Con trabajadores en casa
Me calienta mucho hacer que a los hombres se les ponga dura al verme, que se imaginen que me hacen de todo, eso fue lo que pasó en este relato en que pasamos de una travesura a una sesión de sexo intenso
Soy de tez blanca sin ser rubia, cabello negro corto casi a los hombros, mido 1.62 aprox y mi complexión es de talla 3 por mis anchas caderas (ayer me las medí y daban 105 cm exactos) y bonitas nalgas, de busto normal nada fuera del otro mundo un 32b a lo mucho, creo que mi cintura hace que todo se vea mejor pues no rebasa los 65 cm, cuando uso jeans o vestidos ajustados o leggins todo el mundo se me queda viendo
Vivo por una zona media y actualmente soy estudiante y le ayudo a mi familia con el negocio desde casa.
Me pone caliente cualquier cosa, que me vean, sentirme deseada, enseñar, calentar, antojarme, imaginarme, hacer que me vean como una puta, en fin hasta una caricia accidental en el transporte público mi cuerpo me pedía algo más, así que pongo empeño en vestirme más ajustadita casi vulgar y no dejar de usar tacones.
La ocasión de sentir otra vez ese cosquilleo llegó cuando fueron a trabajar a la casa unos trabajadores y tenían que pasar literal hasta la cocina para terminar el trabajo, pues ahí se haría la remodelación.
Ya tenían un par de días yendo a trabajar y notaba que me miraban con deseo, incluso en algunas ocasiones sentí que me espiaban en mi cuarto o cuando me bañaba. Cuando pasaba frente a ellos escuchaba que murmuraban y decían cosas sin atreverse a faltarme al respeto.
En una ocasión yo me quedé sola y como eran recomendados de un tío pues no hubo problema por quedarme en casa, mi mamá salió a cosas del trabajo y yo me quedaría unas 2 o 3 horas libres con dos de estos trabajadores.
Era el momento ideal para para lucir mis atributos de una mejor forma así que puse manos a la obra…
Me puse unos shorts rojos ajustados que dejaban ver perfectamente mi trasero y se salía un poco mis nalgas por debajo, los puse con tenis blancos y una blusa corta tipo ombliguera algo holgada justo llegaba poquito arriba del ombligo.
Debajo no me puse bra, lo que hacía que se viera como se movía mi pechos y pezones y una tanguita negra de encaje que se metía completa entre mis nalgas y por el frente apenas si tapaba mi vello púbico
En fin, llegaron, mi mamá les dio las indicaciones y ellos entendieron el trabajo, se fueron por herramientas que no traían y me quedé sola pues mi mamá salió a sus vueltas…
Así pasó una media hora y regresaron.
Cuando les abrí la puerta noté que uno de ellos luego luego me miraba un poco fuera de lo normal… Tendrían como unos 26 años uno y el otro 40 o mas no se la verdad éste último el mas experimentado.
Entonces mientras trabajaban me pasee por la cocina para ver si era cierto que me veían o si eran solo figuraciones mías pero vi en el espejo de la sala que efectivamente me miraban mucho y su mirada se dirigía hacía mis nalgas. A propósito me agachaba como a recoger alguna cosa de un cajón de abajo para que pudieran apreciar a gusto, me causaba gracia y morbo a la vez que se pusieran calientes conmigo, imaginando que se les ponía la verga dura y querían cogerme ahí mismo.
Se me ocurrió bajar la laptop y ponerme a trabajar en una barrita cerca de la cocina, me senté en uno de esos bancos altos del cual obvio se me salían las caderas por los lados, ellos salían y entraban con herramientas. Me sentaba con una pierna sobre el asiento y dejaba ver toda mi pierna y mi nalga, abría las piernas dejando que vieran como se abultaban los labios de mi vagina debajo del short, incluso me puse en 4 sobre la silla recargada sobre la barra moviendo las nalgas; todo eso me tenía muy caliente, estoy segura que ellos estaban con las vergas durísimas por mi.
Lo que pasó a continuación ha sido de las sensaciones más ricas si así lo puedo decir o sensaciones locas que he tenido, sobre todo porque estaba tan antojada y caliente de que me deseaban y me hicieran suya.
Me dijeron que si podía subirme a la escalera y ayudarlos sacar las cosas de la alacena (cocineta) porque ellos estaban sucios y no querían pues meter mano ahí en cosas de la casa.
No había muchas cosas que bajar entonces mientras yo se las pasaba al chico de 26 que llamaremos Luis y al otro cuarentón lo llamaremos Lalo, Lalo iba y dejaba todo en un cuartito que usamos como bodega. Luis sostenía la escalera pero la verdad es que quería tener mis nalgas lo más cerca posible de su cara, en varias ocasiones noté que se agarraba el paquete como acomodando o antojándose, cuando me paraba de puntitas sobre la escalera sentía como el short se me pegaba y dejaba ver los labios de mi vagina, sentía todo mojado y me preguntaba si se estría pasando la humedad a través del short, además estaba segura de que la blusa se me subía tanto que se notaba la parte de abajo de mis pechos.
Entonces cuando ya bajaba me dice Lalo “aquí te ayudo Lili”, me sorprendió que usara mi nombre pero era conocido de mi tío no le di importancia, entonces cuando bajaba las escaleras me tomó poquito de mi cintura y caderas digamos mitad y mitad jeje, al sostenerme por la cadera el short se subió y sentí como se incrustaba en mis labios vaginales y entre mis nalgas, sentía riquísimo sus grandes manos acariciándome las nalgas y dejándolas ahí por unos instantes.
Siguieron trabajando normal y ya casi al irse me dijeron que mi mamá les había encargado revisar algo en el segundo piso en el baño de la estancia… me preocupé por qué no me había dicho nada a mi entonces dudé pero me preguntaron que donde quedaba a lo que les dije que me siguieran.
Subí por delante de ellos y pude sentir como me devoraban con la mirada así que me puse más caliente y húmeda, llegamos y se metieron al baño.
Me acomode boca abajo sobre la cama con las piernas levantadas, como jugueteando, abriendo y cerrando, dejando ver en todo su esplendor mis nalgas, me aseguré de que el short se me metiera entre ellas y de que estuviera lo suficientemente arriba para que se asomaran las nalgas por el borde de abajo, ellos tenían una visión perfecta desde el baño hacia la cama, así que estaba segura de que el espectáculo lo tenían en primera fila.
Luego me puse boca arriba igual con las piernas abiertas, sentí un poco de aire pasando por entre mis piernas lo que me hizo pensar que tal vez me había subido de más el short que hasta uno de los labios se me salió por un lado, pero no me importó, al contrario, me puso más cachonda saber que se podía ver la humedad.
Para terminar el show me puse en 4 como leyendo un libro, meneando las caderas, incluso hice como que me rascaba una nalga para abrirla y que pudieran ver mejor.
No logré ver, pero estaba segura de que tenían las vergas durísimas por mi, deseosos de poseerme y hacerme de todo, los imaginaba agarrándose duro, meneándosela hasta chorrearse.
En eso escuché que Luis bajó a meter las herramientas pero Lalo me pidió permiso para usar el baño a lo cual accedí, dejó la puerta entreabierta mientras yo esperaba afuera, pude ver claramente como se sacaba enorme miembro ya durísimo con el espectáculo que le estaba dando, ni siquiera orinó, se empezó a masturbar ahí mismo seguro de que yo estaba mirando de alguna forma, a lo cual acertó, pues yo podía ver claramente por el espejo toda la escena con un antojo incontrolable.
No podía esperar el momento de engullirme todo eso, sentir la cabeza golpear sobre mi garganta y saborearlo todo con mi lengua, se veía realmente delicioso.
Entonces cuando estaba por terminar abrió la puerta como asomado detrás de ella y me dijo “ven Regi mira esto es lo que tenemos que hacer…” entonces él se movió a un lado y yo entré (el baño es pequeño no tan amplio) quedé de espaldas a él y me dice apoyando su verga sobre mis nalgas mira: me señalaba el espejo que estaba medio flojo y debajo de mi quedaba el mueble donde está la llave para lavarse las manos que según tenían que ajustar cosas ahí.
Entonces quedé poquito empinada para ver debajo del mueble, estaba así cuando sentí que no se había guardado la verga!!! la tenía de fuera sobre mis nalgas, su verga se comenzaba a mover entre mis nalgas como masturbándose con ellas, mi vagina pedía a gritos ser penetrada pero yo me quedé inmóvil por los nervios.
Según él seguía con su farsa de explicarme lo que iban a arreglar, me decía mira aquí hay que hacer esto y hacer lo otro… Mientras me decía estas cosas con lujo de detalle sentía como su verga iba creciendo mas y mas entre mis nalgas, estaba durísimo, la tenía muy grande y yo sentía que salían hilos de mi conchita que recorrían mis piernas, estaba tan caliente que me empecé a empinar más a propósito, ahí estaba yo con su verga dura entre mis nalgas rogando por que me arrancara la ropa.
Finalmente sentí sus manos tomarme con fuerza de las nalgas mientras me decía “mmmmm estas muy rica, se ve que eres bien puta, mira como estas de mojada, se te enoja la verga?”
Sus dedos comenzaron a meterse por mi vagina, eran duros, rasposos, mi cara casi golpeaba contra el espejo del baño y me calentaba más verme en el reflejo como realmente parecía una puta en celo viendo su gran verga entre mis nalgas, sus manos comenzaron a masajear mis tetas y no podía más que sentirme en la luna.
En eso Luis llegó y vio toda la escena, sobra decir que se veía debajo del pantalón que tenía la verga durísima también y dice “se me adelantó tio, yo me la quería coger primero”, al parecer era su sobrino y ya tenían planeado cogerme, se sacó la verga y grande fue mi sorpresa pues de solo verle el bulto yo estaba que me chorreaba de antojo deseando pasar mi lengua por la cabeza y mamársela toda.
Su tío le contestó “no te preocupes, solo la estaba calentando pero ya estaba bien caliente la puta, mira como esta de mojada y con los pezones duros”.
Comencé a mamarle la verga a Luis mientras su tío seguía metiéndome los dedos llevándome a mi primer orgasmo.
Luego intercambiaron de lugar y comencé a mamársela a su tío, su verga era más gruesa y ya le salían hilos de semen que yo me saboreaba con gusto, Luis me movió el short de lado y me metió la verga de golpe sin el más mínimo problema, estaba tan mojada que resbaló hasta el fondo.
Mientras me estaba ensartando y agarrándome de las nalgas, Luis decía que estaba caliente de cogerme desde que me espiaba por el baño (yo tenía razón), me contaba de las varias veces que se masturbaba y dejaba toda la ventana chorreada de su leche mientras me veía en el baño “sabía que te encantaba coger, siempre antojándonos con tu ropa atrevida, agachándote para que te viéramos las nalgas, eres una puta, mira que rica estás, se ve que te encanta coger” yo solo podía gemir y decir que sí a todo, “sí, soy muy puta y me encanta que me cojan”
Los dedos de Luis comenzaron a entrar por mi culito ajustado, estaba que no podía más cuando me llevaron a la cama, me pusieron en 4 para que le siguiera mamando la verga del tio mientras Luis se pajeaba con mis nalgas, en eso sonó el teléfono, era mi mamá!!!! sabía que si no le contestaba se preocuparía y llegaría corriendo, pero no quería detenerme para contestar la llamada, como pude tomé el teléfono pidiendo a ellos que no hicieran ruido, todo fue muy morboso porque ahí estaba yo al teléfono con la gran verga del tio en mis labios y Luis acomodando la punta de su verga entre mis nalgas, no puedo explicarlo pero la sensación de lo prohibido y hacer la voz de que no estaba haciendo nada me ponía cachonda al extremo, solo esperaba que no se diera cuenta mi mamá con algún ruido o gemido. Me preguntó, “qué haces?” y le dije “nada, aquí en mi cama comiendo unos dulces.Me dijo que llegaría en 1 hora o menos, así que finalmente colgué.
Me quitaron toda la ropa y Luis se acostó y me hizo montarme sobre el sintiendo su viril miembro entrando entre los labios de mi vagina, mis grandes nalgas se sacudían golpeando sus piernas y yo podía ver toda la escena en el espejo de la habitación, lo que me ponía aún más caliente, qué más puta podía sentirme siendo usada por dos desconocidos que en otra circunstancias nunca hubiera ni siquiera volteado a ver y mucho menos me hubiera antojado de coger.
En eso estaba cuando vi en el espejo la figura de su tio caminando detrás de mi con la verga bamboleándose de lado a lado golpeando mis nalgas, mi primer instinto fue pensar que nuevamente se alternaría con su sobrino para cogerme, pero en un segundo reaccioné y me di cuenta de que lo que buscaba era penetrarme por el culo, primero me asusté y estuve a punto de saltar, pero era tal mi calentura que dejé que su verga comenzara a recorrerme por entre las nalgas, sentirme penetrada y a la vez con otra verga entre las nalgas me hizo tener otro orgasmo instantáneo, solo que ahora más intenso, que me hizo retorcerme, ese fue el momento justo para que su tio comenzara a darme la estocada por el culo mientras me tomaba por las tetas, no podía creer el placer que sentía al tener a ambos dentro de mi, el siguiente orgasmo fue una réplica instantánea del anterior, nunca había sentido este placer.
El tío dejó salir toda su descarga de leche sobre mis nalgas, sentía como me recorría caliente hasta los muslos, Luis no podía más y quería terminar en mi boca pidiéndome que me tragara toda su leche, cosa que hice casi instintivamente pero una buena parte se derramó por sobre mis labios y mis tetas.
Todo terminó cuando me dejaron recostada sobre la cama escurrida por las nalgas, las tetas y la cara en ese baño de leche.
Mientras cuento todo esto me acabo de tocar nuevamente y sentí un delicioso orgasmo pensando en esa verga tan dura entre mis nalgas…
Esto pasó apenas hoy lunes hace algunas horas...y estoy algo desconcertada por mi proceder pero eso no me ha quitado la sensación en mi cuerpo tan placentera y algo morbosa debo admitir. Que me hicieran sentir como una puta me puso caliente como nunca y es algo que solo sé yo… hasta ahora.