Cuidadora

Hace unos meses por casualidad me encontré a mi amiga Sandra, me comentó que andaba buscando a alguien para cuidar un par de horas por las tarde a un señor, ella iba por las mañanas y por las tardes no podía ir.

Hace unos meses por casualidad me encontré a mi amiga Sandra, me comentó que andaba buscando a alguien para cuidar un par de horas por las tarde a un señor,ella iba por las mañanas y por las tardes no podía ir.

De salud estaba bien y se podía arreglar él solo, pero necesitaba alguien de confianza y ademas que yo me dedicaba a ello. Llevaba viudo hacía 4 años ya y quería a alguien que le hiciera un poco de compañía. Le comenté que estaba dispuesta y me venia bien. Ella se puso muy contenta y me dio la dirección, iba a darle un telefonazo para comentárselo. Quedamos en empezaral día siguiente.

Al día siguiente me presenté a ver a Tomás, que así se llamaba el señor, y cuando me abrió la puerta mi primera reacción fue de sorpresa porque no era un anciano, por lo que me comento había tenido un accidente laboral hacia unos años y eso impedía moverse con agilidad aunque no era muy mayor y tampoco me pareció que tuviera necesidad de ser atendido por alguien. Me hizo pasar, estuvimos hablando, en fin las típicas presentaciones.

El caso es que empecé a trabajar, sin notar nada raro, lo único que notaba era que me decía muchas veces lo guapa que era, que tenía un bonito cuerpo, cuando andaba a mi lado, se agarraba a mi. Alguna vez me había tocado un poco el pecho, así como quien no quiere la cosa, pero en mi profesion suele pasar, me pareció normal y no le di importancia.

A los 2 ó 3 días, me telefoneó mi amiga, y me comento que si esa tarde podía ayudarle a bañarse, a él le daba vergüenza decírmelo. Yo la dije que sin problemas.

  • Pero, Don Tomás, como no me lo dijo directamente a mí.

  • Es que me da vergüenza que puedas pensar mal de mi.

  • Ande, ande, vaya pasando al baño, estoy acostumbrada hombre, es mi trabajo.

  • Vale, pero espera a entrar a qué esté dentro de la ducha.

Así lo hice, y esperé a que él me dijera que pasara. Cuando entré ya estaba en el baño, y con la cortina corrida, por lo que casi no le podía ver el cuerpo. Me puse el guante de baño, y empecé a frotarle por la espalda, y la parte de atrás de las piernas. No quería que abriera las cortinas del todo, así que casi lo estaba haciendo a ciegas. Le dije que se diera la vuelta y le froté el pecho, la barriga, y cuando empecé con la entrepierna, se me escapo

  • Hostia, que es esto, Tomás.

Corrí la cortina, y me encontré a Tomás con un soberano empalme. El estaba totalmente colorado. Solo me dijo:

  • Lo siento hija, no he podido evitarlo.

Le dije que saliera y como profesional comencé a secarle, no podía dejar de mirarle su pollón. Era gordo y lleno de venas, y estaba totalmente tieso. Se sentó en el sofá y me empezó a contar:

  • Tenemos un amigo médico que nos da gratis pastillas de Viagra. Nos ha dicho que tomando un poco, no tendríamos problemas para la salud y que la erección duraría 2 horas como máximo. Entonces he cogido como costumbre tomar un poco de Viagra.

  • Pero Tomás, eso puede ser perjudicar para su salud.

  • No que va, después de comer viene una mujer que pago para follar pero hoy la hija puta me dejo tirado, ¿tu no querrás?

  • ¿perdona? ¿Me estas proponiendo sexo?

  • No es malo, estamos solos, lo que pase no saldrá de aquí.

  • Pero bueno Tomas ¿estas loco? Ahora mismo llamo a Sandra y le digo lo que estas haciendo.

  • ¿Sandra? Buena es, que te cuente, que te cuente jajaja

  • ¿Que quieres decir?

  • Que tampoco quería como tu pero cuando la probo lloraba para que no se la sacara del coño.

  • Mira Tomas a mi no me hables así luego hablare con Sandra.

  • Belén con estas tetazas deber tener a tu marido en los huesos, tienes mas tetas que Sandra.

  • Oye o te callas o me voy..

Llame a Sandra pero comunicaba, le envié un whasapp, me respondió que no le hiciera caso, a pesar de decir guarrerias no era un buen tío.

  • Belén mira esto...

Diciendo esto me acerque para leer unos whasapp que se había intercambiado con Sandra en el que no dejaba en buen lugar a ella, no podía creer lo que estaba leyendo conociéndola me parecía imposible que fuera ella, lo peor fue cuando me enseño una foto de ella a punto de entrar en la ducha insinuándose tapada unicamente con una tolla parte de su pecho.

Cuéntame todo, le dije, no se como sucedió pero a medida que me contaba como había conseguido tener sexo con mi amiga me estaba excitando, el debía notar como me subía los colores a la cara que me cogió la mano y se la llevo a la polla, le agarré el pene, y lo empecé a masajear lentamente de arriba para abajo mientras me quitaba la camiseta y miraba mi sujetador en el que se marcaban ya claramente los pezones. Sin esperar a que lo hiciera él, me quité el suje, a lo que él respondió agarrándome con sus manos mis melones, y jugando con los pezones con sus pulgares.

  • Ya me parecía a mí que eras como Sandra. Eso es lo que me pareció cuando te vi esta mañana con esa carita de no haber roto un plato nunca. Quítate el pantalón y las bragas, que te la quiero clavar ya.

Y me metí su verga en la boca, oyendo de inmediato sus gemidos de placer y sus comentarios. Mientras yo seguía trabajando su miembro con mi lengua, subiendo, bajando, lamiendo el glande, que parecía ser la zona que más le hacía gozar, mojando la verga con saliva, mordiéndola, metiéndola en la boca hasta el fondo. Hummm..... Sus historias con Sandra me estaban poniendo más caliente todavía, por lo que me levanté rápido y me tumbé en el sofá, pidiéndole que me follara ya.

Sin contemplaciones puso su cipote en los labios de mi coño y sin darme tiempo a reaccionar me la clavó de un solo empellón mientras seguía hablando.

Ufff...…. Notaba como su polla entraba y me llenaba todo el coño.

Y empezó a darme azotes a la vez que aceleraba sus empujones. Eso me calentó, no lo puedo negar, y en el estado en que me estaba, eso significó que durante 2 minutos me estuve corriendo como pocas veces lo he hecho.

  • Te has corrido, eh. Ahora lo voy a hacer yo, pero lo voy a hacer en tus tetas

Me hizo girar, y comenzó a refregar la polla entre mis tetas, tenía la polla empapada de los jugos de mi chocho.

Tomás sí que empezó a disfrutar de verdad, y en unos minutos me llenaba de leche, mientras que lanzaba unos ronquidos de placer, y daba los últimos empujones con las caderas.

Nos sentamos en el sofá a descansar y a recuperar el aliente. Y cuando abrí los ojos, fue cuando me di cuenta que el cipote de Tomás todavía seguía como un palo. Se echó a reír y me dijo:

  • Ya te dije que teníamos para dos horas, y todavía quedan tres cuartos. ¿Por qué no me haces una paja con tus tetitas?.........

El cabrón nos estaba follando a las dos y aunque entre nosotras jamas comentamos el tema por vergüenza supongo, ademas que yo estaba casada y ella en pareja con su novio hacia unos años, pero a mi si me contaba como lo hacia con Sandra, no sabría decir porque pero me daba un morbo tremendo, mi marido jamas sospecho nada mientras duro, al tiempo mi empresa comenzó a darme trabajo por las tardes por falta de personal decían y a Tomas casi perdí el contacto aunque a veces le preguntaba a Sandra por el…..hasta que definitivamente no supe nada mas cuando mi compañera cambio de horario y no volvió a casa de Tomas.