Cupido del sexo

Cupido del sexo

Me considero una chica normal que sabe disfrutar del sexo, estudio todo el día por lo que las mañanas se me tornan a veces algo pesadas, la universidad y los trabajos toman parte de mi día. De la tarde a la noche de a ratos me dedico a descargar archivos para mis temas de clase o para mis trabajos encargados y en ese breve lapso chateo con chicos y chicas de diferentes partes de América. Así conocí a mi amigo venezolano, al que llamaré Max, acepté la invitación y de inmediato me abordó:

• Hola Angie, me encantó tu relato.
• Gracias amor.
• Debió haber sido maravilloso tener sexo con tu hermano.
• Ni te imaginas amor.
• Has fantaseado alguna vez con alguien así.
• Si, Angie. Tengo una hermana que tiene un buen culo y me la quiero tirar.
• No me echarías una mano. Aconséjame, qué debo hacer.
• No te preocupes amor, te ayudaré.
• Dime, cómo te llevas con tu hermana.
• Para ser sincero no nos llevamos bien.
• Mal síntoma amor, debes llevarte muy bien con ella, tratarla bien, que sea tu princesa.
• Ese será tu primer paso, llevarte bien con ella.
• Está bien Angie y después.
• Tienes que ir despacio amor, si no la asustarás.
• Dime amor, alguna vez se han quedado solos en casa.
• Sí, en las tardes casi siempre nos quedamos solos.
• Qué ropa usas amor.
• Me gusta usar bóxers para estar más cómodo.
• Bueno amor, la próxima vez que se queden solos usa el bóxer más ajustado que tengas donde se te marque bien la verga grande y dura que tienes. Paséate delante de ella sin decir una palabra.
• Hazlo casual, trata que te mire el bóxer para que se imagine como la tienes amor.
• Ok, Angie, lo haré.
• Dime amor, cómo tienes esa verga, dame gusto.
• Si supieras que mientras hablamos se me ha puesto dura de imaginarme con mi hermana.
• A ver amor, no seas tímido.

En ese momento, veo en la pantalla el mensaje de video llamada, hago click en aceptar y lo que vi me gustó mucho, la tenía grande y algo gruesa, con solo verla se me mojó el coño. Estaba, mi amigo del chat tan excitado que se masturbó delante de cámara y me dio un gustazo.

Al día siguiente mi amigo y yo conectamos nuevamente, me dijo que ya había hecho las paces con su hermana y se paseaba en bóxer por la sala de su casa para que su hermana se diera una visión de su verga. Y nos enfrascamos en cordial coloquio:

• Hola Angie.
• Hola amor. Hice lo que me sugeriste, no pasó nada.
• Vamos amor, no esperarás que se te tire a la primera.
• Dime amor, te ha visto con tus bóxers puestos, te vio la verga marcada.
• Por un segundo creo que si, la verdad casi ni me di cuenta.
• Vamos amor, debes fijarte en los detalles.
• Bueno amor, para mañana hazle conversación sobre cualquier tema, el tema es lo de menos. Lo importante es que regrese a mirarte y te vea la verga bien marcada y mírale los ojos, qué gestos hace.
• Está bien Angie, lo haré.
• Y si puedes amor, avanza un poquito más, sóbate la verga por su culo o sus piernas o alguna parte de su cuerpo, que parezca casual, y notas su reacción.
• Mmmm, ok Angie, no se si pueda, pero lo intentaré.

Y así transcurrió otro día entre mis actividades rutinarias y el esperado chat con mi amigo. Cuando entré al chat, él ya estaba conectado para contarme las últimas del día:

• Hola bebé, como estás hoy.
• Ahí amor, tranquilita y pensando en ti.
• Cuéntame amor, como te va con la nena.
• Si supieras bebé, hice lo que me dijiste. Y se me presentó una oportunidad.
• Cuando bajé a tomar desayuno, la vi de espaldas leyendo algo, con el culo paradito y yo tenía que pasar por ese lado y estaba estrecho.
• Y amor, que pasó
• La verga se me puso dura, me decidí, pasé por su lado, y le sobé mi verga por su culo, qué rico bebé.
• Y que pasó después amor.
• Cuando, ya había pasado por su lado, me dijo: buenos días y salió.
• Y nada más amor.
• No, Angie, nada más.
• Para la próxima vez, amor, si se te presenta la oportunidad, haces como que te caes y te sobas la verga en su culo, pero esta vez re refriegas bien, y haz como que no pasa nada.
• Estoy que no aguanto, ya me hecho varias pajas en su nombre.
• Ve con calma amor, vas bien hasta ahora.

Así transcurrió otro día, lleno de deseos y de momentos de ensueño de su parte y de las ganas de estar ahí con él para verlo y excitarme toda. El día se hizo corto y en la noche, de nuevo en el chat:

• Hola Angie, quieres que te cuente lo que me pasó hoy.
• Claro amor, cuéntame.
• Pues hice lo que me sugeriste. Le refregué bien la verga en su culo. Y hasta creo que gimió un poco. Después volteó a verme y me la vio, la tenía dura.
• Se nota que le tienes ganas a la nena.
• No te dijo nada amor.
• No, nada, ya no se me ocurre nada Angie, ayúdame bebé.
• Esta bien amor. Dime ella chatea.
• Se encierra en su cuarto con su laptop.
• Uhm, si tanto se encierra es por algo, no crees. Le gusta ver páginas porno.
• no lo sé, quizás si.
• Por qué no me das su correo, la agrego, chateo con ella, a ver que conclusiones saco.
• Está bien dame su correo. Diem donde está ella.
• Está encerrada en su cuarto como siempre.
• Y tu amor, estoy acá por mi sala, en otra PC.
• Ok amor, déjame agregarla y luego te cuento.
• Ya, Angie, te aceptó.
• Si amor, pero déjame hablar con ella.

Luego de la aceptación de ella a mi invitación para chatear, nos saludamos:

• Hola amiga.
• Hola, quien eres ah.
• Soy Angie, de Perú.
• De donde eres amiga.
• Soy venezolana.

Por su Nick de correo supe que se llama Andrea.

• Tienes un lindo nombre amiga.
• Gracias, y como así te agregaste a mi correo.
• Debe ser por las redes sociales amiga.
• Además me gusta escribir y quizás uno de mis escritos te ha llegado.
• Escribes, qué escribes.
• Relatos amiga.
• Sobre que ah.
• Sobre amor y sexo.
• Causalmente tengo uno donde un chico hace el amor con dos chicas.
• Pero a mi no me gustan las chicas, eh.
• El hecho que lo leas no significa que tengas que ser así. Sólo es para sentirse bien nada más.
• Te doy el enlace si quieres y me comentas luego, qué dices amiga.
• Está bien amiga envíamelo.
• Pero antes de enviártelo, sin que me tengas que decir cuántos años tienes, eres mayor de edad.
• Si lo soy.

Entonces busqué en la página de todorelatos.com, la parte de amor filial. Tomé el link de un relato que me publicaron y se envié.

• Ahí está amiga, léelo y me comentas.
• Está bien lo leeré.

Luego de varios minutos en que creí prudente ya lo hubo leído, le pregunté:

• Lo leíste amiga.
• Sí, pero no me dijiste que el chico era tu hermano.
• Y que más da, solo disfrutamos del sexo.
• Sí pero eso me descolocó.
• Vamos, amiga, no me digas que no has fantaseado alguna vez.
• Sí pero es tu hermano.
• Quien mejor que mi hermano, que me engríe, que me cuida, jamás me hará daño, siempre está pendiente de mí.
• Sí, pero es tu hermano.
• Sólo nos llevamos bien
• Diría que más que bien.
• Es que yo también tengo un hermano.
• Haz tenido fantasías con tu hermano.
• No se si contarte, pero lo voy a hacer porque no tenemos amigos en común.
• Sí, he tenido fantasías con mi hermano.
• Cogiendo con él.
• Sabes el otro día me sobó su cosa por mi colita, se la sentí bien dura.
• Te gustó
• Si me excité.
• Cada vez que puede se me soba y se la siento bien dura, parece que la tiene grande.
• Se la has visto.
• No, pero por su bóxer se le ve grande.
• Seguro que es por ti, tú lo excitas.
• No creo, así se le pone a los hombres siempre.
• No amor, seguro le gusta tu colita, debe ser buena sin duda.
• Sí, me lo han dicho, algunos.
• Y tu hermano que tiene tu colita a la vista seguro que se excita por ti.
• Cuántas masturbadas se ha hecho en tu nombre.
• Tú crees.
• Oye porque no lo provocamos un poquito, a ver que pasa.
• Qué hago, Angie.
• Porque no le dices que te haga un masaje, así se la verás bien de cerca para que sepas si la tiene grande.
• Tengo miedo
• ¿Por qué?
• Es que si se me pega mucho y me excite rápido.
• Y qué amiga, no le hacen mal a nadie.
• Hazlo amiga, ponte una faldita, y me comentas después.
• Ok amiga, me tengo que ir, te dejo.
• Bye amiga.
• Nos vemos mañana para que me cuentes.

Al salir del chat me esperaba ansioso, mi amigo Max, el hermano de Andrea:

• Dime Angie, que te dijo.
• Sí amor, ha fantaseado contigo. Dice que te la visto por encima del bóxer y que parece que la tienes grande, que cuando se la sobas por el culo se excita, y tiene miedo de excitarse contigo.
• Oh, bebé, si supieras como la tengo, creo que me voy a correr.
• Sabes amor, le dije que te pidiera un masaje. Así que prepara bien esas manos y ponte un bóxer ajustadito para que se la sobes bien. Le dije que usara faldita para que des una buena visión, amor.
• Tu crees que lo haga
• Bueno si no me quiere como amiga me eliminará de sus contactos, eso significa que no va.
• Oh, bebé, si supieras como la tengo.
• Para que imaginármelo amor, muéstremela por cam.
• Quieres verme masturbarme amor.
• Sí amor me encantaría, vértela toda entera, lo que tu hermana se va a comer.

Y otra vez como siempre me pone cámara web, le veo su gran verga y me empiezo a excitar, mientras él se masturba para mi, yo me toco toda, me meto el dedo al coño, imaginando que tengo una verga dentro, su verga. Con su corrida y las despedidas nos salimos del chat. Pasó un día y no tenía noticias de ninguno de los dos. Al segundo día, desde nuestra última conversación, recién se conectó mi amigo.

• Hola amor.
• Hola amor.
• Cómo estas?
• Que me cuentas amor
• Amor ni te imaginas
• Me fue excelente, increíble.
• Se hizo el masaje.
• Amor el masaje y mucho, mucho más.
• Qué más amor
• Cuéntame
• Te cuento todo amor pero tu sabes como me pongo al final y que no me gusta quedarme así.
• Ok amor
• Me dirás muchas cosas ricas amor?... porque he estado excitado todo el día bebé.
• Dime como te fue amor.
• Amor fue increíble.. Todo se dio justo
• El día partió así:

Me levante pensando en ella y como pensé que estaba solo en la casa me levante solo con bóxer ajustado y sin polera. Al llegar a la cocina ella estaba con unos pantaloncitos cortitos y un polo que le llegaba hasta arriba del ombligo, también muy ajustada. De solo verla, se me puso la verga dura y estaba apoyada en la mesa, como los días anteriores pero ahora estaba con su colita aun más parada. Me miró directamente a los ojos y luego bajo su mirada a mis bóxers sin ningún pudor. Y luego siguió comiendo. Yo tenia q pasar por detrás de ella como siempre, pero ahora lo hice descaradamente. Le apoye mi verga en su cola con tal excitación, que ella echó mas para atrás la cola y con los ojos cerrados soltó un pequeñísimo gemido. Luego ella se levantó me miró la verga y se pasó la lengua por los labios de una manera increíblemente sexy, se dio media vuelta y se fue, y me dejo ahí. No lo podía creer.

Tome mi desayuno y me dirigí a la ducha. No aguante mas y tuve que masturbarme mientras me duchaba pensando en mi hermana, y así paso mi mañana ayer sin mayor novedad.

Pero en la tarde, nuestros padres tuvieron que salir y nos dijeron que no llegarían hasta bien tarde porque irían a visitar a unos tíos. No le di mayor importancia y se fueron, estaba viendo televisión en la tarde en el living. Y llega ella con una faldita cortísima y un polo blanco ajustado, y me dice que le hiciera un masaje en su espalda. Le dije que se quitara el polo para hacerlo mejor, y fui por aceites para masajes que tenía en el baño, se acostó boca abajo en el sofá, y yo me puse sentado sobre su cola con la intención que sintiera toda mi verga, comencé con el masaje, bien lento y suave al comienzo. Ella gimió, mmmm que ricas manos que tienes hermanito, eso me puso a mil amor. Después de un rato me animé y le dije que se quitara el sujetador para hacerlo mejor, sin decir nada ella se lo quito, dejándome desnuda su espalda, seguí con mi masaje bebé, solo que ahora me animé a hacerlo más por el costado, tocando suavemente el costado de sus tetas, como ella no dijo nada lo seguí haciendo, y cuando llegaba a sus hombros, me estiraba hacia adelante para sobarle bien mi verga en su cola, se la coloqué muy, muy bien, muy rico sentir esa cola en mi verga amor. Seguí con eso durante harto tiempo, tocándole las tetas y sobándole mi verga, que la tenía mas dura que nunca, terminamos y ella dijo que quedó llena de aceite, que tendría que quitárselo con una ducha, y yo le comenté que también quedé con las manos con aceite... Que la quitaría en el baño del segundo piso. Ella me dijo que no fuera tonto y q me diera una ducha también. Le dije que bueno... que esperaría que ella la desocupara, ella dijo algo increíble:

• No seas tonto, ¿acaso te avergüenza darte una ducha conmigo?

Creí que explotaría amor, le dije que claro que no y nos dirigimos al baño, entramos juntos al baño, y ella comenzó a sacarse la faldita, llevaba una tanga increíble amor, pequeñísima de color blanco, pensé en cogérmela ahí mismo bebé. Luego se quitó el sujetador y me dejó a la vista las tetas mas increíbles que haya visto. Mi hermana era una diosa, yo estaba congelado. Ella me dio la espalda y se fue quitando el tanga muy lentamente al mismo tiempo que se agachaba. Yo no lo podía creer, y ella me dijo:

• ¿Que esperas?

Y comencé por quitarme mi polo, luego me quité el pantalón, me quedé en bóxers un momento. Ella no le quitaba los ojos de encima a mi verga amor, parecía que quería devorársela. Me quité los bóxers mientras ella me comía con la mirada, y dejé mi verga como piedra afuera, ella abrió los ojos y solo dijo:

• wow hermanito

Se dio media vuelta y se metió en la ducha. Yo al momento la acompañe, y veía como el agua recorría todo su cuerpo amor, mi hermana era una diosa. Ella comenzó a pasarse el jabón muy sexy, por sus tetas, yo solo la miraba sin hacer nada. Me preguntó si no me iba a pasar el jabón yo, y dijo:

• No lo hagas, mejor lo hago yo.

Me dijo q me pusiera de espaldas a ella, y ella comenzó a pasarme el jabón por mi espalda. Ella siguió en mi espalda, y luego pasó sus manos con jabón por mi pecho, y al hacerlo se pegó a mí, pude sentir sus tetas en mi espalda, riquísimo amor. Fue bajando lentamente por mi estómago y me dijo al oído:

• ¿Se te pone así de dura por mi hermanito?
• Síiiii
• Me encanta ponerte así hermanito, me gusta que te pongas duro por mi, me excita muchísimo.

Luego fue bajando lentamente, y me cogió suavemente los huevos, sin tocarme la verga, me los sobó riquísimo amor, estaba por explotar. Pasó su lengua por mi oído, y justo en ese momento me agarró la verga, casi me caí de la excitación amor. Y comenzó a mover su mano muy lentamente de arriba abajo. Yo gemía mucho, y me dijo al oído:

• Que dura que la tienes hermanito, me encanta que esté así de dura.

Siguió masturbándome por un rato, hasta que se detuvo, y me dijo:

• Me encanta cuando pasas tu verga por mi colita hermanito, me encanta sentirla en mi culo. ¿Quieres sentir mi colita en tu verga?.

No lo podía creer amor, era todo muy excitante, ella se giró, y paró su colita apuntando a mi verga, la tomé por la cintura, y comencé a sobarle mi verga por sus nalgas, la mejor sensación del mundo amor. Ella gemía muy rico, con una mano se comenzó a masturbar, y con la otra me tomó por el cuello. Yo levante mis manos y le agarré las tetas, las jalaba hacia a mi, y seguía sobándole la verga, sintiendo su rico culito mientras ella se masturbaba, estuvimos así unos 10 minutos, cuando le dije que estaba por estallar, ella dijo:

• Yo también hermanito, hagámoslo juntitos.

Comencé a moverme más rápido, le apretaba sus tetas, cuando estaba por estallar completamente, ella gemía riquísimo, le eché toda mi leche en su colita. Ella alcanzo el orgasmo, y se giró, me tomó la verga con la mano y nos dimos un beso calientísimo, nos comíamos los labios, le pasé mis manos por su culo. Salimos de la ducha, y mi verga seguía durísima. Ella se sorprendió y dijo:

• No podemos perder una buena verga como esa.

Y me llevó de la verga al sofá, me empujó, y ella dijo:

• Ahora si que vas a disfrutar hermanito.

Se arrodilló en el piso entre mis piernas, y lentamente se acercó a mi verga, comenzó por la cabecita, lentamente, pasaba su lengua lento, me la chupaba riquísimo, pasaba su lengua desde abajo hasta arriba, me masturbaba lentamente con su mano, me miraba a los ojos y decía:

• Que rica verga que tienes hermanito... de haber sabido antes te la hubiese comido siempre.

Me la seguía chupando rico, quería tragársela toda, pero no podía. Cuando ya sentí que iba a acabar de nuevo, la tomé de la cintura y la tiré en el sofá, le abrí lentamente las piernas y me acerqué a su coñito lentamente besándole las piernas, le di pequeños besitos a su coñito, ella gritaba y comencé a comérselo, le pasaba la lengua de abajo hacia arriba, con mi lengua busqué su clítoris y comencé a morderlo suavemente, ella gemía como loca, me tomaba por el pelo y me apretaba contra su coño, arqueaba su espalda para que se lo comiera mas, gritaba rico.

• Mmmm así hermanito así.

Su coñito sabia a cielo bebé, sentí que ella se arqueaba más y aumentaba los gemidos, hasta que alcanzo el orgasmo. Ella seguía caliente y yo tenía la verga durísima, me senté en el sofá y ella abrió sus piernas y se sentó en mi verga, se levantó un poco, apuntó mi verga a la entrada de su coñito y lentamente fue bajando hasta que le entró toda. Nos dimos un beso riquísimo, y comenzó a moverse, gimió de gusto, gritaba de placer amor, yo la tomé por el culo, la movía hacia arriba y abajo, se movía increíble amor. Era toda una experta, aproveché de comerle las tetas, se empezó a mover mucho más rápido y gritó que estaba por acabar, le dije que yo también, gritó:

• Así hermanito, ya estoy, ya estoy.

Hasta que exploté, echándole toda mi leche en su coñito, al mismo tiempo ella apretaba mi verga al alcanzar su orgasmo, nos detuvimos un momento y ella se sentó al lado mío. Mi verga seguía dura amor! Ella se sorprendió y dijo:

• Todavía la tienes dura hermano.
• Bueno tendremos que hacer algo para bajártela

Y subimos a su habitación. Me echó en la cama, y comenzó a comerme la verga nuevamente, era una diosa, se la comía toda. Yo la tomé por la cintura y quedamos en un 69 perfecto, estuvimos así por más o menos media hora, cuando ella acabo en mi cara. Luego se puso de espaldas en la cama y me dijo que le pasara mi verga por las tetas, ahí pensé que explotaría, comencé a cogerle las tetas y pasaba mi verga en medio de sus tetas, mi hermana es una diosa del sexo amor. Cuando estaba por acabar, le dije que se pusiera en cuatro, lo hizo, y levantó la cola hacia mi verga, le agarré el culo con mis manos, se lo toqué rico y la tomé por la cintura, apunté mi verga a la entrada de su coñito y de un solo golpe se la metí, ella gimió como nunca, comencé un mete y saca durísimo amor, ella gritaba

• Así hermanito durísimo, así me gusta.

Yo estaba por explotar, la agarré de las tetas y se lo metía mas duro, la tomé de la cintura y la levanté hacia a mi, ella se agarró de mi cuello, y se lo seguía metiendo, estuvimos unos 20 minutos así, hasta que sentí que estaba por acabar, le dije al oído:

• ¿Puedo acabar en tus tetas hermanita?

Se acostó boca arriba, y dijo:

• Pero claro hermanito puedes hacerme lo que quieras, soy toda tuya cuando quieras.

Así que comencé a masturbarme con sus tetas, increíble, hasta que exploté, le eché toda mi leche en sus tetas bebé, salió tanta que hasta un poco le cayó en sus labios, se lo relamió, se levantó y me dejó la verga limpiecita. Así nos quedamos un momento, y ordenamos la casa. Unas horas después, llegaron nuestros padres.

Exquisito amor, fue lo mejor. Pero me hizo prometer que si quería que se repitiera, no se lo dijera a nadie.

• Sin duda amor, que pasaste un maravilloso día. Me has dejado caliente.
• Ahora la tengo dura, amor.
• Quieres verme como me masturbo, para que te masturbes igual amor y lo hagas pensando en mí.
• Sí amor, lo deseo

Conectó la cámara web, se hizo una masturbada riquísima, pude ver que la tenía grande y dura, se me antojaba. Hasta que vi como brotaba lechita de su rica, grande y sabrosa verga que había disfrutado de un coño fraternal y ahora me deleitaba con tan bella imagen.

Ahora que tienes a la nena a tu lado, espero sepas cuidar bien de ella amor.

• Por supuesto amor, es la mujer que más deseo.

La charla por el chat se había tornado picante, estaba con mis dedos que me los metía en el coño con demasiada insistencia. Necesitaba algo dentro de mí. Mis padres estaban en casa, mi hermano en su cuarto y yo en el mío con el coño mojadito. Con mucho sigilo, me dirigí hacia la habitación de mi hermano, lo desperté, metí su mano dentro de su trusa y lo empecé a masturbar, se la chupé con muchos deseos. La tenía cogida con mis dos manos y con la boca le lamía la cabeza y de vez en cuando me la metía en la boca, subiendo y bajando mi cabeza de su verga, hasta que se le puso dura y grande como a mi me gusta. No esperé a que me comiera el coño que era lo que tanto me gustaba. Me quité toda la ropa, me subí encima de él y me ensarté su verga en mi coño en un segundo. Estaba encima de él, con mis piernas dobladas en la cama, erguida de la cintura para arriba pero clavada a su verga. Me tocaba las tetas yo misma, me empecé a mover de atrás para adelante muy rápido, el sostenía mi cuerpo por mis caderas. Estaba calientísima, me movía a la velocidad del rayo. Él estaba fijo y mis movimientos eran desenfrenados como si la vida se me fuera en ello. Me sujetó de mis nalgas, yo seguía tocándome, las tetas, el cuerpo, cabalgando sin cesar, que se me fueran las fuerzas en ello. Estaba poseída por la lujuria, cuando sentí que estaba a punto de estallar en un orgasmos me moví tan rápido como pude y sentí como su leche inundaba mi coño, me dejé caer sobre él y junté mis tetas a su pecho, lo abracé del cuello y le di un cálido beso.

• Gracias hermano. Tú siempre me haces feliz.

Me quedé recostada sobre su pecho con su verga fláccida metida dentro de mi coño y descansé un momento.

Al día siguiente mientras estaba por la tarde realizando mis trabajos habituales de la universidad, me encontré en línea con Andrea. Ella me confesó el maravilloso día que pasó al lado de su hermano. Me comentaba que en los momentos que se quedaba a solas con su hermano le cogía la verga y se daban maravillosos besos cargados de deseo, ella se sobaba cariñosamente el culo sobre la verga de su hermano. Y en la mañana al saberse sola, se dirigió hasta la habitación donde estaba su hermano y lo despertó con una genial mamada, y cogieron con gran pasión como si se tratara de una cabalgata salvaje. Pronto se dirigieron al baño para darse unos baños juntos y ahí de cara a la pared, con la visión de su culo hermoso la penetró y un nuevo día de amor y sexo empezaba a nacer para ellos dos.

Toda esta charla me puso caliente, estaba en casa con mis padres y hermano. Me empezaba a masturbar, tenía mis dedos metidos en el coño. Con muchas ganas, salí de mi cuarto con la intención de llamar a mi hermano delante de mis padres para que supuestamente me arreglara algunos programas de al computadora, él no se hizo esperar. Dentro de mi habitación le di un gran beso, donde nuestras lenguas jugueteaban y nuestras manos tocaban nuestros cuerpos. Tenía puesto mi short y debajo de él mi tanguita, un brasier y mi polito. Así que me quité todo, él se bajó la trusa, se sacó la verga, me abrió un poco las piernas y ahí pegada a la pared, de pie, me la metió de un solo golpe. Con las piernas ligeramente dobladas, agarrándome del cuello, me dio con fuerza y con una velocidad como de rayo, me liberó de mis calenturas. Ahí quedé como clavada a la pared mientras él me sobaba la verga en mis piernas tratando de dejarme hasta la última gota de su semen. Y ustedes chicos, hermanos cariñosos y gozosos que me expresaron sus inquietudes bienvenidos al círculo del amor filial.