Concurso (3)

dos pruebas por el precio de una ¡¿ALGUIEN MEJORA ESTA OFERTA?!

-¡que tal estais chicas! ¿lista para ver la compra de nuestros chicos? – decía Aurora.

-siiiiiiiiiiiiiiiiiiiii – decía la publico (¿contentas? Chicas

L

)

-muy bien, pasemos a la primera concursante – decía Aurora con una sonrisa.

Marta trajo una bolsa aún cerrada y Aurora la abrió metiendo la mano en ella y sacando uno a uno los productos mientras los nombraba.

-huevos clase S

-ooooooooooooh – decía la publico.

-leche entera.

-ooooooooooooh – decía la publico.

-manzanas golden.

-siiiiiiiiiiiiiiiiiii- decía la publico

-yogur de chocolate.

-ooooooooooooh – decía la publico

-bombones de licor.

-ooooooooooooh –decia la publico.

-y tampones.

-bieeeeeeeeeeeeen – decía la publico.

-bueno dos aciertos, quizá el nuevo record del concurso ¿cómo te sientes? – decía Aurora.

-no se, con esperanzas de que los hombres tienen cerebro – decía Marta.

-me alegro por ti, ahora pasemos a la siguiente concursante – decía Aurora.

-Olga apareció con una bolsa, la cual Aurora empezó a sacar los productos como la bolsa anterior.

-patatillas

-oooooooooooh

-cerveza

-Oooooooooooh

-Más cerveza

-Ooooooooooooh

-Palomitas

-Oooooooooooh

-whisky barato

-Ooooooooooh

-y una revista porno.

(abucheos de la publico)

El publico empezó a abuchear y Aurora consolaba a Olga diciendo.

-tranquila, todos los hombres son iguales, iguales de capullos y ahora pasemos a la ultima concursante.

Carmen apareció con una bolsa, la cual Aurora empezó a sacar los productos.

Huevos clase M

-siiiiiiiiiiiiiiii

Leche de soja

-siiiiiiiiiiiiiiii

Manzanas golden

-siiiiiiiiiiiiiiii

Queso semicurado

-siiiiiiiiiiiiiiii

Yogur con muesli

-siiiiiiiiiiiiiiii

Chocolate con leche

-siiiiiiiiiiiiiiii

Tampones

-siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii

Carmen estaba que rebozaba de contenta, pero Aurora no se fiaba mucho.

-¡increible! ¡demasiado increíble!, veamos que a pasado gracias a nuestra detective Mirian, que ha grabado a los tres chicos, veamos que ha hecho el novio de Carmen.

En la pantalla se mostraba un video en el cual aparecia el novio de Carmen, esté antes de ir a comprar fue a un bar, allí charló amigablemente con una chica.

La cara de Carmen era un poema ¡su novio estaba con otra!.

-bueno, está claro que era demasiado sospechoso que lo trajera todo correctamente ¿estas bien? – decía Aurora.

-no, pero gracias, gracias por enseñarme como es ese cerdo, ahora mismo voy a cortar con el – decía Carmen.

-bueno pues Carmen se despide del concurso, ahora le traeremos a su novio y los dejaremos un poco a solas en estos momentos tan amargos, mientras tanto, disfruten con la siguiente prueba que es – decía Aurora.

VAYAMOS DE COMPRAS

-ah las patrocinadoras del concurso son tan generosas que han dado a nuestras concursantes mil euros a cada una para que puedan comprar su ropa, sus caprichos, bajo una condición, que pasen todo el horario de apertura en el centro comercial ¡con sus novios! La pregunta es ¿las amaran tanto como para ayudarlas a transportar paquetes? Veamoslo con este video de la pareja de Marta – decía Aurora

En el video salian Marta y su novio entrando a primera hora al centro comercial, el estaba malhumorado, le había despertado demasiado temprano, las primeras horas ella miraba ropa y más ropa mientras el pacientemente esperaba.

-cariño, iré al bar mientras escoges – decía el novio.

-no amor mio, que yo estoy escogiendo ropa para gustarte ¿cómo puedo escoger sin tu opinión? – decía Marta con una voz dulce.

El solo soltó un gruñido.

-vaya vaya vaya, parece que nuestro chico se aburre, vamos a darle una pequeña golosina – decía Aurora con una sonrisa diabólica.

Marta empezó a probarse lencería provocativa, las quejas de su novio se convirtieron en una sonrisa tonta (con un poco de babeo) cuando Marta le enseñaba el conjunto el solo podía mover la cabeza afirmativamente, cada prenda que se probaba Marta era más y más provocativa.

-demostrado, cuando la sangre va al pene, el cerebro se desactiva – decía Aurora.

Marta salió con el más provocativo de sus conjuntos y apoyó sus senos en el pecho de su novio.

-¿me queda bien este conjunto? ¿me hace el pecho más grande? – decía Marta con ojos y voz de inocente.

-s-s-si – decía su novio acariciando sus cabellos.

-y son de fibras resistentes, podrías atarme con ellas cuando fuera mala – decía Marta con ojos inocentes y voz más picante.

-vayamos al probador a probarlo – decía el novio desabrochándose sus pantalones.

-¡me alegra de que te guste! Me lo llevaré, ahora a ver el maquillaje – decía Marta encerrándose en el probador.

El novio quedó con la boca abierta, se fijó en su pene en "firmes" y preguntó a Marta.

-¿y yo que hago ahora?.

-acompañarme tonto, quiero acertar contigo y me tienes que decir que maquillaje te gusta – decía Marta.

Las siguientes horas pasaron con normalidad, si el novio se quejaba, Marta disimuladamente le rozaba su "zona sensible" disimuladamente con alguna parte de su anatomía.

Al final salieron del centro, ella contenta como unas pascuas, el cargado de paquetes.

-bueno, al final Marta se salió con la suya, dime Marta ¿cómo te fue con tu esclavo? ¡perdon! Quería decir tu novio – decía Aurora.

-pues muy bien, es asombroso lo sumiso que es cuando le enseñas un poco de carne – decía Marta

-si, pero tu compañera Olga tiene otro método para domesticar a su novio, veamoslo – decía Aurora.

Olga y su malhumorado novio entraron en el centro comercial, Olga le hizo probar camisas para ver lo bien que le quedaban, pero a la decima camisa, la paciencia de su novio se agotó.

-¡Olga! ¡sabes de sobra que no me gusta probarme ropa una y otra vez! ¡voy a casa y te espero allí! – decía su novio.

Ni siquiera dejó replicar a su novia, se fue sin escuchar pensando erróneamente que ella la seguiría de forma sumisa, pero al girar la cabeza vio a Olga ¡con un dependiente! Un dependiente macizo, musculoso, guapo, todo en el envía un mensaje.

Soy mejor que tu y en consecuencia me llevaré a tu novia y tu tendras que hacer el cinco contra uno.

Se acercó despacio para ver si era una falsa alarma, pero la siguiente conversación lo alarmó.

-verá, necesito camisas para mi novio, se la talla, pero necesito comprobar el tacto sobre su cuerpo, ya que el no está ¿podria hacerme un favor? – preguntaba Olga.

-lo que sea señorita – decía el dependiente.

-¿podria ponérselas? Quiero saber como seria tocar una de esas camisas sobre el cuerpo de un hombre – decía Olga de forma sensual.

-ya he encargo yo, que soy su novio – decía su novio antes de que el dependiente dijera una sola palabra.

Durante todo este tiempo el novio estuvo probándose más y más trajes y acompañando a su chica por todo el centro comercial, salieron, no sin que el novio se librase de la tonelada de paquetes que tenia que llevar.

-¡comprobado! ¡el hombre se puede domesticar! – decía Aurora extasiada ante los aplausos del publico.

Aurora iba a presentar la siguiente prueba cuando de pronto oyó el micrófono colocado en su oído y dijo.

-¡se han encontrado Carmen y su novio en los estudios , escuchemoslos – decía Aurora.

La pantalla mostraba a Carmen y a su novio discutiendo acaloradamente.

-¡me pusiste los cuernos! ¡te he visto con otra! – decía Carmen llorando.

-¡puedo tener muchos defectos! Pero siempre te he sido fiel, incluso cuando te "dolia la cabeza" – decía su novio.

-¿y ese es motivo para que te acuestes con cualquiera? ¡eres patético! ¡no quiero verte nunca más! – decía Carmen mientras le pegaba una patada en los testiculos.

En ese momento cayó algo, Carmen lo recogía aún furiosa mientras su novio se recuperaba de la patada, era un anillo de oro con un diamante en forma de flor, Carmen pensaba que era para esa chica, pero se fijó en el mensaje.

"Alvaro y Carmen, juntos en la eternidad"

-A-Alvaro ¿ese anillo es? – preguntaba Carmen.

-aquella chica era una compañera de colegio que tiene una joyería, ella me consiguió ese anillo – decía Alvaro aún dolido.

-vaya, p-pues si, quiero – decía Carmen aún sorprendida.

-¿el que quieres? – preguntaba Alvaro.

-¡casarme contigo! – decía Carmen abrazandole.

Pero Alvaro se separó de ella con rabia y le dijo.

-¡pues yo no! ¡claro que mi madre tenia razón! ¡no eres más que una loca! ¡ya me lo has demostrado cuando me apretaste los huevos! ¡con lo de mi tanga! ¡ahora esto! ¡no me caso contigo ni aunque fueses la ultima puta de la tierra! – decía Alvaro furioso.

Alvaro se fue llevándose el anillo mientras que Carmen le seguía pidiéndole perdón.

-vaya, chicas, al parecer este hombre tenia buenas intenciones, pero si se pone asi por un fallito de nada, mejor dejar que vuele solo, ahora pongamos anuncios, no os movais, quedan más pruebas – decía Aurora.