David y Diego: Al borde de perderte

la siguiente parte...espero que valoren y comenten porque es el mas largo que he escrito...hasta ahora

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-Te amo David…te extrañe bastante

Apartó mi cuerpo de mí. La sensibilidad no pudo ser mas evidente al ver como me tomaba cariño al ver que…lloriqueaba como una niña ingenua. Por el frío llevaba su chaqueta suave roja de capucha, con sus dos tiras negras delanteras en frente. Sudadera negra con los zapatos amarillos de ciclismo para deporte…sus pulgares aislaban las lágrimas de mi cara. Pero su talante de humanidad se tornó a preocupación evidente.

-David… ¿Qué te paso en la cara? – espantado detallaba mi cachete algo inflamado, ni siquiera vi como era de intenso el golpe.

-ehmm, no nada. Ahí Javi y yo jugando brusco, ya sabes como somos los dos… - empezaba con mi complejo de mentiras impulsivas ¡carajo ya no mas!

-¿seguro? – inquiría dudosamente

-si Diego, no fue nada. Este…todo bien…pero… ¿Qué haces por aquí? y de noche que es algo peligroso… - de la cabeza se infló como un globo ese pensamiento reventando en mi boca para sacarme de dudas

-pues yo…fue por esto

Del canguro de su chaqueta sacaba un cofrecito pequeño de terciopelo rojo. Sus dos manos abrieron el anhelado resguardado de tesoros. Un anillo, brillante de oro con incrustaciones de joyas en toda la mitad decorando el diamante pequeño pero fastuoso a la vista en toda la mitad de la sortija dorada. Era hermoso. Como idiota sin especular lo que decía metí las patas indicando

-¿Es para mi Diego? Pero ¡no debiste!

-¿Cómo? No pendejo jejeje la razón de por que estoy aquí, es que estaba por la joyería del centro comercial de la vez que salimos ¿te acuerdas? Porque mi mamá se lo dará a una de mis primas. Se va a casar. Estaba haciendo ejercicio, trotando por ahí…fue que me llamó para comprárselo, se lo cargue a su cuenta para que lo pague cuando pueda.

-ahmmm…perdona, es que a veces soy un completo ingenuo jeje – como un idiota sin mente rascaba mi lóbulo occipital despeinando mi pelo por detrás. Era obvio que eso no era para mi, si lo fuera me amaría mas de lo normal…

-y pues, quería hacerte la visita pero como no estabas…pero… acá te tengo tontuelo despistado

-…gracias por visitarme Diego, me–me hiciste mucha falta de verdad…

-ven…

Nuevamente nos acercamos para estar juntos compartiendo el calor humano de nuestros cuerpos. No, no abandonaré lo mejor que hay en mi vida por un iluso pendejo sin convicción. Siento plena confianza al percibir ese olorcito corporal de Diego y todo lo malo se va por la borda. Mi corazón se calma por su incomparable esencia. Mi cara se erizaba al hacer fricción con su felpa roja forjando contacto mi frente con su cuello. El tiempo se detenía y no surgían los nuevos minutos, segundos, milisegundos y nanosegundos al tocarnos y reunir nuestro amor como siempre lo hemos hecho. La verdad, no quiero que lo que tenemos se marche y que no regrese nunca.

Su mano me agarró delicadamente el mentón. Reunimos nuestros ojos transmitiendo todo lo que sentimos por el otro. Su gesto de afección se transmitía a sus hermosos labios dando una de esas sonrisas matadoras que tanto me gustan. Junte de mi voluntad amoldando mis brazos en sus hombros alrededor de su cuello. Cerramos nuestros ojos para unir nuestras frentes. De a segundos se rozaban nuestras narices. Es todo mi universo. Pasaría toda mi vida con el si fuera necesario. Con cariño se acercó a mí esperando el dulce beso que esperaban mis bembos.

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Amor…nunca había recibido tanto amor en toda mi vida. Quería dárselo y que no se me acabará nunca, ni un terremoto nos separaría. Si él se muere, me iría con el también si es necesario para estar juntos. Despegué su frente de la mía para aglomerar con el sus hermosos labios. Empecé lento. Despacio con toques suaves. Su forma de besarme, calmaba de todo mal que me pasaba. Es lo que mas me gusta de él. Desorientado y extrovertido, me enamora cada vez más y más. Siento que este chico…lo amo y por cuanta cosa atroz que pase, no dejaré de quererlo.

Estábamos en la calle, apunto de ser las diez de la noche y me interesaba mas donde pasar más tiempo con David que irme a mí casa. Mi cuerpo y mi mente solo pretenden estar a su lado, sin dejar de residir con semejante apego. Era la cosa más sublime de toda mi vida, ni su cabello oscuro como la noche, ni su nariz recta, ni sus bellos ojos naturales. Era todo esa personalidad y ese cariño con el que se me ofrece sin pena alguna. Si, no desistiré de querer a David y agradezco que exista…

Nuestro beso desmayó con un abrazo…este pensamiento… me lo he guardado desde hace rato y quiero…que él lo sepa, quiero que se entere de que-

-David yo… - con su mano trataba de apartarlo para que me viera.

-si, dime… – afirmaba mirando al suelo, cansado.

-el día de la fiesta…le diré…

-¿Dirás qué? – miraba con miedo al ver que expondré que-

-Le diré a todo el mundo que te amo y que eres mi novio querido al que tanto amo.

-¿qué? No… así como estamos, estamos bien…déjalo así.

-No…es algo que quiero hacer y quiero que me apoyes ¿si? – apretaba sus hombros con fuerza para que estuviera de acuerdo.

-es que… no sé… ¿podemos hablarlo mas tarde? Estoy algo…pulverizado

-bien…ya falta poco para que sea eso. Oye si…

-¿qué? – agregaba desesperado mirando a la puerta de su casa, con suavidad puse mis manos en su cara para que me mirara

-Te amo…

-yo también pero…no quiero que te pase nada, yo quiero que estés seguro por favor…

Distante. Este David lo percibía retirado, extraño y equívoco…me preocupaba. Solo es cansancio debe ser, hasta lleva el uniforme y todo. …la razón la tenía en sus palabras, hay que esperar hasta mañana haber…

-Ok, anda ve, nos vemos mañana.

Se dejo llevar del viento hasta llegar a la puerta de su morada. Por un instante se demoró al abrir. Giro lentamente dudoso mientras resguardaba mis manos en el canguro de la chaqueta para proteger el regalo. Después de verme por algo de tiempo, me sonrió tímidamente, entrando a su casa…le correspondí su sonrisa levantando mi mano como gesto de despedida. Al final su puerta se cerró quedando todo en silencio.

Destiné mi camino hasta mi casa. Pero su puerta se abrió otra vez. Me voltee rápido para ver que una de las tiras de su maleta se había quedado afuera. Atascada estaba cuando la despegó fácilmente, percibiendo con mis oídos un mierda de parte de el…jejeje el y sus ingenuidades. Además si...llevaba un anillo muy dispendioso y es mejor que llegue rápido porque, ser estúpido no es de las cosas que hago, pero no me cabe duda.

-¿Qué le estará pasando a David…? - Me preguntaba estupefacto…

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-ay muchachitos jejeje me encanto conocerlos a todos y espero que todos salgan bien sin deber materias y espero que no refuercen jejeje hablo con usted Ordoñez ¿oyó?

-¡PROFE! ¡¡No me batanee!! ¡No me eche al agua! – gritaba Juancar desde su puesto estando ad portas de salir del salón para disfrutar de sus vacaciones.

-¡Ya vamos a salir! Que bueno, estoy tan feliz ¿tu no zayncito? – me preguntaba con ansias Karen mirando yo por la ventana, viendo como los pájaros llevan ramas para sus nidos en las copas de los arboles. Estaba en otro planeta, el planeta de las dudas y problemas.

-¡David! ¡Para oreja!  ¡Que te estoy hablando!

-perdón… - me disculpaba estando Karen a mi lado izquierdo y Margie estando por detrás. La rubia de los ojos dulces me miraba con inquietud

-David ¿te ocurre algo? –preguntaba Margie tratando de acomodar los cables de mi cabeza para poder responderle.

-yo…si ¡si ¡ estoy perfectamente, es que pienso haber… que es lo que estudiaré para el próximo año… – mentiras, pensaba era en como trataría de salir del embrollo gonzalesco en el que estaba metido hasta el fondo.

-David hermoso, seré… ¡una diseñadora de modas profesional! Que se tengan Vivienne Westwood y Alexander Mc queen porque ¡yo seré la nueva diseñadora para todas las temporadas! – Eufórica Karen adelantaba lo que seria para su carrera – pronto hare el examen para la universidad

-eso no te dará plata… – irónicamente decía Marco detrás de ella de brazos cruzados – no alcanzarías a ser reconocida ni en una boutique…

-¡cállate emo majadero! Ve a que te pinten las uñas ¡eh! ¡Ven a este! Grosero – se enojaba Karen mirando rayado a Marco distanciando sus miradas entrecruzando una guerra al versen

-¿y que harás tu Juancar? – Margie curiosa le preguntaba a mi amigo perezoso

-Pues mi amor, me gustaría estudiar Licenciatura en educación física con énfasis en deporte, ahí para usar sudadera todo el Día como Zangief jejeje

-¿hablas de el profe Caicedo? – insinuaba Julieta detrás de Juancar

-Si, pero sin llegar a ser un mastodonte como el. El nuevo profesor de educación física ¡yo! si vos vieras ¿como fuera? jejee feliz de la pelota. Y tu rubia ¿Qué harás tu? –dirigiéndose a Margie

-pues…me gusta mucho la arquitectura, pero iré a Bogotá a estudiarla porque lo que me gusta esta en una universidad en particular. Pero eso si, yo mi música no la dejo por nada del mundo…

-aprende Karen…eso si dará plata – con la razón en la mano hablaba Marco como si fuera el rey sabio.

-¡que te calles Marco! ¡Bulloso!… David te pregunto… ¿Qué hará Diego en la universidad? ¿Tú sabes? –preguntaba la chica cocodrilo

-Quiere estudiar medicina, pero más que todo ser como uno de esos socorristas dispuestos a salvarle la vida a las personas en una emergencia. El un medico y Marco un ingeniero industrial

Así es mi amigo – la razón me la daba marco levantando su pulgar indicando que estaba en lo cierto

Hablando de Diego. Mire por ahí donde le tocaba sentarse y pues, escribía mensajes de agradecimiento a las chicas cuando les pasaban sus cuadernos. Eso yo lo hice antes para tener mensajes de ánimo de todos mis compañeros y amigos de grado. Pero no soy tan popular como lo es el.

-ayyy que bueno ¡seremos todos unos profesionales! – animada decía Karen

-todos menos tu… – insistía Marco con ella, como que le gustaba molestarla

-¿y sigues? A ti lo que te falta es una novia… -daba con la ultima estocada Karen a mi amigo, pero el no dijo nada

-y David tú.

-¿yo que Margie? – pensaba por su pregunta

-¿que harás tú?

-pues yo…

-chito, chito aguas, aguas que ya falta el conteo – me interrumpía Juancar, contábamos los pocos segundos para irnos pronto de aquí, igual como la bienvenida del año nuevo, todos mirando el reloj de el salón. No gritaríamos feliz año, sino que chillábamos como locos corriendo para afuera de los sectores estudiantiles para poder salir y disfrutar las vacaciones.

-¡muchachitos dejen de mirar ese reloj! me harán sentir mal… Los extrañare (sniff) – llamando la atención mi profesor para distraernos pero no daba resultado su plan. Comenzamos a gritar como locos la cuenta regresiva

-¡6!

-¡5!

-¡4!

-¡3!

-¡2!

-¡1!

… - no sonaba el timbre, mierda, quedamos como unos pendejos sin decir nada.

-si ven muchachitos que todavía no porque- nos interrumpía el profe pero

-¡RIIIIIIING! – el timbre hacia su gala de sonido deponiendo a todos felices y alegres corriendo por los pasillos como si estuviéramos en un estadio viendo un partido de fútbol. Boyantes de tranquilidad cogimos nuestras maletas viendo que Karen se iba por ahí con mis amigos recordándome de algo.

-acuérdate lindo que la fiesta de final de grado es esta semana, ahí te dejo al tanto cariño mio, te cuidas hermoso – me recordaba sin parar de mirarme tiernamente

-tu también Karen…

Me daba un beso a la deriva mientras se iba. Hice también lo mismo en marcharme agradeciéndole al profe por todo lo que hizo por nosotros todo este año. Todos parrandeaban y se abrazaban despidiéndose unos con otros. Se me pegaba esa alegría afectiva de todos. Mi celular vibraba por un mensaje que me mandaban, sin querer se me cayó mi maleta por buscarlo en mi bolsillo.

-NO ME EBADAS ZARQUITO TE VA A SALIR CARO SI NO ACES LO QUE TE PIDO OISTE¿

Maldita sea multiplicado al doble…este maldito militar no para de joderme…pero eso haré, lo evitaré hasta poderlo confrontar y poder estar apaciguado con-

-¡David! Ya salimos ¿no te parece genial? – me decía mi ángel dejando su mano en mi hombro mirándome con emoción

-si, súper genial… - frustrado guardaba mi celular pensativo mirando al frente.

-mm bien… pues me preguntaba, ya que todavía estas así… ¿Qué tal si… te consiento? –insinuaba circulando afuera para salir del colegio.

-¿consentirme? – preguntaba yo al salir por ahí con el para seguir a nuestra ruta pero sin bicicletas…ya que es el ultimo día ¿para que apurarnos a ir a nuestras casas?

-Si ven – acomodaba otra vez su brazo en mis extremidades de espaldar. Se desaliñaba el uniforme por ser vacaciones. Pulcro como siempre, pero esta vez se desarreglo completamente. Hice también lo mismo para estar los dos tranquilos sin ya estudiar.

-¿que bonito día no crees David? – el sol era radiante sin llegar a quemar. El cielo azulado con unas cuantas nubes mientras circulábamos por la ruta de las bicicletas…deje de pensar en González. No creo que sea tan estúpido para delatarme porque yo…tengo con que defenderme, también puedo decir lo mismo de el pero, no se si me servirá.

-nos dejaron un día bonito para disfrutar de nuestras vacaciones… - decía al mirar al cielo viendo como los pájaros volaban por ahí

-¿y que harás? – inquiría con ansias

-pues…no se si salir por ahí con los locos esos o pues…

-quedarte conmigo un rato en mi casa… ¿no seria buena idea? – preguntaba dichoso al ver mi futura reacción.

-…también…no estoy ya castigado así que bueno, seria perfecto y… ¿tu mamá?

-trabajando…le cambiaron el horario, ahora ya trabaja tarde-noche así que la veré después.

Cruzábamos a mano derecha por la bifurcación de nuestros caminos. Este lugar…cada vez que paso me acuerdo solo de lo bueno que paso con Diego. De como jugamos, reímos y nos peleamos por primera vez aquí…de como sufrí y pase del dolor a la alegría por tener a este tipo, que me sobrecogía con su brazo.

‘¿que te pasa David? ¿Dejarás a la persona que tanto quieres para toda tu vida? lucha por el, él te ama compasivamente. Si lo dejas nunca mas volverás a verlo’

Mi conciencia hablaba entrometiéndose en mis pensamientos sangrientos sin desesperarme. Ver la cara pasmada de Diego, hace que pueda vibrar de paz por un instante. Al llegar a su casa me pregunto algo que me vino de una a la mente…algo que ya paso y lo tengo bien grabado.

-David… ¿te acuerdas cuando te atropelle en el andén?

-si…me llevaste hasta tu casa para curarme mi pie…lo recuerdo perfectamente.

-fue tremenda coincidencia todo lo que paso ahí. Además…me pasan tantas cosas nuevas cuando estoy contigo.

-también yo… – miraba espontáneo sus ojos correspondiéndome con gesto de emoción y un guiño. Dio un beso a mi cabellera despegándonos para remontar las escaleras de su casa y que pudiera abrir su puerta. Entrabamos y su casa como siempre, reluciente a la vista.

-Diego ¿me prestas el baño? – decía al tener tremendas ganas de orinar dejando mi maleta en una de las sillas

-si dale… ¿te espero oíste? No te demores – me advertía despojándose de su maleta.

Me dirigí a mi camino al que conocía perfectamente. Cerré la puerta para poder orinar. El líquido amarillo tocaba la puerta y quería salir rápido. Despegué un chorro inmenso en el sanitario cayendo a escala de 10, me estaba reventando. Al terminar de satisfacer mi vejiga me guarde los pantalones. Mi celular se cayó otra vez resplandeciendo su pantalla. Mensaje nuevo de:

No pude ver bien, me agache y me fije quien era, mínimo era publicidad de las marcas telefónicas pero ya vi que este día era para darle un disparo con una magnum de alta potencia en toda la mitad de su frente volando sus sesos.

-NO ME RESPONDERAS ¿ ZARQUITO SI NO ME DISES NADA TE DEJO COOMO UNA CUCARACHA RAZTRERA VAS A VER¡

¡Mierda! este idiota no me deja en paz…ignore su mensaje sin respondérselo depositando mi aparato en mi bolsillo. Si no hago algo la cosa se empeorara y pues, dejar que eso suceda perdería todo lo que he logrado. Me destiné a donde estaba el loco apasionado, pero no residía por ningún lado.

-¿Diego? – con dudas miraba en todas partes sin poder tener respuesta.

- estoy por aquí… - deambulaba su voz en un rincón pero se oía apagada. Me fije y provenía de la puerta de su cuarto, si, como idiota no me fije en las habitaciones preocupándome por nada. Abrí la puerta para sorprenderme por esa imagen. Que generaba un montón de preguntas…y pocas respuestas

-em… ¿porque no tienes tu pantalón? – preguntaba.

Tirado en la cama con su camisa del colegio medio abierta y con medias blancas y grises de talón y dedos, con su brazo por debajo notando su codo limado. Con una pantaloneta azul que usan los futbolistas. De relajo al estilo vacaciones en una playa tomando el sol cerca del mar incluida su ropa.

-¡deja de preocuparte por eso! Ven haz tú lo mismo para que… estés cómodo – me sugería para estar los dos juntos dándole palmaditas a la cama. Así sea por media hora.

Puse mi celular en el tocador. Incomodidad sobrexpuesta en mi cara reflejaba sin que me notara pero ¿Por qué? Me empezaba a angustiar y sentirme algo confundido por lo que siente mi cuerpo y por lo que pienso. Me quite mis zapatos desprendiendo de mis pies mis pantalones escolares para colocarme una de sus pantalonetas que le hacen ver su culito medio respingón y calentón.

-¿me puedo quitar la camisa? Hace un calor tremendo – preguntaba como si no lo conociera

-tu sabes que no me tienes que preguntar…dale tranquilo – entrecerraba sus ojos al ver de como me moría de…pena. ¿Carajo pero que me sucede?

Me quede con la camiseta blanca con cuello en V que llevaba por debajo. Con ella puesta, las medias azules oscuras, la pantaloneta negra que por cierto, agradable si estaba, dispuesto a ‘relajarme’ con mi novio. Me acosté a su lado mientras no paraba de ver lo que hacia cada minuto.  Me consideraba un muerto en funeral entrelazando mis dedos…pretendiendo observaba hacia el techo.

-¿porque estas tan extraño?... actúas como una chica con miedo de dejar de ser virgen. – recrimina mis actos con tremenda respuesta

-yo solo…necesito es…cariño

-que tonto eres… pues ven aquí yo te apapacho…

Me cogió para abrazarme sin yo mover un músculo. Se juntó conmigo para someterme a todo su jugoso cuerpo. Pero no pensaba en erotismo, pensaba era en semejantes problemas que me inundaba la cabeza de irracionales dolores de muerte. Correspondí su cariño para estar un rato…entrepiernados.

Sus pies cubiertos por sus medias sobaban la palma de los míos con un toqueteo cariñoso para dejar de alarmarme. Levante mi pierna un poco para estar cerca de la suya sin dejar de envolvernos y consentirnos. Los pelitos de su patilla me hacían cosquillas por mi cara haciéndome reír un poco cerrando mis ojos para poder respirar y desatascarme de mis inquietudes colosales.

Nos acomodamos ya en la cama dejando apoyada mi cabeza en su pecho al mirar al techo. Me acariciaba el cabello mientras sobaba su pierna sin casi vello. Se acercó para darme un beso en mi cabeza quedando un rato con su cara en mi pelo. Traté por curiosidad…que podría pasarme si yo le digo a Diego que…me acosté con González. Igual a como le preguntas a tus padres a ejemplo de suposición algo que te preocupa o tienes curiosidad pero, piensan que eres tú y todo lo que les preguntas a tus allegados creen que tu lo cometiste. Cosa que no sucede a veces, pero esta vez acontecía de esa manera.

-¿Diego…?

-Dime David…

-me perdonarías si yo… ¿hago algo malo?

-¿pero como que? – Me miraba después de apartar su nariz de mi negra cabellera localizando mis pupilas – ¿acaso hiciste algo terrible?

-ehmmm yo…solo te pregunto…

-¿por eso es que estas tan extraño?

-no… - al parecer esa sensación de tratar de hablar lo realmente verdadero no me salía para poder estar como pez en el agua, pero debía hacerlo, debía decírselo.

-Mira David…si tú hiciste algo que te perjudicara a ti o a mí, a los dos no sé, como besarte con alguien, una chica o algo no sé. Pues es tu problema y debes de resolverlo, pero tendría que saber que es…

Me calme un poco, trate de concertarme bien para poder mirarlo y decirle todo pero, un impulso a mi corazón me resignaba. Me corrompía a garras pesadas mi corazón las palabras de mi boca.

-tuve algo con alguien… - dije seco como para que no se atreviera a escucharme. Miraba sus pies con una sonrisa inquieta apunto de hablarme

-Descuida…

-¿Cómo? - Me impacto su respuesta

-ese ‘algo’ que tu me dices, sé que no paso a mayores, todo esta bien…no estoy enojado contigo

Pero cómo…me sorprendió que me insinuara que, no pasaría nada entre los dos. Mis ojos se despegaron de sus cuencas por lo sorprendido que estaba, literalmente. Me propuse a estar tranquilo pero… sin estar satisfecho. Cometí la salvajada más pendeja de mi vida. ¿Porque todo estaría bien? si esta mil veces peor con González y sus extorsiones.

Sus labios se destinaron a los míos para complementar mi cuerpo de su estupefacción continua sin llegar a sacudirme de ella. No pude decir la verdad. Me confundí al ver que no le importaba, o que le rabiaba por dentro. Pero sus besos me llevaron al paraíso nuevamente. Destine a pasar mi lengua por todas partes. Su boca, su cuello, su oreja. Su amor es diferente al que me daba González. Su pasión era de felicidad infinita, no era prohibido su amor.

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Ver que David me decía eso…no me afectaba, dejaba que buscara sus principios al ver si yo le gusto o no. Y sé que será así sin sonar a llegar a algo egoísta de mi parte. Mi corazón palpita desenfrenadamente cuando lo veo, cuando lo toco, cuando lo disfruto como en estos momentos. Agarraba su espalda como para no dejarlo ir mientras este jugueteaba por debajo de mi camisa. Acariciamos nuestros pies sobándolos mutuamente. Su mano me revoloteaba el cabello.

Este chico de complexión delgada pero con músculos, sus sentimientos… No quiero perderlos. Ver que… actuaba así de extraño, me lo decía. Fue algo que hizo, pero sé y doy plena seguridad en eso que solo fueron cosas menores. Me valía madres, solo quería pasar este momento único con el pero como dice el, una de sus particulares frases…no todo siempre te sale como tu quieres.

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Sonó mi celular vibrando entre la madera de su tocador generando un choque. Trataba de ignorar el sonido de ese aparato, sus besos apaciguados a todo mi complemento no me dejaban escapar de esa celda imaginaria. Pero cogí fuerzas para zafar mis labios de lo suyos. Mi erección hacia que peleara para sepárame de él, pero-

-Diego…tengo que…tengo que contestar – jadeaba dejándome apreciar su saliva por mi cuello al darme besos como los labios de un pececito.

-deja…que suene…extrañaba esos…besos tuyos David – dirigiéndose a mi. Comencé a exasperarme porque mínimo era mi autoridad para saber donde estaba.

-no yo…contestaré – me dispuse a recusar, Salí de la cama a coger ese aparato inoportuno sin parar de ver la erección de mi novio en su pantaloneta limpiándose la grasa de su cara con las dos manos.

-¿aló?

- David ¿¡usted donde está!? ¡Vea que lo necesitan sus primos para un trabajo de refuerzo! – angustiada mi mamá hablaba duro para ver que la escuchaba, cerré mis ojos pensando… ’mierda a buena hora tenia que suceder esto.’

-Si madre…ya voy en camino…

- ¿Esta con sus amigotes? – preguntaba desesperadamente

-no ma, enseguida voy… - a la par escuchaba un puño proveniente de la cama…debe de estar enojado conmigo por…dejarlo

- no se demore pues…chao Tesoro

Colgué mi celular. Me destine a sentarme en el borde de la cama quitando la suciedad de mi cara con las dos manos. Diego con su almohada en su cara, me decía sin hablarme que no quería que me fuera en lo absoluto.

-Me…tengo que ir Diego…perdón

-dale…descuida, pero eso si, odio a tu mamá en este momento jejeje – me respondía con suprema sinceridad, pero se notaba algo decepcionado por no franquear el rato con el. Voltee mi cara para buscar mi pantalón y quitarme su pantaloneta.

-no, no te la quites… - me levantaba la mano para no quitármela – llévatela, la compre para ti

-¿en serio? – Decía al vérmela de nuevo – esta atractiva…gracias Diego – agarraba sus dedos apretando fuerte sonriendo para el hacer lo mismo

-tonto, pero si te la pusiste ya y la vuelves a ver otra vez como si no la hubieras visto jejeje, no hay de que David.

Solté su mano para colocarme el pantalón sin quitarme la pantaloneta. Dormiré con ella hoy. Me puse mis zapatos, la camisa y cogí el resto de mis cosas para ya partir, me cargue la maleta al hombro dispuesto a irme...no deseaba marcharme…quería pasar ahí todo ese lapso de mimoseo con mi novio sin despegarme de él, ni para ir al baño.

-¿no me vas a sacar? – le decía jocosamente para que me acompañara a la puerta

-en estas fachas no creo jejeje ¿te sirve un beso de despedida?

-si – me acerque rápido a el para darle un besote en sus dulces labios despeinando mas su cabello por maldad

-hey! ¡Deja eso!

-despeinado te ves mas lindo – me reí al cerrar su puerta pero, al ajustarla le ofrecí un -…te  amo

-también yo tonto…te cuidas por ahí, acuérdate de la fiesta, para que pasemos bueno

-ok jeje…chao – con una sonrisa le obstruí la vista de afuera por la puerta de su cuarto para disponer al irme, cerré su puerta y me fui a pasos agigantados por la calle

Mierda, la fiesta se me había olvidado, no lo tenia fichado en mi mente. Pero sentí un respirito al ver que Diego acepto que yo tuviera esto. Pero no me siento conforme, debí haber dicho:’ estuve con el novio de Karen’ y ya. Lo hubiera comprendido, sería capaz de tener una orgía desenfrenada con chicos y no le hubiera importado…bueno sin ser extremista, no creo que eso lo haya aceptado jeje. ¡Coño! ahora a hacer refuerzos de fraccionarios y ecuaciones básicas con mis primos. Faltará mucho para la fiesta…jodido estudio

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ZARQUITO. DEJE DE INGORARME. VA A VER QUE CE LO ESTOY ADVIRTIENDO

No paro en todos estos días sin mandarme estos putos mensajes que me sacaban de quicio cuando los veía. Que lo cuente y ya, no me importaba. Busque mi ropa lista del tendedero para acicalarme. Unos jeans negros, camiseta blanca que me resaltaba lo poco de mis brazos, con las palabras AGRESSIVE plasmadas con un tigre. Los tenis cafés de la otra vez. Medias blancas, reloj nuevo blanco para que hiciera juego. Lave la manilla de Diego para tenerla algo limpia y estar listo para irme.

Nada. No hable con Diego personalmente desde esa última vez. Me enfoque fue a enseñarle a los petardos de mis primos toda esa matemática básica para que pudieran pasar libres y sin ningún problema. Antes de marcharme, apareció mi Ángel de la guarda, con su carita de ingenuo se acercó a mi con pena, como siempre lo hace jejeje

-David, hermanito ¿ya casi te vas?

-casi Toño, casi ¿porque? – revolcaba entre mis cosas para echarme un poco de loción pero no me daban muchas ganas porque las colonias, perfumes y todo esos ambientadores para el cuerpo, no me gustan...me pica todo.

-Nada…ma dice que hasta las 12 te quedas por allá, para que no pase como la otra vez…

-ella sabe eso, tengo que gastar de mis ahorros, lo malo es que tengo que coger un bus a esta hora, ya son las 7:30 PM y pues, en ese espacio da miedo.

-¿te acompaño? – preguntaba con caución al acercarse a mi

-¿estas loco? tienes 9 años ¿Cómo se te ocurre hacer eso?

-noo, mi ma dice que vaya a la casa de Joakim, el amigo mio que le preste unos cuadernos, sabes donde vive el, descuida que vivimos cerca, a solo una cuadra.

No me molestaba. Conocía a su amigo así que era justo lo que me proponía, estaba dispuesto a acompañarlo, tenía algo de tiempo. Además puede que sea chiquito pero no tiene un pelo de bobo.

-Ma, acompañare a Toño a la casa de su amigo y el me acompañara a coger mi bus… - le avisaba mientras cosía el edredón de mi papá

-¡Cuidado le pasa algo a Toño David! ay donde le pase algo y no quiero que usted le pase algo también porque ya no lo veo responsable David Alejandro. Llega a las 12. Coge un taxi y se me viene. – daba su ultimo golpe mi madre al darme su ultimátum. Claro, no quiero hacerlo, pero me tocaba para no preocuparla porque su furia es letal, puede matar a un depredador.

-Listo ma…me manda saludes a mi papá, yo le cumplo

-Dios los bendiga y Toño se me viene y no se queda por allá

-Si mami…

Dispuse de mis llaves y me destine con mi hermanito afuera.. Caminamos por la acera para buscar los cuadernos de mi hermanito a la casa de su amigo. Obedeció, Salió en par patadas despidiéndose del enano igual a él. Cruzamos la calle hasta ir al paradero de buses. Me estaba dando nervios al dejar solo a mi hermano porque este bus se demoraba al pasar y disponerse por esos barrios altos de pretenciosos ricachones.

-¿Toño tiene ahí todo? – preguntaba exasperado mirando la calle.

-Si hermanito…

-Bien – con sudas quería decirme algo pero con su inocencia le era como medio imposible…pero se animo.

…

-Hermanito…yo lo se… - atisbe mi cabeza a sus ojitos parecidos a los míos. ¿Sabia que?

-¿que cosa Toño? – le inquirí dudoso

-Sé que quieres mucho a tu amigo… lo se.

¿Cómo? ¿Por qué me viene con eso a esa hora? Yo…me constipe y quede al acecho de quedar como una efigie frente a mi hermano mientras los automóviles pasaban rápido frente a nosotros. Me senté despetroncando mi cuerpo en el asiento de espera de la parada, a lo cual me miraba con alegría.

-como dice mi mamá y el chapulín… ’lo sospeche desde un principio’ – jocosamente agarraba sus cuadernos arrinconándose al lado mio para darle espacio

-como… ¿Cómo lo supiste? – estúpido quedé, no se porque. Mire hacia el frente agitando mi pie en lo rocoso de la acera desesperado. Otro más que se añadía a la lista.

-Hermanito…mi mamá no cerró las ventanas ayer…pude ver todo lo que hiciste cuando llegaste. Además, la manilita que lavaste, pues… y cuando salías así todo bien arregladito. Pensé que era una chica pero… me equivoque.

Mi hermano es mas inteligente que muchas personas…habla como un sicólogo solucionador de problemas familiares. Pero no me molestaba que lo supiera. Sé que no me trataría como un fenómeno desadaptado…me fijé en el sinceramente, sonreí a lo cual el también lo hizo y le dije:

-… ¿me sigues queriendo como siempre ahora que lo sabes?

-Claro…muchos de mis amigos pelean con sus hermanos…pero yo te quiero mucho hermanito, no importa si te gustan los chicos.

Después de escucharlo decir semejante belleza. Lo abracé con todas mis fuerzas revoloteando su cabello. Amo a mi hermanito desde la primera vez que lo vi en los brazos de mi padre. Es como un mini yo pero mas cuerdo que nadie. Acaricie su hombro sin dejar de mirarlo a lo cual el lloraba. Mis ojos estaban también apunto de ver como le caían las lagrimas en sus coloridos cachetes.

-prométeme que no le dirás nada a mi mamá ni a mi papá ¿estamos? Yo lo hare cuando este listo…

-Si… hermanito…te lo prometo – me agarro la mano con lo poco de fuerza que tenía.

El pito de un bus detrás de una camioneta 4x4 hizo que observara a lo lejos…era el transporte que pasa cerca de Drummond, mi próximo destino. Afiancé el paso y me pare en el borde de la acera para que parara el bus de servicio público buscando la plata para el pasaje.

-Te portas bien Toño…te quiero mucho

-Yo también hermanito – me decía con su cuadernos en la mano. Le di un corto abrazo para ya subir al bus y disfrutar del traslado notorio. Al sentarme donde siempre, cerca de la puerta de atrás, me fijaba en la ventana viendo como Toño cumplía y se iba alígero por la calle de nuestra casa. Puede respirar sosegado y acomodarme en el asiento porque el viaje…será largo.

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-8:45 PM

-¡David! ¡Hola! ¿Porque te demoraste tanto? – Margie se acercaba con Javi y Melissa que estaban fuera de la entrada. Ella como siempre bonita con un vestido cortó violeta, enterizo negro de pantalón y un chal negro con un corazón de joya plateada en su cuello. Javi, con una camiseta negra y sus jeans grises y la amiga de Margie con su pelo corto de top rojo, una chaqueta y jeans ajustados con tacones rojos.

-Nada, el bus que estaba en trancón – me excusaba saludando a todos, a Margie y a Melissa de a beso y Javi de saludo tradicional, el gesto de manos y un abrazo fraternal. - ¿y que hacen todos por aquí? pensé que estaban adentro.

-Pues David… como vinieron todos los del colegio utilizaron los dos salones de eventos, en uno están poniendo reggaetón y en el otro están tocando bandas invitadas locales. – avisaba Melissa indicándome donde entrar.

-NO quiero reggaetón. Me exaspera, yo quiero ver las bandas locales ¿no estas de acuerdo conmigo Margie?

-Claro David…para eso te esperaba- afirmaba la dulce princesa indie romántica

-¿Van para lo de las bandas? Ah bueno, Javi y yo vamos un rato al otro y después nos hacemos con ustedes – afirmaba Melissa agarrando a mi amigo del brazo.

-Uyyy Javi ¿tu y Melissa? – lo jodia como un hetero cuando ven afecto en publico

-No jodas David jejeje ahora nos vemos pues – finalizaba llevando a Melissa de brazo entrando

-y bien David… ¿entramos?

-claro…me muero por entrar, pero eso si, no quiero trago…

-descuida tonto que no te dejaré jeje

Entramos agarrados del brazo. El sonido de los sonetos de la batería, los trasfondos del bajo. Los acordes extremos gritando a más no poder de la guitarra eléctrica y voces al estilo de música alternativa. Todo estaba espectacular. Había pantallas planas de televisores en cada columna del salón. Un escenario en vivo con mesas y una pista de baile de baldosas blancas y negras al estilo de un tablero de ajedrez. Era como el concierto pasado de Margie, pero con más cosas extremas y exorbitantes. Dichoso estaba de estar por ahí porque habitaba en mi elemento.

Brincaban como locos al escuchar canciones de bandas espectaculares. Papa roach, Deftones, The Police y temas de bandas locales del país. Mi sonrisa llegaba desde el lóbulo de mi oreja hasta el otro lóbulo. Comencé a chiflar y estar azaroso de estar compenetrado con semejante fiestón. A la mierda el otro evento. Estoy dispuesto es a divertirme…pero a mi manera.

Mis ojos de repente fueron ocultos por dos manos un poco calientes, pretendía retirármelas pero...me dejaba hacer para jugar un rato.

-Adivina quien es…

-un chico al que amo con todo mi corazón…

-acertaste jejeje – gire rápido para verlo y sorprenderme. Su olor era más proveniente y agradable por la loción a hombre que me hechizaba de emoción. Estaba radiante y hermoso, Margie miraba de reojo como cómplice riendo encima mio.

-jejejeje ¿como estás David? Mira como te arreglaste ¡wow! y pensar que todo esto es mio

-claro que si, todo tuyo y hasta mas Diego – consentía su mano sutilmente donde residía la manilla que unía el lazo de nuestro amor.

-Tan lindos los dos, me alegra que ustedes dos estén juntos – apretaba sus manos Margie moviéndose de un lado a otro consintiéndonos con sus ojos

-¡¡DAVID!! ¡¡¡LEGASTE YA!!! – gritaba una chica por detrás de mi. Gire ágilmente al ver que Karen se abalanzo encima mio llegando a perder el equilibrio por un instante

-Loca ¡casi me haces caer!

-estoy feliz de que estés aquí…y si tengo que tirarme como luchador de sumo pues lo haré ¡divino!

Karen estaba deslumbrante. Una blusa rosada con tejidos tribales negros por las mangas, jean negro y tacones azules. No se como hace para correr con semejantes plataformas. Mi novio usaba una camisa blanca ceñida con cráneos por el lado de su pecho y por detrás el logo famoso de una banda conocidísima.

-¿los Beatles? jeje no sabia que te gustaban Diego

-si, desde siempre…

-Bueno… iremos por ahí a ver pues si le conseguimos a Margie pareja…los dejaremos solos – insinuaba Karen mirando a mi amiga tierna de una manera rayada por no incitar más.

-no Karen…. ¿porque te pones de esa manera conmigo?…no quiero pareja yo ayy…ahora nos vemos… ¡Despacio! – Karen jalaba del brazo a Margie apunto de caerse sus gafas rosadas. Se metieron entre la mediana multitud del escenario. A lo cual Diego y yo no parábamos de mirarnos y estar los dos juntos…de nuevo.

-¿como supiste que estaría por aquí? – pregunte emocionado mirando al escenario

-yo sé que a ti te gusta esa música…a mi también. Era obvio ¿no?

-Si – como ridículo rascaba mi cabeza.

-al final de la noche…diré lo que te dije. Soy capaz de subirme al escenario y decir que-

-espera… ¿todavía sigues con eso? – dubitativo sin sonar a chiste me preocupaba que siguiera con ese pensamiento.

-lo haré y no me detendrás… quiero que confíes en mi ¿sí?

El sonido de las guitarras retumbaba en el salón. Su familiaridad me hacia sentir independiente y ver que… ¿para que ocultarme? Seré capaz de hacerlo sin impedimento. Si, lo haré… de todas las personas que saben de nuestra relación no ha aparecido persona que se oponga. Era todo o nada. Ansioso pero a la vez nervioso disponía a enfrentarlo…pero no estaba solo. Tenía al amor de mi vida a mi lado. Feliz lo abracé acercándonos juntos a la parranda alternativa que estaba frente a nosotros.

///////////////

Pasamos horas mirando cada banda que pasaba. Estaba entusiasmado con David a mi lado, nada podía ser mejor. Un clásico de Black rebel motorcycle club los disfrutábamos al sonido de los bafles sintiéndonos hechizados por esa música alucinante. Saltábamos y nos dejábamos seducir por la música. Sudábamos como cerdos en un sauna de gimnasio. Pero recrearme y complacer son dos cosas que me gustan. Los sonidos extravagantes y el amor de mi vida junto a mí disfrutando de la fiesta.

David dijo que iba al baño. Que tenía sed y que iba a buscar algo para tomar, cosa que le pedí también algo para beber porque me moría de sed. No se demoraría según sus palabras: esperame que ya vengo . Karen, Margie y Javi se acercaron a mi preguntado por mi chico. Me pregunto que si había visto a Marco también y que…no encontraba tampoco a su gorila novio.

////////////////

-10:49 PM

-Ufff que calor – me lavaba la cara en el lavamanos refrescándome un poco. Era como un concierto de una banda famosa. Lo maravilloso de todo esto es que Diego la pasaba conmigo…solo nosotros dos. Me remoje un poco el pelo para que no se esponjara. Me detallaba el rostro para no ver imperfecciones malditas. Seguía en lo mio…un golpe a la puerta de atrás del baño me asusto echando yo chispas de rabia.

-¿¡Pero que mierda te pasa!? Porque no abres la puerta como alguien- me voltee rápido para enfrentar a la persona que me jodío mi momento de acicalamiento pero…trague sulfuradamente por ver que-

-¡Zarquito! Que alegría verte

Con sus manos me sostuvo cerca de su pecho estando al frente de su camiseta gris de garabatos pendejos. Tuve coraje  y lo empuje con todas mis ganas sin dejar de verlo con intensidad hirviente.

-¡no me toques maldito de mierda!

-vamos David…déjate querer ¿pensaste lo que te dije? Te lo recordé con muchos mensajitos – cruzaba los brazos como el sabelotodo cañero del barrio. Matón chantajista

-¿Sabes?...haz lo que te de la puta gana malparido porque yo no voy a dejar a Diego por querer estar con…tu despreciable ser… -decía mirándolo con asco. No desertaré…

-¡A MI NO ME JODAS MARICÓN! ¡NADIE SE BURLA DE MI Y SALE ASI TAN FACILMENTE! ¡CACORRO DE MIERDA!

Golpeo la puerta del baño con todas sus ganas. Gritó tan duro que la vena de su cuello brotaba salvajemente sin prevención alguna. ¿Qué creía? ¿Qué gruñirme fuertemente hará que llore y me rinda a sus pies? Jeje no lo creo…

-¿me vas a pegar? ¿Si? ¿Me vas a pegar? – me avecinaba con peligro alguno de que lo hiciera. Era como estar apunto de calcinarme con fuego intenso. Cogí un vaso cerca del lavamanos y lo llene de agua. Lo provocaba pero el solo me miraba serio con sus puños al tope dispuesto a mandarme un golpe estilo Knock-Out

-¡Dale! ¡Mierda! ¿Porque no me pegas? ¡Pégame! ¡PEGAME! – le eche toda esa agua a la cara provocándolo más y más…sus dientes se apretaban entre ellos con fuerza. Los brazos se relajaron…no se secó por la mojada helada que le cause. Solo se limpió el agua de su cara, serio y sin decirme nada. Salió afuera del baño dejándome como ultima estocada una mirada fulminante.

…

-te lo advertí…

-No te tengo miedo.

Se fue desvaneciéndose como un fantasma. Pero sé que no obré bien. Algo me lo decía. Que la había cagado…Salí rápido donde estaba Diego. Corrí y quería escapar de ese baño, para sacarme ese espectro del mal. Solo rogaba que no apareciera con Karen. Estaba Margie con Karen y Javi veía que acababa de llegar cerca donde estábamos. Me acerque sin musitar palabra.

-¿David que te pasa? ¡Estas pálido como una hoja de papel! – preocupada decía mi princesa dulce tocándome la cara por su percepción.

-no…no pasa nada chicos…todo esta bien.

-Si David…ven te abrazo para que te animes... ¿que viste? ¿A un espanto? – Karen se acercó a mí para darme un abrazo. Aprecié perversamente que…todo mi cuerpo se enloquecía y temblaba cuando se me hizo al lado.

-No Karen…no, no- la trataba de alejar de mí pero no daba resultado alguno

-¿pero que pasa cariño?

-¿¡UYY MIREN!? ¿¿¡¡QUE ES ESO!!?? – gritaban a nuestro lado señalando las pantallas del salón.

No…todo el mundo se dirigió a mirar curiosos en cada una de esas pantallas para ver que…

-¡MIRA! ¡MIRA! ES MANTILLA MAMANDO UNA POLLA ¡MIRA! ¡MIRA!

Me congelé. Esa imagen de mí…acostado con los ojos cerrados, con la camisa azul que me puse, abierta de par en par mamando una polla que reconocía muy bien… ¿Cuando pasó eso? González…me tomo fotos…estando yo desnudo cuando…lo hice con él…alternaban dos fotos haciendo lo mismo. El cuerpo de Karen se corría de mi lado despacio. Se cortaba la tensión con una sierra eléctrica. Por mi percepción de las cosas, todo el mundo puso mis ojos sobre mí. Esa sensación de que miles de glóbulos oculares se dirigían a ti en ese momento, me llené de vergüenza. De dolor. De pena.

Recobré el aliento. Mire como Margie y Javi me miraban sorprendidos. Todo estaba en silencio. Ese mutismo mortífero forjó que me derrocara ahí mismo. Pero ver que…Karen se le corría el rímel de sus ojos hizo que mi boca trepidara de aprensión al ver una y otra vez esas fotos. Me dejaban fallecido sin estarlo.

-Como pudiste David… ¿¡¡¡COMO PUDISTE!!!? – gritaba a mas no poder generando un eco en todo el salón. Mi cuerpo sufría un escalofrió helado donde todo…se perdió.

-No Karen… espera yo-

-¡SNAP!

Mi cara…fue destruida por una cachetada, con todas sus fuerzas se resurgió en todo el salón haciendo un ruido desgarrador. Me hirió…fue como un golpe al espíritu. Por cada parte de mi mejilla apreciaba todos sus cinco dedos marcados con fuerza. Margie se tapó la boca asustada sin dejar que todo el mundo desistiera al observar. No me toqué…deje que todo ese dolor me consumiera…y enterarme que…perdí a mi chica cocodrilo.

-No me hables…-seguía llorando pero de rabia. No destine mis ojos a verla. Fue horrible escuchar esas señales malditas e hirientes que me dejarán patente de por vida. Me valía verga que…se dieran cuenta que soy gay… me concernía mas Karen…nunca la vi llorar…nunca. Ver esa foto lo sabía todo. Estuve con su novio.

-¡No me vuelvas a hablar en tu puta vida! ¡MARICA DE MIERDA!

Triste, dolida, herida de haberla traicionado…salió corriendo del salón chistando por su nariz, era un completo judas que se destino a amargarle la vida a mi amiga y… yo al arruinar mi propia vida. Margie remisamente se acercó a tocarme el hombro…miraba desorbitado al suelo… era como un idiota engendro profuso dentro de una burbuja.

-David…

-déjame solo… – solo ande despacio abriéndome todos, un campo para poder marcharme. Todas las miradas se enfrascaban en mi espalda. Cerré la puerta, ver que más gente no me perdía de vista con todas esas imágenes en cada parte. No aguante…Salí corriendo hasta afuera para desertar de todo…de mis ojos emergían cada vez mas lagrimas de dolor…perdi a Karen...ahora..perderé a todo el mundo.

No deseaba ver a nadie. Solo…quería ver…a Diego

//////////////

Fui a comprar un refresco porque me moría de sed y David no llegaba. Salí del baño con mi bebida en la mano. Al ver por ahí, incontable gente reunida en el salón de las bandas. Me pregunte que pasaba…me empotré entre la multitud y ver por ahí a mis amigos por ahí preocupados por lo que había pasado. Margie lloraba y Javi se agarraba con las dos manos la cabeza… ¿que pasó? ¿Qué me perdí?

-Muchachos… ¿pasó algo? ¿Que sucedió?

-Diego no…no te vayas a enojar… - me advertía Javi angustiado

-pero ¿porqué? ¿Porque todo el mundo cuchichea por ahí? – curioso quería saber

-si vieras Dieguin…el tal Mantilla amigo tuyo es marica… míralo por vos mismo como mama el cacorro ese hehehe – Señalaba César a mi lado al ver que…

David…le mamaba la pija a alguien. Había dos fotos como prueba.

El refresco se quebró en mil pedazos por la fuerza que le impregne. Esa imagen…me, me devasto. Ese tipo estuvo con otra persona y yo…deliberé que no me afectaría pero…La rabia se fundía en mi cuerpo sin especular…solo quería buscar a David para-

-Margie Donde esta David…

-Se fue…salió así no mas… porque... ¡Diego! no espera ¿a donde vas? –gritaba Margie mientras me alejaba a pasos agigantados limpiando el refresco de mi mano en mi pantalón.

-A buscarlo…

No me quedaría con esta en mi manos…desataría mi violencia en otra manera. Esas fotos eran la comidilla de todo el mundo. Se reían, se burlaban, hacían chistes al ver a David comiendo ese chorizo de mierda en toda su boca…no sabia que pensar. Enfurecí. Abrí esa puerta de la entrada con talantes.

…tirado ahí con sus pies en el suelo como un muerto, cabizbajo, Sin parar de llorar. Javi y Margie trataban de alcanzarme pero por perversidad cerré la puerta con todo mi ser. Ese ruido concibió que este sujeto impulsado por el sonido se sacudiera al verme. Su cara estaba desolada.

-¿Diego? Diego por favor ayúdame…

Sus pocos ímpetos hicieron que se enalteciera para poder allegarse a mí. Aceleradamente me irradie de cólera y destine a mis manos a causarle daño desabrido. Mi puño fue a toda velocidad rectamente a su mejilla derecha. Con todas mis ganas malditas le pegue sin piedad en su cara alcanzando también su nariz…fue tan duro el golpe que lo deje en el suelo…sangrando por la boca.

Incorporó su cuerpo con padecimiento. Su mirada devastadora llena su cara de sangre por...el golpazo. Lo decía todo …detesto ver tu cara porque…me traicionaste, me destruiste por dentro. Me lo dijiste si...y no te creí. Pero eso no me quita el dolor que llevo dentro de mi corazón.

David… ¿Qué te hice? Por-¿porque te pegue? Afrontando todo lo que sucedía en ese lóbrego instante…se paro y sin verme, agobiado…se fue por la otra ruta, alejándose de mí. No…acabe de colapsar por dentro…involuntariamente caían lágrimas de mis ojos segregando por mi cuello. Por lo que hice…lo perdí para siempre…

-¡David espera!… ¡David no te vayas! – gritaba Margie persiguiéndolo sin perderlo.

Con daño, mire mi manilla con su nombre…se me iba el aire…me aferre a mi cabello con arrebato…padecía de un dolor inmundo que no quería tenerlo.

//////////////

Estuve tirado en una esquina de un callejón a horas tardías de la noche…la manga de mi camiseta estaba llena de sangre. Mis pestañas amortiguaban gotas de lágrimas. Parecía un muñeco de trapo ruinoso en una esquina. Morí al vacío…no valoraba nada a mi alrededor…tenia a Margie haciéndome compañía, pero, la ignoraba…estaba junto a mi pero yo solo lloraba. Dejaba que mi vista se cristalizara de tanto ahogo que me invadía…

Respiraba frenéticamente. Repleto de basura. En esa calle oscura cerca de una casa de alcohólicos anónimos…desdichaba mis penas. Atendía que Margie me conversaba pero… ese golpe en mi cara, fue lo mas devastador que me pudo haber pasado. Recibí toda su violencia en mi cara…una cachetada inolvidable y un golpe imperdonable…

-David…tuviste sexo con el novio de Karen ¿no?... Todo el mundo piensa… que ella por estar así contigo de más que amigos y sus propulsiones…la traicionaste por lo que hiciste. Pero sé que fue ese tipo David…

De mi boca reventada, surgía más sangre, del lado de mi cara. Eclosionado por las luces nocturnas de la calle no prestaba atención…estaba inanimado, ahí tirado sin ninguna disposición de escuchar a nadie…

-Iré a traer algo para curar esa herida…David por favor...no te vayas a ir por ahí…quédate en este lugar – se levantó para correr rápido por las tiendas. Petrificado sin querer afrontar que…todo se fue para el infierno.

No supe cuanto tiempo paso. Las gotas rojas y viscosas se derramaban por mi mentón sin desventura, era acumulable. No supe si dormiría ahí. Solo avistaba el carril para cruzar por la sede de edificios del gobierno. Y más adelante más curvas llenas de edificios enormes.

Alguien…le daba patadas a mis pies…al ver despacio…pude ver que eran por ahí 5 personas alrededor mio. Todos con cara de…

-pareceros…este es el marica…a cascarlo como se merece pues, que los cacorros como este no deben de existir por aquí…

Falleceré…no…duraré

////////////////

-escúchame Diego ¡escúchame! ¡No era razón para pegarle! ¡Ahora quien sabe donde esta! – Agitaba de lado mis hombros para tratar de derivar acerca de lo que le había hecho…Le pegué sin ninguna razón aunque me…haya desertado. Inocente de mis actos pude comprender… que lo que me decía Javi…era cierto

-El…me lo dijo…había hecho algo horrible pero…no le creí porque…no le di importancia y ahora…esta destruido por… lo que le hice

-¡No fue razón para pegarle!

• me tiemblan las manos…tenemos…tenemos que buscarlo… – iracundo daba vueltas por todos lados sin poder apaciguarme.

-Eso trato de hacer…Trato de llamar a Margie pero no me contesta…

-¡mierda Javi vamos ya!! ¡No quiero que le pase nada malo a David! ¡NO QUIERO PERDERLO ENTIENDE!

-¡CALMATE DE UNA PUTA VEZ! – Grito empujándome tratando que pudiera volver en si – yo sé que no está por ahí guevon pero si… ¡si llamamos a Margie sabe donde esta para encontrarlo! – empezaba a temblar y estremecerme como una mecedora rechinante… trataba de ayudarme para ver donde se localizaba mi vida…trate de recomponerme pero…esa inclinación de que deambulaba por ahí sin rumbo fijo no me dejaba subsistir en paz…

-¡Mierda! ¡No me contesta! ¿Puta donde estará?...

-No...Que le vamos a decir a sus papás… no Javier…lo voy a ira buscar ya, no me importa

-¡NO RIASCOS! ¡Riascos espérate! – Salí corriendo sin prestar atención. Corrí todo lo que mas pude gritando su nombre en cada parte de la calle, en cada esquina, en cada lugar…no tuve respuesta alguna mientras que Javi me perseguía tratando de llamar. Cerca se acercó a lo lejos una chica pero no la diferenciaba, me levantaba la mano para llamar mi atención.

-Javi… ¡JAVI! ¡Es Margie! – lo llamaba mientras con sus pasos corría rápido para poder llegar rápido

-¡DIEGO! ¡RAPIDO POR FAVOR! – Gritaba desesperada con la voz entrecortada…corrí, arranqué hasta donde estaba ella. La enganche del brazo sobresaltado. Mi pelo estaba mojado con tanta desesperación. En su mano llevaba unas vendas y agua oxigenada

-Margie ¿¡donde esta David!? ¿¡DONDE ESTA DAVID!?

-¡Esta herido! ¡Ven rápido! NO… ¡NO SE QUE HACER!

No…la tire rápido de su brazo estando Javier por detrás. Comencé a perturbarme. Subsistía sin aire, pasamos por un edificio blanco de alcohólicos anónimos cerca de una calle repleta de basura…no… no. Apreté mis puños viendo como…

Una herida grande residía en su brazo. Su cara estaba llena de hematomas y un morado grave en su ojo izquierdo. La boca repleta de sangre. El quemón de un cigarrillo en su cuello. Había sangre por todos lados...Su camiseta estaba llena de tierra y sangre. Verlo ahí… involuntario. Me desmoronó todos mis sentidos… tenia que socorrerlo como sea…no podía morirse frente a mis ojos. Despoje de las manos de Margie los implementos de salud. La herida de su brazo era leve pero si no se trataba, se infectaría.

-¡Margie! ¡Llama a la línea de emergencias!

-¡¡ya llame!!

-¡¡LLAMA OTRA VEZ!! ¡¡¡ESTAMOS PERDIENDO A DAVID!!! ¡¡LLAMA!! ¡¡MIERDA!! ¡¡LLAMA!!

Arranque las mangas de mi camisa con poderío enlazando la herida generando presión para que no botara mas sangre. Trate de revisar más heridas. Una puñalada en su estomago era pequeña pero salía bastante sangre coagulando en el suelo. No puedo perderlo. No puedo, él es… mi todo…cogí la otra manga y presione la herida limpiándola con el agua oxigenada. Lo lleve a mis brazos para que reaccionara. Sus ojos estaban perdidos, no daba señal alguna.

Con todo el cariño que me quedaba le limpie su cara llena de tierra, sangre y golpes. Con prontitud curaba el quemón de cigarrillo de su cuello. Usaba las vendas para que tampoco llegara a sangrar mas…por reacción sublime me toco mi brazo. A lo cual mire con la cara destrozada. Masacrada por no se quien malparido hijo de puta madre que me lo dejo así. Sus ojos verdes se abrieron sin energías para luchar. Lo acerque a mi, le tocaba su cara.

-D…ie…go…

-¡David por favor!… ¡no te vayas a morir por favor!… ¡vas a estar bien!… ¡no te vas a ir!… ¡vas a estar bien!… ¡Te amo!… ¡eres todo para mi!… ¡no te me vayas!… ¡no me dejes solo!…

-Per…do...na…me

Lo abrace sin abandonarlo. Agarré su cabeza sin soltarlo. Pero su mano…dejo de apretarme el brazo. Mire angustiado apunto de que el amor de mi vida se me muera ahí…tuvo un…desvanecimiento. Por desesperación no pude intervenirlo más…

-No…¡¡NO!! ¡¡DAVID NO!! ¡¡NO REACCIONA!! ¡¡MIERDA!! ¡¡REACCIONA POR FAVOR!!…¡¡NO TE ME VAYAS A MORIR DAVID!!…¡¡DAVID!!…

Con fuerza apreté sus heridas para que desperdiciar sangre y no perderlo…lo abrace con todo mi amor…David…te amo, te amo…no te mueras…

Estoy…Al borde de perderte…

cuando escribi esto...llore a mas no poder. era la primera vez que me sucedia esto y pues. cogerle cariño a esta formidable pareja. hizo que se me encrispara el corazón...por favor no me vayan a odiar...fue duro de escribir. se que surgieron un montón de preguntas y...pocas respuestas. solo espero que me dejen sus opiniones y comentarios abajo o que me agreguen al facebook buscando entrando a mi perfil y darle click al enlace.

se les quiere a todos y...gracias por leer la historia