Cumplir una promesa - 2

CUMPLIR UNA PROMESA – 2

La policía, estaba moviendo cielo y tierra, para encontrar alguna pista sobre el paradero de mi hermana, pero no había ninguna pista. El Taxista que la había visto por última vez, había aparecido muerto en su coche carbonizado, y el portero de la discoteca había marchado al extranjero.

Se dio aviso a la Interpol, en la posibilidad de que fuese secuestrada por alguna organización dedicada a la trata de blancas, si fuese así, sería muy difícil localizarla, ya que una vez secuestrada, por norma eran vendidas a países árabes o del oriente donde las mafias era una red tan tupida que no pasaba un alfiler por ella.

Al día siguiente de la visita de la Duquesa, la Sra., que siempre la acompañaba apareció en la habitación de Daisy.

Haber Esmeralda, dijo, túmbate en la cama con las piernas bien abiertas, vengo a afeitarte el coño y el culo,

Daisy, obedeció sin rechistar, temía que la golpease brutalmente.

Se tumbo sobre la cama y abrió lo más posible las piernas, la Sra. que se llamaba Camila, aplico con un espray por su pubis, una crema de afeitar que después extendió con sus manos por las ingles, labios mayores, dándole un buen masaje para que ningún pelo en la zona quedase sin ella, luego con una maquinilla de afeitar, comenzó a rasurarla a conciencia, pasándola dos veces por cada sitio, en la zona de los labios, estiro la piel, para evitar cualquier corte, al mismo tiempo, que tocaba su clítoris, al contacto Daisy dio un sus piro y Camila le dijo.

¿Qué te gusta que te toque el botoncito he? Espera a que termine. Después le mando ponerse a cuatro patas con las piernas bien separadas volviéndole aplicar con el espray por la zona del ano otra buena capa de espuma.

Sintió frio en el momento de aplicárselo, pero al extendérselo

por la zona del ano dio un suspiro de agradecimiento, le paso la maquinilla y el ano quedo limpio de pelo.

Cuando termino Camila le dijo, por lo visto te gusto cuando te toque el botón, verdad, pues ahora te lo voy a tocar mejor, túmbate y mantén las piernas abiertas.

Se tumbo de espaldas, y separo las piernas, entonces Camila, le separo los labios mayores y comenzó a masajearle el clítoris, Daisy comenzó a temblar, le gustaba, acerco su lengua al clítoris y se la paso suavemente, después, con los labios comenzó a succionarlo, Daisy temblaba cada vez con más intensidad, su vagina comenzó a mojarse y la lengua de Camila, se introducía en ella, con la otra mano, acariciaba el ano, el cual comenzó a tener unos movimientos de contracción, introduciéndole el dedo meñique, no podía dilatárselo mucho, ya que estaba reservado para desvirgarla analmente, con tanto sobeo, Daisy tuvo su primer orgasmo en su vida.

Al terminar, le dijo: Sécate que dentro de dos días vuelvo y te daré otra sesión en tu chocho, ya que te gusta, si te portas bien, yo me portare bien contigo.

Esta operación se efectuaba cada, cada tres días, como había ordenado la Duquesa, ella venia cada día a tomarle la lección a Daisy en lo que respectaba a la felación.

Solamente, abría la puerta de la habitación y mi hermana se ponía a temblar, con una fuerte voz le decía.

Haber Esmeralda, enséñame lo que has aprendido, y mi hermana se acercaba, se ponía delante de ella y tras subirle la falda y bajarle las bragas, comenzaba una felación diaria, cada día, la duquesa parecía más satisfecha y al marchar le daba una palmada en el culo diciéndole,:

Muy bien cada día lo haces mejor, un día le dijo, mañana te comeré el coño haber como te gusta, ya hacía varios días que se lo estaba comiendo Camila, pero no se atrevió a decir nada, ya que si se enteraba la duquesa, podría perjudicar a Camila y esta a su vez a ella.

Al día siguiente, la Duquesa entro en la habitación como de costumbre, Daisy, se dirigió hacia ella para hacerle la felación de costumbre,

cuando iba a comenzar, le dijo que no que se tumbase en la cama para comerle el coño. Daisy le indico, que esa noche le había venido la regla, mostrándole las sabanas manchadas de sangre, como en la habitación estaba desnuda no había podido evitar el manchado de la ropa de cama. La duquesa se enfado y de una bofetada la tiro al suelo, le dijo que le hiciese entonces la mamada correspondiente y mando a Camila, que le trajese unas bragas y las compresas correspondientes para Esmeralda.

Esmeralda, llorando, pero conteniendo las lagrimas, le hizo la mamada a la Duquesa, se esmero un poco más en compensación a no haberle comido el coño, la Duquesa, quedo satisfecha indicándole que no vuelva a ocurrir eso otra vez.

Cuando Camila, entro en la habitación, con un paquete de compresas y unas bragas, le dijo.

Eso te pasa por tonta, si me hubieses dicho que te vendría la regla esta noche, te hubiese traído todo esto antes, es el problema que tenéis vosotras.

Porque dice nosotras? Le pregunto Esmeralda, Ud. también lo tiene

No niña, yo no tengo ese problema, mira, y se levanto la falda, mostrando un pene de unos 14 cm. en estado de reposo. También era un transexual, mayor, pero transexual.

Báñate y después vendré para enseñarte a tus compañeras, ellas te dirán lo que debes de hacer y lo que no puedes hacer, te aconsejo que les hagas caso, será la mejor decisión de tu vida.

Se lavo, todos sus genitales, se puso las bragas que le trajo Camila con la correspondiente compresa y la espero a que viniese a buscarla.

Mientras Rodrigo, seguía haciendo sus indagaciones con respecto a la desaparición de su hermana, acudía, todas las semanas a la discoteca que había ido Daisy aquella noche, estudiaba a todo el personal que hubiese podido tener contacto con su hermana, porteros, camareros, personales de tocadores, todos. Nadie escapaba de los ojos de Rodrigo.

Un día, se dio cuenta de que uno de los muchachos de la barra, se enrollaba mucho con las chicas dándoles palique y haciéndose el simpático, al mismo tiempo que en sus ratos de descanso, salía del local y se ponía de charla con el portero y otro chico que siempre estaba fuera. Hablaban de las chicas como si fuesen ganado, que si esa tiene unas buenas ubres, que los cuartos traseros estaban en su sitio, y siempre en esos términos. De esas averiguaciones se las dijo a Alberto, los dos trazaron un plan para hablar con el susodicho muchacho. Se fijaron que ese chico nunca estaba a la vista en la puerta del local, se ocultaba en las sombras y esperaba a una señal para aparecer con un taxi a la señal del portero. LA noche de la desaparición de Daisy el chico no se encontraba en la entrada, por lo visto había tenido un altercado por un accidente en su auto y no había acudido a la Discoteca. Estuvieron vigilando durante varios meses. Un día apareció el portero que había estado el día de la desaparición de Daisy. Tras vigilarlo durante unas semanas, pusieron en marcha el plan.

Esperaron a que la discoteca cerrase y luego lo siguieron, en el momento oportuno, haciéndose pasar por jóvenes con algunas copas de más, se acercaron tratando de invitarlo a beber, el portero, los despacho indicándoles que fueran a molestar a otro, en eso, Alberto se abrazo a él como si estuviese borracho, momento que aprovecho Rodrigo para inyectarle una droga que lo dejo inconsciente en pocos segundos. Lo metieron en un coche y desaparecieron.

Lo llevaron a los sótanos de la clínica del padre de Rodrigo, allí, lo tumbaron en una mesa y esperaron a que se despertara, cuando lo hizo, se encontró atado sobre una mesa y completamente desnudo. Alberto y Rodrigo, escondiendo su identidad tras un pasamontañas, comenzaron a interrogarle.

Decía que no sabía nada de lo que le preguntaban, que había estado en el extranjero y que no sabía nada, insistieron, le advirtieron de que si no hablaba sería peor para él, no quería soltar prenda, así lo dejaron durante tres días, sin comer ni beber.

Tanto Rodrigo como Alberto, estaban en el último año de medicina, ya en varias ocasiones habían ayudado al padre de Rodrigo en intervenciones quirúrgicas, desenvolviéndose perfectamente en el quirófano.

Mientras Esmeralda (Daisy) seguía en su prisión, la regla ya la había tenido y un día apareció la Duquesa, diciéndole:

Hoy si te voy a comer el coño, tembló, no sabía cómo reaccionaría si se enteraba de que Camila se lo llevaba comiendo desde que comenzaron a afeitarla. Sin que se lo dijera, se tumbo en la cama, se saco las bragas y abrió las piernas.

La Duquesa al ver la disposición de Esmeralda le dijo,

Parece que tienes ganas de que te lo coma, así me gusta eres una buena chica.

Temblando, Esmeralda respondió, lo que Ud. mande Sra. estoy a su disposición.

La duquesa se puso frente a los genitales de Esmeralda, y comenzó a pasarle la lengua de abajo a arriba, al mismo tiempo que le apartaba los labios mayores y acariciaba su clítoris, Esmeralda, apartando la cara y llorando hacia esfuerzos para no dar a entender que lo que le estaba haciendo le comenzaba a gustar.

Su vagina, comenzó a mojarse con los flujos que se desprendían y eran absorbidos por la Duquesa, que aprovechando de que estaba muy mojada, comenzó a meterle los dedos, sin llegar a desvirgarla,

insistía, en la maniobra hasta que le vino un orgasmo a Esmeralda, que le llevo a unos minutos de inconsciencia. La Duquesa se retiro, se lavo la cara

y le dijo a Camila.

Mañana que empieza a trabajar ya sabes la tarifa por desvirgarla tanto anal como vaginal.

Esmeralda, medio inconsciente, no entendió lo que había oído.

Luego, Camila se acerco a ella, y le dijo.

Estas de enhorabuena, eres la joya de la casa, mañana debutaras, ahora ven conmigo al baño.

La llevo y le ordeno que se pusiese de rodillas apoyando la cara en el suelo,

en esa posición su orificio anal quedaba en una posición alta, le aplico una vaselina en el ano y le introdujo una cánula.

Niña, te voy a poner un enema, para limpiarte el interior del culo, no queremos que los clientes que te den por el culo, se manchen su polla con tu mierda. Esto tendrás que hacerlo todos los días que trabajes, los primeros días te lo hare yo y después serás tu lo que lo hagas.

Tras decírselo y ya con la cánula en el culo, se la conecto a un deposito que tenia agua tibia en la que habían disuelto glicerina para una limpieza mas afondo. Al comenzar a entrar en su ano la disolución, Esmeralda sintió en su vientre unos retortijones, efecto de la glicerina y el agua, Camila le había indicado que retuviese el líquido el más tiempo posible y que no lo expulsase hasta que se lo dijese.

Esmeralda grito diciendo que ya no aguantaba más, le había metido 2,5 litros.

Ahora te lo quito, le dijo Camila, pero cierra el culo, hasta que te lo diga, sino lo haces vas a limpiar todo lo que ensucies con la lengua.

Se lo quito y le indico que se sentase n el inodoro, cuando ya estaba sentada le dijo.

Ahora expulsa toda esa mierda que tienes dentro. Esmeralda, no necesito hacer mucho esfuerzo, se relajo y un chorro de agua, mezclado con heces lleno la taza del inodoro.

El poco esfuerzo que hizo y con la fuerza con que salía le produjo una pequeña irritación, que Camila se la soluciono aplicándole un poco de vaselina, ahora túmbate en la cama durante un rato y relájate, le dijo. Se te pasara en un momento.

Hoy bajaras a comer con tus compañeras, le indico Camila, así las conocerás y te informaran de la casa, mañana a trabajar.

A la hora señalada, Esmeralda se puso un conjunto de sujetador y braga y se cubrió con una bata casi transparente, unas zapatillas de color rosa con unas plumas en el empeine, su pelo lo había recogido en una cola de caballo sujeto con una cinta haciendo juego con la vestimenta.

Cuando llego al comedor, las otras chicas ya estaban sentadas, todas vestían muy similar a Esmeralda. Camila dirigiéndose a las chicas les dijo.

Esta es Esmeralda, a partir de mañana, comenzara a trabajar con vosotras, indicarle lo que tiene que hacer y lo que no puede hacer, espero que seáis buenas compañeras. Si Sra. Camila respondió todas al unisonó.

Solamente eran cinco chicas, y poco a poco se fueron presentando, Hola yo soy Jazmín, tengo 22 años y estoy aquí desde hace 3, era una chica morena, ojos negros y pelo negro, sus pechos eran más grandes de lo habitual para una muchacha de esa edad, su trasero respingón pero no grande. Hola soy Violeta, tengo 23 años y estoy desde hace 4, pelirroja, ojos castaños busto similar al de Esmeralda y un culo dentro de los cánones normales, para su edad. Hola soy Rosa, 22 años con 3 de permanencia, era algo plana pero con un culo muy juguetón. Yo soy Noche, 23 años y cuatro en la casa, era una negra muy guapa, pechos grandes y un culo a la par. Yo soy Eiko, tengo 22 años y 2 en la casa, su nombre lo decía todo, origen oriental con unos pechos similares a los de Esmeralda, una piel muy blanca, parecía una muñeca de porcelana.

Después de comer, se reunieron en un salón, para darse a conocer mejor y alertar a Esmeralda donde estaba. Violeta que era la más veterana, tomo la palabra:

Chica, siento mucho que cayeses aquí, procura obedecer en todo y te ira mejor que a otras, nuestro trabajo, como dice Camila y la Duquesa, es satisfacer sexualmente a los clientes que nos visiten, en una palabra, somos putas de lujo, tendrás que hacer todo aquello que el cliente te pida, no le lleves la contraria, te expones como mínimo a una paliza, Por la noche te encontraras con una pastilla en la mesilla de noche, son anticonceptivos, no te olvides de tomarlo, si no lo haces corres el riesgo de quedarte embarazada, y si eso te ocurre, es mejor que hubieses muerto, te venderán a un país del tercer mundo, que te joderan a todas horas hasta reventarte. Hemos tenido compañeras que de la noche a la mañana desaparecieron, luego nos enteramos de que estaban preñadas y se deshicieron de ella. Hay otro grupo, pero esas no te recomiendo que hagas migas con ellas, son transexuales, las cazaron por sus tendencia sexuales, eran gay, mariquitas, y como les gusta que les den por detrás, los hormonaron y les pusieron unas tetas que son más duras que mis dientes, pero ellas están contentas de ser como son. Esmeralda estaba asustada, deseaba que todo eso fuese un sueño y se despertase en su casa con su familia.

Eiko le dijo, que la única manera de poder salir de allí era que un cliente se encaprichase de ti y te comprase, cliente que fuese de aquí, que se enamorase y te retirase, hubo una que un jeque se enamoro de ella y se la llevo a Arabia Saudí, vive como una reina, pero solo puede salir a la calle escoltada y tapada de pies a cabeza, el susodicho jefe le ha hecho 4 hijos, según se cuenta por palacio tiene que ir siempre sin bragas, para podérsela montar en donde se la encuentre, sus tetas deben de llegarle al ombligo. Mañana cuando nos llamen al salón, haz todo aquello que hagamos nosotras, y no quieras destacar, piensa que después de que te desvirguen, la Duquesa te llevara a su cuarto y estarás un par de noches con ella, te la meterá por el coño y por el culo, espero que las mamadas que le abras hecho te de una idea de cómo es.

Otra cosa, el resto del servicio que veras, camareras limpieza etc. son todas transexuales y siervas de la Duquesa, no digas nada delante de ellas son chivatas, el único macho que hay es el que está en la puerta, ten cuidado con él. Como te coja manía te da un mamporro que te rompe la mandíbula.

Las informaciones de las chicas que acababa de conocer, dejaron a Esmeralda en pleno shock quería salir corriendo de ese sitio pero sus piernas no le respondían.

A media tarde, llamaron a las 5 chicas al salón, estaban comenzando a llegar los clientes y tenían que estar preparadas para el desfile, Esmeralda, veía el desfile atreves de un espejo en la pared, por una parte era espejo y por la otra que daba a una habitación era cristal, en todas las habitaciones había un espejo como ese, era la manera de tenerlas controladas, mientras estaban con los clientes, con el fin de que no pudiesen contactar con el exterior atraves de algún cliente asiduo.

Los clientes que se encontraban en el salón, por lo general eran hombres entre 50 y 70 años, que en su casa sus esposas ya no les satisfacían sexualmente, disponían de capital y podían pagarse esos vicios, las chicas desfilaban delante de ellos sonrientes y con ropas muy sugerentes, Camila les indicaba las características de cada una así como cual era sus preferencias además de sus especialidades.

Poco a poco, las chicas fueron requeridas por los diferentes clientes según las preferencias del cliente el precio era distinto. Los precios más altos era el de una virgen el desfloramiento de una de las chicas tanto anal como vaginal se pagaba muy alto, el resto de las especialidades era el resultado de la chica que escogiese. Por Esmeralda, al día siguiente pagarían una muy buena cantidad de dinero.

Entre cliente y cliente, las chicas tenían un tiempo muerto, para lavarse, ya que si habían sido penetradas analmente, tenían que volver a ponerse un enema, para limpiar su culo del semen anterior,

y eso le llevaba un poco más de tiempo que lavarse el coño.

Terminado el día, y después de cenar, las chicas se contaban las experiencias que habían tenido durante la jornada algunas eran de risa, pero otras eran de llorar, unos eran delicados y otros unas malas bestias.