada perfecta. Sus rodillas apoyadas en la cama, me quitaba el saco debatiéndolo por fuera de mis manos…me ayudaba a quitármelo. Hice apoyo con las manos atrás encorvando mis hombros sin el dejar de besarme apasionadamente…me he acostumbrado a que los besos morbosos me valen madre ya. Tengo que disfrutar, no me moriré si tengo la boca llena de saliva ajena.

Despojó su camiseta de rayas para quedar al descubierto de ese suculento cuerpo de gimnasta perfeccionado…gozaba que fuera pequeño, me deleite con felicidad al tocar esos pectorales abultados. Todo eso que tenía ahí, era legalmente mío. También hice lo mismo. Me quité la camiseta blanca dejando verlo poco que llevaba pero diferente…mi cuerpo era distinto ya. Cosa que a Richie le gustaba.

-mmm me encantan tus tatuajes…sobre todo el del costado…me pones a mil…

-deja la parlotearía para otro momento …quítame los pantalones – susurraba en su oído

Sin dejar de verme excitado, noto como mi bulto se colapsaría dentro de poco resguardando esas dos capas de ropa que mortificaban mi polla. De los ruedos del pantalón, me quitó los tenis verdes con amarillo. Desprendió de mis pies las medias blancas que resguardaban del frio. Se reguardaba adentro de mi bóxer negro con elástico rojo una polla morcilluda. se acomodó más para estar más relajado, se quitó todo lo que le molestaba, pantalón, zapatos, medias, sus boxers amarillos con negro se los dejó estando los dos a la mitad de la cama… acercándose lentamente a mi cuello para saborear de mi sudor amargo y salado.

-no...Pares…lo haces tan bien…

-Cómo... ¿la primera vez?

- mejor que esa…te conozco de pies a cabeza

-¿y me conoces así?

Se paró en la cama bajando sus interiores dejando notar una polla de 19 centímetros deliciosa al tacto. La agarré de su tronco y lo hice acercarse a mí…quería probar esa polla como la última vez que hicimos 69 en su cama…me la metí toda degustando de todo su a poderío inmenso y dulce palmando una de sus nalgas haciéndola sonar a lo puro masoquista.

-afff, dale rebelde…no pares que lo haces bien…

-¿te gusta? – me sacaba su miembro de su boca al mirarlo desde allá arriba

-sí, dale, dale

Seguí con mi pasión desenfrenada…pero quería que sufriera placenteramente…le metí un dedo adentro para que empezara a gemir decrépitamente dejado con la otra mano abrir un poco su nalga para que pudiera cavar más profundo mi dedito.

-eres un pervertido…no… pares…

Me ponía más cachondo al ver como su respiración se agitaba. Quería tomar las riendas, cambiar de rango, dejar de ser versátil pasivo, voltee y le di un beso negro en esas nalgas grandes mientras este se empinaba con fuerza al yo mamar su culito ricamente.

Richie se agacho para estar de perrito, tocándome los dedos de los pies para poder disfrutar de la corrida que le daba. Me fascinaba como lo hacía, como se manifestaba sexualmente… metía, uno, dos dedos para que degustara de emoción protuberante.

-Richie…

No respondía…estaba absorto con el servicio que le había proporcionado

-quiero… tenerte adentro…

-dale marica, dale quiero… yo quiero mil veces más que tú.

Me pare de cuclillas retirándome el bóxer que estaba lleno de precum, por lo rico que se puso mi novio. Fue tan placentero que bote a término medio. Cogí el condón rojo de la mesa y lo difundí en mi polla, estaba preparado para poder introducir mi pene ahí dentro. Sabía que sería delicioso porque penetrarlo y que me deje, es algo que no se da todos los días, o incluso cuando tenemos sexo.

Bajé despacio para que pudiera amoldarse a mi pene, delicadamente bajaba despacio con dolor frenético porque el prepucio se me estiraba bastante mientras nos amoldábamos juntos para poder sentir el placer excitante y sobre todo…amor

Subí rápido para dejar todo el ajetreo de la penetración, generó un impulso desprevenido sin el abrir los ojos porque el placer lo carcomía en todo su organismo…me cataba su inexplicable sensación de gemir al estilo hentai…se sentía como un cachorrito indefenso siendo violado por mi pene…su cabello resplandecía por la luz de la lámpara destellando sus ojitos a media luz tratando de mirarme a un lado.

Afiancé fuertemente sus caderas para poder tenerlo entre mi pecho y su espalda… me sacudían frenéticamente con el poder del cabalgueteo penetrante hacia el culito de Richie, sudábamos como en elevador sin aire acondicionado lleno de gente…pero solo nos manifestábamos los dos. En nuestro acto sexual y defensivo ante lo que nos destacábamos siempre…en darnos placer. Sigilosamente mi mano se acercó a su excitado pene empezando a palmarlo con fuerza dejando apreciar unas gotas babeantes que recorrían todo su falo…

- vas a… ¿pajearme? – departía despacio y sin aire…no vacilaba por el placer que lo irradiaba

-quiero que te corras y que se te quede grabado en tu memoria para toda la vida…

Avancé frenéticamente a abrazar ese pene con mis dedos y darle la mejor corrida de su vida…agite salvajemente acorde con el movimiento de meter y sacar a su culito respingón. Comenzaba a gritar y a no sentir más su poder de aguantar ese orgasmo mancebo en su excitante interior. La palma de mi mano se profundizó más en el tacto y sentí como su lechita caliente se corría fuertemente como chorrito de fuente botando varios hilos de lefa dejando los últimos caer en mi mano apretada a su miembro.

Quería hacerlo yo también…así que seguía con el cabalgueteo y me difundí con el hasta llegar al éxtasis de botar completamente todo en mi interior…y eso hice, sentía como todo se me iba por fuera y la sensación del condón, me embadurnó de mi propio semen deleitando ese saborcito de olor a sexo, de haberlo hecho y creado y forjado en todo el interior de Richie. Se salió de mi  polla limpiándose todo el semen que tenía...a lo cual yo también hice lo mismo limpiándome retirando el condón que llevaba. Cogimos la cobija y nos resguardamos del frio.

Se acostó en mi pecho sobándome mi sudado cabello apreciando a lo lejos sus pulsaciones afectivas…se sentían calmadas y relajantes como un metrónomo de guitarra para un soneto romántico…lo amo como a nadie…es todo lo que tengo que tenga que ver con amor. Pero… me resurgió la pregunta pendeja de siempre. La cual siempre cuando tengo sexo, ya sea yo el sometido o el, el pasivo.

-¿te gusto? – tosí un poco poniendo mi mano en su espalda

-claro que si…me domina cuando lo hacemos…no pongo objeción a nada David

-me haces sentir bien…te amo hasta el paraíso

-yo te amo hasta el firmamento…

Sonreía pícaramente como un idiota sin remedio…se acercó a mi apoyando sus manos en la cama para darme un besuqueo apasionante...casi me deja sin aire. Interconectábamos nuestras lenguas y nos degustamos a mas no poder… sobaba su espalda mientras este sacudía mi nariz con la suya apeteciendo el olor de nuestro sudor arrechero…me agarró de la cadera para acercarme más a él pero-

El sonido de la puerta que se abrió estruendosamente, nos volteamos rápido para ver que-

-¡¡eres un puto!! ¡¡Maldito ricardin!! No sabes cuánto te odio que no me dijeras en que habitación te metías – codeaba las caderas como damisela en pasarela, a lo cual los ojos de Richie se le inyectaron como baños de sangre – sabes que tengo que buscar un lugar para cambiarme… ¿dónde está el baño?

-Guillo…- se estiraba la cara saliendo de la cama como Dios lo trajo al mundo – mierda ¡¡te dije que no me siguieras donde yo estaba!! ¿No entiendes lo que te digo por el celular? ¿¡O ese puto BlackBerry que te compraste solo sirve para parar la puerta!?

-Andromeeeedaaaa, no me digas mi nombre cuando soy andromeeeedaaaaa, grábatelo en la memoria estúpido, Andrómeda Solaris, mi nombre de cabeceraaa – estiraba su dedo pulgar sacudiéndose el cabello rubio falso que le caía en sus hombros – ¡te he dicho que me respetes pendejo!

-haz lo que quieras…

-¡marica!

-perdóname David…este idiota me llamo al cel cuando fui a comprar las cosas

-jejeje – asentía yo a carcajadas – no puedo creer que ustedes dos sean hermanos

Déjenme les explico. Richie tiene un hermano que es sumamente distinto a él, y es menor que el por dos años, Guillermo, pero para recortarlo, Guillo. Un flaquito descalcinado con cuerpo de mujer y lo más afeminado posible. No estudia, se gana la vida siendo ¿quién?...Andrómeda, Andrómeda Solaris, un drag queen que baila y hace playback ganado billetes en un bar gay que queda por el occidente de Bogotá. cuando termina turno, vuelve a ser ese chico gay que le gusta usar pantalones apretados y camisetas de marinero ajustadas. Un dato importante, Richie odia lo que hace Guillo, lo único que tienen en común, es que los dos son gays, de resto…nada.

-estabas en lo tuyo con Deivid  y te interrumpí…me vale lo que hiciste gorila aguevado, pero a ti no Deivid ¿te hizo daño cariño? – insistía quitándose los aretes extravagantes que llevaba.

-no creo porque…Richie fue el que se divirtió a lo grande esta vez…

-¿cómo? – Abrió la boca con todo ese labial falso en su boca y sus cachetes llenos de capas confinadas de maquillaje – ¡por los tacones de mi madre adoptiva! Ricardo… ¿te la metió? – dirigiéndose a el

-no es la primera vez que pasa… - sonrojado se secaba el sudor de la frente

-ayyyyyyyyyy me muerooo me muerooo ¡¡¡me morí!!!… Deivid se encargó de dejarte tu feo culo de oso peludo, como un parrandon de cincuentañeras…abierto para todo público jajajaja pobrecito tu Ricardo jijijiji

Me dio algo de gracia acerca de lo que indicó Guillo, pero Richie no se quedó con las ganas de hacerle el mal a su afeminado hermano. Aferró su peluca con clips pegados y la tiró con fuerza adentro del baño haciendo que este gritara como una chica estando apunto de violarla con suspiros frenéticos y por así decirlo…exagerados.

-ahh maldito me las vas a pagar Ricardo ¡maldito desvergonzado!

Fue como un pendejo a buscarla, estando mí novio relajado en la pared esperando a que cayera en la trampa. Guillo se metió al baño agachándose y quejándose mientras que su hermano le cerraba la puerta con seguro para que no pudiera salir. Este me miraba con picardía apunto de reírse así, completamente desnudo haciendo que yo me riera también.

- ¡no es justo! ¡Ábreme de una puta vez! ¡Ay no mi pestaña se cayó! Noooo

-quítate toda esa porquería barata primero y después hablamos, que hueles a prostituta de calle – se reía en silencio para no oírlo mientras este le daba golpes a la puerta gritando a mas no poder

-¡Deivid haz algo!  ¡Se me va a manchar el vestido de encaje por no quitarme el maquillaje!  ¡Dile a la escoria simoníaca de Ricardo que me abra!

-¡haz lo que te pide y te dejará salir! – pobre, era virulento yo también, me reía sin que él lo notara, pero a veces Guillo es muy intenso

-chócalas rebelde, le ganamos de nuevo a Guillo – me mostraba la mano para chocarla, lo cual alegre le correspondí

- que no me digas Guilloooo  ¡soy Andrómeda! – vociferaba adentro de la puerta, es un hueso duro de roer

-me gusta joderlo a veces, ven dame un beso antes de irnos…

-como tu gustes – me acerque a él y le di un último beso antes de vestirnos nuevamente y claro, dejar al pobre Andrómeda encerrado en el baño para que termine de volver a ser Guillermo.

_____________

-dale uno tú y otro yo

-está bien…pero creo que se me tornara complicado

-¿en serio? No es tan difícil…solo tienes que meterlo con cuidado

-tú lo ves sencillo...yo, no

-solo hazlo David…

-pero Margie yo no-

-hazlo…con cuidado

Trataba de que pudiera darme confianza para poder lograr mi cometido…estábamos callados, no musitamos palabra alguna... me afiancé bastante. Me acerqué, dispuse a hacerlo...faltaban solo unas cuantas cosas para que encajara…momento de tensión histórico…pero sí. miraba que cada pieza ensamblara correctamente…

-creo que voy bien… ¿no?

-David, es solo guardar bien tu ropa en la maleta, no es cosa de otro mundo – refutaba sentándose en mi cama

-es que tengo más ropa de lo normal jejeje doblé mi armario desde que llegué aquí – me acomodé de rodillas en mi cama descalzo para poder arreglar todo

-eso, lo sé, tienes ropa para tirar para el techo.

-solo llevaré lo esencial…lo demás se quedará aquí…Margie ¿quién cuidará el apartamento? – preguntaba mientras doblaba cada camisa y camiseta que me iba a llevar, mis jeans y ropa interior estaban ya listos para empacar

-Nadia lo hará, tranquilo, mientras que no estemos por aquí, lo mantendrá limpio

-está bien…lo importante es que todo salga bien – me quitaba el polvo de la ropa en mi camiseta negra que usaba para dormir, algunas cosas no me las pongo

-¿y…como te fue con Richie?

-pues…bien, dejamos a Guillo de nuevo con los crespos hechos, pero lo dejamos salir ya del baño arreglado y se fue con nosotros.

-¿de nuevo? Porque le sigues la corriente a mi primo, deja quieto a Guillo, sé que esta algo loquito pero no es para que le hagas Bullying parentesco…no me gusta que hagas eso, respétalo como es

-está bien…pero sabes cómo es de extraño a veces

-cambiemos de tema David…

-si mejor…-suspiraba

-pasaron dos años ya y… nos devolvemos de nuevo – me decía con carita de cariño suspirando… - volveremos al a vida que dejamos atrás David…

-si…mis padres, los pocos amigos que tenía, mi hermanito…

-y…tú ya sabes…esa persona también…

-¿quién? – preguntaba al finalizar con fuerza el cierre de mi maleta…

-sabes de quien hablo…

-¿de quién hablas?

-De Diego

Abrí los ojos como dos platos a punto de caerse de sus desorbitadas cuencas… ¿Por qué me viene con eso ahora?

hola! les mando un fuerte saludo a todos ustedes, espero que me hayan extrañado, si es la primera vez que leen de mis relatos jejeje soy zerosubzero, abreviado como subzi, como quieran esta bien. dije que seguiria con esta historia después de unas vacaciones, y creo que esas vacaciones se fueron para llegar mas adelante...creo que fue mas que todo David y Richie en esta parte, pero sabran mucho mas mas adelante, para que sepan que volvi al ruedo nuevamente.

si tienen dudas o sugerencias acerca de algo del relato o de su autor jejeje escriban al correo zerosubzero259@hotmail.com  tambien dispongo de una cuenta de facebook, solo se entran a mi perfil y le dan click al enlace y asi poder estar en contacto, de parte de su amigo subzi, un abrazo enorme.