Con Raúl, mi mejor amigo

Hola, llevo mucho tiempo leyendo relatos en esta web, pero este es el primer relato que escribo. Os contaré mi primera experiencia sexual con un chico que me pasó hace unos meses y ahora me he decidido a escribirla. Tengo 18 años y fue con mi mejor amigo, cuando estuve en casa solo un fin de semana.

Hacia unos años que sabia que me atraían los chicos, y la verdad no me importaba. Al principio me costo un poco, pero si era lo que me gustaba pues que mas da. Aun no había tenido relaciones con chicos. Cuando lo necesitaba me masturbaba mirando alguna foto por Internet o pensando en algunos amigos, como Raúl, que era mi mejor amigo. Aunque cuando estaba con él nunca pensaba en probar algo con él ya que no quería que se cabrease al saber que quería algo con él o algo así.

Mis padres se fueron de viaje un fin de semana para celebrar su aniversario de bodas, otras veces me había quedado solo en casa así que no se preocuparon mucho, mi madre me dejo las cosas preparadas y no me falto de nada. Cuando supe que se iban se lo dije a Raúl, y le comenté que se viniera a pasar el finde a mi casa. En cuanto se lo dije aceptó.

Raúl tenía mi edad, era un chico delgado, algo fibrado no mucho, pelo corto y negro, ojos negros, unos labios algo grandes los cuales me fijaba mucho. Una piel muy suave, y de tono algo moreno y con los mofletes siempre algo sonrojados. Muchas veces lo había visto en ropa interior, y marcaba un buen trasero y marcaba bastante paquete delantero. Alguna vez lo he visto desnudo pero hacia unos años que no lo veía. Así que no sabía como tendría la polla ahora mismo, pero entonces la tenía más o menos como yo. Era muy guapo, aparentaba unos años menos, con su cara niño bueno, y casi no tenia bello en el cuerpo solo algo por las piernas.

Yo tenía algo mas de pelo, soy delgado también, tampoco muy fibrado. De su misma estatura, pelo corto y rubio oscuro, mas bien de piel blanca. Ojos marrones, y labios normales. A mi parecer tengo un buen culo, y mi polla mediría unos 16 cm. Una polla normal y corriente.

Llegó el fin de semana, mis padres se fueron mientras yo estaba en clase. Cuando llegué a casa ya no había nadie. Raúl fue a su casa a por algunas cosas, como ropa, para pasar unos días en casa. Yo fui al supermercado a comprar algunas cosas para picar y algunas cervezas. Más tarde llego Raúl. Dejó sus cosas en mi habitación y nos fuimos porque habíamos quedado con unos amigos. Habíamos pensado que al llegar cenaríamos y luego veríamos algunas pelis mientras bebíamos cervezas. Y ya que estábamos solos podríamos beber algo más de la cuenta.

Al llegar a casa, era la hora de cenar así que nos preparamos algo que nos había dejado mi madre, y cenamos. Después fuimos al salón y nos pusimos a ver una película mientras nos tomábamos unas cervezas. Mientras vimos la película, nos bebimos 3 cervezas cada uno. Luego nos pusimos ha hablar de la película y de nuestras cosas mientras bebíamos otra, y pusimos la tele para ver que hacían y mientras hablábamos con risas y veíamos la televisión seguíamos bebiendo. Al final nos acabamos las cervezas. Yo iba bien aunque tenía la cabeza que a ratos se me iba. Hablábamos de tonterías y de cosas de clase ya no prestábamos atención a la tele, nos reíamos por casi todo. Fuimos a la codina y vimos una botella de martini de padre sin abrir. La cogimos y nos hicimos unos combinados. Fuimos otra vez al salón. Nos bebimos unos cuantos, yo ya estaba borrachín, me notaba que hacia cosas que normalmente no haría. Notaba que Raúl a veces se me pegaba mucho pero no pensaba en eso, pensaba que era por la borrachera no por otra cosa.

Empezamos a mirar los canales de la televisión por cable. En un canal habían empezado las películas porno. Raúl dijo para dejarlo y yo acepté. Al rato los dos estábamos muy cachondos, miraba a Raúl y podía ver como se tocaba el paquete por encima al igual que hacia yo. Sin darme cuenta me acerqué más a él, mi cuerpo iba solo, no podía controlarme. Sin poder controlarme llevé una mano y la puse encima de su paquete y empecé a sobarlo. Pensé que me diría de todo, pero se dejó.

Raúl: mmm que gusto.

Yo: pues si te gusta, sigo. – Seguí sobandoselo, se notaba que había una buena polla ahí debajo.

Raúl: espera no voy a ser el único que disfrute.

Entonces puso su mano encima de mi paquete y empezó a sobarmelo también. Eso no me lo esperaba, estaba flipando. Entre lo cachondo que estaba y la borrachera, estábamos disfrutando el uno del otro.

Raúl: parece que tienes una buena polla.

Yo: gracias la tuya parece estar muy bien también.

Yo estaba cachondisimo, pero mi cuerpo me pedía más, yo no sabia si ir más lejos pero mi cuerpo iba solo. Mi mano se metió dentro de su pantalón y agarré bien su polla y empecé a sobarla por dentro. Era genial, era suave, y estaba bien caliente y dura. Eso iba a estallar. Cuando se la empecé a acariciar Raúl empezó a gemir.

Raúl: Sácamela por favor.

Le saque la polla de su pantalón, y por fin pude verla. Era morenita como su cuerpo, no muy gorda, tapadita, alo mejor algún centímetro más grande que la mía. Con unos huevos mas bien pequeñitos y una matita de pelo negro encima de su polla. Yo seguí acariciándosela. Raúl enseguida me desabrocho el pantalón y me sacó la mía, igual de dura yo flipe cuando me la acariciaba y sentía su mano en mi polla, me entró un gusto enorme, me puse a 100, nunca me la habían tocado. Pare un poco de acariciar su polla y me baje el pantalón pero al final decidí quitármelo y también mis calzoncillos. Vi que a Raúl le costaba más y le ayude. No podía creer que estaba haciendo estas cosas con Raúl.

Nos sentamos otra vez juntos y seguimos acariciándonos las pollas. Yo agarré bien la suya y empecé a masturbársela muy lentamente.

Raúl: mmmm que bueno, sigue por favor.

Me encantaba el tacto de su polla, suave y muy caliente. Al rato Raúl empezó a masturbarme a mí también. Era increíble sentir su mano en mi polla masturbarme, lo estaba gozando al máximo.

Nos empezamos a masturbar mas deprisa, estábamos los dos con las pollas súper duras. Miraba a Raúl y era precioso, su cuerpo morenito me encantaba, su piel, su cara de gozo que tenía, su polla, todo. Pare de masturbarle y me quite la camiseta, luego fui hacia él y se la quite también. Pude ver su pecho, con sus pezones marroncitos que me ponían mucho. Me deje llevar, y me puse encima de él. Raúl de dejaba, creo que estaba algo mas borracho que yo. Coloque mi polla junto a la suya y cogí las dos juntas y empecé a pajearlas. Era una gozada sentir su polla con la mía. Acerque mi cara a su cuello y empecé a besarle. Me encaba el sabor de su piel. Raúl tardó algo en reaccionar pero pronto puso sus manos en mi espalda y empezó a acariciarme, bajo un poco también por mi culo que eso me puso más cachondo. Le miré a la cara mientras yo pajeaba las 2 pollas a la vez. Raúl estaba con los ojos cerrados gimiendo sin parar. Me cuerpo se fue solo y mis labios fueron hacia sus labios, hasta que se tocaron. Raúl se quedo quieto por un momento pero cuando nuestras lenguas se choracon, siguió como si nada, acariciándome y besándome. Era genial, estaba disfrutándolo mucho, ya que alo mejor era la última vez que podía hacer eso con el, incluso a veces pensaba que luego se enfadaría conmigo cuando viera bien lo que estaba haciendo, pero ya que estaba decidí aprovechar el momento.

Raúl: Alguna vez te la han chupado?

Yo: no, nunca, a ti?

Raúl: tampoco.

Yo: que quieres que te la chupe?

Raúl: si me la chupas yo también te la chupo.

Me quede un poco parado, me decía que si se la chupaba el también me la chupaba, me lo estaba diciendo él. No sabía si es que se estaba dejando llevar por el calentón y la borrachera, o es que le molaba de verdad hacer eso. Decidí no pensar y actuar, mi calentón podía mas, y mis ganas de probar esa polla aun mas.

Así que primero le beso un poco el pecho, quería probar esos pezones. Luego me puse en el suelo de rodillas, con su polla de unos 17 cm. morenita delante. La masturbe un poco, la me acerque a ella, primero lamí un poco su punta, que con eso Raúl ya empezó a gemir. Luego me metí toda la punta en la boca y empecé a chupar. Raúl gemía sin parar. El sabor de su polla era genial, me estaba encantando chupar esa polla. Cada vez me iba metiendo mas polla en mi boca hasta que poco a poco conseguí meterla entera. Raúl me acariciaba los hombres y a veces la cabeza. En mi boca entraba y salía la polla de Raúl sin parar.

Raúl: No pares siii que bueno, sigue. Esto es lo mejor.

A veces paraba y le bajaba la piel y le chupaba la punta. Eso le volvía loco. Empecé a acelerar el ritmo de la mamada. Hasta que Raúl me dijo que se iba a correr.

Raúl: Me corro me corroo.

Me la saque de la boca y empezó a correrse en su barriga, un chorro le llego al cuello. Yo seguía masturbando su polla muy lentamente mientras hay salía semen. Su barriga estaba llena de leche y en su polla aun quedaban restos. Me metí su polla otra vez en mi boca y se la chupe un poco mas saboreando el semen que tenía.

Cuando acabé lo mire a la cara. Tenía una mirada de satisfacción. Entonces me levanté y me puse de rodillas encima del sofá con mi polla delante de su cara. Raúl la miraba un poco desconcertado. Mi polla estaba durísima casi pegándose a mi barriga. Raúl la cogió y la empezó a acariciar suavemente y poco a poco a masturbarla. Luego se acercó y chupó un poco la punta. Eso ya me dio escalofríos y ya empecé a gemir. Yo estaba flipando viendo a Raúl como me estaba chupando la polla, nunca me lo hubiera imaginado que ocurriese de verdad. Poco a poco fue metiéndose más polla en su boca. La sensación de cómo entraba mi polla dentro de su boca era maravillosa, estaba a 100, no creo que tardase mucho en correrme. Yo le cogí de la cabeza para acariciarle y Raúl me cogio del culo y mientas me lo sobaba me movía para que mi polla se metiera en su boca o saliera. Llegó el punto en que mi polla entraba entera en su boca. Yo lo estaba gozando al máximo. Raúl ya había acelerado mucho el ritmo de la mamada y yo gemía y gemía como un loco, mientras mi polla no paraba de entrar y salir de su boca.

Yo: Raúl, ya ya, que me corroooo, ahhh.

Se la sacó de la boca justo a tiempo, pero aun así el primer chorro le dio un poco en la mejilla, El resto calló por su cuello y pecho. Me había corrido como nunca, yo estaba en éxtasis, me costaba respirar. De mi polla aun salía algo de semen. Raúl se quito el semen de la cara y lo probó un poco, puso una cara algo rara pero luego sonreímos.

Me acerqué a Raúl y lo beso, estuvimos así un rato. Entonces él se tumbó en el sofá, y yo hice lo mismo, me puse al lado de él con mi cabeza en su hombro, el me pasó la mano por detrás y yo le abrace por su tórax y nos quedamos dormidos allí mismo.

A la mañana, me desperté ya que me estaba cayendo del sofá. Me dolía un poco la cabeza. Me fije en Raúl y vi que estábamos completamente desnudos y llenó de restos de semen por la barriga y pecho. La tele estaba aun encendida. Me acordé de que habíamos tenido sexo esa noche. Al principio estaba contento porque había disrfutado mucho. Luego noté que Raúl se estaba despertando por mis movimientos, yo estaba algo nerviosos ya que no sabía como iba a reaccionar, si se enfadaría, si en verdad lo quería de verdad, o fue por la borrachera. Pero lo que sabía era que al ver que estábamos los dos desnudos y juntos en el sofá se me estaba poniendo dura otra vez, aunque ya la tenía algo morcillota.

Raúl acabó de abrir los ojos, miró nuestros cuerpos y luego me miró a mí.

Continuaré el relato más adelante, no lo quiero hacer demasiado largo. Espero que os haya gustado, es mi primer relato que publico, he intentado hacer lo mejor que he podido. Un saludo!.