Cuarentena + mamá = cuarentona caliente (revisado)

En plena cuarentena conocí íntimamente a mi mamá.

Mi casa tenía un quincho en el fondo el cual se fue transformando con el tiempo en una habitación con baño y sala de estar, se usaba más que nada para las visitas y mientras fuí creciendo íbamos teniendo cada vez menos visitantes.

Con el tiempo ese lugar fue cerrado y abandonado entonces ya de adolescente decidí buscar y quedarme con la llave, alguno de los dos (mis viejos) la tendría, busque en toda la casa y no la encontré el único lugar que me quedaba era la cartera de mamá ya que hurgar en los bolsillos de mi viejo era más que imposible.

Así que decidido en tener esa llave comencé a espiar a mamá, la idea era esperar a que se bañe para revisar su cartera.

Tardé en tener éxito porque siempre se duchaba en la mañana temprano o tarde en la noche y siempre estaba la familia.

Un día que empecé a sentirme abatido provoqué un accidente, tropecé con ella a propósito y le ensucié la ropa.

..................................................................

Su llavero tenía la llave original y la copia, obvio que me quedé con una.

Con el tiempo fui recuperando el lugar; yo no sabía que ella lo usaba de vez en cuando, cada vez que ordenaba el lugar podía darme cuenta de que no era el único que aprovechaba el sitio.

Dejé el lugar impecable, la habitación la ambienté a mi gusto como si fuera mi habitación era mi lugar para estar solo o para escuchar música, jugar o hacerme la paja.

A sabiendas de que alguien compartía el lugar puse un móvil en la puerta cosa de escuchar ruidos si alguien entra, también una camarita mirando a la cama y otra en el baño.

No fue una gran sorpresa averiguar que era mamá con quién compartía la casita y la cama.

Lo que sí fue una sorpresa es que ella usaba el lugar por lo mismo para estar sola, leer, mensajear, ver porno y masturbarse, no lo ví detenidamente era como violar su privacidad, pero si lo descargué en la compu, gran error fue ese ya que teniéndolo a mano tarde o temprano lo iba a curiosear.

El segundo día encontré en la encimera del baño su tanga empapada y hecha un bollo, así que desesperado descargué los vídeos del día, la curiosidad pudo más que el respeto a su privacidad.

Ella aparecía entrando al lugar, frente a la cama se desnudó a toda velocidad se dejó la tanga, se acostó y viendo porno en su celular se empezó a tocar las tetas en cuanto se le fue subiendo la temperatura se sacó la tanga se secó la concha y se la pasó por la cara antes de metérsela en la boca.

Se cogió con toda la mano, la tanga en la boca era para silenciarse, la toma era perfecta todo lo hacía frente a la cámara se metía los dedos y también su consolador.

Duró casi 20 minutos y regó toda la cama, se sacó la tanga y secó su transpiración y sus jugos hizo un bollo y lo dejó en el baño; yo salí corriendo a esa cama con su tanga en la mano, toqué y sí, estaba mojado aspiré su olor y restregue el rostro en los jugos de mamá e inicié una paja frenética acabando en el mismo lugar que ella.

Después de eso le dí play al primer video, en él mamá entra, recorre el lugar vé como todo está limpio y arreglado.

Continúa hacia la habitación recorre ambos lados de la cama presiona sus manos como comprobando que el colchón sea bueno, acomoda todas las almohadas en la cabecera se levanta la pollera sube una rodilla a la cama y se masturba de una vez.

Buscando su comodidad se sube a mi lecho masturbatorio con la espalda en las almohadas tocándose las tetas, con la calentura a tope manotea una almohada y la lleva a su entrepierna y se empieza a cojer a la almohada, a todo esto yo estaba mirando el vídeo con una mano que me pajeaba y la otra que acariciaba y mezclaba mi leche con sus jugos.

En eso veo que ella para lo que está haciendo y se centra en la cámara, "por Dios, me descubrió" pensé yo.

Se sonríe, se chupa los dedos, saca la almohada de su concha, busca acomodarse y para suerte mía quedó en una inmejorable posición para la cámara, se masturba lento, se desnuda completamente, estira los pezones se chupa los dedos y se los mete.

Cambia de posición, de costado como un feto está vez, lleva su mano hacia atrás, se acaricia todo el orto, mete la mano entre sus nalgas y estimula el ano a todo esto en esa posición mantiene las piernas cerradas hasta que poco a poco las abre y se ve perfecto como tiene dos dedos metidos en su depilada y hermosa vagina y la otra mano va y viene entre sus nalgas.

Un rato después para, se arrodilla pone dos almohadas bajo su vientre y queda en pompa con todo expuesto ante la cámara, de ahí no paró hasta haber expulsado tres chorrazos de sus jugos, esperó varios minutos fue al baño se vió al espejo y se metió bajo la ducha con la cortina abierta, disimuladamente busco si había más cámaras ocultas, una vez que la encontró hizo como si no existiera, cómo con la otra cámara y empezó a cantar o hablar, no sé, no es un vídeo con sonido lastimosamente.

Al salir de la ducha no encontró ninguna toalla por lo que para secarse tenía que estar en movimiento, así volvió a recorrer la casita pero está vez desnuda, un espectáculo su cuerpo, ella es única, buen par de tetas, pelo por arriba del hombro, cintura pequeña, nalgas y piernas de piedra moldeada a base de ejercicios, sonrisa encantadora, personalidad cautivadora y ahora sabía algo más que a parte de super sexy es también super caliente.

Recorriendo la sala encontró la tercer cámara, no hizo ningún gesto, solo sonrió pícara. Después se vistió hizo un bollo con su tanga y la dejó en un cajón de la encimera, obvio que lo fui a buscar pero estaba seco y duro cosa que tampoco me importó porque lo desenrrollé y me la llevé a la boca, hidraté la tanga con mi saliva saboreando sus jugos y algo de mugre.

El cuarto día fuí a buscar los vídeos del día anterior que también me tenía a mí de protagonista.

Me desnudé en el baño mientras conectaba la cámara a la compu, encontré la memoria vacía y las cámaras apagadas.

Me entré a preocupar y ahí estaba yo, desnudo encerrado en el baño cuando escucho la puerta.

Mamá del otro lado de la puerta estaba masturbándose rogando por una joven pija que se la coja.

No lo pensé dos veces, salí con el celular en la mano, apoyé la rodilla en la cama.

Ella estaba en cuatro con el consolador en la concha, estiré la mano agarré su nalga y se la abrí simultáneamente el consolador se salió, pero antes que caiga en la cama se lo empuje hasta el fondo y lo apreté. Solté, se deslizó y se lo volví a empujar, ella dijo:

• Uhmmm consumalo antes que me arrepienta.

Entonces me acomode y se la metí hasta el fondo, su cuerpo convulsionó, soltó todo el aire en una vez y se relajó entregándose por completo, tres rápidas metidas y se convirtió en una regadera, la agarré de los pechos para que no se caiga mientras se la sacaba y se la metía, ella gemía y movía las caderas de un lado a otro mientras yo entraba y salía de su hermosa y jugosa concha.

Escuchamos que querían entrar.

• Oh, es mi hijo - dijo preocupada.

(esperaba a otra persona?)

• No te preocupes, cerré la puerta al entrar.

Y comenzó el mete-saca empujándome con sus perfectas nalgas yo estaba prendido de sus pechos y los apretaba, hice de sus pezones el juguete de mis pulgares ella completamente exitada movía la cadera de atrás hacia adelante y de adelante hacia atrás.

Estiré mi mano a su cuello chupé su lóbulo mientras me movía suavemente en su interior y ella gemía apoyando la nuca en mi hombro.

"No era conmigo con quién quería cojer?" pensé. Yo lamía su cuello.

• Hacelo más rápido que acabo. Más fuerte por favor! Más fuerte, más, más!!!

Yo tenía la pija dura dentro suyo, una vez que acabó dijo:

• Andá antes que tu madre te busque!

Mamá estaba exhausta con el torso en la cama y el culo a mi disposición, sin salirme de ella y reanudando el movimiento hice que estire las piernas y quede plana en la cama con las piernas abiertas para permitirme seguir cojiéndomela.

La situación era inmejorable para mí, me apoyé sobre mis palmas mirando su espalda y la hermosa cola que mantenía mi cuerpo elevado, caliente como estaba empecé a darle fuerte, acomodándome de rodillas y con ambas manos en ambas nalgas las apretaba, las juntaba y las separaba mientras me la iba cojiendo más salvajemente, en un momento el velo que cubría mi razón cayó y pensé "estoy violando a mi mamá!" pero cuando bajaba el ritmo ella dijo:

• No pares mi amor que me tenés a punto, seguí no pares por favor! Apurate y andate.

Una vez que acabó la dí vuelta y se la metí nuevamente.

• Qué me hacés nene, me volvés loca.

Ay! me viene otra vez, ah ah ahhh.

Qué potente!

Pará y andate no quiero tener problemas con nadie ah ah ah.

Después de dejarla unos segundos descansar volví a moverme.

• Ay Dios, qué hombre! Acabame! acabame y andate!

Mi cara estaba en el hueco entre sus hombro y su dulce, hermoso, caliente y sensible cuello.

No te preocupes - dije apartando mi rostro para que lo vea - mi mamá no me está buscando, pero sí que me encontró

Había tenido como cuatro orgasmos antes pero tenía una expresión de "horror" me empujó y salí de ella, se fue contra la cabecera llorando y tapándose la cara con las manos apoyando los codos en las rodillas que se mantenían abiertas, yo con el pene super duro metí las manos entre sus piernas para agarrarla de la cintura y atraerla hacia mí.

Cuando se la estaba por meter me empujó y salió de la cama, yo salí corriendo detrás y la encontré forzando el picaporte.

Está cerrada dijiste - le dije abrazándola de la cintura para que no escape y con algo de fuerza la senté frente a mí, ella cruzó las piernas y con las palmas tapó sus pechos, queriendo o sin querer se sentó de costado quedando muy sexy frente a mis ojos.

• Mamá, tenemos que acabar esto.

• Sí hijo, esto se acabó acá, andá, vestite, yo voy a casa y de esto no se habla más.

• No má' - dije parándome y acariciándome la pija - ésto tiene que acabar.

Me acerqué un poco, ella lloró, subió las piernas al sillón haciéndose una bolita y estirando el brazo decía.

• No, por favor no!

• Acaso no la estabas pasando bien

Cuántos orgasmos tuviste?

Yo te ví disfrutando.

Decime que no fue así!.

Y empecé de nuevo.

• No la estabas pasando bien? eh? Contestá!

• Sí!!! - dijo enojada y en voz baja.

• Cuántas veces acabaste?

Hubo silencio, mi mano subía y bajaba por mi miembro.

-Cuántas veces?

Pregunté y mamá me mostró cuatro dedos, ví como una muesca, un sonrisa que tapó con la misma mano que secaba sus lágrimas.

• Y? Lo disfrutaste? -  no decía nada.

Lo disfrutaste? - silencio - Lo disfrutaste?.

• Sí, claro que lo disfruté, pero no creí que eras vos.

• Vamos má', vamos a la cama!

• No, no se puede, soy tu madre! - dijo yendo a la puerta.

Me adelanté, me pegué a su cuerpo con el miembro entre sus nalgas y la apreté a mí.

• No! - dijo ella.

Pero yo sentí que se paró de puntitas y volvió a apoyar la planta de los pies muy muy lento en el suelo, la separé de la puerta y agarrándola por los brazos la forcé hasta la habitación.

La empujé a la cama y cerré la puerta con llave y la saqué, fuí al baño antes que piense refugiarse en él, lo cerré y tiré la llave bajo la cama.

• Hijo esto no puede ser, acaso vas a violarme?.

• Solo en teoría mamá.

• Cómo es eso? Pendejo caliente!

• Lo vas a disfrutar, va a ser mejor que hace un rato.

• No te creo.

• Creelo.

Y en eso la  empecé a corretear por la habitación, al principio huía de mí, después la toqueteaba y corría divertida hasta que me cansé y en lugar de tocarla la empujé y cayó de frente en la cama, aproveché y la estiré de sus tobillos me subí sobre ella y entre a meterle mano, a besarla, a lamerla, a chuparla y ella dijo:

• Ponete algo.

• Nadie va a vestirse acá - dije yo.

• Él debería - dijo mirándome el miembro - al menos si seguís con la idea de forzarme - remató.

No le hice caso, agarré sus muñecas pegué mi cuerpo a su cadera y con la mano libre acaricié todo su contorno mientras frotaba mi cuerpo con el suyo, también lamí y chupé su cuello mientras jugaba con una teta, luego pasaba al otro lado frotándola y haciendo lo mismo con sus pechos y su cuello.

A todo esto ella gemía disimuladamente y frotaba sus piernas, en un momento saboreando sus pezones me fui con la mano libre a la concha, apenas logré rozar su clítoris me enceguecí, me puse sobre ella agarrando cada muñeca al costado de su rostro y haciendo fuerza la abrí de piernas y la penetré.

• Hijooohhh!!! - dijo al sentirme dentro - me estás violando!!!

Pero ella colaboraba moviendo las caderas enloquecidamente.

• Soltame!

• No!

• Soltame ya!

Solo solté sus manos, no paré de penetrarla, estaba como un tomate, la frente, las mejillas, la nariz roja y agitada,se movía a la par mía mirándome diciendo:

• Mal hijo, mirá como estoy ah ahhh ahhh empalada por mi hijo. Violador! Violame maldito! Violame más rápido que ya me viene!

Su cuerpo se tensó y se retorcía de placer yo seguía a mi ritmo, mientras su orgasmo continuaba se la saqué de la concha y se la puse en la boca, le comí la concha con desesperación, apenas me la chupaba porque su orgasmo era infinito.

Me incorporé sobre mis manos y me la coji por su boca hasta que con sus manos me empujó de la cadera y dijo:

• Así no me gusta!

• No me interesa! O vas a colaborar?

• Prefiero participar a qué me fuerces!

• Entonces subite arriba mío - dije sobradoramente saliéndome de mi mamá y acostándome boca arriba con las manos cruzadas bajo mi cabeza.

• Odio tu actitud, hacelo más fácil. ya me entregué ahora comportate como hombre.

Apoyando los pies comencé a levantar la pelvis para penetrarla a fondo y sé que ella lo agradeció, su sonrisa y los ojos cerrados la delataron.

Nos quedamos un rato quietos, solo mirándonos y ella habló:

• Deberías usar condón.

• Por qué?

• Porque soy joven y todavía puedo quedar embarazada y no querrás que mi cuerpo se deforme, no?

• No, claro que no. Má'?

• Si?

• Esto lo tenías planeado?

• Creo que no, pero también creo que sí. Mirá, quedé con el hijo de la vecina para las 7am.

Empezó a hablar y moverse simultáneamente, estaba hechada hacia atrás con las palmas en la cama moviendo la cintura de atrás hacia adelante y viceversa.

• Cuando te ví entrar a la madrugada supe que algo tendría que pasar y antes que llegue la hora tomé la decisión.

Se movía más fuerte cada vez que se callaba.

• Cuál?

• No desperdiciar la oportunidad, digo, sos un joven hermoso y te conozco desde que naciste, sos bueno, me querés y cuando ví en el vídeo masturbándote sobre mis jugos supe que esto iba a suceder.

• Qué suerte la mía! - dije.

• Oh sí, soy joven y hermosa y tengo este cuerpo por el que me mato en el gimnasio. Y que suerte la mía ya tuve 5 orgasmos y ni siquiera amanece te siento tan bien y tan al fondo, toma mis pechos - dijo llevando sus manos de atrás al costado de mi cara, se los amasé, apreté, lamí, besé, estiré y chupé.

Mamá es increíble en la cama y yo también quería darle una buena impresión, así que apoyé la planta de los pies en la cama levanté el culo y empecé a coger con ella, adentro y afuera mientras mamá se me pegaba y se movía de un lado hacia el otro, también hacia adelante y atrás y claro también haciendo círculos que es lo que más me gusta.

• Qué bien cojes, mamá!

• Shhh, llamame por mi nombre.

• Te amo Eva, te amo.

• Ay bebé, mejor decime mamá, me viene, me viene.

Cuando dijo eso y teniendo en cuenta que ya no iba a durar mucho más la agarré de las nalgas y me salí de ella, la empujé para que quede boca para arriba y me subí encima, se la metí hasta el fondo de una, la besé mientras se la sacaba hasta el glande y volvía al fondo otra vez con más fuerza.

• Ay bebé me viene, me viene.

• Uuhm acabemos juntos mami.

No pude más, entré a darle fuerte, muy fuerte ella se abrazó a mí con brazos y piernas y yo entraba salvaje en ella.

Acabamos juntos, era tanta su calentura que no se dió cuenta o no le importó que le acabara dentro.

Mamá quedó abierta como un pollo a la parrilla yo estaba de rodillas con la pija en su concha, me estiré para besarla y agarrar mi celular.

• Una selfie mamá? - ella dudó un segundo.

• Se lo debemos a la tecnología - dije sin saber bien qué decir.

• Si! - dijo sonriente ella.

• Quedate así!

Se la saqué hasta la mitad. Enfoqué. Yo arrodillado con la pija dentro de su hermosa, carnosa y sencible vagina, ella despeinada con las piernas y brazos abiertos toda sudada, colorada y agitada, pero satisfecha y feliz con una sonrisa caliente y un saludo en la mano derecha.

Cuando me salí de ella ví como dejamos la cama hecha un asco empapada de sudor y los fluidos de ambos.

Me apoyé en un mueble: mirándonos sonreímos satisfechos y vino junto a mí.

Nos abrazamos.

• Dame las llaves - dijo.

Las busqué y se las dí, ella me dió un cachetazo suave y me dijo:

• Eso fue por forzarme.

Después me besó y repitió:

• Eso fue por forzarme.