Culeando a mi prima hermana

De niño hasta adolescente viví en un pueblo de la costa pacífico en méxico. Mis padres radicaban fuera por motivos de estudios. Una de mis abuelas se hizo cargo de mí durante todo ese tiempo. Fue una etapa muy feliz y bien vivida, no me puedo quejar, sobretodo porque mi despertar sexual fue temprano.

Recuerdo que siempre me abalanzaba sobre la chava que hacia el quehacer en la casa, la abrazaba y besaba tiernamente. Yo tenía 8 o 9 años y ella 17-18. La muchacha me separaba de su cuerpo cuando notaba mi erección. Nunca pasó nada. Pero lo realmente emocionante para mí fue con una de mis primas.

Anel era bajita, morena clara, con un culo redondo y unas buenas chichis para su edad: 11 años. Siempre compartiamos momentos de juego. En muchas ocasiones yo dormía en su casa y ella en la de la abuela. No había "peligro", compartíamos la misma cama.

Yo tenía la costumbre de dormir con una pierna montada sobre el cuerpo de mi mamá (cuando venía de vacaciones), por lo que una de esas veces que dormí con anel ella me dio la espalda y aproveche para abrazarla y pornerle el pie sobre su cuerpo.

Ella no dijo nada. Aparentemente dormiamos pero ambos estabamos intranquilos, inmediatamente tuve una erección y ella procedio (no se si por reflejo o inconscientemente) a tocar mi pene.

Me baje el pantalón cortó para que anel jugará con mi sexo, estaba caliente dando brinquitos y anel lo toco así, pero inmediatamente retiro su mano. Procedí a acariciar sus nalgas y sentir lo caliente de su culo. Metía mis deditos entre su calzón y aspiraba ese almizcle, esa combinación de olores.

Ella se dejo hacer, no dijo nada, seguía fingiendo dormir. Yo la abracé más y comencé a bajarle los calzones, le separe las nalgas y acerque mi pene, lo dejé un rato ahí para ambos sintiéramos el calor de nuestros sexos y, luego, como un lobo hambriento, empujé mi glande. Sentí lo más maravilloso del mundo: con mi pene estaba abriendo su caliente y estrecho culo.

Me invadió inmediatamente una sensación de ardor y placer. Le enterré la "cabeza menor" y ella soltó un quejido. Te duele...?, pregunte. Asintió y yo decidi meter un poco más.

Comence a menearme de atrás para delante y ella soltaba pujiditos. Anel decidió parar su dolor, pero dejó que durmieramos así, en copula. Jamás lo intentamos otra vez, me hubiera gustado. En años posyeriores me dedique a masturbarme oliendo sus calzones o viéndola en el baño, ella era una adolescente muy sabrosa. Ahora esta casada y embarazada y no he intentado acercarme a ella en plan sexual.

Si les gustó mi relato y quieren saber de mis "situaciones" con mi prima y otras personas, pueden escribir a: centauro@yahoo.com.mx