Crucero luna de miel 2 (version Natalia)
Sigue la historia contada por Natalia de lo ocurrido en su luna de miel en un crucero.
No tardamos mucho en llegar al camarote y los dos entraron conmigo. No pude darme cuenta hasta después del porqué de aquellas miradas entre los dos sonriéndose. Me desnudaron y se desnudaron y los tres nos fuimos a la ducha.
Cariño- dijo Pablo.- hoy estas disfrutando de lo lindo verdad?
Si.- sonreí diciéndolo con cara de medio ida.
Este viaje experimentaras muchas cosas muy morbosas, y esperamos que después nos hagas alguna visita a casa, pero ahora lo mejor es que te des una duchita calentita.- me dijo mientras con su mano hacia que me arrodillara entre ellos.
Yo los miraba mientras me arrodillaba, extrañada que aun les quedaran fuerzas para darme de mamar. Pero no eran esas sus intenciones. Vi como cada uno se agarraba la polla y apuntaba a mi pecho. Los miré sin poder creer lo que iban a hacer. Mi cuerpo no reaccionó, o quizás si porque en vez de irme o decir que no, me sujete las tetas y abrí la boca. Fue entonces cuando dos chorros de pis me dieron directamente en mi boca. No me desagrado, ni el olor ni el sabor que no era fuerte, pero si me impresionó la temperatura caliente del pis que empezó a llenar mi boca. Sin pensar tragué para abrir de nuevo la boca mientras se alternaron mojando mi pecho también. Cuando tragué por segunda vez los dos chorros se dirigieron a mi cabeza mojándome por completo la cara y el pelo. Dejé de ver mientras notaba como los chorros iban perdiendo fuerza hasta dejar de impactar en mi cuerpo. Yo seguía arrodillada y sin ver nada cuando escuché a Pablo decir:
Eres la ostia pequeña.- riéndose mientras cogía la alcachofa de la ducha para echar agua sobre mi cabeza.
Joder Natalia eres toda una zorrita, en serio que tendrás que venir a Valencia a menudo a hacernos alguna visita, lo pasaremos bien.
Yo estaba sorprendida de todo lo que había pasado. Era en ese momento cuando me empezaba a dar cuenta que no solo había follado con dos maduros poniéndole los cuernos a mi marido, si no que había dejado que se corrieran sin condón, y había dejado que me mearan, sin contar que también había tenido mi primera experiencia con otra mujer.
Al terminar de ducharme me tumbe en mi cama mirando a Pablo y Jordi charlar entre ellos mientras se vestían. Se despidieron de mi con un beso en los labios cada uno y se fueron.
No tardo mucho la puerta en abrirse y entrar Juan. No me moví, estaba muy cansada y solo quería dormir. Escuché como se desnudo y se metió en la cama. Poco después note que pegaba su polla a mi. Joder yo ya había follado bastante ese día, pero él era mi marido, aunque fuera el culpable de todo lo que había pasado. Haciendo un esfuerzo saque algo de culito para facilitárselo. Enseguida mis labios aun mojados de excitación por todo lo vivido dejaron su polla entrar. Me embistió varias veces pero se corrió enseguida. Salió de mi y se durmió y yo hice lo mismo.
Por la mañana me desperté muy relajada, como si hubiera dormido varios días seguidos y me fui a ducharme. Al salir vi a Juan despierto en la cama
- Hola cariño, has dormido del tirón ¿ eh?.- le dije sabiendo que querría hablar de todo lo ocurrido. Pero yo lo tenía muy claro, si él no hubiese ido metiendo su polla en boca de nadie, nada de esto hubiera pasado. Bien es cierto que lo de dejar que se corrieran dentro de mi fue algo que hice sin pensar pero en aquel momento me pareció excitante la posibilidad de quedarme embarazada de alguien que no fuera él.
-Si ... yo...esto....si...dormí del tirón. - dijo nervioso imagino que recordando lo que había ocurrido el día de antes.- oye, deberíamos hablar sobre lo de ayer, ¿ no crees?- me dijo después como dubitativo.
¿ Que quieres que hablemos? - le dije intentando parecer decidida y segura.- ¿ Quieres que hablemos de como me engañaste al dejar que Marina te la chupara? ¿ o prefieres que hablemos de como después de eso te corriste en la boca de Monica.- le dije a modo recordatorio de porque habíamos llegado a aquella situación.
No yo...yo me refería a.... - me dijo mientras yo viendo que se sentía culpable al ver lo que hice yo y que efectivamente fue porque él dio el primer paso.
Sin dar importancia a lo que decía empece a vestirme y le corté diciendo:
-Mira cariño, yo te quiero mucho y se que serás el padre de mis hijos, pero ayer te dejaste embaucar por dos mujeres mientras yo estaba en este camarote leyendo tranquilamente. Y por si lo quieres saber, vinieron Pablo y Jordi y me enseñaron una foto que les mandaron sus mujeres por wasap y vi como dejaste que te la chuparan. No podía creer que mi marido me estuviera engañando con unas mujeres mucho mayores así que pensé que no sería justo que solo yo fuera la cornuda y por eso me acosté con ellos dos. Pero no te puedes quejar, creo que tu también te lo pasaste muy bien, ¿ no?.- dije mientras me terminaba de vestir.
- Date prisa en ducharte que se hace tarde para la comida. Estoy esperándote con tus "amigas" en la cafeteria de la cubierta tres.- le dije abriendo la puerta del camarote y saliendo de allí.
Me temblaban las piernas. Nunca había sido una mujer tan autoritaria ni tan directa, sino todo lo contrario. Pero aquello me hizo como si abriera mis ojos. No me iba a quedar quieta viendo como él me era infiel, no me iba a dejar pisotear y a partir de ese momento iba a disfrutar de la vida.
Al llegar a la cafeteria ya estaban los cuatro valencianos allí.
Hola chicos.- dije algo avergonzada por lo que paso la noche anterior y de lo que, aunque no me arrepentía, era algo nuevo para mi y no sabia bien como actuar.
Hola folladora.- dijo Marina riéndose.
¿ Donde has dejado al semental?.- me preguntó Mónica.
Se iba a duchar y ahora vendrá. Le costo levantarse.- dije sentándome entre los cuatro.
¿ Todo bien?- preguntó Jordi.
Si si todo bien.- dije sonriendo algo avergonzada.
Ya pero queremos saber que tal con Juan, ¿ habéis hablado? Me dijo Marina cogiéndome de la mano.
Si bueno....un poco.
Te dire algo, si no comprende que se joda, que lo hubiera pensado antes de dejarse hacer la mamada.- dijo Pablo algo molesto mientras echaba un sorbo a lo que tomaba.
La verdad cariño, es que Pablo tiene razón. El empezó todo esto con nosotras dos y tu también tienes derecho a ser feliz.- dijo Marina llevando mi mano a su boca para darme un beso cariñoso, una sonrisa y un apretón de apoyo.
Si bueno.... eso es verdad. dije yo sonriendo tímidamente.
Se fuerte y ponle en su sitio.- dijo Mónica.
En ese momento llegó Juan.
Hola, perdonadme el retraso.- dijo mientras se sentaba a mi lado y me daba un pico.
Ya que estamos todos, podemos ir a comer ya, ¿ no?.- dijo Jordi mientras que Pablo añadió.
Si, yo también tengo hambre que ayer tuvimos mucho desgaste.- dijo riéndose mientras golpeaba a Jordi con el codo y miraban a sus mujeres y luego todo el mundo se puso a mirar a Juan a ver que reacción tenía.
Yo también me reí y no pude evitar decir:
- No os quejéis que la que mas desgaste tuve fui yo.- y al oírlo todos se echaron a reír mas fuertemente, hasta Juan se rió aunque creo que no le hizo mucha gracia mi comentario y solo se rió por no quedar mal.
Al llegar ya estaban sentados Carlos, Idoia, Edmun y Emma. Los saludamos y nos sentamos y charlamos. Juan que estaba a mi lado estaba algo tenso con toda aquella situación, así que en la comida puse mi mano en su pierna para tranquilizarlo y que supiera que yo seguía estando ahí, hiciéramos lo que hiciéramos. Me acerqué para darle un beso en la mejilla y le susurré:
-Relájate cariño y disfruta de nuestra luna de miel y por favor cambia la cara que por lo que vi en las fotos no tenías esta cara cuando te la estaban chupando. Disfrutemos ¿ si?. -quería que le quedara claro que no fui yo la que promovió aquella situación y pienso que eso lo sabía y es lo que mas daño le hacía.
La comida paso como una comida cualquiera. Las charlas fueron banales, pero con la complicidad entre nuestras mirandas que las otras parejas no llegaban a entender. En los postres al ir a comer un poco de tarta de chocolate se me cayó encima de la blusa dejándome una buena mancha. Marina mojó una servilleta en agua y me froto la parte manchada que casualmente estaba en mi pecho. Entre el frotar, y la humedad de la servilleta la mancha se quito un poco pero mi pezón se puso como una piedra. El sujetador azul que me había puesto ese día se empezó a transparentar por la blusa. Marina seguía frotando en medio de todos y me miraba lasciva sabiendo que no solo frotaba para quitar la mancha sino que a veces sobaba un poco mi pecho y la parte de mi pezón para ponerme mas cachonda aun. Emma nos dijo que en su camarote tenia una especie de "cebralin" alemán que quitaba todo tipo de manchas, que después de comer podríamos ir y probar.
Mientras que todos incluido Juan se fueron a una de las terrazas, yo me fui con Edmun y Emma a su camarote a por esa cosa mágica para quitar las manchas. Al llegar vi que su camarote era mas grande y entre con confianza y me senté en una de las sillas. Emma nada mas entrar me dijo que me quitara la blusa cosa que hice sin reparos aun estando Edmun delante. Pude ver como me miraba y sonreía.
-No te preocupes por él cariño, no hace nada que no le ordene yo.- dijo Emma.
¿ como?- pregunté atónita al oír aquello.
Si, lo que oyes, que es mi perrito, mi maridito perrito, ¿ verdad cariño?- dijo agarrando su mentón y dándole un pico ante mi ya en sujetador.
Si mi amor, tu perrito obediente.- dijo Edmun.
Yo no me lo podía creer. Aquellos alemanes eran Domina y sumiso. No lo hubiera adivinado nunca. Edmun, un tio grande y mayor mientras que Emma mas menuda y mucho mas bajita. Estaba alucinando mirando como a una orden de Emma, Edmun se arrodilló y empezó a besarle los pies.
- ¿ Has visto mi niña?, Edmun es muy buen perrito y muy obediente. Anda Edmun ve y saluda a nuestra invitada como se merece.
Dicho esto Edmun se acerco a gatas hacia mis pies y los empezó a besar. Emma me hizo sentarme y al hacerlo Edmun me quito las sandalias que llevaba y siguió lamiéndolos. Yo me estremecía. Había oído hablar de aquello, incluso había visto videos, pero nunca pensé que estaría en la misma habitación viendo aquello. Notar la lengua de Edmun en mis pies hacia que me excitase. Mis pezones se empezaban a notar tras el sujetador azul que llevaba.
- Pero niña, no te emociones que Edmun es mio. Se que tu eres un poco como él, ¿ verdad?. dijo mientas se sentaba a mi lado en la cama y me acariciaba la cabeza llevándola hacía su pecho.
Yo no supe reaccionar y asentí. Deje que pegara mi cabeza en su pecho mientras Edmun seguía con mis pies. Poco después abrió su blusa sacando un pecho para que se lo chupara. Yo, una chica a la el sexo era normal toda su vida, estaba ahora metida en una tormenta de placer. Obviamente abrí mi boca y empece a chupar a aquella mujer de 60 años. Sus pechos operados reaccionaron bien a mi lengua y empece a notar su pezón ponerse duro en mi boca. A todo esto, Edmun empezó a meter sus manos entre mis piernas para agarrar mi tanga y quitármelo. Emma me desabrochó el sujetador y me quede desnuda completamente sin parar de chupar sus pechos.
- Vas a ser tu una buena perrita, ¿ verdad?. me dijo mientras me dejaba de lado y miraba a su marido y sonreía.
Yo no pude mas que asentir. Vi como ella le hizo una seña a el y me abrió las piernas y empezó a chuparme mi rajita que ya estaba muy mojada. Emma se desnudó e hizo que me tumbase sentándose en mi cara. Tenía su viejo coño encima de mi cara cuando vi que suspiró y se sentó en ella. Pude notar como sus labios se abrieron al rozar mi nariz y mi cara. Empecé a chupar como pude mientras notaba que mi cara se llenaba de su flujo. Seguí lamiendo hasta que note como se corría estremeciéndose encima de mi cara. Después se quitó dejando a Edmun comiéndome el coño. Abrió un armario y sacó varias cosas.
- Perrito, ayuda a nuestra putita a subir a la cama. Va siendo hora que aprenda quien manda.- dijo Emma con una voz tranquila y serena pero seria.
Me colocaron a 4 patas en la cama. Me ataron las manos y los pies. Me pusieron una venda. Noté algo rozarme por el cuerpo hasta que un azote en mi nalga derecha hizo que gimiera. Edmun agarró mi cara y empezó a meterme su polla en mi boca. Suspiraba chupando atada y sin ver nada. Aquello era muy excitante. Algo rozó mi coño y note algo de goma entrar mientras que Emma me acariciaba la espalda diciéndome que estuviera tranquila que iba a disfrutar mucho. Poco después algo entraba en mi culito. Noté como me lo abría poco a poco hasta que se colo dentro.
Allí estaba yo, en una cama de unos sesentones, atada de pies y manos, vendada y con un dildo en mi culito y otro en mi coño, sin contar que estaba chupando una polla. Mi cabeza estaba dando vueltas a todo aquello y de como había sido tan puta las ultimas horas y porque cuando noté un fuerte azote en mi nalga y como salían los dos dildos de mi culo. Las manos de Emma me agarraron de la cadera y algo entró de nuevo en mi coñito. Tras entrar hasta el fondo salió y entro en mi culito. Emma se habría puesto un arnés, pero no podía verlo y aquello lo hacía mas excitante incluso. Nose cuanto tiempo estuve así pero dio tiempo a Edmun a correrse en mi boca y mi cara. Yo trague sin pensarlo y seguí chupando. Aquella polla madura se puso algo morcillona pero al poco volvió a tomar dureza en mi boca. Cuando estuvo dura la saco de mi boca, y Emma salio de mi dejando sitio a Edmun que me la metió en mi coño empapada de mis babas.
- Sabemos que no tomas píldora cariño, así que disfruta de la corrida de Edmun y de lo que pueda venir después.- me dijo acariciándome la cara sin que pudiera verla y riéndose me dio un par de bofetones flojos en mi cara.
Edmun gemía mientras soltaba dentro de mí su segunda corrida.
Tras aquello me soltaron. Al hacerlo no pude sino darle un beso a Edmun en la boca y otro a Emma como dándole las gracias por aquella pequeña iniciación a la sumisión. Había disfrutado mucho y obviamente repetiría. Cogí mi blusa y fui a cambiarme a mi camarote sin darme cuenta que tenia restos de semen por mi cara. Al llevar me vi en un espejo y entendí porque la gente con la que me cruzaba me miraba así de raro. Me lave y me cambie la blusa y fui a buscar a mi marido y a los demás a la terraza. Al llegar todos me miraban sonrientes menos Juan. Me senté y le di un beso. Mónica me quitó un resto de semen de pelo y me sonrió.
-Tardaste mucho cariño - dijo Mónica mientras me quitaba algo del pelo.
- Si bueno - dije mirando a Juan y ver su expresión antes de mirar a Mónica para contestar .- ya sabes como es Edmun.- Eso hizo que todos rieran incluso Jordi dijo "bien por Edmun". Eso me hizo entrever que nadie sabia la naturaleza sumisa de Edmun, porque si que me había follado, "bien por él", pero la que realmente lo permitió fue Emma.
Tras aquello hablamos de ir a la cena en ropa blanca y sin ropa interior. Nos fuimos al camarote a cambiarnos y nada mas entrar me lance a besar a Juan. No le debía nada pero me daba algo de pena el que yo estuviera disfrutando de tanto sexo y él tan poco. En la cama empecé a chupársela hasta que le creció y se le puso muy dura. Corrí mi tanga u me subí encima y empece a follar yo encima. Estuve un rato follándolo hasta que se corrió muy dentro de mi. Deje que su polla saliera de mi pero no me quite de encima suya. Deje que todo el semen que me había dejado dentro y probablemente algo del de Edmun saliera y cayera en su polla ya flácida. Cuando terminé de chorrear me puse a su lado y lo lamí todo de su polla y sus huevos donde había caído.
Espero que os guste y os pido como siempre comentarios en mi correo o a través de la página. Siento si no estoy a la altura de la historia que esperabais. Espero mejorarlo con la tercera y ultima entrega de Natalia.
Espero vuestros comentarios y criticas tanto buenas como malas. Gracias de antemano.