Cuando se pone el sol 1

Te amo, y verte feliz me hace feliz a mi. Asique no quiero nada que tu no quieras.

Este es mi primer historia. La escribi en un momento en el cual no me sentía de lo mas segura de mi misma. Hay ciertos puntos, ideas o posturas que tomo durante la historia. Que estan basada en hecho reales. O en personas que conozco. Razon por la cual no revelaré nombre reales, ni lugares. Cuando comenzé a escribirla lo hice en lapiz y papel, y nunca la terminé, porque me pareció buena idea dejar la fantasía para vivir mi realidad. Ahora no me arrpiento en nada de esa desicion, porque la verdad pasó algo increible. Bueno tambien planeo contar esa historia asique algún día se enteraran. No fue hace mucho que la escribi, y aun no logro terminarla, espero por aca poder hacerlo. Bueno sin mas vuelta, espero que les guste y aqui va la historia...

La alarma del celular sonó. Desperte, y sin ganas de comprobar que era temprano. Mientras mis ojos se acostumbraban a la oscuridad, estire mi brazo derecho, tomé el celular, que por cierto tenía los auriculares enrollados al rededor, como los dejaba cada noche para encontrarlos facilmente al otro día. Apagué la alarma, y conectpe los auriculares al telefono, y me los puse. Cuando comencé a escuchar una guitarra, me transoporté a otro lugar. No sabía bien donde pero claramente no estaba recostada en la cama de mi habitación. Estaba sentada, en una silla digamos no muy comoda. Había mucho ruido, y de repente una luz muy blanca, en esa densa oscuridad invadió mis ojos. Miré de donde venía. Estoy en el cine me dije a mi misma. Aun no entendía como había llegado allí. Sentía varias cosas a la vez. Entre tantas tenía una extraña sensación, en lo que correspondía era mi mano. La sentía algo húmeda. Bajé mi cabeza buscando una respuesta, encntré mi mano. Ya habia encontrado el porque sentía mi mano de ese modo, tenía tomada de la mano a la persona que se encontraba a mi derecha. A partir de eso, y como era de esperarse surgía otro enigma. ¿Quién era esa persona? Y con esa muchas más. Como ¿Por qué estabamos tomadas de la mano?. Digamos que yo no era lo mas cariñosa con las personas. No cuando no me lo proponía. Bueno en fín, levanté nuevamente mi cabeza buscando la respuesta a mis preguntas. Miré hacia mi derecha, y noté como esa persona, se volvía hacia mí. Era increible, ni siquiera la oscuridad daba razón a aquello que veía. Su rostro, no lograba identificar su rostro. Lo único que lograba distinguir eran sus ojos, marrones. Tenía una mirada, no se como describirla, atrapante, indescifrable. Lo siguiente que noté fue como algo que hasta ese momento no se veía, sus labios, que daban paso a una sonrisa. Hizo que sintiera una inigualable seguridad por dentro. Aunque tambien sentía escalosfrioz,  al no saber la razon de esa seguridad. Mordí mi labio inferior, yo me conocía bastante bien y sabia que cuando hacía ese gesto, era porque algo me gustaba demasiado que eraimposible resistirme. Intenté frenarme, pero era como que yo no controlaba mis moviemientos, ni siquiera mis sentimientos. Gracias a su sonrisa, logre notar como su rostro se acercaba a mi, sus ojos habían desapercido. Esto que esta pasando es increíble, me sentía como nunca. Tenía tanto que pensar, pero decidi disfrutar y llevarme por el momento. Disfrutar aquello y no arruinarlo. Jamás me habían besado de ese modo. Sus labios transmitían un calor, que me reconfortaba, y en cierto modo hacía que me impacientara.  Luego una luz muy fuerte, me distrajo ya que logre notarla teniendo los ojos cerrados. Y una voz, por la cual entendí todo.

mama: princesa, ¿por que sonríes? ¿Que habeis estado soñando? bueno no importa. Vamos levantate que tenés que ir al colegio.

yo: no me digas princesa.!

mama: bueno pero deja ya de dar vueltas. que no quiero que mi princesa llegué tarde al colegio.

yo: MAMA!!

mama: bueno quieras o no siempre vas a ser mi princesita.

gracias a ella habia despertado de ese sueño, ah si era un sueño. Pero aun no entiendo, tantas cosas. Tantas preguntas. Bueno ya no tenía mucho tiempo, para seguir pensando.

Me levanté, busque un toallon, y me metí en la ducha. Al cabo de un rato bajo el agua, sali entré en mi habitación. y Cuando iba a cerrar las cortinas de mi ventana, Vi en la vereda a los amigos de mi hermano Lucas. Estaban Pablo, Juan Manuel, y... esperá ¿es una chica?  Tenía mas o menos mi altura, como un 1,65.  Pelo castaño no muy oscuro... y bueno seguí con lo mío. Cerré la cortina  y terminé de cambiarme, busqué una mochila. Guardé mis cosas y partí. esa mañana tenía gimnasia.  Mientras corría, hacia el polideportivo del colegio.  Me topé con alguien, mas bien la llevé por delante. Iba demasiado rápido y no me dio tiempo a frenar. Tropecé, y se me cayó la mochila. Aunque no le di mucha importancia, intente mantener el equilibrio para no caerme, y recogí la mochila. Y seguí mi camino. Llegué, y me puse con el resto del grupo a esperar el profesor.

Luego de las clases sali, y estaba Chess en la puerta esperandome.

Yo: ey Chess! ¿Como estas?

Chess: Dani.. todo bien y vos?

yo: bien gracias.. espera ¿que haces aca?

Chess: sabia que te iba a encontrar aca. queres ir a almorzar? yo invito..

yo: bueno si vos invitas... jajaja

Chess era y es mi mejor amigo, se llamaba Jesus.  Le habiamos puesto el nombre Chess, porque era fanatico del Ajedrez, y ademas era uno de los campeones nacionales. Y aunque el ajedrez le demandara mucho tiempo sentado. Era uno de los chicos mas activos que yo conocia. Cualquier deporte le gustaba. Ademas era uno de los chicos mas buscados del lugar, digo por las chicas. Siempre me envidiaban, y tenía pocas amigas justamente porque siempre que alguna se acercaba ami, era para acercarce a él. Y aunque era ridiculo, porque Chess para mi era como un hermano jamas lo habia mirado con otros ojos. Siempre, desde que eramos chiquitos, eramos inseparables. Me llevaba mejor con él que con mi propio hermano. Ademas él en estos momentos tenía poco interes en las chicas, su vida en lo que se trataba de ajedrez o deportes era un éxito. Y era su sueño dedicar su vida a eso. Y afortunadamente asi se estaban dando las cosas.  Bueno tengo que admitir que varias veces les dabamos razones para ser celosas a las chicas. Él me debia varias, porque cada vez que veíamos que venía una chica, o qu e intentaba acercace. El me pedia que lo tomara de la mano. Una vez a la salida de un boliche, una chica se habia puesto tan insoportable. Que habiamos llegado al punto de besarno. Fue tan gracioso. Todos nos miraban y hablaban de nosotros a nuestras espaldas. teníamos tanta risa , que tuvimos que levantarnos e irnos. ademas cuando le pusimos el apodo habia agrdecido tanto, porque el odiaba su nombre. Lo odiaba porque tenía una muy mala relacion con los padres. y mayormente con su madre. toda su familia excepto él eran muy religiosos. Bueno hasta ahora no he descripto a Chess, como se debe, pero él era muy activo, creo que a veces hiperactivo. Era siempre muy sincero, y directo. Era alto, me sacaba como una cabeza. Rubio, de piel morena. Y unos ojos que definitivamente eran la “cereza del postre” para cualquier chica.  Sus defectos: su falta de paciencia, y lo reservado que era. A veces me ponía nerviosa que no me contara, que le pasaba. Y por ultimo su indiferencia, cuando él quería era muy cortante. Y la verdad conmigo, que yo recuerdo no lo había sido, nunca. Él tenía 18 años, 2 mas que yo.

Fuimos a almorzar. Alli estaba nuevamente la chica, que habia visto esta mañana, frente a mi casa. Estaba con una mujer mayor a ella. Quien supuse era su madre. No se la veía igual que esta mañana, algo en su expresion me decía que algo andaba mal.

Ella: basta mama! Es suficiente! Ya te dije que no, y por mas que insistas mi decisión no va a cambiar! (se paró y se fue, sin dejarle a la madre tiempo para frenarla)

Todo el lugar se había vuelto a verla. La madre, disculpándose por el desastre. Aunque no me parecía correcta la actitud de la madre, ya que era exactamente igual a mi madre. Me daba la sensación de ser yo quien salía del lugar corriendo.

Luego de tener una charla con Chess, y de comer algo.  Fui a clases.

Entre al salón, ya estaban todos. Los bancos eran dobles, por lo cual tenía que sentarme con alguien. Nuestros compañeros de banco ya estaban asignados. El primer día de clases elejiamos en que banco sentarnos y asi quedábamos por el resto del año, a no ser que a algún profesor, le molestara nuestra actitud. Yo como todo los años hacía, había elejido el banco que estaba mas cerca de la puerta, ya que no me llevaba bien con mi grupo, y mientras mas rápido saliera de ese infierno, mejor. Nunca me había sentido bien con ellos. La verdad siempre fui diferente. No me llevaba con las chicas porque la mayoría me odiaban por lo referido a Chess. Y otras ni siquiera sabían mi nombre. En fin, yo me sentaba con una chica, Erica. Que dentro de todo, era una de las mejores.

Erica siempre llegaba temprano. Siempre estaba, cuando yo llegaba, ya sentada mirando para atrás conversando con la chica pesada del banco de atrás. Ese día no estaba. Por lo cual supuse que no llegaría. Y acerté, nunca llego.

Cuando estábamos en clase. Alguien toco la puerta. Era el director y venia con alguien mas una compañera nueva, ¿seria igual de superficial que las demás, o le gustaría algo mas que hablar de chicos y pintarse las uñas?