Currando en Mallorca III

Noche divertida con Rubén.

Durante esa noche, y ya puestos a tono con las copas, Rubén me dijo que iba a mear al baño y me preguntó si yo me estaba meando también.

Sinceramente no es que tuviera ganas de ir a orinar, pero ante semejante solicitud decidí seguirle el rollo y fui a mear.

Cuando llegué al baño me enganchó Rubén y me susurró al oido (hoy te vas a enterar). Directamente me dio un gapo en la cara y me empujó la cara a sus air max diciéndome si esto es lo que querías lo vas a tener..

Estar a sus pies en ese momento, con las air max puestas y oliendo lo que emanaba de allí era exquisito. No pasó ni un minuto y Rubén me dijo q no podíamos seguir la noche allí, se puso a mear y cuando acabó me dijo abre la boca y me echó un poco de meo que fue a parar directamente a la gargante..

Aquello era demasiado para mi, pero estaba tan cachondo que hubiese aceptado cualquier cosa de Rubén. Volvimos a la ozna chill out con los otros dos sevillanos.

Yo no paraba de pensar en lo que había pasado y en lo caliente que me había dejado Rubén al ponerme a sus pies. Al cabo de un rato, uno de los sevillanos dijo que si acabábamos ya la noche y Rubén le dijo que andaba caliente y que le molaría ir a algún "garito de luces". Me preguntó si conocía alguno y me dijo pues vámonos y que estos se vayan a la habitación. Yo no sabía si Rubén iba enserio o solo era una excusa para quedarnos a solas, pero le seguí el rollo.

Pagamos la cuenta. Rubén y yo nos fuimos andando por la zona y los otros dos pillaron un taxi para volver.

Por el camino Rubén me preguntó si era maricón, le dije que bisexual pero muy cerdo. Ël me comentó que también, aunque nadie lo sabía. Me preguntó acerca del tema zapas ya que se había fijado en que le miraba mucho las zapas desde que entré a la habitación el primer día. Le confesé que también entré cuando ellos estaban en la playa y me dijo que era un cerdo y que esa noche iba a darme mi merecido.

Acabamos en una playa donde muchos iban a follar, y allí Rubén me puso a 4 con una zapa suya en mi cara.. ME folló sin piedad hasta que se iba a correr, y me dijo que me amorrase para darme el biberón. Aquella noche fue mágica.

La verdad es que he tenido muchas aventuras en los años que llevo currando en Mallorca, pero pocas como esa. Esa noche Rubén me dio sus calcetines como recuerdo y nos volvimos en taxi...