Cunningulis

Esta es mi experiencia con el hombre que me comió la concha como ningún otro ha podido hacérmelo.

CUNNINGULIS

No sé de dónde surgió mi obsesión por los hombres mucho mayores que yo; creo que tiene que ver con un amigo de mi papá, él siempre iba a casa, por una cosa u otra siempre estaba ahí o en la de mi tio que vivía por ese entonces a lado. Saben una cosa? nunca supe cuál era su nombre verdadero, porque todos le decían "Mono" vaya uno a saber porqué! jajaja ahora que lo pienso, debe ser porque siempre andaba agarrándose de la soga, jajaja. Bueno, decía era muy chica cuando él frecuentaba mi casa, tendría unos 8 u 9 años maso menos. él era de suma confianza para mis familiares uno más de la familia.

Tendría unos 50 años, flaco, de piel tostada.. me llamaba mucho la atención el color de su piel, porque no era morocho sino más bien negrito tostado, de pelo corto y canoso. Tenía muy buen humor siempre, era muy gracioso. Era amable con todos y sobre todo muy amigo de mi papá y de mi tío.

Al principio yo nunca me di cuenta de sus intenciones cuando él me tocaba, a escondidas claro, él siempre me decía que yo era su "sobrina" preferida, me alzaba o jugabamos, el hacía de caballito y yo encima de él, en esos juegos no perdía la oportunidad de rozarme con sus  bruscas manos, me hacía cosquillas y a mi... me gustaba su compañía. Después de todo ese toqueteo, me daba plata y me decía "porque sos una nena buena, tené andá a comprarte los chocolates.. que tanto te gustan.... pero no le digas a nadie que yo te doy plata, ni le muestres a tus hnas". La verdad que él me hizo sentir muchas cosas... cuando me tocaba por abajo de la falda sentía esa sensación rica, y no quería que lo dejara de hacer. Así transcurrió mucho tiempo.. solo eran toqueteos de él hacia mí. Nunca me pidió que yo le tocara. Nunca.

Las cosas pasaron a más, un día en que me estaba volviendo a casa porque no tenía clases y justo lo encuentro a él en la carnicería, me saludó y me preguntó porqué no estaba en la escuela. Entonces le conté que me volvía porque no iba mi maestra, tendría por ese entonces 10 años, me pidió que lo espere que él compraba la carne para llevársela a mi abuela y luego él me llevaría a un lugar. Asi que me dejó esperando en la plaza que está cerca de mi casa.

Cuando  volvió nos tomamos un colectivo, me acuerdo que me dijo, sacate el guardapolvo y metelo en tu mochila, nadie sabe que no tenés clases... no te preocupes. Así que me llevó a su casa, era un lugar muy chico, con pocos muebles.. me acuerdo que en el fondo tenía un gallinero porque se sentía mucho el ruido de las gallinas. Estaba todo limpio.. pero me parecía una casa vieja y vacía. Me llevó a su cama, primero me compro una coca chiquita y me dijo que si hacía calor me podía sacar la ropa.. que total no me iba a ver nadie, yo le pregunté para qué veníamos aquí, me dijo no me preguntaste dónde era mi casa?  bueno esta es mi casa, estamos solos, así que podemos jugar todo el tiempo que quieras, hasta que sea hora de salida de la escuela, luego yo te llevo... no hay problema. Entonces me hizo sentarme en sus piernas y me empezó a hacer lo de siempre... pasaba sus manos por mis piernas, me acariciaba primero suave y luego más fuerte yo miraba su expresión en la cara y se lo notaba muy concentrado... como si no quisiera perderse ningún detalle de mi piel. Cada vez me gustaban más su caricias, hasta que llegaba su mano a mi conchita, por encima de mi bombachita.. me hacía sentir como cosquillas y me mojaba, mientras él me decía al oido despacito "sos muy linda, cuando seas grande te va a gusta mucho que te toquen" y respiraba agitado, luego ponía su lengua en mi cuello y sentía como que me raspaba.. sus manos en mi pecho como estrujando, recién empezaba a crecerme los senos... Me recostó así como estaba vestida con una remera y una pollera.. no me sacó nada, solo la bombacha cuando me puso a la orilla de la cama me levantó la pollera y me dijo que no me moviera, yo le hacía caso a todo, entonces puso mis piernas encima de su hombro una a cada lado, y me metió su lengua ahí.. donde tenía muy mojado, me chupaba la concha con tanta devoción que yo sentía que me estaba comiendo... sentía tan rico eso, el me pedía que le dijera "papito chupame la conchita" decía decime así que eso me gusta... yo repetía "papito chupame la conchita" y el empezaba a hablar.. no le entendía bien porque nunca sacaba su boca de mi concha ... pero decía, mi nena te gusta? así te voy a hacer siempre... no le digas a nadie que yo te chupo la concha, porque se van a enojar con vos, y a vos te gusta? decime si te gusta. yo pensaba en lo malo que era mi papá y en la golpiza que me iba a dar si de daba cuenta que no fui a la escuela, tenía miedo y a la vez me gustaba mucho lo que me hacía.

No sé cuanto tiempo estuvimos así... solo sé que me dormí con su boca en mi concha, cuando me desperté él seguía ahí.. pasando su áspera lengua en mi clítoris, chupando como desesperado .. yo ya lo sentía como irritado, hinchado... entonces me dijo: querés que te chupe la colita? dame tu colita.. y cambió de posición a la de perrito y empezó a chuparme el ano, qué sensación más placentera, estaba en el cielo, me hizo acabar muchas veces, me decía  "cuando largas tus líquidos yo me lo tomo todo, porque a mi me gusta todo de vos" "quiero comerte toda, tu olor a concha me vuelve loco" y me mordisqueaba despacito sin lastimarme pero como un desesperado.

Cuando se canso se chuparme, se levantó fue a lavar mi bombacha y la puso a secar, como hacía mucho calor enseguida estuvo seca me la puso y me dijo que no dijera a nadie  lo que había pasado, me dió unas monedas y me dijo que siempre lo haríamos.

Bueno les he contado una de mis experiencia, espero que les guste.

Saludos.