Dame tequila
Tequila, limón, sal... mal remedio para una herida que no ha cerrado.
Dame tequila,
uno de esos besos tuyos que saben a tequila, limón y sal,
uno de esos besos tuyos que tanto escuecen en las heridas.
Dame tequila.
Perla con sal mi lengua plagada de voces mordidas
echa tequila por mi garganta oxidada de besos
sangra limón sobre cada labio agrietado de olvido
Dame tequila y recuerdos en vaso pequeño,
uno de esos que hacen brillar palomas en tu escote
Dame sal de los mares que bebí de tu vientre
de ésa que sabe a azúcar cuando endulza tu cuello
Dame limón cargadito de saliva y pintalabios
para sentir mil fresas cuando cierre los ojos
Dame tequila. Ahora que nos hemos vuelto a ver como la primera vez,
sólo dos desconocidos viendo la luz en el rincón más oscuro,
sólo dos miradas, esquivas, ladronas, entreteniéndose al tú-la-llevas,
sólo dos borrachos jugando con chupitos de tequila.
Ahora que nos hemos vuelto a ver, dame tequila.
Dame tequila, porque esta noche quiero verte doble.
Doblemente guapa.
Doblemente mala.
Doblemente irremediable.
Doblemente tú.