Corrompiéndonos por una apuesta entre amigos 1

...pues aun estaba aturdida pero cuando me fije en mi padre, este me miraba con ojos de deseo, pues el muy cerdo me había dejado casi desnuda,

CORROMPIÉNDONOS POR UNA APUESTA ENTRE AMIGOS I

Hola, me llamo Susana, ante todo gracias a todos los que me habéis leído, sobre todo aun más agradecida a aquellos que me habéis escrito. Agradezco de corazón, que os haya gustado e incluso que os haya sido tan placentero, como a mí relatarlos.

Ante todo me debo disculpar, pues no siempre puedo responder a todos los que me habéis mandado vuestro email, pero os aseguro que los leo con el mayor de las satisfacciones, y en la manera de lo posible os contestare. Pero lo más difícil es responderos por el Messenger, pues ante la cantidad de pestañas que delatan vuestra presencia. Llegando a veces hasta 150 pestañas aclamando mi presencia, llegándose incluso a colgarse el Messenger, por lo que desde aquí os doy las gracias y muchos mandos un beso muy tierno en esa parte de vuestro cuerpo que mas deseéis. Os recordaré que soy una ardiente chica del sur de Andalucía, de 23 años, morena, de ojos castaños, de 1.75m de altura, 90/59/88 aprox., y bisexual. Me considero una chica simpática, abierta, extrovertida, atractiva, inteligente, en otras palabras una sin vergüenza integral, muy buena gente, simpática y bastante loca... vamos una chica con la que se puede pasar un buen rato (joder, algo más de 15 minutos… bocazas absteneros).

Me gusta conocer gente, descubrir cosas nuevas, divertirme, lo típico de una chica de mi edad (tengo una manera especial de ver la vida creo, que os habéis dado cuenta). Me gusta salir, hacer locuras, aunque me sea difícil de reconocer que me gusta beber (joder, no soy alcohólica… pero debería de controlarme algo). Soy conciente que por mi forma de vestir, me hace ser más destacable para ser manoseada, aunque no soy ni fetichista, ni exhibicionista, simplemente me gusta vestir, de forma que realce mi cuerpo (joder, como decía mi abuelo tengo un cuerpo de perdición), me gusta que las partes mas sensuales de mi cuerpo sobre salgan, aunque a veces me digan que parezco un "zorrón". Dicen que tengo un hermoso cuerpo (como decía mi difunto abuelo de pecado), me considero una mujer ardiente, de mente muy abierta, siempre deseosa de ampliar y probar nuevas experiencias. Me considero lo bastante joven como para disfrutar del sexo, de gozar de todas las diferentes formas y posturas, pues mi adicción me hace a veces a llegar tal punto, que incluso yo misma me ruborizo, y no os digo a vosotros.

No me considero una estrecha, pero me molesta muchísimo que me pidáis que conecte mi Cam… sin saber al menos si la tengo (ostias, salidos de mierda… os deberían de capar a todos). He de explicaros, que mis gustos en general, aunque lo niegue es la morbosidad de ser manoseada en publico, de sentirme acariciada, siempre que sean lugares públicos (coño, es tal la morbosidad, que es difícil describirla, pero os la intentare relatar). He mantenido relaciones con hombres maduros (joder, por que coño no van a disfrutar ellos también, es una sensación morbosa ser manoseada por viejos, no es vicio solo es puro morbo). Deberíais de aprender de ellos, pues muchos de ellos tienen la experiencia necesaria como para hacernos disfrutar. E incluso muchos de ellos, no tiene nada de envidiaros pues con semejantes maquinas nos hacen llegar, a diferentes tipos de satisfacciones y disfrute que a veces me hacen no solo perder el norte sino, el tiempo, pues algunos son verdaderos machos a la hora de dar placer.

No os ofendíais de la verdad, aunque os duela pero lo importante no es que la tengáis muy grande, sino que sepáis darnos satisfacción, Que nada mas salgáis de la cama, digamos hay va mi hombre. No siempre buscamos cantidad sino más bien calidad, que hoy día ya no os preocupáis de esos minutos preminilares que tanto deseamos, lo que deseamos es que disfrutemos… pero ambos, pues incluso después de habernos echo al menos llegar a dos hermosos y geniales orgasmo, lo que mas deseamos es que disfrutéis vosotros, nos gusta que os venga en un tiempo prudencial… y dentro de un preservativo (joder, que no queremos problemas dentro de unos 9 meses, y aun menos que nos peguéis algo raro). Lo que me he dado cuenta a veces, que no os dais cuenta de cuando nos viene, e incluso menos cuando los disimulamos. Muchos de vosotros pensáis, que entre vuestras manos tenéis la consola de la "Game" (joder, que somos personas), que ha veces nos tratáis peor que a un animal (ojo, no todos).

Demostrarnos que nos amáis, hacernos disfrutar y sonreír (coño, que estoy cansada). Cabrones, si tenéis más ternura con el puto móvil de las narices que con nosotras, y joder menos correr… que ni sois Fernando Alonso, ni nosotras somos Hamilton (Joder, haber si sois más sensibles). Bueno basta de tantas palabrerías, voy a narraros una mas de mis confesiones, sabéis a veces me llevo escribiendo unas horas en mi PC por las noches, como hacia en mis tiempos de adolescente, haciéndome recordar la cantidad de confesiones que os debía de narrar. Con la consecuencia de dejar a medias la que estoy escribiendo, para comenzar una nueva, al final no acabo ninguna ni la primera ni la ultima, acabando chateando con algún chico o chica. Os comentare que en esta nueva confesión, no tuve más remedio que involucrar a mi amigo José, casi de forma accidentada al cual creo que ya me habéis oído mencionar. Os debo ser sincera, en su día no me porte nada bien. Aunque ya comente que nos conocemos desde pequeño, e incluso en otra confesión mía, os narre alguna que otras anécdotas suyas.

Siempre le he considerado mi pequeño gran superman, pues aunque en cuerpo no lo aparente (por lo de pequeño), de corazón es todo lo contrario (por lo de grande), es tan grande que no nos cabria ni tan siquiera en el puño. Bueno aquí comienza mi confesión, os voy a narrar como comenzó todo. Recuerdo que tuve varios meses de roces con mi padre, motivo obviamente el mismo que toda mi puta vida, el libertinaje continuo que tenia conmigo. Aunque hacia tiempo que se lo confesé a mi madre (joder, mas o menos, por encima, pues no sabia como comenzar, no me salían las palabras), le pedí ayuda y mi madre solo me comentaba, que mi por mi actitud se notaba que estaba en chochada con mi padre, que me imaginaba cosas. Recuerdo como en las noches cuando todos en casa duermen, aprovecha para meterse en mi dormitorio, llegando incluso a meterse en mi cama, pegándose a mi cuerpo sintiendo su desnudes, al tiempo que comienza a levantarme ya sea el camisón o por bajarme las braguitas, colocando entre mis glúteos su duro y caliente miembro. El muy cabron tuvo la culpa que mis notas bajaran, pues no solo me causo una distracción en mis estudios, sino el cansancio por las pocas horas de sueño, y las continuas peleas que tuve con el chico de turno, el cual pedía sexo y al cual culpaba precisamente de eso.

En una de esas ocasiones, en la cual llegue a casa mal humorada, ni tan siquiera salude en casa sino que directamente me dirigía hacia mi cuarto, como muy a menudo comencé a hacer. En una de esas ocasiones no solo yo llegue de mal humor, pues mi padre también obviamente lo deduje por la manera de llamarme, pues a grito limpio pedía mi presencia ante el, llamándome de todo menos por mi nombre. Recuero que cuando entre en mi cuarto, cerré la puerta tras de mi para abrirse en minutos, ni tan siquiera le detuvo el cerrojo. Nada mas comenzar a hablarme rápidamente le respondí, recibiendo a cambio tal bofetada que me mando sobre la cama, y menos mal que caí en la cama sino me veía en el suelo. Tras levantarme, continúo con su griterío pero en el siguiente manotazo me defendí, colocando mi brazo a modo de escudo, comenzando un forcejeo entre manotazos, pues deseaba colocarme entre sus piernas y según el darme una tunda, que no se me olvidaría hasta que me pudiera sentar. En una de esos forcejeos, me agarro de la camisa de tal manera, que comenzó a zarandearme a modo de poderme lanzar de nuevo contra algo, saliendo disparada.

Por suerte para mí, salí disparada hacia la cama, chocando y amortiguando el golpe, pero rebotando y caer finalmente al suelo. Esta vez me costo mas levantarme, pues aun estaba aturdida pero cuando me fije en mi padre, este me miraba con ojos de deseo, pues el muy cerdo me había dejado casi desnuda, pues según parecía no me había lanzado del todo el sino la tela de la camisa había cedido (ostias, al menos algo o alguien había cedido). Dejándome ante sus ojos con mis pechos desnudos, pues incluso entre los harapos que aun permanecían en su mano, estaba lo que quedaba de mi sujetador. En su rostro daba la sensación que el muy hijo de puta nunca me había visto desnuda (joder, he de admitir que durante la noche en ningún momento encendió la luz, por lo que obviamente llevaba tiempo sin verme desnuda). Pero la expresión de su rostro, daba la sensación que se le salían sus ojos al ver mis pechos (cabron, en incluso babeaba).

Recuerdo que al acercarse mi padre, hacia donde yo me encontraba se iba disculpando, pero sus ojos delataban todo lo contrario, cuando note puso sus frías manos sobre mis hombros, no se como lo hice pero mi primera reacción fue levantar mi rodilla… y de que manera, pues le impacte de lleno en sus genitales. Dejándole tirado en el suelo, con cara con expresión de dolor, gritando y maldiciéndome entre otras cosas, hasta difícil de volverlo a repetir. No se como pero salí corriendo sin mirar atrás, aproveché ese instante para salir incluso de casa, se que debería de haber dado ese paso antes, pero el miedo a que hacer (ostias, aunque muy a pesar de todo, se que al final volveré). Se que si me hubiera quedado a modo de socorrer a mi padre, a modo poder ablandar su corazón, con la futura esperanza de que pueda perdonarme y que su ira no la fije contra mi, aunque la cierta verdad es que una vez que mi padre se hubiera repuesto. Este hubiera fijado toda su furia contra mi, no solo golpeándome sino finalizando por saciar toda sus cólera, aprovechándose totalmente de mi cuerpo y de todo orificio aun virgen por el. Mientras corría, intente localizar por el móvil a Andrea, pero la muy cabrona no contestaba, por lo que no tuve mas remedio que llamar a José.

Joder, aunque le considero mi mejor amigo, a veces no me gusta involucrarlo demasiado en mis problemas familiares (coño, el motivo en ese momento era obvio, había comenzado a trabajar como becario para mi padre), aunque se que el nunca me fallaría, tampoco me gusta implicarlo demasiado. Os juro que incluso a veces me molesta, que siempre este ahí como un perro fiel, se que no debería decirlo y aun menos pensarlo, pues siempre está listo, siempre está ahí a la espera que lo llames. Son de los que deja lo que tenga en las manos, para acudir en tu ayuda, de los que no te ponen excusas y siempre tienen una razón para ayudarte. Joder, me hace recordar lo que me ocurrió en una ocasión, os la comentare en mi siguiente relato, vale. Bueno continuo con mi confesión, quedamos en su casa pues esta cerca y como es normal en su casa, el siempre esta solo. Nada mas llegar, dirigiéndonos al salón comenzamos a hablar, me ofreció si quería algo de beber, le pedí un vaso de agua, mientras el cogio una cerveza, comenzamos a hablar le conté lo sucedido.

Mientras la charla continuaba, también el grado de alcohol, pues continué por coger unas cervezas escuchando sus palabras, pues me sugería que debía de denunciarle, mientras bebía ya un legendario con coca cola, ya solo decíamos tonterías. Comenzamos inventar cosas, muchas tonterías, retándonos en cosas pequeñas las cuales las realizábamos, por lo que quisimos mas y mas excitante, donde la adrenalina fuera puro morbo. Quisimos crear un juego, donde nosotros poníamos las reglas, yo elegía el reto que el debía de lograr y el lo debía de hacer conmigo. debía de ser aventurero, arriesgado y sobre todo debía de tener sexo, ciegos y llevados por el alcohol nos jugamos a nosotros mismos, todo en torno a una apuesta mas que una apuesta era un desafío. Por su forma de proceder, se notaba que quería ganar la apuesta, sin saber todavía lo que había pensando que debía que hacer, se notaba que deseaba el premio… tanto como vosotros, que sí me dejó hacer hacéis lo que sea por ganar.

El alcohol como siempre tuvo la culpa, aunque en verdad la culpa la tuve yo. Mientras pensaba en el cabron de mi padre, en los abusos ejercidos sobre mi en todos estos años, tan disfrutado para el como para mi (joder, en aquella vez que me rompió mi culo), se me ocurrió precisamente algo como sí fuera a modo de castigo hacia el. De José os podría decir que es un tío de mente muy abierta aunque el dice que cada uno en su sitio, que los tríos está muy bien siempre que sea de dos chicas y el, que sí son dos chicos como que mejor no se hace o mejor se vaya al otro lado de la cama. Por Eva, siempre me comenta lo macho que es en la cama, que le cuesta hasta de cansarlo, aparte lo conozco muy bien pues aunque nunca hemos echo el amor, no os mentiría si no os digo que nunca me he acostado con el, pero como amigos ha habido veces que de forma involuntaria, se me pegado tanto a mi que ha hecho a veces, desear que me la metiera, aunque se que podría destruir nuestra amistad.

Recuerdo que Eva, aquella vez me comento mientras bebíamos, cosas sobre su chico, sobre sus atributos pues me comentaba, que sin llegar a tener un buen miembro, la dejaba mas que satisfecha, haciéndole llegar a dos orgasmos casi a diario, aunque sólo le mide 16 centímetros, no dejaba de decir que es una máquina en la cama. Algo que según ella no puede decir lo mismo, pues muy a su pesar lo deja la gran mayoría de las veces a medias. Comentaba que no tenia ni tan siquiera fuerza, como para hacerle acabar manualmente, llegando este a veces acabando en el aseo finalizando la faena. Continuo pues, cuando le dije el reto pensé que me mandaría a la mierda, aun más cuando se refirió a mí como una grandísima hija de puta, quizás era verdad que pensé más en ese momento, en mi padre que en mi amigo.

Mi propuesta fue que tenía que enrollarse con otra persona de su mismo sexo, pero lo debía de elegir yo pues ese era mi reto, debía de satisfacerlo. Comentándole, que nada más finalizar debía de contarme con todo tipo de detalles lo ocurrido, recuerdo que nada mas finalizar su reto, quedamos e imaginar como me lo contó, que no se corto poniéndome de lo mas caliente, tanto que no me importo masturbarme delante de el, consiguiendo primero dos orgasmos de forma consecutiva y una series de orgasmos después. Aunque se que el reto de mi amigo nos os importa, os lo voy a contar de todas maneras, se me ocurrió días después íbamos cruzando el puente de las delicias, en dirección hacia el barrio de los Remedios. Cuando mirando hacia un lado, en dirección a la dársena del río, me detuve observando dos hombres de la edad de mi padre. Me fije que uno metía mano al otro, mientras el otro solo le acariciaba.

Note como una corriente eléctrica, sabiendo que ese era el momento, por lo que le dije a José que bajara y se dirigiera hacia los dos hombres, recuerdo que José me comentaba que aún no estaba preparado que todavía no le había dado tiempo a mentalizarse y a asimilar los hechos. Pero al final cedió, saliendo por una salida que hay al final del puente en sus laterales, bajo las escaleras se fue caminando hacia estos hasta llegar cerca de ellos. A partir de aquí lo que os contaré, es lo que el me confesó, me comentó que nada más verlo, uno de los hombre retiro la mano de otro se hizo el loco, el otro hombre llamándole la atención a modo de que se acercara hasta ellos, me confesó que sentía las piernas temblar que los labios se le secaron y aunque tenía miedo, también sentía algo extraño pues su miembro estaba duro… estaba excitado.

Bueno sigo, colococandose en medio de estos, mientras uno colocando su mano en la barbilla, le comento que si había estado alguna vez con un hombre (José me comento, que su primer pensamiento era el haberle dicho que si, pero se lo pensó mejor), le contesto que no que nunca había estado, que había sentido algo extraño y quería descubrir que era, que se siente. Sin decir esta palabra alguna, el hombre dirigió su rostro hacia el de José, a modo de unir sus labios, me confesó que cerró sus labios evitando de este modo ceder, pero este no solo intentaba besarle, sino fue chupando y lamiendo sus labios, besando sus orejas y lamiendo su cuello, la sensación era asquerosa pero agradable.

Mientras el otro hombre mayor, fue acercándose por detrás hasta colocarse pegado a el, comento que no solo sentía la barrigota de este sino el muy cerdo, comenzó a frotarse contra sus nalgas, mientras posaba sus manos directamente en su pecho, por encima de la camisa pellizcando sus pezones hasta endurecerlos. José me comentaba, que estaba muy nervioso, que estaba tembloroso e incluso notaba sus manos sudorosas, pero no sabia por que causa eso le gustaba, sintiéndose muy excitado. Mientras me confesaba con pelos y señales aquella relación, no pude evitar llevar una de mis manos a mi entre pierna, primero comencé a tocarme levemente, para continuar por posarla sobre mi ardiente muslo e ir ascendiendo hasta mi ingle calentándome por momento y aumentando con su relato, al tiempo que introducía la mano por debajo de la falda hasta rozar la tela de mis mojadas braguitas.

Me confesaba que la situación tan avergonzarte como declinante, pues mientras permanecía con los labios cerrados se dejaba hacer, uno de los hombres maduro se había puesto delante de el, mientras continuaba intentar que lo besara, sintiendo la presión de esa lengua en mis labios, sintiendo como poco a poco como iba cediendo, al que observaba como sus manos habían comenzado por desabotonar los botones de su camisa, abriéndola continuando acariciar mis pezones endurecidos. Al final cedió, entre abriendo sus labios sintiendo como su lengua se introducía dentro buscando su lengua, sentía cierta repugnancia pues saboreaba la saliva ajena, e intentaba escupirla cuando pudiera.

Mientras el otro hombre de atrás, hacia unos minutos que había comenzado por su cuenta, comenzando por acariciarle las nalgas, colocando sus manos primero en su cintura para conducirla hasta sus glúteos. José me comento, que pensó que ese era momento de irse, pues adivinaba lo que proseguía. Comenzó el viejo, a magrear las nalgas de mi amigo, acariciándolas a todo lo largo dejando caer los comentarios, del buen culo que tenia y lo bien que lo iban a pasar. Al tiempo que pegaba aun mas el cuerpo al suyo, de tal manera que sentía la erección del miembro del viejo en sus nalgas. Al tiempo que había llevado sus ambas manos a la cintura de José, descendiendo hasta su bulto comenzando sobre la tela a masajear su miembro, chocando contra la bragueta, y ascendiendo por está hasta el cinturón el cual abrió, continuo por desabrochar el botón del pantalón y finalmente bajar la cremallera, dejándolo caer tras tira de ellos varias veces, hasta sentirlos caer sobre sus pies. Continúo con sus calzoncillos, tirando de ellos hacia abajo, hasta hacer compañía a los pantalones. Para dirigir su mano hacia el miembro cohibido de José, el cual después de masajearlo durante unos minutos, comenzó a coger el tamaño y la dureza que es normal en el.

A medida que me confesaba su experiencia, pensé que quizás obre mal con el, como sabría como afectaría está situación o experiencia a su conducta diaria, a lo mejor puede cambiar no solo su manera de proceder respecto a su chica, sino respecto a nosotros amigos. continúo, me comento que sentía cierta vergüenza, al estar desnudo entre estos dos hombres que incluso podrían ser sus padres, mientras uno de ellos no solo besaba su boca, sino babeaba su cuello y su oreja, descendiendo hasta sus pezones mordisqueándolos produciéndole tal dolor, que solo le dolía con solo tocarlos. Mientras el otro se había arrodillado ante el, cogiendole su miembro y llevándoselo a su boca, proporcionándole tal mamada que ni siquiera su novia, le había echo sentir tal placer. Mientras gozaba fui sintiendo como acariciaban sus nalgas, para que estas se introdujeran entre sus glúteos, no solo separando sus cachas con cierta violencia, sino que fue sintiendo como un desconocido dedo, había comenzado a presionar su orificio anal, sin haberlo dilatado al menos un poco. Cuando José, quiso apartarse de estos hombres, cambiaron su actitud hacia el, pues me comento que le pidieron si quería continuar, cuando José contesto de forma afirmativa, le pidieron que se arrodillara antes ellos, al tiempo que ambos se desabrochaban los botones de sus pantalones, continuando por bajar sus cremalleras e introduciendo sus manos en su interior, sacando del interior sus miembros (joder, José me comento que como era posible que esos viejos de mierda, las tuviera mas grande que la suya, y uno de ellos tenia los genitales el doble del tamaño que los suyos).

Le comentaron lo que debía de hacer, en otras palabras le fueron marcando o dándole instrucciones de cómo actuar. mientras comenzó con uno de ellos, con cuidado se la metía dentro de su boca, sintiendo nauseas por el olor que emanaba, y una vez dentro de su boca comenzó a tener arcadas, pues con cierta dureza se la introducía tanto que chocaba una y otra vez, con el fondo de su garganta. Le aconsejaba que no cerrara la boca, pues podría hacerles daño con los dientes. Cuando José fue amoldándose a la nueva situación, fue ayudándose con la mano como le fue instruyendo uno de ellos, pues le comento que podría masajear sus genitales, sacársela de la boca para escupir sobre su tronco y con la lengua o con los labios rodearla.

Mientras el hombre disfrutaba con aquello, masajeaba la nuca de José mientras pajeaba con su otra mano el miembro del otro hombre. Después de un tiempo prudencial por el, le comento al tiempo que lo aparto que debía de hacer lo mismo con el miembro del otro hombre. Al tiempo que me ayudo a levantarme, inclinándome hacia delante, quedando de madera que las nalgas de José se las estaba ofreciendo. Recuerdo las palabras de José, las cuales me narraban como de forma satisfactoria, me confesaba como estaba disfrutando con aquello, que nunca había imaginado disfrute como aquel. Mientras comenzó a hacerle al otro hombre, lo mismo que le hizo al anterior, mientras uno de los hombres se colocaba detrás de el, al tiempo que le iba calmando no solo hablándole sino acariciando su espalda y nalgas. Continuando por masajear sus nalgas, magrearle con cierto gusto, sintiendo como las texturas ásperas de unas manos castigadas por la vida, acariciaba su piel joven al tiempo que comenzó a notar, como presionaba su orificio anal intentando penetrarle, notando con satisfacción como José decía la verdad, respecto al sexo.

Cuando tal presión desapareció, primero escucho como dos salivazos, sintiéndolos segundos después en el inicio de sus nalgas, para notarlos como descendía por sus nalgas hacia su ingle, pasando por encima de su orificio, al tiempo que el hombre con su dedo ayuda a impregnarlo, sintiendo como este dedo gordo comenzaba a entrar, apenas soltó sonido alguno pues me comento que ese momento, el otro viejo le tenia sujeta la cabeza. Minutos mas tarde, ya no era la sensación de un solo dedo sino dos, y después hasta tres para continuar por sentir algo grueso y caliente introduciéndose con cuidado, muy despacio entraba un par de centímetros para salir solo uno. Hasta que el orificio de José fue adaptándose a aquel tamaño, disfrutando de ambos miembros. Me comento José, que le comentaron que aunque era la posición más dolorosa pero el, debía de saber que era también la más satisfactoria, pues le proporcionaba toda el disfrute de la penetración.

Después de algo más de diez minutos penetrándole, el viejo la saco con violencia y rapidez sintiéndola posar sobre mis nalgas, y un chorro caliente chocar contra sus vértebras, resbalando por su espalda y nalgas.

Tras escuchar su respiración agitada y acelerada, fue retirándose de mí, sentándose cerca de ellos, al tiempo que el otro hombre me pidió, que me tumbara en el suelo boca arriba, mientras José lo hacia este le pidió que flexionara sus piernas hacia delante, continuando con sus explicaciones lo fue haciendo, sintiendo como el peso del cuerpo pesado de este se echaba sobre el suyo, al tiempo que noto como fue colocando la cabeza de su miembro en la entrada de su orificio anal. Sintiendo como comenzaba a presionar, y como de un solo golpe se lo introducía hasta la mitad al menos. José me confeso que aunque sintió algo de dolor al principio, se fue adaptando a esa nueva preposición, pues que aunque esa posición era cómoda, le gustaba mas la anterior que aunque era dolorosa, disfrutaba mas. Al tiempo que le estaba penetrando el viejo, el otro se le acerco con su flácido miembro, colocándoselo en la boca a modo que comenzara a chupársela. Aunque el viejo que lo penetraba duro casi el mismo tiempo que el anterior, lo que sintió fue que estaba disfrutando, y que después de al menos 10 minutos penetrándole, tal seria la dilatación que apenas la notaba, pidiendo que le metieran los dos al mismo tiempo.

Mientras sentía como algo liquido le llenaba por dentro, notaba como el muy cabron se estaba vaciando dentro de el, mientras ambos se quedaron unidos como si fueran animales, durante varios minutos. Después de haber finalizado los tres, los dos hombres maduros y José, quedando mas que satisfechos y agotados, antes de marcharse se intercambiaron los números de móvil, para poderlo repetir aquello en otro momento. Me comento que el motivo de que diera su móvil, era en el caso que estuviera muy caliente y Eva no lo pudiera satisfacer, siempre le quedaría estos. En verdad no creí que llegara a tal límite, aun mas por lo que lo conozco e incrédula escuchaba atenta su narración. Con tal descaro, por que nos conocemos bastante bien, por el derroche de confianza que ahí, comencé a pasar mis dedos sobre mi húmeda rajita, hundiendo la yema de mis dedos entre mis hinchados y chorreantes labios vaginales, presionando hasta notar como se me introducía en mi orificio vaginal, teniéndome que morder los labios para evitar que de mi garganta saliera mis gemidos (joder, me sentía como una becerra sintiéndome cada vez peor, al retumbar su voz en mi cabeza). Me imaginaba la situación, mientras me frotaba con insistencia mis labios vaginales, presionando mi vulva al tiempo que me acariciaba en círculos, alcanzando varios orgasmos más notando cierto mareo mientras respiraba ajetreada.

Ante todo, debo deciros referente a los comentarios por mi forma de explicaros mis confesiones. Que si mi escritura, no esta bien redactada, que apenas es legible, que tiene dificultad a la hora de leer o incluso que da mal sentido, a la hora relataros o explicaros los placeres obtenidos o sentidos. Lo siento enormemente, pero intentare redactaros lo mejor posible mis experiencias, pues e incluso a mi misma me cuesta a veces, escribir todas mis sensaciones, todas las satisfacciones obtenidas, pues al plasmarlas me es difícil comentar todo lo que sentí. Como sabéis no es lo mismo, sentirlas en el momento que escribirlas, pues como contaros esos momentos hasta el placer, como narraros como disfrute o incluso como me sentí, pues a veces no todos son risas. En cierta ocasión una amiga me contó que una violación disfrutada no es una violación, ella lo sabe bastante bien. Por lo que en todas mis relaciones, ya sean consentidas o no consentidas me gusta disfrutarlas al máximo, sin esperar a cambio nada.

Espero que os haya gustado, si queréis que siga contaros me lo comentáis pues me gusta mucho recibir vuestros email. Aquellos que queráis contactar conmigo hacedlo a mí dirección de email: susanabix@hotmail.com .

Aunque también os podéis pasar por mi blogs, no esta actualizado si me muestro en varias fotos: susanabix-misconfidencias.blogspot.com. Pero este estará hasta que me puedan acabar mi nuevo blogs, el cual espero que os sea de vuestro grado, donde podéis comentar lo que queráis.