Contratando el Salón de Celebración para mi Boda

Contratando el Salón de Celebración para mi Boda

Hola, me llamo Susana, ante todo gracias a todos los que me habéis leído, sobre todo aun más agradecida a aquellos que me habéis escrito. Ante todo perdonarme pues esta nueva confesión aunque satisfactoria al menos para mí, es larga para vosotros e incluso pesada su lectura… pero he creído conveniente, cortar o mejor dicho no privaros de esos momentos tan satisfactorios como placenteros.

Bueno os voy a confesar lo que me ocurrió hace un par de semanas… ahora quizás haga más. Como bien sabéis tengo pensado… al menos hasta ahora de casarme el día 18 de septiembre del presente año, la iglesia ya esta concertada… obviamente no os voy a decir cual (más por lo pequeña que es y que todos posiblemente no cabríamos). Sigo, también tengo el vestido y todo lo relacionado con el vestuario (y la ropa interior, quien sabe si alguno me la podrá quitar antes que el novio), las tartas también las hemos elegido y van a ser de tres tipos más por que no nos hemos puesto de acuerdo, ya que yo elegí chocolate o limón y mi chico turrón o nata, también el lugar de las fotos de bodas ya esta concertadas.

Os adelanto que quien me dirigirá a la iglesia será un coche de caballos, tirados por dos de estos bellos animales blancos y a mi novio un buen coche… aun no se cual, pero lo que realmente nos ha costado encontrar ha sido el lugar de celebración e incluso os admito que aún no está del todo concretado. Nuestra idea inicial era o unas bodegas donde el olor a vino impregnara todo el lugar (más por el olor tan agradable) o en una hacienda con caballos con plaza de toros incluida (este último es idea mía pues quién sabe sí me pierdo con mi novio en las caballerizas). Lo cierto es que hemos encontrado ambas pero ninguna aún por confirmar quedando una tercera en el aire.

Os diré que la bodega está casi echo a falta de unas reparaciones que está están reparando en estos momentos, respecto a la hacienda es la que os voy a comentar a continuación. Como os he comentado previamente hemos buscado mucho ya sea con la ayuda de las páginas amarillas con por Internet, a base de móvil o teléfono e incluso visitando estas mismas haciendas, muchas hemos rechazados más por el dinero o por el tipo de instalación, hasta que vimos una pasado el pueblo de Coria del Rió, la cierta verdad es que me encanto fui con mi novio y quedamos en que este nos llamaría.

Recuerdo que el pasado viernes (19.03.10) estaba en la oficina, pues aquí en Sevilla no fue fiesta y recibí la llamada de uno de los dueño de la hacienda, el cual me comentaba que me debería pasar por la tarde para cerrar la contratación de la hacienda para dicha celebración, añadiendo que faltaban unos detalles… pero que estos eran un puro trámite. Tras intentar ponerme en contacto con mi novio para poder llegarnos ambos por la tarde, este me comunicó que no podía por lo que acabe por pedirle a mi padre que me acompañara, por muy extraño que os parezca (más bien era una manera de poderlo involucrar en mi boda) en vez de algún amigo... clave error.

Os mentare que iba vestida de manera de no llamar la atención de mi padre… aunque este había dejado de llamar su atención hace tiempo, por lo que me puse un pantalón baquero, una camiseta blanca, una sudadera con cremallera y unas deportivas blancas... me miraba en el espejo y la verdad es que no me conocía ni yo, pues no es habitual verme con tal vestimenta. Bueno desde que llegamos mi padre no dejaba de manosear mis nalgas haciéndome más lo propio de un novio que de un padre, extrañando a este hombre más después de haberle presentado previamente como a mi padre.

Sabéis después de una acalorada y fuerte discusión con mi padre, no sólo mandé a este a la miérda sino que le tuve que pedir que se marchara, haciéndolo este tras disculparse. Recuerdo que el dueño intento animarme excusando a mi padre por sus actos comentando que quizás sea cansancio o sí este hubiera tomado alguna copa de alcohol, tras pedirme que me montara en su coche a modo de llevarme hasta las cuadras más por que en su día le comenté que me encantaba.

No os podría decir que este hombre fuera una maravilla… físicamente, pues a pesar de ser un hombre mayor no entraba dentro de mis preferencias… que la verdad no lo era. Os lo voy a describir vale, mirad no era muy alto pues rondaría el 1.65m, de anchas espalda pero con barriguita cervecera, de cabellos negros ondulados y con abundantes canas y con gafas. Obviamente por su trabajo y su vida es de buen vestir al menos con ropa de estilo cazador y de marca. Bueno continuo con mi confesión, tras llegar detuvo el coche junto a las yeguadas para ir caminando hacia donde tenía a los caballos durante todo el trayecto no dejamos de hablar, todo en torno a mi boda pues ya sea de mi novio, familia, preparativos... lo cierto es que se me hizo muy a meno.

Bueno sigo, tras llegar a las caballerizas me enseñó sus caballos que todo hay que decirlos son preciosos, me pregunto sí montaba al tiempo que el mismo simulaba tal acto entre risas le comenté muy a la ligera que sí, continuando por mentar siempre que podía o me dejaban... posiblemente se podría mal interpretar mis palabras. Tras observar la hora reaccione algo alterada pues entre lo tarde que era y más por la caída de la visibilidad (para entendernos, que estaba haciéndose de noche), me tenía nerviosa el echo de que tenía que regresar y la cuestión era el como, tras darse cuenta de mi estado no sólo pregunto por el motivo sino que el mismo se ofreció a llevarme, resolviendo de está manera mi problema.

Os debo admitir que me quedé prendada de sus hermosos caballos, mientras continuaba enseñándome la yeguada caminando rodeando estas, recordé nuestra conversación al menos en que punto la dejamos y más tranquila le comenté por esos documentos al tiempo que pedí que me dijera la cantidad de la reserva.

Recuerdo que lo primero que me dijo fue que no le gustaba hablar de dinero con mujeres pues al final siempre llevamos las de ganar y no era bueno para el negocio, tras insistirle me comentó que esos documentos son mero trámite... quitándole importancia más acabando por decir que sólo era una firmita por aquí y otra por allá, pero lo que más importante era el abono de la reserva al menos por dejar zanjado ese punto, me comentó que sólo era una cláusula de compensación en el caso de que yo no celebrará mi boda en dicho sitio devolviéndomelo en caso contrario de no celebrarse (según sus palabras).

Os debo decir que le insistí una y otra vez en dicha cantidad hasta que por fin me la dijo... dejándome de lo más helada, pues lo cierto es que no esperaba esa cantidad y no significaba que el sitio no lo valía, pero son 500€ (coño, menuda reserva), le comenté que para ser una reserva la verdad es que era caro y precisamente en esos momentos teníamos unos gastos algo imprevisto y ante tal suma nos quedaríamos al descubierto. No quise ponerme trágica pero tampoco me sobra el dinero aunque viva eso sí vivo cómodamente pero sí agobios, por lo que continúe intentando bajar el precio mientras ya caminábamos hacia su coche.

Sabéis a modo de relajarnos según el, me comentó que sí deseaba ver una de las escenas más bellas de la hacienda y de este mundo... al menos para el, tras aceptar me condujo hacia el interior de las cuadras donde tras recorrer varias caballerizas al fin llegamos donde el supuestamente se encontraban sus mayores tesoros, sus pura sangre. Lo cierto es que ese hombre se mostraba muy atento, servicial e incluso muy amable por no deciros demasiado considerado a pesar de hablar de negocios.

Continuo, como os he dicho este hombre amablemente me indicaba cada momento lo que ocurría, fue enseñándome aquello no os mentiría sí os digo que es grandísimo, por fin me enseñó esos hermosos caballos uno blanco el cual emitía unos sonidos al tiempo que relinchaba y movía su cola (obviamente la yegua) y el otro un caballo negro azabache con dependencia árabe el cual se encontraba detrás pero a una cierta distancia (el macho).

Recuerdo que por su manera de hablar y de explicar más parecía un profesor que un empresario. Mientras me explicaba el mundo pecuario se había colocado por detrás mía, al tiempo que colocaba su mano derecha sobre mi hombro amigablemente con la izquierda, me indicaba lo que estaban haciendo los animales en cada momento.

Os podría afirmar más ya por su forma de actuar que este se estaba excitando con aquello, pues pude notar como su erección crecía entre mis nalgas, aunque por un lado me sentí halagada por el otro aquello me molesto más por que estábamos hablando de mi boda. Sentía su respiración junto a mi rostro y ese olor corporal que más que molestarme me embriagaba, fui sintiendo escalofríos por momento e incluso comencé a sudar pues tal situación me estaba excitando. Me mentó que la yegua se encontraba en celo (no me extraña hasta yo me encontraba), explicándome que este era desde marzo hasta septiembre entrándole al menos durante cinco días durante un cierto tiempo.

Inesperadamente y con sorpresa pues su mano abandono mi hombro para colocarla en mi barbilla, tras presionar ligeramente a modo de indicarme la yegua al tiempo que me comentaba uno de los síntomas del celo, el hinchamiento de la vulva y la pérdida de líquidos de está este otros síntomas lo cierto es que aquel gesto tan paternal me encanto y os aseguro que tenía los mismos síntomas que la hembra. Continuo comentándome, que el macho no sólo percibía en el aire el olor del celo de está sino por la misma orina la cual tiene un sabor distinto, reaccionando este entre relinchos y una serie de movimientos manera de llamar la atención de está o manera de cortejar a está siendo una muy llamativa cuando este levanta los cascos del suelo.

Os comentó que no todo el espectáculo estaba en las cuadras, sino que el espectáculo lo estaba dando el, pues al tiempo de sus indicaciones aprovechaba para restregarme su miembro por mis nalgas... uuummm (Dios, como deseaba que no se hubiera ido mi padre… lo se no debería). Continúa mentándome que el macho hace toda una ceremonia, mentándome que al igual que ellos que hacen el idiota durante un tiempo hasta lograr llevarse a la chica a la cama (cabron, pero es cierto).

Continuo, me explicaba que el macho arriesga mucho pues pueden ser rechazaren por la hembra por lo que su apareamiento puede ser bastante complicado, lo cierto es que estaba sorprendida de la actitud de estos animales pero está aumento aún más, cuando este llamó nuevamente mi atención, pues palmeo primero mis nalgas continuando por cogérmela y no dije palabra alguna, es cierto que es ese momento debí de advertirle o amonestarle, pero lo único que hice fue aparte de el… creí que con eso sería suficiente.

Sigo, me hizo fijarme en el macho el cual tras la aceptación de la hembra y está no era más que apartar su cola, a lo que nuevamente me comentó en plan irónico que partir de ese momento la hembra se mostraría totalmente sumisa... eso es lo que deberíamos hacer algunas. Continuo con sus explicaciones al tiempo que volvió a pegarse a mi, colocándose nuevamente por detrás notando su mas que notable erección, prosiguiendo por mentarme que no sólo es el macho quién hace todo pues a veces estos mismos o no se dan por eludido o pueden que ya lo hayan echo un par de veces más el coito, por lo que es la hembra quién no sólo elige al macho sino que es está misma quién llega intruso a dirigirse al macho al cual ante seguramente mi asombro está introduce su cabeza por debajo del cuerpo a modo de lamer el prepucio hasta ponérsela totalmente erecta... puntualizando como algunas chicas de hoy en día.

Os admito que ante toda esa charla me tenía toda mojada, no se sí lo hacia queriendo o no pero os afirmó que no me importaba la verdad. Continuo, lo que verdaderamente llamó mi atención fue ese casi medio metro que colgaba entre sus piernas (joder, más parecía una pata más). Observaba como el macho entre relinchos comenzó a alzarse varias veces sobre la hembra a modo de montarse sobre la grupa de esta, al tiempo que intentaba insertar su viril miembro, tras varios intento logro por fin penetrarla siendo esta tan certera que le introdujo toda esa barra de carne a la primera, soltó la hembra tal relincho... ignoro sí de dolor o de placer sino incluso yo misma me queje (joder, yo más me inclinaría por lo segundo).

Os juro que no lo pude evitar me salio como algo natural… como si yo misma hubiera sido penetrada, este se me quejo mirando al tiempo que me comento con sonrisa burlona si me ocurría (joder, estaba muy avergonzada, al mismo tiempo que muerta de envidia). Me comentó que normalmente los caballos no aguanta más de 15 segundos o sea unas 6 o 7 embestidas tiempo más que suficiente para que la hembra obtenga su orgasmo (coño, con que poco se conforman… conocerá a algunas de mis amigas), concluyo por decirme que estos pueden repetirlas hasta tres veces más durante el resto del día (menos mal). Entre risas burlonas no dejaba de acariciar nuevamente mi muslo y mi trasero al tiempo que me decía, que precisamente ese semental es la excepción pues llega a aguantar hasta 15 minutos, llegando a soltar por increíble que parezca hasta una cantidad de 5 litros semen… cantidad más que suficiente para dejar preñada a la hembra (coño, que atraganta… en que estaría pensando).

Me comentó al tiempo que seguía magreándome mis nalgas, que había leído en una publicación que tanto un hombre como una mujer murieron por haber sido penetrados por estos animales. Recuerdo entre risas me comento que primero que hay que ser muy burro para hacerlo y segundo que no es cierto, al menos en el caso de una mujer pues su vagina es tan elástica como las yeguas. Como pudo no quiere la cosa le sugerí la idea de bajar el precio de la reserva, tras un tira y afloja logré que este al menos bajara su precio hasta los 400€ acabando por reírme de la alegría por lo conseguido (pienso que parecería una tonta).

Comenzó este a pasarse o mejor dicho sobrepasarse, pues al compás de las embestidas del animal este comenzó a dármelas a mi o mejor dicho a darme puntazos, desde atrás al tiempo que contaba las penetraciones del animal. No os niego que no debería de haberle dicho algo, pero a lo conseguido por la rebaje pensé mejor callarme. Recuerdo que llegó este a ofrecerme si deseaba probar algún caballo… o macho del lugar, pues el deseaba ver como montaba acabando por elogiarme de ser buena amazona. Tras un fuerte relincho por parte de ambos significado que los dos llegaron al orgasmo al tiempo que yo me separaba de este, volviéndole a recordar que tuviera un poco de respeto pues iba a ser una mujer casada... Dios sabe que se lo tuve que decir, quizás se lo dije de mala manera o quizás a destiempo, pues le debía haber llamado antes la atención.

Recuerdo que tras quitarle la mano le pedí compostura... pues más que manos diría que eran tentáculos, este al tiempo que las retiraba me indicó que durante todo el tiempo no había dicho palabra alguna, insinuando que había sido yo quién había dado pie a ese mal entendido o lo había iniciado... lo cierto es que tenía razón. Sabéis mas que enrabietada salí bastante enojada pero más por mi comportamiento que hacia el suyo, no llegue ni a la altura de la puerta de salida cuando este me alcanzo comentándome que deseaba retractarse… acabando por disculparse, culpando sobre todo a los actos de los animales pensé que quizás tuviera razón. Pensé que quizás tuviera razón, respecto a que me lo debería de pensar un poco más y casarme dentro de un par de años alegando este que aun era muy joven, pues aunque me han dicho que es normal que dude ahora, lo malo es dudar una vez me haya casado.

A medida que me acercaba al coche mi estado pasó de enojada a avergonzada nuevamente, tras salir del establo camine en dirección hacia el coche aunque lo cierto, es que iba ruborizada más por las escenas que había sido testigo de esos caballos copulando… y sobre todo de esa pedazo de manguera, más por que no esperaba verla. Tras llegar a su coche este se me adelanto sentándose sobre el capo mientras yo continuaba de pie, comenzó nuevamente a preguntarme mi verdadero motivo por que el cual me iba a casar continuando por mentarme que aún soy muy joven para tal pasó... pues según a su criterio debería de más y vivir la vida (pesados como el… ninguno). Lo cierto es que tiene razón… pues quién realmente se quiere casar es mi novio no yo, no es que me haya creado una duda pero es la cierta verdad. Aunque en mis pensamiento continuaba con mi idea de no pagar ni un euro aún más después de que este se había aprovechado de la ocasión... o mejor dicho de mis nalgas.

Bueno tras contestarle a todas sus preguntas, eso sí al tiempo que este dirigía y posaba una de sus manos sobre mi hombro al tiempo que la otra la posaba por debajo de mi barbilla, levantándomela de manera que lo mirara a los ojos mientras el hablaba... no os negare que tal gesto me hizo ruborizar. Os juro que me sorprendió con una propuesta que según el nos beneficiaria a ambos (o mejor dicho… según se mire), comencé a notarlo nervioso… ignoro por que, incluso dubitativo pues en vez de ir al grano o como decimos por aquí comenzó a marear la perdiz. Como me estaba poniendo nerviosa... si aún más le insistí, este tras coger un paquete de cigarros cogió uno y tras encenderlo le dio varias caladas (joder, supuse que debía de ser algo gordo). Tras una última calada tiro el cigarro y por fin con voz decidida, continuo por mentarme una idea que se la ocurrido en respecto al interés económico, pues era una salida y que no me costaría nada... al menos económico, aunque eso sí sería un esfuerzo moral por mi parte.

Os juro que no sabía lo que pretendía realmente pero disipó todas mis dudas, cuando su mano derecha descendió desde mi barbilla hacia mi cuello acariciándome con dulzura y la amplitud de su mano... logrando que se me erizara la piel. Al tiempo que se levantaba del capo del coche poso su otra mano sobre mi cabeza, comenzando a juguetear con mis cabellos y tras tomar las puntas las dirigió hacia su nariz, tras olerlos me comento que olían muy bien… que olían a juventud. Mientras su mano ascendió desde mi cuello hacia mi rostro, deslizando la yema de sus dedos por mis labios y rápidamente lo comprendí... era obvia su indirecta, pero lo que sí os afirmó es que esa situación era muy excitante y morbosa, tanto que noté como se me humedecían las braguitas una vez más.

Recuerdo que aparte sus manos al tiempo que le comenté que en mi idea no estaba la de engañar a mi novio... mi futuro marido, comentándome este nuevamente que sólo lo debía de ver como una transacción o traspaso de bienes, que todo dependía de como quisiera mirarlo... que cerdo. No os niego que poco a poco me deje doblegar más por mis insititos, pues entre que mi escasa voz de autoridad marcada por una tartamudez repentina, al tiempo que mi mano temblorosa y sin autoridad no ejercía fuerza suficiente como para apartarlo, transmitiéndole que mi fuerza de voluntad estaba siendo doblegadaza.

Recuerdo claramente con este condujo nuevamente sus manos hacia mi, poso su mano izquierda en mi rostro al tiempo que me pedía tranquilidad. Condujo está desde mis mejillas hacia mis labios nuevamente, al tiempo que sus dedos acariciaba mi rostro hasta llegar a mis labios, prosiguiendo por pasarme su grueso dedo por mis labios al tiempo que me siseaba a modo de pedirme silencio. Continuando por mi rostro hacia mi oreja… mis lóbulos uuummm, pasando por mi cuello haciéndome sentir escalofríos y ponerme la piel de gallina. Tras levantar su brazo derecho y dirigir su mano hacia mi cuello, comenzó acariciando mis cabellos ascendiendo por esto hasta mi nuca… notando claramente como no ponía defensa alguna.

Os juro que aunque mi cuerpo se había rendido en mi mente aun decía no, llegándole a pedir en varias ocasiones que por favor no continuará, al tiempo que me comentaba lo agradecido que debía de estar mi chico después de ese día. Sus manos descendieron hasta mi cintura colocando ambas sobre el cierre de la sudadera, mientras una de sus manos pellizcaba mi prenda con la otra bajaba el cierre... Dios no supe que hacer pues me encontraba bloqueada (joder, estaba asustada y al mismo tiempo muy excitada), continuando por quitarme tal prenda deslizándola por mis brazos hasta dejarla caer sobre su vehículo.

Tras bajar sus ojos se clavo en mi cuerpo... aun más en mis senos o para ser exacta en mis delatores pezones (marcados sobre la camiseta por tal endurecimiento). No os sabría explicar mi estado ante mi pasibilidad, este dirigió nuevamente sus manos hacia mi camiseta tras pellizcar mi prenda, tiro de ella hacia arriba hasta dejármela por encima de mis pechos… sin llegar a quitármela por completo, dejando mis pechos desnudos pues como he dicho previamente no llevaba sujetador. Tras observar más detenidamente mis pechos no sólo comentó las ansias de poseerlos que tenía sino que alabó mis senos y a la madre que me parió. Lo cierto que no entiendo mi actitud y no se por que razón lo deje hacer, quizás por sus palabras o por la escena que he sido espectadora en las cuadras o quizás por bajar esa suma de dinero.

Tras bajar nuevamente mi mirada más por vergüenza que otra cosa, este camino de manera que se puso por detrás mía haciéndome sentir su cuerpo pegado a mi espalda, pero la sensación de tenerlo detrás ya no era la misma algo había cambiado. Sabéis no solo estaba excitada por la sensación de sentirme acorralada sino por una extraña sensación o algo que no puedo describir de notar ese acosamiento, pues con un tono de voz dulce me pedía que me dejara llevar... que me tranquilizara, al tiempo que posaba su barbilla sobre mi hombro.

Continuo levantándome mis cabellos posando sus labios en mi cuello, besándomelo muy despacio hasta mi oreja, besando y mordisqueando dulcemente mi lóbulo… tal acto me hizo estremecerme de tal manera que sentí el inicio de un orgasmo (joder, como habrá intuido mi punto débil). Tras detenerse dejó caer un comentario inoportuno comentando que la reserva había bajado a 350€ (joder, me hizo sentirme sucia). Sus manos se encontraban en mis pechos acariciándomelos y jugueteaba con ellos y con mis pezones, descendiendo hasta mi vientre para volver a ascender hacia mis pechos. No dejaba de comentarme que tales hermosuras no debía de ocultarlos pues sería algo antinatural y que no se extrañaba que mi novio quisiera casarse ya pues el mismo lo haría.

Sabéis, tras un determinado tiempo sus manos que acariciaban mis pechos al tiempo que mi cuerpo en un bajar hacia mi vientre para volver a subir hacia mi cuello y volver a descender pero para en esa vez para no ascender. Comenzó por desabrocharme el cinturón y tirar de este hasta dejarlo caer, continuo por desabotonarme el botón del pantalón y tras bajarme la cremallera volvió a colocarse delante de mía. Os debo mentar que lo hacia con cautela y siempre mirándome a los ojos, tras inclinar su rostro hacia mi intento en una primera instancia a besarme ante mi rechazo al girar mi rostro, descendió hasta mis pechos los cuales comenzó a besarlos y a lamer cada uno con dedicación, al tiempo que mordisqueaba mis pezones haciéndome estremecer de placer... uuummm (Dios, que bueno).

Comenzó a descender besando mi piel al tiempo que colocó sus manos a ambos lados de mi cintura sobre las hebillas de mi baquero. No os mentiría sí os dijera que deseaba que continuará, pero al tiempo que sentí sus labios besar mi ombligo noté como tiraba de mi pantalón hacia abajo hasta sentirlo descender hasta mis pies, repitiendo tal acción con rapidez con mis braguitas acabando por bajármelas y quitarme ambas prendas, sacándola por mis pies al tiempo que me iba descalzando… dejándome en calcetines. Tras dejar mis prendas sobre el suelo a un lado del coche, me hizo estremecer al tiempo que sentía sus labios en mi coñito... ooohhh, me hizo la pregunta absurda que sí deseaba que parara... mi contestación no se hizo esperar, por lo que dirigiendo una mis manos a su nuca, presionándola a modo de hundir su rostro entre mis muslos, haciéndome sentir aún más su lengua.

Sabéis tras incorporarse creí que pasaría a la acción pero que equivocada estaba, pues tras cogerme en brazos me colocó sobre el capo de su coche, sintiendo la fría chapa en mi cuerpo… en mis nalgas y piernas. Recuerdo que tras colocar sus manos en mis piernas separo estas, inclinándose de manera de hundir su rostro en mi ingle, saboreando mis labios vaginales y haciéndome temblar al chupar mi vulva y mi clítoris al tiempo que introducía su lengua. Dios, menos mal que no había nadie pues me hubieran escuchado como gemía de placer, maldecía entre otras lindezas a este cabron, pues con su lengua áspera arrancó al menos dos orgasmos mas de forma simultánea, sin dejarme al menos recuperarme del primero. Joder, el sólo pensar en como lamía mis labios vaginales... como sentía la yema de su lengua cabalgar sobre mis labios vaginales superiores para continuar por los inferiores, prosiguiendo al tiempo que presionaba mi vulva continuaba en circulo… uuummm.

Os debo admitir que no sólo temblaba de satisfacción sino estaba temerosa de ser vista por extraños… aunque mis inclinaciones sean hacerlo en publico (Dios, que morbosa situación). Que bien lo hacia el muy cerdo, no dejaba de lamer con rapidez y comenzar en círculos al tiempo que ya sentía sus dedos en mis orificios, no os mentiría sí os dijera que en ambos, mientras jadeaba y me estrujaba mis pechos. Tras detenerse se alejo unos minutos tiempo suficiente como para acercarse a la puerta trasera de su coche y abrir esta, volviendo hasta mí de nuevo.

Recuerdo que me comentó que no tuviera miedo y que me sujetará bien a su cuello, dicho esto me cogió en brazos llevándome hacia el interior de su coche... donde pensé que me follaría, que nuevamente erré en mis pensamientos. Os debo mentar que equivocada estaba pues tras dejarme tendida sobre el asiento trasero, me comentó sí yo me masturbaba… y sí no era mucho pedir que se lo hiciera para el. Os debo mentar que me extraño un poco, pero al mismo tiempo me excitó mucho más por lo que comencé a acariciarme, pasando mis manos por todo mi cuerpo desde mi cuello hasta mis pechos los cuales los magreaba y pellizcaba mis pezones como bien se que os gusta... llevándomelos incluso a mi boca, pasando mi lengua por la lauréala sonrosada de mis pezones... uuummm. Mientras lo observaba lo malito que estaba este, pues no sólo se desabrocho su pantalón sino tras dejarlo caer junto a sus calzoncillos, comenzó a masturbarse a mi salud (no era muy grande pero en ese momento tenía más que de sobra).

Dios, conseguí alcanzar un nuevo orgasmo al tiempo que mis dedos no sólo me producía placer por mi coñito sino también por mi orificio anal. Os juro que no pude esperar más, por lo que gateando por el asiento me dirigí hacia el y tras coger su miembro con la mano se lo despabulle varias veces con la boca, al tiempo que me la restregaba por los labio al tiempo que le magreaba sus genitales y lo escuchaba jadear y mascullar lo bien que lo hacia, acabando por introducírmela en la boca haciéndole lo mejor que se hacer... pero no llevaba ni tan siquiera diez minutos, cuando este me hizo detenerme tras comentarme que no daría mucho más y lo que deseaba realmente es penetrarme. Por lo que tras hacerme salir del coche me hizo darme la vuelta de manera de darle la espalda, tras posar una de sus manos sobre mi cuello presionándome de manera de inclinarme hacia delante hasta pegar mis pechos sobre el asiento, con mis pies sobre el suelo. Comenzó primero a palmear mis muslos a modo de separarlos para continuar por colocar su miembro entre mis muslos, sintiendo como este se dirigía hacia la entrada de mi orificio vaginal, comenzó a restregar su miembro sobre mis labios vaginales llegando por varias ocasiones por chocar contra mi orificio vaginal, tras darme un inesperado golpe de pelvis sentí tras dejar atrás mis labios inferiores, como esta se alojaba en mi interior… ooohhh.

Os debo recordar que no era muy grande pero me estaba embistiendo de locura, tras llevar al menos un cuarto de hora se detuvo pidiéndome acabar dentro... obviamente se lo denegué, más por que me estaba follando a pelo sin protección alguna. Por lo que este acabó por rogarme acabar en mi boca, tras notar sus fuertes embestidas sus brutales golpes en mis nalgas y alaridos... algo significativo que se venía. Recuerdo como este tras posar una de sus manos en mi hombro tiro de mí hacia atrás, pasando por rodear mí cuello con su brazo y tras tirar hacia atrás nuevamente me sacó del interior de su vehículo… sin dejar de penetrarme, aún lo recuerdo satisfactoriamente. Mas al recordar cuando mi cuerpo al retroceder se pegaba… se introducía aún más contra su pelvis, haciéndome sentir su polla aún más profunda.

Aunque fueron al menos tres embestidas más sí os digo que fueron sensacionales, no os sabría explicar por que motivo quizás por la violencia ejercida, pues mientras me tenía presionada contra la chapa de su coche sus embestidas fueron bestiales alcanzando ambos el orgasmo. Tras sacarla con fuerza y no con la suficiente rapidez, pues no pudo aguantar el tiempo suficiente como para vestir su semen en mi boca, pues mientras lanzaba chorros de semen a mi cuerpo y al suelo, chillaba como sí se tratara de un cochinillo al que están matando. Tras descansar ambos, comencé a vestirme mientras el aún se reponía… obviamente la edad, un rato después y una vez listo me llevó a casa, donde lleve la agradable noticia a mi novio que ya teníamos sitio para organizar el convite y que este no me había costado euro alguno. Después de una merecida ducha lo celebramos con una buena cena, un buen vino (un Beronia) y sobre todo de una noche de buen sexo.

Por cierto aún no le he comentado aún a mi chico los detalles de dicho éxito, espero que nunca llegué a contárselo. Bueno besitos y hasta pronto. Al tiempo que os debo admitir que no ha sido mi última visita a esta hacienda antes de mi boda, pues semanas después recibí nuevamente la llamada de este hombre comentándome que debo de presentarme en compañía de mi novio en su oficina a modo de firmar una documentación. La cual tras pasarnos por la oficina, supe que no era necesaria y todo era por poder conocer a mi chico en persona y tras averiguar que este ignora tal suceso, me ha pedido un favor especial por cerrar el papeleo… obviamente sabéis como acabo, pero os adelanto que ante tales servicios he decidido no celebrarlo allí. Bueno os dejo hasta pronto, besitos para todos y todas.

Ante todo perdonarme por que quizás no me exprese adecuadamente o no plasme lo que realmente me han hecho sentir o me han hecho hacer, pues aunque lo intento una infinidad de veces que las mismas ansias por plasmar lo sucedido, no me doy cuenta y cuando lo leo más tarde… me doy cuenta que me he comido tanto palabras como símbolos (interrogaciones o exclamaciones). Lo siento enormemente, pero intentare redactaros lo mejor que pueda mis experiencias, me cuesta a veces escribir todos mis sensaciones, pues el plasmarlas creo que es lo mas difícil.

A aquellos que queráis contactar conmigo hacedlo a mí dirección de email susanabix@hotmail.com. O si queréis pasaros por mi blogs, aunque se que no esta actualizado más por falta de tiempo que por pereza (donde os muestro varias fotos mías), es susanabix-misconfidencias.blogspot.com o buscarme en Facebook o en Twuenti.