Conociendo a mis hijos (19)

¿Tu eres gay?

CONOCIENDO A MIS HIJOS (XIX)

Luis caminaba a paso ligero hasta la casa de su amigo Marcos. Durante el camino le venían a la mente las imágenes de lo sucedido con su tío Carlos en la habitación. ¡Había sido solo una mamada, nada más! Se repetía una y otra vez. Pero sabía que la excitación que había sentido con él no la había sentido con su padre en las demás ocasiones. Y por ese motivo se le repetían una y otra vez. Su tío introduciéndose su polla en la boca. Se sentía mal, porque él quería mucho a su padre, con él había comenzado todo esto y ahora, ahora era con su propio tío con el que estaba disfrutando.

Llegó a la puerta de la casa de Marcos, llamó al timbre, tras escuchar los pasos acercarse a la puerta se abrió. Apareció Marcos con una toalla atada a la cintura, el pelo mojado le caía por su cara y gotas de agua bajaban por su pecho y por su abdomen. A Luis le dio un pingo la polla en el interior de su bóxer.

-¡Ey pasa!-recibió Marcos a su amigo-…me pillas recién salido de la ducha. Luis pasó dentro de aquella casa que ya conocía de anteriores ocasiones.

-Ven vamos a mi cuarto…-dijo el muchacho.

-Mejor te espero aquí mientras ¿no?-le dijo Luis.

-No te preocupes, puedes acompañarme si quieres.

Entraron a su cuarto. Luis se dirigió hacia el escritorio donde el muchacho tenía el ordenador encendido. Comenzó a navegar por internet. Marcos mientras buscaba ropa cómoda para ponerse esa noche.

-Bueno… ¿le dijiste a tu padre que te quedabas a dormir esta noche?-preguntó Marcos.

-Sí… no hay problema.

-Je,je. Me alegro tío, la verdad, me mola mucho la relación que tenéis tu padre y tú.

Luis se giró en la silla y en ese momento vio que su amigo estaba totalmente desnudo. Pudo contemplar la gran verga que tenía su amigo entre las piernas ¡Era mucho más grande que la suya! Sin quererlo una sensación de calor empezó a recorrer su cuerpo. Se había excitado al ver a su amigo desnudo mientras se secaba con la toalla y se vestía. Su polla se empezaba a hinchar dentro de su pantalón. Para que no se diera cuenta se giró y siguió navegando por internet. Y en ese momento hubo algo que le llamó la atención. En la barra de directorios aparecía el nombre de una web de porno gay. ¿Marcos era gay?-se preguntó el muchacho.

-¿Qué ves?-preguntó Marcos que ya se había vestido y se colocaba tras él.

-Emm… nada… ya cerré…-Luis cerró las ventanas y vio a su amigo que ya estaba vestido, había elegido un pantalón de chándal con una sudadera que le marcaba su buen cuerpo y el bulto entre sus piernas…-y bueno…¿qué hacemos?-preguntó Luis.

-Si quieres echamos unas partidas a la Play, cenamos y luego vemos una peli, ¿te parece?-propuso Marcos.

-Venga va…

Los muchachos se fueron para el salón a jugar a la Play. Luis no hacía más que mirar a su amigo de reojo. Perdía todas las partidas porque no se podía concentrar. Se le venían a la mente una y otra vez la imagen de su amigo desnudo y a la vez la curiosidad por saber si era o no gay. De nuevo esa sensación de calor comenzaba a recorrer su cuerpo.

-¡Venga tio!...¡que no das ni una!-dijo Marcos dándole en el hombro a su amigo.

-Ya… ya… es que tengo muchas cosas en la cabeza-dijo Luis.

-¿Ah sí?... ¿qué cosas?-le preguntó Marcos.

-Nah… son tonterías mías-le respondió el muchacho esquivando la pregunta.

-Venga… suéltalas porque si no… no vas a jugar en condiciones.

-Bueno… ¿puedo hacerte una pregunta tío?-le pregunto ahora Luis.

-Suelta-le dijo seguro su amigo.

-Es personal…-le advirtió Luis.

-¡Que me la hagas!-Marcos miraba a Luis a la cara.

-¿Tú… tú eres gay?-Luis dejo la pregunta en el aire.

-¿Por qué me haces esa pregunta?-dijo su amigo.

-Por algo que he visto que me ha hecho dudar… y ya que somos amigos me gustaría que me lo dijeras-le dijo su amigo Luis.

-Bueno… pues sí tío. Pero no lo sabe nadie y no quería decir nada por miedo a que me rechazaran-dijo el muchacho cabizbajo.

-¿Te digo una cosa?-dijo Luis.

-¿Qué…?

-No es que sea gay pero… también me atraen en parte los hombres…-esa confesión dejó a Marcos boquiabierto, no se esperaba ni por momentos que su amigo fuera gay o bi o lo que fuera.

-Pero… ¿entonces… tu…?-pregunto Marcos.

-Yo sé disfrutar del buen sexo… jaja…-reía-… y bueno la verdad es que yo pienso que no se deben etiquetar a las personas por su condición, pueden disfrutar entre unos y otros sin problemas.

Marcos estaba cada vez más sorprendido con lo que su amigo le decía. ¿Entonces Luis…?

-Joder tío… me acabas de dejar sin palabras-dijo Marcos asombrado.

-Ya… bueno ya sabes lo mío.

-Pues oye…ya que yo soy gay y tu eres… lo que seas… podríamos pasar algún que otro rato bueno-Marcos se acercó a su amigo, apoyó su mano en su pierna y comenzó a acariciarla.

-¿Cómo… por ejemplo… ahora?-le dijo Luis acercándose a él lentamente. Sus caras se aproximaron y sus labios se unieron en un beso. Sus bocas se unían más y más hasta que faltaba el aire para respirar. Sus manos comenzaban a recorrer el cuerpo del otro. Luis le quitó la sudadera a su amigo quedando su torso desnudo. Bajó por su cuello besándolo y lamiéndolo lentamente hasta llegar a su pecho. Lo besaba una y otra vez. Se centró por momentos en el pezón lamiéndolo, besándolo, dándole pequeños mordiscos que hacían soltar algún que otro gemido a su amigo.

Marcos pasaba la mano por encima del paquete de su amigo que estaba deseando salir.

-¡Ponte en pie!-le ordenó Marcos a su amigo.

Luis se levantó y dejó delante de la cara de su amigo su paquete. Este le bajó los pantalones y quedó en bóxer marcando la erección de su gran verga.

-¡Estas a tope eh!-dijo Marcos.

-Buff sí tio… me tienes cardíaco-Luis levantaba la cabeza y miraba el techo mientras se mordía los labios.

Marcos bajó el bóxer de su amigo dejando su verga al aire. La agarró con una mano y se la introdujo lentamente. ¡La chupaba de maravilla!

-¡Qué rico tío…. Qué bien lo haces!-gemía Luis.

Marcos seguía mamando la polla de su amigo, se bajó los pantalones del chándal dejando su verga larga y gorda al aire. Se comenzó a pajear fuertemente mientras seguía mamando insaciablemente la polla de su amigo. Bajaba lamiendo el tronco hasta llegar a sus huevos y los lamía una y otra vez. Se los metía en la boca y cuando se los sacaba volvía a subir hasta meterse nuevamente el glande en la boca.

-Joder tío…¡qué bien la mamas!-gemía Luis. Marcos se puso en pie, se quitó por completo la ropa quedando desnudo delante de su amigo.

-¡Desnúdate!-le ordenó Marcos. Luis tardó unos segundos en quedar totalmente desnudo.

-Y ahora… ¡quiero que me folles tío!-le dijo Marcos. Luis se quedó un poco asombrado… ¿su amigo quería que le follara?

-Emm tío… yo…-Luis se quedó parado delante de su amigo.

-¿Qué pasa tío…?-preguntó extrañado Marcos.

-Verás… yo nunca…-dijo avergonzado Luis.

-¿Nunca has follado…?-le preguntó su amigo a lo que Luis negó con la cabeza.

-Bueno… algún día te tendrías que estrenar. ¿Quieres que sea conmigo?

-Claro…-diciendo eso se acercó a su amigo y se dieron un fuerte beso.

-Dime… ¿Cómo lo hago?-le preguntó.

-Simple… me pones el capullo a la entrada y empujas lentamente hasta que entre y luego meter y sacar-le explicó su amigo.

-Pero…vale… probaré.

Luis se colocó detrás de su amigo. Puso su polla erecta a la entrada del culo de su amigo. La colocó bien con su mano y empezó a empujar. Notaba como el esfínter de su amigo empezaba a ceder con su paso. El glande entró por completo…

-Bien... ya tienes la cabeza… ahora sigue empujando…-le dijo Marcos que se empezaba a pajear nuevamente la polla.

Su amigo siguió empujando y la polla comenzó a entrar en el interior de su amigo…¡Eso era lo más! Notaba como las paredes de su ano rozaban con su polla. ¡Qué gusto! Cuando se miró vio que la tenía totalmente dentro. Ahora cogió a su amigo por las caderas y con lentitud comenzó a sacarla hasta que quedó solamente el glande dentro y de nuevo se la metió. Siguió metiendo y sacando su verga del culo de su amigo lentamente por momentos hasta que notó que la resistencia que existía al principio desaparecía dando paso a una lubricación interna que permitía entrar y salir con más rapidez. Con esto aumentó el ritmo del mete y saca. Marcos empezaba a gemir.

-¡Perfecto tío… sigue así!-le dijo su amigo.

Luis siguió dándole por detrás a su amigo fuertemente. Notaba como los huevos chocaban con la entrada al culo de su amigo.

-¡Joder tío como me gusta!-gemía Luis.

-Espera…sácala…cambiemos de postura-propuso Marcos.

-Dime…-dijo Luis sacándosela de su interior.

-Siéntate en el sofá-le ordenó Marcos.

Luis se sentó en el sofá, su polla erecta estaba colorada del mete y saca pero más dura que nunca. Su amigo se colocó encima de él. Apoyó sus rodillas en el sofá y lentamente se introdujo su polla de nuevo. Ahora era Marcos el que llevaba el ritmo de la follada. Los muchachos se miraban a los ojos. Se pertenecían por momentos el uno al otro.

-Joder Luis…¡qué bien!-gemía Marcos.

-Tío… como sigas así me corro-le avisó Luis.

-Hazlo dentro de mí…-le pidió su amigo.

Marcos siguió cabalgando a su amigo mientras se pajeaba la polla. Luis tomó con sus manos los dos cachetes de su amigo y se le ocurrió darle un cachetazo en el culo.

-Buff… sí tio…¡dame!-pidió Marcos que tenía por momentos los ojos en blanco del placer que sentía.

Luis le dio un par de cachetazos más en el culo y en un momento Marcos comenzó a correrse. ¡Qué cantidad de leche echaba! Salió disparada hacia su pecho. Su esfínter se contraía con cada corrida lo que hizo que Luis se corriera en su interior.

-OOhhh…. Sí tío… síii-gimió Luis vaciándose en su interior.

Marcos seguía cabalgando a su amigo, notaba como el semen resbalaba por su interior. Lo que hacía que la lubricación fuera mayor. No dejaba de montar a su amigo con un sube y baja. La polla de Marcos seguía estando erecta a pesar de haberse corrido. A Marcos le encantaba sentirla dentro.

-Tío esto… ha sido genial…-dijo Luis.

Marcos se acercó a él y le dio un beso en los labios. Siguió cabalgando a su amigo.

-¡Agárrate a mi cuello!-le dijo Luis a lo que Marcos obedeció.

Luis lo tomó por la cintura y haciendo uso de su fuerza de futbolista se puso en pie con su amigo ensartado por su polla. Marcos se aferró al cuerpo de su amigo, con sus manos abrazaba su cuello y con sus piernas la cintura de su amigo. Luis lo llevó hasta la mesa del salón. Dejó a su amigo en la mesa lo tomó por las piernas que se las puso en los brazos y comenzó a meter y a sacar su polla de nuevo.

La polla de Marcos estaba de nuevo totalmente erecta, los muchachos gemían sin parar. Sus cuerpos estaban en manos del placer. Sus cuerpos se pertenecían. Y siguiendo con aquella follada se entregaron de nuevo al placer. Marcos tras unos minutos volvió a descargar sobre su abdomen y pecho su leche caliente y Luis inundó el culo de su amigo. La respiración de los muchachos era acelerada, sus corazones bombeaban sangre hasta no poder más. Estaban en éxtasis.

Luis sentía como perdía fuerzas en las piernas y se sentó en el suelo. Marcos quedó con las piernas colgando de la mesa y el semen saliendo de su ano que corría por sus glúteos y su abdomen lleno del suyo propio.

-Tío esto… hay que repetirlo ¡joder!-dijo Luis.

-Claro… disfrutaremos del buen sexo cada vez que queramos-dijo Marcos.

Luis mientras se reponía de aquella maravillosa follada pensaba en todo lo que le estaba ocurriendo. Tenía  a su padre con el que se pajeaba y se mamaban las pollas sin ningún tapujo, por otro lado su tío que sabía que era gay le había hecho aquella gran mamada y él de igual modo le deseaba, quería probar con él y conocer más de ese mundo pero ahora… ahora su amigo Marcos le confiesa que es gay y para colmo le pide pasar buenos ratos de sexo...¡Esto es demasiado para mí!-pensó.