Con tu jefe, te pone y lo sabia
Te lo dejo leer. Mientras lo haces, me pongo a tu lado, nos masturbamos el uno al otro, despacio. Observo tus reacciones. Parece que te gusta. Jadeas, chorreas, no sé si por mis dos dedos dentro de ti, o por lo que lees. Me agacharía a bebérmelo todo, pero prefiero seguirte observando.
Te lo dejo leer. Mientras lo haces, me pongo a tu lado, nos masturbamos el uno al otro, despacio. Observo tus reacciones. Parece que te gusta. Jadeas, chorreas, no sé si por mis dos dedos dentro de ti, o por lo que lees. Me agacharía a bebérmelo todo, pero prefiero seguirte observando. Cuando llegas a lo de tu jefe, cambias. Me la mueves más deprisa, jadeas aún más. Te das la vuelta hacia mí, me besas en los labios, me tumbas, y te la metes. No sé si yo sigo ahí para ti, parece que estás en otro sitio. Pero estás disfrutando, y eso me pone. - ¿Me dejarías? - saltas de repente - ¿El qué? - ¿Cómo lo sabías? ¿Cómo sabes lo que está pasando? - ¿Qué quieres decir? - Lo que cuentas... ¿cómo lo sabes? ¿Cómo sabes que me está pidiendo eso... un recuerdo? - No sé... lo intuia - ¿Y me dejarías? - ... ¿Tú quieres? - Creo que sí... Si, si que quiero... La tiene enorme... - ¿Lo sabes o te lo imaginas?' - ...Lo sé... se la vi un dia... - ¿¿Qué?? - Me dio vergüenza decírtelo... me llamó al despacho, estaba sentado en la mesa, me pidió que me acercara, y la tenía fuera... - ¿Qué hiciste? - No sabía qué hacer, estábamos solos... me quedé helada... era enorme... - ¿Te dijo algo? - No me acuerdo... que qué le parecía, que si la quería tocar, que si había visto otra polla así antes... Pero yo no podía moverme, ni hablar... entonces él empezó a masturbarse, no dejaba de mirarme las tetas, las piernas... yo no sabía qué hacer... me pidió que me acercara pero no lo hice... y al final se corrió, lo puso todo perdido, él quería que lo limpiara... no pude más, me fui, me fui a casa.
Todo eso me lo contaste con los ojos cerrados, sin mirarme, y sin dejar de follarme, pero muy despacio... estabas reviviendo aquello.
- ¿Te hubiera gustado tocársela?
- ...Si... creo que sí... yo quería que se corriera en mi boca, quería tragarme aquello... era como mío... pero me daba vergüenza acercarme...
Te corriste. Yo conseguí aguantarme. Seguías encima de mí. "Hay más", dijiste.
- Al siguiente sábado, se las apañó para que nos tocara trabajar a los dos. Yo no lo evité, no sé porqué. Tampoco sé porqué ese día me puse una blusa escotada. Ni sé porqué fui a su despacho, cuando me llamó cuando ya no había nadie. Volvía a estar ahí, con la polla fuera, se estaba masturbando. Me desabroché los botones de la blusa, y me acerqué.