Crema para el chocolate 5

Mi instalación en el puterio y el boooks

CREMA PARA EL CHOCOLATE

5ª  PARTE

Ese lunes volví a mi casa destrozada, estaba atada de pies y manos a él. Deshice un noviazgo a 40 días de la boda, peleé con mi familia, la de mi ex, amigas y conocidos por él. Bueno en realidad por el sexo que tuve con él. En mi vida nunca tuve un sexo que me hiciera vibrar, sentir y tener sensaciones de orinarme encima como lo tuve con él.

El al principio me llamo crema por lo blanca que era y el negro grandote era el chocolate. Yo me deje llevar pensando que iba a perdurar y ser feliz pero me equivoque.

De ahora en mas seria su puta y el era el chulo que ganaba dinero con mi cuerpo.

El miércoles a la noche tenia que ir al boliche, ya definitivamente para instalarme en el puterio y de inmediato empezar a trabajar.

Me resulto extremadamente difícil y doloroso explicarles a mis padres que me iba del país a trabajar en una multinacional. Preguntaban y preguntaban y yo tenía que inventar constantemente para que no se dieran cuenta. Que los llamaría todos lo miércoles por teléfono. Les pedí no fueran a despedirme y a regañadientes aceptaron.

De acuerdo a las indicaciones de Ewin puse toda mi ropa en distintas valijas. Toda la ropa incluida la lencería. En un bolso tenia que poner una par de zapatillas, los zapatos de taco alto y un sobre con las pocas alhajas que poseía. Le pedí por favor no me hiciera salir de mi casa provocativamente vestida. Me hizo poner la pollera acampanaba, como me conoció, blusa blanca y zapatos de taco bajo. Nada más. Nada de maquillaje ni de sostén, tangas y bombachas.

Así lo hice y el miércoles a la tarde pedí un taxi, indicándole al chofer una dirección de un Centro de Salvación donde debía donar todo menos el bolso. Entregue todo me dirigí al boliche, ante la mirada socarrona del chofer, cuando llegamos. Pensaría seguro que era puta del boliche.

La mención de puta se estaba haciendo carne en mí, pero debía acostumbrarme no solo a escucharla, sino que se empleara dirigiéndose a mí.

Llegar al boliche, pague el taxi y baje con el bolso. Toque timbre, era muy temprano, y espere. Adentro no había nadie. Estuve una hora sentada en el cordón de la vereda, esperando que llegara alguno del boliche. Al rato vinieron dos y me abrieron la puerta.

Mientras ellos acomodaban las cosas en la barra para la noche, yo me senté en una mesa a esperar que llegara él. Enseguida uno de los dos me dio una nota Edwin, en la que decía que lo esperara en el VIP. Tome mi bolso y me dirigí a él. Estuve un buen rato esperando hasta que apareció. Subió al VIP, me miro diciendo.

EWIN: llevaste las valijas como te dije

ROMINA: si, al ejercito de salvación.

EWIN: a ver el bolso, que traes.

Tomo mi bolso, lo volcó todo sobre la cama. Luego revisando minuciosamente fue guardando en el mismo, las zapatillas y zapatos de taco alto. Agarro el sobre con las alhajas, lo reviso y guardo en su caja fuerte. Me tiro el bolso casi en la cara y salimos.

Subimos al coche y fuimos a mi destino. Era en la avenida Santa Fe. Ingresamos a la cochera del coche en el edificio. Subimos al ascensor hasta planta baja. Mire hacia fuera, la entrada era una puerta doble de vidrio. Luego había un ante vestíbulo con unos sillones de espera y un timbre en la puerta. Ese timbre comunicaba al hall principal en que estaba en un escritorio, el guardia de seguridad.

Ewin se identifico como el propietario del departamento y no abrieron la puerta. No había portero eléctrico a los departamentos, todo se comunicaba con seguridad. Nos hizo esperar unos minutos hasta que apareció el conserje del edificio, quien no atendió afablemente. Me pido todos mis datos, firme la ficha y le pidió a Ewin mis documentos y vacunas. Luego de sacar fotocopias de todo, no las devolvió. Armo una carpeta poniendo mi nombre en la tapa, departamento y piso y luego los datos del dueño.

Nos acompaño para enseñarnos el edificio. En la planta baja de un lado había un salón tipo de fiestas con sillones. Del otro lado una pileta de natación cerrada. Después de ello jardines. Subimos al ascensor hasta el piso tres, departamento “c”. Abrió la puerta y entramos. Ewin le dijo que estaba bien que él me enseñaría todo. Abrió la puerta y se fue.

Me llamo la atención que en la puerta del departamento de enfrente, además de la letra del departamento tenia una línea de color rosa cruzando el ancho de la puerta.

En la puerta del mío la línea era roja.

EWIN: me indico que los departamentos de línea rosa ara de amantes o mantenidas de alguien. Los de línea roja eran de putas.

No dije nada, solo me mordí los labios. Me mostró el hall del departamento que tenia un juego de sillones, una mesa ratona, un paragüero y un pequeño armario para uso de la visita.

Luego el dormitorio que debía estar siempre cerrado y lo iba a ocupar él, cuando viniera y seria usado para dormir solo o coger conmigo. Después mi dormitorio donde recibiría a los clientes. Tenía una cama grande, bien mullida, un aparato de TV colgado del techo y un placard para mi ropa. Abrió la puerta del placard y estaba lleno de ropa que había comprado para mí. Toda ropa bien provocativa. Nada de sostenes, ni tangas ni bombachas, si dos mallas para la pileta. Del otro lado del placard uniformes de colegialas, mucamas e inclusive disfraces. La puerta más chica, al abrirlo era todos cajones que él abrió. Uno por uno mostrándome. Había cajones con juguetitos como penes, bolas chinas, consoladores, esposas, fustas rodó a pedir del cliente. Me hizo desnudar y colocar un arnés que tenia un pene y me hizo mirar en el espejo. Parada frente al espejo con el pene colgando, hasta donde había caído. Me saco una foto.

El dormitorio tenía espejos por todos lados. En las cuatro paredes y en el techo, por lo que en cualquier lugar de la cama uno se miraba en el espejo.

Después me llevo a la cocina, haciéndome sacar el arnés pero desnuda, era confortable con una pequeña ante cocina con una mesa y dos sillas. Luego la cocina en si, bien completa. Y por ultimo me enseño el baño. No tenia bañera, si ducha doble, una salida por una punta y la otra por la otra. Un espejo grande con cosas de maquillaje femenino y

Pasta dental y cepillos tanto para los dientes como para el pelo.

Después nos sentamos en el hall y le tuve que servir una cerveza.

EWIN: hermoso el departamento no?

ROMINA: si

EWIN: olvidaba decirte que en la mesa de luz tuya tienes varias cajas condones importados.

ROMINA; yo estaba pensando que pasa si quedo embarazada, pese a los condones.

EWIN: nada. sabes que el morbo de la gente le gusta cogerse a embarazadas y encima con leche en sus tetas. Pagan más. No has tenido hijos?

ROMINA: no

Quede abrumada. Como podía ser tan vil, un hombre.

EWIN: ahora vamos a la habitación, esta noche hermosa para mi, hay que terminarla dignamente.

En ese momento sonó el teléfono y atendió. Hizo subir a la persona y le entrego varias cosas.

EWIN: necesito que los hagas urgente, por lo menos cinco de ellos. El primero que salga tráelo acá rápido. El resto a estas direcciones.

Se fue la persona y quedamos solos de vuelta, yo siempre desnuda, estuve soportando al tipo que miraba de pies a cabeza.

EWIN: te decía, hermosa que esta noche es espectacular para mí. Conseguí comprar este fabuloso departamento y tener una puta propia que iba a hacer mucha plata para mí.

Tengo 5 mujeres mas, trabajando de putas en distintos quilombos del país, hacinadas y con un elemento de clientela que asusta. Vos sos una privilegiada de tener esto. Asimismo te digo hagas buena letra acá, sino te cambio por una de esos quilombos

Me corrió un frío por la espalda de solo pensar eso. Deambular de quilombo en quilombo con gente de la más baja calaña no era alentador. Tendría que cumplir acá todo lo que me pidiera.

EWIN: ven chiquita háceme una buena chupada de pija.

Me acerque y tome su pija. Fui a los testículos los chupe sin prisa. Luego lamí todo el tronco hasta llegar al glande, tire el cuero hacia atrás y pase mi lengua por el canal, ante el delirio y suspiros de él. Luego tome el orificio de salida, pase mi lengua por él reiteradas veces hasta estallo en mi boca. Fue tal la cantidad de semen que me ahogue y parte salio por la comisura de mis labios. El quedo muy complacido.

EWIN: la verdad eres maravillosa Romina, la forma de chupar y coger es tremendamente buena. Vas a tener gran éxito acá si te esfuerza un poco. Te quería decir además que en los clientes que vendrán a “visitarte” hay de todo. heteros, lesbianas, putos, masoquistas. No debes hacerle asco a nada.

Volvió a sonar el teléfono y subió la misma persona de antes, trayendo un paquete.

Le pago y se fue.

EWIN: ven vamos a ver esto.

Abrió el paquete y era un, me puse roja de vergüenza, un Books de fotos.

EWIN: vamos a ver como quedaste chiquita.

Abrió y la primera foto era parada desnuda con el arnés y el pene colgando. Luego había de diversas posiciones siempre haciendo algo de sexo, chupando, cogiendo, todo lo filmado pero en foto. Tengo que decir que las fotos eran perfectas, en colorido, poses y claridad. En el noventa por ciento de ella se veía mi cara.

Luego volvió a la página inicial y antes de la foto había una hoja impecablemente escrita que decía

ROMINA 26 años 85-61-92.- mujer de fuego- y después mi pelo, ojos, todo. En el medio una fotos y abajo “una puta increíble” En la tapa con letras doradas “libro de oro de Romina.

Yo quede estupefacta, sin hablar mientras caían lágrimas de mis ojos. El feliz de lo logrado. Y para que el mazazo fue más contundente.

EWIN: cinco de estos, están siendo dejados en hoteles cinco estrellas, en apart hoteles y lugares de primera categoría.

Si me hubieran pegado una paliza no lo hubiese sentido tanto como esta. Pensé en mi familia, amigos si veían este Books. Me envío a la otra habitación a dormir y el se quedo durmiendo allí.

Yo no pude conciliar el sueño hasta altas horas de la noche.