Cumpliendo mi fantasía. De nuevo.

Colgue un anuncio de mis fantasias. Mi intención era solo hacerlo una vez, pero me gustó demasiado.

Cómo les platiqué en mi otro relato, al regresar de mi primera vez de ser puta me puse a buscar un nuevo “cliente”, me exitaba todo lo que me decían en esos mensajes y me mojaba de solo imaginarme haciéndolo con un desconocido otra vez.

Me llamó la atención un mensaje de un tipo que me mando una foto de su verga, me mojé de solo imaginarla dentro de mi, estaba gorda y larga (Se me hace agua la concha de solo recordarla).

En su mensaje me dijo que le encantaría ayudarme con mis fantasías, que le sobraba dinero y que me quería enterrar toda la verga. Platicamos un poco. Me decía que me quería lamer el culito y si era posible me la metería por ahí, yo le dije que le iba a cobrar más si quería metérmela por ahí.

-Primero veremos si se la come toda tu pucha, porque es muy grande y nunca puedo coger a gusto porque les duele.

Planeamos de vernos en una plaza céntrica pero que tenía un motel cerca. Me pidió que me llevara tanga y que no me pusiera sostén. Obvio así lo hice, iba a ser su putita y al cliente lo que pida.

Pasó por mi a la hora que acordamos, yo llevaba puestos unos leggins negros que marcaba mis piernas y que se notara que traía tanga, una blusa azul y poco floja de tirantitos, obvio no me iba a vestir como puta, a él le había dicho que era mi primera vez haciendo eso. Cuando lo vi me sentí un poco decepcionada pues era un hombresito chaparrito, con un poco de pansa y medio friqui, creí que me había engañado y me sentí un poco nerviosa. Pero seguía exitada y estoy segura que mi tanga estaba muy muy mojada.

Fue muy caballeroso, me abrió la puerta del coche para que subiera, pero cuando me iba a subir se paró atrás de mi, me agarro una nalga muy fuerte, subió su mano hasta mi pecho y me la apreto al mismo tiempo que me decía en el oído -Ya te la quiero meter puta.

En el trayecto al Motel platicamos de porque usábamos esa pagina, el dijo que ya la había usado pero que la vez anterior le toco una mujer muy desagradable, pero que yo había hecho que se pusiera duro desde que me vió y con una mano se marco el paquete y mi vagina palpito, SI!! ERA GRANDE!.. Que riiiiicoooooo!.

Llegamos al Motel, me abrió la puerta para que pasara por delante de el, y repitió lo del carro pero con las dos manos, me apretó las dos nalgas y las subió hasta mis pechos y susurró a mi oído -Ahora si, a ver si te la puedes comer toda. Yo estaba exitadisima pero intentaba controlarme, (Según era mi primera vez y tenia que mostrarme tímida).

El motel tenia espejos en todas las paredes. Sacó de su cartera varios condones y su dinero.

-Ya vi que si me hiciste caso y no traes brassier, ahora quiero verte en tanga.

Me quité los leggis y me puso $700 mas en ella.

-Esto te iba a dar si te la podía meter por el culo, pero como ya vi que me complaciste con eso, ya te los ganaste. Te haz convertido en mi puta favorita. Miraaa que mojada estas!

Como les había dicho, mi tanga estaba empapada!... Me metió dos dedos y me hizo suspirar. Me vi en un espejo. La imagen era muy excitante para mi.  El sentado, un tipo raro con sus dedos metidos en mi, moviéndose deliciosamente en mi vagina mojada, yo de pie con mi blusa floja en tanga frente a el.

-Puta, te gusta que te diga puta verdad.

Solamente asentí con los ojos cerrados y la cabeza hacia atrás.

-Bueno, puta, chupamela.- Diooos era lo que quería, se la saco y si! Era muy grande. La lamí despacio desde los huevos hasta la cabeza, como pude la metí a mi boca y la chupe, la ensalive lo más que pude y lo masturbaba al mismo tiempo que le chupaba la cabeza. Era reaaalmente rica su verga.

Se levantó, se puso un condón y me dijo -Vamos a ver si te cabe toda mi amor, ponte de perrito.

Me encanta esa posición, es mi favorita, sin dudarlo me puse de perrito, el hizo mi tanga a un lado y puso su verga en la entrada de mi vagina, diooos que delicia, dolía un poquito pero era delicioso.

-aaaah que ricoooo!- Gemi.

-Ojala que te la puedas comer toda zorrita.

-Metemela despacio mi amor.

-Estas tan aprentadita mija, que rico, te voy a coger muy muy fuerte.

Continuo metiéndomela poco a poco, mientras yo gemía de dolor y pacer, no entró toda, pero me sentía tan llena, comenzó  su mete y saca delicioso despacio, hasta que pudo metérmela toda y yo ya estaba gritando como una perra.

-Si! Si! Asiii siiii!

-Que rico aprietas mamita, que rico te cabe toda, sabia que me ibas a complacer.

No tardé en tener un orgasmo intenso. Sin problemas me cargo, y me dio la vuelta dejándome acostada, me quitó la blusa y se puso a chupar mis pechos y morderlos mientras yo me retorcia de placer, puso mis piernas en sus hombros y me la clavo toda de un empujón, eso me dolió un poco que grité. Y comenzó a cogerme con más fuerza, cada vez que yo gritaba más fuerte lo hacia. -Así, grita puta, grita porque te gusta comerte toda mi verga.

Yo gritaba, gemia, me retorcia de placer.

-Montame.

Se acostó y yo me subí a su verga, me estaba sentando despacio pero el no quería despacio, me agarró de las caderas y me la clavo. Me hacia que pusiera mis ojitos en blanco. Y la imagen de ese hombre cogiéndome era muy exitante.

-Muevete.

Comencé a mover mis caderas en círculos porque quería tener otro orgasmo y sabia como lo iba a conseguir, primero círculos y luego adelante y atrás, muy rápido con toda su verga a dentro, tuve un orgasmo que lo mojé todo. (Siempre me ha dado pena mis squirts pero no me importó) y creo que se prendió más,

-Quiero terminar en tu cara.

-Al cliente lo que pida, pero ponme como tu perrita otra vez y dame muy duro.

Lo hizo, la ponía en la entrada y me la metía de golpe, con fuerza. Yo gritaba cada vez más y gemia. Comenzó a cogerme con fuerza agarrando con una mano mi cadera y con la otra mi cabello haciendo que viera el espejo todo el tiempo.

-De rodillas puta!

Me puse de rodillas, se quitó el condón, y comenzó a llenar mi cara y mis pechos de lechita calientita.

-Pruebala!

Me exitaba que me diera así las ordenes. La probe un poquito, nunca me ha gustado tomarme la lechita de nadie pero la lami de mis labios y luego tomé un poco de mis bubis y la mi dedo viéndolo a los ojos. Me vi en el espejo, toda una puta llena de leche de un desconocido.

-Estuvo muy rico mami. Me encantaría que volviéramos a vernos, te enviaré un mensaje por la aplicación y si quieres me pasas tu numero por ahí. Se vistió y me quedé ahí. Tirada en la cama, dolorida, llena de leche y con mi culito palpitando porque ya me había mentalizado que iba a tener ese trozo ahí dentro.

Me quedé otro rato así, llena de leche. Y comencé a buscar a mir proxima victima.