Cruzando Caminos: Reconciliación

Capitulo anterior:

Sam y Sebas se encuentras con personas que pertenecen a su pasado,  Cami revela cierto encuentro que tuvo con Sam años antes y finalmente Nat y Fran intentan comprender la razón por  la que aquel chico esta allí.

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Natalia

Camila tomo mi brazo y el de Cecilia llevándonos a ambas al baño de mujeres, allí nos encomendó a cada una cierta tarea que debíamos hacer, nos dijo que después nos explicaría pero que por el momento hiciéramos lo que ella estaba diciendo.

Nos apresuramos a ir donde estaban todos nuevamente y allí yo tome el brazo de Fer nuevamente invitándolo a bailar lo cual el acepto comprendiendo la situación; Ceci por su parte invito a Laura y Raúl a que la acompañaran por unos tragos dirigiéndose hacia la barra; mientras que la misma Camila se encargaba de los atontados Francisco y Erick que miraban expectantes a los que los dos chicos hacían.

Cumpliendo cada una exitosamente la tarea dejamos que ellos dos arreglaran los asuntos que hace tanto tiempo tenían pendientes.

Sebas

Dijiste que yo te había robado lo más importante que tenias, que junto conmigo se fue tu corazón, dijiste que me amabas pero que ese amor tan desbordado se convirtió en odio…

…pero…

…nunca me dijiste que fue lo que sucedió.

Después de separar esos labios que se habían posado en los míos suavemente tú me miraste directamente a mi rostro, tal vez buscando la aceptación o  el rechazo, sin embargo yo estaba seguro que mi rostro no demostraba nada…me habías dejado helado.

Te habías llevado en retribución por tu corazón un suave y dulce beso que no tardo más que unos segundos, pero que en mi interior hicieron explotar un montón de dudas, de verdades, de revelaciones que hasta el momento no me había imaginado encontrar.

-Esto es lo que realmente  siento por ti-me dijo el aun con los ojos rojos de tanto llorar- ahora entiendes porque no puedes estar a mi lado-pregunto sumido en una profunda tristeza…

… tristeza que se veía en sus ojos y en su rostro.

-No te entiendo-le dije posándome sobre mis manos y levantándome suavemente del piso, cosa que el también hizo- si sentías esto, ¿Por qué no me lo dijiste?- le pregunte totalmente absorto en mis propios pensamientos.

-¿Cómo habría de decirle a mi mejor amigo que lo amaba, que aquello creía una amistad sincera en verdad solo era un espejo para ocultar los verdaderos sentimientos que ocupaban lugar en mi corazón, como podría decirte que tu salvador en realidad solo era alguien que en lo más profundo de su alma te amaba con fervor, como podría destruirlo todo?-te hiciste todas esas preguntas a ti mismo y sin embargo aun no te habías dado cuenta.

-Lo has destruido todo de igual manera-pronuncie inaudiblemente despacio pero aun así tu escuchaste, tu corazón escucho las palabras más verdaderas y sinceras de todas las que se acababan de decir.

Tú no te habías dado cuenta, pero, lo que tanto intentaste proteger, se hayo destruido por tus propias manos, por tus propios actos.

-Sabia que me odiarías, sin importar que, desde el principio sabía que esto terminaría de esta manera-dijiste dándote la vuelta para entrar nuevamente a aquel departamento.

"Ese siempre fue el problema", pensé para mí mismo.

-Es que el problema siempre lo has tenido tu-el volteo viéndome directamente a los ojos...ojos que ahora brillaban en destellos fulminantes del fuego que había en mi interior, esa llama que se había encendido desde el momento en que el me pronuncio esas palabras….ahora era una llamarada que no paraba, que prendía lo que fuera a su paso, que lo derrotaba todo sin siquiera la ayuda del viento, ahora estaba dispuesto a hablar, a gritar, a revelar todo lo que me he callado.

-Es que el problema ha sido que no me has confiado, no me has revelado, lo has callado todo para ti mismo, YO era tu amigo por sobre todas las cosas, TU eras el único para mi, SIEMPRE lo fuiste, como es posible que siquiera llegaras a pensar en que te odiaría, como es posible que llegaras a pensar que te rechazaría si en los momentos más difíciles tú has sido quien me acogió en sus brazos y me llevo de vuelta a la luz-te lo decía todo directamente a los ojos, sin titubeos, sin pausas, con total determinación, esta vez estaba dispuesto a TODO .

-Sebastián-intentaste hablar pero ahora ya era demasiado tarde, ahora era mi turno.

-¡Cállate!-grite...-Ahora te callaras y me escucharas a mí, NUNCA pero NUNCA ni siquiera después de aquel día yo sentí una pizca de odio por ti, ni de rechazo- me miraba atentamente- Yo te quería, como un amigo, como un hermano, incluso como mi salvador, es cierto, siempre te lo he dicho que tu eres aquel que ha estado a mi lado y que nunca podría mantenerte lejos de mí, entonces, dime, ¿Algún momento te pusiste a pensar en lo mucho que valías para mí?-eso ultimo lo sorprendió tanto que al levantar la vista pude ver que en sus ojos se reflejaba confusión.

-No-contesto sinceramente.

-Entones dime, como creíste posible que yo destruiría todo lo que teníamos-le pregunte nuevamente acercándome más a él.

-Porque lo destruiste todo mucho antes-pronunciaste quedadamente.

"¿Qué se supone que significa eso?-pensé…

Fran

Camila nos había llevado afuera del boliche, nos tenía agarrado del brazo tanto a mí como a Erick quien solo la acompañaba callado, yo sin embargo no dejaba de preguntarle.

-Camila espera, ¿Qué rayos está pasando aquí? ¿Que se supone que acaba de pasar? Contéstame-le decía continuamente pero ella solo miraba a sus pies.

-Contesta de una vez-habla por fin Erick.

-Esto es algo que solo le concierne a Estefan y a Sam, nosotros no podemos meternos-dijo Camila seria mirándonos a ambos.

-El es mi novio-contraataco Erick.

-Y  Estefan es mi amigo-dije yo a lo que Erick me miro sorprendido.

-Estefan…-repitió, percatándose al fin del nombre de mi amigo- ¿acaso es el mismo?-pregunto ahora mirando a Camila.

-Así es-contesto ella y luego de eso ambos se miraron por varios segundos a lo que yo trataba de comprender sus miradas.

Luego de ello Erick y Cami volvieron a acordarse de que yo también estaba allí y se dispusieron a contarme todo, no falta decir que lo que me dijeron me sorprendió, no solo por el hecho que Estefan fuera quien rechazo a Sam sino por el hecho de que días antes mi amigo me había contado la misma historia, sin nombres, ahora lo entendía, entendía porque el dolor en sus ojos cuando me lo contaba.

Sam

Estefan se había sentado en el lugar que antes ocupaba Laura y yo estaba justo al frente donde Camila había estado momentos antes.

Después del abrazo y toda esa escena melodramática, según yo, nos dispusimos a aclarar las cosas sin embargo ninguno parecía dispuesto a dar el primer paso; yo por mi parte aun trataba de entender ciertas cosas, como por ejemplo ¿Qué lo hizo cambiar de opinión tan rápido? El por su parte se mantenía callado, parecía un poco perdido, como si no supiera por dónde empezar.

-Si nos quedamos callados para siempre no llegaremos a ninguna parte-le dije mirándolo un poco sarcástico.

-No sé cómo empezar-me dijo era la primera vez que lo veía tan nervioso.

-Por el principio…-le digo y el solo demostró una tímida sonrisa- ya está bien ogro ni que fuera a asesinarte por lo que estés por decir- ahora sonrió sonoramente y yo lo acompañe.

Fue raro reírme tan alegremente junto con él, era como si toda esa "pelea"  nunca hubiera pasado, además se me hacía muy tierno que él estuviera tan sumiso, siempre fue de una carácter podrido igual que yo el que estuviera tan callado y pensante se me hacia extraño.

-Soy tu primo que querías, que fuera un osito panda-me dijo él en contestación a mi broma.

-Con esa cara cualquiera pensaría que eres un gatito-seguí riéndome.

Ese tipo de bromas en las cuales solo podíamos participar el y yo, en verdad las extrañaba.

-No hablemos demasiado la maldición nos persigue a todos los miembros de nuestra familia-contesto el resignado.

-Deberíamos hacernos cirugía plástica-dije yo mirándolo sonriente.

-Yo conozco un buen cirujano, ¿te parece mañana?-siguió con el juego.

-Mejor ahora mismo así me salvo de Erick por esta noche-dije yo sin darme cuenta de lo que había dicho.

Debo aclarar que mi cara en esos momentos pasó de sonriente a totalmente roja, baje la mirada hacia el piso y deseaba hundirme en un poso de arenas movedizas. "Que idita, ¿Cómo pude decir eso?"  Pensé en aquel momento hasta que lo escuche reírse a carcajadas.

Cuando lo mire me quería morir de la vergüenza el no dejaba de reírse, un poco mas y lloraba de tanto hacerlo.

-Tendrías que haber visto tu cara…-dijo aun riéndose- parecía como si quisieras cavar una tumba y meterte allí tú mismo-termino diciendo.

-Eres un maldito ogro que se burla del sufrimiento de los demás-le dije tirándome encima de él mientras le revolvía el cabello.

Eso lo solíamos hacer cuando éramos pequeños, jugábamos a ver quien se molestaba primero, y luego cuando uno perdía tenia que aguantarse que le hicieran eso, era chistoso él es menor que yo y su temperamento es aun peor que el mío por lo tanto el perdía la mayoría de las veces.

-Mira quién habla-me dijo el quitándome de encima.

Los dos nos reíamos completamente envueltos en nuestros juegos, cualquiera que nos viera pensaría que éramos dos niños. Y luego justo en el momento en que ambos estábamos combatiendo nuestras fuerzas con los brazos una voz profunda y ronca nos interrumpió.

-¿Debo ponerme celoso y sacarte ya mismo de aquí o me dirás primero que es lo que está sucediendo?-pregunto el chico que estaba justo frente a nosotros.

Nati

Estábamos bailando muy pegajosamente junto con Fer mientras hablábamos sobre lo que acababa de suceder.

-No voy a preguntar qué paso-me dijo el- pero desearía saber  si Sam estará bien-pregunto ahora.

-Mira esto apenas lo estoy comenzando a entender, pero si todo sale como Cami piensa que va a salir entonces te puedo decir que Si, Sami va a estar bien-conteste.

-Y ¿Cómo se supone que tiene que salir esto?-pregunto nuevamente.

-Eso se lo tendríamos que preguntar a Camila-le dije mirándolo resignada.

Aunque quisiera contestarle de una manera más clara la verdad es que apenas empezaba a entender lo que estaba sucediendo,  después de todo, Camila prometió explicarnos lo sucedido luego.

-Se veía asustado-me dijo Fer de pronto.

-Va a estar bien, no creo que pase algo malo-le respondí mirando tras su espalda, donde daba justo la mesa en la que estábamos minutos antes- Mira, te lo dije- llame la atención de Fernando y el mismo con sus propios ojos pudo ver como el antes asustadizo Sam se estaba riendo a carcajadas jugando con ese otro chico como si fueran dos niños.

-Creo que me preocupe demasiado por nada-me dijo demostrando una sonrisa- ahora mejor vamos a lo importante- y me tomo de la cintura para acercarme más a su cuerpo "Este chico sí que me trae loca" pensé para mí misma.

Todo iba muy bien hasta que nuevamente dirijo mi vista hacia la mesa en donde estaban nuestra amigos y me doy cuenta de quien se acerca.

Sebas

-¿Vas a seguir con eso?-pregunte angustiado- ¿me dirás o no a que te refieres?-lo mire a los ojos viendo como él no se inmutaba por moverse de la silla en la cual ahora estaba sentado.

Después de nuestra pequeña charla en el pasillo del dpto decidimos que lo mejor sería entrar adentro y hablar más tranquilamente.

-Es que no lo entenderás…-argumentaste falsamente, desde hacía bastante tiempo me tenias con esas frases sin completar.

-Ya está bien, que mas quieres que haga, te he dicho un millón de veces que nada pasara si me lo cuentas, solo quiero saber la verdad, creo que tengo derecho a saberla-explique por octava vez- por favor Aarón, todo este tiempo, estos meses han sido los más tortuosos de todos, mi familia me abandona, tu también lo haces, y al único que tengo al lado es a Fran y recién ahora eh encontrado a más personas que me acompañan, pero no es lo mismo, si después de esto quieres olvidar que me has encontrado está bien, lo olvidaremos, pero por favor, solo te pido que me dejes cerrar ese capítulo de mi vida-finalice.

Te quedaste callado por un momento, esos silencios me parecían interminables.

-Fue a principio del año pasado, estábamos en los primeros meses de clases-comenzaste a hablar, mientras yo te escuchaba atentamente- tu profesor te había asignado un trabajo en grupo, estabas triste ya que decías querer poder estudiar la misma carrera que yo para así poder estar más tiempo juntos-continuaste mientras mostraba una sonrisa asomaba por tus labios- pero después de un tiempo te comenzaste a relacionar con otro chicos después de que terminaste ese dichoso trabajo, fue entonces cuando mis celos comenzaron-dijiste y la sonrisa se borro al instante.

-Celos, ¿por quién?-pregunte confundido recordaba lo que me estaba diciendo pero no entendía muy bien a qué se refería con los celos.

-Esa chica y tú…-comenzaste a decir y te quedaste a la mitad.

-Diana-dije para mis adentros, estaba en mi grupo de estudio, era la única mujer, muy hermosa y sencilla, pero nunca despertó en mi otro sentimiento que no fuera el de amistad.

-Exactamente, esa chica y tú eran muy parecidos, tenían gustos similares y muy compatibles…-quisiste continuar pero te corte.

-¿A que nos lleva esto Aarón?-pregunte.

-Cuando estábamos a mitad de año, después de finalizar el segundo semestre, yo te vi junto a ella, y días antes ella había estado comentando con sus amigas que ustedes estaban saliendo-tú me miraste entristecido.

-¿Qué?-la verdad es que eso me dejo sin palabras, recordaba que con Diana nos llevábamos muy bien pero nunca llegamos a nada más que amigos- yo nunca tuve una relación con ella-me protegí.

-¿Entonces porque te vi besándote con ella?-preguntaste enfadado.

Cuando dijiste eso lo recordé, ese día habíamos estado hablando sobre todo un poco y ella de imprevisto tomo mis manos mientras me miraba fijamente, luego de eso el beso que vino fue de los más inesperado.

-Pero, aquella ves…-intente explicarme.

-Me habías escondido esa relación, y como si fuera poco aun ahora intentas ocultármelo…-dijiste enfadado.

-No te equivocas…aquella vez yo…-de vuelta me interrumpiste.

-Ellos se enteraron de todo-continuaste- sobre mis sentimientos por ti, por los celos que demostraba al verlos juntos, cuando intente hacer algo para que pararan ya era demasiado tarde, si yo los detenía y no hacia lo que ellos dijeran le contarían a tus padres falsedades y luego a toda la escuela, te dañarían y de seguro esa relación que mantenías con ella se perdería…-una lagrima volvió a recorrer tu rostro – nunca me imagine lo que te harían, primero me dijeron que me separara de tu lado, luego que te ignorara, finalmente ese día me llamaron por el teléfono, odie con toda mi alma contestar aquella llamada…-mas lagrimas caían de tus ojos.

- Te obligaron a presenciarlo -mire a mis pies.

-No sabía  para que querían que fuera, pero me dijeron que fuera rápido, que no me tardara, y cuando te vi allí parecías un cachorrito acorralado, desee abrasarte cuando  tus ojos rogaron por mi protección, pero lo que recibí del otro lado fue la mirada amenazante de Alejandro, el me dijo con los ojos todo lo que te haría si yo no me mantenía al margen y lo único que pude hacer es ignorar la situación como lo venía haciendo los últimos meses, te juro que verte allí fue lo peor, yo pensé que solo te golpearían nunca me imagine lo demás, pero para cuando quise ayudarte ya era demasiado tarde…pensé que todo lo que yo era se había perdido, ya no existía ese amigo o ese salvador que tu deseabas, solo quedaba el cascaron-finalizaste.

El silencio reino por un instante…tus ojos no me miraban es más me esquivaban…yo por mi parte intentaba encontrar en ese profundo agujero negro la luz que antes se había extinguido…esperaba volver a verla…pero al parecer, como tu dijiste, solo quedo el cascaron de aquella perdona que una vez fuiste.

- Yo nunca tuve nada con ella -dije- ese día ella me sorprendió y me beso pero yo nada tuve que ver, tus celos o lo que sea que hallas sentido me los tuviste a haber señalado-el me miro confundido y luego al parecer había aceptado que en la sinceridad de mi mirada no se escondía ninguna mentira- yo lo hubiera dado y dejado todo por ti, tú eras mi mundo, ¿Cómo pudiste pensar que alejándote de mi  podrías protegerme?- te pregunte viéndote mientras agarrabas fuertemente con ambas manos tu cabeza.

No contestabas solo te limitabas agarrarte la cabeza, parecías estar tan confundido y a la vez tan aliviado, tal vez esa noticia sobre mi "relación" con Diana fuera lo que te había desequilibrado pero no hay dudas de que el que les permitió hacer lo que quisiera con su mente fuiste tú, te dejaste engañar, no confiaste en mi, y con tus propias manos destruiste tu mundo, llevándote al mío sin darte cuenta.

-Yo…-intentaste hablar-…no sé como esto pudo terminar así…no se… ¿Qué te hice?-parecías preguntártelo a ti mismo, mientras tus lagrimas ya no se escondían y como momentos antes caían sin poder detenerse.

Temblabas terriblemente, ese alivio que vi en tu mirada ahora era remplazado por frustración, por dolor, por culpa…tus sentimientos se habían encontrado en tu interior haciéndote ver la verdad, estabas tan confundido, que ahora  veías mas claramente lo que yo trataba de decirte, al fin te diste cuenta de que fue tu confusión, la desconfianza, el engaño mismo, todo ello te llevo a dañarme y al mismo tiempo te dañaste a ti mismo.

Sam

Mire el rostro del sujeto que estaba delante de nosotros, parecía extraño, como enojado, miraba atentamente a mi primo y este último solo le sonreía, asumí que sería un conocido suyo pero no entendí muy bien lo que quiso decirle a Estefan.

-Justo a tiempo-escuche decir a Estefan quien se levanto dando un largo y profundo suspiro- Sami, el… esta es la otra persona que he dañado y por ende la persona que me ha cambiado, después de esto posiblemente me quieras matar y lo comprenderé-continuaste y ahora tu mirada triste y confusa volvió- David él es Samuel… mi primo- el chico me miro asombrado y luego giro a ver a mi primo- Sami él es David mi…

pareja

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Bueno o yo escuche mal o el dijo "pareja"…no entiendo.

-¿Pareja?-pregunte- ¿en qué?- ambos se miraron y luego me miraron a mí.

-Soy su novio- escuche la firme voz del chico que estaba al lado de Fan.

Ahora si no me queda duda de que me volví loco, acaso dijo ¿novio?

-¿Qué?-pregunte confundido.

-Sera mejor que te sientes y escuches atentamente…-me dijo Estefan volviendo a mi lado- mira esta historia no es algo que me enorgullezca, al igual que a ti, el sufrió mi ignorancia pero su corazón…bueno su corazón me cambio…sus sentimientos pudieron llegar a mi alma y de esa manera, cuando estaba a punto de perderlo, pude aceptar lo que sentía y por fin ahora estamos juntos-continuabas hablando pero mi mente parecía un remolino de preguntas que no tenían respuestas.

-Sami necesito que me escuches atentamente, por favor, después de esto podrás mandarme a la mierda, golpearme o hacerme lo que tú quieras, pero solo por este momento escúchame, por favor-decías mientras el chico que decía ser tu pareja se alejaba de nosotros.

-Está bien-conteste yo, aunque estuviera confundido no podía no escuchar lo que tenias que decirme.

Luego de eso me contaste cada una de las cosas que pasaron durante esos últimos años de secundaria, cuando conociste a tu gran y primer amor, esa persona que acababa de irse era aquel que por primera vez te hizo sentir el terrible dolor de la soledad, del no tener un amor verdadero ni de tener amigos con quien compartir tu vida, te hizo sentir la desolación y tu frustración aumentó tanto que no pudiste mas sino aceptar lo que sentías por él. Por primera vez estabas enamorado, por primera vez sentías la perdida de esa amada persona,  y por primera vez te diste cuenta de las cosas que perdiste…por ti mismo lo destruiste y ahora por ti mismo intentas recuperarlo.

[Referencia requerida en: "Ver con el corazón y no con los ojos].

Creo que cuando finalizaste no pude hacer más que mirarte totalmente descolocado, tu mirada era triste cuando parecías querer olvidar el pasado, pero igual que todos debías llevar tu carga en la espalda, y por más que quisieras hacerla desaparecer solo aquellos a quienes has hecho mal pueden decidir eso; porque fuimos él, yo y muchos otros los que sufrimos por tus palabras, por tu rechazo, y como tal somos únicamente nosotros los que podemos alivianar esa pesada carga.

Tal y como lo hizo el ahora yo te libraba, ya no necesitabas cargar con esa culpa, yo ya lo había aceptado, todos y cada uno de nosotros cometimos errores en el pasado, yo no soy la excepción, nadie lo es, nadie escapa de los errores y de la vida, es un ciclo que se cumple en todas la etapas no importa cuánto queramos esquivarlo, hay veces que dañamos sin siquiera saber que lo hacemos, hay otras que lo hacemos conscientemente, pero no importa ninguna de esas cosas lo que importa es la intención que tengamos, el saber perdonar y el saber sobrellevar la culpa para siempre aunque el dolor se haya extinguido, hay que saber responder a cada una de esas lecciones, para no cometer dos veces el mismo error, para no lastimar dos veces sin intención, para no…perder…lo más preciado, lo más valioso, lo mas importante…como lo es el amor.

-Solo por esta vez, TE PERDONO -te dije a los ojos- pero- me miraste sorprendido-…Juro que cuando tenga la mas mínima oportunidad te voy a cortar la cabeza-lo dije medio en chiste medio en serio, mi enfado aun estaba MUY presente.

-Fui un idiota-contestaste.

-Sí que lo fuiste…-te dije y luego…un vaso que contenía alguna clase de bebida se incrusto en tu rostro mojándote por completo- …por el momento ese será tu castigo, por el momento, cuando se me ocurra algo más SUFRIRAS-te dije mirándote amenazante, y justo después, ambos nos largamos a reír.

Al fin, ahora te  tenía de nuevo a mi lado.

-Ahora que te parece si vamos a conocer un poco más a mi nuevo primito-te dije pasándote la mano.

-Me parece bien, creo que se quedo preocupado-me dijiste mirando para poder encontrarlo y lo que vimos fue a Natalia y a David hablando muy tranquilamente.

Al parecer había mucho de que enterarme aun.

Sebas

Al fin te habías calmado, ahora me mirabas a los ojos, los cuales aun no podían asimilar la culpa y el malestar, pero aun así sentí que confesarlo todo fue lo mejor.

-¿Qué quieres hacer ahora?-te pregunte.

-Esa pregunta la debería hacer yo-dijiste.

-Tus sentimientos…aun siguen siendo los mismo-pregunte temeroso.

-Si quieres saber si te sigo amando, te contestare que hoy más que nunca el único que ocupa mi corazón eres tú, esta vez no me lo callare-sentenciaste.

-Pensé que tu corazón te lo había robado yo…-te mire y nuestros ojos se juntaron-…lo siento-continúe-…aunque si te quiero como un buen amigo, tú debes saber que también lo eres todo para mí, pero-tus ojos brillaron por un momento-…la verdad es…que NO comparto el mismo tipo de amor que tu dices tener por mi-esa luz se extinguió en ese preciso momento.

Te mantuviste callado, mantenías la vista fijada al suelo, odiaba cuando hacías eso, desde pequeños nunca me gusto que lo hicieras, realizarlo solo significaba que te habías rendido.

-No te lo pregunte…-dijiste casi inaudible.

-Pero al igual que yo necesite una explicación, tú necesitas una respuesta-conteste.

-Ya lo sabía…-levantaste la cabeza- lo supe desde siempre, tus ojos nunca me miraron como yo te miro a ti, tu necesitabas a un amigo, y yo estuve allí desde el principio, no importa cuánto lo intente ese lugar no me lo sacara nadie, pero yo tampoco podre ocupar otro lugar en tu corazón…-sonreíste con apenas una mueca y aun así las lagrimas no paraban de caer por tus ojos- LO SIENTO TANTO -mis brazos solo pudieron abrazarte en ese momento.

No importa cuánto lo intentara, yo a ti no te podía odiar, no podía…simplemente era algo imposible en mi corazón tú eras parte importante de mi vida, si te odiaba seria como estar odiándome a mí mismo…no podía…por más que quisiera te quería, tal vez no como tú a mi pero lo hacía a mi manera…te quería.

- TE QUIERO - te dije... te abrace, tan fuerte como tú lo hacías hace tanto tiempo, reconfortándome en esos brazos que me tomaban delicadamente, hundiéndome en ese pecho que con su hermoso ritmo me sumían en un profundo sueño, ese corazón cálido y acelerado, te lo había devuelto, y ahora ya no me iría de tu lado.

Tus lagrimas caían sobre mi hombro, en silencio llorabas, pero…tal vez no de tristeza sino de felicidad…esa misma felicidad que en mi embargaba era esa misma felicidad que en ti existía…tus suaves latidos me lo confirmaron, en ellos podía encontrar la sinceridad más amplia.

-Debes irte-dijiste soltándote de mi fuerte amarre- debe alejarte de mí-la tristeza depositada en tus ojos se hacía visible a los míos.

-No quiero-dije aferrándome a tus manos.

-Te hare daño…-continuaste.

-No si no quieres-te mire.

-Lo siento, pero debo vivir con esta culpa…-dijiste cabizbajo.

- NO …Yo te perdone, hace mucho tiempo atrás lo hice, nunca te odie, te lo dije, quiero que te quedes conmigo… POR FAVOR -la primera lagrima salió furtiva de mis ojos.

-No llores…-dijiste tomando con tus manos la gota que caía por mis mejillas.

-Si te vas de mi lado lo hare-continúe.

-No me hagas esto…-me miraste tristemente.

-Tú no me lo hagas a mí- te abrace tan fuerte como para que no puedas soltarte.

-Sigues siendo tan terco como siempre…-me susurraste al oído-…antes hacías los mismos berrinches cuando querías quedarte en mi casa.

-Es que nunca me gusto estar lejos de ti-te dije.

-A mi tampoco-y esta vez fuiste tú quien me abrazo fuertemente-… me quedare -dijiste suavemente... estabas junto a mí .

***Bueno primero que todo debo pedir una

Gran

disculpa si es que en el capitulo anterior cree confusión con la forma de escritura que implemente (error propio de mi). Bueno segundo agradecer los comentarios y por supuesto las sugerencias y señas que me hicieron. Tercero y último, decir que la verdad no sé si esto quedo como yo me lo imagino, pero que espero que les guste…saludos…comenten, valoren, y acepto cualquier sugerencia (no se priven).***

P/D: Mensaje directo para mi hermanito Nahúm; odiaras este capítulo, lo sé, tú querías verlos sufrir a Estefan y Aarón y ahora que los perdonaron apuesto a que no te gustara pero bueno ya dije que soy benévola, aunque aun pueden pasar muchas cosas asique no sé. Bueno y mira que al menos no hice que Sebas estuviera también enamorado de Aarón esa es la parte buena, jajaja!!! TE QUIERO HERMANITO…Familia LOS AMO…saludos.