Conozco a mi amo 2

Mi polvo exprés en el aeropuerto antes de irme a Barna

Conozco a mi amo 2

Ya llegó el día de mi viaje a Barna, por fin me despejaré del curro, de Madrid, y conoceré a Óscar. En estos días hemos hablado a diario, nos hemos hecho unos pajotes de escándalo y la verdad ( aunque suene ñoño ) me hace sentir bien. Espero que haya feeling en persona.

Ya estoy en el aeropuerto, he llegado con tiempo de sobra, ya que es la primera vez que voy a coger un avión.

Dejo la maleta en una de esas taquillas, porque ya se donde está todo y aún tengo media hora para aburrirme- o eso pensaba yo-.

Me fui al baño que me estaba meando lo más grande. Al entrar me fui directamente a los urinarios, no es que me guste mear en ellos, ya que muchas veces el cipote te da casi en él si están muy altos, pero había un chulazo y al menos podría mirarle el rabo un rato.

Llegué y me puse en el urinario de al lado, me bajé la cremallera y me la saqué, empecé a soltar todo mi liquido, aunque poco a poco se me fue poniendo dura viendo al chulo que tenía al lado.

El sabiendo que tenía un buen rabo no se molestaba en ocultarlo, y jugaba con el, lo acariciaba, se lo meneaba haciendo que salpicaran las últimas gotas de su meada ( que habría querido me lo echara en la boca ).Se sacaba el capullo y lo guardaba con cuidado, se estaba pajeando con mucha delicadeza, casi haciéndose un masaje.

Estaba tan embelesado mirando la polla que no me di cuenta que me estaba mirando. Al notar su mirada en mis labios abiertos, pasándome la lengua por ellos, e intentando que no se me cayera la baba de lo que estaba salivando.

  • Te gusta lo que ves putita ??- me dijo con una voz que me dejo de piedra.

  • Joder, que si me gusta y si te llego a pillar antes, esa meada cae a mi estomago y no por el desagüe.

  • A si ?! A si que eres más zorra de lo que pensaba. Diciendo esto me agarro del pecho y me empujó contra uno de los cubículos de los retretes, cerrando la puerta de un portazo.

Me hizo sentarme en la taza y se bajo los pantalones y los slip hasta los tobillos, me agarro la cabeza y me metió la polla hasta la garganta de una estacada, me hizo dar una arcada, se me llenaron los ojos de lágrimas, pero ni se inmutó. Siguió follándome la boca, agarrándome de las orejas y metiendo y sacando su polla, veía su cuerpo alejarse y acercarse, sus pelotas chocando con mi barbilla...

  • Traga así puta !! Me decía con una cara de guarro que pondría cachondo al más casto.

Me agarró de la barbilla para que le mirara, me pegó una hostia y según le volvía a mirar me echó un lapo ( escupitajo ) en la cara. Se agachó y me pasó la lengua por toda la jeta para esparcírmelo, y echarme otro en la boca.

Se acercó a mi oreja y me dijo:

  • Ahora te voy a follar como la perra que eres- diciendo esto me agarro de los sobacos, me estampó contra la puerta, y bajándome los pantalones de golpe, me rajo los boxer y me la clavó ( no se en que momento se plantó el condón, pero lo llevaba puesto ).

Con la primera embestida grité tan fuerte que desde fuera preguntaron que si me encontraba bien. No me dejó ni contestar, porque me la volvió a clavar mientras me tapaba la boca y me comía la oreja.

  • Te gusta como te folla un macho , verdad?? Joder, y yo que pensaba que mi novio era guarro, pero he encontrado otro más todavía. Cuando se lo diga, querrá follarte también como yo.

  • Siii !!! Puff cabrón, con que sea la mitad de guarro que tu, me vais a poner súper burro. Sigue follándome !!!

  • Toma cabrón !!!- Dijo dándome una cachetada que seguro me quedó hasta las huellas dactilares marcadas.

Me cogió de la cintura y me llevo hasta que quede sentado encima de él.Los dos en el retrete, comenzó a quitarse los pantalones y los gayumbos.

Yo comencé a dar saltos como un loco clavándome todo ese palo en mi ojal. No podía ni gemir porque me tenía tapada la boca con la mano, para evitar que nos volvieran a molestar. De repente, me mete algo en la boca.

-         Topa lame mis gayumbos, los llevo puestos desde ayer y te los vas a llevar para que recuerdes esta follada. La próxima vez que quedemos, me los devuelves sin lavar y espero que los hayas marcado.

Yo me sentía en una nube, me estaba follando un pedazo de cabrón , guarreando como me gusta, y como pocos hacen.

No té como su polla se hinchaba, su respiración iba más rápida.

-         Me voy a correr pedazo de puta, sigue botando ¡!- me decía al oído.

Los dos terminamos casi a la vez quedándonos un rato quietos con su rabo aún en mi culo. Antes de que se le bajará la erección, me levanté. Justo en ese momento llamaban para que fuéramos ya a embarcar.

Me pasó un papel con su número de tlfno , diciéndome que cuando volviera le llamara para quedar con él y su pive.

Salí del retrete , me lavé un poco la cara y me fui a por mis cosas a la taquilla, con el culo aún abierto y una sonrisa de oreja a oreja.