Cupido en Sus Momentos 2

_______________ ______________

Cupido En Sus Momentos

(ll)

“Entrando en confianza”

  • -¿aquí?
  • -si, aquí está bien – la miró con su mirada triste, y es que hacer el amor con una niña que ni siquiera conocía, que su novia la trate de “zorra” en pocas palabras, que otra mujer la amenace y la golpee, las peleas… todo eso, aceleró sus sentidos, en realidad no se sentía bien.

Ana, abrió la puerta, se bajó en silencio, miró a Kathy pero no atinó a decir nada, cerró la puerta, y caminó por la acera en dirección a su casa, Kathy no arrancó, solo la miró caminar… se veía bien por atrás, era de estatura normal, delgada, su cabello caía libremente por su espalda, y sus piernas eran mas que lindas…

  • -¿vas a quedarte allí?

Y antes de arrancar, escuchó esto

  • -pues, espero a que entres
  • -ok – se dio la vuelta de nuevo y observó su habitación – ya sabes que vivo aquí

Caminó y algo que no supo que era, le impidió continuar… sabia que Kathy estaba allí aun, con su auto estacionado, la casa se veía a oscuras, lo más seguro era que sus padres estuvieran lejos de casa o en la habitación haciendo cosas que ella no quería saber…

Volteó su cuerpo y giró su cabeza, sus ojos se instalaron en la mirada de Kathy, esa sonrisita comenzaba a gustarle, aún no entendía el por qué estaba haciendo eso, pero esa niña le atraía demasiado.

Abrió la puerta sin permiso, se sentó y fijó sus ojos hacia el frente

  • -Ana Torres
  • -Kathy Mejía

Se presentaron las dos, Kathy encendió el carro y se dirigió a un lugar que ni siquiera tenia en mente… sus miradas, jugaban a seducirse, las dos estaban nerviosas.

  • -ella, era tu novia…

Comentó Kathy con su voz mas linda

  • -si… y
  • -no
  • -ah… entonces…
  • -nada serio
  • -comprendo

Asintieron, el retrovisor era grande y permitía la visión de contraria, ahora… los pensamientos volaron, mas allá de lo que pasó después de que estuvieran juntas…. La sensación seguía intacta…

  • -sabes a donde vamos?
  • -no, tu si?
  • -no, ¿te has dado cuenta que hemos pasados dos veces por esta misma dirección?

Kathy sonrió tímidamente, la verdad era que no… estaba demasiado ocupada mirando a la hermosura de niña que tenia a su lado, para pensar en el camino.

  • -A donde quieres ir

Se miraron…

Era fijo ¡el sentimiento es mutuo!

Kathy aceleró y se detuvo en una principal, donde le gustaba ir a pensar y a estar sola, había muchas parejitas, adentró un poco el carro y solo bastó detenerlo para que afirmaran al mismo tiempo; lo que deseaban hacer.

Kathy

Quité el cinturón de seguridad, y fui directo a sus labios… sentía esa necesidad por besarla… me había encantado conocerla… se me hacia interesante, con ese toque de ternura y a la vez de niña traviesa…

Mis manos se van directo a su rostro, me aferro a sus labios con necesidad, la miro a los ojos… ¡Dios que hermosa es! Me olvido de Fernanda y del resto del mundo, sus labios humedecen los míos al mismo tiempo en que tomo los suyos y ofrezco un poco de presión sobre ellos.

  • -ahmm – susurra
  • -tu… me gustas – digo cerca de su oído, lo beso, lo humedezco con mis labios, se deja hacer por mi, bajamos su asiento y me ubico sobre ella, sin importarnos si quiera el lugar donde estamos… no esperen… si me importa…
  • -¿quieres ir a otro lugar?

Me mira, y después mira a su alrededor, reincorpora sus prendas y se levanta

  • -este… si

Me acomodo, la miro de nuevo, se acerca a mi y con sus manos se junta a mi cuello

  • -creo… que después…

Volvemos a la posición anterior, quiero hacerle el amor de nuevo… quiero conocer cada parte de su cuerpo, quiero verla… quiero…

  • -ahora es mi turno – jala mi labio con sus dientes, y un largo suspiro se me escapa…

Dios! Que excitación en la que me tiene esta mujer… fuf…

Me quita despacio, cada una de mis prendas, primero la blusa, y luego baja con paciencia el pantalón… sus manos recorren mi espalda, se colan por debajo de mi sostén, y de este modo; logra deshacerse de él. Los besos continúan, palpo su pecho… beso su clavícula, su cabello cae por mis pechos, me concentro en él, y lo recojo mientras ella comienza a besarme…

  • -Ummmmmmmm… - cierro mis ojos, muerdo mis labios, aprieto su cabello y con mi otra mano, el sujetador del asiento…

Llega a mis senos, los toma con sus manos y hace presión sobre ellos, esto es suficiente para hacerme excitar más, y desde ya puedo sentir sin ni quiera tocarme, que mi lubricación pasa mi limite permitido.

Después de un momento en el que sólo me ofrece caricias, sus labios se enredan en mi piel, su lengua juega con mi pezón, y un escalofrío violento sacude mi cuerpo, la miro y obligo a que me mire… ¿Qué pasa con esta chica? ¿Por qué me gusta tanto si ni siquiera se quien carajos es? Toma mi seno entre sus labios y lo hala ofreciéndome un común y muy particular dolor placentero, Gimo sin poderme contener… vuelve a repetirlo, hasta que cambia de lugar ubicándose en el otro…

Yo, por mi parte me encargo de su espalda, de su cuello, de su cabello… aunque para ser sincera, a estas alturas solo me interesa sentir más de lo que estoy sintiendo.

  • -ufffmhhh …
  • -sabias que tu olor me es muy agradable?
  • -noh… --y su mano derecha baja por mi abdomen, lo acaricia con esa lentitud que me gusta y que a la vez me desespera, esto se me vuelve adictivo; con Fernanda todo es tan sexual, todo es tan… apasionado y ya…

Y siguiendo su mano, baja con sus labios… termina de quitarme mi pantalón, o mejor dicho de bajarme  mi pantalón, besa mi vientre, sus dedos juegan en mi ombligo, los  busco sin entender el por qué de mi instinto y junto sus manos con las mías… llega a mi pubis, me besa tiernamente, para después abrir mis labios…

Me muevo involuntariamente, su saliva se mezcla con mi humedad, el frio que siento al sentirla me obliga a estremecer, comienza con besos leves que aunque sean cortos y pequeños, me suben al cielo… Luego,  ubica su lengua sobre mi clítoris y me lleva a un lugar que nunca antes conocí con alguien más… si es posible, aprieto más de lo debido sus dedos, y ella me apoya con esto, la siento… Dios…mmm… que rico se siente…

  • -sigueh asiii -  susurro, me aferro a su cabello, sus besos toman mas confianza y dejan de ser besos tiernos y pequeños para convertirse en agiles y sensuales…

Sus labios juegan sobre mi sexo y su lengua se abandona a los mas profundo de mi interior, mi cadera sube y baja y con ella, la cabeza de Ana… siento su rostro deslizarse por mi piel… todo va bien, hasta que siento  uno de sus dedos y esto es limite para sentirme más que mejor… y mientras con sus labios me estimula, con su dedo inicia una penetración…

  • -aaaaaammhhh… ¿sabes que me estás haciendo sentir muy, muy bien?
  • -me encanta… por que eso me hiciste sentir a mi

Y vuelve a besarme… su dedo entra y sale sobre mi sexo, cada vez más a una velocidad mas ligera, mis latidos aumentan y mi cuerpo me pide un poco, tan sólo un poco mas para ser victima de la mejor sección sexual, que he tenido en mi vida…

Con mi mano, obligo a que se meta mas en mi, y esto es lo ultimo de lo que soy consiente antes de venirme en un gigante estremecimiento que sacude mi cuerpo con fuerza, suspiro inconteniblemente, y siento cada parte de mi; moverse sin yo misma provocarlo… una sensación satisfecha llega pronto; y lo demuestro en un gran respiro que me deja sin palabras.

Ella, se queda un momento allí, acompañándome en cada sensación provocada por su misma presencia, y después de esto me estabilizo, por decirlo de alguna forma, sube despacio a mis labios…

Miro su rostro, está sudando… sus labios están húmedos…

Quiero besarla…

  • -¿puedo besarte?
  • -si

Me acerco a su rostro, y lo acaricio agradeciéndole por lo que me acaba de hacer sentir, la beso, pero no de una forma exótica ni vulgar; si no al contrario… tierna…

  • -Gracias
  • -Con mucho Gusto – sonríe
  • -pero, esto no termina aquí – vuelvo a besarla – o eso quieres?
  • -pues, muéstrame que tienes – y esa vocecita tierna con esa mirada traviesa me impulsa a quitarle el resto de prendas que quedan sueltas por su cuerpo con la intensión de hacerla mía de nuevo.

Ana

Penetro mi mirada en sus ojos, su esencia me incita a… tantas cosas… ¿Ana por Dios te das cuenta de lo que estás haciendo?

Acerca su rostro, beso sus labios, su lengua se enreda con la mía y con esto, llega un beso como pocos…

Se ubica a mi altura y contempla mi ojos por un largo momento, me mira y sonríe

  • -eres muy linda

Su voz, un conjunto entre niña y mujer a la vez, lo mas femenina posible… estoy sudando, y siento un gran calor interno recorrer mi cuerpo, sus manos juegan en mi pecho, en mis senos… para después, descender a mi entrepierna. La miro, me mira… volvemos a besarnos… siento su mano sobre mi sexo, introduce dos de sus dedos en mis labios vaginales y un largo suspiro se me escapa de forma violenta. La imito, y del mismo modo, bajo mi mano a ella… ambas, iniciamos caricias internas a las mismas velocidades, Mi humedad se cola por su mano con descaro, y del mismo modo, me pasa con ella… deslizo mis dedos por todo su sexo, muerdo su labio, me separo… muerde mi mentón, baja su lengua por mi cuello, cierro mis ojos… su dedo se introduce en mi, expreso en gemidos todo lo que me hace sentir… tenso mis piernas… ¡Dios me voy a venir ya!! Hago lo mismo, siento su cuerpo contraerse mas rápido, ofrezco un poco de presión y un poco mas de velocidad, y exploto al igual que ella, En el mismo momento y del mismo modo. . .

El silencio llega, mi respiración a penas se va estabilizando, mi cuerpo suspira tranquilamente satisfecho, y una sonrisita francamente estúpida nace en mis labios.

  • -¿estás bien? – le pregunto, no me habla… mira hacia el frente, sus ojos son intensos y su mirada es muy directa.
  • -si, y tu?
  • -si…

Reincorpora sus prendas, me quedo intacta viendo su actitud… Ja! Ahora que me va a decir ¿Qué me baje del auto? ¿Qué esto solo se queda aquí? ¡Vamos Ana! ¡no hables como si te importara! Hago lo mismo que ella, y me ubico mejor.

  • -¿Tienes hambre?
  • -¿eh?
  • -pues… o deseas que te lleve ya a casa?

Miré mi reloj, estaba tarde…

  • -ok, te llevo a casa – contestó antes que yo, entendió mi mirada y se lo agradecí en el alma…

Después de esto, ninguna optó por continuar con una conversación, y es que ¿Qué podíamos decir en un tipo de situación así? Hasta el momento, sólo sabia su nombre y que tenia un cuerpo de película…

Me llevó a casa de nuevo, no hubo necesidad de decirle por donde debía tomar el camino; por que al parecer, se había guardado muy bien la ruta para llegar a mi casa. Estacionó el auto, y me miró

  • -Ha sido todo un placer conocerte Ana – sonrió, y tomó mi mano – disculpa por ese lastimón, te juro que no se queda así – señaló mi rostro
  • -no… supongo que debió sentirse muy celosa…
  • -estaba loca

Las miradas chocaron, quería besarla de nuevo… pero sentí un golpe en toda la ventanilla de mi lado.

Volteé asustada a mirar, y Ximena estaba Gritando miles de cosas, que no entendía muy bien.

  • -ay no…
  • -ella si es tu novia?

Bajé mi rostro…

  • -ok, entonces salte de aquí antes de que haga algo peor – su rostro cambió
  • -Oye… m…
  • -adiós Ana – no me miró, Ximena seguía golpeando la puerta, Kathy la miró y antes de yo salir, levantó su dedo corazón, haciéndole un pequeño Fuck You.

Me bajé del auto, Kathy arrancó, Ximena ya ni hablaba… podía ver en sus ojos miles de cosas malas por decirme…

  • -Hablamos mañana – mencioné, me tomó del hombro. Me miró y me pegó otra bofetada

Me di la vuelta y la miré, me ardía el rostro… quería llorar de la ira

  • -¿me crees una estúpida? Pff hay que verte para saber que solo eres una zorra!

Cerré mis ojos, estaba tomada…

  • -voy hacer como si no escuché nada
  • -¿no lo oíste? Z-O-R-R-A – sonrió, y no aguanté más mi ira… no me di mi fuerza, y le devolví en una sola, las dos bofetadas que me había metido

En ese preciso momento, miré el carro de mi papá llegar… se bajaron asustados y me miraron con mis ojos encharcados.. Mi papá me abrazó y mi mamá nos miró a las dos

  • -¿Qué pasa?
  • -sabe que pasa señora? – Miró a mi madre con una risita demasiado chocante – pasa… que… su hija… es esto – me señaló – una vulgar, una mujerzuela, una… Puta! – y se fue

Me quedé helada, tenía tantas cosas de gritarle, pero no tenia razón, no valía la pena… Dios… que me digan de todo pero eso? …

  • -Ana, pasó algo?

Preguntó mi papá, con su particular aire de precaución

  • -nada, no quiero hablar – saqué mis llaves y me dirigí a la puerta

Hoy, esta noche, había pasado demasiadas cosas que todavía no alcanzaba a digerir bien, mi estomago me gritaba por dentro, mi cabeza comenzaba a darme vueltas, el sueño me acurrujó en sus brazos y no pude hacer mas que acostarme a dormir.


( Día siguiente)

Ana se levantó con un fuerte dolor en su cabeza, sus tragos mas todo lo que había vivido la noche anterior, le pasaban una factura bastante alta.

Tomó sus zapatillas, y se dirigió al baño, vio que casi todo estaba empacado y recordó la conversación suya con sus padres, la semana pasada. Hoy se pasarían de casa. La verdad, no quería eso, no tanto por el lugar donde vivía, sino por el contrario, tendría que pasarse de instituto y eso si que era un gran problema para ella.

Bajó las escalas, y se encontró con su madre, hablando por teléfono, su papa´ estaba afuera recogiendo todo…

Esperó a que su mamá colgara y…

  • -¿por qué tanto afán?
  • -son las 3 de la tarde Ana
  • -¿enserio? – buscó algún reloj para confirmar lo que acababa de escuchar
  • -¡enserio! Así que organiza tus cosas que en una hora partimos

Tampoco sabia como seria su nueva casa, la verdad es que no quiso ir a verla antes, prefería que fuera una sorpresa y si en el peor caso, no era lo que se imaginaba pues, no cargaría con ese “Karma” todos los días, antes de pasarse.

Subió a su habitación, se dio un largo baño, y se puso ropa cómoda, no sentía la necesidad de despedirse de nadie que viviera allí cerca, ya lo había hecho de sus amigas prometiéndose, como siempre; llamarse y no olvidarse… si, si, algo muy dramático para sólo cambiar de barrio.

Y después de organizar su ropa y sus cosas mas intimas, bajó lista para cambiarse de hogar, eso ya no le impresionaba, en un año habían cambiado de 3 casas… así, que todo era costumbre.

//

Kathy, por otra parte no tenia ni las mas mínima intención de levantarse de su cama, miró su celular, 20 minutos la separaban de las 5 de la tarde (17:00) estaba sola en casa por que sus padres se habían ido de shopping, así que no había nadie quien la molestara por seguir en cama hasta esta hora… bueno, eso pensó antes de escuchar el timbre.

  • -¡Maldición! ¿Por qué no llevan llaves? – se dijo así misma algo molesta, se dirigió a la puerta, abrió de mala gana, no se había visto siquiera en un espejo para ver como estaba… alzó su mirada y observó a una Fernanda ligeramente seria, molesta y directa. Tragó saliva, ahora todo lo que había sucedido anoche, llegaba a su mente.

¡Si que fue una noche extraña!

  • -¿Qué haces acá?

Fernanda la tomó del brazo, exigiéndole de la manera mas violenta una explicación

  • -¿Quién rayos te crees Kathy?

La miró, la paliza que le había metido a Ana en verdad fue brutal

  • -no quiero hablar contigo

Fernanda comenzaba a desesperarse, el genio de Kathy mas el orgullo no eran exactamente lo que mas le gustaba de la niña.

  • -¿Quién era esa? ¿Por qué te acostaste con ella? ¿Me ves cara de estúpida?
  • -en primera, se llama Ana, pensé que eras tú, yo había organizado todo para las dos, pero como siempre llegas tarde mira lo que pasa, no sabia que era ella… - bueno, esta explicación era muy poco creíble, y en primera por que ni ella misma se la creía, ahora que lo pensaba mejor, sabia bien que desde que besó a Ana se había dado cuenta que no era Fernanda.
  • -claro y  yo te creo

Fernanda es docente del instituto donde Kathy cursa su último año, dicta clases de artes, desde que entró mantuvo una relación secreta con Kathy, desde el primer momento le gustó, ahora llevaban casi un año con esta “Semi-relacion” y sus celos por esta niña, incrementaban muy considerablemente, le encantaba… quería tenerla para ella y nadie más, demasiado posesiva, ella misma lo aceptaba… …