Confesiones de un Pequeño Poeta 3: Comienzos...

Hola nuevamente, ante todo un saludo a los lectores; ahora, vuelvo a advertir que estos relatos son sólo para quienes tienen cierta capacidad y amor a la lectura, debido a su extensión, os ruego que si comenzáis a leerlo lo concluyáis, cabe aclarar que para la completa comprensión de este relato es necesaria la lectura de los relatos anteriores, muchísimas gracias por su tiempo, espero que disfruten de este, mi tercer relato al que titulo

Confesiones de un Pequeño Poeta 3: Comienzos de una vida en pareja.

Presenciamos juntos aquel maravilloso ocaso, vi los últimos rayos del sol reflejarse en los hermosos y verdes ojos de mi enamorado; me sentía feliz, realizado, nada pudo arruinar ese momento tan glorioso; no dejábamos de mirarnos, Benji fue el primero en romper el silencio.

• Amorcito, se esta haciendo de noche, será mejor que entremos. (Sonríe)

• Sip, bueno, creo que ya es hora de ir a mi casa, mis papis se...

• No!... Espera, no te vayas, quiero que te quedes a pasar la noche. (Me coge de las manos)

• Benji, te juro que me encantaría... Pero no creo que me den permiso.

• Venga, yo hablo con ellos, me adoran, déjame convencerlos.

• Jajaja... Pues sí, te adoran; bien, no se pierde nada intentando. (Sonreí)

Salimos de la azotea y bajamos al 4to piso nuevamente, entramos al departamento, inmediatamente Benji cogió el teléfono y se dispuso a llamar a mi casa.

((Hablando por teléfono))

Aló!... Buenas noches señora, cómo esta?... Sí, Jejeje, le habla Benjamín, OH si, acabo de llegar de Buenos Aires esta tarde.

Sí, mi mami esta rebién, pero con mucho trabajo, ella llega en unos días, Aja... Sí, jajaja... Gracias gracias.

Sí, Chris esta aquí, estamos en mis departamentos, la llamaba para pedirle permiso para que se quede a dormir aquí, él me dijo que UD no lo dejaría, pero yo le insistí, ya que siendo amigos desde hace tantos años y con una madre tan comprensiva como UD no abría ningún problema... Para nada, no es ninguna molestia... Sí, el tiene su celular... No se preocupe, ya almorzamos y a lo mucho en una hora cenaremos... Divino! Muchísimas gracias señora, Chris se va a poner refeliz, saludos al señor, cuídense mucho, bye.

• Ya está. (Me dijo con una gran sonrisa)

• Benji, eres un ángel!... Te amo!... (Lo abracé)

• Jajaja... Bueno, ahora sí tenemos tiempo. (Sonríe)

• Aja, dime, que planes tienes para más tarde?

• (Me coge de la cintura) Mirá... Planeo hacerte el amor toooda la noche, vos querés?

• Wow!... Toda la noche?

• Aja. (Sonríe pícaramente)

• Ummm... Que rico!

J

Jejeje... Claro amorcito, claro que quiero.

• Jejeje... Venga, vamos a la camita. (Sonríe)

Y así fue, estaba pasando la primera noche a solas con mi enamorado, al entrar en la habitación inmediatamente nos desnudamos; mis ojos volvieron a deleitarse con la visión de su hermoso cuerpo desnudo, que aunque delgado estaba muy bien formado, soltó su cabellera que hasta el momento estaba en cola, me miró, sonriente se acercó a mí, nuestras miradas se encontraron, luego fueron nuestros labios, caímos sobre su cama sumidos en aquel tan calido y apasionado beso, a cada segundo nos adentrábamos cada vez más en aquella cama que sin duda alguna volvería a ser nuestro pequeño nido de amor; su cuerpo se dejo caer lentamente sobre el mió, el beso continuo su rumbo, mis manos acariciaban con devoción su pecosa espalda, mis piernas rodeaban las suyas, sus fuertes y blandas manos comenzaron a acariciar mi pequeña cintura; no había duda, nuevamente sería poseído por mi bello amante, sus acariciantes manos pasaron de poseer mi cintura a situarse virilmente bajo mis predispuestos muslos; sabía lo que me esperaba a continuación y aceptaba perfectamente el hecho de entregarme por completo a mi dulce amor, lentamente comenzó a levantar mis muslos y a adoptar su folladora posición de hombre, en esos instantes quede completamente a su disposición...

Aquella noche haría el amor con Benjamín cuatro veces más.

En esos apasionados instantes sentía como Benji terminaba dentro de mí por cuarta vez consecutiva... Él se encontraba tendido cara arriba sobre la cama, sujetándome de los muslos; yo me encontraba sentado, atravesado por su dura y deliciosa virilidad, que acababa de inundarme las entrañas por cuarta vez en la noche; mi cuerpo ya no daba para más, sin sacar a ese hermoso invitado de mi interior, caí tumbado sobre el pecho de mi amante y enamorado.

• Chris, sos una maravilla, te amo. (Acariciando mi cabeza)

• Yo también te amo Benji... Has estado maravilloso. (Sonreí levemente)

• Jejeje... Te vez cansadito, suficiente por hoy?

• Benji, la verdad me gustaría hacer el amor contigo por siempre, pero creo que sí, es suficiente por hoy, aun tengo ganitas... Pero la colita me esta matando.

• Jajaja... Bien amorcito, no te preocupes, la sacaré despacito, dejemos que descanse. (Saca su miembro de mi cola)

• ¡Au!... (Grité)

• Te ha dolido?!... Lo he hecho muy despacio... Espero no haberte hecho daño? (Preocupado)

• No, estoy bien, no te preocupes amor, no es nada.

• Déjame ver... (Me introduce un dedo)

• Au!... Por favor, detente, me duele!...

• Lo siento Chris, lo siento... Creo que esta inflamado, ha sido por el rose excesivo.

• Ay!... Seguro, lo mejor será dormir un poquito, estaré bien.

• Amorcito, disculpáme, creo que abuse por completo de tu colita.

L

(Triste)

• Jajajaja... No Benji, mi colita esta muy feliz, adolorida, pero feliz; solo déjala descansar, nada más.

• Sí, creo que será lo mejor. (Aún preocupado)

• Será mejor que me eche a tu lado, creo que dormir de costadito es lo más indicado para mí; además, así te puedo abrazar toda la noche.

J

(Sonreí)

• Claro que sí amorcito, lo que vos queráis. (Sonríe tiernamente)

Eran las 2:30am aproximadamente, habíamos estado haciendo el amor sin parar desde poco más de las 7:00pm del día anterior; lo confieso, ese día por primera vez, después de tanto sexo con Benji, sentí que tenia verdaderamente la cola partida en dos, definitivamente el cuerpo no me daba para más, así que me dispuse a dormir al lado de mi enamorado, con la cabeza sobre su pecho, mi mano derecha sobre su miembro, y mi corazón en sus manos.

Llego la mañana del día siguiente, algunos rayos de luz alcanzaban mis parpados aun cerrados, Benji había corrido la cortina, aquello me despertó; al abrir mis ojos, lo primero que vi fue el hermoso y angelical rostro de mi amante, me miro tiernamente, tenía una hermosísima sonrisa mañanera, le brillaban los ojos, comenzó a acariciar mi cabello.

• Buenos días amor, como has amanecido? (Sonríe)

• Ufff... Jejeje, de maravilla, anoche estuviste maravilloso. (Sonreí)

• Pues vos también estuviste divino, Jejeje... Ah! Verdad, como amaneció tu colita?... Aun te duele?

- Hombre!... No, ya no me duele, es un milagro!...

J

• Jajaja... Nada de milagros amorcito, fue esto. (Me enseña un pequeño sachet)

- Y que es eso?

• Pues es una especie de cremita que se usa para desinflamar heridas que salen dentro de la boca, es para uso interno, ayer en la madrugada no dejabas de quejarte mientras dormías, así que fui a la farmacia y la conseguí.

- Haber... Fuiste en la madrugada a la farmacia por una cremita para mi cola?

• Aja... (Sonríe)

- Ay! Benji, te amo. (Lo besé). Oye, pero cómo llegó la cremita a la zona inflamada?

• Bueno... Ehhh... Te la unté mientras estabas dormidito.

- Jajajaja... Oye, o sea que me has estado metiendo los dedos por ahí, y no me he percatado? (Sonreí)

• Pues... No, jejeje... La verdad no fue muy difícil, como que quedaste un poco abiertito después de lo de anoche.

- Jejeje... Bueno, supongo que sí... Oye amor, quieres continuar el trabajito que empezaste ayer? (Sonreí pícaramente)

• Vaya!... (Sonríe) Sos insaciable; mirá amor, me encantaría seguir amándote todo el día, pero por casualidad sabés que hora son?

• Ehhh... No, acaso no piensas decirme?

• Pues… Son casi las 11:20am.

• Ohhh!... Tengo cita con el odontólogo al medio día!

• Lo sé, llamó tu mamá, por eso te desperté.

- Mi mami? Dios!... Si no llego a la cita mi madre me mata!

Inmediatamente me levanté de la cama, Benji también se levanto, ambos estábamos desnudos, Ohh!... Era imposible resistirme, el simple hecho de ver su cuerpo desnudo me ordenaba arrodillarme ante él e introducir su polla en mi boquita, era como estar hipnotizado, no podía dejar de contemplar ese maravilloso, delgado y atlético cuerpo; agradecí a Dios por haberme dado aquel chico como enamorado.

• Chris!... Amor!... Que te ocurre? Estas bien?... Chris!

• Ehh!.. Sí, sí, estoy bien.

• Te quedaste parado mirándome muy extraño, me asustaste.

• Jajaja... No es nada, solo pensaba en lo afortunado que soy al tener a un chico tan perfecto como pareja, aun no puedo creer que seamos enamorados, estoy tan feliz. (Sonreí)

• Ohhh... (Se acerca y me abraza) Vos también sos un chico maravilloso, me encantaría decirte lo mucho que te amo y me gustas... Pero se te hace tarde y quiero un enamorado vivo. (Sonríe)

- Ay!... Jejeje... Tienes toda la razón, mejor me doy un duchazo veloz y voy volando a mi casa, si quiero llegar a adulto.

Y así fue, rápidamente salí de la habitación para ingresar al baño, me di un duchazo que no duró ni 15 minutos, salí rápidamente y me dirigí a la habitación, Benji ya estaba vestido, me alisté rápidamente, salimos de su apartamento como volando, al parecer el ascensor estaba ocupado, así que bajamos rápidamente por las escaleras, una vez en la calle.

• Chris, te acompaño hasta la avenida, tengo que cumplir unos encargos de mi madre.

- Ok Benji, gracias por la noche tan maravillosa. (Sonreí cariñosamente)

• Nada de agradecerme, gracias a vos.

- Oye Benji, notaste que feo nos miro la señora del segundo piso?

• No, no me percaté.

- No te llevas bien con ella?

• Jajaja... No creo que sea por eso. (Sonríe)

- Entonces? (Confundido)

• Bueno, como que anoche hicimos un poquito de bulla, Jejeje.

- Ay! Benji, discúlpame, olvidé que eran apartamentos.

• Bahh!... No tiene importancia, que piense lo que quiera.

- Bueno, al parecer llegamos. (Dije)

• Bien amorcito, aquí nos separamos, mirá, tendré todo este día ocupadísimo, mi madre me ha mandado un millón de cosas que hacer, pero mañana a primera hora estoy por tu casa, te parece?

- Genial!... Estaré contando los segundos para volver a verte.

Estábamos en plena avenida, el taxi se detuvo frente a nosotros, tenía que abordarlo; sin embargo, quería abrazar a mi enamorado, besarlo y decirle lo mucho que lo amaba, pero eso era imposible, la sociedad extremadamente machista condena estas cosas; a veces, el amor se ve truncado por quienes no lo entienden... Pero no me iría sin expresarle mi amor, nos dimos la mano, acaricie su blanca y suave mano por unos segundos, él me correspondió con una tierna sonrisa, era suficiente para mí, también le sonreí, subí al taxi para luego partir de inmediato rumbo a mi casa.

Las siguientes horas fueron un poco aburridas, el taxi, mi casa, la clínica, al restaurante y a mi casa nuevamente... Sin novedades, al llegar nuevamente a mi casa lo primero que hice fue subir a mi habitación y poner a todo volumen mi disco de ColdPlay, ya que mi madre después de dejarme en la casa se pasó a sus clases de Yoga y mi padre lógicamente se encontraba trabajando.

Eran cerca de las 3:00pm, había pasado casi una hora desde que llegué a mi casa, estaba tan tranquilo y tan relajado escuchando la música, hasta que suena mi intercomunicador...

- Sí, diga. (Dije)

• Joven Christian, un amigo ha venido a buscarlo.

- Oh!... Que pase, que pase...

Inmediatamente pensé en Benjamín, baje las escaleras rápidamente, al llegar a la sala me di con una gran sorpresa, no era Benji, se trataba de nada más y nada menos que de Juanpi.

- Hola Juanpi, que sorpresa, no esperaba verte por aquí estos días.

• Hola Chris, Jejeje... Oye, que fue de ti? No te conectas, no escribes, no llamas... Como es posible que te olvides así de los amigos?

- Bueno... Ehhh... Sí, tienes razón, sorry... Pero es que la verdad, me han pasado miles de cosas en estos días.

• Supongo, pero no te puedes olvidar así de la gente que te quiere, en especial de mí. (Me coge de las manos)

- Y bueno... A que se debe tu visita? (Safándome)

• Jejeje... Pues estaba por aquí, y aprovechando que tus padres no están, vine a visitarte. (Sonríe pícaramente)

- Cómo sabías que mis papis no estaban?!

• Bueno, ahora lo sé. (Sonríe)

• Oh!... Eh.... Mira Juanpi, hay algo que... Yo...

• No digas más. Mira, siente esto. (Coge mi mano y la lleva sobre su gran paquete)

• Ohhh!...

• Jejeje... Se me ha puesto así de solo verte. (Me abraza y comienza a olfatear mi cuello) Hueles a hembra... A pasivo, se te nota... Yo sé que quieres. (Coge mis nalgas)

• No!... Ohhh!.. Juanpi no puedo, Yo… Podri...

No se porque motivo nunca quite la mano de su paquete, aunque no creo que aquello hubiese cambiado aquella situación; Juanpi y yo estábamos frente a frente, él me abrazaba mientras olfateaba mi cuello; luego, comenzó un beso, fue excelente; sin embargo, no estaba teniendo en cuenta un detalle, tenía enamorado, en ese instante entró en mi cabeza un momento de lucidez. ¿Qué estaba haciendo?!... Al darme cuenta de aquello, ya me encontraba sobre la alfombra, y Juanpi se encontraba encima mió besándome, inmediatamente me liberé del beso.

- Juanpi, no!... No puedo hacerlo...

• Chris, porque siempre te haces la difícil?... Venga, bésame.

Inmediatamente los labios de Juanpi cayeron sobre los míos, otra vez este chico me estaba haciendo luchar contra mi mismo, y odio eso!... Pero antes de poder rechazarlo completamente algo ocurrió; en aquellos momentos del beso sobre la alfombra, Juanpi comenzó a bajarme el shortsito celeste que llevaba puesto, su perita mano se dirigió rápidamente hacia la entrada de mi cola, comenzó a introducir lentamente sus dedos, pero de repente.

• Chris!... ¿Que demonios has estado haciendo?!

• Que me sueltes!... No piens...

• Cállate!... Respóndeme! (Molesto)

• Por favor suéltame... Que te ocurre? (Asustado)

• Has estado follando, verdad?... Y no ha sido conmigo!

• Pues... Sí, pero ten...

• Mierda!... Lo sabia, te han follado!... Quien a sido? Dime!

- Un amigo, que ha llegado hace poco a ...

• Lo conozco?!

- Estuvo en mi cumpleaños el año pasado, hace poco que ha venido de Argentina.

• Mierda!... Te has enredado con ese rubito de mierda?!... Esa rubia marica Argentina?! (Molesto)

- Cállate!... No te permito que hables así de él, y menos en mi casa!... No es ninguna marica, es muy hombre y me lo ha demostrado!

• Pero... Porqué has?... (Cabizbajo)

- Porque somos enamorados Juanpi, somos enamorados, por eso; desde ayer lo somos, ahora ya lo sabes.

Inmediatamente Juanpi se puso de pie, cabizbajo; lo miré, sentía mucho cariño por ese chico, uno nunca olvida su primera vez, jamás!... Me puse de pie, lo miré a la cara, seguía cabizbajo, aparentemente había aceptado su derrota, que equivocado estuve al pensar eso...

A los pocos segundos Juanpi alzó la mirada, pensé en decir alguna frase para reanimarlo, pero lo vi, su mirada reflejaba odio, me asusté mucho al verlo así.

- Juanpi... Qué te ocurre?... Estas bien?... Sabes, yo soy el...

• Tú nada!... Tú nada!... Quieres saber lo que eres? Quieres saber lo que eres? Una Puta!... Eso eres, un maldita Puta! (Muy molesto)

• ¿ Como te atreves a hablarme en...

• Cállate!... (Cabizbajo)

En esos momentos coloque una mano en el hombro de Juanpi para consolarlo.

- Venga, Juanpi, no lo tomes de...

• Suéltame marica!... No me toques!...

En esos momentos Juanpi se puso fuera de control, nunca olvidaré ese día, quito violentamente mi mano de su hombro, me dio un golpe directo en el estomago y me empujó... Caí sentado sobre la alfombra, sentí un gran dolor en la cola, al parecer no estaba del todo bien como pensaba, lancé un pequeño gritito de dolor, en realidad me había dolido mucho, la mirada de Juanpi cambio de rabia a pena por un instante, estoy seguro que estuvo apunto de acudir en mi ayuda y pedirme disculpas; sin embargo, su orgullo fue más fuerte, volvió a aquella mirada de odio.

No dijo más, dio media vuelta y se dirigió a la puerta mientras yo le gritaba entre lágrimas e insultos que se largara de mi casa... Las cosas no salieron muy bien, Juanpi lo había tomado peor de lo que pensé; al poco rato me puse de pie, subí a mi habitación, me sentía muy triste, quería olvidarme de lo ocurrido, pasé la mayor parte del restante día en mi habitación, entre llorando, escuchando música y el MSN.

Al llegar la noche me dispuse a dormir, eran cerca de las 8:00pm, el día había estado lindo, la tarde atroz, no quería averiguar como estaría la noche, así que decidí acostarme muy temprano.

Las horas pasaron, pasó la noche y seguida de esta la madrugada, había llorado mucho la tarde del día anterior, mi cuerpo se sentía cansado, estaba feliz por un lado, pero triste por otro; llego la hora de despertarme… Entre despierto y dormido logré oír "The Scientist" de ColdPlay, no sabía que horas eran, pero no creí que mis padres escucharan eso... Abrí los ojos, entonces vi un ángel sentado a mi lado, naturalmente era Benjamín, llevaba un polito blanco y un shortsito azul claro.

• Benji?!...

J

• Hola Bebe, cómo amaneciste? (Sonríe tiernamente)

- Jejeje... Bien, oye!... Qué haces aquí?... Qué horas son?

• Bueno, Son casi las ocho y media, vine hace casi media hora, tus padres me atendieron, estuve charlando unas cosillas con ellos, me dejaron quedarme en la sala a esperar que te despiertes, cuando se fueron decidí subir a ver cómo estabas, Jejeje...

- Vaya... Si que a sido una sorpresa verte al despertar, ya se me esta haciendo costumbre. (Sonreí)

• Jajaja... Bueno, pero hoy lo hice por que tenía algo importante que decirte...

- Algo importante?... Venga Benji, dime que es!... Sabes que me mojo de la curiosidad...

• Jajaja... Feliz Día amorcito! (Me abraza y comienza un beso)

Nuestros labios se encontraron una vez más, que forma tan maravillosa de comenzar el día, aun no sabía porqué lo de Feliz Día y todo eso, pero no me importaba, tenía al chico más bello del mundo abrazándome y besándome, así que cualquier interrogante podía esperar... Pasaron dos minutos y el beso ceso lentamente.

- Amor, porque lo de Feliz Día? (Pregunté)

• Oh!... Bueno, ya sé que somos nuevos en esto pero... Hoy es San Valentín!... Día de los enamorados!... (Sonríe)

- Ay!... No lo sabia, nunca me había importado mucho esa fecha... Nunca había tenido a alguien para compartirla.

• Pues ahora me tienes, nos tenemos. (Me abraza)

- Jeje... Sips, Ay!... El día no podría comenzar mejor. (Sonreí)

• Jajaja... Nunca digas nunca, mirá, te tengo unos regalitos. (Sonríe)

Inmediatamente Benji abre su mochila, saca una súper cursi caja de chocolates en forma de corazón, Jajaja... Además un viejo oso de peluche marroncito, que tenía la peculiaridad de tener un ojo negro y el otro azul.

- (Cogiendo la caja ) Ay!... Benji!... Dios mió!... Gracias. (Lo besé)

• Lo compré ayer mismo, me pareció un poco cursi, pero bonito, Jejeje.

- Ay!... Esta precioso... Oye, y este oso? (Me parecía haberlo visto en fotografías)

• Bueno, este es mi oso de cuando era pequeño, siempre lo llevo cuando viajo, es mi amuleto de buena suerte, ahora es tuyo. (Sonríe y me lo entrega)

• Benji!... Así que este es tu famoso oso de la suerte, gracias. (Lo besé y abracé nuevamente)

• Sips, es todo un viajero, me ha acompañado a muchos lugares: Europa, la India, África… Ahí fue donde perdió el ojo. (Sonríe)

- Vaya!... Este oso es todo un aventurero. Jejejeje (Mire a Benji a los ojos)

• Aja, así es. (Sonríe y corresponde mi mirada)

- Benji, sabes... No tengo nada que darte, no estaba consiente de la fecha, pero sí sé como compensarte... (Comienzo a acariciar uno de sus muslos bajo su short)

• Uhhh… Jejeje... Esperá Bebe, aún tengo para vos otra sorpresa, algo más que decirte. (Sonríe)

En aquellos instantes los verdes ojos de mi amor se iluminaron, se tenía algo grande entre manos, lo sabía, la curiosidad me volvía loco, necesitaba saber que era!...

• Venga Bebe, estoy esperando a que digas: "Decíme que me vuelvo loco!" (Sonríe)

- Jajaja... Ok, Benji!... Dímelo ya que me vuelvo loco!

J

(Sonreí)

• Jajajaja... Mirá amorcito, recuerdas hace un par de días cuando estábamos en mis apartamentos y me dijiste que seria lindo poder viajar y conocer los lugares de los que te hablaba?

- Aja.

• Bien, arreglé que vayamos de viaje a Argentina! (Sonríe)

- Pero... Pero... Mis padres no...

• Tus padres nada, mi madre ya hablo con ellos, yo vine hoy temprano para confirmarles en persona, era una sorpresa para vos. (Sonríe)

- Benji!... Es... Maravilloso!

• Aja... Iremos a mi hacienda, está a las afueras de Buenos Aires, es una hacienda de caballos, campo, lago, bosque, tú, yo... (Sonríe tiernamente)

Inmediatamente me puse de pie sobre mi cama, tenía ganas de ponerme a brincar como un niño sobre esta, mi alegría se reflejaba a todo dar, Benji no dejaba de mirarme con esos brillantes, grandes y hermosos ojos color esmeralda, acompañados por una sonrisa de ensueño; no comencé a brincar sobre mi cama; sin embargo, de un brinco caí sobre Benji y comencé a besarlo apasionadamente, sentía que no podía hacer absolutamente nada para compenzar lo bueno que este chico estaba siendo conmigo, nada, mas que entregarle mi amor a brazos abiertos.

- Benji, ahora sí, no hay absolutamente nada que pueda hacer para compensar esto.

• No digas eso Bebe, yo te amo, te daría el mundo si pudiese.

- Sabes Benji, eres tan bueno… Hagamos el amor. (Lo miré a los ojos)

• Amor, está la ventana, tu vigilante esta abajo, afuera, podría oírnos, mejor vamos a mis departamentos, te parece?

- No Benji, te necesito aquí y ahora!

Benji accedió a mi petición, nos adentramos más en la cama, ambos estábamos de rodillas sobre esta, nos abrazamos, nos comenzamos a besar, nuestros cuerpos permanecieron juntos de rodillas sobre la cama, el beso continuaba y a cada segundo se hacia más intenso, que tiernos y dulces labios los de mi amante, pasaron un par de minutos, el beso ceso.

Le pregunté a Benji como quería hacerlo en esta ocasión, mi rubio amor me indico que él quería estar tendido cara arriba sobre la cama; entonces, yo debería sentarme sobre su polla, mirándolo; esa es la posición predilecta de Benji, más tarde le preguntaría el porqué, y me daría una de las mejores respuesta que he escuchado hasta ahora.

Y así comenzó, mi amor se acomodó sobre la cama, cara arriba, comenzó a sacarse el polo mientras yo le quitaba el shortsito y la trusa; terminado esto, continué por quitarle las medias, quería tenerlo tal y como Dios lo trajo a este mundo; una vez desnudo sobre mi cama me sonrió, sabía lo que él quería, inmediatamente me puse de pie y comencé a desnudarme lentamente, comencé a quitarme el pijama y finalmente la trusa; entonces, de un brinco caí sobre él, con mis manos en su cintura y mi boca en su polla; comencé a degustar tan delicioso manjar que este tierno amante me entregaba, a los pocos segundos comencé a escuchar gemidos de placer por parte de mi enamorado, Benji adora el sexo oral, sus manos cayeron sobre mi cabeza y comenzaron a acariciarme con lentitud, levanto un poco la vista y me concentro en el delicioso glande de mi rubio amante, mis manos como por instinto bajaron hacia sus muslos, que eran tan blancos y suaves como las nubes, comencé a acariciarlos con devoción, adoraba hacer eso; una de las manos de mi amor comenzó a acariciar mi mejilla, mientras mi boca y mi lengua seguían haciendo su trabajo, quería excitar aún mas a mi amor, así que con el dolor de mi corazón logré sacar una de mis manos de sus preciosos y suaves muslos, inmediatamente comencé a acariciar sus bolas con mucha ternura, sin dejar de mamar su polla, inmediatamente los gemidos de mi amante se dejaron oír; por lo poco que lograba ver, este tenia los ojos cerrados y la boca algo abierta, no dejaba de gemir de placer, acaricie un poco más fuerte sus hermosas bolas, sus gemidos también se incrementaron; aceleré un poco más la velocidad en mi boca, poco a poco comencé a introducir su bello miembro en mi garganta, sentía su glande entrar y abrirse camino poco a poco, con ternura y con amor, como el hombre y caballero que es mi Benji.

Pasaron cerca de dos minutos desde que comencé a introducir su miembro en mi garganta, ahora mi amante tenia la boca completamente abierta, esos gemidos de macho tan excitantes para mis oídos eran fieles testigos de lo mucho que estaba gozándolo, era sólo cuestión de segundos para que mi amor acabe en mí, yo estaría feliz de recibir aquel jarabe tan delicioso una vez más; pero... Para mi sorpresa, Benji retira su polla de mi boca.

L

Se necesita tener un autocontrol infinito, un autocontrol que hasta ahora no puedo imaginar para detener aquel momento de placer; vi como su hermoso miembro completamente erecto ante mis ojos suplicaba por volver al calor de mi boca; sin embargo, Benji fue tajante en su decisión, alcé la mirada para hablarle.

- Benji, que paso? (confundido)

• Ohhh... Amorcito, disculpáme que haya interrumpido, lo que pasa, es que quiero que el primer polvo que nos echemos en este día tan especial sea haciéndote el amor.

- *Oh, ya veo.

J*

En ese momento giré hacia mi derecha y me agaché, abrí el cajoncito debajo mi cama y saqué un pequeño tubo de lubricante, saqué un poco y le entregué el resto a Benji.

- Ten Benji.

• Jajaja... No querés perder el tiempo, verdad? (Sonríe)

Lentamente fui gateando a encontrarme cara a cara con mi amor, él sonreía, las hermosas esmeraldas de sus ojos comenzaron a brillar nuevamente, nos besamos una vez más; por momentos sentía su polla rozar mis muslos, eso me excitaba en demasía, el beso ceso, retrocedí un poco; Benji seguía tendido cara arriba sobre mi cama, no se necesitaron palabras, colocó sus manos sobre sus muslos y se dio unas palmaditas sobre estos, indicándome que tome asiento sobre él, yo me encontraba de rodillas sobre la cama y sobre él, me puse en posición, mirando a mi amante, me encontraba con una mano sobre mi muslo y la otra cogiendo el ya lubricado miembro erecto de mi amorcito, coloque su glande en mi entrada, él solo sonreía tiernamente desde su privilegiada posición, coloqué mis manos sujetando sus caderas, estaba listo.

Lentamente empuje mi cuerpo hacia abajo, el dulce glande de mi amor entró rápidamente y sin ningún problema, luego, comencé a introducir centímetro a centímetro de su hermosa virilidad en mí; Benji no dejaba de mirarme a los ojos, ése fue un detalle muy lindo, su sonrisa me brindaba alegría, sus ojos confianza y su polla mucho pero mucho placer

J

Jejejeje.

Continué empalándome por propia voluntad en el ariete de mi blondo amante, ya casi había entrado toda, faltaban los centímetros más difíciles; no podía seguir así, decidí introducir todo lo que faltaba de una buena vez, agarré fuertemente sus caderas y empuje mi cuerpo hacia abajo con fuerza, el resto de su sexo entró sin resistencia alguna, sus deliciosas bolas chocaron contra mis nalgas una vez más, en esos instantes, Benji cerró fuertemente los ojos y dibujo una sonrisa de gran placer; me sentía bien, el dolor fue casi nulo al lado del inmenso placer que recorría toda y cada parte de mi cuerpo.

La basta cantidad de lubricante que habíamos utilizado ayudo muchísimo para que la penetración fuese casi perfecta, podía sentir el miembro de mi amante completamente en mi interior, aún no me atrevía a comenzar a brincar como loco sobre su miembro; además, quería crear cierta expectativa, Jejeje... Entonces, lentamente comencé un sutil y excitante meneo de cola, comencé a menear mi penetrada y pequeña cola hacia los lados, hacia adelante y hacia atrás, dulcemente, con mucha sutileza, mientras que con la mano izquierda acariciaba el varonil abdomen de mi follador, con la derecha jugaba con sus deliciosas bolas; Benji se encontraba en el cielo, lo puedo asegurar, sus ojos cambiaron de un color verde esmeralda a un blanco casi total, su boca completamente abierta no dejaba de lanzar gemidos de macho en celo, prueba irrefutable del inmenso placer que le estaba brindando.

Pasaron cerca de cinco minutos de un intenso meneo de cola, al parecer Benji había logrado adaptarse a éste, sus bellos ojos volvieron a su color verde habitual, su boca entreabierta ahora emitía pequeños gemidos de placer; era hora de jugar nuevas cartas, me sujeté fuertemente de sus caderas, de un fuerte brinco comencé a follarme la cola por propia voluntad, empecé un riquísimo sube y baja a través del miembro de mi amante, cabalgando cual potro salvaje, danto fuertes botecitos sobre la pelvis de mi follador, los fuertes gemidos de Benji no se hicieron esperar, pero esta vez fueron opacados por los míos, aunque más que gemidos resultaron siendo grititos de placer, eran imposibles de contener, el sentir su polla partiéndome por la mitad, el sentir sus deliciosas bolas chocando contra mis nalgas, más los gemidos de mi amante, era demasiado.

Aquella alocada follada de cola ya iba durando cerca de 10 minutos, hasta que...

• Ohhh!... Bebe, bebe!... (Follando)

• Ahh!... Si Benji? (Follando)

• Juntos... Te parece?

- Ohhh!... Ya mi amor, hagámoslo! (Sonreí)

Inmediatamente Benji entró en acción, sus blancas y suaves manos que durante esos casi veinte minutos de intenso sexo habían acariciado mis muslos, ahora se encontraban sujetando mi cola por los lados, me sujetaban fuertemente, subiendo y bajándome violentamente, estaba siendo obligado a ser follado, y esa idea me encantaba; al mismo ritmo que alzaba y bajaba mi cola con sus manos, levantaba y bajaba su pelvis al encuentro de esta, los choques eran brutalmente excitantes, mis manos en su cadera estaban de más, inmediatamente las saqué, coloqué una sobre su muslo y la otra capturando sus folladoras bolas; recuerdo que en aquellos instantes me encontraba mirando al techo, baje la mirada, me encontré con los hermosos ojos de mi Benji, basto una sola mirada para saber que ya era hora, inmediatamente le puse más fuego al asunto; estreché aún más el interior de mi pequeña cola para darle más placer a mi follador, éste, en vez de dejarse seducir por el placer, incrementó aún más la marcha folladora; sin embargo, yo también pondría de mi parte, en vez de dejarme alzar y bajar por sus poderosísimas envestidas, ahora colaboraría con ellas; inmediatamente, presioné aún más las bolas de mi hombre y con lo último de mi aliento decidí entregarme por completo a la maravillosa penetración.

Ya comenzaba a sentir la virilidad de mi rubio follador como parte de mi cuerpo, podía sentir como su hermoso glande se deslizaba a velocidades extremas en los interiores de mi ser, sentir su pelvis embestir mi cola sin piedad, sentir sus ya liberadas bolas golpear violentamente mis torturadas nalgas, sentir sus manos someterme a tan delicioso castigo, no existía la menor duda, había llegado a un tener un enorme orgasmo en ese momento, llegando a sentir las cosas en cámara lenta; a los pocos segundos de encontrarme en el nirvana, sentí una fortísima embestida alzarme y dejarme suspendido en el aire por un momento, en aquel instante, sentí la más fuerte eyaculación que hasta ese entonces se había dado en mi interior, fortísimos disparos que me hicieron abrir los ojos de la sorpresa, unos tras otros iban bañando por completo mi interior, la eyaculación no cesaba, comencé a sentir como una realmente inmensa cantidad de semen era desprendida en mi interior, nunca había sentido algo así hasta ese entonces, fue grandioso!

Pasó casi un minuto hasta que Benji dejo de eyacular por completo; entonces, abrió sus grandes y hermosos ojos, nuestras miradas se encontraron, necesitábamos besarnos; Benji comenzó a sacar lenta y cuidadosamente su sexo aún erecto de mi interior; una vez fuera, caí tendido completamente exhausto sobre su pecho, nuestros labios se encontraron como por instinto, un apasionadísimo beso comenzó; pero de repente!... Sentí algo raro en mi pecho, algo húmedo... Al parecer yo también había eyaculado sin darme cuenta, a Benji no le molestaba en lo absoluto, me abrazó, pero justo cuando íbamos a volver a besarnos, sentí nuevamente algo raro, pero esta vez en mi cola, un hílo de semen recorría desde la entrada de mi cola hasta los muslos de Benji; rápidamente lleve una mano a esa zona, lo comprobé, nuevamente había quedado abiertito debido a lo prolongado del sexo, me sentí avergonzado, Benji me abrazó dulcemente haciéndome sentir que nada de eso tenía importancia.

- Lo siento Benji. (Avergonzado)

• Chris, amor, no tenés de que avergonzarte, es lo más normal del mundo que hayas eyaculado, y también es lo más normal del mundo que estés algo abiertito después de haber follado sin descanso por casi media hora.

- Gracias amor, tienes toda la razón... Dime, lo habéis disfrutado?

• Ufff... Ah sido lo más rico de toda mi vida, de veras... Y vos, lo habéis disfrutado?

- Ay! Benji, me has hecho eyacular sin siquiera tocármelo... Tú qué crees?

• Jajajaja... Hombre, eso si que fue magia. (Sonríe)

- Jajaja... Oye amor, viste cuando eyacule?

• No vi, tenia los ojos cerrados de la excitación, pero sí lo sentí en mi pecho, fue unos segundos antes de que yo lo haga... Y la verdad, me excitó muchísimo. (Sonríe)

- Jajaja... Ay!... Ya vez, y tú que no querías follar. (Sonreí)

• Jajaja... Sí pues, de lo que nos íbamos a perder. (Sonríe)

Y así comenzó nuestro maravilloso Día de los Enamorados o San Valentín, como le digan.

Terminando aquella maravillosa sesión de amor, descansamos un rato, mi amor se encontraba tendido cara arriba sobre mi cama, yo me encontraba echado con el cuerpo entre sus piernas y mi cabeza apoyada sobre su abdomen, sus manos acariciaban mis cabellos mientras las mías hacían los mismo con sus muslos, pasamos así casi una hora.

(Aún sobre la cama)

• Chris, amorcito, estas despierto?

• Oh… Sí, sí, me estaba quedando dormido.

• Jajaja… Como que es un poco temprano para dormir

J

Vení! Echáte a mi lado.

• Jejeje… Okis. (Sonreí)

Con algo de pena abandone los muslos de mi amante, inmediatamente subí hasta estar completamente a su lado, lo primero que hice una vez ahí fue darle un beso, luego, me ubique a modo que mi cabeza quedara sobre su hombro, lo abracé, comenzó a acariciar mi cabello.

• Ya está amor, ahora no dejaré que te quedes dormidito. (Dijo)

- Jajaja… Y que harás para que no me duerma?... Acaso piensas ponerte a cantar? (Sonreí)

• Jajaja… No, tenía pensado algo mejor. (Sonríe pícaramente)

- Algo mejor?... Qué cosa?

• Pues, hablar de sexo, Jejeje… Nadie se duerme cuando se habla de sexo, es una ley universal. (Sonríe)

- Jajaja… Tienes toda la razón.

• Venga, hacéme una pregunta y yo te respondo.

- Jajaja… Okis, haber… Hmmm… Ya!

• Venga, Soltála.

- Quiero saber porqué me pediste que hagamos esa posición hace un rato.

• Cuál posición?

- Ya sabes… Tú tendido cara arriba sobre la cama y yo brincando sobre tu polla como un loco. (Sonreí)

• Jajajaja… Oh!... Jejeje… Bien amorcito, veras, lo que pasa es que esa es mi posición favorita, por eso. (Sonríe)

- Me lo imaginaba, pero… Se puede saber el porqué?

• Claro, mirá, lo que pasa, es que esa posición representa más claramente tú entrega hacia mí, créeme, en esa pose se puede ver claramente tus deseos por ser "amado", no soy yo el que esta sobre vos follándote a voluntad, sos vos el que colocá su hermosa colita sobre mi polla y me la obsequia.

- Sí amorcito, es verdad, es toda tuya. (Lo besé)

• Claro que sí, pero sos vos el que se folla, te follas por voluntad propia, vos controlas la relación, mi polla no es más que un instrumento, nada más.

- Ay! Amor… Que lindo que veas las cosas de ese modo.

• Sencillamente es ver las cosas desde un plano más espiritual.

- Lo sé amor, tu religión te ha ense

• Bebé, el budismo no es una religión, es una forma de vida. (Me abraza hacia él)

- Lo sé amor, lo sé… Te amo. (Lo miro tiernamente)

• Yo también te amo. (Nos besamos)

Y así, otro apasionado beso comenzó, era imposible cansarse de probar labios tan deliciosos, aprovechaba en saborear el exquisito sabor de sus finos labios, sabía que en público eso me sería imposible, así que no pensaba soltarlo tan fácilmente… Pasaron casi cinco minutos hasta que el beso cesó.

(Aún sobre la cama)

• Benji, amor, te parece si nos damos un bañito para salir antes que venga mi mami?

- Oh!... Sí, claro, estamos todo de semen, Jejeje. (Sonríe)

• Ay!... No me hables de eso que aún tengo medio litro de leche en la cola.

- Jajajaja!... Pues… No creo que medio litro, aunque sí eyaculé bastante, lo reconozco, pero… Te gustó, verdad? (Sonríe pícaramente)

• Claro que sí, me encantó, aún siento tremenda humedad dentro de mí, y el saber que aquella inmensa humedad se trata de tu semen… Me llena de ganitas… (Lo abraso)

- Ganitas?... Qué es eso? (Extrañado)

• Ganitas de volver a hacerlo. (Lo miro pícaramente)

Me giré hacia él, estábamos tendidos juntos sobre la cama, uno al lado del otro, lo abracé del cuello con ambas manos, lo miré, sus bellos ojos inmediatamente me correspondieron acompañados de una hermosa sonrisa, sus finos labios me llamaban a besarlos, no tuve elección, fue un beso más amoroso que apasionado; una de sus manos seguía acariciando mi cabello, la otra bajó lentamente hasta mi cola, acariciando cada región de mi cuerpo a su paso, comenzó a acariciar cariñosamente mis nalgas, me encantaba, a los pocos segundos sus dedos comenzaron a acariciar mi hoyito, como pidiendo permiso a ingresar, no reaccioné en forma negativa a tan deliciosos deseos, lo que indicaba que no ponía resistencia a sus actos amatorios, Benji me introdujo un dedo sin la menor resistencia por parte de mi cola, los finos labios de mi amor sofocaron el gemido de placer ocasionado por aquel acto; un segundo dedo entró también sin el menor problema; era fantástico!... A cada segundo que pasaba me sentía más y más a merced de mi hermoso amante, sentía como mi cuerpo con cada movimiento y cada rose se hacia cada vez más de él; el hecho de sentir los labios de mi enamorado unidos a los míos en un exquisito beso, nuestros pechos juntos, nuestras piernas, nuestros brazos, las caricias, sus delicados dedos sodomizando con extremo cariño y dulzura mi pequeña cola; todo mi cuerpo sentía placer en ese instante, todo!... Desde mis cabellos que estaban siendo acariciados por sus suaves manos, hasta mis pies que se encontraban acariciando la rubia y escasa vellosidad en la pierna de mi amor… Me sentía en el paraíso, sentía que todo mi cuerpo flotaba en el interior de una nube de infinita felicidad y placer carnal.

Lamentablemente, este infinito placer no duro mucho, a los casi dos minutos de sentir este placer a cuerpo completo, Benji se separaría.

• Amor!... Qué ocurre? (Dije)

- Lo siento Chris, esto no debió pasar, no aún.

• Qué?... No entiendo... A qué te refieres? (Confundido)

- A esto, tengo planeado hacerlo para la noche, quería que fuese una sorpresa, pero creo que me pasé la mano, lo eché a perder.

L

(Triste)

• Ufff… Benji, nada que a perder, con estos pocos segundos de estar así me sentí en el cielo, lo único que has conseguido es hacer que cuente los segundos hasta que llegue la noche.

J

(Sonreí)

- A sí? (Levantando la mirada)

• Aja… Es como cuando ves el avance de una buena película y comienzas a contar los días para ir al cine a verla.

J

- Jejejeje… Bueno, entonces ya tenés tu avance de lo que te espera en la noche, que te parece?

• Me parece que la vamos a pasar súper pero súper rico! (Sonreí)

- Así es amor, te haré gozar como nunca, ya lo veras. (Sonríe Pícaramente)

Comenzó un apasionado beso que solo duro pocos segundos.

- Uhmmm... Ya vez amorcito, casi me vuelvo a salir de control nuevamente, creo que ya necesito un duchazo de agua fría, Jejeje… (Sonríe)

• Jajajaja… Ay! No, tibia nomás, porque el bañito lo tomaremos juntitos.

J

(Sonreí pícaramente)

- Ufff… Divino!... Mejor nos damos prisa, no quiero pasar un mal rato con tu mami.

• Amor, mi mami llega en más de una hora, tenemos tiempo de sobra. (Comienzo a acariciar su pecho)

- Bebe, seamos precavidos, vamos. (Sonríe)

Sin más preámbulos mi amor se puso de pie, yo lo admiraba sentado sobre mi cama, sus nalgas también eran maravillosas, casi lampiñas; de pronto, volvió su mirada para verme, las enormes esmeraldas de sus ojos volvieron a iluminarme, me sonrió amistosamente, seguidamente dijo: -Vamos bebe- Al escuchar aquellas palabras, me puse de pie, tenía que seguir a aquel chico, me tendió la mano, la sujete, nos dirigimos juntos y desnudos hacia el baño.

Estábamos de pie sobre la tina, abrimos la ducha, el agua tibia comenzó a caer sobre nuestros cuerpos, los largos y rubios cabellos de mi amor se mojaron, en esos momentos recordé escenas del verano pasado, en las que éramos solo dos niños jugando en la piscina, cuando solo éramos mejores amigos; Benji no dejaba de sonreírme tiernamente, al parecer se había percatado de la forma boba como lo quedé mirando, se acercó y me dio un piquito, como dicen los argentinos.

No pedí explicación alguna, más adelante Benji me confesaría que en ese momento se dio cuenta al cien por ciento de que yo realmente estaba enamorado de él y que lo nuestro no era simple atracción.

Aquella alegría terminaría en un amoroso y maravilloso beso, sus labios tocaban suavemente los míos, nuestras lenguas eran solo simples testigos del amor de aquel beso, solo nuestros labios fueron los protagonistas esta vez; el beso, el calor del agua y las caricias, fueron más que suficientes para excitarme, nuestros labios se separaron, miré directamente los hermosos ojos de mi enamorado, me vi atrapado en ellos; no me quedo otro remedio, caí de rodillas ante Benji, necesitaba su sexo, y si el no quería dármelo, yo lo tomaría.

Comencé a acariciar sus maravillosos muslos, note un hilo de agua saliendo de entre su pubis, resbalando por toda su hermosa virilidad y finalmente llegando al suelo de la tina, se me hizo irresistible la idea de beber esa agua, aquella agua que había recorrido todo su hermoso cuerpo de la cintura para arriba; lo hice, cogí con mucha delicadeza su bellísimo miembro semi-erecto, lo incliné ligeramente hacia delante, y bebí de aquella fuente de la eterna felicidad; Benji reaccionó como lo esperé, sus manos comenzaron a acariciar tiernamente mis cabellos; fueron instantes maravillosos, al terminar de saciar mi sed, aproveche el echo de estar de rodillas para practicar algo de buen y tradicional sexo oral, pase más de cinco felices minutos chupando aquel viril majar argentino; sin embargo, Benji no paso de una gran erección, entonces recordé sus palabras, de no venirse en todo el día para poder disfrutar de todo su esplendor en la noche, mi amor tenía un temple inmenso, desistí en cuanto a sexo oral se trataba, saque su miembro aún erecto de mi boca, besé amorosamente su hermoso glande y me puse de pie.

Me encontraba de pie a su lado, mi amorcito aún seguía con los ojos cerrados, se encontraba apoyado contra las lozas de la pared de mi baño, no había duda del gran placer que había experimentado; pero él, por voluntad propia había decidido no llegar al clímax de la relación en ese momento; respeté su decisión, ya que en el futuro valdría la pena, Jejeje.

Acaricié uno de sus hombros, mi amor abrió lentamente sus bellos ojos; lo miré, después de un clásico beso de enamorados, decidimos que era tiempo del aseo, si continuábamos así, jamás saldríamos de la ducha… Así que dejamos el romance un poco de lado, solo un poco, y nos preocupamos por el aseo; estuvimos cerca de quince minutos aseando nuestros cuerpos mutuamente, nunca había experimentado eso con alguien, fue sencillamente maravilloso.

Al terminar de asear y secar nuestros cuerpos, nos encontramos con un pequeño problema, la secadora de cabello estaba descompuesta, así que tuvimos que secar nuestros cabellos manualmente, los largos cabellos de Benji aún estaban muy húmedos; sin embargo, debíamos abandonar la casa antes que mi madre llegue y note el evidente baño que nos habíamos dado.

Salimos del baño y nos dirigimos a mi habitación, las cosas estaban saliendo bastante bien en este nuevo día; Benji comienza a vestirse, yo abrí mi closet, saqué un polo azul y un pantalón de tela delgada, ancho, azul con rayas verticales color blancas; terminamos de vestirnos, habían pasado casi veinte minutos desde que salimos del baño, bajamos las escaleras hacia mi sala, estábamos frente a la puerta principal; entonces, justo cuando estaba por abrir la puerta, Benji me sujeta del brazo y me jala hacia él, voltee, inmediatamente unió sus labios a los míos, el beso tuvo pasión y amor, una mezcla muy equilibrada de ambos, me colocó contra la puerta, una de sus manos comenzó a acariciar cariñosamente mi cintura, la otra acariciaba dulcemente mi mejilla, nuestras lenguas se encontraron esta vez; mis manos que se encontraban en esos instantes a palmas contra la puerta, pasaron a acariciar la cintura de mi amor, Benji me había leído la mente, afuera no podríamos besarnos con libertad, aquel beso era más que necesario, gocé cada segundo de aquella maravillosa unión; el beso duró cerca de dos minutos, los labios de mi amor se separaron lentamente de los míos, Benji me dio un piquito en los labios cerrando aquel beso con broche de oro.

• Gracias Benji, fue fantástico!...

J

(Sonreí)

- Vos sos más fantástico todavía, te amo. (Me abraza)

• Ay!... Jejeje… Yo también te amo amor.

J

- Disculpa por hacer las cosas tan largas bebe, nos vamos ya?

• Claro. (Sonreí)

Eran cerca de las 10am, en esos momentos nos encontrábamos caminando por las calles en las cercanías de mi casa, camino a un hermoso parque ubicado al borde de un bellísimo barranco desde donde se contempla la playa y el mar en toda su inmensa gloria.

El Día de los enamorados recién estaba comenzando; el día había estado realmente genial, la tarde sin duda seria maravillosa ya que tenía la mejor de las compañías junto a mí, y la noche… Jejeje, pues la noche prometía ser inolvidable.

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