Continuan las aventuras de mi esposa

PROLOGO

No se imaginan lo excitante que ha sido que mi querida y amada Carla me haya contado cada día sus aventuras de índole sexual que tuvo durante el mes de agosto de 2011 durante mi viaje de trabajo por un mes, cada día ella con lujo de detalles y excitación compartida, me describió cada instante de sus encuentros con sus amigos; pero aún ha sido mayor la sorpresa cuando me a mi regreso a Bogotá me mostró que había hecho un relato con sus aventurillas y claro que ha sido delicioso leer las crónicas de mi esposa en el relato llamado “DOS SEMANAS DE PLACER SIN MI MARIDO”.

Ya acá en la fría ciudad de concreto y acero, ella me ha dicho que si bien agosto fue un mes delicioso para ella, íbamos a divertirnos aún más en septiembre por varias razones, la primera: Que estando yo cerca, podíamos disfrutar mucho más de los relatos de sus encuentros, porque su propósito era el de continuar reuniéndose varias veces a la semana con sus amantes, la segunda: Que yo debía escribir las actividades que ella me contara, la tercera: Que en esta ocasión cada encuentro sería planeado entre ella y yo, la cuarta: Que participaría en algunas si estar presente (no entiendo lo que quiere decir, pero me prometió que sería fantástico), la quinta: Que yo debo escribir en la medida que se sucedan las cosas.

SEPTIEMBRE 5 DE 2011

Carla me ha dicho que en esta semana ha planeado reunirse con varias personas de la siguiente manera: martes (mañana) Pablo en la mañana y Edison en la tarde iniciando la noche, el miércoles se reunirá con Mauricio, el jueves su encuentro es con Johnny, el viernes en la mañana se verá con Manuel y en la noche con Felipe y finalmente el sábado a medio día con Alirio; con esta información me pide que planeemos cada encuentro teniendo en cuenta que desea de alguna manera hacer cosas que desesperen a sus amigos en el deseo de penetrarla, y que el caso de Alirio sea un encuentro de despedida porque no desea verlo después en otra ocasión.

Con las condiciones planteadas, hemos definido los encuentros de toda la semana, bajo la base de hacer que su cuerpo sea acariciado por la verga de su amigo en cada encuentro, haciéndole pajeadas y mamadas que lo lleven al borde de la eyaculación y deteniéndose en ese punto antes de que el tipo se corra, y para el encuentro de Alirio, se disfrazará de puta y se comportará como tal a fin de que a él nunca se le olvide esos momentos vividos con mi esposa; también me dijo que por ningún motivo sus amigos pueden saber que yo estoy al tanto de sus andanzas con mi mujer, lo que me hace preguntarme como planea ella que yo participe sin que sepan, pero bueno me promete que eso será así.

SEPTIEMBRE 6 DE 2011

Al rededor de las 10:00 de la noche, Carla se encuentra sobre la cama desnuda y yo igual, mientras nuestras respiraciones aumentan su ritmo y nuestras manos recorren los cuerpos, Carla con voz susurrante llena de excitación y picardía ha comenzado ha relatar su aventura sexual y empieza por decirme que se encontró con Pablo en chapinero (voy a comprar un motel, parece buen negocio), y entraron a uno que conocen y que tiene un jacuzzi grande, ella va rápido en su relato, diciendo que él la acarició y besó en la entrada del cuarto, que le despiojó de las ropas con suavidad y lentitud mientras sus bocas se devoraban con frenético ardor, se dirigieron a la ducha y duce que Pablo le besó en cada centímetro de piel y con su dedo va recorriendo los lugares por donde pasaron los labios de su amante, como pasaron de sus labios al cuello, a la nuca, los hombros, el busto, los pezones, el estomago los muslos, las piernas, los pies, luego de voltearla subió por las pantorrillas, la parte interna de las rodillas y de los muslos, las nalgas, la espalda y sentía el contacto de su miembro contra sus cola, luego la volteó nuevamente y después de un buen tiempo en el cual él se deleitó con sus pezones, bajo por su vientre hasta su clítoris y con la lengua en movimientos vigorosos la hizo correrse dos veces; a partir de este momento ella tomó la iniciativa y arrodillándose ante su macho, introdujo la verga en su boca para morderla y como si fuera un helado, lo lamió por todas partes, pero especialmente en la cabeza roja de ese pene, mientras tanto sus manos acariciaban las nalgas de su hombre y subían y bajaban por las piernas de él, al tiempo que chupaba con fuerza el miembro viril de Pablo él emitía gemidos de placer y cuando ella presintió la descarga del semen, paró de inmediato y lo besó en la boca, transcurrido un largo minuto repitió la mamada y todo el proceso, parando de nuevo cuando estaba a punto de hacer correr a su amigo, repetidas tres veces más esta operación, inició con su cuerpo  a rozar la verga de Pablo con el cuerpo de ella dejándolo de hacer cuando creía que el ya iba a eyacular, así que con tanto preámbulo Pablo le pidió que le permitiera penetrarla pero ella sin responder continuó con el juego, tomó la ducha de teléfono y colocó los chorros de agua caliente contra su clítoris para sentir no solo la suave caricia y la fuerte presión sino para excitarse con el calor del liquido masajeador, así que Pablo en su deseo comenzó a tratar de forzar la penetración y ella a impedirlo al mismo tiempo que con su cuerpo rozaba el pene del macho caliente, solo hasta cuando la fuerza bruta de Pablo apareció para doblegarla, ella le permitió que introdujera su herramienta dentro de ella, el invasor entro un par de centímetros, ella sabia que la punta estaba dentro, y de inmediato se movió para hacerla salir de su funda, en varias ocasiones su cola fue invadida y tantas otras ella logró liberarse, mientras tanto su orgasmo venía galopando con velocidad y fuerza, el juego ahora la hacía presa del sexo y la pasión a ella, ahora el juguete era ella, ahora la desesperada era ella, cuando se acercaba el momento crucial, su cuerpo se tensionó y reculando contra el amante de turno hizo qué la espada de placer entrara en toda su inmensa longitud dentro de su culo y mientras su cuerpo sentía las oleadas placenteras del orgasmo, ella sentía la palpitante verga de Pablo inmóvil en su cola, sintiendo el calor que emanaba, sintiendo como se amplificaba el orgasmo; luego en un movimiento sorpresivo, Carla llevó a la fuerza a su macho hasta la cama y la boca de ella llegó hasta el miembro de Pablo y comenzó a mamárselo con fuerza y velocidad, en un momento paró y le dijo que quería que le llenara la boca de semen y que luego ella lo besaría para pasárselo para que él lo depositara sobre sus pezones y los lamiera, sin esperar respuesta metió la verga de nuevo en su boca y lo hizo derramar totalmente en la boca, ella sintió cada chorro de leche caliente golpeando el fondo de la garganta, cuando su hombre dejó de gemir y ya no había más semen saliendo de su verga, ella se levantó llevando en la boca el preciado néctar y besándolo se lo pasó en su totalidad, ella se recostó en la cama esperando el premio sobre su cuerpo y él escupió el semen en cada pezón y luego la leche la fue esparciendo por todo el pecho, vientre de mi esposa; cuando terminó de hacerlo, Pablo le dijo que era lo más excitante que había hecho hasta ahora y que serías algo a repetir en el próximo encuentro.

Luego de un justo descanso reparador entre el jacuzzi, sitio al que se habían trasladado, mi mujer comenzó a acariciarlo hasta hacer que el miembro volviera a adquirir vida, en ese momento pablo se abalanzó a lamerle la cuquita y meterle uno y dos dedos en la vagina, haciéndola correr un par de veces más, ella luego se lo mamó y cuando paró antes de que Pablo se corriera, éste se sorprendió y temiendo un juego como al comienzo, el la sujeto, se puso un condón y se la metió toda y la bombeó con fuerza y velocidad haciéndola venirse una vez más y después ambos se corrieron al tiempo, cuando terminó, Carla le quitó el preservativo y esparció el semen por el cuerpo de su amante para lamerlo enseguida, cansados pero muy satisfechos se vistieron mientras acordaron reunirse de nuevo la próxima semana.

En la tarde llegó Edison a la casa de Carla, ella lo esperaba con una falda abierta a un costado, una blusa de encaje transparente sin brasier, cuando le abrió la puerta, él igualmente se sorprendió y abrió los ojos pues no podía creer que esa mujer estuviera más que desnuda con el atuendo que tenía puesto, él se sentó en el sofá y ella cerca en una silla, comenzó el dialogo hablando de trabajo, pero él no hilvanaba bien las frases, no dejaba de verle las tetas a través de la blusa, hasta que no se contuvo más y le preguntó si podía acariciarla, ella le dijo que sí y se acercó a él, cuando lo hizo, el con sus manos por encima de la blusa tomo su busto y acercando los labios por sobre el encaje los besaba una y otra vez, al tiempo, ella le abrió la bragueta y tomo entre sus manos la verga de su amigo pero la desilusión fue grande, puesto que notó que era bastante pequeño el miembro, pero de todas maneras como sabe que hay muchos casos en que una de tamaño corta es igualmente eficiente siguió adelante acariciándosela, pero Edison sacó un condón del bolsillo, se lo puso y allí sobre el sofá con las cortinas abiertas la penetró de una, se movió rápidamente y cuando Carla alcanzó su primer orgasmo, él se corrió de inmediato, luego de ello él se vistió, dijo que ojala se repitiera pronto y se fue, claro está que Carla no piensa volver a estar con él en su vida.

SEPTIEMBRE 7 DE 2011

Hoy la reunión ha sido con Mauricio, igual que ayer, ambos estamos desnudos sobre la cama, y como siempre, Carla me dice que salieron del trabajo y fueron a chapinero, escogiendo un cuarto no solo con jacuzzi sino con chorros múltiples de agua en la ducha.

Ella levaba una blusa de malla con huecos grandes y sin brasier, pero a diferencia de Pablo que no le gustó que el de la portería del motel y el recepcionista vieran su casi desnudez, a Mauricio le encantó que otros la vieran así, ya en el cuarto se desnudaron mutuamente, despacio y sin prisa, a beses acariciándose y otras besándose, cuando ambos estaban desnudos, se dirigieron a la ducha, donde se enjabonaron el uno al otro y luego se quitaron el jabón, luego ella se arrodillo ante él y con su boca comenzó a besar el pene de su hombre, lo mamo despacio y a veces rápido, con suavidad por momentos y otras con pasión, luego él se arrodillo y ella se puso de pie permitiendo que él la lamiera, cuando alcanzó su primer orgasmo Carla se situó frente a un chorro con las piernas abiertas, para que el agua golpeara su clítoris, cuando su cuerpo comenzó a temblar al paso del orgasmo que recorría su espalda y piernas, se movió para colocar el miembro de Mauricio contra el chorro de agua del teléfono para hacerle sentir lo mismo que ella cuando estaba apunto de derramarse su amante, paró y regresó ella a su sitio para que el agua caliente golpeara su clítoris, mientras tanto Mauricio de pie desde atrás le acariciaba los pechos y la espalda, ella acercó sus nalgas al pene de él para rozarlo y él dirigió la punta hacia el ano para meterle unos centímetros en su culo, mientras Carla sentía todo el calor del agua, él entraba unos centímetros y se salía de su cola haciéndola tener dos venidas así, luego el se salió del culo y colocando la verga entre las nalgas comenzó a rozarlas frotándose contra ellas hasta que mi mujer y él se corrieron, ella sentía el semen caliente entre los hemisferios de su cola deslizándose por su piel al tiempo que Mauricio con la punta de su miembro esparcía el semen en la cola.

Pasaron al jacuzzí y mientras conversaban sobre mis cuernos, ella lo acariciaba hasta que el de nuevo estaba listo, se puso un condón y desde atrás se lo metió por la vagina y así estuvieron el bombeando y ella sintiendo el placer de tener muchos orgasmos producidos por su amante, la verga de él ayudada por los dedos de ella que acariciaban su clítoris como masturbándose mientras la clavaba su amigo, hasta que él se corrió al tiempo que ella.

Se fueron a la cama y allí en un frenético 69 después de descansar ambos con sus bocas hicieron que cada uno se corriera, al igual que con Pablo, ella lo besó para pasarle el semen y que luego lo esparciera por sus tetas, lo cual el hizo sin hacerse rogar.

SEPTIEMBRE 8 DE 2011

Hoy me cuenta que fue hasta uno de los sitios de trabajo de Johnny y de inmediato salieron caminando hasta un motel a unas dos cuadras de allí, por la calle ella iba pensando que sería simpático encontrase con alguien conocido, por cuanto la persona al verle en aquel lugar lleno de moteles y conociéndola a ella nunca sospecharía que en ese momento Carla estaba caminando con su amante hacía un motel con el propósito de ponerme los cuernos y dar rienda suelta a la pasión de ambos, y mucho menos podría pensar que yo conozco de las andanzas y aventuras sexuales de mi esposa; este pensamiento la puso aún más caliente y sonrío por lo guarro de su pensamiento; en ese momento llegaron al hotel y cuando cruzaban la puerta volvió a sonreír al pensar que si en ese instante alguien la viera, por supuesto que se sorprendería al verla entrar a un reconocido sitio al que van los amantes furtivos a hacer el amor unos y otros a tener sexo. Johnny se acercó a la recepción mientras Carla se quitaba el saco y en ese momento el recepcionista pudo ver que ella usando una blusa muy transparente y sin brasier mostraba sin pudor mostraba orgullosa sus senos tanto al portero del motel como al que atendía el mostrador, probablemente por la cara del recepcionista, Johnny volteó la mirada hacia atrás, dirigiéndola a donde estaba Carla, la vio unos segundos y haciendo una mueca de disgusto se apresuró a concretar la solicitud del cuarto, y tomándola de la mano llevo rápidamente a Carla a la habitación al tiempo que le decía que no le gustaba que otros vieran su desnudez porque ella era solo para él, mientras tanto mi esposas sonriendo por el extraño cuadro de celos pero agradada por los mismos, le dijo que era para que él se excitara más y los otros lo envidiaran, pero que igual sería algo que se repetirá de nuevo en varias ocasiones en el futuro, porque a ella le gusta la exhibición.

Una vez cerrada la puerta, Johnny desnudó a Carla al tiempo que el a si mismo, luego entraron a la ducha, allí ella de inmediato se paró frente a él y tomo la verga de él, par ponerle el chorro de agua caliente a fin de excitarlo, cuando Johnny ya se iba a correr, ella retiró el chorro y dándole la espalda comenzó a masturbarse con el agua sobre su clítoris al tiempo que su amante rozaba con su miembro las nalgas, jugando a entrar en su cola y ella a no dejarlo pero sin quitar el agua de sus partes intimas, así tuvo varios orgasmos, hasta que en uno de ellos, descuidó la retaguardia y Johnny se coló por entre los hemisferios de las nalgas para ensartarla con su pene logrando y entrar más o menos la mitad de su virilidad, Carla al sentir el placentero invasor trató de luchar contra el para hacerlo retroceder, lo que de momento logró pero el guerrero al verse medianamente vencido hizo acopio de fuerza y con empuje logró su cometido avanzando dentro de la cola unos centímetros más, pero ella de nuevo combatió haciendo que su amante se retirara por otros centímetros y cuando se sintió ganadora, sobrevino de nuevo el orgasmo lo que aprovechó su amante para clavarla totalmente metiéndosela toda, ocupada con las oleadas de placer, calor y excitación, permitió que el vencedor se quedara dentro hasta que desfalleció por tanto placer; cuando logró Carla controlar sus sensaciones, retiró de si a la verga que tenía en la cola y Johnny frotándose contra las nalgas de ella se vino y con su manos masajeo las masajeó esparciendo sobre ellas el semen que acabó de eyacular.

Se dirigieron a la cama donde ambos se trenzaron en apasionados besos a los sexos del otro, pareciera que lucharan por lograr que su contendiente sintiera el máximo furor de excitación y calor, Carla iba de un orgasmo a la cresta del siguiente, cada paso por ellos era acompañado por los sonidos de su garganta exteriorizando el placer que sentía; mientras tanto su pareja de turno se aproximaba a correrse en la boca de mi amada, él respiraba y jadeaba al tiempo que su verga se endurecía y su cuerpo tenía los estertores del macho que explota con fuerza botando su simiente sin poderla contener; con la boca y labios profundamente llenos de la leche de su amado, se acerco a su boca para compartir en un beso una total intimidad al intercambio de sus humedades.

Rendidos de tanto esfuerzo sexual, acosados por la super sensibilidad de su piel debido a la excitación vivida, se vistieron y en el momento de la despedida lo hicieron con un beso público de amigos para que quien los viera no sospeche que hasta unos momentos antes no solo sus bocas juntan  sino que se desbordan en sexo

SEPTIEMBRE 9 DE 2011

Mi mujer como ha sido toda la semana, para relatarme sus aventuras, lo hace entre la cama y desnuda, empieza por jugar para que adivinara yo si hoy también había sido cornudo, y claro que lo fui, este día en la mañana ella se encontró con Manuel, y por supuesto que fueron a un motel en Chapinero, cuando entraron, ella lo desnudó y el a ella, se pasaron a la ducha y Carla con las piernas abiertas, se colocó para recibir un chorro fuerte de agua caliente que salía de la pared, en esta ocasión no solo masajeaba el clítoris, sino que por su fuerza y grosor lo podía sentir invadiendo las paredes de su vagina como si fuera una verga que nunca paraba de entrar, era como si fuera infinita sin sentir la molestia de llegar al fondo al tiempo que podía percibir el choque del agua contra las paredes de su vagina como si fuera inmenso y duro pero sin causar dolor, la temperatura del agua por lo caliente le hacía parecer que se incrustaba en ella el miembro de un hombre muy caliente, mientras tanto Manuel jugaba con su cosota en las nalgas de ella pero no intentando entrar, solo tocándolas, esa pasividad lo hacía parecer inocente o ingenuo, pero bien sabía ella que él estaba lejos de serlo, no en vano antes la ha poseído tantas veces; mientras pensaba todo esto, de pronto se le vino encima el orgasmo cogiéndola de improviso y haciéndole flaquear las piernas hasta casi hacerla caer, en ese momento su gemido y su grito se confundieron en uno solo; a continuación volvió a colocar el agua contra su cuerpo para sentir un par de orgasmos mas.

Carla se arrodilló ante el miembro endurecido de su amante para con su boca simular una vagina poseída por la verga de Manuel, colocó sus labios en forma de “O” a fin de que con cada entrada o movimiento del miembro, él sintiera que a todo el rededor había piel de una hembra deseosa, él inició a mover sus caderas adelante y atrás como fallándola en su forma natural, pero en esta ocasión no podía ella emitir sonido alguno, porque se encontraba con la boca llena con la virilidad de un macho, él aumento al ritmo sincronizándolo con su respiración, hasta que tomando con sus manos las sienes de su mujer en ese momento, se tensó totalmente y comenzó a descargar el semen en la boca entre abierta de mi mujer que con deseo esperaba que el se corriera en ella, él siseaba asintiendo lo que sentía, sin permitirle a mi esposa soltar su presa o que se alejara antes de terminar en su totalidad la descarga de su semen; cuando terminó, Carla subió besando el cuerpo del hombre  y dejando a su pasó una huella blancuzca y húmeda, la cual inició en el pene y terminó en la boca de él, cuando llegó allí introdujo en su la boca su lengua con los restos del semen.

Mientras descansaba Carla, pensaba en que todo lo hecho hasta ese momento era extraordinariamente satisfactorio, porque todo lo planeado conmigo para su reunión con Manuel se había realizado casi al pie de la letra, para ella era muy excitante haber planeado cada paso anoche en nuestra cama y haberlo llevado a cabo hoy en la mañana, y esa sensación se aumentaba en la medida que ahí desnuda junto a él había disfrutado del sexo con él, le había dicho que yo ignoraba de sus andanzas, él lo había creído y no sospechaba que ambos lo habíamos planeado; Manuel la sacó de sus cavilaciones al acariciar con sus manos su busto y comenzar a besar sus pezones, Carla le pidió pasar a la cama y allí ambos se dedicaron al sexo oral en posición de 69, la cual es la predilecta de mi esposa, con maestría él la llevaba en oleadas de placer de orgasmo a otro más fuerte, así que le pidió que le pusiera un condón, lo que ella hizo de inmediato y una vez vestida la verga de él, abrió sus piernas para recibir a su amante dentro, sintió como le hundía su tranca dentro y se movía en bombeo lento, profundo y continuo que la hacía emitir fuertes sonidos y gemidos, mientras su hombre bufaba tratando de contener su corrida para hacerla gozar más y más, después de no sabe ella cuantas corridas propias, le pidió inicialmente que aumentara la fuerza y velocidad para que ambos llegaran al clímax simultáneamente, él lo hizo con verdadera aplicación, haciéndola gemir no solo a ella sino a la cama hasta que ambos en gritos se corrieron casi que al tiempo; Manuel permaneció encima de ella aún con la verga dentro, hasta que la erección desapareció y fue el momento en el cual decidieron ir a la ducha a refrescar sus cuerpos todavía calientes y sudados por la pasión vivida.

SEPTIEMBRE 13 DE 2011

Este día ha sido distinto, ha estado enmarcado por recuento de nuestros años, encuentros, aventuras separadas y comunes que hemos tenido; se me olvidaba comentar que Carla descansó no del sexo sino de tenerlo con alguien distinto a su esposo es decir conmigo y no porque no quisiera haber tenido un encuentro de infidelidad, sino porque su amante planeado para hoy que era Mauricio debió cancelar la cita a último momento, así que además de disfrutarnos mutuamente, planeamos el resto de la semana, teniendo para estos días como elemento especial el de hacer en cada encuentro juegos de rozamiento como lo principal en cada encuentro, hay planeado para mañana miércoles encuentro con Juan Pablo, el jueves con Johnny y el viernes con Mauricio, quien además de invitarla para comérsela la llevará a almorzar con miras a festejar el día del amor y la amistad; para el sábado va a reunirse en lo posible con Alirio a quien le dará un tratamiento muy especial, pero estará en riesgo para poder cumplirse; a pesar de no ser Alirio el preferido de Carla, debió planearlo a él por ser un día en que normalmente todos se reúnen con sus parejas y resulta que todos los amantes de mi esposa son casados, así que resultó imposible cuadrarlos a ellos.

SEPTIEMBRE 14 DE 2011

Juan Pablo llegó a recogerla y la llevó a un motel de chapinero, éste le encanta a Carla porque es el de chorros que salen de las paredes y como ya se ha visto en otros relatos, el uso del agua caliente en su clítoris la arrecha hasta límites insospechados que rebasan todo lo planeado, es cuando ella enloquece de excitación; me dijo que cuando llegaron al cuarto Juan la empezó a besar por todo el cuerpo por encima de la ropa para después irle quitando esas prendas que se interpusieron entre sus labios y la piel de mi esposa, una vez que esa parte estaba expuesta, la volvía a besar pero ya directamente y adicionalmente le lamía la piel, este tipo de caricias la hacían suspirar y la excitaban, cuando ya estaba totalmente desnuda el se desvistió en un segundo y la tomó de la mano para llevarla a la ducha, allí ella se paró desnuda con las piernas abiertas frente al chorro de agua presta para recibir en su vulva el impacto del liquido, cuando abrió la llave, sintió en su cuerpo como si le clavaran cientos de dagas porque el agua estaba helada, emitió un grito y de inmediato Juan Pablo se interpuso entre ella y el agua hasta que ésta se calentara, este gesto de caballero, mi esposa se lo agradeció con un beso profundo al tiempo que con su cuerpo acariciaba el de él, especialmente su pene; ya adquirida la temperatura adecuada el agua, ella como si fuera una amazona de la selva plantó un pie y el otro bastante distante, para que sus piernas quedasen bien abiertas y se movió hasta lograr que la presión del agua le diera de lleno en su clítoris, esta vez con sus manos se ayudaba para abrir los labios de la vulva y dejar que toda el agua chocara directamente contra su botón del placer, no tardo en empezar a estremecerse al tiempo que gemía y gritaba que ya se iba a correr, mientras tanto Juan apoyado contra su espalda, desde atrás le acariciaba las tetas y le besaba la nuca; tal como habíamos planeado, ella aumentó el volumen de sus gritos y la reacción de Juan fue deliciosa, porque aumento la presión sobre los pezones y las nalgas sin causarle daño y sin penetrarla; así ella le dijo “mi amor me vengooooooooo” y en efecto su orgasmo fue violento, largo, fuerte y caliente; cuando alcanzó el punto más alto del climax, cerró con sus manos los labios de su vulva para proteger su sensible clítoris y evitar que el deseo y placer se convirtieran den dolor.

Juan Pablo acercó su dedo al clítoris y con movimientos circulares la masturbó mientras con su pene acariciaba sus nalgas, cuando ya iba a llegar de nuevo, Carla abrió los labios de su vulva y el impacto del agua sobre el clítoris la hizo correrse de nuevo de inmediato, cuando estaba sintiendo su orgasmo, se restregaba contra el miembro de su amante, Juan a su vez movía su pelvis como si la estuviera follando, hasta que el no pudo contenerse más y su leche brotó a borbotones entre las nalgas de mi mujer, cuando salía cada chorro, el procuraba que cayera en un sitio diferente de piel al tiempo que con sus manos la esparcía por las partes que no tenían aún leche; jadeantes y extenuados entre besos se dirigieron a la cama donde al tiempo que se acariciaban, besaban y conversaban de los cuernos que él le ponía a su esposa y los míos, se fueron excitando de nuevo y Juan Pablo sin tener aún una erección completa, se notaba que estaba en progreso, Carla puso de espaldas contra la cama a Juan y ella bocabajo estirada en la misma dirección pero con su cara sobre la pelvis de él, empezó a chuparlo y lamerlo hasta que se le paró totalmente, él puso sus manos sobre la cabeza de ella y la dirigía en un movimiento que permitía entrar y salir la verga cogiéndola por la boca, en un momento ella le dijo ”ahora cuando te corras, voy a recibir todo tu semen en mi boca y después te lo voy a pasar para que lo escupas sobre mis pezones y mi vulva”, sin esperar respuesta volvió a su tarea de mamadora hasta hacerlo eyacular totalmente sin desperdiciar una sola gota, cuando ya no salía más leche de la verga, ella se deslizó reptando sobre el cuerpo de Juan y tunando su barbilla y cara con sus manos con los labios hizo que el abriera los de él y dejo deslizar su preciada carga en la boca del amante sellando el pacto con un beso; luego ella se volteó boca arriba, abrió las piernas y le dijo: “ven y llena mi cuerpo con el néctar de tu hombría”, lo cual él hizo empezando por dejar en cada pezón un poco del semen y el resto en una línea continua desde el busto hasta la vulva de mi amada, a continuación comenzó a esparcirlo con la lengua por todas partes pero con énfasis en embadurnar bien las tetas de ella.

Luego de un prolongado descanso en el jacuzzi, el se puso un condón y se la comió con la boca y con la verga estando ella sentada al borde de la tina, después de cuando el llegó, Carla se le limpió con la lengua el pene que acababa de estar en su interior.

SEPTIEMBRE 15 DE 2011

Carla pasó a pie a recoger a Johnny a su lugar de trabajo y de inmediato se dirigieron al motel en que había estado el día anterior con Juan pablo, ella quiere que los empleados del motel se den cuenta que es muy liberada y que tiene varios amantes, desafortunadamente hoy no pudieron encontrar libre un cuarto con chorros múltiples de agua en la ducha, así que escogieron una habitación solo con jacuzzi; en el cuarto se desnudaron por separado y cuando estaba lista ella le bajó el pantalón a Johnny y empezó a mamárselo, lo hizo hasta casi hacerlo que se corriera, en el último instante, ella paró y unos segundos más tarde retomo la mamada, esto lo hizo según ella unas cinco o seis veces, luego ella lo terminó de desnudar, pasaron al jacuzzi, donde ella se dedico a mamárselo con intervalos en los cuales él le hacía deliciosos orales que culminaban en orgasmos, par a continuación el entrar su miembro en la boca de ella, hasta que en una de las mamadas Carla ya no quiso dejarlo que se retirara y con chupones en la cabeza del miembro lo hizo que se corriera sobre las tetas y el cuello y la cara; se sumergieron entre el agua para ser acariciados por los chorros del jacuzzi hasta que se relajaron y descansaron totalmente.

Carla propuso ir a la cama, donde se recostaron, ella le pidió que le diera un masaje sobre los hombros pero con él de rodillas en medio de sus piernas abiertas y de frente, él se acerco a cumplir lo solicitado comenzando por la cintura y subiendo por el pecho y el cuello hasta los hombros, para poderlo hacer, el debía inclinarse hacia adelante lo cual aprovechó Carla para tomar con su mano la verga de él y rozarla contra su cuerpo, pasando la punta húmeda y caliente por sus piernas, su vientre, su pubis y luego la punta de la espada desnuda de su amante la colocaba sobre su clítoris a semejanza de un dedo para masturbarse con el, al rato pasaba la punta del miembro por la entrada de su vagina y por la raja de la vulva, ambos gemían sin descanso  ella por el masaje erótico que se daba con el pene y por las caricias de su hombre que le prodigaba en las tetas, se excitó muchísimo al igual que él y en una de las pasadas por la raja de la vulva, detuvo la punta de la pinga en la entrada de su chocha y levantando unos centímetros la pelvis su hundió la punta de la estaca sin condón, al tiempo que exclamaba lo delicioso del contacto, de inmediato lo sacó y volvió a acariciar su clítoris para regresar a repetir la entrada del miembro dentro de su cuerpo, esto lo hizo muchas veces pero cada vez menos se demoraba en otros sitios para tenerlo más tiempo dentro, Johnny le hundió la verga ya no solo hasta la punta sino que llegó a la mitad de su longitud, este movimiento fue acompañado por un suspiro y un gemido profundo y cuando él quiso salir como hasta ahora lo habían hecho, ella no lo dejó y por el contrario abrazó el cuerpo de él y lo atrajo hacia ella para que la verga entrara en su totalidad mientras ella le decía “estas delicioso”, él comenzó a moverse adentro y afuera mientras que Carla tenía muchos orgasmos seguidos y sentía en su interior que su chocha hervía y la verga la quemaba, cuando él sintió que se derramaba en un segundo más, se salió totalmente para depositar la leche en cima del pubis de mi mujer, cuando terminó de derramarse, Johnny le dijo que esta había sido la mejor cita que habían tenido y que deseaba repetirla.

SEPTIEMBRE 16 DE 2011

Hoy tenía Carla cita para ira con Mauricio a un motel y luego a almorzar; ella paso por la oficina de él y salieron rápidamente rumbo al mismo motel de las citas con Juan Pablo y Johnny, sobra decir que Mauricio no sabe nada de los devaneos de mi mujer con los otros, llegaron allá y por sugerencia de Carla pidieron una habitación solo con jacuzzi, para esta ocasión especial, Carla escogió un pantalón ajustado , una blusa transparente y sin brasier, en el cuarto se desnudaron mutuamente y mi esposa le propuso que le diera un masaje tal como se lo pidió a Johnny el día anterior, después del jugueteo inicial, ella le hizo oral y él a ella haciendo que se corriera un par de veces, posteriormente CCarla volvió a pedir lo del masaje y esta vez cuando Mauricio se inclinó, ella tomó la verga con la mano y comenzó a masturbarlo, él le dijo que estaba riquísimo así y ella le dijo espera y veras lo que es rico, cuando siguiendo el mismo patrón del día anterior, ella metió en su cuquita la punta desnuda, le dijo quiero que te muevas y cuando vayas a llegar te salgas y te derrames sobre mis pezones, sin comentario alguno y como respuesta Mauricio la penetró de un golpe toda y comenzó un lento mete y saca pero fuerte por la presión de sus pelvis cuando se encontraban, ella le pedía a veces mayor velocidad y otras que fuera lento, Carla se corrió innumerable cantidad de veces siempre con la verga incrustada hasta el fondo sin moverse mientras las oleadas de calor y placer le recorrían el cuerpo, ella gemía y pedía que no parara que quería más, hasta que después de muchos orgasmos en el último, ella le dijo “no pares, llega conmigo” y él haciendo caso se movió con fuerza y frenesí hasta que en el último momento se salió y llevo su verga hasta las tetas de mi señora donde él se movió adelante y atrás como si la follara entre las tetas al tiempo que ella le ayudó con la mano a explotar en una inmensa derramada que alcanzo con sus chorros la cara el pelo, los ojos, el cuello y el pecho de mi mujer.

Extenuados se dejaron caer sobre la cama y en ese momento sonó una llamada de la esposa de Mauricio, quien tuvo que cancelar el almuerzo prometido y sin mucho más tiempo de descanso se ducharon y él debió vestirse con cierta premura para encontrarse con la esposa.

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