Condéname

Condéname.

Hola después de mucho tiempo de ausencia por fin regreso, por si no recuerdan tengo 25 años, soy de complexión delgada – atlética, alto (1.87 mts), ojos oscuros, piel clara y cabello largo, actualmente me dedico a estudiar la universidad y por este mismo motivo estuve bastante tiempo desaparecido ya que el semestre que termino fue bastante pesado para mí.

Después de algunos traspiés y de alejarme de Ana, por su conducta posesiva – obsesiva, conocí a Ema y así es como comienza esta nueva historia.

Entre el cambio de clases muchos de mis compañeros y yo salimos a fumar a los pasillos y a descansar un poco después de estar casi 2 horas sentados, muchas veces también este tiempo lo utilizamos para mandar mensajes a novias, amigas, familia, etc. ya que durante la clase es prácticamente un crimen hacer uso del celular, fue durante estos lapsos de tiempo que uno de mis amigos al que llamare Pedro se dedico a comunicarse con Ema ya que tenía tiempo queriendo acostarse con ella, y fue también durante estos ratos de ocio que entre broma y broma comencé a saber de ella.

Según Pedro, Ema tenía tiempo viviendo en unión libre con un idiota que no la sabia valorar y esta era la tercera ocasión en que mi amigo intentaba algo con ella y en sus propias palabras: "esta era la buena."

Algunos días después note que Pedro estaba demasiado nervioso y volteaba a cada rato hacia la puerta como esperando a alguien, y cuando le pregunte que sucedía me dijo que Ema le había mandado mensaje diciéndole que se dirigía hacia la escuela y haciendo cálculos ya debería de estar llegando, ya había tenido la oportunidad de hablar un poco con Ema vía Messenger y opte por salir del salón para recogerla ya que la falta de mujeres en la escuela ha hecho que la mayoría seamos unos patanes y no quería que Ema pasara por eso.

Cuando llegue a la entrada de la escuela me tope con Ema que ya estaba esperando, y vaya sorpresa me lleve ya que en las fotografías que había visto de ella se veía muy diferente a como se veía en persona, Ema es una mujer de 26 años, mide 1.70 mts, piel blanca, ojos grandes y expresivos, cabello negro y rizado, una sonrisa bastante seductora y su pantalón realzaba un lindo trasero. Después de un rato de platica salió mi grupo de clase y con ellos Pedro que siempre que trae carro me deja cerca de mi casa, así que decidimos irnos, siempre lo he dicho mi suerte es cabrona, casi nunca me acompaña pero cuando lo hace, lo hace a lo grande, ese día algunos amigos iban por el mismo rumbo y tuve que llevarme a Ema en las piernas, así que avente mi mochila a la cajuela, me acomode en el carro y Ema se sentó en mis piernas, que puedo decir, sentía su rico trasero sobre mi verga que amenazaba con despertarse y en más de una ocasión los dos tuvimos que movernos ya fuera para sacar los cigarros de mi pantalón, o para que Ema fuera más "cómoda".

Durante el transcurso del camino aproveche para hablar más a fondo con Ema mientras disfrutaba del olor de su perfume y varias veces por el volumen de la música tuve que hablarle al oído, situación que a ella parecía no incomodarle. Una vez que llegamos al lugar donde Pedro siempre me deja nos bajamos del carro y nos despedimos con un beso en la mejilla en el cual sentí sus labios cerca de la comisura de los míos y me dio su teléfono para seguir platicando.

Durante varios días platicamos por el Messenger o nos mandábamos mensajes al celular y esto ocasiono que Pedro notara que algo "raro" pasaba ya que los mensajes ya no eran para el sino mas bien para un servidor.

En una de tantas platicas por el Messenger me dijo que estaba viviendo en unión libre desde hace 5 años con un tipo que la ignoraba y que sospechaba, le había sido infiel en varias ocasiones, una vez más abusando de mi suerte le dije que si quería desquitarse yo le ayudaba, no recuerdo bien cuales fueron exactamente las palabras que los dos utilizamos pero después de platicar cerca de dos horas quedamos en salir a tomar unas cervezas y después haber que pasaba.

Un día antes de vernos se me ocurrió pasar a ver a Pedro ya que teníamos una tarea pendiente, y mientras trabajábamos en la computadora empezamos a platicar sobre Ema, y bastante serio me dijo: ya sé que andas sobre Ema wey, y te voy a decir una cosa, esa vieja le dice que si a todos pero a nadie le hace caso, yo ando viendo que saco de ahí y ahora que la vea le voy a decir derecho lo que quiero, ya si me batea pues ya entras al quite haber si tu si puedes aun que lo dudo porque a mí nunca me ha aflojado.

Yo solo me dedique a reírme y a seguir trabajando en la computadora ya que estaba seguro que conmigo la situación iba a ser totalmente diferente, y cerca de las 9 de la noche, sorpresa, tocan el timbre de casa de Pedro y cuando regresa de abrir la puerta lo hace acompañado de Ema, yo ni siquiera me inmute la salude con perfecta naturalidad y seguí trabajando en la computadora, pero no puedo negar lo divertido que fue ver la cara de sorpresa de Ema ya que no esperaba encontrarme ahí.

Después de platicar un buen rato y destapar algunas cervezas, Pedro salió a comprar más cigarros y nos quedamos ella y yo solos, yo tenía rato de haber terminado el trabajo así que me recosté en cama de mi amigo y estaba viendo la televisión, así que ella se acerco a mí, se recostó a mi lado y abrazándome me dio un cálido beso y me dijo: no esperaba verte aquí, solo vine a dejarle unos discos que me prestó, quiere hablar conmigo, dice que es serio pero ya lo conozco, va a empezar con la cantaleta de siempre, que le gusto y que quiere estar conmigo, pero a mí no me gusta y al que quiero es a ti.

Minutos después mi amigo regreso y ella dijo que se tenía que ir así que él la acompaño a tomar un taxi mientras yo buscaba algo interesante en la televisión. Cerca de 10 minutos después Pedro regreso bastante molesto y diciéndome: ya me mando a la chingada otra vez we, vas tienes el campo libre, pero eso si te digo no te hagas ilusiones porque no creo que te pele. Obviamente no me permití reírme en ese momento por respeto a nuestra amistad, pero por dentro no podía parar de reír de la necedad y estupidez de mi amigo.

Al otro día recibí un mensaje de Ema diciéndome que se dirigía a mi casa, así que revise rápidamente la situación, no había nadie en casa más que yo, tenia cerveza en el refrigerador, vodka en el bar de la casa y hielos por si quería algo más fuerte, mi familia no iba a regresar hasta bien entrada la noche y nadie nos interrumpiría.

Una media hora después escuche el timbre y al abrir la puerta casi me da un infarto, llevaba una falda larga tipo militar con sandalias negras, un cinturón de estoperoles y una blusa blanca que dejaba descubierta gran parte de su espalda, y el cabello suelto.

Pasamos a mi recamara y después de destapar una cerveza para cada quien y poner música ligera comenzamos a platicar de diferentes cosas, me pregunto respecto a lo que yo sabía de ella por medio de Pedro y le conté todo lo que sabía, cuando llegamos al último comentario de mi amigo, soltó una sonora carcajada y me dijo: pobrecito de tu amigo, siempre ha creído que si a él no le hace caso una mujer entonces a nadie más le va a hacer caso, además tu lo puedes ver, estoy aquí contigo, dispuesta a todo, sé que no debería de hacerlo, pero estoy muy sola y aquel pendejo ya no me toca, así que adelante mi vida, condéname.

Obviamente comenzamos besándonos, mientras recorría su espalda semi desnuda con mis manos y ella metía sus manos bajo mi playera para arañar lentamente mi pecho, cambie de dirección y ahora era su cuello el que besaba y mordía quedamente y mis manos se dirigieron a su nuca para soltar el nudo que detenía su blusa, la cual salió volando segundos después permitiéndome observar un lindo brasiere de media copa, mis manos se apoderaron de sus pechos aun protegidos por la tela mientras ella empezaba a luchar con mi cinturón, durante este forcejeo caímos en la cama, ella sobre de mi, aprovechando la situación, baje mis manos hacia sus nalgas y comencé a subir poco a poco su falda para poder meter mis manos bajo ella, tomando el control de la situación me recargo en la pared y me quito la playera, sentada sobre mi comenzó a besar mi pecho y fue bajando lentamente hasta el cinturón que ya había sido derrotado, obviamente no me quede atrás y desabroche su brasiere, dejando libre un par de tetas bastante apetecibles, con pezones medianos y aureolas solo un poco más oscuras que su color natural de piel, tome una de sus tetas con mi mano y la otra con mi boca y empecé a mordisquearla levemente mientras ella comenzaba a gemir en voz baja.

Nuevamente me recargo contra la pared y esta vez fue mi pantalón el que salió volando, bajo por mi abdomen lamiendo, comenzó a bajar mi bóxer y en ese momento solo pude cerrar los ojos y temblar levemente, su lengua se había topado con la punta de mi verga totalmente endurecida y a partir de ese momento se dedico a recorrerla completamente, lamia, mordía y chupaba como si fuera un caramelo y con su dulce voz me dijo: veo que te gusta amor, pero aun viene lo mejor así que prepárate, dicho esto empezó a tragársela cada vez más profundamente, es una bendición poder ver a una mujer hermosa con tu verga en la boca y más aun cuando su nariz toca tu piel, no voy a negar que estuve a punto de correrme en su boca, pero Ema se dio cuenta de esto y se detuvo en varias ocasiones.

Recuperando un poco el control le di la vuelta, ahora era ella quien estaba acostada y todavía tenía la falda puesta así que mi primer objetivo fue esta, su falda salió volando pero decidí dejarle puesto el cinturón de estoperoles ya que se veía bastante sexy así, solamente con su tanga blanca impidiéndome el acceso a la gloria decidí empezar por sus piernas, comencé a besarle las piernas mientras iba subiendo poco a poco mordisqueando sus rodillas y saboreando su cuerpo, cuando llegue a su vagina un delicioso olor invadió mis sentidos, el olor de una verdadera mujer caliente, mi lengua rozo su vagina todavía cubierta por la tela y sentí como se estremeció completamente, perfecto a la señorita le gusta que le coman el coño, seguí lamiendo cada vez mas fuerte mientras poco a poco hacia a un lado su tanga, su rico coñito era algo peludo pero nada descuidado, se notaba que le dedicaba algo de tiempo a una ligera depilación, debo de aceptar que siempre tuve ganas de ver ese coñito totalmente rasurado pero no tuvimos oportunidad de hacerlo, su sabor era delicioso, embriagador y poco a poco la música dio paso a sus gemidos, así mientras lamia su clítoris dos de mis dedos fueron penetrándola, su reacción me fascino, ya que no solo comenzó a gemir mas fuerte si no que también empezó a lubricar mas, y después de unos minutos conseguí que tuviera un orgasmo por más gratificante ya que su mirada me decía todo, era una mezcla de lujuria, satisfacción, asombro y felicidad.

Sin dejarla recobrarse por completo subí sus piernas a mi hombros y comencé a penetrarla, poco a poco fui aumentando el ritmo mientras ella comenzaba a gemir nuevamente y a mover la cadera al ritmo de mis embestidas, después de unos minutos cambiamos de posición, esta vez se coloco en cuatro patas y volteo a verme con una sonrisa bastante perversa, puse mis manos en sus cadera y comencé a penetrarla nuevamente, mientras ella gemía yo me deleitaba viendo como mi verga entraba y salía en ese rico trasero que ya empezaba a fascinarme, pase una mano bajo su cadera y la dirigí a su clítoris que se encontraba completamente inflamado y comencé a acariciarlo, Ema reacciono a esto con un segundo orgasmo mucho más fuerte que el anterior, podía ver como apretaba con toda su fuera una almohada que tenía cerca y escuchaba sus gemidos un sobre la música, las contracciones en su vagina me empujaban hacia afuera pero yo continúe penetrándola sin rendirme hasta que su cuerpo dejo de temblar y con la voz entre cortada me dijo: no seas cabron dame 5 minutos para recuperarme y ahorita vas a ver cómo te va.

Esta de mas decir que me gusto como sonó la amenaza, así que tome dos cigarros, le pase uno a ella y el otro me lo fume yo acostado a su lado mientras destapaba otra cerveza y Jim Morrison cantaba desde las bocinas de la computadora love street.

Después de terminarse el cigarro volteo a verme y dirigiéndose a mi verga me dijo: que? No piensa dormirse?, y antes de que pudiera responderle la tomo entre sus manos y comenzó a mamármela de nuevo esta vez con más fuerza y saboreando sus propios flujos, cuando la dejo completamente limpia me dijo: quédate como estas. Y ya saben uno que es bien pinche obediente, subiéndose sobre mí empezó a cabalgarme, los movimientos de cadera eran asombrosos, tomo con sus manos sus tetas y comenzó a acariciárselas llevando uno de sus pezones a su boca mientras me veía directamente a los ojos.

Después de unos minutos se acerco a mi oído y dijo: vamos termina dentro de mí, quiero sentir tu leche caliente subiendo por mi coño, aumento la velocidad de su cadera y tomándome entre sus brazos me pego a su pecho, esta de mas decir que termine como nunca, mientras ella me sostenía en su pecho amorosamente, se quedo sobre mí , todavía con mi verga dentro de ella y recostada sobre mi pecho.

Encendió otro cigarro y me lo pasó mientras yo regresaba del cielo, me beso y me dijo al oído: descansa un poco quiero la revancha.

Espero que les haya gustado, en cualquier caso agradecería sus opiniones al respecto, mi correo es: da_mn_bastard@hotmail.com , este relato es 100% verídico y solo he cambiado los nombres de los protagonistas, alguna veces tardo un poco en responder los e mails ya que no utilizo mucho esta cuenta de correo pero prometo responderlos todos.

Felices fiestas.