Confundida (7)

Soy Lesbiana? Soy Bisexual? Un Viaje al Paraíso

Habían transcurrido aproximadamente cuatro semanas desde aquella tarde maravillosa en que había sido poseída por mi padre, durante ese lapso no volvimos a hablar del tema, en casa tratábamos que nuestro comportamiento fuera lo mas normal posible, creo que a los dos nos daba vueltas en nuestro pensamiento ese grado de culpabilidad al haber traspasado la línea ética entre lo moral y lo inmoral, por la sencilla razón de haber sido tan osados y atrevernos a comer del fruto prohibido, que ante todo el mundo era un tabú, conforme a los valores de la sociedad.

Aquellos días me sirvieron para refugiarme en Marisol, en ella encontraba consuelo y comprensión a mi estado de ánimo, en sus brazos trataba de olvidarme de los problemas cotidianos, incluso muchas veces llegué a pensar que lo ocurrido con papá, nunca había sucedido y que simplemente había sido un sueño.

Estudiábamos juntas, ya fuera en su casa o en la mía preparando los exámenes de fin de año, buscabamos cualquier tiempo disponible para estar a solas y cuando lo encontrábamos era el espacio de nuestras pasiones.

Fue una tarde, mientras tomábamos el té con Marisol y papá, que llegó mi madre feliz y contenta, irradiante de felicidad.

Y a que se debe tanta alegría Silvia? Preguntó mi padre...

no se imaginan la sorpresa que les traigo...

pero que cosa...

Mi jefe me ha comunicado que yo y dos empleados mas, vamos a Mexico por 8 día a realizar un estudio de marketing con todos los gastos pagados

Papá y yo nos miramos...creo que los dos teníamos los mismos pensamientos

Marisol, parecía no entender nada...

Y cuando sería eso Silvia?

Ahora ya, dentro de cuatro días debemos partir...

La casa se convulsionó entera, ayudamos a mamá a la preparación de su viaje, los tres estabamos muy estusiasmados, claro que cada uno vivía el entusiasmos a su manera

La noche anterior al viaje, Marisol vino a quedarse en casa, ella quería acompañarnos a dejar a mamá al aeropuerto; fue la ocasión para dormir juntas nuevamente y disfrutar de una noche entera para nosotras, así nuestros cuerpos desnudos y entrelazados dieron paso a las caricias y a los besos de una noche llena de ternura.

De vez en cuando se podían escuchar unos leves gemidos de mamá, indudablemente papá le estaba dando su despedida y a esa hora follaban como locos...

De madrugada nos fuimos al aeropuerto, las despedidas de siempre...

buen viaje, mamá..

chao cariño, los extrañaré

Ya de regreso, pasamos por casa de Marisol y regresamos con papá a nuestro hogar.

Apenas había puesto un pie en la puerta cuando papá intentó besarme, yo arranqué riendome y comenzó a perseguirme por todas las habitaciones, fue como un juego de niños que entre risas duró algunos minutos, el trataba de alcanzarme y yo trataba de esquivarlo, pero al final me acorraló en la cocina, ahí nos fundimos en un apasionado beso

Me levantó cuidadosamente, metiendo sus manos bajo mi falda, sentándome sobre la mesa, procedió a sacarme la tanga y de pie como el estaba, me introdujo su falo empalandome hasta el fondo....

-Ohh...papá que haces...

-poseerte hija...poseerte...

Acaso no te gusta?

Sí papá...me encanta...

-Ohh...eres maravilloso...

-Ahora sí...serás mía cuando yo quiera...

Sí papá...a la hora que quieras...sere tuya...,

Fué un rico orgasmo, hasta que se vació rápidamente dentro de mí.

Teníamos siete días completos para nosotros, papá propuso que arrendáramos una cabaña en la playa, la idea me fascinó, esa misma mañana hicimos los preparativos. Llamé por teléfono a Marisol, para avisarle que no estaría en la ciudad, no le pareció muy buena la idea  y comenzó a interrogarme ofuscadamente...

-Y donde te vas...

-Vamos con papá a la playa...

-Y cuando vuelven?

-El otro fin de semana...

Y porque no me lo contastes anoche?

Porque lo supe recién ahora Marisol...

-pero serán muchos días sin verte, gritó del otro lado de la línea...

Calmate Marisol...que te pasa....

-que te voy a extrañar y siento celos...

-cálmate a la vuelta hablaremos...

-bueno, que disfrutes y llamame cuando regresen

-Así lo haré tesoro...te extrañaré mucho, adiós

-adiós mi vida...

Después de colgar el teléfono quedé pensativa, pero de una cosa estaba segura, mi relación con papá sería un secreto que solo compartiríamos los dos y nadie más.

Esa misma tarde ya ibamos rumbo anuestro destino, el día se presentaba maravilloso, papá como siempre acariciando mis muslos y mis rodillas mientras conducía.

Llegamos casi al atardecer, el lugar era paradisiaco como aquellos que muchas veces había visto en más de alguna película.

Luego de hacer el registro respectivo, el botones un muchacho joven y nada mal parecido, nos condujo hacia la cabaña que teníamos reservada, en el camino nos comentó que lamentablemente era la última del complejo y la que estaba más alejada de la recepción, pero que ante cualquier emergencia estaban los citófonos en todas las habitaciones, eso me puso contenta, tendríamos más intimidad para nosotros. Además nos comentó que todas las mañanas vendría la mucama para realizar el aseo de las habitaciones.

La cabaña en si era grande y acogedora. A la entrada una sala con una pequeña mesa comedor , sus respectivas sillas y un sofá cama muy amplio, luego un dormitorio con una inmensa cama matrimonial, con su baño privado, el que contaba además con un bonito sauna. Pero sin lugar a dudas lo mas espectacular, era un balcón con una gran vista hacia el mar, y bajo la cabaña la cochera de autos. Al momento de retirarse el botones, papá ordenó algo de comer, y unas botellas de vino y champagne, después mientras esperábamos la cena, salimos al balcón a contemplar el hermoso paisaje que se presentaba a nuestra vista; era aquello un sueño? era una realidad? estaba soñando?

Pero allí abrazados con papá mirabamos como allá en la lejanía, donde se encontraba la línea del horizonte, el sol parecía enconderse en el mar, dando inicio a una noche cubierta de estrellas.

Un mozo trajo la cena y una vez servida procedió a retirarse, dándonos las buenas noches.

Nos sentamos a la mesa uno frente al otro, iluminados solo con el resplandor de unos cirios que hacían mas romantica la escena; papá alzo la copa y dijo:

-brindemos por este momento tan especial en nuestras vidas, por tener a mi lado a una hija maravillosa, a la adoslecente que será mujer...

-brindemos por nuestra felicidad...

-Y por nuestro secreto papá...agregué...

Nos bebimos la copa hasta dejarla completamente vacía.

Durante la cena entre copa y copa, papá me fue contando cosas de su juvenud, luego nos dirigimos al balcón a contemplar como reventaban las olas sobre las rocas ubicadas bajo nuestra cabaña, la noche estaba maravillosa, la luna se reflejaba en el agua como pintando un paisaje en movimiento.

Bajamos hacia la playa, caminamos abrazados y descalzos por la arena, cada cierto trecho nos deteníamos para besarnos y acariciarnos mutuamente, movimientos que encendían nuestra pasión y elevaba nuestro grado de excitación.

De regreso a la cabaña, papá se dirigó al baño, ocasión que apreoveché para ir al dormitorio y ponerme mi babydoll de seda trasparente, quería estar lo mas sexi posbile, me desprendí de  mi tanga  y lo esperé a que saliera, cuando lo hizo se acercó a mí con ojos devoradores y poniendo sus manos en mis nalgas me susurró al oído:

-estas muy bella tesoro...esta noche te comeré enterita...

-de verdad me comeras?

-claro que te voy a comer...

Continuará...

Agradeceré sus comentarios.