Crónicas de Vhaalzord - Libro 2 - 1

La Ciudad Estado Portuaria de Kliwgord, lo más parecido a una Sodoma y Gomorra a lo bestia… El sitio perfecto para que yo descanse y me relaje… matando. Una mujer que me toma por un perrito o algo asi… ¿Quién de los dos ladrara primero?

CRONICAS DE VHAALZORD

Libro - 2

Capitulo- 1

Me encontraba en la ciudad estado portuaria de Kliwgord, paso obligado, puerta de entrada y salida del estrecho de Kliwn, que separa los gigantescos océanos occidental de oriental, ruta vital para el comercio entre ambos océanos y sus naciones, quien domina la ciudad de Kliwgord controla el estrecho en un casi 90% de eficacia. Las catapultas de sus gigantescas murallas pueden hacer añicos cualquier barco que pretenda atravesar el estrecho sin permiso. Si se salvara sería un milagro, por eso lo he dejado en solo un 90%, porque siempre existe algún milagro pese a todo.

Os preguntareis porque sigue existiendo semejante ciudad como algo independiente, porque nadie ha intentado conquistarla nunca siendo tan estratégica, ¿verdad?. Bueno porque por una lado atacarla y ocuparla supondría que casi todas las otras potencias de ambas zonas te atacaran en el acto, y porque en la ciudad de Kliwgord está la sede de la Cofradía Roja... un gremio de magos expertos en magia ígnea tanto defensiva como ofensiva, y dado que la única forma posible de ocupar la ciudad con un mínimo de posibilidades es por mar... imaginad una flota de barcos de madera rumbo a al menos más de medio centenar de magos que siempre están en la cofradía que pueden lanzar tranquilamente bolas de fuego contra los mismos, por poner un ejemplo vistoso y fácil de comprender en sus consecuencias.

A ambos lados del estrecho existen enormes, pero enormes macizos montañosos, dando enormes cortadas al estrecho y a la ciudad, digamos que algo similar a un fiordo, con sus enormes paredes verticales. En cada uno de los lados del estrecho, en lo alto de los farallones se encuentran sendas fortificaciones completamente inexpugnables capaces de llenar todo el estrecho de proyectiles incendiarios con sus catapultas negándoselo a la navegación a cualquier barco que deseara cruzarlo, solo se lo permiten a aquellos que autorizan desde la ciudad la cofradía. Ambas se comunican entre sí por dos enormes puentes telescópicos que se tienden desde accesos especiales en las fortificaciones, empalmándose en el centro del estrecho, a cerca de mil metros de altura sobre el mismo para pasar de una a otra, ya que es el único modo de acceso para una de las dos fortificaciones, salvo que se quieran emplear cuerdas para subir desde el mismísimo estrecho y sus peligrosas corrientes, a la otra se accede por una escalera protegida por un muro lateral desde la ciudadela externa de la Cofradía Roja, estando controlada siempre por ellos, con lo que ningún pequeño ejército podría nunca llegar por ahí a las fortificaciones para sorprender la ciudad con sus catapultas desde allí arriba. También por ahí se accede a las alturas donde están las de las entradas de los desfiladeros de los accesos terrestres, también comunicándose mediante otro ingenioso sistema de puentes telescópicos entre ellas, blindándolas de esta forma a asaltos a traición sobre las mismas.

Por tierra lo de intentar entrar con un ejército en la ciudad es misión imposible, imaginad el estrecho de los Dardanelos en Turquía, la ciudad solo está ubicada en este caso en uno de sus laterales, pero para acceder a la ciudad solo se puede hacer por los largos y enormes desfiladeros que transcurren entre sus farallones, como pudieran ser por ejemplo los desfiladeros de acceso a la antigua ciudad de "Petra" para que os hagáis una idea... las fortificaciones que nombre antes y que están en lo alto de los mismos además lo impedirían seguro sobre seguro, y aun cayendo estas que no sé cómo se las iban a apañar para subir hasta allí sino es desde la misma ciudad por delante de los hocicos de los magos, o como con las del estrecho con cuerdas por las paredes verticales que dan a las murallas de los mismos, la salida de los desfiladeros van directas contra las murallas de la ciudad situándose las puertas de acceso a la misma como a unos doscientos o trescientos metros a un lateral de la salida de los mismos, con lo que estaríamos en las mismas.

La defensa terrestre de la ciudad es como una especie de Termopilas pero a lo bestia, para que nos aclaremos, sería casi igual, solo que en este caso los 300 tendrían murallas para protegerse, un ejército de mercenarios detrás, seguro que algunos magos de la Cofradía y para colmo una ruta marítima de abastecimiento por mar, ya que esto sería posible desde una de las dos direcciones del estrecho... si intentas bloquear la ciudad desde el océano occidental podrías reabastecerse desde el oriental o viceversa, por eso es por lo que la ciudad aguanta tan ricamente, no creo que ningún reino esté en condiciones de sitiarla por todos sitios a la vez, y aun en ese caso podría aguantar años el asedio lo que objetivamente haría inviable el sitio por su coste económico para cualquiera, sin contar con cómo se pondrían de contentos muchos reinos a ambos lados por el perjuicio económico que supondría este bloqueo. Su punto más débil en su defensa es la propia Cofradía Roja ya que sin el apoyo de esta la ciudad caería antes o después por un asalto por mar con más o menos bajas por parte del atacante, pero dado que el dirigente de la ciudad es el gran maestre de la Cofradía, que la ciudad es de la Cofradía... su punto débil resulta paradójicamente ser el más fuerte de su defensa, ya que los magos defenderían la ciudad a como dé lugar y no hay posibilidad de que cambien de bando, tampoco es factible dada su organización el que se peleen entre ellos tampoco.

Hace apenas un año el Imperio Sharnem declaro la guerra a los Principados Nekrim... fue el envite de un elefante contra un tiburón. El Imperio Sharnem es eminentemente terrestre, tan solo hacía apenas seis años que ocupo territorio costero, hasta esa fecha no tenia salida al mar. Los principados sin embargo son un archipiélago de islas que controlan en lo posible todo el comercio del tipo que sea en un amplísimo radio de acción a su alrededor, usando su flota mercante y de guerra como un pulpo sus brazos, el Imperio los acuso de estar armando y avituallando a los rebeldes de su territorio declarándolos al final la guerra. Una enorme flota de más de 4500 barcos partió para el archipiélago con la sana intención de ocuparlo, pero la flota estaba comandada por un general del ejercito... en fin, un desastre, tras nueve horas de combate con la flota de aproximadamente 500 navíos que los Nekrim lograron reunir entre buques de guerra y mercantes que armaron, apenas lograron llegar a puerto seguro 80 de los barcos de la flota imperial, entre ellos estaba el Navío Capital con el general a bordo, así que os podréis hacer una idea del desastre. Por cierto que el General fue arrojado al mar por orden del emperador con los pies encadenados a piedras para que compartiera la suerte del resto de su flota a la que abandono a su suerte. Los Nekrim perdieron cerca de 200 navíos, pero lograron capturar con distintos daños unos 190 navíos de los de la flota imperial... que aunque no tan buenos como los suyos, una vez reparados les seguían otorgando el control del océano a su alrededor durante bastante tiempo.

Ahora parece que ambos tienen sus ojos puestos en la ciudad de Kliwgord, el imperio para cerrarles a los Nekrim el estrecho y ahogar su economía ya que la de ellos es principalmente por caravanas desde el interior del continente, ya que como digo hasta hacia unos pocos años no tenia accesos al mar. Y los Nekrim tienen sus ojos puestos en ella para evitar que el imperio pueda hacer eso precisamente y de paso intentar bloquear el acceso de cualquiera que negocie con ellos por vía marítima lo que pone también nerviosa a muchísima gente, y con eso me refiero a dirigentes de otras naciones a ambos lados del estrecho. Pero claro, a ver quién es el guapo que la invade, por mar cualquier flota está condenada, entre las catapultas y los magos calculad lo que duraría... por tierra la cosa es peor todavía con los desfiladeros, solo queda la traición desde su interior pero la principal baza para que esta caiga es la Cofradía que resulta que es quien manda en la ciudad, así que no veíais lo divertida que está la cosa en su interior.

Esta ciudad para más inri no es la típica ciudad que podemos encontrar en cualquier sitio, no, esta ciudad dadas su particularidades y su situación es más una Sodoma y Gomorra a lo bestia que otra cosa, dudo que en el interior de sus muros alguien pueda encontrar una sola persona decente, aquí por ejemplo no hay familias ya que nadie en su sano juicio viviría aquí con ellos. Es una especie de gigantesco puerto comercial a lo bestia ya que todo barco que quiera pasar el estrecho tiene que amarrar en sus muelles para pagar su peaje bajo la ley de la Cofradía, o por narices para no ser destruidos, si lo preferís ver de esa otra forma. Por eso esta ciudad está sin la parte esa de los típicos barrios donde vive la población, allí sobre el terreno donde esos barrios deberían de alzarse, donde esa población debería de estar está ocupándolo casi todo, se encuentra aquí ocupado por alojamientos, tiendas de todo pelaje y tipo, locales de diversión con juego, mujeres, etc... La tiendas están en manos de distintos gremios específicos (mas bandas de forajidos que gremios pero bueno) que tienen contratados sus propios guardias dada la ciudad como es, también evidentemente hay determinadas organizaciones que dominan el llamado bajo mundo, que en este caso concreto es toda la maldita ciudad. El nivel de crimen es de aproximadamente 3 o 4 asesinatos diarios... que por cierto desde que estallo la guerra se han ampliado al doble casi, pero bueno, también hay robos, violaciones, venta de esclavos, peleas entre facciones criminales, entre tripulaciones de barcos piratas y demás lindezas que la guarnición de mercenarios de la ciudad no hace nada por evitar salvo que la cosa se vaya de madre, además no lo hacen por orden estricta de sus propios superiores, aunque la patrullan y evidentemente a nadie se le ocurriría meterse con una de las patrullas. La "seguridad ciudadana" los magos se la dejan a las cofradías o bandas como prefiráis llamarlo, ellas son las que imponen la ley en las calles. Esta ciudad es así desde hace más de doscientos años, no creo que nadie sepa cómo demonios se transformo en esto que es ahora, como podréis comprender al mantenerla así, los magos se aseguran que no haya revueltas o tumultos en su interior, y en caso de existir estos pueden emplear toda la violencia que quieran, no importa si al represaliar el alzamiento o si al detener una pelea convertida en tumulto matan a doscientos, trescientos o más inocentes en el mismo, entre otras cosas porque aquí no hay inocentes de nada y por otra parte que enseguida el hueco de los muertos será ocupado por nuevas gentes del mismo pelaje dada la cantidad de dinero que se mueve en la ciudad.

Desde que estallo la guerra cada vez se empezaban a ver por aquí cosas de lo más raro, sin contar con la enorme multitud de espías de todo pelaje de ambos bandos, dado que nadie en su sano juicio podría invadirla la alternativa es la obvia, intentar atraerse a los magos a su bando, o bien sobornarlos para que sean estos los que cierren el estrecho al contrario. Y como ya se sabe, a rio revuelto ganancia de pescadores, también empiezan a mezclarse digamos que gente de países no invitados a la fiesta, países que acuden aquí por sus propios intereses, entre los que se encuentran el que no les vayan a cerrar el estrecho también a ellos por poner un ejemplo de lo más claro... por medio además los distintos gremios de cosas de lo ajeno, piratas que pululan libremente al ser puerto franco ya que solo piratean en el océano a un lado del estrecho, pudiéndose mover por el océano contrario con total libertad, etc… y yo con mi bondad e infinita paciencia, me encuentro enormemente contento en medio de todo este berenjenal, trabajando de portero de una casa de diversión de los muelles, al cuidado de que nadie se pase ya sea dentro o fuera del mismo montando escándalo. Llevo seis meses aquí y me he ganado mi pequeña reputación de persona seria, bueno, yo y mi bastón. Debo de indicar para terminar de hacer la composición de lugar completa, que las señoritas que trabajan en el local me aprecian bastante también, aunque no me refiero exactamente a lo que estáis pensando todos.

Si me preguntáis el porqué de estar aquí... bueno la respuesta es muy fácil. La verdad es que podría decir que es porque fui a caer aquí de forma accidental o fortuita, pero mentiría como un bellaco. La pura verdad del caso es que viene a esta ciudad apropósito, pasaba cerca de ella, conocía su fama, comprobé que era cierta y decidí venir aquí para poder descansar agusto por primera vez en muchísimo tiempo, dado mi eterno odio, mis constantes ganas de matar todo lo que se cruza en mi camino, mi total falta de eso que llamamos sentimientos, que mi “locura” empezaba a hacerme mella y dado que aquí no existen "inocentes" que me pudieran llegar a decidir volver una vez más a intentar frenarme en mis actos complicándome todavía más la situación del momento... es el sitio perfecto para mí, no voy llamando la atención obviamente y creo que a estas alturas os podéis imaginar el porqué lo evito, pero digamos que si estoy en situación de no llamarla, entonces mato con enorme placer al "incauto" que se meta conmigo, me mire mal, me haga un chiste, o cualquier cosilla de esas tan tontas que no me gusten. Como ya os digo, me encuentro aquí descansando de controlarme todo el rato, eso es lo que hago aquí. Desde que llegue ya he tenido el enorme placer de eliminar a más de treinta manchas de la sociedad... y me siento bien, de hecho me siento mucho mejor que bien, ha sido como un... como quitarse un peso de encima, creedme, como una terapia de relajación. Eso sí, dado que la Cofradía es quien manda aquí, magia la justita y necesaria, limpiando cualquier rastro que pueda quedar de su uso, porque no creo que les hiciera la menor gracia saber que tienen un mago incontrolado dentro de los muros de la ciudad... pero que ninguna gracia. Cualquier mago que llega tiene derecho a usar la ciudadela de la Cofradía, que es un método la mar de efectivo de controlar cualquier mago que entra en la ciudad, al estar en la ciudadela y ser controlado por otra parte te otorga ciertos privilegios en la ciudad, como un pase permanente ante cualquier gremio de la misma, hagas lo que hagas ninguno osara tocarte, entregándote al castigo que decida la Cofradía, que siempre será algo más suave que el castigo único de estos, la muerte. Así que como comprenderéis, para cualquier mago lo mejor es ir directo a la ciudadela... menos yo claro, bueno yo, y algún otro despistado que si es descubierto sin pasarse por la ciudadela... digamos que lo mejor es que salga corriendo.

Cuando llegue, la primera noche después de buscarme alojamiento, entre en un local a tomarme unos tragos, en ese local hubo un incidente entre una de las mujeres que trabajaban allí atendiendo a los clientes con las bebidas y dos de estos que empezaron a ponerse sobones. Dada la tensión acumulada que llevaba desde hacia bastantes día intervine, pero lamentablemente al estar tan concurrido como estaba el local, estaba de bote en bote, solo me limite a usar mi bastón con ellos, dejándolos a ambos inconscientes. A uno le abrí la cabeza y al otro le rompí varios dientes, os juro que me quede más agusto que agusto, me sentí genial después de romperles la crisma. La parte buena es que la dueña después de ver mi desempeño con los dos molestos hablo conmigo por si quería trabajar para ella en el local como garante del orden en él, el anterior por lo visto tubo algún tipo de accidente o algo así por lo que me dijo. Ya sabéis lo que significa eso, ocuparme de que no entren borrachos, que no haya peleas, que no molesten a las chicas, etc... en fin digamos que trabajar de portero de club de alterne para que os aclaremos, pero en un sitio donde todo el mundo anda armado hasta los dientes.

El primer mes tuve varios problemas... el primero de todos fue una autentica gozada ya que me intentaron asesinar, si como oís, me intentaron asesinar y disfrute como un enano de ello. La noche del incidente eche a un marinero que estaba bastante borracho por meterse con las chicas, cuando cerraron de madrugada, me fui como es mi costumbre a dar un paso por los muelles, sinceramente es un sitio muy, muy peligroso para andar, pero iba con la mejor de las intenciones, iba a ver si algún alma caritativa intentaba asaltarme para poder matarlo y desfogarme un poco. Pues al caso, resulto que este marinero debió de tomárselo fatal, era un marinero de un barco de esclavos y no debía de estar muy acostumbrado a que le zumbaran, así que se fue a buscar a dos amigos para junto con ellos presentarme sus respetos que un sitio solitario.

Cuando lo detecte, con sus correspondientes buenas intenciones simule una huida frenética, con el único fin de que se separaran para acorralarme, cosa que tuvieron a bien hacer los tres. Podría haber acabado con los tres a la vez, pero hubiera armado demasiado ruido y atraído la atención de algún ojo curioso de algún gremio o algo así, de esta otra forma sin embargo se podría dedicar a desempolvar viejos conocimientos y ponerlos al día. Con el primero de ellos no tuvo mayor historia la cosa, me oculte en unas sombras junto a un soportal, paso por delante mío, salí tras él, le sujete de la cabeza y con una daga en la otra mano le rebane el cuello, dejándolo tirando allí desangrándose, muriendo, eso sí, con el único fin de que pareciera un robo le quite la bolsa, que por cierto se notaba que habían cobrado hacia poco algún cargamento por que iba bien provista, pero como digo solo fue para disimular el porqué de su muerte, que conste.

El segundo tampoco tuvo mas historia deje mi bastón medio oculto por unos barriles que había en la puerta de un local en la calle por donde iba a pasar, al verlos se pensó lo obvio, que estaba ella escondido y que era presa fácil. Cuando saco su espada y la alzo para clavarla sobre quién hubiera tras los barriles le sujete por el cuello, clavándole la daga por el costado izquierdo, justo en el corazón, muriendo en el acto, una vez mas lo disimule todo como un robo, llevándome otra suculenta suma de dinero, pero como dije antes solo por disimular, ¿eh?, no penséis mal.

Con el último y causante de todo esto todavía fue más divertido si cabe, me deje ver por él, deje que me viera entrar corriendo en un callejón. El pobre tipo vino corriendo tras de mi espada en mano, penetrando en el callejón a por mí, desafortunadamente un callejón es mal lugar para usar una espada contra nadie, y menos todavía contra nadie que lleve algún objeto más largo que la espada con el que pueda mantenerte a raya, el lo descubrió cuando con el bastón le obligue de un golpe seco en las manos a dejar caer la espada...cuando se agacho para intentar recogerla aproveche mi oportunidad, avance con rapidez soltando el bastón, con el pie pise su hoja impidiéndole recogerla mientras mi mano izquierda lo sujetaba con una fuerte presa por el cuello y con la derecha le abría la tripa en canal con la daga... una vez que sintió todo el dolor del corte y me asegure que supo que había llegado su hora... le reincorpore, metí una mano en el corte sacándole todo lo que pude coger de adentro hacia afuera, asestándole sendos cortes también sobre la trasera de sus rodillas para que no pudiera huir, cortándole la lengua con la daga para que no pudiera pedir auxilio y yéndome tras haberle limpiado como a los demás, todo en cuestión de pocos minutos... dejándolo tras de mi mientras moría. Por lo que supe al día siguiente lo habían encontrado al par de horas, según dijeron debía de haber tardado muchísimos minutos en morir, intentando meter sus intestinos otra vez dentro de su cuerpo... no sabéis lo bien que me sentí después de esto, fue genial, desahogue toda mi frustración con esos tres imbéciles, lo que me ayudo a estar más tranquilo una vez que me hube “normalizado”.

El segundo fue con la dueña del local, yo ya la había visto en varias ocasiones usando sus particulares métodos con los hombres a los que atendía, digamos que era un "ama". No solo había clientes que pagaban muchísimo porque ella literalmente los torturara, sino que también se ligaba a algunos a los que torturaba por la fuerza convirtiéndolos luego en sus perritos falderos, digamos que sus esclavos. De vez en cuando alguna de las chicas pasaba por su cuartito especial también, sobre todo cuando tenía que ser castigada de algo o por algún motivo sobre sus servicios. La "señora" desde luego era de lo más sádico con quien caía en sus manos... y mira tú por donde no tuvo otra ocurrencia un día que fue especialmente movido que mirarme a mí como si fuera un reto para ella. Esa noche tuve que emplearme a fondo con varios parroquianos especialmente pesados, mi bastoncito hizo milagros ya que me llegue a deshacer hasta de cinco a la vez sin que me rozaran o que nadie de alrededor saliera lastimado, supongo que eso la puso a mil por hora. Sin duda debió de pensar en mi para hacerme el enorme favor de convertirme en su perrito.

Si alguien está pensando en que la mate que se vaya olvidando del tema, la "señora", la llamare por su nombre porque sino estaremos así todo el tiempo, su nombre es Norah. Norah como decía es una de las mandamases de uno de los mayores grupos de gente de bien de la ciudad, prostitutas, ladrones, asesinos, tratan también con traficantes, esclavistas, piratas... en fin, que el grupito toca de todo lo que os podáis imaginar, y Norah es digamos que la tercera en el escalafón del grupo, gremio, banda o como se le quiera llamar. Después de cerrar me llamo a sus aposentos ordenando que nadie nos interrumpiera, pude ver en las caras de las chicas y en la de algunos de los empleados cierto grado de compasión por mí, seguro que sabían para que me llamaba y porque no quería que nadie la interrumpiera. Digamos que por otra parte todos respiraron aliviados ya que no sería ninguno de ellos los que usaría de cobaya esa noche si es que se aburría, y al llamarme dejo claro que sí, que se estaba aburriendo y necesitaba pasárselo bien. Nada más entrar en su dormitorio, me desnudo sin mediar palabra mientras me besaba, arrancándome la ropa con fiereza, poco a poco se iba desatando. Conociendo como conocía esas habitaciones, ya que como podréis suponer cuando empecé a trabajar allí me preocupe de saber todo lo posible sobre todo lo que se cociera dentro, averigüe sus particularidades.

Ni os digo lo agresiva que estaba Norah, ella es una mujer alta, de unos 40 a 43 años, de cuerpo macizo, lleno de sugerentes curvas, de pechos grandes como sandias, morena de ojos castaños, vamos, toda una hembra de rompe y rasga. Después de lanzarme sobre su lecho se monto sobre mi... amague con resistirme a sus "cariños", incitándola con ello a llevarme a la habitación que tenia de juegos. Al final lo termine consiguiendo por resistirme tanto a sus manejos, pero antes de eso no os digo la cantidad de guantazos que me cayeron encima, y os aseguro que no suavecitos precisamente. Al final me cogió del cuello y medio arrastras, llamándome medio hombre me metió como dije antes a guantazos en su habitación de juegos. Esta era una habitación con una doble pared rellena de paja y mortero para intentar ayudar a su insonorización, aunque esto estaba garantizado por algunos hechizos de ese estilo. En la habitación había todo tipo de juguetes de diverso pelaje tanto para hombres como para mujeres, era una habitación de doble función, una para lo que ahora podríamos llamar sado y la otra para torturar en toda regla y de verdad, a quien fuera que callera en sus manos que necesitara de ese tratamiento. Para entrar había que pasar por una abertura que se abría en una de las paredes de la habitación de Norah... una vez cerrada la puerta, una vez que Norah activo los hechizos que protegían la sala de gente curiosa... entonces, y solo entonces actué.

Según se cerró la puerta activo los conjuros y se volvió directamente a soltarme otro guantazo mas, pero esta vez la cogí la mano al vuelo, soltándola yo a mi vez un revés con la mano que la mando despedida contra una mesa con argollas que había a un lado de la sala. Cuando cayó allí y antes de que se pudiera levantar me situé sobre ella dándola una ristra de guantazos a cual más fuerte... para al final atarla las manos a las argollas, tendiéndola bocabajo en la mesa, dejando su culo en pompa fuera de ella, mientras gritaba todo tipo de amenazas contra mí, de lo que me pensaba hacer cuando se soltara... Empecé a pasar mi polla por su raja y su culo sin tocar ninguna parte más de su cuerpo, poco a poco fui dejando deslizar sobre ella determinados conjuros para potenciar sus sensaciones, previa desactivación en la habitación de alguna que otra protección dispuesta obviamente por si llevaban allí a "interrogar" a un mago evitar que pudiera hacer allí de las suyas y salir tan ricamente o algo similar. Pero los que protegían aquel sitio para mi eran como el sumar dos y dos para un matemático... de risa.

Estuve varios minutos pasándola así la punta de mi polla, pero sin llegar a entrarla en ningún momento, solo punteándola suavemente, haciendo que poco a poco se fuera encharcando su coño cada vez mas... Una vez que conseguí que estuviera al borde de un orgasmo simplemente con martirizarla de esta forma y por supuesto ayudado de ciertos conjurillos, puse mi mano a trabajar sobre su coño, metiéndola varios dedos, machacándola el clítoris con el pulgar mientras la preguntaba constantemente si mi putita disfrutaba, obteniendo solo insulto tras insulto y amenaza sobre amenaza de ella. La hice correrse dos veces simplemente con mi mano sobre su coño, follándoselo con ella y usando mi pulgar sobre su clítoris... mientras mi polla se restregaba por el canal de su culo pero sin amenazar en ningún momento con entrar por ninguno de su agujeros. Por mucho que ella intentara evitarlo era más que evidente por como segregaba jugos que toda esta situación la estaba poniendo a mil por hora, iba de estar cachonda perdida y correrse a regresar a la misma situación en poco tiempo... y creedme que poco a poco la iba pasando factura.

Una de las veces que como amenaza me dijo que me iba a asar como un cerdo a fuego lento, entonces tuve la idea, aproveche y fue cuando aproveche el símil... Usando un pequeño conjuro para sensibilizar su culito al máximo la dije que se preparara porque iba a darla el espetón para que pudiera luego usarlo con el cerdo... le metí de golpe y muy lentamente mi polla hasta los cojones. Al sensibilizarla tanto el culo mi hechizo, la penetración fue como si la estuviera metiendo un hierro al rojo por el mismo, fue de alarido en alarido... mientras se la metía la iba preguntando si quería dejar de sufrir y empezar a gozar, a la tercera vez que me respondió que no y dado que mi polla estaba ya casi dentro del todo, con dos dedos la sujete el clítoris, apretándoselo, poniéndolo entre el índice y el pulgar para luego moverlos en un movimiento de fricción con él en medio. La pobre Norah iba de alarido en alarido, de grito de dolor en grito de dolor... al final no la quedo otra que con lagrimas cayéndola por las mejillas por la humillación decirme que sí, que quería empezar a gozar y dejar de sufrir...

Lentamente, muy lentamente fui alterando mis hechizos para amortiguarla el dolor y empezar a sensibilizarla suavemente para el placer. Esto que os digo así de simple, no os lo penséis ni por un momento, es algo terriblemente complicado de conseguir, de hecho si te equivocas al hacerlo puedes convertir a tu blanco en un vegetal, de modo que no es todo tan fácil y simple que como yo lo cuento, pero afortunadamente, sobre todo para mis “victimas”, tengo “algunos años” de experiencia usándolos. Poco a poco varié el ritmo de mis embestidas, soltándola el clítoris mientras usaba la mano para acarician suavemente con dos dedos su rajita, sin penetrarla en ningún momento. Mi otra mano seguía sobre su hombro para mantenerla pegada a la mesa sin que se pudiera mover, incorporar algo o hacer algún otro movimiento extraño. Lentamente fui cambiando su dolor a placer, sus gemidos eran cada vez mas fuertes... cada vez más intensos, cada vez mas continuados... poco a poco iba llegando al tan ansiado orgasmo... y entonces, pare en seco.

Me incline sobre ella diciéndola que si quería correrse tenía que ser una perrita buena y pedírmelo... después de diez minutos llevándola una y otra vez al borde del mismo sin que diera su brazo a torcer, solo consiguiendo de ella insulto tras insulto una pequeña brecha se abrió en sus defensas... la tensión por el orgasmo que no llegaba, el pasar tan fácilmente de dolor al placer, el verse a sí de sometida a un hombre al que pensaba dominar con facilidad, el hecho de que solo hubiera usado con ella esa mesa que simplemente es para sujetarla y sin capacidad de tortura como otras de las cosas presentes en la sala... poco a poco como digo todo eso junto iba minándola su integridad, haciéndola cada vez más receptiva a mi dominio. Entendamos que por dominio simplemente me refiero al plano sexual, no era tan imbécil como para intentar llevarlo con ella a otro plano diferente, igual que el pasarla por alguna de las otras maquinas o piezas para tortura o sado, era plenamente consciente de que si lo hubiera intentado posiblemente me hubieran cortado el cuello al poco tiempo, aunque para lo que eso les hubiera servido..., además que luego cuando después hubiera "regresado", con el buen humor con que solía hacerlo después de todo el sufrimiento que eso suponía pasar, ni os cuento el cabreo de narices con el que hubiera ido allí después para agradecérselo detenidamente, muy, pero que muy detenidamente... mejor como fue la cosa que no de otra muchísimo peor.

La llevaba una y otra vez al borde del orgasmo para dejarla luego caer de la sensación sin alcanzarlo, una tras otra, desquiciándola por completo... cuando por fin me ordeno que la hiciera correrse la cogí con fuerza del pelo, mordiéndola en una oreja hasta hacerla gemir de dolor mientras inconscientemente movía el culo intentando aumentar el contacto con mi polla y el dolorcillo que de esa forma también le proporcionaba encontrándose cada vez sin poderlo evitar mas y mas cachonda. Entonces empecé diciéndola al oído que así no, que debía de pedírmelo con dulzura... algo a lo que se negó intentando volver a lo anterior, a que la dejara, a que se vengaría de mi, pero su propio cuerpo la estaba pasando factura llevándola a la desesperación total por poder correrse... cuando la vi la intención de pedirlo por favor la dije al oído que quería ver como mi perrita me lo suplicaba moviendo el culito para darme más placer... me costó aun otros quince minutos más de tortura sobre ella, llevándola al borde para dejarla luego caer al abismo. Por fin sucumbió y me suplico que me la follara, todo ello moviendo el culito como la pedí para mi más absoluto placer al sentirlo, me suplico que la hiciera correrse como la perrita que era... entonces sí, no me hice de rogar mas, entre otras cosas porque a esas alturas tenía ya un dolor de huevos que no os cuento. Use nuevamente un conjuro sobre ella, esta vez la sensibilice hasta donde me pude atrever a hacerlo... el orgasmo la llego arrollador, que se amplifico al correrme yo en el interior de su culito, al sentir los chorros de leche en su interior golpeando en su interior, dejándola casi del todo inconsciente sobre la mesa, aflojándosela el esfínter y la vejiga, poniéndolo todo perdido.

Depuse de eso me la lleve a su habitación, hice que la llenaran la tina grande alargada, una que por lo que supe encargo expresamente para usarla como su bañera particular... después de limpiar el cuarto me encargue de limpiarla a ella... cuando se despertó del todo de su estado de semiinconsciencia, o de estar en babia como prefiráis, estaba sumergida en agua templada mientras la daba un masaje en los hombros... vi como hacia un aprecio de intención de volverse contra mí, pero una vez más su propio cuerpo la traicionaba al sentirse tan relajado, encontrándose tan relajada como creo que no se había sentido durante muchísimo tiempo, escapándosela de vez en cuando gemiditos de placer por el masaje y por lo que no era el masaje, porque con los pezones y el culo me puse fino, eso sí, a ella la puse otra vez cachonda perdida al sentir mis manejos en esas zonas. Cuando considero acabado al baño se fue a levantar sin que la dejara hacerlo, la levante a pulso, llevándola en brazos a la cama mientras me miraba calculadora, como pensando hasta donde pretendía llegar con ella... por lo menos al ver lo que pretendía, después me miraba cada vez con una cara de vicio que aumentaba a medida que me acercaba con ella a su cama, donde al soltarla la dije que no había terminado todavía de follarme a mi perrita, que lo anterior solo había sido un aperitivo, que pensaba dejarla el coño en carne viva antes de darme por satisfecho de ella... aunque no os lo podáis creer incluso se ruborizo. Estuvimos todavía más de dos horas follando como animales los dos. El que yo me comportara como un hombre normal y corriente sin pretender privilegios sobre ella, olvidando la situación vivida en la habitación especial, el no mencionarla para nada, el tomar esa cama como algo nuevo, como una situación completamente distinta a la anterior, completamente inédita ayudo muchísimo a que se entregara sin reservas a mí, por lo menos esa noche y en ese momento.

Al día siguiente después del trabajo me llamo para hablar conmigo en su despacho, evidentemente era sobre lo de la noche anterior... no repetiré una conversación de la que casi no recuerdo nada, pero cuando salí de allí me había convertido casi, casi, en su amante oficial, de hecho aunque me llevara fenomenal con la chicas, ninguna de estas se había ofrecido a compartir diversión conmigo, algo de lo que note que empezaban a arrepentirse desde el mismo momento en que Norah dejo claro que yo era única y exclusivamente cosa suya, que mejor que ninguna pusiera siquiera sus ojos en mi, y creedme que sabían todas ellas de sobra que eso solo era una advertencia de que quien intentara catar lo que no era suyo aparecería muerta en cualquier callejón la primera noche después de que ella se enterara. Como digo más de una se arrepintió en ese momento de no haber intentado intimar conmigo ya que el que Norah se pusiera en ese plan quería decir que no era nada, pero que nada malo en la cama.

CONTINUARA