Crucero por el mediterraneo.
Una pareja de divorciados acaban viajando por el mediterraneo con motivo de la primera comunión de la hija que ambos tienen en común.
Mi nombre es Juan Alberto, tengo 42 años y desde hace 79 años vivo divirciado de mi ex Claudia.
Nos casamos a los 26 años después de toda una vida como novios. Nos conocimos en la universidad como hacen muchas parejas. Acabamos juntos la universidad como abogados. Nos iniciamos en el mundo laboral y des pues de cinco años más de noviazgo nos casamos por la iglesia como Dios manda. Eramos una pareja feliz, tanto nuestra familia como amigos estaban encantados con nuestra relación y la verdad es que la vida tanto familiar como profesional iba viento en popa. Claudia iba creciendo en el despacho de abogados en el que trabajaba y por mi parte habia creado una empresa que iba viento en popa. Como digo la vida nos sonreía, viajes, lujos y por fin llego nuestra hija Lola. Lola era la luz de mis ojos y creo que como pareja eso nos unió aún más. En aquel momento nuestra vida sexual que siempre había sido excelente decayó de forma alarmante. En aquel momento lo achaque al estrés de tener que atender a Lola, trabajar en su despacho y dormir poco. Habíamos pasado de polvo diario desde la universidad a follar algún sábado que otro.
Hace como digo, nueve años me surgió un viaje urgente a Paris, en principio iba a irme un día a primera hora y volvería al día siguiente por la noche. El viaje fue estupendamente contra pronostico acabe mis reuniones a media tarde del primer día, anule el hotel, cambié el billete de avión y volví a casa. Al abrir la puerta se me heló la sangre, oía a mi mujer berrear a la vez que la el cabecero de mi cama golpeaba la pared. Deje caer la maleta me dirigí hacia mi habitación. Me que de piedra, allí estaba Claudia a cuatro patas con un hombre de aproximadamente nuestra edad dandole fuerte desde atrás y delante de ella y con su polla en la boca se encontraba su jefe en el despacho de abogados El de atrás estaba obviamente sodomizandola, la muy puta que solo me habia dejado darle por el culo en ocasiones especiales ahora recibía polla en su ano como si no hubiera un mañana. A su vez su jefe la agarra de los lateras de la cabeza y le daba sin cesar. Las tetas de Claudia se balanceaban a causa de las fuertes envestidas de su sodomizador. Claudia no gemía, Claudia gritaba. Un flash de la cámara de mi móvil paró la escena. Pensandolo hoy, me imagino que hasta es gracioso, pero todos pararón de golpe y miraron para mi. Nadie dijo nada, nadie se movió. Yo me dí la vuelta y salí de casa. Me dirigí a casa de mi hermana, allí estuve dos noches Claudia ni me había llamado, ni un sms, ni nada. El día en que volví a casa a recoger algunas cosas, me volví a sorprender cuando al meter la lleva, esta ni entraba. La muy puta había cambiado la cerradura. La cosa fue muy rápido a partir de ahí. Me llegó una citación del juzgado, Claudia me pedía el divorcio por abandono del hogar, pedia la mitad de mi empresa, la custodia de Lola y un pastón mensual para su manuntención. POr supuesto nuestro piso, la casa en la sierra, la casa en la playa y los coches los pedía para ella. En principio creí que con la foto de mi móvil iba a llegar para no darle nada a esta zorra, pero las cosas se volvieron en mi contra cuando en el juicio sus amantes declararon que como pareja nos dedicabamos al intercambio de parejas, que era habitual que organizabamos orgías y que desconocían la razón por la que YO había roto con ella. Me cayo la del pulpo. Como Claudia esperaba de un día a otro me tope sin casa donde vivir, sin dinero en mis cuantas bancarias, sin la posibilidad de ver a mi hija más que fines de semana alternos, con un scooter como vehículo y con una socia en mi empresa que no solo tenia ni idea del negocio, que no había hecho nada por hacerla crecer y que iba a ser una carga. Vamos un desastre.
Después de seis meses dando tumbos, me llego una oferta por mi empresa, la empresa compradora sabiendo la situación accionarial de la misma ya habia hablado con Claudia por su participación. Antes de firmar por mi parte el director General de la empresa compradora, amigo desde hace muchos años, me confeso que a por el 50% de Claudia se pagó ni un 10% de lo que me pagaban a mi.
Aquel paston cambio mi vida. Volví a tener coche, me compre un chalet a las afueras de Madrid y sobre todo me dio la financiación para crear una empresa online que me rondaba desde hacia años en la cabeza. La empresa fue un bombazo, podemos decir que me forre de la noche a la mañana, pase a ser una persona publica. el triunfador del año, el joven emprendedor al que todo universitario quería imitar. Por su parte Claudia convivió con su jefe, que era realmente su amante, el otro no era más que un compañero de ambos y que de vez en cuando "jugaba" con ellos, durante un tiempo. En realidad cuando se cansó de ella no solo la abandono sino que además para evitarse problemas la despidió del bufete.
La verdad es que no la veía más que para recoger a Lola, yo a ella, por que ella a mi no dejaba de verme, me imagino. Era un personaje de las revistas tanto económicas como del corazón. Realmente era un gozada follarme a actrices y modelos, pero era una constante acabar saliemdo en el Hola y el Semana. Llegue a la conclusión que eran ellas las que avisaban a la prensa para promocionarse, pero bueno, tener en la cama a la estrella de 21 años del último bombazo de la taquilla botando sobre mi polla compensaba todo.
Lola sobrevivió unos años sin trabajar, pero cuando se empezó a quedar corta de pasta tuvo que empezar a buscar trabajó y sin que ella lo supiese le conseguí uno. Me aseguré que le pagasen bien, pero tambien me aseguré que la deslomasen a trabajar y por último tambien me aseguré que cada vez que buscaba un nuevo trabajo, las puertas se le cerrasen de manera que no le quedase más remedio que trabajar con una negra.
Llego la primera comunión de Lola, era la primera "reunión" familiar para Claudia y para mi. Organice una gran comunión, aparte de querer que mi niña nunca olvidase ese día con mucha gente conseguia cruzarme lo menos posible a la bruja.
Eramos más o menos 100 personas. Una de las cosas más interesante de ser rico es que tu familia no te dice que no a nada, si organizas algo, no hay excusa para no ir. Claudia vino un acompañante que no conocia ni su madre, me imagino que su último ligue, un abogado que se pasó toda la noche intentado que hablase con él, cosa que evité más o menos elegantemente, y a mi me acompañó Beatriz More, la actriz del momento, el mito erotico de la juventud y la comidilla de todos los invitados. La fiesta fue un éxito, durando hasta altas horas. La fiesta tuvo lugar en un pequeño hotel en la sierra que habia alquilado para tanto el sabado como el domingo. Cuando nos retiramos a la habitación Beatriz y yo empezamos a besarnos, era muy dificil no estar muy salido estando al lado de ella. Tanto Beatriz como yo eramos de follar en silenció, Bea me gemía al oído mientras el daba caña y a mi la verdad no se me oia. "Romepeme el culo cabrón" oimos en la habitación del al lado. Beatriz y yo nos quedamos parados escuchando. En la habitación de al lado estaban follando duro. Al hombre se le oía bufar a la mujer se la oía gritar, lamentase, pedir cosas, gemir, gritar, ordenador, suplicar. La estaba dando de lo lindo y ella lo radiaba. Nos enteramos que la habian dado duro por el culo, la habian comido el coño, habia chupado una polla y eso le gustaba, la habian follado sobre el mueble bar y habian acabado corriendose en su cara. Beatriz se puso por una moto con la "escena" y a mi se me puso más dura quizás por ver a Beatriz como una moto o quizas por saber que era Claudia la que era reventada a pollazos en la habitación de al lado. Me follé a Beatriz con dureza durante toda la noche.
La verdad es que no podía ver a esta hija de puta, pero he de reconocer que me puse como una moto oyendola follar de nuevo. El mundo se me cayo encima cuando m hija Lola me llamó para decirme que quería que nos fuésemos de crucero como regalo de comunión. Que nos fuesemos TODOS juntos de crucero. ¿Quien iba a decirle a la niña que no?. Como era de esperar, yo me hice cargo de los billetes. POr un momento pensé en coger un camarote como dios manda para mi y la niña y un camarote barato para Claudia, de esos sin vistas a al mar para Claudia, pero hacer eso era mandar a Lola a un armario por que al fin de cuentas su madre tenia la custodia. En principio pensaba que Bea vendría conmigo y Claudia con quien quisiese, pero Lola se negó, quería viajar con sus padres por primera vez en su vida.
El barco salía de Barcelona, yo me uní a las dos damas en el mismo puerto pues aproveche el viaje a la ciudad condal para mantener una reunión con uno de mis clientes. El barco era impresionante y nuestros camarotes eran de lo mejor del barco. Lola insistió en tener su propio cuarto, se sentía mayor y era su viaje.
La primera noche cenamos juntos, acostamos a la niña y por primera vez en 9 años nos tomamos una copa como amigos. Claudia vestia de una manera muy atractiva, desde luego nada que ver con mias acompañantes habituales, pero llevaba un vestido de gasa que le marcaba sus pezones de una manera muy sexy. Bebimos más de la cuenta y acabamos hablando más cerca de lo que se supone que hacen dos amigos. Debido al alcohol no paramos de rieir y de contarnos confidencias al oido. Acabamos la última y cada uno se dirigió a su camarote, al día siguiente teniamos que desayunar en con la niña y visitar Palma de Mallorca, nuestra primera parada. Me metí en la cama y ante mi sorpresa emepce a oir fuertes gemidos provinientes de la habitación de Claudia, obviamente se estaba masturbando y se corria a gritos ahogados, sonreí y traté de dormir, pero al no parar los gemidos acabe masturbandome como un crío.
A las tres de la tarde estábamos de vuelta en el barco, el cual salia hacia Tunes, era el trayecto más largo del viaje. Comimos juntos y fuimos a la piscina. Claudia llevaba un mini bikini que la verdad hacia abrir la boca más de uno. De nuevo cenamos los tres juntos y de nuevo nos dimos al alcohol una vez acostado a la nena. LLevabamos unas copas y cuando ya estábamos de nuevo contandonos confidencias, le pregunte a bocajarro
Muy bien te lo pasaste ayer cuando te deje en tu habitación.
No me digas que me oiste.
Te oyo toda la cubierta.
Tanto se oyo.
No veas como.
Espero que no te molestase.
Todo lo contrario, siempre es agradable dormirse con una bella mujer al lado corriendose a grito.
Ella sonrió.
Bebimos un par de rondas más volvimos a dirigirnos a nuestro camarotes. Cuando iba a cerrar me dijo:
Juan, dime una cosa.
Dime
Te posó mucho oirme ayer?.
Mucho.
¿Te masturbaste tu también?
Como un quiceañero.
Ja ja ja, lo siento.
La noche se repitió. Claudia empezó a gemir antes de que yo hubiese salido del baño, en vez de acostarme cogí un vaso y con él en la pared, oí como Claudía gemía, se lamantaba, aullaba, hasta que se corrió en un largo orgasmo. Yo mientras agitaba mi polla de pie en la cama con el vaso entre la pared y mi oreja.
Tunez le encantó a las dos chicas, volvimos cargados de mierdas, de esas que al final acabas tirando pero tuvimos un buen día. El barco zarpo hacia Malta a las cinco de la tarde. Tomamos un poco el sol, cenamos y después de ver con la niña un espectáculo para chavales en el teatro del barco. Acostamos a la niña y esta vez nos fuimos a la discoteca del barco, bailamos bebimos, pasamos por el casino, perdimos una pasta y de allí nos pasamos al bar a bebernos el nilo.
¿Te gusto ayer?.
¿El que?
El como me corrí ayer.
Ah, ¿te corriste?
Como una loca.
¿Y que es lo que te pone para correste cada noche?
Me pone mucho que me oigas.
La mire, sonrie y le dije:
¿y que te vean?
Es una de las cosas que más me pone, cuando me acuesto con un hombre no se que me pone más correrme o ver como me corro.
¿Y es eso algo muy habitual?
Juuuuuuan, que soy tu ex mujer y la madre de tu hija.
¿Y?
Que me perderías el respeto.
Seguimos bebiendo, esa noche se nos fue de las manos y volvimos a la habitación agarrandonos uno al otro y riendonos por cualquier tontería. Claudia iba realmente borracha, no la recordaba a´si desde nuestra ncohe de bodas, en la que de lo borracha que estaba se quedó dormida mientras me la follé.
Entramos cada uno en su habitación y fue salir del baño y ver que mi movil sonaba al haber entrado un whatsapp. "si quieres ver lo que te has perdido todos estos años he dejado la puerta abierta". En la pared ya se oian los gemidos, no sabia que hacer. Me iba a cubrir de mierda y lo sabía, pero era más la lujuria que la inteligencia.
Entre en su camarote y me la encontré a cuatro patas flotandose su clítoris. Claudia seguía estando muy buena a los 35, ver sus tetas colgando me hizo recordar la noche en la que la pille siendo infiel, pero desde leugo en aquel momento era lo de menos. Claudia gemia y me miraba mientras yo me sentaba en un sillón a ver el espectáculo.
Claudia gemia y entre gemidos empezó a hablarme.
¿ves lo que te has perdido todos estos años?
Osea que ¿esto es lo que hacías todas las noches?
Esto es lo que hago casí todas las noches, o ¿te piensas que me masturbo por ti?
Bueno tu me dirás.
En el barco por supuesto.
Eres un cabrón.
Hazte la estrecha ahora.
No sabes la de veces que me han follado mientras pensaba que eras tu el que me bombeaba - Claudia se corrió con un sonoro grito. Parecía que la cosa se quedaba ahí pero ante mi asombró Claudia cogió un peine que tenia encima de la mesita de noche con un grandisimo mano y se lo metió en su ano de un solo golpe de muñeca. Su cara cambió cuando el mango entro en su culo, su respiración se agitó y empezó a correrse una y otra vez. Ella me miraba como diciendo metemela, incluso yo pensaba en metersela, pero me contuve y espere a que acabase. Claudia se corrió, me levante, le guiñe el ojo y salí de la habitación.
A la mañana siguiente llegamos a Malta con un calor increible. Visitamos la isla que nos maravilló, cenamos en el restaurante más fino del barco y llevamos a la niña a bailar un rato, después la acostamos y nos dimos al alcohol, de nuevo pareciamos dos tortolitos. Cada noche estábamos más cerca, nos hablábamos de cosas más personales y la cosa se ponia cada vez más caliente.
¿Te gusto ayer?
¿Y a ti?
Me puse a mil. Me encato que me vieses masturbarme.
¿Y es algo que haces muy habitualmente?
Más de lo que te imaginas.
¿Siiiiii?
Si, Juan si. A unas nos ponen unas cosas y a otras nos ponen otras. Me han dado de todos los colores, me la han metido por todos lados, me he corrido como una posesa, evidentemente tu hija no sabe nada por que siempre he hecho estas cosas o al medio día mientras ella esta en el cole o los fines de semana que esta contigo. Pero desde que salí de el bufet he sido una mujer sexualmente muy activa. ¿Y tu?
¿Yo?, pues más o menos lo que cuentan las revistas. No sabes el gusto que da follarse veinteañeras.
¿Y eso?
Por su coño, suelen ser coños muy estrechos.
No has probado mi culo - me dijo guiñandome un ojo.
No hace mucho que no.
Insisto, no has probado mi culo.
LLegamos a nuestros camarotes como motos, esta mujer se estaba jugando un pollazo y yo era suficientemente tonto para darselo.
Volvía salir de la habitación y volvió a llegar un mensaje a mi móvil. Esa noche decidí no acudir, simplemente deje que se masturbase con la incógnita del momento en que entraría por la puerta. Cosa que no hice, simplemente la escuche correrse mientras yo me masturbaba con maestría.
La visita a Roma fue maravillosa. visitamos todo lo que nos dio tiempo. Lola nos hizo prometerle que volveriamos un fin de semana. Ya en el barco cenamos, mandamos a la niña a dormir y volvimos a la discoteca del barco, bailamos, bailamos y bailamos, cada vez más pegados. Echábamos chispas, parecía mentira que esa mujer hacia solo unos dias era la Cruela Deville de mi vida. Esa noche no hizo falta que me mandase el mensaje, sencillamente empuje la puerta y me encontre a Claudia desnuda abierta de piernas con ellas en alto y flotandose el clitoris con dureza y los ojos en blanco, gemia con la boca abierta mientras se daba placer.
- aggggg, cabrón hoy no estabas invitado.
Saque ni polla y empece a masturbarme.
agggggg cuanto tiempo sin ver eso.
¿Una polla?
Esa polla
Durante 20 minutos Claudia se retorcia dandose placer, sus pezones, sus maravillosos pezones duros como piedras. Claudia se cogía una teta y se la chupaba, me miraba y se recreaba con su lengua. Sandra se corrío entre alaridos. No se como aún no la habian echado del barco. Menuda manera de gemir, siempre fue muy ruidosa, pero con la edad la cosa iba a más. Volvió a coger el cepillo, volvió a meterselo en el culo poniendolo a pocos centimetros de donde yo me encontraba., no sé como no me resistí pero cuando me quise dar cuenta me encontraba con el cepillo en siendo yo el que lo movia dentro del culo de mi ex. Mi muy puta arqueaba la espalda mientras enlazaba un orgasmo con otro. No había acabado con uno mientras llegaba el otro.
¿Así era como te daban por el culo cuando te pille, eh zorra?
Asi no, cuando me pillaste ademas me estaba metiendo una buena polla en la boca.
¿Y te gustaría una buena polla en la boca ahora?
Me encantaría - me dijo
Simplemente aceleré el ritmo he hice que acabase reventada despues de incontables orgasmos. Claudia se volvió cuando yo cogía mi polla y empece a agitarmela en su cara, estaba tan salido que tarde menos de dos minutos en empezar a soltar lefa a lo que Claudia respondia abriendo su boca y sacando la lengua pillando al vuelo la lefa que caía. Me guarde la polla en mi pantalón, volví a guiñar mi ojo y salí de la habitación.
Nuestra última etapa era en Savona, una mierda de ciudad que unido al mal tiempo hizo que la visita fuese corta y aburrida. Cenamos por última noche en el barco y después de acostar a la nena volvimos a lanzarnos al alcohol.
Quien te iba a decir a ti en estos úlimos años que te ibas a correr en la boca de tu ex.
Yo no me corrí en tu boca.
Si lo hiciste.
No lo hice, tu pusiste la boca debajo de mi polla.
Casi me la meto en la boca.
Creo que vas a tener que esperar a volver a MAdrid para meterte una en la boca.
Creo que va a tener que esperar a Madrid para que te la chupen.
Esa noche acabamos lo que se dice borrachos, lo de las noches anteriores era una coña en comparación con el estado en que estábamos hora.
Esa noche simplemente la empuje dentro de su habitación. Claudia no dijo nada, solo se puso a cuatro patas, se levantó la falda y apartó su hilo del tanga. Yo tampoco dije nada, simplemente saque mi polla y se un solo golpe se la metí en el culo-
Agggg que gusto cabrón.
Osea que este es tu culito cerradito.
Dame fuerte cielo, dame que se que lo deseabas.
¿Te dan así tus amantes?.
Me dan mucho mejor.
¿Mejor?
Mucho mejor, me tocan el clítoris cuando me sodomizan.
Fue dicho y hecho, Metí mi mano por el único hueco que quedaba y empece a frotar su hinchado clítoris. Claudia no paraba de suspirar. Realmente tenia un culo estrecho, me recordaba al coño de Beatriz aunque nada me podía dar más morbo que sodomizar a esta hija de puta. Cada movimiento en su coño era una victoria sobre ella, me encantaba tenerla sometida con mi polla dura dentro de su culo. Me corrí como un poseso, no recordaba haberme corrido nunca con tantas ganas y placer. Claudia estaba reventada y no paraba de gritar de orgasmo en orgasmo Saque mi polla y cuando la dirigía hacia su boca ella aparto la cara
recuerda que no pienso chupar una polla hasta llegar a MAdrid.
¿Como?
Si, cielo, si quieres que te la chupe vas a tener que esperar a Madrid.
Desde ese día yo creo que la niña se dio cuenta de que algo se cocía. Empezó a pedir que viajásemos con cierta frecuencia. Evidentemente cada viaje que nos dábamos un atracón de sexo para recuperar el tiempo perdido. En Madrid empezamos a hacer mñas vida en común con la niña y no pocas veces acabamos en la cama.
Yo seguí follandome a mis actrices y Claudia con sus follaamigos, pero desde luego a pesar de nuestras diferencias o veíamos el momento de volver a meternos en la cama.