Cuando fui al cine
Una aventura muy excitante y agotadora le esperaba en el cine.
Un día en que estaba aburrido en mi casa quise ir al cine, aunque no soy muy fanático, la verdad no sabia cual iría a ver, estando en el centro de la ciudad camine mirando las carteleras para ver cual me interesara para entrar, nunca pensé que me iba a atraer una porno, especialmente me gusto un hombre espectacular que salía en la publicidad del cine.
Entre y me senté en una de las ultimas filas al lado de un hombre que a pesar de tratar de verle la cara no pude, en esos momentos el machote que había visto en la publicidad del cine estaba metiéndole la verga a una rubia, en la posición con las piernas sobre el hombro mostrándole todo el culito peludo, me imaginaba tocándoselo y metiéndoselo mientras él culiaba a la mujer, de pronto me toca mi paquete y noto que tengo una tremenda erección, y miro al hombre que esta al lado mío y para mi sorpresa este estaba con su verga afuera masturbándose lentamente, por la poca visión que había no distinguía de que medida era, él se dio cuenta que le miraba y acercándose me dijo al oído ¡¡¡ si quieres te la chupo!!! .
Y me agarro el paquete para luego sacarme la verga y comenzar a pajearme suavemente, por un rato hasta que se arrodillo delante de mí y se la metió toda chupando suavemente, desde la punta hasta los testículos, me hacia jadear, claro que un poco preocupado porque nos podía ver alguien.
Después de unos 5 minutos se levanto y me dijo quieres metérmelo, le dije que no que era muy peligroso, no te preocupes me dijo y saco un preservativo de su bolsillo y me lo puso y dándome la espalda se bajo los pantalones y el slip y se sentó sobre mi polla y mientras miraba la película me cabalgaba suavemente.
En cierto momento tomo mi mano para ponerla en su verga para que lo pajeara, no era muy grande pero la tenia un poco gruesa, finalmente apresuro la cabalgada y yo también le comencé a masturbar más rápido, cuando de pronto siento su esfínter apretar mi verga y su leche correr por mi mano supe que estaba acabando y enseguida lo hice yo.
Se quedo un rato sentado en mi verga la cual seguía erecta, acto seguido se paro y me saco el condón, tragándose todo mi semen y se sentó a mi lado diciéndome¡¡¡ eres fabuloso!!!, le mire y me dio un beso y se fue.
Trate de seguir viendo la película, pero, no podía sacarme de la mente lo sucedido y decidí retirarme, no sin antes ir al baño para refrescarme; comencé a mojarme la cara y el pelo y saque mi pañuelo para secarme mirándome al espejo cuándo de pronto veo para atrás en los baños a alguien arrodillado, y quise investigar de que se trataba metiéndome en la letrina del lado, me senté en el baño para escuchar, con la suerte que había un orificio en la pared y puse mi ojo allí para ver de que se trataba, había un muchacho de unos 20 años sentado mientras un hombre de unos 50 años le estaba mamando la verga que en realidad era bastante grande y gorda ya que el vejete no podía tragársela entera, por mi parte me puse a pajearme mientras miraba tan bonita escena, la verdad era mejor ver en vivo y en directo que la película.
Después de unos minutos el vejete se dio cuenta que les estaba observando y acercándose al orificio me dijo ¡¡¡quieres que te la chupe también!!! , la verdad es que me asuste y subiéndome los pantalones salí del baño y una mano me agarro por atrás, era el cincuentón que me hizo entrar, el muchacho me sonríe y bajándome la cremallera comenzó a mamármelo, mientras el otro se arrodillo nuevamente y también me daba una que otra chupada, se besaban entremedio de mi verga y la verdad me hacían jadear de gusto, de pronto el vejete se levanta bajándose los pantalones mostrando un culito muy bueno y apretadito y le dice al muchacho ¡¡¡ahora quiero que me lo metas!!!
Le pone un preservativo y se sienta dándole la espalda, agarrando mi verga se la mete en la boca mientras cabalga al muchacho, este jadeaba de gusto al igual que yo, la mamada que me daba el tipo era fantástica.
Después de un rato el muchacho le dice al viejo que se levante y poniéndolo contra la pared con las manos apoyadas en el estanque del baño se lo metió, mientras el viejo se masturbaba, por mi parte me pajeaba mirándolos, cuando el muchacho me dice hagamos un trencito, tu me lo metes a mi, no sabia que decir solo asentí con la cabeza, mientras el muchacho se saco un preservativo del bolsillo de su camisa y me lo pasa, me lo puse y trate moverme al ritmo del muchacho pasándole por sus nalgas que entre paréntesis se veían apetitosas, chicas pero pararaditas y apretaditas mi verga que mide 21 centímetros y bastante gorda.
Trate de lubricarle su hoyito con mi saliva y le metí la punta, le sentí estremecerse, pero, siguió con el vaivén que yo aproveche para terminar de introducírselo por completo, quedándose un momento quieto, seguramente porque le dolió pero, casi enseguida siguió apurando mas las embestidas, para luego entre gemidos decir que iba a acabar, solamente sentí apretada mi verga, era la señal que estaba acabando y sin más yo también lance mi leche dentro de él.
Ambos sacamos nuestros respectivos falos de cada culito, mientras el viejo acaba tirando su semen al suelo, acto seguido le saco el condón al muchacho y se trago el semen, hizo lo mismo con el mío.
Nos vestimos y fuimos saliendo de a uno, con la suerte que nadie había en ese momento, seguramente porque la película aun no terminaba.
Me lave un poco y salí del cine, mientras el vejete algo me decía, pero no me detuve para escucharlo solo quería irme a la casa ese día ya había sido muy agotador para mí y no pretendía seguir haciendo nada más.
Si les gusto mi relato les invito a que me escriban y hagan llegar su comentario y también si quieren contarme algo de ustedes: gustavofigueroa@uole.com