Corriendo, capitulo 14***

Los rastros de quienes ya no son nada…

Corriendo, capitulo 14: Correr de la verdad

Las fichas por fin comenzaban a encajar, todo comenzaba a tener increíble sentido, es por el pasado, por lo que no pude ser antes, que ahora no me deja ser quien soy, ¿cómo ganarle al pasado? ¿cómo ganarte a ti misma?

Esa niña creció, su cuerpo se mantuvo igual de destrozado, pero de alguna forma creció, lo hizo conmigo, mientras yo dormía, ella dormía al lado mio, mientras yo caminaba, ella caminaba tras de mi, en algún lugar de la sombra, su historia era igual de miserable a la que tuvimos la mayoría de experimentos fallidos de esta asquerosa gente, pero yo no sentia lastima por ella en absoluto, sentia asco, mas fácil me repulsaba que haya sido toda su culpa que el resto de mi vida se conviertiera en una miseria, su vida ya estaba destruida, ¿Por qué destruir la mia también? Maldito monstruo egoísta! Todas sufrimos, todas queríamos morir

-a ti te destrozaron la quijada!!-tomé uno de los papeles que estaban sobre la mesa- a esta chica le arrancaron cada dia una falange del dedo, hasta que en el anular de la mano izquierda se desangró!! Ella también sufrió!! Todas lo hicimos, yo no pude ver por este ojo hasta que tuve casi 10 años!! ¿Quién crees que…- las palabras murieron en mi boca, al sentir un fuerte golpe arrojarme fuera de la habitación, la lámpara se apagó y regresó la oscuridad, no podía ver nada, pero sentía una huesuda mano tomarme por la garganta, y levantar mi cuerpo completo de esa forma, el aire me estaba faltando, así que estiré mis manos, me espanté al sentir la forma casi intacta de un cráneo justo en frente mio, y de alguna manera, una voz rasgada se escucho de este: -sufrir es que alguien te quite las esperanzas

Y de inmediato me soltó, caí tosiendo sobre el suelo, doblándome para encontrar algo de aire, pensé que la presencia de lo que fuera que haya sido aun estaba al lado mio, pero al ponerme de pie, no sentí a nadie cerca, mi vista comenzaba a aclararse mas, a medida que se dilataba mi pupila para recoger toda la luz posible, miré dentro de la habitación, se podía observar muy bien el cuerpo de alguien sobre la cama, quise alejarme de allí de inmediato, y Sali corriendo por el pasillo, encontré una escaleras, unas en dirección al piso de arriba y otras al de abajo, me pregunté entonces, en que piso estaría, y en que momento había llegado aquí, pero sin dudarlo, tomé las escalas hacia abajo, lo hice rápidamente, y al llegar al piso finalmente, me desorienté al escuchar en todo el lugar, resonar un muy intenso “piii” era repetitivo, sonaba cada dos segundos, y era fácil de predecir, pero se escuchaba cada vez mas fuerte, comencé a marearme, y a caminar torpemente, me chocaba con las paredes, y me tropezaba con mis propios pies, pasé mi mano frente a  mis ojos, y la noté como si una cámara manipulara el tiempo, y se hiciera mucho  mas lento, la mano dejaba su rastro, eran como un montón de imágenes de mi mano, que en uno o dos segundos se reunian con la imagen original, indudablemente estaba mareada, y en el fondo, como un sonido que se escuchara a kilómetros, ese horrendo “piii” sonaba sin piedad.

Pero no me lancé al suelo a desmayarme y esperar perder la razón, aunque en estos momentos se veía muy atractivo, opté sin embargo por seguir en pié tratando de encontrar ese sonido, creo que caminé como si hubiera dado 5 vueltas a la manzana, pero finalmente el sonido se escuchaba mas fuerte, mas cerca, casi lo podía palpar, había una habitación, que no noté que de su puerta, por diferentes orificios se escapa la luz, se me hizo muy extraño, ver luz en este momento, es como si alguien encontrara en la mitad del desierto una tienda de helados… no podía creer lo que veía.

Pero sin dudarlo, golpee la puerta para que ésta se abriera, y lo que encontré dentro, si es posible, me hizo marear un poco mas.

Había una camilla, típica de hospital, con los aparatos típicos también, el electrocardiograma estaba a un lado de la puerta, emitiendo ese “piii” repetitivo que me atrajo hasta aquí, quise golpearlo en ese momento, en la camilla, mirándome, no se si como vencedora, estaba una mujer, rubia, no de mucha edad, pero que si, su rostro yo lo recordaba intactamente, claro que la recordaba, al igual que ese olor nauseabundo, de muerte que rodeaba mi habitación, y cuando ella llegaba, en lugar de muerte olía a alcohol etílico y eso afectaba cada uno de mis nervios, al recordarla poner cinta en ambos párpados, obligándome a observar algo que es demasiado doloroso como para recordar, sólo recuerdo uno de mis ojos arder dia y noche, sin encontrar en ningún momento, un solo descanso de ese sufrimiento.  Oh, yo a esa mujer la recuerdo perfectamente, porque llevé observando su foto durante meses, y alguien detrás de mi, susurrándome “mátala” con tanta insistencia, que no se sí al final el aparecerme en su casa con una gran escopeta, y dispararle no sólo a ella, sino a su esposo y a sus dos hijos, fue un acto de placer propio, o si simplemente quería dejar de escuchar ese susurro.

Pero ahora estaba esta mujer aquí, y lo suficientemente viva como para observarme y sonreírme, y recuerdo entonces en este momento, las palabras de alguien muy enojado, que me gritó que ella no había muerto, y pensé “imposible”

-oh querida, hay tantas cosas que no sabes aun- dijo esta con voz cansada, como una pobre anciana que observa con melancolía a uno de sus hijos volver, ahh quise golpearla hasta la muerte en esos momentos, quería  por fin tomar venganza, a mi no me engañaba con esa falsa sonrisa, yo conozco la putrefacción de su alma perfectamente.

.

Salia el sol imponente a iluminar por completo la habitación, unos brazos se estrechaban contra mi cintura con fuerza, mientras yo abría los ojos y escuchaba una calmada respiración en mi cuello, entrelacé sus dedos con mis dedos, sentí un movimiento en la cama, seguramente ella incorporándose un poco, y cerré mis ojos de nuevo fingiendo dormir, sin soltarnos de la mano, ella giró mi cuerpo poniéndome de espaldas a la cama, y sin medir nada, me beso delicadamente los labios, a la par que acariciaba mi cuello y bajaba por mi torso, exponiendo mi piel de la sábana que nos cubria, para que nos cubriera la luz que entraba por la ventana, finalmente quedé expuesta hasta los pies, y sus manos fueron reemplazadas por sus labios, besando cada centímetro cuadrado de mi cuerpo, hasta quedar ella sobre mi abrazandome y escondiendo su cabeza en mi hombro

-sé que estas despierta- dijo ella, dejando de susurrar para morder mi oreja, y yo dí un brinco que me delató por completo, abrí mis ojos vencida, para encontrarme con su hermoso rostro a centímetros del mio, que se acercó por completo para besarnos intensamente por varios minutos.

Jadeando y respirando difícilmente nos separamos, entonces  ella se recostó otra vez sobre mí, volviendo a hablar muy cerca de mi oído

-deberiamos encontrar algún empleo…llevamos dos semanas sin salir de aquí, comenzarán a creer que hemos desaparecido-terminó de decir con risa

-yo no quiero salir nunca de aquí, en todo el mundo no cambiaría este lugar, siempre que pueda estar contigo es un paraíso-respondí suspirando

-podemos… llevar ese paraíso al trabajo no crees?

-noooo, no quiero trabajar, quiero estar siempre aquí

-pero necesitamos dinero…

-no necesitamos dinero, este lugar es nuestro, nadie nos lo puede quitar, y tenemos todo lo necesario para simplemente vivir

-¿y la comida?

-mmmm- hice como si estuviera meditando profundamente- ah, podemos…-la miré con cara de tener una gran idea- comernos la una a la otra…

-oh no…-cara de decepción

-¿no?-yo también decepción

-bueno, es que, no tienes mucha carne, asi que… creo que moriré de hambre

-argh malvada! - me giré en la cama, quedando sobre ella, -Creo que te comeré primero- estando entre ambas piernas, las tomé a la dos con las manos y las levanté hasta que se cruzaron por mi espalda, mientras yo la besaba profundamente, y luego besaba su cuello

Nos comenzamos a mover, a un agradable ritmo, donde se generaba una cierta fricción, ella comenzaba a sentirlo, cerrando sus ojos y estirando su cuello hacia atrás, lo cual yo aprovechaba para moderla suavemente, podía sentir la puntita de sus pechos, chocar con  mi piel, lo cual se sentia increíblemente bien, a la vez que nuestros cuerpos parecían querer fusionarse con cada movimiento, bien se decía que el placer no estaba en los órganos sino en el contacto físico, pues sin mucho esfuerzo comenzaron una serie de contracciones involuntarias, que nos obligó a ambas a sostenernos del cuerpo de la otra, o de las sabanas o la misma cama, antes de que fuertes ondas impactara nuestros sistemas y quedaramos sin energias, cayendo pesadamente una sobre la otra, con la respiración tratando de controlarse, y nuestros torsos subiendo y bajando incesantemente, la tomé por el cuello y la abracé de nuevo, sentir a la persona que mas amas de esa forma, tan cerca de ti, es realmente satisfactorio.

De momento ella giró el rostro y se me quedó viendo, con un gesto algo serio

-¿y el gato? –dijo como hablando de algo de suma importancia

-¿el gato?

-¿Qué comerá el gato?-

-ah… supongo entonces que si tendremos que trabajar –dije con algo de desanimo

Ella comenzó a reir, y se me lanzó encima de nuevo besándome, en ese momento, me pareció mirar la pared de la habitación e imaginar una total oscuridad, donde ni siquiera se diferenciaba mi cuerpo del resto del lugar, y me pareció sentír la persona que estaba sobre mí, tratar de sujetarme, sujetarme quien sabe para hacerme que cosas, cerré entonces mis ojos, aunque no se diferenciaban en absoluto de tenerlos abiertos, y comencé a ejercer  fuerza  para soltarme, hasta que escuché su grito y abri los ojos para encontrarme con ella asustada mirándome como si no me conociera, la habitación era la misma, el lugar estaba iluminado por el sol como siempre, y comencé a recordar, comencé a pensar en dolor, justo cuando sentia el gozo mas grande hasta ahora, comencé a sentir que ya no tenia nada, pero la tenia a ella, era paradójico, corrí y la abracé con tal de borrar esa mirada de su rostro, la apreté en mis brazos y ella sin corresponderme y con algo de frialdad, me dijo

-¿Qué pasó?

-Anna…  eres todo lo que tengo, lo sabes

-y tu eres todo lo que yo tengo Lucy…

-es por eso que estaremos juntas siempre, ¿Verdad? ¿vas a estar conmigo? No  me vas a dejar… ni siquiera cuando todo sea oscuridad me vas a dejar…

-¿Por qué me estas diciendo eso?

-si te pierdo Anna… si me pierdes, no me quedará nada… nada, y entonces, ya no tendré ninguna razón para pelear

-¿pelear con quien?

…

¿entonces que es mejor? Un sueño hermoso, o una terrible realidad…

Continuará

Nt: responderé a sus preguntas en los comentarios, gracias.