Consigo cambiar de acera a Amelia (1)

Llegaban las fiestas del pueblo y a pesar de estar a gusto con Carla, quería nuevas experiencias. Acabo follándome a una amiga gordita y baja, y a su prima lesbiana con la que había conectado desde el primer momento en que la vi, el foco de todas las miradas.

Yo soy Juan, todavía iba al instituto y estaba liado con una chica de mi edad llamada Carla, morena, pelo rizo, de las más guapas de clase además de tener tanto unas tetas como un culo por encima de la media de tamaño para nuestra edad. Por ponerle alguna pega física tenía el culo algo caído. Y la pega más gorda veía por lo monja que era si no había alcohol de por medio, tanto que aún era virgen ya que no quería penetración porque le tenía mucho miedo.

Carla y yo teníamos una relación abierta ya que no quería que mi madre se enterase de ella y la llevábamos en secreto (mi madre era su profesora de mates). Aunque me creo que tuviese pánico a que mi madre lo supiese yo siempre creí que lo de la relación abierta era una simple excusa para poder ponerse celoso liándose con otros, que eso le ponía muy cachonda. Quería tenerme lo más sometido posible.

Por aquellos años mi mayor ilusión en todo el curso eran las fiestas del pueblo: salíamos todos los amigos, bebíamos, nos cruzábamos con todos los conocidos del pueblo y siempre intentábamos ligar todos, ya que con el alcohol y el ambiente nos era más fácil que de costumbre.

Llegaba el primer día de fiesta y mi plan era claro y conciso: controlar el panorama a ver si había alguna chiquilla nueva a la que meterle fichas a ver si conseguía llevármela a la cama (ya que aún seguía siendo virgen al no querer Carla follar) y si no había ninguna que me llamase la atención o que quisiese de las que me la llamen, no jugármela y no cabrear a Carla para ver si la podía convencer aquella noche, o al menos toquetea algo que las hormonas iban sin control por mi cuerpo.

Con el plan claro, me dispuse a depilarme la polla (acción que siempre me escita y acaba con una tremenda paja en la ducha mientras me limpio los pelos cortados que quedan encima) y una vez hecho todo el proceso, me puse mis mejores galas, cené, negocié con mis padres la hora de vuelta hasta lo más tarde que pude y salí a la aventura.

Los de nuestro grupo siempre quedábamos en el mismo bar después de ir a buscar a la gente que nos quedase cerca de casa. Yo fui a por mi mejor amigo que vivía casi al lado, Fer.

  • Que tal Fer? Con las pilas cargadas para hoy?

  • Joder que si.

Fer era un chaval algo feo, bastante fofo que no tenía mucho éxito en el amor, pero siempre lo intentaba con ganas. Que no aguantase bien el alcohol tampoco le ayudó mucho nunca, ya que cuando hay tías que con el alcohol van muy de fáciles, él si bebió algo ya esta vomitando por ahí y si no bebió es demasiado tímido para acercarse a ellas.

  • Muy arreglado vas eh, pocas veces se te ve así, voy a pedir un deseo. -digo al verlo en camisa y vaqueros, ya que el 99% del año Fer vestía chándal.

  • Tú eres un cabrón, muy subidito vienes hoy eh. A ver si te tengo que bajar los humos.

Fuimos todo el camino con nuestras típicas bromas y como siempre llegamos los primeros al bar donde siempre quedábamos.

  • Joder, siempre igual tío, nunca llegan a tiempo. Jose estará aún cenando el muy cabrón, Luis vive al lado de aquí y siempre espera a que lleguemos para empezar a cambiarse, Carla estará aún maquillándose y sus pobres amigas esperando por ella aún, aunque algo me dijo este año ahora que me acuerdo de que igual salía antes que nosotros de casa con sus padres y los de Pedro que son muy amigos.

  • Carla siempre igual eh, no cambia! Pues Mery aún tenía que acostar a su abuela y cambiarse aún tardará e Inés ya sabes como es eh... Igual ni aparece en toda la noche como se líe por otros lados.

Mery era una chica con la que se solía liar Fer. Era bastante fea, 1,75cm, paliducha del todo, pocas tetas y el culo bastante caído, aunque lo iba mejorando con los días ya que salía bastante a correr con sus perros. Tenía fama de ser bastante fácil, además de emborracharse mucho y jugar de vez en cuando con las drogas. Todos creíamos que se liaban porque ninguno tenía nada mejor.

  • Bueno, Inés no creo que sea peor que Carla eh. Aparte de llegar tarde, como se emborrache bien es capaz de perderse toda la noche y encontrárnosla tirada en el parque municipal con sus amigas con ganas de vomitar.

  • Ya, eso si. Encima Inés hoy dijo que traía a su prima, como empiecen a beber ambas en casa Inés es capaz de liarse a hablar hasta las tantas allí las dos solas.

  • Pfff, pues nada, vamos pidiendo una mientras.

A los 20 minutos fueron apareciendo casi todos y en ese momento apareció Carla por la puerta medio sujetada con sus amigas berreando casi desde la puerta del bar:

  • Holiiii, que tal chiquis? -dijo de pie mientras se tambaleaba algo.

  • Ya estás así de borracha? Pero si son las 23:00!- le repliqué.

  • Si, pero ya sabes, salí con los padres de Pedro y con él, mis padres nos invitaron a chupitos, sus padres hicieron luego lo mismo...

  • Si y para el camino encima te pediste una cerveza no? Y de las fuertes!- le replicó una de sus amigas.

  • Shhh calla Alicia que encima me dejas quedar peor, qué clase de amiga eres?

Carla parecía estar totalmente fuera de combate esa noche y aún eran las 23:00 e iba beber más, así que no contaba con ella para nada, mi plan estaba más activo que nunca. Entre nuestro grupo de amigos la verdad no digo esto porque sea mi lío, pero la única decente era Carla sin ninguna duda. De Mery ya os hablé y las amigas de Carla eran 3 aquel día: Alicia, 1,85m bastante pálida también, pelo largo y negro, pero bastante gordita y para nada guapa, Saray: 1,70m, pálida del todo, plana por delante y por detrás, pelo siempre sin peinar que hay días que si te la cruzas por la calle parece la loca de los gatos, nunca se calla y es muy molesta, dada esta última característica el 90% del tiempo se aísla del grupo para hablar con su amiga del alma Berta esta mide 1,60m, algo menos pálida que Saray, pelo rizo siempre con moño, más plana que su amiga del alma incluso, bastante fea y es MUY MUY raro verla articular una palabra, creo que en mi vida solo la vi hablar al responder a los profesores de clase y cuando te fijas en Saray y ella hablando, ella de vez en cuando responde por lo bajo, pero nunca más se la ve hablar.

Visto lo que había mi plan estaba cayendo en picado, ya que en el bar poca gente más había de mi edad, los de nuestra generación a esas horas preferían hacer botellón en algún garaje pero nosotros no teníamos ninguno sitio para eso ni nos dejaban.

Yo veía todo negro hasta que a las 23:15 apareció Inés con su prima Amelia. Nada más cruzó la puerta sabía que tenía que ser ella y vi que todas las miradas como la mía se clavaban en ella. Inés mediría unos 1,80m, llevaba puesto un vestido largo con una apertura por abajo que le dejaba ver una de sus interminables y bronceadas piernas, que parecían bastante definidas, era pelirroja y tenía los ojos verdes, su vestido por arriba era de tirantes y dejaba notar que tenía unas tetas algo por encima de la media de edad aunque no más grandes que las de Carla. Destacaba mucho entre todas las mujeres que había en el bar, sobre todo entrando al lado de su prima. Inés medía 1,60m, era muy pálida, culo fofo aunque quizá fuese su mejor arma porque tampoco llegaba a ser "culo de grasa" como lo llamábamos nosotros, muy plana por delante y ella estaba también bastante fofa tirando a gorda, pero digamos que sin llegar. Sus puntos fuertes quizá eran su forma de ser que era muy agradable y le iba un rollo diferente al resto de mujeres, tenía una voz angelical y cantaba muy bien y a pesar de llevar gafas y aparato, era bastante mona de cara. He de decir que para no ser para nada de mi tipo, me daba cierto rollito a veces, pero creo que no me pondría para nada, así que no lo vi factible.

Mis ojos seguían fijos en Amelia, al presentárnosla a todos además ella se acercó y me dijo : "Qué bien hueles!" y yo ya pensé, esto está hecho. A partir de ese momento entablamos conversación, se sentó a mi lado en la mesa y no paramos de hablar de mil cosas que teníamos en común: ella también jugaba al fútbol, a veces había jugado al fifa y afirmaba ser muy buena, le gustaban mucho los juegos de rol, jugaba a videojuegos... Sentí que era un flechazo todo aquello.

Pudimos estar hablando tranquilamente los dos solos 40 minutos, la primera interrupción fue cuando ella fue al baño. En ese momento me di cuenta de que el resto de la mesa se había levantado para salir a fumar a fuera menos Luis e Inés:

  • Parece que le caíste muy bien a mi prima, me alegro la verdad. Tenía miedo que al traerla fuera a estar marginada hablando solo conmigo.

  • Tranquila, que no dejo que eso pase. -le dije algo borracho pero intentando dejar mis intenciones claras.

  • Qué pero jajajajaja- dice Luis dejando aún más claras mis intenciones.

  • Jo, qué bien. Y de qué hablabais? -dijo Inés acercándose a mi.

  • Bueno, es que tenemos muchos temas en común, fútbol, videojuegos, juegos de rol...

  • Ah, pues a ver si jugamos un día los 3 a algún juego de rol jajaja. -dijo amistosamente Inés.

A pesar de que yo en ese momento no era consciente de nada, Luis en ese momento se fue con los otros a fumar. Y en ese momento Amelia salía del baño. Al estar Inés sentada a mi lado, Amelia tuvo que sentarse en frente:

  • Y el resto?

  • Pues cuando te fuiste tu al baño yo también me di cuenta que solo quedábamos en la mesa nosotros 3 y Luis que salió justo ahora!

  • Oye Juan, muchas gracias por no marginarme, porque me suele pasar mucho cuando voy a un sitio nuevo.

  • Pues no se por qué la verdad jajaja.

  • Amelia ahora tengo que ir yo al baño, me acompañas? -le dijo Inés a su prima.

  • Pero si acabo de ir, prefería seguir hablando con Juan que me lo paso muy bien!

  • Vale, gracias por acompañarme! -dijo Inés de forma irónica arrastrando a su prima al baño cogida de la mano.

  • Juan, vuelvo ahora! - dijo Amelia alejándose.

En ese momento me paré a pensar que todo lo que me estaba pasando era una locura, que mujer y como conectamos! Yo casi me estaba relamiendo los dientes mientras salí un poco a ver que hacian mis amigos. Carla como siempre ya estaba borracha perdida, me dijeron que se pusiera a llorar al verme con Amelia pero a los segundos se le pasó, sería todo de la borrachera (ellos no sabían lo de nuestra relación tampoco y parece que ella a pesar de estar borracha supo reconducir la situación para no revelar lo nuestro):

  • Joder, si que te llevas bien con Amelia, no Juan? -dijo Fer riéndose. Yo no entendía el por qué de esas risas de burla.

  • Si, y quién os diera a vosotros perros, qué os pasa? Estáis celosos? -dije algo enfadado, porque no entendía nada.

  • Ah, pero aún no te lo dijeron? -dice Jose

  • Decirme el qué? Qué pasa?

  • Nada, nada. Me apuesto 100 pavos a que no eres capaz de liarte con Amelia. -repitió Jose con tono burlesco.

  • Venga, acepto. Los 100 pavos más fáciles de mi vida.

A lo que todos se volvieron a reír. Vi por el rabillo del ojo a Amelia y Inés salir del baño y las espere en la puerta, algo alejado de donde estaba mis amigos. Así ellos podrían ver, pero Amelia no los vería a ellos y podríamos empezar a besarnos allí si ella no los veía sería más cómodo. Al salir dijo:

  • Nos vamos ya del bar o qué? No hay nadie en la mesa...

  • Nos vamos los dos a donde tu me digas. -dije agarrándola de la cintura y acercando mi cara a la suya.

  • Oye Juan, creo que todo esto es un malentendido, yo no...

  • Malentendido cómo, no te gusto o qué? -dije aún con mi tono sensual.

  • Es que yo soy lesbiana, pensé que lo sabías... Le estaba haciendo la cobertura a mi prima Inés que si que quiere contigo y ahora todo es más incómodo...

A Inés se la veía triste por lo que acababa de presenciar y las risas de mi grupo de amigos se escuchaban a kilómetros. Amelia se enfadó y les gritó:

  • DE QUÉ COJONES OS REÍS? OS PARECE GRACIOSO VER ASÍ DE HUNDIDA A MI PRIMA?

  • No, no es que...

  • ES QUE NADA, YO NO LE VEO NADA DE GRACIOSO A TODO ESTO! -Intervine yo antes de que Amelia supiese que tenía una apuesta de que me liaba con ella.

  • Bien dicho Juan, vámonos. -dijo Amelia cogiéndome de la mano.

En ese momento dejamos el bar atrás pero no teníamos rumbo fijo y nos sentamos en un banco donde no nos pudiesen ver desde el bar, más que nada para que no nos vieran aislados. En ese momento yo estaba triste porque pensé que era la chica perfecta para mi y con solo una frase todo se vino abajo. Al otro lado del banco estaba Inés desanimada porque pensaba que podía tener posibilidades con ella, de hecho fueron al baño ambas ilusionadas por ello, y ninguna se dio cuenta de que con la que estaba tonteando era con Amelia. Amelia estaba en el medio y se sentía bastante culpable de la situación...

  • Venga chicos, que no pasa nada. Si tan tristes estáis por qué no os liais ambos? -dijo Amelia intentando alegrar el ambiente.

  • No, yo ahora no quiero, y dudo que él quiera. Solo a mi se me ocurre decirle a alguien que está mil veces más buena que yo que me haga la cobertura...

  • Oye, eso no es así eh, cada una tiene sus puntos fuertes -insistía Amelia en animarla.- Y tú Juan? No notaste mi pluma? Si soy algo masculina y todo...

  • Bo, quieres seguir con eso? Joder si pensé que era un flechazo y todo, mismos gustos, eres increíblemente atractiva, guapa, y conectamos nada más llegaste.

  • Claro que conectamos, porque mi prima ya me tenía avisada de casa. Aún así me caíste muy bien al hacer la cobertura y me pareces muy mono, pero...

Nos quedamos todos un segundo en silencio y Amelia con cara de culpable y algo sonrojada después de mis piropos dijo:

  • Igual os parece una locura esto que voy a decir o quizá sea cosa del alcohol, pero... Qué os parece un trío? Me parece la única forma de contentaros a ambos, ya que fui yo la que provocó todo esto...

A mi se me iluminaron los ojos de manera inevitable, Inés no me ponía nada, pero Amelia ya hacía lo suyo por dos.

  • Joder prima, como propones eso, qué cerda, que somos familia... Además no creo que Juan me quiera tocar ni con un palo...

  • Pues a mi me parece muy buena idea la verdad. -dije llevado por las ganas de follarme semejante mujer como Amelia, ya que en verdad parecía estar mucho más desarrollada que las de su edad.

  • Ves prima? Venga anímate! Si total nos vimos desnudas muchas veces, poco va a cambiar aquí!

  • Pfff, no sé yo...

  • No me decías que le tenías tantas ganas a Juan? Pues ahí lo tienes totalmente lanzado!

  • Venga, va. Pero sin toqueteos entre nosotras eh!

Y ahí me agarraron las dos para llevarme a su casa. Los padres de Inés no estaban ya que también estaban en la fiesta. Al llegar allí Inés cerró la puerta y me empezó a desvestir como una histérica. Amelia me miraba desde detrás haciéndome gestos de que la desvistiera yo también a Inés y lo hice casi de manera forzada, pero lo hice. En su defensa diré que no estaba tan gorda como su ropa aparentaba, y su culo tampoco estaba tan caído, pero seguía sin ponerme nada. Nos quedamos los dos en ropa interior mientras Amelia estaba aún completamente vestida:

  • Bueno Amelia, ahora me toca contigo no?- le dije yo.

  • Yo no puedo esperar más eh, ya te aviso. - dijo Inés que me bajo los calzoncillos y vio mi polla todavía flácida, encima al ser de sangre en ese estado no mide más de 9 o 10cm. - Oye, esto aún no está en acción, es por mi? Si quieres me quito todo eh! -dijo quedándose totalmente desnuda.

Sus tetas eran algo más de lo plano que aparentaba pero nada del otro mundo y con pezones bastante pequeños. Su culo me dio una sorpresa estando bastante en su sitio y botando algo, pero no me llegó a excitar.

  • Bueno Juan, ahora a mi o qué? No te prometo nada, nunca tuve experiencias con pollas, y esa no me invita mucho a tenerlas, pero lo prometido es deuda, yo lo voy a intentar.

Mientras Inés estaba algo desanimada al lado, yo fui desvistiendo a aquella maravilla, le quité el vestido y dejé ver un culazo increíble, unas piernas definidas, se notaba que no era mentira que jugaba a fútbol, un abdomen definido también y unas tetas algo más grandes de lo que aparentaban, el vestido en verdad no le había favorecido en toda la noche y aún así todos babeábamos por ella. En ese momento mi polla dió un pequeño saltó y se empezó a hinchar.

  • Bueno Juan, esto ya es otra cosa eh.-dijo Amelia mirándome la polla con descaro

  • Pues aún queda lo mejor.

Le quité el sujetador y empezaron a botar ese buen par de tetas, que más que redondas acaban algo en pico pero siendo aún así más grandes de lo que me imaginaba, con los pezones rosaditos del todo, como suelen tener las chicas con el pelo de color más claro. Y me agaché para quitarle ese tanga que llevaba tan pegado y así quedarme con la cara justo en frente de ese coño totalmente depilado excepto por un cacho que se dejó aposta en la zona superior, también pelirrojo como ella. No pude evitar y lo lamí un poco y vi que estaba un poco húmeda, no se notaba mucho pero al pasar la lengua si que pude distinguir algo de líquido al chupar.

  • Ay Juan, mejor empieza por mi prima, no? -dijo con cara de revoltosa pero dándose cuenta de que Inés tenía muchas más ganas de eso.

  • Joder, vaya polla Juan de verdad -dijo Inés a la que ya le parecía dar igual que esa erección fuese por culpa de su prima y no suya, mirando mis 18cm sin parpadear.

Inés que parecía bastante inexperta comenzó a hacerme una paja mientras se tocaba y yo aproveché para meterle mano a su prima con un dedo para ver si era virgen.

  • Dices que es tu primera polla pero no eres virgen eh, penetración hubo.

  • Ah, si, claro, pero con juguetes.- se acercó a mi oído y me dijo- Ven aquí anda, que al final algo cachonda si que me estás poniendo.

Me acarició mis abdominales y me metió la lengua hasta la campanilla mientras yo le metía 3 dedos por el coño. Mientras Inés aprovechaba para empezar penetrarse con mi polla sin que yo me hubiese dado cuenta de primera ya que estaba muy ocupado con esa escultura griega que parecía su prima. Inés miraba mucho hacia nosotros mientras se penetraba con torpeza, se le salía mi polla por fuera, casi se penetra por otro agujero sin querer... No parecía cómoda porque estaba más pendiente de ver nuestra fogosidad que de disfrutar con mi rabo. De repente dijo:

  • Prima, seguro que eres lesbiana? Se te ve muy prendida eh.

Al decir eso yo no tardé en mirar para ella, verla con la boca tapada, pero gimiendo por debajo de su mano y me di cuenta de que tenía la mano chorreando que nunca había visto a nadie chorrera tanto y noté su coño calentísimo.

  • Cállate y disfruta Inés, déjame.

  • Pues la verdad que me pone más veros a vosotros gozarlo tanto que follarme a Juan, porque no está pendiente de mi, puedo cogerte uno de los juguetes que trajiste y miraros.

  • Seguro que no te importa. -Dijo Amelia que parecía ser la única vez que ponía atención real desde que llegamos a su casa.

  • Si, claro, no puedo apartar la mirada de vosotros...

  • Ostia, gracias Inés. Tengo ganas de probar que se siente.

Amelia me cogió la polla y se la metió entera en el coño. Los dos gemimos como chimpancés en celo, mientras Inés se metía un consolador con más maña que antes y no nos quitaba ojo.

  • JODER JUAN, ME VAS A HACER DUDAR DE MI ORIENTACIÓN SEXUAL HIJO DE PUTA, ESTÁS BUENÍSIMO.- Gritaba Amelia mientras me montaba como un caballo.

  • Si quieres que aguante más tiempo cállate porque ya de por si me pones loquísimo, si me dices eso, me corro ahora mismo en tus tetas.

  • TE CREES QUE ESTOY ACTUANDO? A MI ME QUEDA POCO PARA EL ORGASMO EH, PRIMERA VEZ QUE TENGO UN POLLÓN REAL DENTRO.

Al final aguanté sin correrme hasta que ella hizo un squirt encima mía dejándome lleno de ese líquido vaginal. Acto seguido al acabar de gemir dijo:

  • Y ya que estoy no voy a desaprovechar el momento.- dijo Amelia

Agarró mi polla a punto de soltar toda la corrida y se la metió en la boca dándole tiempo a 4 chupetones como si fuesen un chupa chups. Casi al instante me corrí y y ella la dirigió hacia su cara con la boca abierta, limpiándose después todo con el dedo y probándolo.

  • No sabe nada mal!

Inés seguía con el consolador y nos dijo que no nos preocupásemos, que nos duchásemos si queríamos y que ya acababa ella por su cuenta. Nos metimos los dos juntos en la ducha porque teníamos ambos ganas de más guerra. En la hora del enjabonado me di prisa y cogí el jabón, me lo puse sobre las manos y empecé a aplicárselo sobre sus dos tetas

  • Así que tienes ganas de guerra aún- me dijo con cara de pícara.- Pues a mi no me supo mal esa piruleta.

Me volvió a agarrar la polla que volvía a estar en su máximo tamaño, con las venas hinchadísimas y se la metió en la boca, y tenía razón, hizo lo mismo que si tuviese un chupachups en su mano, sorbiendo lo más fuerte que podía. Yo volví a gemir bastante alto y le acabé llenando la boca con mi semen, esta vez se la dejó dentro para poder saborearlo todo mejor, y la tragó todito.

  • Qué rico está esto por dios, me has enseñado lo bueno de la otra acera.

Salimos ambos desnudos de la ducha, toqueteándonos aún cuando vemos que la puerta estaba semi abierta y rápidamente se cierra. Salimos desnudos y decimos:

  • Oye Inés, si querías mirar ya sabes que tenías todo el permiso, podrías haber entrado.- le dijo su prima.

  • Eh? Ah, no, solo quería ir a mear. -dijo Inés extrañamente ruborizada.

  • Ah pues vete, que nosotros ya acabamos, tenemos la ropa en tu cuarto los dos.-dijo Amelia mirándome la polla como despidiéndose de ella.

  • Ah vale, es verdad.

Yo noté a Inés algo rara, luego lo comenté con Amelia y me dió la razón:

  • Quizá esté algo avergonzada de lo que acaba de pasar, se acaba de masturbar con un juguete mío mientras veía como su prima lesbiana se follaba al tío que le gustaba. Es normal que esté rara no?

Viéndolo así pensé que no era tan raro.

Mientras nos acabábamos de cambiar no estábamos lanzando piropos el uno al otro sobre lo bueno que estábamos y lo que habíamos gozado:

  • De verdad que me dejas con ganas de comerme pollas muchas más noches, me puso muchísimo todo esto, Creo que me has convertido en bisexual, ME CREAS MUCHAS DUDAS.

  • Joder, pues yo estoy aquí siempre que quieras eh! Mira que pensar que se reían de mi porque no me iba a liar contigo...

  • Quién decía eso?

  • Todos los chavales, parece ser que fui el último en enterarme de que eras lesbiana. Hasta me dijeron que se apostaban 100 euros a que no me liaba contigo.

  • CÓMO? Joder, normal que estuvieses triste antes también, qué hijos de puta, se van a enterar!

Acabamos de cambiarnos y volvimos a salir, eran las 4 de la mañana cuando volvimos al pueblo y temíamos no encontrar a los chavales, pero al final los encontramos en otro pub. Amelia aún no me había aclarado en todo el camino que iba a hacer, solo me dijo que la venganza es una de las sensaciones que más le gusta.

  • Buenas chavales. -dije presumiendo de llevar cogida a Amelia por la cintura, mientas Inés nos miraba con cara de deseo aún.

  • Buenas Juan, dónde estuviste? -dijo Jose que parecía algo preocupado por su apuesta.

  • Os explico donde estuvo? -dijo Amelia con cara de enfadada.

En ese mismo instante me morreó en el medio del pub metiéndome la lengua como una obsesa y con la otra mano me agarró la polla e incluso me la meneó un par de veces por fuera del pantalón como pudo. Se separó de mi cuando a mi ya me empezaba a faltar el aire, por lo que mucha prisa no se dio, se giró y dijo:

  • Os quedó claro ahora donde estuvo o tengo que seguir por si alguno es tan cortito que no lo pilló? Venga, el que apostó que dé la cara y suelte los 100 euros!

Todos se quedaron boquiabiertos, mientras que yo cuando recuperé la respiración les puse mi cara de: "Ya os lo dije" detrás de Amelia para que no me viese. Jose salió de entre todos algo jodido por todo el asunto y me dio los 100 euros en silencio.

  • Ahora, imbéciles, este hombre y yo volvemos a que me ponga a 4 y hacerme gozar como una auténtica perra. Que pasen buena noche!

Me cogió de la mano, se dio la vuelta y salimos del pub, mientas que Inés nos siguió despidiéndose de todos más amablemente.

  • Oye, lo de ponerme a 4 mejor otro día no? Muchas emociones en una noche sola.

  • Si, si, claro. Lo que pasa es que yo estoy liado con otra chiquilla, lo nuestro es algo abierto, pero ella se pone bastante celosa si hay otras.

  • Ah, pero si es relación abierta no habría problema no? Puede unirse si quiere, no se si recuerdas que soy lesbiana. La conozco?

  • Bueno, lesbiana bi por lo que se ve no? Jajajaja. Se llama Carla, no se si la llegaste a conocer porque cuando llegaste ya iba muy muy borracha.

  • La que iba dando tumbos? No jodaaas. Justo le dije a mi prima: "Si no tuviese que hacerte cobertura le preguntaría a esa chica si le gusta la carne o el pescado"

  • Bueno, no creo que acceda, es bastante monja y todavía es virgen.

  • Anda ya, virgen con ese cuerpazo? Estás de broma?

  • No, es que le tiene mucho miedo a la penetración...

  • Bueno, si me la traes borracha yo te ayudo con eso.

  • Bueno ya lo vamos viendo, que va a estar complicado por su parte.

Llegamos a donde los caminos a nuestra casa se separaban y nos despedimos. A Inés le di dos besos normales y a Amelia le di también dos besos mientras le manoseaba aún el culo, y ella me dio un morreo de despedida mientas me agarraba la polla otra vez y me dijo al oído:

  • La verdad es que lo del pub me piso a mil por hora otra vez, tenemos que repetir esto. Hasta pronto guapo.

Y nos fuimos cada uno a su casa. Llegué a casa sin hacer ruido y me metí en cama reventado de esa noche loca. Al día siguiente tenía un par de WA de Amelia a la que le debía haber dado mi número Inés. Ponían:

Buenos días guapo, que tal se despertó el chupa chups de mi sabor preferido? Hoy tenemos que repetir y hablar con Carla sobre el tema.

Y luego había otro mensaje mucho más tarde:

Oye, ahora que estoy en el baño y no me ve Inés: LA PILLÉ ANOCHE MASTURBÁNDOSE CON UN VÍDEO NUESTRO EN LA CAMA. Le pillé el móvil y tenía vídeo también de cuando nos duchamos, mi prima es una voyeur de esas, flipo. No te preocupes se los hice borrar en seguida, no sin antes pasármelos sin que se diese cuenta a mi móvil y borrando el mensaje desde el suyo. Me da mucho morbo tener el vídeo de mi primera vez con un hombre, te lo paso si quieres así estamos en igualdad de condiciones.

En cuanto lo abrí no pude hacer otra cosa que hacerme mi paja mañanera nada más despertarme, y qué paja! Ese vídeo mío con esa diosa era oro. Ya tenía ganas de volver a cruzármela esa noche.

CONTINUARÁ

Gracias por seguir leyendo mis relatos, están teniendo mucho más éxito del que me pensaba que tendrían. En conjunto ya llevan 32k lecturas, gracias de verdad! Ahora quería saber que temática les gusta más, porque tengo experiencias en varias. Casi todos mis relatos son heteros (aunque Las novatas más calientes y las novatas más cerdas(2) podría ponerse en la categoría tríos o incluso cuartetos ;) ), pero subí dos voyeurs y uno tuvo un éxito increíble y creo que va a convertirse en nada en mi relato más leído, pero el otro se subió hoy y a pesar de que tuve que borrarlo porque se me colaba algún nombre real (obvio que cambio todos los nombres) estaba siendo mi relato con meno número de visitas, así que me gustaría saber que temática les gusta más para contar mis experiencias sobre ello o si no tengo, empezar a inventar las historias aunque sea, con tal de que ustedes las lean, yo creo que me lo voy a gozar igual escribiéndolas, así que dejen en comentarios que quieren para siguientes relatos!