Cuando no buscas, encuentras... Cap. 1 de 3

Literalmente, después de suficientes altas y bajas, y de haber pensando que no encontraría a la persona con quien compartir mis días, llegaste TU... Larissa Yo estaba acostumbrada a conocer chicas en los chat's de ambiente, ya saben, salas de conversaciones donde nadamas decir "hola" te llegaban

Literalmente, después de suficientes altas y bajas, y de haber pensando que no encontraría a la persona con quien compartir mis días, llegaste TU... Larissa

Yo estaba acostumbrada a conocer chicas en los chat's de ambiente, ya saben, salas de conversaciones donde nadamas decir "hola" te llegaban un montón de mensajes privados con todo tipo de comentarios. Era desgastante estar en ese ambiente, ya que pocas, muy pocas personas mostraban intereses más alla de lo sexual. Pero bueno, no existian muchas opciones para conocer personas con cierta seguridad y sin parecer tan vulnerable.

Poco a poco deje de ingresar a ese tipo de chat's y me enfoque en leer en la red (por ejemplo Todo relatos) y otros tipos de Foros. Allí fue donde la conocí. Un día y más por ver que pasaba que por verdadera intensión públique una pregunta sobre si alguien de preferencias como las mías, quería contactarme para una amistad. Realmente no tuve la respuesta que imaginaba, casi nadie me contesto, más que 2 personas. Una, un joven que solo se burlo, y la otra, ella, mi Larissa, pero me comentaba que era "hetero", que si no había problema, jejeje obviamente le iba a decir que no importaba, total yo solo buscaba amistades... Sin embargo, al querer enviarle mi respuesta, me percate que tenía limitado el recibir mensajes, asi que ni como hacerle. Total que di el asunto por perdido y me olvide por unas semanas de ello.

Un buen día, volvi a entrar a ese dichoso foro y se me ocurrió volver a revisar el perfil de aquella chica, y oh sorpresa, su perfil ya estaba abierto, y por fin le pude escribir. Ella contesto casi inmediatamentamente e intercambiamos messengers, y así empezó una linda amistad.

Le conte toda mi vida, y mis experiencias, obviamente ella me daba su punto de vista heterosexual jejejeje, y la verdad que nos divertiamos. Me acuerdo que nos conectabamos por las noches, pero siempre a las 9pm ella me pedia tiempo pues empezaba la novela que le gustaba. Así pasaron los días y las semanas, no supe exactamente cuando ella dejo de ver su novela y cuando yo deje de platicar con mis demás contactos solo para conversar con mi "amiga"...

Entre pláticas y bromas, me di cuenta que Larissa me llamaba la atención poderosamente, y entonces, solo para ver su reacción, empece a coquetearle, obvio que yo esperaba un batazo, pero nada me preparo para su verdadera reacción. Entro en mi mismo juego, y poco a poco, se fue abriendo más conmigo, hasta decirme que yo le gustaba, y confeso que a ella siempre le habian gustado las niñas, solo que por miedo, nunca se habia atrevido a nada con ninguna, que si me contacto aquella vez en el foro fue porque creyo que conmigo podría experimentar, pero al conocerme mejor, se habia dado cuenta que yo no era para eso. En ese instante un sentimiento se incendio en mi interior, y empece a sentir esas maripositas en el estomago, y juro que me puse roja roja, no sabia que decirle o contestarle, pero algo era seguro, Larissa tenía toda mi atención. Los días seguían pasando y cada vez nos haciamos mas cercanas, sin que hubiera alguna propuesta formal por ningun lado, simplemente disfrutabamos las llamadas, los mensajes, las horas en el messenger.

Cabe aclararles, que ella vivía en una ciudad lejana de la mía, donde las personas son muy conservadoras, y por lo tanto, se dan golpes de pecho por todo lo que consideran inmoral, así que mi amiga no la tenía muy fácil que digamos, se sentía bicho raro en esa sociedad, sin embargo eso no mermaba su espiritu. Cuando la conocí estaba estudiando su maestría, y su familia gozaba de una posición económica bastante comoda, no tenía que preocuparse por el dinero y recién le habían comprado un coche, pero para Larissa eso no bastaba. Yo por mi parte, ya me había mudado de la casa familiar, pero vivía en un pequeño departamento de apenas 2 recamaras, una cocinita, un comedorcito, y todo en pequeño, y no tenía recursos de sobra, si bien no la pasaba mal, tampoco me podía dar muchos lujos, más que el saldo excesivo de mi celular y la renta de mi internet jejeje.

Los días al lado de Larissa continuaron siendo bellos, románticos, ya no podiamos estar una sin la otra, por eso un domingo le pregunte, entre broma y en serio, que que eramos... y ella me respondio como si fuera lo más obvio, "pues novias, que no se nota?" jejeje yo me reí bastante y sentía mi corazón latiendo a mil por ella, definitivamente me había enamorado.

Pasaron las semanas, y llego mi cumpleaños, ella se las ingenio para enviarme un arreglo de flores y un globo, yo me emocione y brinque de la alegría, simplemente me habia sorprendido... Así con esa emoción acordamos su primer viaje a mi ciudad, y a las pocas semanas ya estaba esperandola..

Recuerdo perfectamente que llego un domingo a las 3 am, yo fui a recogerla a la terminal de autobuses, y estaba por demás nerviosa y ansiosa. El día anterior, sábado, me había dedidaco a acomodar la casa, ordenar todo, limpiar y relimpiar cada rincón con tal de que se viera impecable, y perfume el ambiente, ya saben, aromatizante de lavanda y cosas así... En mi recamará no había mucho que hacer, estaba mi cama matrimonial, mi buró, mi cajonera para la ropa, y mi escritorio con mi computadora personal, pero una vez limpiado y ordenado, hasta se veía más amplio (nota: es que a mi el orden no se me da mucho...)

Mientras la esperaba,  en aquella terminal semivacia, repasaba mentalmente los días felices que estaba viviendo con ella... y deseaba que no fuera un sueño, cuando una llamada me desperto de mi ensoñación, era ella anunciandome que ya había llegado, así que de nuevo di un repaso mental a lo que haría cuando la viera, si abrazarla primero y besarla despues o viceversa, no me ponía de acuerdo, cuando ella hizó su aparición...

Larissa mide 1.70, es de piel clara, cabello rubio oscuro y de ricitos, ojos color miel, mirada melancolica, labios rosaditos, cejas depeliladas, y pestañas alargadas, simplemente un angel para mi... Vestía jeans, zapatos de piso, y una blusa rosa, y se cubría con una chamarra café de piel, pues estaba haciendo algo de frío... Literalmente la observe y me quede como estatua, no podía reaccionar, hasta que ella se me acerco y me dijo un timido hola... alli por fin me movi y la abracee profundamente, para luego regalarle un beso en la mejilla y sentirme totalmente cohibida ante su mirada... Ella solo solto una risa nerviosa, que a mi me encanto...

(Continuará)...