Conseguí quedar con Sandra
Conocí a Sandra en un curso de informática, de ahí la pedí el móvil e intenté acercarme a ella. Lo que sucedió después lo cuento en este relato (historia real)
Conocía a Sandra en un curso de informática de estos gratuitos que te dan un pequeño título que siempre viene bien para el currículum. Al principio no nos hablábamos pero ya en la última semana de clase decidí acercarme a hablarla y pude descubrir que era muy simpática. Tuvimos una pequeña conversación de unos 10 minutos en el descanso de uno de los días de clase.s.
Aproveché esa conversación para pedirle el movil ofreciéndome a hacer alguna página web si lo necesitara, y ella me lo dio, se la veía muy maja.
Una vez terminó el curso, yo la escribí un WhatsApp proponiéndola de quedar para tomar algo a lo que ella dijo que podía el siguiente finde.
Entonces bien, fuimos un día a tomar un café a una terraza y estuvimos hablando un rato, como media hora, la verdad es que hubo feeling en la conversación, pero luego ella se tenía que ir, así que dos besos en la mejilla y para casa.
Al cabo de 1 mes la volví a escribir para quedar y la propuse ir a unas pozas por Rascafría, a lo que ella aceptó de buen agrado ya que hacía calor. La dije si le venía mejor un día de diario ya que los findes va mucha gente, por lo que quedamos para ir un martes por la mañana.
La recogí a las 10 de la mañana en el intercambiador de Moncloa y fuimos para Rascafría. En el coche buena conversación, hablando, un poco de todo.
Una vez llegamos allí, aparcamos el coche, caminamos un poco y llegamos a la Poza, en la que no había gente, y hacía un buen día, un sol espléndido. Abrimos dos latas de cerveza y nos las tomamos, y luego ella se bañó, y yo me quedé fuera.
Al rato ella sale y soy yo el que me meto al agua. Una vez estando yo dentro del agua y ella fuera, para mi sorpresa veo como ella se queda en topless, dejando al aire unas tetas 95 naturales, grandes, caídas, y bonitas.
Me quedé un poco sorprendido, quiero decir, me quedé a cuadros, porque no me lo esperaba. Pero para ella era algo normal porque debía estar acostumbrada a playas nudistas.
El caso es que salí del agua y seguí como si no pasara nada hablando con ella; Seguimos hablando cada vez más cerca y la digo que tiene un cuerpazo; a lo que ella dice gracias.
Al igual que ella se quedó en topless como algo natural yo decidí chuparle una teta como algo natural, y así hice, a lo que ella aceptó y no dijo nada. Estuve como 10 minutos comiéndola su teta izquierda, con mucha lengua, succionando, disfrutando.
Al rato yo me tumbé boca arriba un poco para descansar, por si se podía sentir aletargada, ella se puso al lado mía y nos quedamos mirando a la cascadita de la poza. Al poco rato empecé de nuevo a comerle las dos tetas mientras ella me acariciaba el cuello. Estuvimos así 20 minutos hasta que me corrí.
Una vez esto decidimos marcharnos con la intención mía de volver a vernos para ver si puede ocurrir algo más.